"Irse fue sencillo.

Sostener la decisión fue lo difícil"

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La primera lección que aprendí luego de aquella mañana en que el Sdf3 despegó de la Tierra fue que tendría que aprender a vivir con el peso de mis decisiones, fueran buenas o malas; una vez tomadas jamás podrían ser corregidas.

Mi experiencia como primer oficial en el Sdf1 o como Capitana de una nave que fue destruida en un abrir y cerrar de ojos no sirvieron de nada. Estar al frente de la flota me colocó en el centro de todas las decisiones que se debían tomar a medida que la nave avanzaba. Durante esos primeros meses me exigí tanto que me convencí a mi misma de que los errores no tendrían cabida en mi gestión al frente del Sdf3, y quizá fue eso lo que hizo que me desmoronara cuando me di cuenta que allá afuera en la inmensidad del universo yo no tenía control de nada.

Nos tomó poco más once meses llegar al punto en donde nos uniríamos a la flota aliada, el trayecto dentro y fuera de la nave se desarrolló como estuvo planeado. Fueron las circunstancias en la Tierra las que me tuvieron sumamente preocupada.

Unos meses después de nuestra partida empezaron a salir fracturas profundas dentro de diversos grupos dentro de la RDF, diferencias que escalaron súbitamente hasta lograr una convocatoria de elecciones extraordinarias para elegir un nuevo representante, y no fue ninguna sorpresa enterarnos que quien estuvo liderando los desacuerdos era precisamente quien se había postulado para ocupar el cargo que yo había ocupado durante ocho años, aunque nunca quise llamarlo públicamente, aquello había sido un golpe de estado planeado y diseñado para cambiar la dirección de la RDF.

Fueron meses sumamente amargos para mi, darme cuenta desde la lejanía como se desmoronaba todo el trabajo que había hecho durante mi gestión fue un golpe fuerte a mi orgullo y moral. Fue evidente que todos esos grupos de oposición que mantuve a raya durante mi gestión esperaron mi partida para iniciar una revuelta que dejó a la RDF bajó el comando de Anatole Leonard, el militar que alguna vez me dejó claro su desprecio por mi y que parecía haberme ganado la guerra.

Avente el comunicado oficial apenas me lo entrego mi primer oficial la Comandante Daniela Stewart - No puedo creerlo - bufe - debí destituirlo de la RDF cuando tuve la oportunidad

La puerta de mi oficina se abrió dejando entrar a Rick con el almuerzo, apenas me miró supo que no era un buen momento - ¿me aconseja que me retire Comandante Stewart? - dijo en tono juguetón provocando que Dani intentará contener una sonrisa - A menos que tenga otra nave a donde huir, creo que es totalmente inútil intentar escapar -

- Ya estamos más cerca de la flota aliada - aseveró

-¡Rick! - lo regañe mirando con desaprobación a mi primer oficial - esto es serio, Leonard es el nuevo titular de la RDF

-¡Ufff! Se vienen tiempos difíciles para la RDF- dijo en tono dramático- es una suerte que ya no pertenezcamos a ella -

Seguía enfadada - ¿como puedes tomar a juego algo tan importante? - le reclame mientras Dani sacaba de las bolsas los contenedores y me ofrecía uno

- Lisa, ya no esta en nuestras manos lo que suceda en la RDF y lo sabes

Sabia que Rick tenía razón, mi rabieta y la preocupación que había tenido en los últimos meses a causa de los cambios militares y políticos que se estaban dando en la Tierra eran totalmente inútiles, pero yo seguía sostenida de la esperanza y la seguridad de que regresaríamos.

Si la cabeza es bélica, todas las vertientes se volverán bélicas- asegure preocupada - te has preguntado bajo este nuevo panorama, ¿que encontraremos a nuestro regreso?

Ninguno de los tres supo que responder.

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Frente a mi estaba la flota aliada zentraedi que Bretaii había logrado reunir en los últimos años, eran miles, tantos que por segundos me hicieron sentir temerosa por estar dentro de lo que en otra época hubiera significado el ojo del huracán. Con la espalda erguida controlaba mis inseguridades, intentaba convencerme de que una flota de ese tamaño tendría que darnos la seguridad de que no estábamos solos y de que difícilmente podría existir una fuerza superior a la que veía frente a mis ojos – Teniente Stewart soliciten autorización con la nave nodriza – ordené en voz firme
- De inmediato Almirante – respondió Dani – tengo al General Hunter en la línea privada
Tomé el auricular privado y casi pude ver su rostro de desaprobación – Tan temprano y ¿ya estás preocupada Hayes? –
Sonreí a medias – Hasta que esta nave regrese a la Tierra temo que no podré dejar la preocupación de lado
- Te mentiría si te dijera que el panorama de hacer enojar a todos estos zentraedis mientras estamos aquí no me tiene al borde de la taquicardia
- Aquí afuera somos nada – dije con temor – Sobrevivir a la guerra contra los zentraedi fue un golpe de suerte – aseguré
- Almirante tenemos comunicación con la nave nodriza – anunció Dani
- Te veo en el hangar piloto – dije antes de colgar.
Minutos después en la pantalla principal el rostro sereno y sonriente de Bretaii apareció haciendo que todos mis temores se esfumarán – Almirante Hayes es un gusto volver a verla
- Comandante Bretaii no tiene idea lo que significa para mi estar aquí – contesté sincera

No se si fue por el tono de mi voz o por el hecho de que yo estuviera ahí pero se sentía la clara la ausencia del Almirante Gloval, el rostro de Bretaii pareció cubrirse por un dejo de tristeza – Será un honor tenerla en mi nave – afirmó –

A partir de ese momento me sentí demasiado confiada, las cosas iban como lo planeado y unirnos a la flota de Bretaii era el primer paso que nos acercaba a lo que yo creía era el objetivo de aquella misión: establecer relaciones pacíficas con los llamados maestros de la Robotecnia, estuve muy equivocada.

