El Poder de la Risa
Light Nova seguía escondida, observando la batalla que su hermano Light Sun y Twilight estaban teniendo contra Eclipse.
Dawn: (¿Cómo van?).
Preguntaba la fénix de Light Nova. La alicornio asomándose un poco, la contestó.
Light Nova: Pues...Así así.
Poco después, aparecía volando Twilight donde chocaba contra la roca donde estaba escondida Light Nova. La joven alicornio mirando a Twilight, la preguntó a ésta.
Light Nova: ¿Cómo lo lleváis? ¿Queréis que os ayude?
Twilight algo aturdida se levantó y poniéndose de nuevo en guardia la contestó.
Twilight: No. Tú quédate aquí al menos que Light Sun diga lo contrario.
De inmediato Twilight volvió a la batalla, dejando sola a Light Nova donde la joven no podía evitar preocuparse tanto por su hermano como por Twilight.
Light Nova: Espero que no les pase nada.
Light Sun ahora con la Soul Calibur en su modo hacha, intentaba golpear a Eclipse donde el malvado alicornio chocaba su guadaña contra el arma de Light Sun.
Eclipse: Me hacéis gracia. Venís aquí creyendo que tenéis alguna posibilidad de ganar.
Hablaba con burla el alicornio negro. Acto seguido notó algo y se apartó bruscamente para esquivar un ataque de garra oscura lanzada por Twilight. Light Sun aprovechó para intentar golpearlo con su hacha ahora que tenía la guardia baja, logrando golpearlo y tirarlo contra el suelo.
Eclipse se levantó donde más que molesto, parecía casi encantado y sonriendo perversamente, comentó.
Eclipse: Ja, ja, ja. Nada mal. Creo que es la primera vez que lográis golpearme.
Twilight: ¡Y no será el único que recibas!
Contestó desafiante Twilight donde sus ojos empezaron a brillar con un tono blanco y acto seguido disparar un poderoso rayo oscuro de gran envergadura.
Eclipse bloqueó el rayo con su arma, siendo parcialmente arrastrado por la fuerza de ataque de la unicornio.
Light Sun apareció justo por detrás de Eclipse para atacarlo por la espalda.
Light Sun: ¡A ver cómo te defiendes ahora!
Alzaba fuerte la voz el hombre tigre donde trató de golpearlo con su hacha aprovechando que Eclipse no podía defenderse. Lejos de estar preocupado, el alicornio negro sonrió con malicia y ahí le contestó.
Eclipse: Je, je, je ¿Qué tal con esto?
Eclipse desapareció de golpe, provocando que el rayo siguiera hacia delante pillando a Light Sun por medio.
Twilight: ¡Light Sun!
Light Sun: ¡Arrea!
A toda prisa Light Sun se hizo a un lado donde por poco no le acierta el rayo, como mucho quemando algunos pelos del pelaje.
Light Sun rodó por el suelo para luego acabar apoyado de una rodilla en el suelo. Twilight preocupada por su amigo, se teletransportó a su lado para asegurarse de que estuviera bien.
Twilight: ¡Light Sun! ¿Estás bien?
Light Sun: Sí. Estoy bien.
Twilight: Lo siento. No pretendía darte a ti con el rayo.
Se disculpaba la unicornio con el hombre tigre. Light Sun asintiendo, la contestó.
Light Sun: Lo sé. No es culpa tuya. Ese Eclipse tiene muchos trucos guardados bajo la manga.
En ese instante, Light Sun percibió algo y envolviendo sus brazos en Armadura Espíritu, se interpuso por delante de Twilight y con sus propios brazos bloqueó el ataque de guadaña de Eclipse que había aparecido por sorpresa.
Eclipse: Nada mal. Muy pocos llegan a evadir mis ataques sorpresa.
Decía con arrogancia el alicornio negro con una sonrisa maligna mientras Light Sun trataba de mantener los brazos para evitar la guadaña negra. Twilight aprovechó para intentar atacar a Eclipse con varias garras oscuras que surgían alrededor.
Eclipse: Eso no os servirá ¡Groaaaaar...!
Rugió el alicornio donde liberó una intensa energía oscura que deshizo los ataques de Twilight. Light Sun y Twilight no pudieron evitar salir volando por la enorme cantidad de energía liberada por Eclipse.
Twilight: ¡Ahhhh...!
Gritaba Twilight donde tenía problemas para mantenerse en el aire pese a sus alas. Light Sun logró atraparla con sus brazos y aterrizar de pie como los gatos (vaya chiste XD) donde dejó a Twilight en el suelo.
Light Sun: ¿Estás bien, Twilight?
Twilight: Sí, pero ese monstruo es enormemente poderoso. No sé si seremos capaces de derrotarlo.
Contestaba Twilight donde sentía que sus posibilidad de vencer estaban bastante lejanas. Light Sun tratando de que Twilight mantuviera la esperanza, la respondió.
Light Sun: Podemos hacerlo, Twilight. Solo tenemos que aguantar hasta que nuestras compañeras logren derrotar a los portadores de las espadas y se unan a nosotros contra Eclipse.
Eclipse escuchando hablar a Light Sun, se puso a reír y ahí le comentó al hombre tigre.
Eclipse: Ja, ja, ja ¿En serio crees que esas inútiles podrán contra mis portadores de las espadas? A estas alturas ya estarán todas muertas.
