Volví a subir este capítulo, ya que, quise agregar una escena y pues, también quería aclarar que lo que hablan Yamato y Mimi de Damar, lo saqué del bolsillo, ya que, necesitaba encontrar una forma en Yamato dejara de estar a la defensiva y pues, que entendiera porque Mimi se había ido -lógicamente sin saber que se había ido por su embarazo-

Al día siguiente las cosas continuaron de una forma parecidas a las de los días anteriores, el fin de semana se acercaba, muchos estaban emocionados por la fiesta de Bienvenida, sobre todo los organizadores de esta celebración, Izumi, Sora, Hikari y el resto del comité. Pero, Mimi no podía evitar sentirse un tanto ansiosa, ya que, se presentaría.

Los Teeanges Wolves ese día habían ensayado más o menos a las cuatro y a eso de las seis ya estaban terminando, así que, la castaña terminaba tenía una clase hasta las siete, así que, luego de salir de ella se había armado de valor para ir a pedirle la pista al rubio, ya que, Izumi parecía muy ocupada en sus cosas y pues, tenía ganas de escuchar la pista y...ver a Yamato.

Quiero un pedacito de tu cuerpo en mis sueños, Un poquitico de tu piel en mis besos, Quiero bailar contigo siempre para no despertar.— Cantó Yamato— Tengo dos mil razones para hablarte de amores, Son las canciones que desvelan mis noches, Quiero cantar contigo para nunca olvidarte.

Mimi abrió levemente la puerta— Permiso.

Yamato volteo hacia la entrada y vio a la castaña, hizo una mueca y tocó un botón de la computadora que tenía en frente en donde se estaba reproduciendo la pista.

Mimi entró al lugar y caminó hacia el chico— Hola Yamato.

—Hola.— Saludó el chico.

—Vine por la pista, dijiste que hoy estaría lista.—Comentó la castaña— ¿Está lista?

Yamato asintió— Acabe de terminarla.— Respondió— Necesitaré tu móvil.

Mimi asintió y sacó de su chaqueta su móvil para extendérselo al rubio provocando que sus manos se rosaran levemente, Yamato hizo una mueca ante esto y alejó su mano con el móvil de la chica para conectarlo con la computadora, pero, inconscientemente ambos se sumergieron en un silencio bastante incómodo que a la Tachikawa molestó y decidió romper.

—Y dime ¿cómo estás?— Preguntó la chica.

Yamato hizo una mueca— ¿Verdaderamente te interesa saber?

—¿Por qué no me interesaría?

—Porque, cuando pensé que te importaba te fuiste demostrándome que no.— Contestó el rubio.

Mimi se mordió el labio inferior, verdaderamente estaba aburrida de esa situación, los días anteriores se había sentido mal, pero, la verdad es que ahora se estaba aburriendo, se sentía mal, pero, no quería que el chico la tratase así, ella no había querido hacer sentir mal al rubio, y aunque todavía no pudiese decirle lo de su embarazo quería aclarar que no lo quería lastimar.

—Yamato sé que estás herido y molesto conmigo, porque, me fui sin decir algo.— Dijo la castaña— Pero, yo no te quería hacer daño, lo digo de verdad, por favor, me duele que creas que no eras importante para mi.

—Entonces ¿por qué te fuiste sin avisar?— Preguntó el rubio.

—Porque, no tuve tiempo de avisar.— Habló la castaña.

—¿Por qué no?

—Porque, todo fue de improviso.

—Pudiste al menos haber dado una pequeña explicación.

—No pude, Yamato, no podía.— Habló Mimi—Luego de esa noche verdaderamente estaban ocurriendo muchas cosas en las vidas de mis hermanos y en la mía.

—Bueno, todos tuvimos problemas luego de esa noche y no nos fuimos sin decir adiós.— Habló el rubio.

