— ¡¿Están listos para el show?! —Pregunto un tipo de piel púrpura con cuernos de chivo que era el anunciador y comentarista de combate.
El público, compuesto por los más grandes empresarios y políticos de alto nivel de todas las especies, razas y étnias en el universo estallaron de jubiló ante la idea de por fin presenciar un combate tras tantaa horas de espera.
— ¡Muy bien gente, es la hora del show! —Exclamo el comentarista—. ¡Por el momento las nuevas adquisiciones de nuestro señor se guardarán para después, a fin de cuentas lo mejor se reserva para el final, así que mientras tanto denles la bienvenida a nuestros gladiadores del día de hoy! ¡Por un lado tenemos a una orgullosa miembro de la especie Silaxiana, nobles cazadores que luchan contra el mal, denle una fuerte ovación a Obara, The Huntress!
Y entonces hizo acto de aparición (Contra su voluntad, obviamente) una mujer alta de piel de ébano con ojos azules y cabello blanco con una larga cola de caballo que le llegaba hasta la cintura y estaba adornada y peinada en trenza, vestía un atuendo que consistía en una camisa sin mangas azúl con el abdomen expuesto y taparrabos de cuero negro, también llevaba un cinturón con tres faldones de cuero azúl, uno en frente y los otros dos a los costados.
— ¡Y ahora como su contrincante tenemos a un favorito del público, demos un gran aplauso al gran, al único, al inmisericorde Kraggox El Terrible! —Exclamo el comentarista.
Y ahí apareció un ser enorme de piel verde como de reptil y cara que parecía la de un Pug con ojos saltones totalmente negros, la criatura además poseía pinzas de escorpión por manos y una cola azúl que finalizaba en un aguijón, sus únicas ropas eran un taparrabos negro de cuero y algo triangular invertido que cubría desde sus hombros hasta la llegar al taparrabos.
— ¡La ronda ha empezado, a pelear! —Anuncio el comentarista.
Tan pronto como sonó la campana Kraggox se abalanzó contra Huntress con intención de clavarle su aguijón, Huntress tan solo lo esquivo con pasmosa facilidad y le dió en la nuca con su mano extendida haciendo que perdiera el control de su cuerpo y fuera a estrellarse contra un muro.
— Maldita bestia ignorante, no me creo que me obliguen a pelear con semejante subnormal —Se quejo Huntress con bastante desdén.
Pero para sorpresa de Huntress, Kraggox recupero la sensibilidad de su cuerpo y se levantó como si nada más furioso que nunca.
— ¡Me comeré tus tripas, maldita! —Exclamo Kraggox.
— Y creía que Sakachi era intensito, veo que lo sobreestime —Expreso Huntress al oír la amenaza de Kraggox sin tomarla en serio en ningún momento.
Esta calma se debía a qué por muy enojado que estuviera Kraggox, este aún no representaba un verdadero peligro, pues no cambio su estrategia de solo abalanzarse contra ella, lo que le permitió agacharse cuando esté estuvo a centímetros de ella y así atacar a los puntos vulnerables de sus rodillas, haciendo que cayera de nuevo al suelo al tiempo que esquivaba rodando su aguijón, el cual termino atravezando el suelo y derritiendo la parte que atravesó en cuestión con su veneno.
Al ver Huntress eso se dió cuenta de que debía tomar las distancias y evitar ese aguijón lo máximo que pudiera.
Mientras la lucha continuaba, Game-Master estaba en su balcón privado viendo el combate al tiempo que visualizaba a través de su ordenador las imágenes del otro planeta en el sistema, al verlo se empezó a preguntar que clase de guerreros lo habitan y cuáles serían dignos de ser parte de sus juegos.
— ¡Game-Master, tenemos varios problemas! —Le aviso por el intercomunicador uno de los piratas del Capitán Stickyfingers, en concreto una rana humanoide.
— ¿Que quieres? —Pregunto molesto por ser interrumpido.
— ¡Acabamos de descubrir que la sala en dónde guardabamos las armas de las recientes adquisiciones ha sido asaltado y despojado de todas ella, además la celda que contenía al guerrero bárbaro y su tigre está vacía! —Le reveló el pirata.
— Oh, mierda —Dijo Game-Master.
— ¡Y lo peor, es muy probable que vayan por la Caja Madre para salir de aquí! —Continuo diciendo el pirata.
