Capitulo 42

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Jon mira el cuarto blanco y suspira.

No entendía como todo se vino abajo.

Sabía que Daenerys estaba equivocada a la hora de abrir el coliseo.

Pero los rumores indican que no solo la han atacado, sino que escapo del ataque en Dragón, y si es cierto lo que indica Dothrakis la tomaron luego.

-Solo un lugar donde la llevarían- murmuro y se fijo en el monitor.

Llego a nivel 46 con 3 puntos de habilidad.

Se había encontrado con Daario y Jorah en el camino, ellos le explicaron la situación.

Al parecer según las noticias.

Jorah espiaba a Daenerys en nombre de Robert.

Esta lo exilio.

Jorah atapo al Gnomo Lannister como regalo para ganar su perdón.

Volvió a exiliarlo, y tomo a Tyrion Lannister como consejero.

Jorah se convierto en mercenario en el coliseo, para ganar su perdón nuevamente.

Todo se fue al carajo cuando los hijos de la arpía aparecieron.

Drogo apareció también, quemando todo.

Daenerys desapareció con él.

Jorah y Daario la siguieron mientras Sir Barristan estaba a cargo de Meeren con Tyrion.

Y ahora Jon los encuentra.

El chico suspiro y salió del cuarto blanco.

No sabía cómo tomarse las noticias.

Jorah es un traidor del norte, ya ese hecho le era desagradable, pero ahora resulta que el traidor fue perdonado por el rey, pero no cambia el hecho que vendió esclavos.

Por otro lado también libero esclavos.

No podía decidir qué clase de hombre era.

Bueno.

Malo.

Un oportunista.

Un tonto.

O todo eso y más.

Pero por el momento no opinaría en su contra, su lealtad a Daenerys es clara, o más bien su amor, cosa que Jon lo encontró molesto, pero decidió ignorar eso.

Por otro lado.

Daenerys puso al gnomo de concejero, el Lannister, la familia que estaba en guerra contra su familia.

Por otro lado, el Gnomo según los rumores odia a su padre.

¿Lo hacía algo del agrado de Jon?

No.

Pero al menos podría soportarlo.

O al menos eso presumía.

No lo conocía, solo con rumores.

Había escuchado que frustro los planes de Stannis Baratheon.

Pero que fue condenado por matar a su sobrino.

Joffrey era el enemigo de su familia.

¿Pero no podía confiar en alguien que asesino a su sobrino, cierto?

-¿Solo puede estar en un lugar?- dijo Jorah.

-Vaes Dothrak- dijo Jon.

Jorah cabeceo.

-Las khaleesis son llevadas ahí, cada vez que su Khal muere- indico él.

-¿Tenemos un plan?- pregunto Daario.

-¿Que tal tu dothraki?- pregunto Jon.

-Bueno- respondió Jorah.

-Ok. Mis hombres y yo seremos la distracción, ustedes, encuentren a Daenerys- dijo el chico.

Daario cabeceo.

Jorah también.

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Ned mira atentamente la mesa, se encontraba mirando un mapa del reino de los ríos, preparándose para el próximo ataque del valle.

-Mi señor- escucho y vio a un maestre entregarle una nota.

Lord Stark

Me dirijo a usted con esperanza de que haya paz

entre nosotros.

Soy el actual guardián del valle como padre

de Robin Arryn, el hijo de su querido amigo

Jon Arryn. Sé que no tiene ninguna razón

valida para confiar en mí, no después de mi

involucración en su arresto, en el desembarcadero del

Rey.

Pero le aseguro que tanto mis intenciones con

Robin, como en el desembarcadero del rey

fueron solo por el bien de los siete reinos.

No creí en que lo que usted investigaba sea

correcto, fui criado en el país de los ríos, me

sentí obligado de defender a la reina y al príncipe

joffrey. No podía realmente creer lo que usted

decía.

Aun no lo hago completamente.

Que los príncipes y la princesa son hijos de

el matareyes y no de el rey Robert.

¿Me culpa por no creer eso?

No voy a disculparme por lo que hice.

Lo considere correcto, arrestar al esposo de mi

querida amiga Catelyn, o dejarlo cometer

traición, una traición que podría destruir completamente

a los siete reinos.

¿Me equivoque?

Los siete reinos están sangrando Lord Stark,

ahora sin duda, usted creerá que estoy preparando

una invasión.

Se equivoca, mi principal objetivo es el mismo

que siempre. La paz, la defensa, y la estabilidad de

los siete reinos.

Como maestro de moneda, fue mi trabajo,

como padre de Robin, es mi trabajo.