Mimi suspiró, él chico necesitaba una explicación, lo entendía, ya que, si ella hubiese estado en ese lugar la hubiera querido, y quizás, todavía no era tiempo de decirle lo que había ocurrido con ella, todavía no, ya que, evidentemente el chico estaba enfadado con ella. Pero, si necesitaba una explicación le daría una, le explicaría porque no fue solo ella la que se fue, sino la razón por la cual los tres se habían tenido que ir, ya que, su embarazo no era la única razón por la cual se habían ido los hermanos Tachikawa, Takuya y Damar pudieron haber seguido con su vida normal, pero, algo había ocurrido con la menor.

—Yamato, nosotros nos fuimos sin decir nada porque tuvimos que como "familia" ayudar a mi hermana...—Mimi se detuvo, habían ocurrido tantas cosas en su vida, que admitir una de ellas era difícil, pero, si el rubio necesitaba una explicación, entonces, le daría una— Damar se intentó suicidar.

Yamato abrió los ojos sorprendido— ¿Qué?— Preguntó sorprendido.

—Lo que escuchaste.— Respondió la castaña— Mi hermana se intentó suicidar.— Admitir eso era difícil, no porque fuese mentira, al contrario, quizás, el embarazo había sido uno de los motivos por el cual ella se había marchado, pero, Damar si había intentado acabar con su vida ese mismo día que le había confesado a su padre que estaba embarazada.

Yamato abrió la boca sorprendido, él había escuchado que Damar había quedado mal luego de la muerte de Henry, ya que, eran amigos, muy buenos amigos, de toda la vida prácticamente, lo más cercanos sabían que la hermana de Mimi estaba teniendo algunos problemas con los sedantes y ansiolíticos, pero, nunca había tenido información de que la chica hubiese llegado a esas circunstancias.

—Eso lo sé, sé que todos tuvimos problemas luego de esa noche.— Bajó la mirada— Pero, la forma en que nosotros lidiamos con aquellos problemas fue diferente.

Yamato frunció el ceño— Diferente.— Rodó los ojos— Si claro.— Dijo irónico— Luego de haber dicho que afrontaríamos los problemas juntos, luego de haber prometido apoyarnos.— Se acercó a ella— Luego que tu me prometieras que no me dejarías solo, te fuiste para afrontar los problemas de una forma diferente.

—Si, Yamato, así fue, nos fuimos para afrontar los problemas de una forma diferente.— Habló Mimi—La situación lo ameritó, nuestro padre nos pidió suma discreción y eso hicimos.

—¿Qué cosa necesitaba suma discreción como para no confiar en tu novio?— Preguntó el rubio.

—Mi padre nos pidió suma discreción.— Habló la castaña— Ese día que mi padre nos vino a buscar fue el mismo día en el cual Damar intentó acabar con su vida y mi padre sin saber que hacer o decir decidió que lo mejor era irnos, sin dar detalles, sin decir algo, simplemente quiso sacarnos de aquí.

Yamato observó a la castaña, verdaderamente no se esperaba esa declaración, claro que no, nunca se hubiera imaginado que la idea tan repentina de los Tachikawa tuviera una razón tan preocupante—Pero, Mimi, pudiste haber confiado en mi.

Mimi se mordió el labio inferior— Yamato, mi hermana estaba muy mal, nos pidió a Takuya y a mi que no dijéramos nada, y mi padre tampoco queríamos que dijéramos, nos bloqueo los celulares y redes sociales, porque, él culpó lo que ocurrió esa noche como responsable de lo que había ocurrido con mi hermana y pues, él no quiso que nos relacionáramos con personas de este lugar, ya que, para variar todo estaba muy reciente, todo en cualquier momento podía salir a la luz y él no quería que nos viésemos involucrados, lo único que él quiso fue que nos encargáramos de ella.

La Tachikawa se veía tan herida diciendo todas esas palabras, evidentemente estaba mal, ese rostro, esa expresión, esa forma de hablar le recordaban tanto a como él había actuado cuando había descubierto que Takeru había consumido drogas, cuando se había enterado que Izumi había tenido algo con Ryo, esa forma de actuar era de preocupación.

—Yo no quería dejarte, pero, esa fue una de las razones por las cuales nos fuimos sin decir algo, Takuya tampoco se despidió o hizo algo, ya que, él también quería proteger a nuestra hermana, verdaderamente estaba mal y pues, no quisimos exponerlas ante los demás.— Habló Mimi con bastante pesar en la voz, todavía no era tiempo de hablarle de las razones propias que había tenido al irse de aquel lugar, no podía hablarle todavía de su embarazo, pero, tenía que darle una explicación y esa era una...su hermana.


