Dentro de las paredes de la prisión de máxima seguridad se encontraba una figura dentro, en una celda solitaria con solo una cama y un baño, Axel Smith estaba recostado mientras no tenía nada qué hacer, pagar por sus crímenes que lo llevaron hasta esa situación, todo por querer realizar un milagro. En aquel momento la puerta se abrió, entrando una figura.

- Me alegra que vengas a visitarme Vanessa. – Sonrió este, la rubia soltó un suspiro.

- No lo hago por gusto Axel Smith… Brad…

- Parece que ese bebé está por nacer en cualquier momento ¿venías a avisarme de ello?

- No realmente… solamente deseo platicar un rato, porque quiero cerrar este ciclo de una sola vez. – Se sentó al otro lado de la celda, el peligris también lo hizo. – Solo quiero que me respondas una sola pregunta: ¿Cómo fue que conseguiste tanto poder? En la universidad solo eras alguien que investigaba, tenías valor pero decidiste tomar este camino.

- Deberías saberlo tan bien como yo Vanessa, siempre quise hacer un milagro, no digo que me estuviera creyendo un dios, pero al menos quería poseer el poder de uno, todo el trabajo que estaba realizando en Miracle Corp fue hecho para ese único propósito, que el bajo mundo del crimen me financiara fue una única casualidad puesto que vieron valor en lo que hacía.

- Claro, venderlo para cometer grandes robos digitales… ya debes saberlo, pero eso te costará prácticamente toda tu vida en la cárcel, nunca saldrás.

- Ya lo sabía desde el momento que empecé todo esto, pero nunca creí que serías tu quien me atraparía.

- E inicialmente me alisté al FBI para encontrarte puesto que desapareciste de repente… el destino es cruel en ocasiones.

- Al final todo fue producto de nuestras propias decisiones… ¿Qué harás ahora? Yo fui todo tu motivo para empezar esto.

- Eso fue antes… ahora tengo una nueva meta en la vida, ser la mejor madre que mi hija pueda tener. – Acarició su vientre. – Pienso cerrar este capítulo de una vez y por todas y avanzar hacia adelante… Brad, es momento de decir adiós… y que una vez te amé.

- Eso es nuevo… que te vaya bien en tu vida Vanessa, y todo salga bien de ahora en adelante… - Volvió a recostarse en su cama. Vanessa se fue en ese momento con muchos sentimientos dentro de ella, pero ya sabía que era necesario, ahora podría continuar hacia adelante, el futuro era brillante para ella.


- No puedo creer que esté nervioso ahora… - Ramón se ajustó el corbatín. Después de todo era el día de su boda, en eso tocaron la puerta. – Papá.

- Ey hijo, nos pagas la entrada a Estados Unidos y para esto, no me digas que te estás acobardando.

- No realmente, pero si es un momento importante de mi vida, así que deseo estar lo mejor calmado posible.

- Descuida hijo, saldrá bien y eso que conseguiste una mujer realmente hermosa, casi como tu madre cuando era joven.

- Ya lo creo… - Soltó una pequeña risa. – Es hora de que vaya al altar.

- Vamos. – Sujetó su brazo para ir. En otro lado, en la habitación de la novia se encontraba movimiento.

- ¡Rápido! – Sayori apresuraba para tenerla lista, llevaba un vestido color rosado con franjas amarillas. – La novia debe estar lista.

- Lo hacemos lo mejor que podemos. – Respondió Natsuki, llevando un traje color azul claro con falda apegada. - ¡Yuri, el velo!

- Ya voy. – La pelimorada tenía un vestido de una sola pieza color negro. – Listo.

- Menos mal… Ramón debe estar en el altar, así que no podemos perder el tiempo.

- Cierto… quién diría que las bodas son pesadas.

- Bueno, eso es una preparación correcta. – Informó Yuri. – Saber qué así que acabaría.

- Ciertamente… pero me alegro, creo que ella es quién más felicidad merece después de todo.

- Dije que no me molestaría pero lo estoy un poco… - Exclamó Natsuki por debajo, Sayori la abrazó. - ¡Ey, me arruinarás el traje!

- Jeje, es que parecías necesitarlo… no digo que yo igual me siento así pero igual estoy alegre, todas compartimos un mismo destino y nunca nos alejaremos.

- Es verdad… todo por es estúpido que decidió cambiar nuestro destino… estoy muy agradecido con él…

- Ciertamente. – Asintió Yuri, en eso salió la novia. – Es hora.

En el altar, ya varios familiares de Ramón y compañeros de trabajo estaban sentados, Vanessa estaba ahí junto a Max los cuales sonrieron, el castaño estaba ajustando su cuello debido al nerviosismo. La música empezó a sonar y la novia entró, un hermoso vestido blanco con un velo largo, un ramo de flores en sus manos, Ramón quedó totalmente sin habla al ver su belleza, Monika caminaba lentamente hacia el altar con las otras tres acompañándola.

- (Esto es real… lo es…) – Sonrió por debajo. La castaña llegó al altar, viéndose fijamente a los ojos, las tres chicas se pusieron atrás de ella, el padre de Ramón se quedó a su lado.

- Estamos aquí para unir a esta pareja en sagrado matrimonio, muchas adversidades han sucedido pero finalmente los podemos tener aquí. – El sacerdote miró a Ramón. – Novio ¿aceptas la mano de esta mujer para unirse, nunca dejarla abandonada y amarla por siempre?

- … Acepto…

- Y novia. – Miró a Monika. - ¿Aceptas la mano de este hombre para que siempre te proteja y ame, a pesar de todas las adversidades?

- Acepto…

- En ese caso, por el poder que tengo, los declaro marido y mujer. – Sayori le pasó el anillo a Ramón, este lo tomó y puso en su dedo a Monika. – Puedes besar a la novia.

- Es el comienzo de nuestra nueva vida…

- Si… espero que podamos ser felices. – Ambos se besaron profundamente mientras los invitados aplaudían. Ramón batalló duramente para conseguir ese futuro, ahora finalmente podía descansar en paz, junto a las personas que amaba, esas cuatro chicas que antes eran solo personajes, ahora eran una realidad.


Bueno, hemos llegado al final de la historia de Ramón, ya ahora sí esto es definitivo, debo decir que adoré escribir de un juego como lo es Doki Doki, y luego sumado a uno de mis juegos favoritos de toda la vida como lo es Corpse Party, no hubo momento en el cual pudiera sentirme agotado de continuarlo, la verdad es que di mi mejor esfuerzo y el resultado me tiene muy satisfecho, no más que decir de estas ovas que he hecho para cerrar esa parte pendiente con las chicas.

Ya ahora de tal forma puedo despedirme para siempre de esta historia, Ramón fue un protagonista que le di una evolución entre mis dos historias, se volvió alguien con suficiente confianza para afrontar los peligros que tuvo en el frente, igual las chicas progresaron como personajes y se merecen la felicidad que tienen ahora, si Monika resultó ser la escogida es que lo vi como la opción más viable, dado que siempre ha sido su sueño una vida normal, ahora puede tenerla.

Nos despedimos con la historia y nos veremos en otra, siempre estaré continuando mis fics de Fate y Hachinai y a partir de la otra semana ya estaré actualizando semanalmente el fic de Munou Nanana, empezarlo de una vez, nos veremos en alguna otra historia si se quiere. Saludos.