Dejé la nave unas horas después de nuestro arribo a la flota, me acompañaban a la reunión con Bretaii Rick, Max, Miriya y el Dr. Lang quien se había mostrado mucho más taciturno de lo normal en las últimas horas. La nave nodriza era gigantesca, tanto que hacía que mi nave se viera como un pequeño niño empezando a crecer, pero los zentraedis se las habían arreglado para poder recibirnos con la infraestructura necesaria adaptada para micronianos.
La primera sorpresa de aquel re encuentro fue ver a un Bretaii micronizado, esperándonos a pie de plataforma del transporte que nos habían enviado para llevarnos al hangar principal, me dirigió una venia que viniendo de él significaba mucho – Bienvenidos a bordo del Atlantis – me dio acercándose unos pasos para darme la mano de forma paternal – Dr. Lang lo felicitó, ninguno de mis comandantes creería que el Sdf3 fue construido por humanos – dijo terminando de saludar al resto de la comitiva – Tengo preparada una sala de reuniones, allá nos está esperando Excedore – finalizó haciéndonos un gesto para seguirlo.
Cuando llegamos a la sala Excedore nos esperaba con la misma expresión amable que lo caracterizaba, extraño por que sabía que los zentraedis no envejecían, pero lo vi diferente, más cansado, más maduro, no lo sé, pero me parecía que era una de las personas más sabías del universo – Es un gusto poder volver a verlos – saludó haciéndonos un ademan para poder tomar asiento.
Bretaii tomó asiento a lado mío y no a la cabeza de la mesa y el gesto me hizo presentir que aquella junta no sería como yo la esperaba – Antes que nada quiero darles nuevamente la bienvenida no solo a mi nave sino a la flota entera, que estemos aquí reunidos nos dice lo mucho que hemos madurado como civilizaciones -
- Es un gran paso para nuestra civilización – dije con ciertas emoción – y para mi estar aquí significa honrar a todos los que dieron su vida para poder establecer esta alianza
- Se que esta junta tiene el propósito de establecer las nuevas acciones que tomaremos ahora que somos una misma flota, pero antes quisiera si me lo permite Almirante Hayes contarles un poco sobre mi civilización
Un tanto desconcertada asentí y miré de reojo a Rick, todos incluidos Max y Miriya estábamos un tanto sorprendidos por la forma en que estaba empezando aquella junta – Estoy aquí para escuchar con respeto todo lo que pueda aportarnos Comandante Bretaii
- Bretaii, llámeme Bretaii – pidió – me parece que de aquí en adelante será necesario establecer una relación mucho más fraterna – llevó su mirada hacia Excedore y este se puso de pie al frente de la comitiva
Hace millones de años existió una raza que desde sus inicios demostró una fuerza física nata, resistentes y adaptables a casi cualquier ambiente esta civilización decidió usar su fuerza para dar prosperidad a sus familias, poco a poco se convirtieron en mineros que con su fuerza y tamaño lograron extraer casi cualquier mineral de cualquier planeta. Por cientos de años esta civilización tuvo claro su objetivo como comunidad "trabajar y salir adelante" sin embargo civilizaciones más inteligentes y con fines de poder y de conquista descubrieron a esta raza y se dieron cuenta del potencial genético que tenían y que podría servir a su propósito de invadir planetas. No detallaré mucho en la forma en que los primeros zentraedi fueron secuestrados por los maestros de la Robotecnia e iniciaron una serie de experimentación genética que años más tarde logró modificar la psique de los individuos para así formar guerreros que solo tenían el propósito "pelear y morir" nuestros verdaderos ancestros se extinguieron y lo que ustedes conocieron son como bien lo saben copias de un molde hecho a la medida y conveniencia de los conquistadores.
Pero el universo siempre busca el balance y aunque existía una gran amenaza por parte de los Maestros de la Robotecnia no tardaron en aparecer individuos que comprendieron que el universo no debía pertenecer a civilizaciones tan malévolas e hicieron su esfuerzo por detener una inminente guerra intergaláctica, Zor uno de nuestros principales líderes en la lucha por la libertad de las civilizaciones incendió la chispa para evitar que los maestros de la robotecnia poseyeran uno de los mayores poderes de la galaxia, las flores de la vida. Estas flores son entes capaces de dar vida, de generar poder, de transformar y de dar ventaja a quien las encuentre, durante miles de millones de años estuvieron ocultas en un planeta recóndito, olvidado por las grandes civilizaciones – la mirada de Excedore entonces se tintó de complicidad - ¿Puede adivinar Almirante Hayes en donde nacieron estas flores? – mi rostro pareció mostrar el shock que toda aquella revelación me causaba – Es correcto – afirmó Excedore sin que yo tuviera la necesidad de decir una palabra – La Tierra fue el lugar elegido para que naciera el mayor poder del universo y durante millones de años las flores de la vida existieron mucho antes de que su planeta tuviera siquiera la capacidad de albergar vida.
Entonces casi por destino fueron descubiertas por un tipo de civilización no corpórea que buscaba de forma desesperada la evolución hacia la deidad, los Haydonitas sin pensar en las consecuencias se llevaron todas las flores de la vida y las llevaron a diversos planetas para extraer su poder hasta dejarlas sin vida. Zor nació en Tirol el planeta al que nos dirigimos y convencido de que debía evitar que los maestros de la Robotecnia hicieran uso de un poder tan grande decidió esconder la última flor de la vida robada por los Haydonitas, convocó a zentraedis leales a su causa que lograron despertar de la programación mental y secretamente empezaron a construir una nave poderosa– El sdf1 - murmuré – doble acierto Almirante – sonrió Excedore – Zor implantó la última flor de la vida en uno de los motores de la nave y se dirigió hacia la Tierra para poder regresarla a su lugar de origen, pero en la historia hemos aprendido que no todo sale como lo planeado y en el camino fue atacado por los Invid, civilización enemiga de los maestros de la robotecnia interesada en conquistar la galaxia. Durante la lucha dos de los lideres zentraedi fueron heridos, el Comandante en jefe de la flota Dolza y el Comandante Bretaii quienes tuvieron que escapar para evitar la muerte, en un último intento de Zor por hacer cumplir la misión activa los sistemas de transposición y envío al Sdf1 hacia la Tierra

