Otro día más y las cosas en el Internado iban igual que siempre, la mañana del día siguiente llegó y todo en iba normal en el Internado, mejor dicho igual que los otros, el día comenzó bastante ajetreado, algunos parecían no haber escuchado la alarma ya que corrían por el campus, otros se encontraban tranquilamente desayunado, y otros parecían verdaderamente agotados con ojeras y miles de bostezos.

Rika suspiró al llegar a su salón de clases, tenía sueño, no quería tener clases, pero, no quería volver a tener problemas con su madre, así que, debería asistir si o si.

Como todas las mañanas ingresó al lugar y tomó asiento en su lugar cruzándose de brazos, dirigiendo su mirada hacia la ventana. El timbre sonó y ella seguía en su pose sin interés.

—Buenos días alumnos.— La profesora Yoshino ingresó al lugar saludando.

—Buenos días.— Saludaron todos.

La mujer dejó sus cosas en su escritorio y observó a sus alumnos— Espero que todos estén de humor para la clase de hoy.— Habló sonriendo y Rika simplemente rodó los ojos.

"Humor"

Eso era exactamente lo que no tenía Rika.

—Antes de comenzar quiero que todos le demos la bienvenida a un nuevo alumno.— Habló la mujer y Rika al dirigir su mirada hacia la puerta pudo distinguir como aquel chico castaño ingresaba al salón.

Takato ingresó al lugar y recorrió el salón con la mirada, no pudiendo evitar clavar su mirada en cierta chica pelirroja de ojos lilas que había conocido ayer.

—Por favor preséntate.— Le habló la profesora.

—Mi nombre es Takato Matsuki, me da gusto conocerlos.— Se presentó.

—El gusto es nuestro.— Respondió la profesora— Por favor, toma asiento.

Takato asintió y su mirada se clavó en el puesto libre junto a la Nonaka, sin pensarlo dos veces caminó en dirección a ella llegando en menos de un minuto— Hola Rika.— La saludó al llegar.

Rika lo observó atentamente.

¿Ese chico otra vez?

—¿Este puesto está libre? ¿no?— Presentó Takato— ¿Puedo sentarme?

—¿E?— Balbuceo, la verdad es que se suponía que en ese lugar permanecía vacío-desde que Henry había muerto y Damar se había ido- Observó a todos lados, ese era el único lugar disponible. Suspiró, aunque le dijese que no, el chico no tenía otro lugar— Si puedes sentarte.

Y Takato sin esperar más se sentó a su lado y dejó su mochila en el respaldo— Así que, efectivamente quedamos en el mismo salón.

Rika suspiró, en realidad no sabía que pensar de Takato, ese chico no le caía ni mal ni bien, recién lo estaba conociendo y verdaderamente le daba flojera ser mala onda con él.


Mimi suspiró, estaba un poco cansada, agotada, tenía bastante sueño, pero, daba gracias al cielo porque al estar en la Universidad tenía horarios diferentes a los que había tenido en la preparatoria y ese día entraría a las diez, así que, había podido dormir un poco más.

—Tengo sueño.— Bostezo Izumi.

—Y eso que te dormiste más temprano que yo.— Comentó Mimi.

Izumi hizo una mueca y suspiró— Si, pero, a pesar de que me dormí temprano no pude dormir mucho.— Respondió.

—¿Estuviste con insomnio?

Izumi asintió— Pensando.

—¿Pensando?— Cuestionó Mimi.

Izumi suspiró— Si.

—¿Puedo saber que es eso que tanto pensabas que no te dejó dormir?— Preguntó la castaña.

Izumi se mordió el labio inferior, la verdad es que quería olvidar ese tema, y pues, hablar no era la mejor forma de olvidarlo, pero, Mimi era su mejor amiga ¿no? Con ella podía hablar de todo— Es que, estuve pensando mucho en mi novio y en...—Suspiró— Takuya.

—¿En mi hermano?— Preguntó Mimi sorprendido.

Izumi asintió— Es que, últimamente han ocurrido cosas.

—¿Cosas?— Cuestionó Mimi— ¿Qué cosas?

—Pues...

Y fue así como la rubia le comenzó a contar paso a paso todo lo que había vivido esos días con el moreno y el oji-azul, no le había contado a sus amigas lo que había vivido hasta el consejo de Takeru y pues, luego de hacer todo el recuento se pudo dar cuenta que verdaderamente habían ocurrido cosas entre ellos.

—…Y eso ocurrió. — Izumi terminó de relatar lo que había con Takuya, Kouji y ella el día anterior.