Twilight: ¡No las subestimes! ¡Son mucho más fuertes de lo que crees!
Le contestó gritando la unicornio dragón con renovada fe en sus amigas. Su dragón la apoyó en eso.
Dark Slayer: (Cierto. Son más fuertes de lo que me imaginaba en un principio y todo gracias a los entrenamientos...Aunque el alicornio entrometido también ayudó con eso. Solo un poco).
Light Sun: Tus portadores de las Espadas de la Muerte caerán y tú te unirás a ellos.
Completaba desafiante el hombre tigre donde ahora convirtiendo la Soul Calibur a su modo escopeta, disparó una ráfaga potente de luz hacia Eclipse. El malvado alicornio haciendo girar su arma para desviar los disparos, respondió.
Eclipse: No si yo acabo antes con vosotros.
Dijo esto donde alrededor del alicornio se formó una aura oscura, haciendo temblar el suelo por ello. Acto seguido cargó contra Light Sun y Twilight donde estos se prepararon para combatirlo.
Mientra en otro lugar, Pinkie Pie apareció lo que parecía el interior de una escuela vacía y abandonada. Para ser más exactos, en el interior de un aula para potrillos pequeños.
Pinkie: ¿Cómo hemos llegado aquí?
Preguntaba confusa la pony rosa mientras miraba por todas partes. Riser estando igual de confundido que ella, la contestó.
Riser: (Pues...Ni idea. Esto no parece una pastelería precisamente).
En ese instante se escuchó una risa infantil que hizo eco en todo el lugar, donde sonaba perturbadora. Aquello puso en alerta a Pinkie Pie.
Pinkie: ¿Qué ha sido eso? Ha sonado como una risa, pero no una como las que a mí me gustan. Las risas como a mí me gustan son estás.
Y para platicar su ejemplo, Pinkie Pie empezó a reírse de la forma que solo ella sabe hacerlo. Luego volviendo a su semblante neutro, comentó.
Pinkie: Está claro que alguien no sabe como reírse.
La risa perturbadora volvió a sonar por el lugar.
Pinkie: Y para eso será necesario que yo, Pinkie Pie, busque a esa persona para enseñarla como se debe reír.
La pony rosa salió de la clase por la puerta que la llevó al pasillo. Todo estaba oscuro y silencioso donde resultaba perturbador.
Riser: (No sé por qué, pero este sitio me da muy mal rollo).
Comentaba el dragón de Pinkie Pie donde aquel extraño lugar lo perturbaba. Pinkie Pie miraba por todas partes donde podía ver colgados dibujos infantiles. Algunos estaban dibujados monstruos donde resultaban ser demasiado perturbadores para ser hechas por un niño. Ante eso, Pinkie Pie tuvo que darle la razón a su dragón.
Pinkie: Pues sí. La verdad es que este sitio da muy mal rollito...
La pony rosa seguía su camino sin darse cuenta de que los dibujos de monstruos empezaban a rodearles una extraña aura mágica, donde empezaron a crecer y cobrar vida propia. Los monstruos de todo tipo, siguieron silenciosamente a la pony rosa que parecía seguir sin darse cuenta de éstos.
Los monstruos estaba casi por alcanzar a Pinkie hasta que la pony rosa se la activó el Pinkie Sentido y se paró.
Pinkie: ¡Huy! ¡Mi Pinkie Sentido me está avisando del peligro!
Decía esto Pinkie Pie donde justo saltó hacia delante para esquivar la dentellada de un monstruo que intentó pillarla. La pony rosa dando la vuelta sacando su escudo, se puso en guardia.
Pinkie: Vaya. Monstruos hechos de dibujos. Que curioso.
Riser: (Y además siendo bastante feos todos ellos).
Los monstruos se lanzaron a atacar a Pinkie Pie. La pony rosa no asustándose por éstos, les dijo.
Pinkie: Lo siento, monstruos de dibujos. Pero no tengo tiempo para jugar con vosotros.
La pony rosa fue corriendo hacia ellos y esquivando los ataques de los monstruos, para luego golpearles con fuerza con su escudo. Cada golpe hacia que los monstruos se deshicieran como si fuesen borrados por una goma de borrar.
Pinkie: Si un dibujo no te sale bien a la primera, borrarlo y empieza de nuevo.
Bromeaba la pony rosa mientras un monstruo intentó atacarla por la espalda, pero Pinkie sin girarse, le golpeó a la cara con su escudo haciendo que se quedara con cara de atontado y luego borrarse.
Una vez todo en calma, la risa volvió a escucharse por la zona.
Pinkie: Otra vez esa risa. Está claro que hay quienes no saben como reírse de la forma correcta. Mejor seguir buscando.
Pinkie Pie siguió su camino hasta que llegó a lo que parecía el gimnasio.
Riser: (Esto parece el gimnasio).
Pinkie: Hay de todos. Pelotas, cuerdas, el potro, colchonetas. Je, je, je.
Comentaba alegremente la pony rosa donde saltó hacia una colchoneta y se puso a saltar en esta varias veces. Los balones empezaron a brillar y de ellas surgieron unas bocas dentadas y afiladas. Dichos balones con colmillos iban botando hacia donde estaba Pinkie Pie donde una vez más su Pinkie Sentido la alertó del peligro.
Pinkie: Que curioso. Mi Pinkie Sentido vuelve a reaccionar.