- ¿Qué paso con Zor? – pregunté intrigada – Murió, pero se sabe que su cuerpo fue recuperado y enviado a los maestros de la robotecnia - respondió Excedore
- A partir de esta explicación creo que usted Almirante Hayes comprenderá nuestra conducta y la guerra que declaramos a la Tierra – acotó Bretaii
- Pero esa flor jamás fue vista en el Sdf1 – aseguré – yo recorrí la nave de pies a cabeza y jamás se reportó su existencia
- La fuerza de la flor de la vida no está en su presencia física – intervino Lang
- ¿Tú sabias todo esto? – le pregunté de forma molesta
- No con tanto detalle, pero desde que el Sdf1 arribó a la Tierra supimos que una fuerza superior estaba en la nave, nuestra evolución tecnológica avanzó miles de años a partir de ese incidente
- La flor de la vida por alguna razón no ha crecido de manera física pero estamos seguros que está ahí dentro de la nave - agregó Bretaii
- Ya no queda nada del sdf1 – confirmé – solo queda chatarra al fondo del lago Memorial
- La fuerza está ahí y ha estado dando señales de que muy pronto florecerá – confirmó Excedore
Me puse de pie confundida por el vuelco que tomaban las cosas a partir de esas revelaciones – No entiendo – dije frustrada – Si su objetivo era regresar la flor de la vida a la Tierra y esta llegó ¿por qué nos atacaron? -
- Por que detectamos que los maestros de la robotecnia y los Invid estaban moviendo sus flotas para recuperar la última flor, en ese momento y a nuestro entendimiento no había raza que pudiera proteger mejor el poder de la flor que nosotros – explicó Bretaii – Para Dolza y para mi, ustedes como humanos eran individuos que estorbaban en la misión, más aun cuando vimos que se habían apoderado de la nave para sus propios beneficios
- Le aseguro que jamás imaginamos todo esto – me defendí como si me hubieran culpado a mi y a toda la humanidad de un robo – Si yo hubiera sabido de la importancia del Sdf1 lo habría entregado y estoy segura que el Almirante Gloval hubiera hecho lo mismo
- No la estoy culpando Almirante Hayes – afirmó Bretaii
- ¿Entonces por qué nos están diciendo todo esto? – pregunté un tanto desesperada – Nuestra misión aun con estos hechos sigue siendo la misma ¿no es así? – mire a Bretaii – Llegar a Tirol para intentar establecer relaciones de Paz con los maestros de la robotecnia

Los maestros de la robotecnia ya no están en Tirol – dijo de forma seria – Han empezado a mover su flota hacia la Tierra para ir en busca de la última flor de la vida

- Los Invid también han iniciado su movilización- agregó Excedore

Sentí como si un balde de agua fría me cayera encima, mi mirada pasó de los ojos de Bretaii a los ojos tensos de Rick, Miriya y Max, esa noticia cambiaba todo, nuestra misión, nuestro esfuerzos y sobre todo nuestras esperanzas por evitar otra guerra; llevé mi mano hacia mi cabeza tratando de controlar el nerviosísimo que se había apoderado de mi

– Dejamos a la Tierra sin armamento – dije con voz dura – ¡Saqué los mejores recursos del planeta por que se supone que la mayor confrontación la tendríamos nosotros! – estallé
Rick al igual que yo tuvo que luchar con la tensión en su mirada, Miriya bufó algunas palabras en zentraedi para segundos después ponerse de pie para caminar de un lado a otro
- ¿Cuánto tiempo tardaríamos en regresar a la Tierra? – preguntó Rick a Lang
- Esa no es la misión del Sdf3 General Hunter– respondió Excedore en tono conciliador
- Si los maestros de la robotecnia ya no están en Tirol nuestro deber es ir hacia la Tierra y defenderla – aclaré intentado controlar la molestia que empezaba a recorrer mi cuerpo - No me quedaré aquí cruzada de brazos sabiendo que nuevas flotas enemigas se dirigen a la Tierra, perdóneme Comandante Bretaii pero bajo estas nuevas circunstancias mi nave no puede quedarse en su flota
- Entiendo su preocupación Almirante, pero aun con la ausencia de los maestros de la robotecnia y con la noticia de que dirigen hacia la Tierra, debemos continuar con nuestra misión – concluyó Bretaii
- ¿Y cual es? – pregunté desafiante – Me acaban de explicar que una fuerza mayor está en la Tierra y que los peores enemigos van en camino para conseguirla, ¿que misión podríamos tener en este panorama?
- Sobrevivir – contestó Miriya del otro lado del salón – La misión de esta nave es sobrevivir – finalizó con una voz llena de tristeza
- Cuando hablé con el Almirante Gloval sobre la planeación de esta misión el conocía toda esta información que yo les estoy dando, el primer objetivo de la materialización de esta flota era entablar negociaciones con los maestros de la robotecnia, si estos rechazaban esta petición y siempre consideramos que la probabilidad que lo hicieran era muy alta, el segundo objetivo era luchar y empezar un alianza de los humanos, zentraedis y cualquier otra raza que desee recuperar su libertad robada por los invid o los maestros.
- ¿Por qué el Almirante Gloval nunca me dijo nada de esto? – dije sintiéndome un tanto traicionada
- Por que Gloval sabía que jamás dejarías la Tierra sabiendo el peligro que correría – respondió Lang mirándome a los ojos – Gloval sabía que la única manera de asegurar sobrevivencia para nuestra raza era sacándola de la Tierra, tu misma lo sabes – me aseguró provocando que mis ojos se llenaran de lágrimas – sabíamos que esta misión no sería fácil y ahora más que nunca debemos mantenernos firmes y continuar aun pese a estas noticias – finalizó Lang
- Sabemos que Tirol ya ha sido invadida y tomada por uno de los regentes Invid – agregó Bretaii – Tirol tiene recursos importantes, por eso los Invid lo aseguraron en su bando, es de suma importancia recuperar el planeta, si en el futuro viene una guerra con los maestros de la robotecnia tener a Tirol nos dará ventaja

Lleve mis manos hacia mi frente tratando de asimilar las nuevas circunstancias de nuestra misión - Comprendo que esta información modifica sustancialmente el ánimo con el que se continuará con la misión - la voz de Exedore sonaba sumamente comprensiva

- No creo que si quiera lo comprendan - respondí con un tono de molestia que no logre disimular - la seguridad de la Tierra acaba de caer sobre mis hombros, no puedo quedarme sin hacer nada.