Mimi alzó las cejas sorprendida mientras procesaba la información en su cabeza, luego de lo que le había contado su amiga podía pensar muchas cosas, la verdad es que había cosas tanto buenas como malas, ya que, por un lado podía molestar o bromear a Izumi con Takuya, alegrarse porque últimamente pudiesen hablar como gente civilizada, ya que, trataba de su propio hermano con su mejor amiga.

¡Pero!

Por el otro lado estaba el hecho de que ella estaba de novia con Kouji, el mejor amigo de Takuya, y si analizaba la situación verdaderamente era comprometedora si analizaba lo que había ocurrido hace tres años entre ambos.

Mimi suspiró— ¡Vaya, Izumi! Si fuera tú no me gustaría estar en tu lugar.

Izumi asintió— Le pedí a Kouji que confiara en mi, porque, de verdad quiero luchar por nuestra relación.— Suspiró— Pero, luego de las palabras de Takeru quede pensando...

—¿En qué quizás sigas sintiendo algo por Takuya?— Preguntó Mimi.

Izumi suspiró— Si.— Admitió con dificultad.

Mimi observó atentamente a su amiga— ¿Y a que respuesta llegas? ¿sigues sintiendo algo por mi hermano?

Izumi hizo una mueca, eso no era fácil de responder, claro que no, todo lo que había ocurrido en el pasado repercutía en el presente—No estoy segura, Mimi.— Suspiró— La verdad es que para mi es difícil todo este tema para mi, yo sufrí mucho cuando todo lo que tuvimos se acabó.— Bajó la cabeza— Porque, para variar yo fui la que tuvo toda la culpa de lo que ocurrió.— Nuevamente suspiró— Y pues, han pasado varios años y quizás, pueda que sienta algo por Takuya, pero, ya no sentido que piense en eso, Takuya me dejó más que claro que luego del error que cometí no volvería a estar conmigo.

Mimi hizo una mueca, ya que, eso era verdad, Takuya había dejado en claro eso.

¡Pero!

Cuando habían vuelto él se había propuesto perdonarla, él se lo había dicho a ella, cuando habían pisado Japón le había confesado que intentaría recuperar lo que había perdido. Aunque, todo eso se había visto afectado al ver que ella estaba con Kouji, ya que, él respetaba mucho su amistad con el Minamoto.

—Además, quiero intentar luchar por esta relación con Kouji.— Suspiró— Él y yo estábamos bien antes de que Takuya volviera, de seguro que solo estoy actuando así por la impresión de verlo.

Mimi hizo una mueca— ¿Enserio crees que sea eso?

Izumi suspiró— No sé.— Admitió— Ni yo sé que ocurre conmigo estos momentos.—Las cosas del corazón verdaderamente eran confusas sobre todo para los adolescentes y ella era la clara muestra esto— Pero Kouji y yo tenemos una relación, hasta que llegó Takuya yo no dudaba de que lo quería y pues...—Hizo una mueca— Debo intentar luchar por esta relación ¿no? ¿Por qué arriesgarla por algo que quizás no sea si Takuya no me quiere?

Mimi suspiró— Entiendo tu punto.— Contestó—Pero, Kouji te pidió sinceridad ¿no?

Izumi asintió.

—Yo creo que deberías aclarar tus sentimientos cuanto antes y cuando ya los tengas claros decirle.— Contestó Mimi— Porque está más que claro que él quiere sinceridad y no quiere sufrir.

Otra vez.

Sin saberlo ambas amigas pensaron lo mismo en sus mentes, por que, aunque ambas lo ignoraran, ambas conocían la historia que por tanto tiempo Kouji y Damar habían guardado.


¡Ring, ring!

El timbre sonó en la preparatoria y todos los alumnos salieron el salón, Rika como siempre guardó sus cosas y salió del salón para el primer recreo, pero, se sorprendió cuando el castaño chico que se había sentado a su lado la siguió hasta la salida.

Rika volteo hacia él un tanto molesta— ¿Por qué me sigues?

Takato llevó una mano a su nuca— Disculpa, es que, no me ubico bien en este lugar y pues, quería saber si —¿Sabes donde puedo tomar un café o algo así?— Preguntó.

Rika rodó los ojos— ¿Solo querías preguntar eso?

—Bueno, es que no conozco bien este lugar.