— ¡Oh, mierda! —Dijo Game-Master—. ¡Avisa a tu capitán para que deje los preparativos de invasión y a cambio se ponga a buscar a los prisioneros, nadie debe llegar hasta la caja madre!
— ¡Así se hará! —Y tras eso cortó la comunicación.
— ¡Maldita sea! ¿¡Cómo pudo liberarse!? —Se pregunto llevando sus manos a la cabeza y enrollando sus piernas.
Su respuesta llegó apenas segundos después cuando la pared del coliseo fue derribada y He-Ro salió del agujero resultante directo al escenario seguido de Battle-Bird y Keltra.
— ¡Que nadie del público salga con vida! —Ordeno He-Ro.
A sus ojos la gente que disfrutaba de lo que en esencia eran peleas de esclavos no merecían vivir, por eso no tuvo problemas para disparar ráfagas de energía de su espada y matar a todos a los que apuntaban, lo mismo hizo Keltra con sus familiares de luz y Battle-Bird atacandolos cuerpo a cuerpo.
— ¡¿Que demonios está pasando, que hacen estos aquí?! —Exigio saber Game-Master.
Unos minutos antes.
— Muy bien, este es el plan, He-Ro, Keltra, Battle-Bird y Panthor irrumpiran en el combate pronto a realizarse, deben rescatar a los gladiadores y acabar con esas elites ahora que podemos. Me-Log, Glicah y Battle-Cat iran a las otras áreas de contención para liberar al resto de prisioneros, nadie debe quedarse atrás. Por ultimo, Skeleteen, Screeech, Styrax y yo buscaremos esa Caja Madre para salir de aquí una vez terminemos todo. ¿Alguna pregunta? —Quiso saber He-Man.
Solo uno levantó la mano, se trataba de un muy molesto Skele-Gar.
— Primero que nada, ¡Dejen de puto llamarme Skeleteen! —Exigio iracundo—. Segundo, ¿Que te hace creer que aceptaré trabajar contigo? ¡Tu mataste a mis padres y a las madres de mis hermanas, no hay forma de que trabajemos juntos!
— ¿Quien era tu madre? para este punto se que Keltra aquí presente es hija de Evil-Lyn y que Keyle es hija de Velaia, ¿Pero de quién eres hijo? —Quiso saber He-Man.
— No me creo que esa sea tu pregunta, la identidad de mi madre no te incumbe —Dijo Skele-Gar.
— Su madre es Shadow Weaver —Revelo calmadamente Keltra.
— ¡Keltra! —Exclamo sintiéndose traicionado.
— ¡Por favor, Malkyn, para este punto no tiene sentido ocultarlo! —Respondió Keltra.
— ¿Te llamas Malkyn? —Pregunto He-Ro entre risas no muy bien ocultadas.
— ¡Ni se te ocurra burlarte del nombre que me dió mi madre! —Exclamo Malkyn.
— Tan solo pienso que Keldyn o Deon son mejores nombres que Malkyn —Admitío He-Ro.
— ¡Come mierda, malparido, el nombre escogido por mi madre es perfecto tal cómo es, no tienes derecho a afirmar lo contrario! —Exclamo Malkyn agarrando a He-Ro del cuello de su armadura.
— Menudo hijo de mami resultaste ser —Se burló He-Ro.
— ¡Te voy a…
— ¡Ya, dejen de pelear! —Los separaba He-Man—. Mira Malkyn, solo lo voy a decir una vez y no me importa si me crees o no, pero yo no mate a tu madre.
— ¿Encerio esperas que me crea eso? —Pregunto Malkyn.
— Como dije, me da igual si lo crees o no. Sin embargo eso no importa ahora mismo, lo que importa es liberar a todos los prisioneros, acabar con la elite, detener a Game-Master y volver de una pieza a Eternia. Por eso te recomiendo dejar tu rencor de lado al menos por lo que resta de esta misión, luego puedes volver a buscar tu venganza, ¿Entendido? —Pregunto He-Man.
— Si, está bien —Dijo a regañadientes al ver que tenía razón—. Pero ten en cuenta que tan pronto acabemos con este hijo de puta volveremos a ser enemigos.