La pony rosa se giró y se sobresaltó al ver como unos balones con dientes saltaban hacia ella. La pony rosa saltaba una y otra vez sobre la colchoneta, haciendo volteretas donde esquivaba cada uno de los balones asesinos.
Pinkie: ¡Carai! Esa sí que es la clase de pelota que nunca querría jugar.
Decía la pony rosa donde de otro salto de bajó de la colchoneta mientras los balones asesinos iban hacia ella.
Pinkie: ¡Es hora de anotar un tanto!
Decía Pinkie Pie donde con su escudo, golpeaba a los balones asesinos donde los mandaba en varias direcciones y rebotar en varios lados. Uno acabó encestando en una canasta donde se escuchó el sonido de anotar un tanto y el marcador marcaba tres puntos.
Riser: (¡Tres puntos, colega!).
Exclamaba el dragón celebrando la puntuación. Pinkie Pie sonrió, pero los balones asesinos volvieron a la carga intentando morderla de nuevo.
Pinkie: ¡Eh! ¡Tiempo muerto! ¡No valen las mordidas!
Se quejaba la pony rosa donde ahora lanzó su escudo a modo de disco donde atravesó a varios balones para partirlos por la mitad. Rebotando en la pared, volvió con Pinkie Pie justo para partir en dos a un balón que intentó atacarla de frente.
Una y otra vez iba Pinkie Pie usando su escudo para destrozar los balones asesinos, así hasta que tras acabar con el último, el suelo estaba cubierto de restos de balones destrozados y Pinkie Pie recobrando el aliento.
Pinkie: ¡Por fin! Esta es la clase de juegos que no me gusta en absoluto.
Comentaba la pony rosa donde se sentía aliviada de haber terminado. La tranquilidad no duró demasiado cuando se volvió a escuchar la risa perturbadora por todo el gimnasio.
Pinkie: En serio. Esa risa ya da repelús oírla.
La pony reanudo su marcha y tras pasar por unas puertas, llegó finalmente lo que parecía el comedor. No había nada en especial hasta que su vista se centró en un gran pastel de cinco pisos con nata montada y galletas. Los ojos de Pinkie Pie brillaron de alegría al ver dicho pastel.
Pinkie: ¡Menudo pastel!
Rápidamente la pony rosa se puso enfrente de dicho pastel y toda emocionada, abrió enormemente la boca más que lista para comerlo, hasta que su Pinkie Sentido reaccionó.
Pinkie: ¡Oh, oh! Mi Pinkie Sentido.
Rápidamente la pony rosa pegó un gran salto con voltereta hacia atrás, justo a tiempo de esquivar una cuchillada que provenía del interior del enorme pastel.
Happy: Vaya. Y yo que esperaba poder rajarte un poco y adornar este pastel con tu sangre.
Se quejaba la yegua donde emergía del pastel y luego se limpió para quitarse restos del mismo. Pinkie Pie al ver a la asesina, se puso en guardia mientras exclamaba.
Pinkie: ¡Tú! ¿Qué rayos acabas de hacer? ¡Acabas de sacrificar un delicioso y rico pastel!
Happy: Cualquier cosa vale con tal de acabar contigo. Y no te quejes. No te imaginas lo que me costó hornear ese pastel y luego meterme dentro para sorprenderte en tan poco tiempo.
Contestaba la yegua mientras limpiaba su cuchillo de restos de pastel y de una patada tiró el plato de la tarta al suelo.
Sacidblood: (Bueno. Como se suele decirse. Si a la primera no logras rajarlo del cuello, vuelve a intentarlo. Je, je, je. Ahora matemos a esa pony de la forma más divertida posible).
La comentaba su espíritu de lobo a ésta, donde la yegua sonriendo de forma infantil como se escuchaba hace unos momentos por los pasillos, respondió.
Happy: Pues sí. Ja, ja, ja. Vamos a montar una divertida fiesta donde acabará con una gran y dolorosa muerte. Ja, ja, ja. Ya verás. Va a ser muy divertido. Habrá un montón de sangre por todas partes y toda será íntegramente tuya. Ja, ja, ja.
Se reía sin parar la yegua para luego desplazarse a toda velocidad para atravesar a Pinkie en el corazón con su arma. El Pinkie Sentido de la pony rosa la alertó y se apartó para evitar la cuchillada.
Happy creó varios puñales de energía donde las lanzó todas hacia Pinkie. La pony rosa corrió hacia los cuchillos y confiando en su Pinkie Sentido, las esquivaba todas con ágiles movimientos hasta llegar a la asesina y tratar de golpearla con su escudo. Ahí Happy volvió a desplazarse a alta velocidad para esquivar el ataque y luego reaparecer por detrás de Pinkie Pie. Una vez más el Pinkie Sentido de Pinkie la alertó y ahí realizó una doble fuerte patada contra Happy donde la mandó a volar para caer al otro lado del mostrador de comida del comedor.
Happy: ¡Eh! ¡Ya está bien! Deja de moverte tanto, que así no hay manera de atravesarte con el cuchillo.
Decía enfadada la yegua mientras se alzaba por detrás del mostrador, mostrando ésta estar muy molesta. Pinkie Pie con expresión de sarcasmo, la respondió.
Pinkie: Sí, claro. Para que me mates ¿No?
Happy: ¡Tú lo has querido!