Rika suspiró y observó el gran campus frente a ellos— A unos metros de aquí entre la preparatoria y la Universidad hay una cafetería.— Respondió recordando aquel lugar donde varios acudían luego de haber salido del Internado corriendo sin haber tomado desayuno por llegar temprano a clases.

—¿Podrías acompañarme?— Preguntó el castaño— Por favor, es que, este lugar es tan grande que aún no logro ubicarme.

Rika observó el lugar y se cruzó de brazos—Este lugar no es tan grande.

—Quizás, para ti no lo sea porque llevas tiempo en este lugar.— Comentó Takato—Pero, para mi es enorme.

Buen punto

Rika hizo una mueca, el chico tenía razón, pero, la verdad es que no tenía muchas ganas de ir, ese tiempo lo ocupaba para ingerir sus...sustancias, y pues, para desestresarse.

—Por favor, acompáñame es que no quiero estar solo en este lugar gigante.

Rika observó al chico un tanto seria y luego de unos minutos mirando fijamente al chico suspiró, él era nuevo, llevaba la nada misma en ese lugar, era obvio que no quisiera estar solo, curiosamente esa forma de actuar le recordaba mucho cuando había conocido a Hikari y que luego de pensar que era una chica débil y cursi se habían vuelto muy buenas amigas.

Se mordió el labio inferior.

Se arrepentiría de la respuesta que iba a dar.

—Está bien.— Contestó la Nonaka— Te acompaño.


Takeru salió del lugar, habían tenido clase de deportes y como era costumbre los dividian en hombres y mujeres, en parte había sido bueno, no debía acercarse mucho a Hikari luego de lo que había ocurrido con Taichi ¿no? él le había dejado bien en claro de que no quería que él estuviese con su hermana.

Unas manos que se posaron en sus ojos lo sacaron de sus pensamientos.

—¿Quién soy?— Preguntó una dulce voz que reconoció al instante.

—Hikari.

La manos salieron de sus ojos y frente a él apareció una chica castaña, hermosa para él, de cabello corto— Acertaste.— Contestó la chica— Pensé que ibas a esperarme para que fueramos juntos a la cafetería como todas las mañanas.

Takeru hizo una mueca— Lo siento, Hikari, pero, pensé que no querías que Taichi nos viera junto luego de lo de ayer.

Hikari hizo una mueca, luego de lo de ayer no habían hablado y pues, ella sabía que debía arreglar las cosas— Sobre eso...—Suspiró— Takeru yo quería disculparme, sé que te sentiste mal por las palabras de Taichi.

Takeru sonrió de lado— No tienes que disculparte, Hikari, tu no tuviste la culpa.

—Si la tuve.— Habló la castaña— Yo no debí permitir que mi hermano te hablara así, él no tenía derecho a hablarte así, puede ser que yo sea su hermana, pero, él no puede hablarte así.

—En parte lo entiendo, él quiere cuidarte

—Pero, no debería cuidarme de ti.

Takeru hizo una mueca— Luego de lo que ocurrió yo creo si.

—No digas eso.— Hikari tomó su mano— Esa vez yo fui la que cometió el primer error, ya se lo he dicho, y luego de eso ambos hemos cambiado.— Habló decidida— Tu has demostrado que no eres una mala influencia, al contrario, eres lo mejor que me ha pasado, estás conmigo, me escuchas y me apoyas. Te prometo que nunca más permitiré que mi hermano te hable así.

—Pero, Hikari, no quiero que vuelvas a tener problemas por mi culpa.— Suspiró— Ya quedó claro que todos los problemas que tienes son por mi.

Hikari rodó los ojos— ¡Ignora lo que dijo Taichi!— Exclamó— Mis problemas no son tu culpa, y pues, si tengo algún problema por defenderte a ti o lo nuestro ya no será tu culpa, porque, yo quiero luchar por ti, porque, te quiero.— Sonrió— Y mucho.

Takeru sonrió ante las palabras de la chica, amaba escuchar esas palabras de la boca de Hikari, él igual la quería, la quería más que a nada en ese mundo y saber que ella le correspondía lo ponía feliz— Yo también te quiero Hikari y me alegra escuchar lo que acabas de decir.— Admitió, que ella dijese que quería luchar por lo que tenían (aunque todavía no era oficial) lo alegraba bastante.

Y sin esperar más, la chica se lanzó a sus brazos para abrazarlo.

Takeru tuvo la intención de corresponderle, pero, luego recordó algo y observó todo el lugar con la mirada— ¿E? Hikari.— La llamó— Taichi nos puede ver.