— Esto es muy divertido —Dijo Me-Log al ver todo el descontrol que acababa de suceder—. Y en definitiva Keldyn o Deon son mejores nombres que Malkyn.
— No pienso lo mismo, Malkyn es sin duda el mejor nombre de los tres —Afirmo Glicah.
— ¿Empezaremos a pelear como ellos? —Pregunto Me-Log.
— Por mi parte espero que no —Dijo Glicah.
— Bien, no quisiera pelear por tal cosa —Reconocío Me-Log.
Una vez todo fue puesto en orden, los díez se fueron de ahí a cumplir con su parte.
Presente.
— ¡Que alguien los detenga! —Ordeno Game-Master.
Los piratas de Stickyfingers no tardaron en llegar, solo para ser descuartizados por un muy iracundo Panthor que salía del agujero creado por su compañera.
Al ver esto de primera mano Huntress no supo cómo reaccionar inicialmente, quedándose quieta mirándolos sin saber que hacer. Kraggox por otro lado había sido golpeado por un trozo de la pared derribada y estaba inconsciente en el suelo. Tras llegar a la conclusión de que debían ser aliados de la justicia al ver cómo acababan con la elite corrupta, Huntress tomo la decisión de unirse a ellos en la batalla, por lo que agarrando un espada y un escudo de un pirata caído procedió a unirse a la refriega.
En cosa de nada todo el sitio se llenó de cadáveres hasta que todos los piratas y la élite fueron asesinados sin compasión. Al ver esto Game-Master activo una compuerta secreta para huir de ahí antes de que fueran por el.
— ¡Maldita rata! —Le insulto Huntress.
— No te preocupes, dentro de nada lo atraparemos —Le prometió He-Ro.
— ¿Quienes son ustedes? —Pregunto Huntress.
— Mi nombre es He-Ro, hijo de He-Man, y soy el Hombre más Poderoso del Universo encargado de proteger al planeta Eternia —Se presento He-Ro clavando la Espada del Poder en el suelo frente suyo y agarrándola con las dos manos.
— ¡Yo soy su noble compañero animal, el Gran Battle-Bird! —Exclamo Battle-Bird sobrevolando el lugar.
— Soy Keltra de la Casa de Keldor, soy alguien que pelea por el honor de su familia —Keltra ya tenía dudas sobre si su familia tenía honor, más no dejo que eso se dejará ver—. Y este de aquí es mi noble compañero animal, Panthor.
— Obara de Silax, soy la Heroica Cazadora de la Maldad —Se presento Huntress de igual forma que He-Ro—. ¿Puedo preguntar que hacen aquí?
— Mi padre fue capturado por Game-Master, por eso me colé en la nave para rescatarlo junto a una amiga —Contesto He-Ro.
— Mi hermano, una amiga y yo fuimos capturados por Game-Master, fue He-Ro y su amiga quienes nos liberaron —Le reveló Keltra.
— Y ahora mismo tenemos como misión liberarlos a todos y salir de aquí —Añadio He-Ro.
— Si ese es el caso con gusto daré mi espada para ayudarles en su empresa —Dijo Huntress arrodillándose en señal de respeto y camaradería.
— Pues bienvenida a los Amos del Universo, Obara de Silax, tu ayuda será más que bienvenida —Dijo He-Ro extendiendo su mano para ayudar a Huntress a levantarse—. Ahora, vamos a ayudar a Me-Log y Glicah.
Y sin esperar un segundo más se fueron, con He-Ro cargando a un inconsciente Kraggox para sacarlo de ahí, pues seguía siendo un prisionero que debía ser rescatado.
Obara/Huntress está basada en la idea original de Huntara, pues inicialmente los de Filmation querían hacerla una mujer negra bastante parecida a Oboro/Storm de los X-Men (De ahí su nombre verdadero como una referencia a Storm), pero por razones que desconozco los ejecutivos no lo permitieron y tuvieron que cambiarle el color de piel al morado que todos conocemos, no pienso tachar de racistas a los ejecutivos, pues a fin de cuentas no tuvieron problemas con Netossa y otros personajes negros, por lo que me abstendré de hacer juicios de moral.
Kraggox es uno de los prisioneros del Game-Master en el episodio en el que este mismo aparece, no hay mucho misterio tras de él además de actuar como antagonista secundario.
Sin nada más que decir, me despido deseándoles un buen día.
