Harry Potter pertenece a JK Rowling.

Star Wars pertenece a George Lucas (y a Disney)

Harén de Harry.

HP: Hermione Granger, Daphne Greengrass, Padma Patil y Susan Bones.

SW: Aayla Secura, Ahsoka Tano y Maris Blood.

35.

Varias alumnas, hicieron muecas de asco, y algunas incluso sufrieron de arcadas.

No era una buena forma, empezar el nuevo año escolar, teniendo que aplastar aquellas asquerosas (y supuestamente) plantas, pero al parecer, el pus en su interior era útil. Eran como babosas negras, con protuberancias violáceas. Tenían que llenar unos cubos, con el pus en su interior.

Pero eso no fue lo peor: La siguiente clase, fue la de Cuidado de Criaturas Mágicas, donde estaban ante unas raras y asquerosas criaturas, que parecían algún tipo de escorpión grande, pero entremezclado con unas langostas.

—Hagrid —llamó Harry, mientras miraba «El Monstruoso Libro de los Monstruos», y ya tenía preparado el libro «Animales Fantásticos y Donde Encontrarlos» —Estas criaturas, no están en.… en ninguno de los dos libros. ¿Qué son?

—Son Escogrutos de Cola Explosiva, los crie, al cruzar a una Mantícora y a un Cangrejo de Fuego, creo que podríamos tomarlo, como un pequeño proyecto...

—Hagrid. —interrumpió Harry. —Estamos en cuarto año, y el próximo tendremos que realizar los TIMOS, estas criaturas, no están en el temario, y nos pones en desventaja.

Susan intervino. —No solo eso, Hagrid. Estas criaturas, tú mismo lo has dicho: Son un cruce, y sinceramente, no creo que tengas un permiso de Cría Experimental, ¿o sí? —Hagrid negó, mientras se ponía pálido. Al parecer, ya sabía lo que la pelirroja quería decirle.

—Y-Yo... en.… entiendo... Susan, Harry gracias —dijo el guardabosque. —Te... terminemos esta... esta clase y...

Todos suspiraron, ahora más tranquilos, al escuchar que el hombre entraba en razón.

Harry y Daphne a Runas Antiguas

Hermione y Padma a clase de Historia de la Magia.

Susan a Aritmancia.

— ¡Me sigue sorprendiendo, que podamos incluso crear barreras, solo con un lenguaje antiguo! —dijo Daphne, luego de salir de clase.

Habían estado viendo el poder que tenían las runas, y habían escrito en un pergamino pequeño, tres runas, las habían interconectado, como la profesora les había indicado. Y cuando estuvo listo, las runas brillaron de color azul, y probaron, colocando plumas, piedras diminutas, y fuego colocando objetos más pesados, como tuercas, y los objetos se quedaron en el aire.

—Esto es solo un ejemplo, de aquello que pueden lograr las runas —dijo la profesora Babbling. —Es más que escribir, en un papel. Es más que aprender una lengua muerta. Les sorprenderán, las cosas que aprenderemos este año. —La sonrisa de la profesora Babbling, les hizo abrir los ojos a todos, y maravillarse, ante lo mucho, que aprenderían ese año. —Las runas los harán sentirse imbatibles.

Viendo la profesora, que varios estaban muy bien versados, en el Futhark antiguo, dio paso, a darles los primeros ejemplos del alfabeto glagolítico, todos abrieron sus libros, emocionados.

Un largo rato, después de Runas Antiguas dobles, era hora del almuerzo, y tanto Harry, como Daphne, estaban muriendo del hambre.

— ¡Weasley, he Weasley! —llamó Draco.

— ¿Qué? —preguntó Ron, lacónicamente.

—Tu padre salió en el periódico, mira. —Draco enseñó la portada. Ron trató de arrancarle el periódico de las manos, pero Malfoy lo colocó lejos de su alcance, y leyó la noticia él mismo.

MÁS ERRORES DEL MINISTERIO DE MAGIA.

Por: Rita Skeeter.

Parece que los problemas del Ministerio de Magia, no se acaban, escribió Rita Skeeter, nuestra enviada especial. Muy cuestionados últimamente por la falta de seguridad evidenciada en los Mundiales de Quidditch, y aún incapaces de explicar la desaparición de una de sus brujas, los funcionarios del Ministerio se vieron en una situación embarazosa, a causa de la actuación de Arnold Weasley, del Departamento Contra el Uso Incorrecto de Objetos Muggles.

—Aunque, estoy casi seguro de que el nombre correcto es Arthur, ¿no es así, Weasley? —preguntó Draco, sin mirar a Ron, sino a Ginny, quien asintió.

El señor Weasley, respondió a una llamada de auxilio, dada por Alastor Moody, antiguo miembro del Ministerio de Magia. El cual está retirado, aunque en una exhaustiva investigación, se demostró que era una falsa alarma (quizás un animal buscando comida, o un pobre vagabundo), así Arnold Weasley, tuvo que modificar los recuerdos de varios Muggles de la zona, antes de volver al Ministerio y realizar el reporte necesario.

—El año antepasado, nuestros padres tuvieron una ligera conversación, ¿no es así Weasley? —dijo Draco. —Se llama... ¡Arthur!, pero bueno, no se puede culpar a Rita de algo así, ¿verdad? Después de todo, tu padre es un don nadie. —Draco, Ron y Ginny desenfundaron sus varitas y las tres volaron por el aire, aterrizando en la mano de Moody.