—No me importa que Taichi nos vea.— Habló Hikari— Mi hermano debe saber que ya somos grandes y que te quiero Takeru.

El rubio sonrió— ¿Segura?— Preguntó.

—Muy segura, Taichi de alguna forma debe darse cuenta que ya soy grande ¿no?— Contestó Hikari.

Y el rubio no dudó el corresponder su abrazo besando su frente.


Taichi apretó el puño al divisar a la distancia como su pequeña hermana abrazaba al rubio y no dudó ni un minuto en levantarse de su lugar para ir donde ellos, pero, antes de que esto ocurriera la pelirroja Takenouchi lo tomó del brazo.

—¡Hey! ¿Dónde vas?— Preguntó Sora molesta.

—¿Dónde más?— Preguntó el castaño y señaló a su hermana y al rubio.

—Sabía que ibas para allá.— Contestó la Takenouchi y suspiró— No vayas a molestarlos, no están haciendo algo malo.

—Quizás, para ti no sea algo malo.— Habló Taichi—Pero, están muy cerca.

—Solo se están abrazando.— Habló la pelirroja molesta y dirigió su mirada hacia los adolescentes, quienes se separaron y comenzaron a caminar en dirección a la preparatoria—Mira, ya se van a su clase, no vayas a hacer un lío y meterlos en problemas.

Taichi se mordió el labio inferior y tomó asiento molesto— Detesto esa cercanía de Takeru y mi hermana.

Sora rodó los ojos—Lo sé, lo has dicho miles de veces.— Suspiró y observó al castaño, verdaderamente necesitaba entender las cosas, se enojaba por cosas tan mínimas: un abrazo, un beso, una charla, eso en verdad era no estar bien. Apretó su puño, quizás, ella había tenido mucho que ver con lo de esa noche, siempre se arrepentiría por haber sido tan frágil y vulnerable. Suspiró, pero, es que en ese tiempo en verdad la estaba pasando mal con sus padres y pues, las drogas la hacían olvidar algunas cosas.

Pero, por las malas tuvo que aprender que así no era.

Habían quedado secuelas de aquella noche como esta situación entre los Yagami y siempre se arrepentiría por haber colaborado en lo que ocurrió.

Suspiró.

Se mordió el labio inferior.

Verdaderamente nunca entendería a Taichi, si debía culpar a alguien era a ella, no a Takeru, ella había cometido el más grande error.

—Taichi, si te soy sincera creo que si culpas al pequeño Takeru, entonces, también deberías culparme a mi.— Habló la pelirroja.

—¿A ti?

—Por lo que ocurrió esa noche, Taichi yo fui la que te incitó a consumir esa cosa.— Admitió la Takenouchi con pesar.

Taichi observó atentamente a la pelirroja y suspiró, él sabía que la Takenouchi se sentía culpable por lo que había ocurrido esa noche, muchas veces se lo había manifestado y pues, había estado en unas intensas terapias psicológicas.

—Takeru al lado de lo que yo hice es un santo.

Taichi hizo una mueca, no había caso comparar la situación de Takeru e Hikari con la de ellos, porque, quizás eran parecidas, pero, había una gran diferencia— Sora, siempre te he dicho que nuestras situación era muy diferente a la de ellos, nosotros éramos grandes, consciente de lo que hacíamos y sabíamos donde nos metíamos, mientras que ellos eran niños y muchas veces habían tenido advertencias de lo que no debían hacer, sobre todo Hikari.

—Pero, Taichi nosotros la primera vez que probamos esas cosas también éramos niños y sabíamos que nos hacían mal ¿Por qué debería ser tan diferente nuestra situación si básicamente es lo mismo?

—Porque, yo aconsejaba noche y día a Hikari.— Admitió Taichi.

—Eso mismo era lo que hacían las señoras de las charlas de las drogas.

—Pero, ellas no lo hacían con el amor que yo aconsejaba a mi hermana.— Insistió Taichi y hubo un minuto de silencio entre ambos que el castaño interrumpió con un suspiro—Sora, ya no hablemos de esto.— Taichi volteo molesto— Es evidente que no me entiendes y nunca me vas a entender, ya que no estás en mi lugar, ya que, no tienes hermanos.

Sora se mordió el labio inferior, quizás el Yagami tenía razón nunca estaría en su lugar porque no tenía hermanos -tristemente- ¡Pero! Taichi verdaderamente no hacia ni el mínimo esfuerzo de tomar en cuenta su consejo, un consejo que le daba como amiga/novia y eso la molestaba, era como si sus palabras le entraran por un oído y salieran por el otro. Suspiró.