Izumi suspiró, estaba agotada, cansada, estresada verdaderamente preparar una fiesta en ese lugar era estresante, pero, el día casi finalizaba, solo debía cenar y ya podía ir a dormir, pero, antes de bajar a cenar había pensado en ir a saludar a su novio, no lo había visto en todo el día y el día de ayer con suerte se habían visto, y pues, tenía cierta curiosidad de saber como le había ido el día anterior con Rika en su búsqueda, quizás, habían averiguado algo y eso -luego de saber la verdad- le llamaba la atención.

¡Toc, toc!

Tocó la puerta del departamento y a los pocos segundos abrió el gemelo de su novio, Koichi Kimura.

—Izumi.— El chico la saludó— Hola.

—Hola Koichi.— Correspondió al saludo.

—¿Cómo estás?

—Muy bien ¿y tú?

—Igual estoy bien.— Contestó el Kimura— Déjame adivinar ¿vienes a ver a mi hermano?

Izumi asintió— Si ¿Kouji está?

Koichi hizo una mueca— No, pero, no tarda en llegar.— Contestó observando su reloj— Hace unos cinco minutos me envió un mensaje de que venía saliendo de la Universidad, ya que, le tocó ir a buscar unos libros. No tardará en llegar, ya sabes, la universidad no queda muy lejos.— Señaló la habitación— Si quieres lo esperas aquí.

Izumi sonrió— Bueno.— Contestó e ingresó al departamento para luego tomar asiento en un sofá.

—Y dime ¿cómo va la organización del baile?— Preguntó Koichi.

Izumi hizo una mueca— Más o menos, todavía faltan algunos detalles. Pero, en general está todo bien.

—Que bueno...— Contestó Koichi, pero, antes de que pudiera decir algo más.

¡Ring, ring!

El móvil del Kimura sonó.

—¡Oh! Disculpa Izumi.— Habló el chico observando su móvil— ¡Oh no!— Llevó una mano a su rostro.

—¿Qué ocurre?— Preguntó la rubia al ver la expresión de pánico del chico.

—Quedé con Miyako y Juri en el campus a esta hora y se me había olvidado.— Habló Koichi.

Izumi sonrió pícara— ¡Uh! Ya había escuchado que últimamente andas rodeado de chicas.

Koichi rodó los ojos sonriendo— Solamente son unas amigas.

—Yo no estoy diciendo que sean algo más.— Molestó la rubia al oji-azul— Pero, ya que lo dices quizás si sean algo más.

—¡Je!— Carcajeo el Kimura— No empieces tu también Izumi.

Zoe movió la cabeza y rio levemente tapando su boca con su mano derecha.

Koichi se levantó— Discúlpame, Izumi, tengo que ir.— Habló el chico.

—No te preocupes Koichi.— Habló la rubia— Ve tranquilo a tu compromiso, yo esperaré a Kouji quién supongo que llegará en breve.

Koichi sonrió— Muchas gracias Zoe.— Habló y se dirigió a la puerta— ¿Nos vemos después, amiga?

Zoe asintió y sin esperar más el chico salió del lugar dejando a la rubia. Fue así como Izumi se sumergió en un silencio bastante pacífico, mientras jugaba con los pulgares de sus manos, pero, de un momento a otro la puerta del baño se abrió y de ahí salió nadie más y nadie menos qué...¡Takuya recién bañado! Llevaba una toalla en la cintura, pero, su torso estaba desnudo.

—¡Takuya!— Exclamó la chica sorprendida levantándose de golpe del lugar donde estaba.

—¿Qué haces aquí?— Preguntó Takuya.

—¿E?—La chica balbuceo extremadamente sonrojada, aunque quisiera desviar su mirada no podía, sus ojos estaban clavados en el torso del chico, su abdomen estaba marcado, sus pectorales se veían fuertes y sus brazos estaban musculosos. Se mordió el labio inferior, no era primera vez que lo veía sin remera, pero, la última vez que lo había visto así hace tres años atrás no estaba tan marcado como ahora, verdaderamente se veía...guapo.