No, Lord Stark.

No estoy preparando ni ataque, ni defensa.

Presente mi lealtad y la del valle a Joffrey,

por la única razón, de que él se sentaba en el

trono de hierro.

Planeaba presentar mi lealtad hacia Tommen,

pero la situación a cambiado.

Luego de la boda roja, mi vergüenza no se pudo contener

mas.

¿Cómo el rey Joffrey pudo ordenar semejante masacre?

¿Cómo Lord Tywin llego a caer tan bajo?

Luego de eso empecé a durad, y me fui del

desembarcadero del rey.

El matrimonio de Lisa me ayudo mucho a ver la verdad,

tenía razón, mi señor.

No planeo nada contra usted,

no mas traiciones.

No planeo atacarlo, pero si defenderme si lo requiero

le deseo una pronta victoria, en su guerra por

justicia.

Y para enmendar un poco lo que hice,

entregare algo de información.

Daenerys Targaryen, la hija del rey loco, ha tomado

las ciudades esclavas. Supongo que esa información

ya llego a usted, pero en los últimos días, me enterado

de que el rey de Volantis, es su nuevo aliado.

Respecto a él, hay muy pocas cosas que se saben,

pero lo cierto es que, de alguna forma el tomo Valyria,

y es también rey de Volantis,

como vera los Targaryen volverán pronto, con el apoyo de cinco

ciudades, y si los rumores son de creer con tres dragones.

No es el momento de pelear entre nosotros, mi señor.

Un saludo con respecto.

Lord Petyr Baelish

Lord Protector del Nido de Águilas y del Valle de Arryn.

Ned frunció una ceja.

-Menique tratando de manipularme, admito que es persuasivo- musito él.

-Pero algo de información es buena, no sabe de Jon, o de Aegon- pensó él.

-Si declaro mi lealtad a Aegon, esto se esparcirá por los siete reinos, incluso Menique sabrá, la conexión entre Valyria y el norte se sabrá- musito él.

-¿Ned? – escucho y vio a Catelyn entrar.

La mujer cerró la puerta y se acerco a él.

Ned lanzo un suspiro y la mujer miro la carta.

Ned cabeceo.

Ella releyó todo.

-¿no te crees esto, cierto? – pregunto ella.

El la hizo sentarse en sus piernas, donde la mujer pudo recostarse contra su pecho.

-Claro que no, pero la información no está mal, Menique sabe de Valyria, pero no quien es realmente el rey- dijo el dijo acariciando sus muslos con una mano.

-Eso significa que Tywin tampoco- dijo ella recostando su cabeza en el hombro de él.

-Exacto, y tampoco de Aegon. Lo que nos da otra opción- dijo él.

-Secretismo- susurro ella mientras su marido besaba su cuello.

-mientras no hinque la rodilla en público, Aegon es un arma secreta- dijo él.

Catelyn lo beso y este correspondió.

-¿Deseas que me quede un rato más?- ronroneo la mujer.

Ned metió sus manos por debajo de su falda y tomo su ropa interior bajándola como respuesta.

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Robb mira a Talisa en la cama, habían decidido quedarse hasta que el bebe nazca, con suerte unos días. Había subido un nivel, entrenando con sus hermanos, estaba en nivel 20 con 2 puntos de habilidad.

Miro a su mujer mirarlo acostada con un enorme estomago en la cama.

-¿Entonces todo listo?- pregunto ella.

Robb cabeceo.

-Mance se acomoda, me dio dos mil hombres para que ayuden en la guerra, y otros mil en el muro- indico él.

-Sería lindo ver Volantis con el bebe, quisiera que mis padre lo conozcan- dijo ella.

-Claro, lo prometo- dijo él.

El chico la vio y sonrió.

El chico también lo hizo.

Ya había hablado con su padre y este acepto que vaya a Volantis, la razón era conocer al resto de su familia por parte de Talisa.

Pero también era desarrollar su conexión con Jon.

El juego les permitía comunicarse.

Pero el heredero de Ned debía presentarse formalmente con el rey de Valyria, sin contar que tomar nota de sus ejércitos, recursos, asegurar alianzas.

Por más que Jon sea su hermano.

Requería mínimamente que sus hombres lo vean, que sepan de la alianza de Valyria y el norte, más que de palabra.

Que vean a Robb Stark y Jon Nieve juntos.

Hablando, cenando, negociando.

Una política necesaria para que los hombres sepan que esta alianza es real y que la guerra en Poniente afecta a Valyria, de modo que en el peor de los casos, los soldados estén preparados.