—McGonagall y Snape... se sentirán decepcionados, de que sus alumnos estén batallando entre ellos. —dijo Alastor Moody, con las varitas aun en la mano. —Malfoy y Weasley, los tres conmigo. —Moody los llevó a las respectivas oficinas de sus Jefes de Casa, y luego se dirigió a su oficina.

Todos estaban a la espera, de lo que traería la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras, bajo la mente de alguien del calibre de Alastor "Ojo Loco" Moody.

Una clase, que los de Slytherin de quinto año, solo tuvieron hasta el día siguiente, en la mañana.

— ¿Quién puede decirme qué son las Maldiciones Imperdonables? —preguntó Moody, todos se miraron unos a otros. Una mano se levantó. — ¿Te llamas Longbottom? —Neville asintió, el hombre suspiró.

—Lamento mucho... lo que les ocurrió a tus padres. —La voz de Moody se rompió, miró a Neville fijamente, mientras una lagrima escapaba de su ojo izquierdo. —Alice Ross... una de mis mejores alumnas. —El hombre recobró la compostura. —Los Contrahechizos, están hechos para luchar... contra otros hechizos. Página 115 del libro «Las Fuerza Oscuras. Una Guía para la Autoprotección», por favor. —Todos abrieron los libros. —Colloportus —la puerta se cerró. —Longbottom, abra la puerta por favor.

Neville casi se pone de pie, pero lo pensó dos veces. —Alohomora —para la sorpresa de todos, la puerta se abrió.

—5 puntos para Gryffindor. Lumos Máxima —exclamó Moody, todos gritaron de dolor, cuando una luz muy potente, surgió desde la varita.

— ¡NOX! —Gritó Harry, haciendo que la luz se extinguiera.

— ¡Estupendo, Potter! 5 puntos para Slytherin. —Dijo Moody. —Los Contrahechizos, luchan contra otros hechizos. —Reunió un montón de papeles, y comenzó a realizar figuras de Origami, para luego irlas pegando una a otra, formando una torre de muchas figuras de Origami: barcos, grullas, perritos, entre muchas otras figuras; hechizó la mesa, de forma no-verbal. Señorita Patil, contrahechizo #6, atenta, por favor. —La chica miró el libro rápidamente y leyó el hechizo, miró nerviosa al profesor. —Incendio —la torre se incendió.

— ¡Finite! —exclamó Parvati, apagando las llamas, en un instante.

—Nox elimina la luz del Lumos. Alohomora abre las puertas, cerradas con Colloportus. Y, aunque existen hechizos, que se oponen a otros, lo mejor es el Finite, señorita Greengrass, ¿Qué nos dice el libro?

—Finite y Finite Incantatem, carecen de un uso específico, y pueden anular hechizos en general, actuando sobre un área o un objeto en concreto, respectivamente. —Leyó Daphne.

— ¿Entienden? —preguntó Moody, gran parte del salón, sintiéndose intimidados por Moody, contestaron en voz alta, con un "Sí señor". —El Finite y el Finite Incantatem... —sacó un pájaro de papel. —Locomotor —el pájaro comenzó a volar, por todo el salón —Finite —pronto cayó al suelo, inerte. —Contrahechizos. Una grandiosa arma, contra las Artes Oscuras. Bien, terminó la clase —sonó la campana. —Longbottom, aquí tienes —Moody le entregó un libro, y le guiñó un ojo.

— «Plantas Mágicas del Mediterráneo y sus Propiedades Mágicas» —leyó Neville, ahora de un mejor humor. Miró la portada, miró el titulo impreso en la primera página, y pasó algunas hojas, leyendo la introducción, pronto se quedó quieto, mirando algo.

— ¿Neville? —preguntaron Daphne y Harry, mirando su espalda. Neville se giró sonriente y con los ojos brillantes, por lagrimas que se negaron a dejar sus ojos, él levantó un poco el libro, la contraportada decía.

Este libro pertenece, a:

Alice Ross.

Ambos Slytherin, sonrieron al ver, que Moody le entregó a Neville, algo que perteneció a su madre, ¡y de un tema el cual Neville manejaba tan bien, como la Herbología!

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Al mismo tiempo, en la Sala Común de Hufflepuff, se encontraba Zoe Granger, en pleno entrenamiento, con el espectro de Tulak Hod, cada uno con una espada en sus manos, practicando la forma VII: Juyo/Vaapad.

Tulak, había tomado como su aprendiz tan fácilmente a Zoe Granger, que casi le parecía mentira, el que esa chica, tuviera ambiciones.

Hasta ahora, en La Fuerza del lado Oscuro, había aprendido a emplear poderes básicos como Atracción y Repulsión, Morichro, Drenado de la Fuerza (extraer la energía espiritual y vital, de otros) y Estrangulamiento de la Fuerza.

La niña aprendía muy rápidamente, se demostraba como una grandiosa atleta, al menos en el plano espiritual, en el cual Tulak, podía modificar el terreno, para auxiliarle el entrenamiento, de la joven.

¿Cuál era su objetivo más próximo?

Quería liberar a los Elfos Domésticos, que trabajaban en las cocinas de Hogwarts, (o al menos, quería darles derechos laborales y que ganaran un salario)

Pero, a lo largo de esos cuatro años, ya se había hecho una idea preconcebida de la magia y el Mundo Mágico: El Mundo Mágico, seguía atrapado en el siglo XV, y solo ella, podría acercarlos al Modernismo del siglo XXI. (Junto con la idea, de que los Muggles eran superiores, y que los Magos debían de acercarse más a la comunidad Muggle, jamás levantar sus varitas contra ellos, y en cambio, auxiliar a los Muggles, cuando ellos puedan necesitarlo)