—Izumi.—Takuya la llamó— Izumi.— Movió su mano— Te estoy llamando.

—¿E?— Balbuceo la chica totalmente roja y alzó la mirada hacia el chico quién la miraba expectante.

—¡Izumi!— El chico elevó levemente la voz, un tanto preocupado, la chica no decía palabra alguna y eso era extraño, para él, ya que, la chica cuando trataba de él podía decir miles palabras por segundo con el único fin de fastidiarlo.

—¿E?— Balbuceo por tercera vez la chica— ¿Q-qué ocurre, Takuya?

—¿Qué ocurre contigo dirás?— Corrigió el castaño— Te he llamado varias veces y no me has respondido, dime ¿que estás haciendo aquí?

La chica se mordió el labio inferior y desvió la mirada del chico totalmente nerviosa, por un momento había olvidado que había ido a hacer a aquel departamento, sus ojos se habían centrado en el fuerte torso del chico y había perdido la noción de las cosas—¿E? Pu-pues...—Balbuceo— Vi-vine a...— Se aclaró la garganta y tomó aire— Vine a ver a mi novio.

Takuya hizo una mueca, venía a ver a su novio, a Kouji. Suspiró, habían veces en que verdaderamente ignoraba que ambos tenían una relación— Él no está aquí.— Contestó— Por si te diste cuenta.

—¿E?— Balbuceo aún nerviosa— Si me di cuenta, pero, Koichi me dijo que podía esperarlo aquí y eso estaba haciendo.

—Hasta que llegué yo y mientras esperabas a tu novio te distrajiste admirando mi hermoso cuerpo.— Comentó Takuya, quién se había dado cuenta que la mirada de la chica había estado clavado en él.

—¿Q-qué?—Preguntó la rubia sorprendida ¿había sido tan obvia?

—Dije que te distrajiste observando mi cuerpo.

Zoe hizo una mueca— ¡Claro que no!

Takuya rodó los ojos— Claro que si te distrajiste viéndome.

Zoe frunció el ceño, no importaba lo guapo que fuera, lo molestoso que era opaca sus demás atributos—Bueno, si se te estaba observando.— Admitió— Estaba observando lo gordo y feo que estás.

—¿Gordo?— Cuestionó el chico sorprendido.

—Si.— Contestó la rubia— Mira tu abdomen está terriblemente...—Tonificado y admirable, pero, lógicamente no diría eso— Horrible, lleno de grasa y lonjas.— Mintió descaradamente.

Takuya alzó una ceja— ¿Y por qué estás sonrojada?

—P-porque...—Balbuceo— Porque, me hace sentir incómoda ver un cuerpo tan feo.

Takuya hizo una mueca y se cruzó de brazos— ¿Acaso no te has visto al espejo?

—¿Me estás diciendo fea?— Preguntó la rubia sorprendida.

—Solamente te estoy devolviendo el cumplido.— Respondió el moreno.

Izumi se mordió el labio inferior—Oye, no tienes que ofenderme.

—Bueno, tu empezaste con las ofensas.— Respondió el chico.

Izumi rodó los ojos, ese chico verdaderamente podía mover su mundo de muchas formas y por muy guapo que fuera siempre la hacia enfadar. Su mirada nuevamente pasaron por el torso del chico y su sonrojo se pronunció.

—Aunque tu sonrojo me dice otra cosa.— Comentó el moreno.


Kouji Minamoto suspiró, verdaderamente ese día había sido agotador, había tenido clases seguidas desde muy temprano, había tenido ensayo con la banda, había ayudado a Yamato a terminar esa pista de ese tema nuevo que estaba trabajando y luego le había tocado ir a la Universidad nuevamente a retirar unos libros que eran importantes para un ramo.