Nadie ha dicho que nos quedemos cruzados de brazos Almirante - interrumpió Bretaii - daremos nuestra lucha desde el lado que nos toca, de eso se trata esta misión

- No puedo pensar en estar aquí mientras la Tierra corre peligro - confesé sintiendo una verdadera contradicción en mis decisiones

- Los maestros de la robotecnia tardaran en llegar, no se aventuraran a una invasion sin la seguridad de tener una flota que les garantice ganar la guerra, tienen encima a los Invid y no harán movimientos en vano

- Tenerlos a ustedes nos da una enorme ventaja en la carrera Almirante - afirmó Bretaii - su civilización ha permanecido oculta durante tantos miles de años que son totalmente desconocidos por las fuerzas enemigas, son impredecibles en muchos aspectos, pueden parecer débiles pero tienen un temple de acero que los empuja a ganar batallas -

- Tenemos una misión importante para ustedes - afirmó Excedore - debemos liberar de las fuerzas invid a los Sistemas Praxis y Fantoma -

- Tenemos perfectamente estudiado la posición del enemigo, y con ustedes al frente de la lucha estamos seguros que lograrán liberar cualquiera de los puntos necesarios para fortalecer la fuerza de nuestra flota - finalizó Bretaii

Aquella reunión había cambiado la dirección y el enfoque de la misión en solo un par de horas, la sensación de responsabilidad por regresar a la Tierra de inmediato para intentar protegerla de los maestros de la robotecnia era fuerte, pero también tenía que aceptar con frialdad las consecuencias de esa decisión, si perdíamos la guerra la raza humana llegaría a su fin y todo el tiempo, recursos y esperanzas puestas en el sdf3 habrían sido en vano.

Lleve mi mano hasta mi cabeza para controlar la jaqueca, ese era precisamente el peso de comandar la nave, tomar decisiones que no sabía si serían las correctas - Iremos al sistema Fantoma - determine. A mi lado Rick pareció apoyarme, fueron Max y Miriya los que parecieron ligeramente decepcionados y abatidos por esas nuevas revelaciones a nuestra misión y yo entendía perfectamente por que.

Regresamos al sdf3 en silencio, seguía analizando cada opción posible, dividir la flota, regresar a la tierra y defendernos como ya lo logramos hace unos años, incluso consideré la posibilidad de pedir a Bretaii una parte de su flota para que fueran a proteger la Tierra, pero si los maestros eran tan poderosos como decían de nada serviría.

Al llegar al hangar Lisa tuve la necesidad de hablar con Miriya - ¿Puedo hablar contigo? - ella hizo un gesto afirmativo

- ¿estás decepcionada por mi decisión?

Miriya como pocas veces parecía estar luchando para no dejar salir sus viejas costumbres como zentraedi, había adoptado tanto la cultura humana que a veces se olvidaba que ella no era igual a nosotros - cuando conocí a Max me enfrente a una serie de sentimientos que me hicieron muy vulnerable - se sentó en una de las bancas del hangar - pero cuando Dana nació todos mis temores se materializaron, de pronto me enfrente al mayor miedo de mi existencia...perderla -

Trague saliva sabiendo perfectamente a que clase de sentimientos se refería, los hijos se volvían una preocupación constante desde el momento que nacían, tome su mano y la miré, no como Almirante de la flota sino como su amiga - Si lo deseas tienes mi autorización para dejar la flota y regresar a la Tierra- entonces por vez primera vi a Miriya llorar - De qué sirve que regrese si yo sola no podré protegerla - me acerque para abrazarla como Claudia lo hacía cuando yo necesitaba apoyo - Lo correcto es continuar con la misión- dijo mas calmada - la única oportunidad que tengo para protegerla es lograr que esta misión logre detener el avance de la flota enemiga.

- Yo haré todo lo posible para que esta flota cumpla su misión- apreté su mano - te lo juro.

Nos volvimos a abrazar fuertemente, y nos despedimos cuando Rick y Max se aproximaron luego de poner en orden algunas cuestiones en el hangar.

Cuando llegamos a casa Roy ya estaba dormido, despedimos a la niñera y nos cambiamos para cenar algo ligero. Ambos estábamos particularmente callados

- Tengo que empezar a trabajar en estrategias de combate para enfrentar a los Invid - comentó serio - hablé con Excedore, hay mucho que aprender sobre ellos para poder enfrentarlos

Me quedé callada sabiendo perfectamente hacía donde iría esa conversación - ¿planeas ser parte de los grupos activos de combate? - pregunte incrédula y un tanto molesta

- Es mi lugar - respondió serio

- ¿Hace cuanto que no eres parte de un grupo de combate? - le recriminé

- No me pidas que me quede dentro de la nave mientras envío a mis hombres a pelear -

Apreté mis labios finamente y recordé nuestra crisis unos años atrás, aunque fuera difícil para mi, tenía que dejarlo volar, así como mi lugar estaba dentro de la nave, su lugar estaba al frente de los escuadrones igual que Max y Miriya.

Tome su mano y la apreté fuertemente - parece que volveremos a las andadas Skull - Rick sonrío y me atrajo para poder besarme - Siempre te estaré cuidando Delta

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Tardaríamos seis meses en llegar al sistema Fantoma, y lo que nos esperaba no sería fácil de enfrentar. El planeta estaba tomado por una flota de invid, que era controlada al igual que toda la raza por la Regis. Luchar con ellos requeriría de estrategia e inteligencia, a diferencia de los zentraedi que se movían como entes únicos, los invid eran controlados por una misma mente, trabajaban y se movían en conjunto lo que los hacía difíciles de aniquilar.