Happy empleando sus poderes, elevó con su mente todos los cuchillos, cristales cortantes o cualquier otro elemento afilado y con ellos rodeó a Pinkie Pie, cortando cualquier medio de escape. Pinkie Pie veía preocupado aquello.
Pinkie: Oh, oh. Esto lo veo bastante mal.
Happy: ¡Voy a sacarte la sangre a chorros!
Gritó la asesina donde con un gesto de su casco, mandó todos los objetos directos hacia Pinkie Pie. La pony rosa trató de esquivar todos los objetos, pero algunos llegaban incluso a rozarla la piel haciendo algunos cortes.
Riser: (¡Pinkie!).
Pinkie: ¡Lo sé! ¡Debo salir de esta situación tan "filosa"! ¡Tornado!
Pinkie Pie generó un tornado alrededor suyo, protegiéndose de los objetos cortantes y alejarlos rápido de ella.
Happy se asustó al ver algunos objetos cortantes viniendo hacia ella y rápidamente se escondió por detrás del mostrador para evitarlos, haciendo que la mayoría se clavaran en la pared donde entre todos dibujaban la silueta de la yegua asesina. Luego volviendo a asomarse muy molesta dijo.
Happy: ¡Así no vale! Se supone que te tengo que matar.
La yegua se subió a la mesa y se lanzó a toda velocidad hacia la pony rosa. Pinkie Pie alertada por su Pinkie Sentido, se protegió con su escudo del ataque de la asesina.
Happy: ¡Voy a matarte y quedarme con ese escudo de recuerdo!
Gritaba completamente furiosa la yegua atacando de forma incesante con su cuchillo mientras Pinkie Pie se protegía con su escudo. Pese a que el arma era un cuchillo algo más corto que una espada, la yegua golpeaba con tanta fuerza que Pinkie Pie no podía evitar retroceder hasta quedar de espaldas contra una pared.
Happy: ¡Muere!
Gritó la yegua cargando de energía su cuchillo, golpeando con enorme fuerza el escudo de Pinkie Pie donde al final la pony rosa atravesó la pared.
Pinkie: ¡Carai! Que yegua más loca es.
Decía la pony rosa donde tenía sus alas de dragón extendidas con sus círculos en espirales a la vista. Happy atravesando el agujero para continuar con sus ataques, gritó.
Happy: ¡Ahora sí que no te se me escapas!
Pero su vista se centró en los espirales de las alas de Pinkie y en ese momento sintió como que estos giraban de forma incesante. Happy al final acabó con los ojos en espirales, quedando como aturdida. Pinkie Pie viendo que su enemiga no atacaba, decidió tomar la iniciativa.
Pinkie: Muy bien. Ahora me toca a mí.
Pinkie Pie se lanzó hacia la yegua asesina y la golpeó la cara con su escudo. Luego la dio una patada alta en el mentón y luego dando un giró rápido, golpeó el estómago de la asesina con su escudo para luego lanzarla lejos haciendo que atravesara una pared donde la llevó a un aula.
La yegua en medio de unos pupitres rotos se levantó y mirando muy molesta a Pinkie, la dijo a ésta.
Happy: ¡Que tramposa! ¡Me has hipnotizado con las espirales de tus alas!
Pinkie: ¿En serio? Nunca lo he visto de esa manera.
Respondía Pinkie Pie donde miraba sus alas con curiosidad para ver las espirales que tenía en ellas.
Happy: ¡No te hagas la inocente! ¡Ahora sí que pienso matarte!
La yegua desapareció de vista. Pinkie Pie se le activó su Pinkie Sentido y rápidamente se giró para bloquear el ataque con su escudo. Happy no se detuvo ahí y volvió a atacar en otra dirección donde una vez más Pinkie Pie lo bloqueó con su escudo. Luego girando sobre ella misma, lanzó un ataque de viento que pilló por medio a Happy y la mandó contra la pared.
Pinkie: Mi Pinkie Sentido siempre me avisa de cualquier treta tuya, por lo que no lograrás pillarme por sorpresa.
La decía desafiante la pony rosa dando por sentado que con ayuda de su Pinkie Sentido, siempre podrá prever cualquier atacar proveniente de la pony asesina. Happy lejos de molestarse, empezó a reírse mientras se ponía de pie donde ahí la contestó a Pinkie Pie.
Happy: Sí. Ese Pinkie Sentido parece que siempre te alerta de cualquier intento de ataque mío, pero ¿Qué pasa si hago yo esto?
Pinkie: ¿Hacer qué?
Preguntó curiosa Pinkie Pie. Happy no dijo nada. Simplemente se puso en posición y acto seguido gritar, donde fue rodeada por una aura oscura.
Riser: (Que mal rollo me da esto. Ten cuidado, Pinkie. Tengo un mal presentimiento sobre lo que trama esa loca).
La advertía el dragón a su portadora. Pinkie Pie lejos de desanimarse, se puso en guardia mientras le contestaba.
Pinkie: No te preocupes, mi pequeño amigo. Puede lanzarnos lo que ella quiera. No podrá con nosotros y mi Pinkie Sentido.
Happy: Je, je, je. Vamos a verlo.
Respondía la yegua con una sonrisa maligna. Al instante la yegua desapareció de vista. El Pinkie Sentido de la pony rosa la alertó y rápidamente se giró para bloquear un ataque por parte de la yegua asesina, pero Happy apenas aparecer, desapareció de vista. Aquello pilló por sorpresa.