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Bran miro desde la ventana del salón, no podía creer lo mucho que extrañaba Invernalia.

Salió del lugar para ir a su cuarto, fue cuando la vio, mirando por una ventana la luna.

Meera Reed.

El chico sigilosamente se acerco.

Ella no lo noto hasta que el rodeo su cintura con los brazos.

Aunque no grito.

¿Qué es lo que eran?

¿Pareja?

¿Amigos cercanos?

¿Compañeros?

¿Todo eso?

Bran no sabía bien.

No habían hablado.

No con los caminantes y salvajes tras ellos.

Pero ahora en la seguridad del castillo de los Stark.

¿Hacía falta hablar?

¿Qué dirían?

¿Sus sentimientos?

¿Porque?

Ambos lo sabían.

Lo notaron en su viaje.

La química.

El deseo.

Meera se acomodo en los brazos del chico.

Disfrutando el aroma de este.

No negaría sus sentimientos.

No importando que él sea un Stark, y ella una simple Reed.

El hijo del guardián del norte.

Un rey en toda la regla, solo que sin coronar.

Y ella que, ¿una Lacustres?

Pero eso no detuvo a Brandon Stark.

-Bran esto está mal- susurro ella.

-No me importa- le dijo él, ella se dio vuelta y lo miro a los ojos.

-Debemos parar- dijo ella al verlo tan cerca.

-Nunca voy a parar- prometió el.

Sus labios se tocaron.

Sus emociones explotaron.

Meera Reed no se separaría de Brandon.

Ni la guerra, ni la muerte la alejaría de él.

Sus labios juntos no bastaban, para la cantidad de emociones, pronto sus lenguas se unieron.

-¡Qué asco!- escucharon y se separaron de pronto.

Bran miro sonrojado para atrás, su hermana Arya los miraba apoyada en una pared.

-¿Desde cuándo estas ahí?- pregunto abochornado.

Arya alzo una ceja.

-Estaba aquí antes de que llegaras, le miraras el culo y la abrazaras- indico ella.

Meera se sonrojo a un rojo tan profundo que parecía que su cara se tornara oscura.

Bran balbuceaba incoherencias.

-¡No mire nada!- dijo el defendiéndose.

-Estaba aquí, ni me viste, saliste directo a tus prioridades, y según vi…Te quedaste unos cuarenta segundos, observando la retaguardia de tu amante- dijo ella.

Bran tuvo que sostener a Meera que casi se cae.

Creo que la palabra amante, era lo máximo que la chica podía soportar.

-Saben, para esta clase de situaciones, es que los cuartos tienen puertas, ¿porque no van a uno?- dijo Arya yéndose de ahí.

-Maldita…Me las va a pagar- susurro Bran.

No noto a Meera aun en sus brazos tratando de recuperarse de la impresión que tuvo.

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Talisa miro con felicidad al niño que acababa de dar a luz.

Robb se acerco se recostó cerca de ella.

La mujer transpiraba agotada pero sonreía sin perder la vista de su hijo.

Robb también lo miraba lleno de orgullo.

-¿Cómo lo llamamos?- pregunto ella curiosa.

-Jon…Jon Stark- le susurro él.

Ella cabeceo.

-Jon- musito ella mientras miraba al bebe con adoración.

Robb sintió una luz se encontró en el cuatro blanco, fue directo al ordenador.

Felicidades por el nacimiento del primer Stark

de esta generación. Se te dio los puntos de experiencia

necesarios para subir de nivel y dos puntos extra como

Premio.

Robb sonrió y salió de la habitación.

La puerta se abrió y Arya entro, Bran y Rickon después de ella.

Arya noto al nuevo integrante de los Stark primero.

-Oh ya era hora de que salga- dijo ella.

Robb frunció una ceja.

Talisa sonrió.

-Les presento a Jon Stark- dijo ella.

Los Stark la miraron y sonrieron.

-Un buen nombre, aunque temo que a nuestro hermano no le gustara mucho, jon detesta su nombre- le dijo Rickon.

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Ned miro a su hija aparecer frente a ellos.

-¿Arya?- pregunto él.

Estaba cenando con su esposa.

-Talisa dio a luz, todo bien, un niño sano- les dijo ella.

Ned sonrió y Catelyn se mostros muy feliz.

-¿Nombre?- pregunto Ned.

-Jon Stark- le aclaro Arya.

Ned cabeceo.

-Me lo hacía venir- dijo él.

La puerta se abrió.

-¿Arya?- pregunto Sansa al entrar y verla.

-Jon Stark nació- dijo ella.

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FIN DEL CAPITULO