Nuestras fuerzas aéreas empezaron a ser capacitadas y entrenadas por zentraedis que llevaban años en guerra contra los invid, pasar su conocimiento requirió de un entrenamiento intenso que mantuvo a Rick y a todos los pilotos de la flota aprendiendo una nueva forma de luchar.

Durante esos meses me di cuenta de lo poco que conocíamos de la historia del universo; éramos una raza privilegiada que pasó miles de años oculta fuera de las guerras intergalácticas que otras razas llevaban enfrentando por cientos de años.

- Admiro su valor Almirante - dijo sincero Bretaii en una de las sesiones de vídeo conferencias que teníamos en donde hablábamos de nuestra preparación a la primera misión del Sdf3 - enfrentarse a lo desconocido no es fácil- acotó- recuerdo la impresión y terror que tuve cuando los tuve prisioneros en mi nave - sonreí al recordar aquellos hechos - y ahora la veo a usted valiente y fuerte y no puedo imaginar a una persona más capaz para liderar su flota

- Me mueven los ideales de personas que lucharon antes que yo- dije segura - y mientras yo esté al frente haremos hasta lo imposible por ganar nuestras batallas

Una noche el turno se alargó más de lo debido, Rick había pasado varias noches en los simuladores, decidí ir a encontrarlo al terminar su entrenamiento - Hola Piloto - le dije cuando salió de la cabina, se notaba cansado - Almirante, espero no estar en problemas- dijo antes de acercarse para besarme a manera de saludo - Necesitaba alejarme un poco de la tensión - Rick me abrazo sabiendo que la cercanía con el sistema Fantoma significaba encontrarnos de nuevo cara a cara con la guerra - Estaremos bien- me aseguró- nuestros records en simuladores son bastante decentes

- Son simuladores - aclare - un error aquí no te cuesta la vida - dije reconociendo que parte de mi estrés se debía a enfrentar que Rick volvería a combate

- ¿por qué ya no tienes confianza en mi? - dijo en tono de reclamo - era un novato cuando estuve en el sdf1

- No es igual - me defendí -

- Lisa tenemos mejor armamento, nuestros cazas son máquinas poderosas, nuestras condiciones son mil veces mejor - se defendió- si crees que mis años en Tierra me restaron experiencia puedo demostrarte... - lleve uno de mis dedos hasta su boca para evitar que siguiera hablando

- No eras el centro de mi vida - confesé- todos creen que soy valiente, pero tengo terror de que algo te pase, ¿que hare?¿que pasará con Roy?

Rick me abrazó para mecerme suavemente - Confía en mi - me pidió-

- Ya no seré tus ojos - dije melancólica - tendré que estar en la silla de comando viendo cómo luchan

Tomo mi rostro entre sus manos y me miró con una ferocidad pocas veces vista - Tu eres nuestra cabeza, así como la Regis controla a los invid, tu dirigirás a tu flota y a tu nave para hacer que nos movamos en las direcciones correctas - me abrace a él y trate de llenarme de confianza.

Faltaban 72 horas para llegar al sistema Fantoma.

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Los preludios de una batalla siempre son difíciles de encarar, el aire del ambiente se vuelve pesado, las posibilidades de fracaso se exponencian a medida que los miedos intentan controlar nuestra concentración. Pero todos los que estábamos ahí nos unía un mismo propósito, defender lo que consideramos nuestro hogar. Contrario a lo que podía esperarse, yo me sentía sumamente confiada en las capacidades de mis oficiales y de la nave en la que estaba parada.

- Que el sector médico esté listo para recibir heridos- ordene provocando que algunos oficiales salieran de la confianza que sentían ante la batalla - siempre hay que estar listos - comenté sabiendo de primera mano que en cualquier batalla la muerte siempre es una posibilidad- Iré al hangar Comandante Stewart -

- Estaremos listos cuando regrese Almirante

Las miradas curiosas de los oficiales que se cruzaban conmigo me dejaban clara la sorpresa de verme ahí, me saludaban formalmente y continuaban su camino hacia sus puestos de control. Cuando llegue al hangar me sorprendió la calma en la que estaban los pilotos, parecía que estaban por reunirse, empezaron a juntarse alrededor de alguien, me sentí conmovida cuando descubrí que era Rick quien los estaba concentrando.

Ahí estaban los escuadrones más emblemáticos de la guerra Robotech, la mayoría eran soldados nuevos; sus líderes eran veteranos, héroes vivientes que habían pasado a la historia y que inspiraban a todos esos nuevos pilotos que portaban con orgullo los emblemas de su escuadrón.

En el hangar eran hermanos, estaban unidos por un mismo propósito y eso se sentía en el ambiente.

- ¿Quienes están aquí? - gritó Rick

- ¡El Bermellón! - contestaron Max y Miriya

- ¡El Ghost!

- ¡El Wolf!

- ¡El Indigo!

- ¡Antara!

Uno a uno se presentaron todos los escuadrones, alineándose a un solo ánimo de triunfo

- ¡El Skull! - gritó Rick - ¿y quien nos cuidará?

- ¡todos! - contestaron al unísono

Me sentí bastante conmovida, Rick estaba en su lugar, de eso no me quedaba duda. Camine hacia el centro del hangar, y Rick pareció llenarse de felicidad por verme ahí.