Pinkie: ¿Qué?
El Pinkie Sentido la alertó de otro ataque, pero esta vez no tuvo tiempo de hacer nada porque sintió que la apuñalaban por la espalda.
Pinkie: ¡Ahhhh...!
Rápidamente Pinkie Pie se giró, pero la yegua asesina desapareció de vista. Happy apareció y desaparecía a una velocidad de vértigo donde pese al Pinkie Sentido de Pinkie Pie, la pony rosa tenía serios problemas para prever o evadir sus ataques. Al final no podía evitar sentir varios cortes en su cuerpo por parte del arma de la asesina.
Happy: ¡Y eso no es todo!
La asesina cargó de energía su arma y golpeó con ella a Pinkie Pie donde la hizo atravesar las paredes de varias aulas hasta que acabó esta en un pasillo. Pinkie Pie se levantaba algo adolorida.
Riser: (Pinkie ¿Estás bien?).
Le preguntaba su dragón a ésta. Pinkie Pie con algunos dolores en su cuerpo por los cortes, le contestó.
Pinkie: Sí...Más o menos. Apenas podía verla atacar incluso aunque mi Pinkie Sentido me previniera de sus ataques.
Happy: Je, je, je. Eso dalo por seguro.
Respondía la yegua asesina donde apareció a unos metros delante de Pinkie, donde la pony rosa se puso en guardia al verla.
Happy: Aunque seas capaz de prever mis ataques, no sirve de nada si no puedes igualar mi velocidad. Je, je, je.
Explicaba con actitud burlona la yegua asesina mientras jugueteaba con su arma. Luego dedicando una mirada psicópata a la pony rosa, la dijo a ésta.
Happy: Je, je, je. No te mataré ahora mismo, ahora quiero verte como gritas de dolor y agonía en mi juego sangriento. Ji, ji, ji.
Dijo esto último empuñando su arma más que dispuesta a hacer sufrir de verdad a la pony rosa. Pinkie Pie sin dejarse intimidar por ésta, la contestó desafiante.
Pinkie: No dejaré que me mates tan fácilmente.
Happy: Como si pudieras hacer algo al respecto. Ya he demostrado que tu Pinkie Sentido no te sirva de nada contra mí.
Happy se desplazó de nuevo para atacarla, pero Pinkie estaba preparada para esta vez evitarla.
Pinkie: ¡Esta vez no!
Pinkie golpeó con su escudo el suelo, provocando una potente ventolera alrededor suyo, frenando a Happy y hacer que esta saliera volando.
Happy: ¡Ahhhh...!
Gritaba la yegua asesina donde salía volando por el viento y estrellarse contra unos casilleros.
La yegua en el suelo, muy molesta con Pinkie, la gritó a ésta a lo lejos.
Happy: ¡Maldita pony tramposa! ¡Se supone que te tendrías que dejarte matar!
Gritaba verdaderamente molesta ésta. Pinkie Pie mirando un tanto seria, primero sonrió inocentemente y acto seguido salió corriendo a toda velocidad hasta perderse de vista.
Happy: Se cree que puede correr más rápido que yo.
Sacidblood: (Ve a por ella y mátala).
Happy: Será un placer.
La yegua tomando su arma, fue corriendo a toda velocidad en busca de su presa. Inesperadamente no lograba encontrarla por muy rápido que buscase por todas partes y recorriera metros en apenas segundos.
Happy: ¡Rayos! No entiendo como es posible que no logre encontrarla. Con mi súper velocidad, debería encontrarla en un periquete.
Se quejaba la yegua asesina, molesta ésta porque no lograse encontrar a la pony rosa.
De una patada abrió de par en par lo que era el interior de la cocina. Desde ahí la yegua se puso a buscar en busca de su presa sin percatarse de que una cola rosa estaba abriendo las válvulas del gas y luego desaparece al instante que se giraba Happy porque notaba algo raro.
La cola rosa seguía abriendo más válvulas y llaves del gas mientras la yegua asesina seguía buscando a su presa. Así por un rato hasta que Happy empezó a oler el gas.
Happy: ¿Hueles eso?
Preguntaba la yegua mientras olfateaba el aire. Su lobo la contestó.
Sacidblood: (Yo diría que es gas)
Pinkie: Es gas, bobita.
Se escuchó la voz de Pinkie Pie donde la veía por otra entrada del comedor a muchos metros de distancia.
Happy: ¿Gas?
Preguntó confundida la yegua asesina donde la pony rosa metiendo un casco en su crin, la contestó seria.
Pinkie: Así es.
De su crin sacó un mechero donde lo primero que hizo fue encenderlo y lanzarlo con todas sus fuerzas al interior de la cocina. Happy adivinó tarde sus intenciones.
Happy: ¡La madre del Tano!
Finalmente cuando la llama entró en contacto con el gas, se formó una enorme explosión de fuego por toda la cocina. Pinkie Pie rompió un cristal donde en su interior había una capa aislante para el fuego, y se cubrió con ella para protegerse de las mortales llamas que salieron de la cocina.
Cuando las llamas finalmente dejaron de salir, Pinkie Pie se quitó la capa para ver como el interior de la cocina estaba completamente destruida por las llamas.