Suspiró, el año recién había comenzado y ya estaba aburrido, sin duda, vivir rodeado de estudiantes en un lugar rodeado por instituciones educativas no era muy agradable, parecía que nunca respiraban o descansaban de sus labores de estudiantes y todas esas cosas. Nuevamente suspiró, recién comenzaba su vida universitaria y ya quería abandonar todo para ir a recorrer el mundo como era originalmente su plan. Eso de estudiar no era lo suyo, en lo absoluto, viajar y conocer lugares nuevos siempre había sido algo que le había llamado la atención, y pues, no lo había logrado hasta la fecha, pero, apenas terminara de estudiar cumpliría ese sueño.

Dio unos pasos más por el pasillo en donde se encontraba su amigo solo con una toalla en la cintura frente a su novia quién se encontraba ligeramente ruborizada ante el chico.

—Takuya, Izumi— Los llamó y ambos voltearon.

—¿E?— Balbuceo la rubia— Hola Kouji.

—Hola amigo.— Saludó Takuya lo más natural posible.

Kouji se cruzó de brazos y alzó una ceja, la escena frente a él era verdaderamente extraña, él sin remera frente a la chica, ella sonrojada y si le sumaba a esto que tenían historia como casi pareja de hace unos años podía pensar muchas cosas.

—¿Qué está sucediendo aquí?— Preguntó el Minamoto.

—¿E?— Balbuceo Izumi la verdad es que la escena verdaderamente era un tanto comprometedora, el chico en ese estado y ella sonrojada— Vine a verte cariño, Koichi me dejó entrar y justo me encontré a Takuya.

—Exacto.— Respondió Takuya— De repente salí de la ducha y ¡puf! ella estaba aquí.— Explicó el chico.

—Nos pusimos a hablar y justo llegaste tú.— Comentó la rubia.

Kouji observó a la chica verdaderamente se veía nerviosa, estaba muy sonrojada, Takuya simplemente estaba normal, algo sucedía, no estaba seguro, pero, la chica parecía incómoda o algo así.

Takuya observó a su amigo quién estaba en silencio, los observaba sigilosamente, hizo una mueca al darse cuenta que la escena verdaderamente era incómoda y pues, considerando que entre ellos había ocurrido algo antes en el puesto de su amigo estaría pensando miles de cosas— ¿E? ¿No creerás que otra cosa sucedió? ¿no?

Kouji hizo una mueca— ¿Quién dijo que estaba pensando en eso?— Preguntó— ¿Acaso debería pensarlo?

Takuya e Izumi intercambiaron miradas ante esto, su amigo de una forma fácil había encerrado al hermano de Mimi en un laberinto con esas simples preguntas, no es que entre ellos ocurriera algo, pero, la escena no era muy confiable ¿no?


—Venir a caminar fue una buena idea al campus.— Comentó Miyako mientras observaba el lugar donde muchos se encontraban disfrutando la tarde, pero, sus ojos se clavaban específicamente en un lugar donde había un grupo de amigos de primero de preparatoria en donde había cierto chico de ojos zafiros.

Koichi y Juri intercambiaron miradas ante esto— ¿Lo dices por qué verdaderamente querías salir a tomar aire o por qué Ken justo está aquí?— Preguntó la castaña de una forma pícara.

Miyako se ruborizó levemente— ¿E? P-pues...—Balbuceo— ¿Enserio soy tan obvia?

—Pues, se suponía que recorreríamos el lugar, pero, llevas más de diez minutos observándolo sin dar siquiera un paso.— Contestó Koichi.

Miyako suspiró— Es que, no puedo dejar de mirarlo ¡es tan lindo!— Su mirada volvió hacia el chico.

Koichi movió levemente la cabeza y Juri sonrió— Verdaderamente le gusta.

—Desde que él entró a la primaria a ella le gusta.— Respondió el Kimura— Aún no sé como Ken no se desgasta, ella lo observaba casi las veinticuatro horas del día.

Juri carcajeo levemente.

—Oye, Juri ¿irás al baile de Bienvenida?— Le preguntó el chico.

Juri asintió— Si.— Contestó— La verdad es que no me gustan muchos las fiestas, pero, me enteré que los Teenages Wolves van a tocar y pues, no me perdería un concierto gratis de mi banda favorita.