Fue hasta ese momento que noté las diferencias entre el piloto que conocí con el que tenía en frente de mi, había embarnecido bastante desde sus años en el Sdf1, su traje de vuelo se pegaba a los músculos de sus brazos y abdomen dejándome ver el excelente estado físico en el que se encontraba. La insignia del Skull bordada en blanco en el lado derecho de su corazón contrastaba con el negro de su traje - Hola piloto - le saludé militarmente sabiendo que ahí nuestro papel oficial regía nuestra relación

- Almirante Hayes - Saludo de regreso

Lleve mi atención hasta su nuevo Alpha Varitech, era dos veces mas grandes que los que usaban en el sdf1, además de los escudos protectores, cargaban tres veces más armamento que las primeras generaciones y eran capaces de volar en el espacio profundo hasta 72 horas, las líneas curvas mostraban el diseño novedoso que caracterizaba el estilo del Dr. Lang, al final en la cola del VT estaba el emblema de escuadrón Skull, y me sentí sumamente orgullosa de tenerlo a bordo de mi nave

- No los había visto tan de cerca - dije rozando una parte de su fuselaje - son enormes

- Son maquinas de combate - afirmó Rick

- Por lo que costaron me sentiría decepcionada de que no fuera así- bromeé

- Quería venir personalmente a desearte buena suerte - dije intentando mantener mis sentimientos en control - Tenias razón, tu lugar está aquí

- Gracias Lisa - respondió sincero - ¿estará muy fuera de lugar que te bese aquí? -

Sonreí - Guardémoslo para cuando estemos solos - respiré profundamente y le dirigí una venia llena de respeto - Buena suerte General Richard Hunter, es un honor tenerlo al frente de nuestras fuerzas de defensa

Como pocas veces, mi piloto, mi esposo, mi compañero de vida sonrió satisfecho - El honor es mío Almirante Hayes -

Salí del hangar caminando con la frente en alto, la silla de comando del Sdf3 me esperaba para dirigir mi primer batalla.

Justo como lo predijo Bretaii ninguno de los sistemas de monitoreo de la flota Invid detectó nuestra llegada a Fantoma. El Sdf3 se había posicionado en en punto más cercano del satélite artificial donde se resguardecia la primera linea de defensa de la flota enemiga; encendimos nuestros escudos de defensa mientras los oficiales del puente calculaban la distancia y tiempo exacto en el que nuestros varitechs tardarían en llegar al satélite para iniciar el ataque.

El plan consistía en tomar el control del satélite artificial que orbitaba al planeta Fantoma, en donde se calculaba había uno medio millon de Invid. Una vez lográramos tener el control del satélite enviaríamos las fuerzas aéreas y de infantería al planeta para iniciar con la liberación.

- Escuadrones listos para salir - informó Rick por la radio general del puente - Iniciaremos ataque en la parte posterior del satélite

- Enterado líder Skull - respondió Dany - Mucha suerte

Apreté fuertemente el riel de comando observando como nuestros cazas salían del hangar en dirección al satélite - Primeros impactos en cuatrocientos metros - informó Dany

Respire profundo cuando los cazas iniciaron con las detonaciones masivas hacia el satélite, en cuestión de minutos la horda de Invids empezó a salir y la sensación fue sobrecogedora. Eran cientos, y como lo habían explicado Bretaii y Excedore se movían y atacaban como un enjambre de abejas.

Los primeros minutos fueron de contención, los escuadrones parecían estar entendiendo y adaptándose al sistema de ataque del enemigo, apretaba mi mandíbula cada que observaba como la horda parecía tragar a los varitechs y soltaba el aire cuando los veían emerger luchando por sobrevivir a la batalla.

- Armor 9 - prepárese para salir, lado norte del satélite se encuentra sin defensa

- Preparados y listos- informó la tripulación de la nave de ataque

Como Rick me lo dijo días antes, los Varitech Alphas eran máquinas de guerra, nada tenían que ver con la primera generación de cazas que llevábamos a bordo del sdf1, y en manos de pilotos como Rick, Max o Miriya eran letales, poco a poco empezaron a ganar terreno sobre los invid.

- Confirmamos inicio de bombardeo y ocupación al satélite- informó el Comandante de Armor 9 - parece que le dimos a la colmena, están saliendo más - informó-

- Escuadrones prepárense para recibir nuevos grupos de ataque - informó Dany - se mueven en dirección norte, los tendrán en frente en cuatro minutos.

Me quede observando a mi ex-asistente y comprobé con orgullo que ella también estaba en su lugar, en esos primeros minutos de enfrentamiento estaba demostrando una eficiencia y audacia para dirigir a los escuadrones mucho más fina que yo en mis tiempos en el sdf1.

Ese primer combate se alargó más de lo que teníamos planeado, los Invid eran células difíciles de separar, pero una vez que se lograba derribarlos era más sencillo . Luego de un par de horas logramos la ocupación del satélite y las hordas de Invid que quedaban en batalla se retrajeron al planeta.

- Ingresaremos al satélite- informó Rick a través de la pantalla principal - se notaba sudoroso

- Enviaremos otro Armor con refuerzos - dije aliviada por verlo sano y salvo- manténganse alerta por favor

Aunque el primer Armor había sido enviado con una treintena de hombres, quise estar segura de que tendrían suficientes elementos disponibles en caso de alguna contingencia y ordene enviar un segundo Armor con setenta soldados de infantería que se quedarían a resguardar el satélite.

Me permití sentarme unos momentos, los oficiales de la central de comando parecieron relajar los hombros, habíamos librado la primera batalla con relativamente pocos daños y por fortuna ninguna baja humana.

Salí del puente en dirección al hangar, aunque habíamos completado exitosamente la primera etapa de recuperación de Fantoma, aún no podíamos cantar victoria, estaba segura de que la Regis ya se encontraba re agrupando a su ejercito, encontré a Rick a mitad de camino, iba acompañado por Max y Miriya; en cuanto lo tuve cerca tuve la necesidad de abrazarlo para dejar salir la preocupación que estuve acumulando mientras estuvo en combate - Creo que tendremos que darte unas píldoras para la ansiedad Almirante - dijo Miriya en tono divertido

- Había olvidado la incertidumbre que se vive cuando están afuera - dije verdaderamente aliviada de que estuvieran bien

- Estaremos bien cariño- dijo Rick antes de tomarme de la mano para continuar el camino hacia la sala de reuniones

- ¿Cómo fue el primer encuentro con los invid? - pregunte ansiosa

- Cuesta trabajo adaptarse a su forma de ataque, pero una vez que se piensa en ellos como conjunto es más fácil enfrentarlos - contestó tranquilo

- Son bastante inútiles cuando se separan - comentó Miriya despreocupada

- ¿cuando bajaremos al planeta? - preguntó Max

- En cuanto estén listos para salir de nuevo, seguramente en estos momentos ya están re agrupándose

- da orden de salida en cuatro horas - pidió Rick - me pone nervioso darles más tiempo del necesario.