Pinkie: Buff...Menuda la he liado ahí dentro.
Riser: (Espero que tengan seguro contra las explosiones o incendios).
Comentaron ambos. Pinkie Pie finalmente soltando un buen suspiro, comentó.
Pinkie: Bueno...Al menos nos libramos de esa loca.
Riser: (Primero busquemos su arma. Si está intacta, su lobo la puede resucitar).
Pinkie: Cierto. Busquemos el arma antes de que...
Happy: ¿Antes de "qué"? Je, je, je.
Pinkie se asustó al escuchar la voz de Happy justo detrás de ella y cuando se giró, para su horror la vio delante suya sin daño aparente. La yegua asesina emulaba una sonrisa maniática e infantil que llegaba a ser aterradora.
Pinkie: ¿Qué? ¡Pero! ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde?
Preguntaba sorprendida y también asustada la pony rosa al ver que la asesina no había sido pasto de las llamas. La yegua asesina riéndose perversamente, se dispuso a explicar.
Happy: Ja, ja, ja. Reconozco que casi me pillas con ese truco del gas y las llamas. Si no llega a ser por si velocidad suprema, habría muerto sin duda y luego tendría que ser revivida por mi lobo. Tú no vas a tener esa misma suerte.
Al instante la yegua asesina comenzó a moverse de un lado a otro a enorme velocidad, dejando sombras de ella misma producto de su velocidad, todas rodeando a la pony rosa donde alarmada no sabía hacia donde mirar.
Riser: (¡Pinkie! ¡Ten cuidado!).
Por desgracia de poco sirvió el aviso de Riser, ya que la pony rosa recibió en su cuerpo un sin fin de cortes por todas partes. La asesina se movía a tanta velocidad que Pinkie Pie la era imposible situar donde la atacaba incluso con su Pinkie Sentido.
Happy: Ji, ji, ji ¡Y para acabar!
La asesina lanzó un cuchillo de energía donde se clavó en una de las patas de Pinkie Pie donde la estampó contra la pared. La pony rosa gritó de dolor por sentir aquel cuchillo atravesando su pata delantera derecha y aun más cuando la asesina lanzó otros tres más para atravesar el resto de sus patas, dejando completamente inmovilizada a la pony rosa.
Happy se acercaba con malicia a la pony rosa donde esta última gemía de dolor y luego posando un casco en la mejilla de Pinkie, la decía a ésta.
Happy: Ji, ji, ji. Admito que ha sido divertido. Pero aquí acaba nuestro juego. Otro para mi albun de fotos.
Pinkie: ¿Albun...de fotos...?
Preguntaba la pony rosa mientras de sus patas se escurría sangre por los cuchillos clavados en ellas. Happy sacando de quién sabe donde un albun de fotos, donde en él ponía "Recuerdos Sangrientos de Happy Sadic".
Happy: Sí, Pinkie Pie. Aquí es donde guardo mis mejores recuerdos como este por ejemplo.
La yegua asesina abrió el albun para mostrar a Pinkie Pie alguns fotos.
Happy: Mira. Esta de mi primera víctima de cuando me convertí en portador de la Espada de la Muerte.
Explicaba la yegua mostrando una foto de ella siendo potra con un minotauro muerto en el suelo con el arma clavada en la nuca. La potra mirando a cámara sonreía mientras dibujaba un corazón sangriento en la espalda de su victima.
Happy: Esta de mi primera masacre.
Ahora mostraba una foto de ella metida en un habitación cubierta de cadáveres cercenados y con las paredes, techo y el suelo cubierto de sangre. La potra también cubierta de sangre, miraba a cámara mientras sonreía de forma traviesa guiñando un ojo.
Happy: Esta otra del primer ejercito que masacré.
Ahora se veía una foto de ella tras matar a todo un ejercito de grifos reales donde todos ellos tenían sus las cortadas, cabezas decapitadas clavadas en lanzas. La potra estaba de pie sujetando una lanza con una tela arrancada de un grifo a modo de capa y haciendo un saludo militar mientras sonreía.
Pinkie: Estás...enferma...
Decía Pinkie Pie tratando de contener las ganas vomitar ante lo que la estaba mostrando la yegua asesina.
SacidBlood: (Venga, Happy. Muestra la que para mí es mi favorita. Ja, ja, ja).
Hablaba ahora el lobo desde la mente de la potra. Happy adivinando a lo que se refería su compañero, sonrió de forma infantil mientras daba saltitos.
Happy: ¡Oh, sí, sí! Sobre mi primer cumpleaños sangriento. También mi favorito. Ji, ji, ji.
Pinkie: ¿Cumpleaños sangriento?
Preguntó la pony rosa en parte temiendo saber la respuesta. Happy sonriendo con malicia, se disponía a enseñárselo a Pinkie Pie.
Happy: Sí. Sobre mi primer cumpleaños. Mira, mira.
Se mostraba a una Happy feliz sentada en una mesa con una pancarta de "Feliz Cumpleaños" con tarta y todo. Alrededor de la mesa habían potrillos pequeños apenas más mayores que Happy cuando era potra. Todos los potrillos estaban atados con cuchillos clavados en sus cuerpos y con expresiones de angustia. Pinkie miró con horror la foto donde no pudo evitar exclamar.
Pinkie: ¡¿Qué hiciste?!