—Verdaderamente te gusta la banda de mi hermanito ¿no?

—¡Je! Pues si.— Respondió la castaña— Es que me gusta la música y las letras de sus canciones verdaderamente son agradables.— Pero, ahora que hablaban de la banda del hermano de Koichi se acordó de algo que hace unos días le había dado curiosidad— Oye, Koichi, no quiero sonar entrometida o algo así, pero ¿por qué Kouji y tú a pesar de ser gemelos y hermanos tienen apellidos diferentes?

—Es que, nuestros padres están divorciados.— Respondió el chico.

Juri hizo una mueca y llevó su mano derecha a su boca— ¡Ups! Discúlpame por preguntar.

Koichi sonrió de lado— No te preocupes, siempre nos preguntan lo mismo, estoy acostumbrado a responder y pues, nuestros padres se separaron cuando éramos bebés, así que, no es un tema que me moleste o duela hablar.

—Pero, a pesar de estar separados ustedes ¿son unidos?

Koichi asintió— Bastante, bastante unidos.— Contestó— Mis padres cortaron comunicación entre ellos luego de su separación y pues, gracias a mi abuela volvimos a hablar cuando teníamos siete años, ella era de la idea de que no debíamos estar separados y pues, también se le ocurrió la idea de que entráramos a este Internado, así podríamos estar juntos y bien, fue la mejor idea, ya que, a pesar de tener nuestros padres divorciados pudimos crecer juntos.

—Que bueno.— Comentó la castaña.

—¿Y tú, Juri, tienes hermanos?— Preguntó el Kimura.

Juri negó con la cabeza— No, no tengo, pero, me encantaría tener uno, cuando era pequeña siempre me ilusionaba con tener uno, pero, tristemente no lo tuve.— Habló la chica— Debe ser genial ¿no?

Koichi asintió— La verdad es que es genial tener a alguien en quien confiar, con quién hablar y que sea sangre de tu sangre.— Comentó— ¿Sabes? Cuando yo era pequeño igual fantaseaba con tener más hermanos, tenía ilusiones de que mis padres volvían a estar juntos y que teníamos más hermanos, ya que, antes de reencontrarme con Kouji me sentía solo, y pues, quería tener a alguien con quién jugar, quería tener un hermano o hermana, pero, bueno, finalmente somos solo los dos y pues, me alegra que podamos acompañarnos.

—Ojalá yo hubiera tenido uno.—Habló la chica— Pero, tristemente mi madre murió cuando era muy pequeña.

Koichi hizo una mueca— ¡Ou! No lo sabía.

—No tenías formas de saberlo.— Juri suspiró— No te lo había comentado.— Hizo una mueca— Pero, así fue mi madre murió cuando era pequeña.

—Si no quieres contarme, no te presionaré a hacerlo.

Juri sonrió de lado ante las palabras tan amables del chico— No te preocupes, no me duele hablar de eso, ya es algo con lo que he aprendido a vivir, así como tu con la separación de tus padres.—Comentó— Es algo que simplemente pasó en mi vida y pues, aprendí a vivir con eso.

—Debió haber sido difícil pasar por eso ¿no?

Juri asintió— Si, pero, con mi padre supimos salir adelante.— Comentó— Él es mi mejor amigo, siempre ha estado para mi, ha estado conmigo y es en quién puedo confiar.

Koichi se mordió el labio inferior al escuchar esto— Que bien que tengas ese tipo de relación con tu padre.

—¿Tú no?— Preguntó la chica.

Koichi negó con la cabeza— No.— Respondió— La verdad es que la relación con mi padre ni siquiera la puedo titular como "relación" él vive centrado en su mundo, en sus cosas, y pues, ni Kouji, ni yo tenemos una relación muy cercana con él. Yo intento no tener rencor contra él o reclamarle las cosas, pero, la verdad es que es muy frío y distante.

—Que triste que no tengan una relación cercana con él.

Koichi asintió— Si, la verdad es que antes me enfadaba su forma de ser, pero, la verdad es que hay veces en la cual me gustaría tener una relación cercana con él, pero, sé que eso no es posible, ya que, él es un hombre...—Hizo una pausa.