- Vayan a descansar, regresaré al puente -

- Tu también tienes que descansar-

- No podré hacerlo hasta que toda la operación termine - le di un beso calido a Rick - hable con la niñera, Roy ya debe estar dormido - dije con un dejo de culpa - dale un beso de mi parte -

Cuando llegue al puente el cambio de turno ya se había hecho, y no me sorprendió encontrar a Dany esperándome con una taza de café - Ve a descansar Dany - le dije agradecida bebiendo el primer sorbo, ella sacó otra bolsa - pedi también la cena - Sonreí

- Si voy a mi barraca no podré dormir - aseguró dando un buen mordisco al hotdog - ya podré descansar cuando termine la misión

- ¿Se ha reportado el personal en el satélite?

- Cada hora - alcanzo a decir con la boca llena

Comí casi a regañadientes, el silencioso del turno nocturno hacía que uno pusiera más atención a los monitoreos del puente, de ratos volteaba a ver a Dany que cantaba para si misma con sus audífonos puestos, todo parecía en orden y yo no podía quitarme la sensación de preocupación; caminaba varias veces hacia las consolas generales y verificaba una y otra vez los datos, los oficiales me veían de reojo con la tensión que les provocaba mi presencia en sus áreas de trabajo.

Luego de un par de horas, me senté y deje que mis ojos descansaran un poco; dormite, y entre sueños escuche una voz no humana que me amenazaba y que me afirmaba que destruiría a toda mi flota; abri los ojos abruptamente cuando un impacto cimbro a la nave

- Alerta roja, alerta roja, tenemos naves enemigas aproximándose a nosotros por la parte frontal y posterior de la nave - informó el oficial de perímetro de defensa

- Escuadrones primarios y secundarios prepárense para salir, esto no es un simulacro - ordenó Dany - battledroids y armas perimetrales manténganse listos

- Escudos listos

- Contacten al personal del satélite que se preparen para ataque - ordené preocupada por los soldados que estaban fuera de la nave -

En minutos los escuadrones empezaron a salir para enfrentar a los enjambres de invids que intentaban acercarse a la nave - Calculen distancia hacia la nave más próxima- ordené- inicien protocolos para disparar el arma principal.

Por la radio general Rick se reportó, estaba por salir con su grupo acompañado de Max y Miriya, aprete la mandíbula para controlar mis nervios

- ¡Van a disparar! - informó uno de mis oficiales

- Escudos listos - confirmó Dany - impacto en treinta segundos

Sostuve la respiración y aprete el riel de la baranda cuando una ligera vibración se sintió en la nave

- Impacto confirmado, no tenemos daños en la superficie

- Preparen los escudos secundarios - ordené- volverán a disparar - Comandante Stewart inicie cuenta regresiva para disparar

- Potencia lista al noventa por ciento, escuadrones aléjense del perímetro- ordenó

- ¡Disparen! - ordené

El rugido y la potencia que movió ligeramente la nave me dejó clara la fuerza que teníamos en el Sdf3

- Impacto exitoso - confirmaron

Me sentía preocupada, estaba claro que los invid estaban impidiendo a toda costa que nuestros grupos de combate se alejaran del perímetro próximo de la nave, era como si estuvieran evitando que nos dispersáramos

- Armor 1 y 9 están solicitando apoyo

- Mandaremos ayuda en cuanto nos sea posible -

- ¡Almirante, detectamos señales de transposición! - me acerqué a la consola del Teniente observando la ubicación de las naves

- Nos están rodeando - confirme - Que estén listos los escudos primarios y secundarios, preparen las armas principales frontales y posteriores

- ¿y los Armor? -

Apreté los labios en una fina línea- tendrán que aguantar -

El puente cayó en un silencio producido por el temor del ataque que se nos venía encima, no nos quedaba mas opción que luchar y poner a prueba las capacidades de la nave

- Responderemos de inmediato a cada disparo del enemigo - dije mientras analizaba la situación - que los equipos médicos de emergencia estén listos, tendremos heridos

Dany se tornó preocupada - Si disparan las cuatro naves dos veces seguidas, no tendremos capacidad de respuesta para atacar y para tener los escudos listos par proteger la nave

- Entonces tendremos que hacer que cada disparo nuestro valga la pena- conteste

Observe por la pantalla principal del puente la batalla, nuestros escuadrones igual que siempre hacían lo imposible por contener las hordas invid, intente inútilmente ubicar al Skull, pensé en Rick y recordé sus palabras, cada uno de nosotros daríamos nuestras lucha desde donde nos tocaba, el protegiéndonos desde fuera y yo haciendo mi trabajo desde dentro. Me erguí sobre el asiento de comando - Prepárense para impactos continuos- dije - le demostraremos a la Regis lo que puede hacer el Sdf3

La nave en la que estaba parada era la suma de los esfuerzos de mucha gente, y yo estaba determinada a no decepcionarlos, en mi mente las palabras de Miriya se repetían una y otra vez "sobrevivir", "la misión del SDF3 era sobrevivir"

Y sobrevivir significaba saber reconocer cuando las probabilidades de éxito iban en contra, y durante esos primeros momentos de enfrentamiento tuve que reconocer que en esa lucha estábamos de lado de la planicie más baja; tragué saliva escuchando los reportes del sobre calentamiento de los sistemas debido a los disparos continuos, aunque habíamos logrado impactar dos naves, teníamos aún una al frente y otra en la parte posterior de la nave.

