Capítulo 33
Negar el hecho de que Kagome es una mujer atractiva era absurdo, dormida como si nada en a su alrededor le importase, era algo irreal. Su único propósito en la vida era la búsqueda de poder, pero luego de revivir a Rin algo cambio en su interior solo que no había experimentado esa sensación hasta que marco a la miko.
-Por qué no sales de una buena vez – advertía el youkai aun dentro del pequeño rio, dejando entrever a una miko junto a un familiar hanyou
-Eres más hábil de lo que pensé – dijo Kikyo - ¿no estarás bajando la guardia a propósito? – el youkai no respondió, tampoco se inmuto ante el comentario de la sacerdotisa, al contrario, hundió mas su cuerpo relajándose y recargando la cabeza en el borde de rocas que servían de soporte
-¿Qué le sucede a Kagome? ¿Qué le has hecho? – pregunto Inuyasha en un tono ligeramente molesto cerca de una Kagome dormida
-Nada que no me permitiera hacerle – sonrió molestando y sorprendiendo al hanyou sin si quiera mirarlo
-No lo entiendo – murmuro Kikyo capturando la atención de Inuyasha y todo el oído del lord - ¿Por qué sigues preocupándote por ella? – dijo al fin demostrando un enojo poco propio de la sacerdotisa
-Kikyo… - dijo el hanyou sereno - … ella sigue siendo importante para mí.
-Pero… ella ahora es la compañera de tu hermano… no debería importarte! – regaño al peliplateado – nunca sentí esa preocupación hacia mí – lagrimas se dejaron ver en su mirada mientras tensaba el arco en dirección al hanyou, el youkai estaba atento a todo lo que escuchaba
-Baja el arco Kikyo, ¿Qué crees que haces? – pregunto un sorprendido hanyou
-Apártate de ella Inuyasha… - advirtió Kikyo tensando aún más el arco
-Déjate de tonterías y baja el arco, no voy a discutir contigo por esta estupidez Kikyo – regaño a la mujer que acabo sorprendiéndolo al disparar e incrustar la flecha cerca del cuerpo de Kagome.
-Inuyasha controla a tu compañera – advertía Sesshomaru mirando con evidente molestia a la mujer
Poco tiempo paso para que la reñida conversación despertara a la mujer del youkai que cubrió rápidamente su cuerpo con el hakama de Sesshomaru. La vergüenza vistió su rostro al ver la espalda de Inuyasha frente a ella
-Inuyasha pero que…
-Kagome? – volteo rápidamente para ver a su anterior compañera parpadeando varias veces al notar las marcas violetas en su rostro, ella lo miro desconcertada sin entender la situación, la sangre de Sesshomaru estaba haciendo mella en la mujer, nunca pensó que Kagome resultaría tan apetecible frente a sus ojos
-Ella no pertenece a este mundo, debe irse – soltó Kikyo que acabo alterando al youkai que irguiéndose y dejando ver todo su desnudo torso ataco a Kikyo con su látigo venenoso partiendo el arco de la mujer.
- ¡¿Qué crees que haces?! – grito eufórica lanzando una onda de energía espiritual que fue evadida por una veloz Kagome que se posaba frente al demonio para protegerlo del ataque de la miko del pasado
- ¿Se puede saber qué te pasa Kikyo? – preguntaba desconcertada mientras su mente estaba inquieta "¿cómo logre moverme tan rápido?"
-Que lamentable eres Kagome, protegiendo a un youkai que no necesita tu protección…
- ¿Disculpa?... – respondía ofendida la miko – Él es mi compañero, es mi deber cuidarlo de personas como tú, con esas aptitudes solo haces que me arrepienta de haberte entregado la perla… - regaño entrecerrando los ojos.
-En primer lugar, soy yo la indicada para cuidar la perla de shikon… - interrumpió Kikyo
-De haber pedido el deseo correcto no la habría traído de vuelta a este mundo – devolvió Kagome sintiendo a un Sesshomaru prudentemente vestido detrás de ella
-Basta Kikyo, no hemos venido a este lugar a discutir, ya déjate de tonterías – dijo molesto el hanyou acercándose a la miko
- ¿entonces? – pregunto Kikyo mirando dolida al hibrido
-Solo quería asegurarme que Kagome estuviese bien, ya vámonos… - murmuro ocultando la mirada con el plateado flequillo
-Inuyasha – llamo Kikyo siguiéndolo, adentrándose al bosque junto al hanyou – Inuyasha! – llamo nuevamente siendo ignorada tomándolo del brazo para detenerlo - ¿Qué querías verificar? ¿Qué ahora ella es completamente de ese youkai? Deja de pensar que ella volverá contigo por el simple hecho de ir a verla, está marcada y no…
-Yo he tomado una decisión Kikyo, pero a pesar de todo no puedo evitar tener sentimientos que van en contra de mis decisiones, eso no puedo controlarlo… - respondió quitándole la mirada a la mujer, dándola la espalda.
- ¿Acaso estás conmigo porque ella fue tomada por tu hermano? – sugirió la miko observando como el hanyou movía sus orejas, la había escuchado
-Escúchame Kikyo, yo te hice una promesa… que no pretendo romper – dijo mirándola de reojo caminando – vámonos, se acabó la charla
Kikyo quedo muda ante la actitud del hanyou, nunca lo había visto de esa forma, eso la enervaba internamente, le molestaba no ser ella la única en esa mirada dorada y odiaba sentirse de esa manera, pero debía controlar sus emociones.
La aldea se dejaba ver ante el cielo nocturno, Inuyasha caminaba frente a ella completamente mudo entrando a la cabaña donde estaban sus compañeros quienes lo miraban incrédulos ante la actitud que traía consigo.
-Inuyasha amigo ¿pasa algo? – murmuro acercándose un poco al hanyou que negó con la cabeza aceptando esa respuesta de momento, sabía que algo le pasaba al hanyou y lo averiguaría en su momento.