—Complicado.— Miyako de forma sorpresa irrumpió en la conversación— Kousei Minamoto es un hombre complicado ¿Esa es la palabra adecuada? ¿no?— Luego de lo que había ocurrido Miyako sabía exactamente como describir al padre de los gemelos.

Koichi se mordió el labio inferior— Exacto.

*Quizás, Koichi en ese momento no era tan consciente de lo que decía, pero, verdaderamente su padre era un hombre complicado, muy difícil que le ocultaba algo y que pronto lo averiguarían*


Tomoki observó atentamente a Takeru quién parecía muy atento escribiendo algo, hace rato estaba como en las nubes, él no era así, al contrario, siempre estaba moviéndose de un lado a otro o estaba con Hikari, pero, llevaba más de una hora sentado escribiendo.

—¡Hey! Takeru.— Lo llamó.

El chico levantó la mirada— ¿Qué ocurrió?

—¿Qué onda contigo?— Preguntó— Llevas toda la tarde aquí encerrado, escribiendo.

—Es que, suspendieron el entrenamiento de basquetbol.—Respondió— Y pues, Hikari está ocupada con el tema del baile.

Tomoki se acercó a su amigo y observó la hoja curioso— ¿Qué estás escribiendo tan concentrado?

—¿E?— Balbuceo el rubio— Na-nada.— Contestó y dobló la hoja, pero, el oji-verde fue más rápido y se la arrancó de las manos— ¡Oye!— Exclamó el rubio— Devuélvemela.

—¡Oh vamos Takeru!— Exclamó— ¿Qué cosas escribes que no puedo leerlas?

Takeru frunció el ceño— Cosas mías.

Tomoki se alejó de él, abrió la hoja y la observó atentamente. Takeru se levantó del sofá y se acercó a él para quitársela.

—Mmm...Y cada noche, Que no te tengo, Siento por dentro, Dentro muy dentro.— Leyó el chico— Este deseo, De ver tu cuerpo juntito al mío.—Alzó una ceja— ¿Lo digo en serio?

—¡Hey! Devuélveme eso.— Exclamó el rubio y arrancó la hoja de sus manos.

—¡Uh! ¿Quién será la chica que te hace escribir este tipo de cosas?

—Nadie.

Tomoki rodó los ojos— No sé para que pregunto, es obvio que lo escribes para Hikari.— Dijo burlón— Por lo que escribes da la impresión de que quieres dar ese paso.

Y al escuchar esto el rubio se sonrojó a más no poder— ¿E?— Balbuceo— Eso no te importa.

—¡Vaya! Por ese sonrojo y esa respuesta me estás diciendo que tengo razón.— Comentó Tomoki, se cruzó de brazos— ¡Vamos, Takeru! Somos grandes, somos amigos de hace mucho, no tienes porque esconderme algo como eso.

Takeru se mordió el labio inferior, ya que, verdaderamente le daba miedo hablar con ese chico de ese tipo de cosas, Tomoki cuando eran pequeños era un niño llorón y mimado, pero, al crecer se había vuelto un chico que prácticamente se lanzó a la vida, algo parecido a lo que quería hacer él antes de esa noche, pero, mucho más loco y gozador.

—No quiero hablar de eso.

—¡Oh, vamos, Takeru!— Animó— No tienes que sentirte incómodo, yo soy la persona que mejor te puede aconsejar para eso.— Sonrió— Dime ¿quieres dar el paso con Hikari, no?

Takeru suspiró, sabía que su amigo lo presionaría hasta que le admitiese que si, ya que, verdaderamente era insistente cuando quería y hasta un poco molestoso. Nuevamente suspiró— ¿E? P-pues...—Balbuceo— Si.

Tomoki sonrió— ¡Ya era hora!— Exclamó— Ambos llevan mucho tiempo haciéndose cariños a escondida que verdaderamente me sorprendía que todavía no te atrevieras a faltarle el respeto.

—B-bueno, todavía no estoy seguro.— Suspiró— No quiero meter la pata con ella.