Happy: Ji, ji, ji. Así me gustan mis cumpleaños. Me gusta reunir a potros de más o menos de mi edad y hacer montones de juegos. Mi favorita es ésta.
La yegua con los poderes de su espada, lanzó un hechizo en la foto donde la animó. Ahí Pinkie Pie veía con horror en la foto animada como los potros eran clavados en sus cuerpos por múltiples cuchillas, haciendo surgir mucha sangre de ellos. Algunos les arrancaban las extremidades o la cabeza misma por discos voladores afilados que aparecían por todas partes. Algunos eran bañados en ácido donde sus cuerpos eran descompuestos mientras los potros gritaban de horror y dolor. Y para terminar, todos los potros supervivientes eran hinchados como globos por la magia de la potra hasta finalmente estallar y brotar sangre por todas partes a modo de lluvia. Ahí se veía a la Happy de la foto reírse de alegría mientras daba saltitos y bailaba.
Pinkie miraba horrorizada la foto animada, viendo como Happy cuando era potra hacía sufrir a los potros solo para su propia diversión.
Happy: No está mal ¿Verdad? Ja, ja, ja. Me encanta celebrar siempre así mis cumpleaños. Puedo hacer lo que quiera para divertirme en grandes fiestas. Ja, ja, ja ¿No te parece divertido o gracioso? Ja, ja, ja.
Se reía sin parar la yegua asesina mientras la crin de Pinkie Pie perdió su esponjosidad para volverse completamente lacea. Con la crin tapándola los ojos, contestó.
Pinkie: No es...divertido...
Happy: ¿Cómo dices?
Preguntaba la yegua asesina donde dejando un momento de reírse, miró a Pinkie Pie. Pinkie Pie ahora alzando la vista con unos ojos perturbadores, la contestó.
Pinkie: ¡No es divertido si para divertirte haces daño a otros! ¡No eres alguien que sepa como reírse o hacer fiestas! ¡Eres un monstruo!
Gritó con todas sus fuerzas la pony rosa donde de repente surgió de ella una poderosa ventolera que alejó a la yegua asesina de ella y la estampó contra la pared. Sin esfuerzo alguno, Pinkie Pie logró liberarse de las cuchillas sin importar que se la arrancara trozos de carne. Asombrosamente sus heridas se estaban sanando por completo.
Happy: ¿Qué...Qué ha pasado?
Preguntaba algo aturdida la yegua asesina hasta que se fijó en Pinkie Pie con su pelo laceo, donde su crin se alzaba levemente por el viento que la pony rosa producía en su cuerpo.
Happy: Uy...¿Por qué tiene la crin así? Me gustaba más cuando lo tenía como si fuera algodón de azúcar.
Sacidblood: (Cuidado. Hay algo diferente en ella. Mejor ser precavidos).
La iba advirtiendo su lobo. La yegua restándolo importancia mientras alzando de hombros, le contestó.
Happy: Te preocupas demasiado. Solo tengo que degollarla con mi cuchillo y acabar con ella ya.
Al instante la yegua se desplazó justo por detrás de Pinkie Pie con intención de degollarla con su espada de la muerte, pero justo cuando iba a alcanzarla, Pinkie Pie desapareció de golpe para sorpresa de Happy.
Happy: ¿Qué? Que extraño. Ha desaparecido.
En ese instante, recibió en el estómago un fuerte golpe de escudo proveniente de Pinkie Pie. Ahí su mirada se cruzó con las de unos perturbadores ojos de Pinkie Pie donde la pony rosa mirándola con rabia, la dijo a la cara.
Pinkie: No eres una chica amante de las fiestas. Eres una maldita psicópata y vas a pagar por todos aquellos niños inocentes que murieron por tu culpa ¡Ahhhh...!
Gritó en la última parte la pony rosa donde desde su escudo surgió un tornado, que se llevó volando a la yegua asesina donde daba vueltas sin parar.
Happy: ¡Ahhhh...! ¡Que mareóooooo...!
El tornado atravesó con la yegua asesina hasta el piso de arriba donde la llevó a lo que parecía una biblioteca, para luego caer duramente contra el suelo. Pinkie Pie flotando mediante unos minitornados que surgía de sus cascos, llegó a dicho piso. Happy levantándose del suelo, miró enfadada a Pinkie y la gritó a ésta.
Happy: ¡No eres nada divertida! ¡Te voy a matar por esto!
Happy empleó su alta velocidad para crear clones de ella misma por alrededor de Pinkie Pie. La pony rosa estaba parada sin inmutarse siquiera.
Happy y sus clones sacaron varios cuchillas de energía para lanzarlas todas a la vez.
Happy: ¡Muere!
Gritó Happy donde tanto ella como sus clones, lanzaron incesantes cuchillas hacia Pinkie Pie con intención de convertirla en un colador. Pinkie Pie sin moverse del sitio, bloqueó con enorme rapidez con su escudo los ataques de la yegua asesina y sus clones para sorpresa de Happy.
Happy: ¿Qué? ¡Eso no es justo! ¡Se supone que te tengo que matar!
Pinkie Pie gritó y alrededor de ella se creó un enorme tornado que se llevó por delante los cuchillos de energía, deshaciendo los clones y llevando a Happy hasta estamparse contra el techo.
Cuando la yegua asesina iba cayendo, Pinkie Pie pegó un salto tremendo donde desde ahí tomando su escudo, placó por completo contra el rostro de la yegua asesina y llevándola por delante, impactó con ella contra la pared.