- Los sistemas de disparo presentan sobre calentamiento

- Los escudos primarios y secundarios reportan una baja en la efectividad de protección de un sesenta por ciento

- Los escuadrones reportan bajas

- Armor 1 y 9 reportan estado de emergencia

Apreté los puños, tenía que sacarnos de ahí y solo había una opción viable- que regresen todos los escuadrones- ordené provocando que los controladores giraran para verme

- Ambas naves se preparan para disparar de nuevo

- ¿tenemos energía para un disparo mas? -

- Solo En el cañón frontal - contestó Dany nerviosa

Mire por unos segundos la gigantesca pantalla marcando puntos rojos en los sistemas de protección de la nave, seguiamos intactos pero no sería por mucho tiempo, nos estaban rebasando, mi atención se fue al satélite, observando y escuchando como los soldados del Armor 1 y 9 seguían pidiendo ayuda y les pedí perdón - Comandante Stewart inicie sistemas para transposición -

Dany me volteo a ver incrédula - Almirante no tenemos tiempo suficiente ubicar una zona segura -

- ¡hágalo! -

- Impacto en dos minutos - informó otro oficial

- Haremos un salto a ciegas - dijo Dany desesperada

- ¡Es una orden Comandante Stewart! - grité molesta -

Segundos después nuestro último disparo golpeó la nave que teníamos en frente, no sin antes ser fuertemente sacudidos por un impacto en la parte posterior de la nave que hizo que varios de los oficiales gritaran al unísono, me agarré del barandal sintiendo los sistemas transposicionales encenderse; cuando la operación terminó perdimos la energía, en el puente se mezclaban las alarmas de emergencia y los llantos de algunos oficiales que parecían estar pasando por una crisis nerviosa.

La energía se restableció unos minutos después, Dany estaba sumamente pálida - Envíen los equipos de emergencia al area de impacto - dije rápidamente - quiero el reporte de daños en cuanto regrese

Salí sumamente preocupada, las manos me temblaban y las pulsaciones de mi cuerpo eran aceleradas, rezaba como otras veces en que el miedo por haberlo perdido me cubría por completo, al llegar al hangar pude respirar de nuevo, Rick parecía estar coordinado sus escuadrones, cuando su mirada se encontró con la mía, la encontré llena de molestia y reproche.

- ¿por qué hicimos un salto transposicional?

- Era la única forma, nos tenían rodeados - me excuse - la nave estaba llegando al límite

- ¡Abandonamos a mis hombres en el satélite! - gritó molesto - no resistirán, tenemos que regresar

Me di la vuelta escuchando como Rick maldecía y decía varias cosas que honestamente no me concentraba en escuchar, estaba preocupada por la zona que habían impactado en el SDF3 - ¿a donde vas? - preguntó cansado de perseguirme

- Ponga en orden su hangar General, tengo que ver a Lang

Cuando llegue a la central de monitoreo me encontré con el rostro preocupado de Lang y pude, solo con ese gesto confirmar mi temor

- Dañaron los sistemas de transposición - confirmó con cierta molestia - ¿como pudiste permitir que hicieran un salto tranposicional sin tener ubicada un área segura? -

Exhale y busque apoyo en una de las mesas - Yo lo ordené- dije asumiendo la gran carga que se me venía encima

- Puedes reparar los sistemas de transposición- me defendí

Lang bufó - ¿Lo repararemos y hacia donde iremos? - dijo en tono de reclamo - Estamos perdidos Almirante

Me quede callada sintiendo el peso de mi decisión, Lang tomó asiento en uno de los bancos e hizo un visible esfuerzo para tranquilizarse - tenemos toda la tecnología a bordo para reparar cualquier parte de la nave - me explicó más calmado- y verdaderamente eso no me preocupa- llevo sus manos hacia su cabeza observando su tableta digital- en la computadora principal de la nave esta cargado el cuarenta por ciento del mapeo del espacio conocido, el otro sesenta por ciento se desconoce - levantó su mirada y la noté sumamente preocupada- el salto que ordenaste nos trajo a un punto de ese sesenta por ciento que no conocemos

Tragué saliva con dificultad - Estamos perdidos - dije materializando la gravedad de nuestra situación - Lo resolveremos- dije casi como un conjuro, dándome cuenta que no sólo habíamos fracaso en nuestra primer misión, si no que mi orden había llevado al Sdf3 a un lugar de donde no sabíamos si podríamos salir...

- Lo resolveremos Lang...- volví a repetir conteniendo las lágrimas en mis ojos - lo resolveremos...

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Notas de autor:

Me parece increíble que la última actualización a esta historia fue en 2017, confieso que llego a pasar por mi cabeza dejarla en el capítulo 35, pero siempre me quedó la espinita de que Memorias no debía terminar así, Lisa esta escribiendo sus recuerdos, así que vale la pena cerrar esta maravillosa experiencia como lo planee desde un inicio.

Llegar a este punto de la historia me conflictuaba mucho, no soy experta en las distintas líneas de tiempo que existen sobre Robotech, tanto de los centinelas, las novelas de McKinney, o las sagas de comics que se han publicado en varias ocasiones. Memorias esta desarrollada en hechos de la historia que conocemos, pero como se han dado cuenta he alterado varias cosas que para mi eran sumamente necesarios para contar esta versión ficticia de Robotech.

Así que debo aclarar que lo que sigue en esta historia tendrá tientes de algunos hechos de las secuelas, pero no irá marcado por la lineas de tiempo "oficiales" sera una aventura que intentará retratar y describir lo que fue para Lisa comandar al SDF3.

Aclarados estos puntos, les agradezco enormemente su tiempo de lectura.

Pasando a otros puntos ajenos a Memorias, agradezco también todos sus comentarios a las historias que he publicado recientemente, fueron una revolución, especialmente el one shot "Im not the only one" fue un reto a mi capacidad de sacar a Lisa de ese lugar perfecto en donde la tengo, es mi heroína y la de muchos, pero fue un buen experimento pensarla no tan perfecta y sujeta a cometer errores. Fue divertido

Gracias de nuevo y deseo que ustedes y sus familias se encuentren con bien, estamos pasando por un momento histórico, muy difícil pero estoy segura que nos está removiendo mucho lo que estábamos haciendo mal, como individuos y como sociedad.

Bendita pandemia que me orillo a escribir de nuevo jajaja

Les quiere,

Renee.