—Típico miedo de niñatos.— Comentó el oji-verde— Todos sentimos eso antes de dar el paso, pero ¿sabes? cuando llega el momento todo eso se olvida.

—Si, pero, Hikari es especial.— Habló el rubio— Y tengo miedo que cuando llegue el momento yo cometa algún error, que quizás sea bruto o no sepa como hacer las cosas.

Tomoki suspiró— Entiendo como te sientes.— Se acercó a él— Créeme cuando Suzie y yo dimos el paso temblábamos como locos.— Carcajeo levemente— Pero, cuando él momento se dé simplemente te olvidarás de todo, tus manos recorrerán su cintura, su torso, su rostro, tu boca su cuello, sus mejillas, toda su piel y olvidarás todo. Solo debes relajarte y dejar de pensar.

—¿Relajarme y dejar de pensar?— Repitió esa palabra.

—Si.— Contestó el castaño— Si haces eso verás como todo se irá dando naturalidad, no debes ponerte tan tenso, solo debes percatarte de que ella esté bien y ¡puf! todo se dará.

Takeru hizo notas mentales ante esto, verdaderamente hablar de ese tema lo emocionaba, pero, a la vez lo dejaba nervioso, no era un simple vivencia como cuando habían probado marihuana, sino que, era algo más especial, algo que marcaría su vida, y pues, quizás...si dejaba de pensar como decía el oji-verde todo saldría bien.


Para los que han visto la Reina del Flow, Tomoki actua como Pite de la reina del flow, imagínense que habla como él jajaj Lo que escribió Takeru es una canción que el quiere componer se llama "Estamos perdiendo el tiempo"

Discúlpenme por ser tan cortante en la última escena, pero, no sabía como terminarla y quería un momento entre Koichi y Juri donde pudiéramos averiguar un poco más de ellos, me costó, pero, creo que logré escribirla.

mariacredenza02: Si, Yamato y Mimi sufren por igual, pero, Mimi ya le dijo una parte de la verdad y creo que en parte los sorprendí, quería plantear lo que había ocurrido en parte con Damar y también funcionó para plantear algo entre el rubio y la castaña. Si jajaj la tensión no funciona entre ellos, los sentimientos ganan jajaj ya veremos como mejora su relación jiji Si, Mimi se llevó el momento divertido, pero, ya veremos como será cuando le toque el baño jajaj Creo que en parte todos entendemos la actitud de la Nonaka, es una chica fría y pues, hablar con una chica con la cual nunca había hablado y no le agradaba, Izumi quería hablar con ella, ya que no sabe verdaderamente como actuar con respecto a lo que se entendió, pero, bueno. Ojalá te esté gustando la historia, sigas leyendo y comentando, te mando un gran abrazo a la distancia.

Adrit126: Holaa si jsjjsj es difícil la situación, pero, ya veremos como lo harán Takuya e Izumi, ojalá se animen, pero, será muy difícil. Creo que dejé ver en este capítulo que hasta sus hijos lo encuentran un hombre complicado, pero, ya veremos que ocurre jijiji Damar, la verdad es que me retengo mucho para traerla, ya que, primero quiero pronunciarme en el conflicto de TakuyaxZoexKouji pero, cuando vuelva moverá el mundo de Kouji jiji así como hace tres años atrás, me alegra saber que te haya gustado su relación jiji Yamato y Mimi hablaron, la castaña en parte le pudo explicar la razón de su ida con lo que ocurrió con su hermana, pero, todos sabemos la gran razón de su parte para irse, ya veremos como será cuando se atrevan hablar del bebé. Si sería genial el tema de la canción, no lo había pensado, pero, lo tomaré en cuenta, quizás, para una idea futura jiji muchas gracias por la idea ¡Wow! Eres doctora, debe ser genial, pero, a la vez difícil ser doctora en este tiempo de pandemia, fuerza a la distancia para estos momentos, ojalá todo te salga bien y pues, ojalá no te contagies. Aquí está la continuación, ojalá te haya gustado, sigas comentando y te mandó un gran abrazo a la distancia.

Por primera vez les daré una red social mía jiji para que me sigan y quizás dé algunos adelantos por ahí: En Instagram me llamo a.a_girl