Pinkie Pie se alejó de un salto mientras Happy un tanto aturdida avanzó hacia ella. Ahí Pinkie Pie golpeó con fuerza con su escudo el estómago de la yegua asesina, haciendo que escupiera sangre. Luego Pinkie Pie con un movimiento ascendente de su escudo con la parte filosa, hizo un profundo corte en la parte frontal de la yegua asesina y el escudo salió volando hacia arriba. Pinkie Pie saltó para recuperar su escudo y cuando descendió, sujetando con ambas cascos el escudo, golpeó con todas sus fuerzas la cabeza de la yegua asesina donde parte de su cráneo se fracturó enormemente por el impacto.
Luego Pinkie Pie desapareció y acto seguido la yegua asesina era golpeada en distintas direcciones por parte de la pony rosa, donde esta última se movía a una velocidad verdaderamente imperceptible, donde cada golpe lograba fracturar algún que otro hueso en la yegua asesina.
Para terminar, Pinkie Pie arreó una potente patada cargada de viento, golpeando brutalmente en el pecho de la yegua asesina, haciendo que saliera volando y derribase distintos estantes en el proceso.
Happy se levantó adolorida, pero no dispuesta a rendirse. Es más, estaba más motivada que nunca a matar a Pinkie Pie.
Happy: Maldita sea. Seguro que esa pony está haciendo trampas. Voy a acabar con ella, pero ya.
Pinkie Pie no dijo nada. Simplemente alzó un casco y haciendo un gesto de invitarla a que fuera a por ella.
Happy: ¡Ahhhh...!
La yegua asesina empleando su enorme velocidad, trató de atacarla en varias direcciones a Pinkie Pie, pero la pony rosa sin moverse del sitio, bloqueaba con su escudo cada ataque de la yegua asesina. Así hasta que se agachó para esquivar un ataque de la yegua asesina. Ahí creó un especie de puñal hecho de viento donde la clavó en el costado de la yegua asesina, haciendo gritar de dolor a esta última.
Pinkie: Se acabaron los juegos y ya no hay tiempo para fiestas, y odio decir eso. Porque me hacen convertir en mi mamá.
Decía Pinkie Pie con una voz amenazante y atemorizante donde creó varias flechas hechas de viento y las lanzó contra la yegua asesina, clavándose todas en su cuerpo.
Happy: ¡Ahhhhh...!
Gritaba de dolor la yegua asesina al sentir como todas aquellas flechas se clavaban en su cuerpo en todos lados. Acto seguido, Pinkie Pie con un golpe de escudo, la cortó una de las patas delanteras de Happy y luego la otra, dejando desprovista de ambas a la yegua asesina donde se quedó en el suelo adolorida.
Cuando la yegua asesina alzó la vista, pudo ver a Pinkie Pie con una mirada perturbadora hasta el punto que la hizo llenarse de miedo.
Pinkie: Eres una chica mala y hay que castigarte como te mereces.
Decía Pinkie Pie cuya voz daba hasta miedo. Happy asustada, rogó por su vida.
Happy: ¡No! ¡Por favor! ¡No me mates! ¡Seré una niña buena! ¡Pero no lo hagas!
Pinkie: Se acabaron los ruegos.
Decía Pinkie Pie donde saltó muy alto y desde ahí lanzó su escudo a modo de disco volador en posición vertical. Happy lo último que pudo ver fue como el disco pasaba por ella de forma limpia.
Cuando el escudo volvió con Pinkie, la yegua asesina se la formó una línea roja que la dividía por la mitad hasta finalmente separarse y caer ambos lados por el suelo, cubriéndolo completamente de sangre.
Con la yegua asesina muerta, Pinkie Pie centró su mirada en el arma de la yegua. La pony rosa alzó su arma para destruirla de una vez por todas y ahí apareció Sacidblood.
Sacidblood: ¡No, por favor! ¡No destruyas mi arma!
Rogaba el lobo, pero Pinkie Pie no le escuchó y finalmente destruyó el arma de la yegua asesina. El lobo viendo que empezaba a desaparecer, empezó a reírse como un desquiciado mental hasta finalmente ya no quedar nada, siendo su risa haciendo eco en el lugar.
Pinkie: Una menos. Ahora volvamos con nuestras amigas.
Decía Pinkie Pie con un tono serio y nada alegre como es característico en ella. Riser no podía evitar preocuparse por ello.
Riser: (Pinkie...¿Estás bien?).
Pinkie: Sí...Lo estoy. Ahora vámonos.
Contestó muy seriamente la pony rosa aun con su crin lacea donde se disponía a abandonar el lugar. Riser sentía que la batalla afectó gravemente a su portadora.
Continuara.
No olvidéis comentar.
TJ: Una batalla más y un portador menos ¿Qué opinan nuestros críticos?
Look Lucky: La verdad...No sé que decir. Esto ha sido algo perturbador. El cambio que experimentó Pinkie al final del capítulo me parece algo que sin duda habrá marcado a muchos.
Castafiore: Una batalla un tanto sangrienta donde como era natural, ganaría los buenos. El intento de hacer una muerte sangrienta podría haber estado algo mejor.
TJ: Ahora a esperar quién serán los siguientes en combatir. Todo en el siguiente episodio.