—Puede ser que no tenga hermanos, pero, no te haría mal pensar mejor las cosas al momento de hablar de Takeru y tu hermana.— Y fue lo último que dijo la pelirroja antes de irse enfadada del lugar donde ambos se encontraban.


—Miyako.

—No.

—Miyako.

—No.

—¡Miyako!

—¡Ya te dije que no, Juri!— Exclamó la Inoue molesta.

Juri se cruzó de brazos molesta— Sé sincera, Miyako, está más que claro que me estás ocultando algo, desde ayer te pregunto y no me dices.

—No te digo, porque, en esa fecha no ocurrió algo importante.

—¿A no?— Preguntó la castaña— Entonces ¿por qué has estado toda la noche y mañana tensa cada vez que te pregunto sobre esa noche?

—Po-porque...—Balbuceo Miyako— Porque me estresas Juri Katou con tus preguntas.— Suspiró— ¡Ya te dije que no ocurrió algo en esa noche!

—Pues, no te creo.— La chica castaña se cruzó de brazos.

Miyako se mordió el labio inferior.

Hablar de es noche era algo prohibido, si Juri se enteraba probablemente ella se metería en problemas.

—No me creas entonces.

Juri observó atentamente a su amiga, era evidente que Miyako escondía algo, era muy evidente, desde ayer evadía sus preguntas, cambiaba de tema y estaba nerviosa. Suspiró— Bueno, si tu no me dices yo misma averiguare porque te pones nerviosa al nombrar esa noche.

Miyako miró alarmada a su amiga, eso no era bueno. Apretó los dientes y su puño.

¡Por hablar demás ahora esa chica tenía curiosidad de saber lo que había ocurrido esa noche!

En esos minutos de verdad pensaba en cortarse la lengua para evitar que eso volviera a ocurrir.


Yamato iba caminando tranquilamente por el lugar, tranquilo, mientras en sus orejas posaban sus audífonos en donde escuchaba una de las canciones de su banda, iba sumergido en la música, iba concentrado a cada detalle, en la letra, en su voz, en las notas, en todo. Tan concentrado iba que no se dio cuenta que una figura femenina apareció frente a él y antes que se diera cuenta chocó contra ella provocando que esa persona dejará caer su bolso y unos libros.

Yamato bajó la mirada hacia ellos he hizo una mueca, quitó los audífonos de sus oídos—Discúlpame, iba tan centrado en lo mío que no te vi.

—No te preocupes...—

El rubio reconoció al instante la voz de una persona y al levantar la mirada se percató que era nada más y nadie menos que la Tachikawa.

—Mimi.

—Hola...—Saludó la chica—¿Sabes? Parece que estamos corriendo con la misma suerte de nuestros hermanos.— Comentó Mimi y Yamato no pudo evitar sonreír ante esto, porque, era verdad, sus últimos encuentros habían sido como los de Takuya e Izumi quienes acostumbraban a chocar.

Yamato observó el bolso de la chica y lo recogió del suelo, pero, algo llamó su atención, algo que antes no se había dado cuenta, observó detenidamente el bolso— Mimi...—La llamó— ¿Este es?

Mimi sonrió de lado— ¿E? Pues sí.— Contestó— Es el mismo bolso que...

—Te di en nuestro primer aniversario.— Finalizó el rubio— Me sorprende que todavía lo conserves.

Si había algo que caracterizaba a la castaña, es que, no le gustaba llevar cosas viejas, usadas, siempre intentaba llevar cosas a la moda y nuevas.

—¿Por qué no lo conservaría?— Preguntó Mimi— Significa mucho para mi.

Era un simple bolso, pero, tenía un gran valor sentimental, era un regalo de su primer aniversario, del primer mes que estuvieron juntos, era de marca, bonito, de su estilo, Yamato esa vez había dicho que había recorrido todo el centro comercial simplemente para darle un buen regalo, y pues, como sabía mucho de gusto finalmente fue Izumi quién había escogido su obsequio.

Y pues, también ese bolso significaba algo más -que Yamato ignoraba- en ese mismo bolso era en donde ella había llevado la ropa del bebé que esperaba los gorritos, pañales, zapatos y los body, cosas que no le habían servido...luego de lo que ocurrió.

—Fue nuestro primer mes junto ¿no?— Preguntó el rubio.

—Sonaré cursi, pero, guarde este bolso porque me trae muy buenos recuerdos.—Comentó Mimi, buenos momentos en su relación lógicamente—A pesar de los años lo seguí conservando es mi bolso favorito.

—No creo que sea tan cursi, al menos, que claro lo mío también lo sea.— Y de su chaqueta sacó un llavero con una M.

Mimi abrió los ojos sorprendida, ese había sido el regalo que ella le había dado por su segundo aniversario— ¡Wow! Lo guardaste todo este tiempo.

Yamato asintió— Si.— Observó el llavero— Me trae buenos recuerdos.

Mimi sonrió.

"Buenos recuerdos"

Suspiró.

Recuerdos de ese tiempo que eran felices como novios, ese momento en el cual ella se sentía gradada con él, antes de que todo cambiara, antes de que ella se enterara de que estaba en cinta y antes de que su padre la obligara a irse lejos sin decir palabra, en donde había vivido miles de emociones.

Se mordió el labio inferior, había recordado algo.

Se suponía que ella tenía una cadenita con la letra Y de Yamato, que se conectaba al llavero del rubio y pues...ya no lo tenía.

Bajó la mirada.

¿Por qué todo lo que involucraba al rubio y a ella le hacia recordar a lo que ocurrió?

Suspiró y alzó la mirada— Me alegra que lo tengas, igual pensé que con los años ya no lo querrías.

—¿Sabes? Cuando te fuiste pensé en desechar todo.— Admitió Yamato con algo de pesar— Pero, finalmente lo guardé...—Bajó la mirada— De algún modo tenía la esperanza de que algún día regresaras.

Mimi sonrió ante esto, eso sonaba bonito.

"Esperanza de que algún día regresaras"

Había vuelto y aunque habían quedado en ser solo amigos, ella tenía la esperanza de que algun día ella ganaría su corazón...otra vez.


Discúlpenme por cortar en esta parte, pero, no tenía más ideas, tengo una escena muy importante para la historia y tuve tentada a ponerla ahora, pero, preferí guardármela, pronto vendrá lo fuerte o lo intenso, quiero esperar más para el final y pues, darle más suspenso para la 2 Temporada.

Adrit126: Holii que bueno que te alegra la relación de Yamato y Mimi poco a poco irá bien, algún día volverán, pero, por el momento recuerdan las cosas y se llevan bien jajaj todas amamos a Takato es un dulce, ya veremos que ocurre con Rika y él jejej como dices se complementarían. Si Taichi se pasó tristemente, pero, ya veremos como Hikari le pondrá un alto. Si concuerdo en que Sora tuvo culpa, pero, bueno, igual estaba en una edad difícil, como los demás está arrepentida y ahora es más madura, ayudará a que Taichi reaccione. Las cosas pronto mejoraran para unos y para otros. Ojalá sigas leyendo, comentando y te mando un abrazo a la distancia.

mariacredenza02: Jajaj Miyako y sus cosas jajaj De a poco se le irá yendo más la lengua jiji Sobre la conversación entre Yamato y Mimi quise que se vieran algunas cosas y creo que lo logré de a poco iremos sabiendo más sobre lo que ocurrió esa vez ¡Ojo con todo! (es lo único que diré jajaj) Si de a poco van agarrando confianza jajaj Takato un amor, ya veremos como Rika avanza, sobre Ryo de a poco tendrá que ir viendo que su forma de actuar simplemente lo aleja de Rika. Sobre Takuya, él sufre, pero, ya veremos que ocurre, llegará otra chica en la próxima temporada, por el momento él y Izumi van aclarando las cosas. Tristemente Sora no lo puede hacer entender, pero, en algún momento lo hará, Sora sabe que ella fue culpable y no soporta que él culpe a Takeru, algún día Sora verdaderamente se cansará. Si Takeru le dijo la realidad de las cosas a Izumi, ella está pensando en sus palabras, ya veremos que ocurre jiji Tristemente Kouji puede terminar perdiendo en este triángulo amoroso, pero, él en la otra temporada tendrá otro papel (Creo que ya todos se pueden imaginar en que se verá involucrado) Si jajaj yo lo llamo relleno, pero, es que, estoy metiendo mucho relleno para llegar a la Fiesta de Bienvenida del Sábado jajaj para el capítulo 50. Ojalá sigas leyendo, comentando y te mando un abrazo a la distancia jiji

OsiOsi: Discúlpame ToT enserio, pero, quise ingresar a Takato a la trama, aún así, nada está dicho en esta historia todo puede pasar jiji así que, esperanzas arriba, porque, aunque no lo creas ni yo me he decidido jajaj