Harry Potter pertenece a JK Rowling.

Tokyo Ghoul pertenece a Sui Ishida.

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Este es un Fic con una Fem-Harry (llamada Artemisa, en esta versión), podríamos decir que es como otra versión del Fic "La Chica del Rayo".

Aquí Artemisa será un Ghoul (Estilo Tokyo Ghoul).

Aquí los padres de Artemisa, están vivos, y tiene dos hermanos menores.

Harem: Hermione Granger, Padma Patil, Daphne Greengrass, Susan Bones, Tōka Kirishima, Lily Potter y Stephanie (su hermana menor OC).

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Artemisa: The History of The Queen Ghoul

Aogiri es una organización Ghoul de carácter bélico y tenía como objetivos. cazar a los investigadores Ghoul que se acercaran al distrito 11 y lograr formar una alianza, con los Ghouls que comandaban anárquicamente el distrito 13.

Mientras que Anteiku era pacifista.

El líder del Aogiri, era Yoshimura Eto, amante del investigador Ghoul Kishō Arima, tienen el falso deseo (a los ojos de sus subordinados) de conquistar Japon, mientras que, en privado y solo siendo ellos dos conocedores de ello, querían lograr un ataque terrorista tan masivo y perjudicial, que los Ghouls y los humanos se vieran forzados a trabajar en comunión.

Ambos confiaban, en que su hijo Yoshimura-Arima Kaneki (1), lograra ser algún día, un Rey de un Ojo, más pacifista, que lo que ellos dos iban a lograr ser.

Siendo Arima tan respetado, había logrado dejar notas muy claras para los actuales Ghouls prisioneros en la CCG "Prepárense para escapar en cualquier momento, busquen a Anteiku o Aogiri"

Así mismo, Eto y Arima, enviaron a su hijo a Anteiku, a que aprendiera también, sobre el otro lado del espectro, a que viera como se vivía en el lado pacifista de los Ghouls.

Ni el señor Yoshimura, ni la señora Hikari, encontraron mal, que un joven Ghoul de cabellos verdes y ojos grises, buscara trabajo.

―Les agradezco, por permitirme trabajar en su cafetería. ―Dijo el joven, quien pronto se haría amigo de "Misa", Tōka, y Hikari. Pronto, se hizo amigo de una niña llamada Hinami, hija de una Ghoul pacifista, llamada Ryōko, a la cual a veces le daba miedo salir de cacería, para Anteiku no suponía ningún problema, ayudarla con alimentos; pero la mujer dijo, que necesitaba hacerlo por sí misma, y ellos aceptaron cuidar de Hinami.

Finalmente, cuando la cafetería estaba cerrando, Ryōko e Hinami se fueron a su hogar, o eso querían hacer, solo para cruzarse con dos investigadores Ghōul.

―Odio mucho la lluvia ―dijo uno de los hombres. ―Me fastidia la vista y el olfato, pero... puede llegar a ser buena, a la hora de trabajar. Pero, de todos modos, es buena, en algunas cosas: elimina el barro y el grito de los cerdos. ¿Le molesta si le hablamos un momento, señora Feuguchi Ryōko? Tengo preguntas para usted, sobre esto ―enseñó la máscara. ―Creo que usted, conoció a la portadora de esta mascara.

― ¿Qué ocurre, policías? ―preguntó un hombre.

Uno de ellos sacó una placa. ― ¡Somos investigadores Ghōuls, evacuen de la zona de inmediato! ―ordenó. Los humanos se fueron.

―Mamá ―dijo Hinami.

―Hinami, corre y pídeles ayuda ―ordenó Ryōko, mientras sus ojos se activaban con el Kakugan, antes de activar su Kagune: Ukaku, un par de alas.

―Ha sacado sus garras ―dijo uno de los investigadores, calmado.

―Eso parece.

―Creo que llegué justo a tiempo ―pensó. ―Colovaria ―su cabello negro/blanco, se volvió azul y se colocó su máscara, y se acercó sigilosamente.

Uno de los Investigadores dio un paso al frente, solo para ser cortado, por la velocidad del Ukaku de Ryōko.

― ¡Nakajima-San! ―gritó otro investigador, quien intentó atacar, solo para recibir un golpe del Ukaku.

―No los dejaré pasar ―dijo Ryōko.

―Oka... Okasan...

― ¡HUYE! ―Gritó la mujer.

Alguien comenzó a cantar. ―Con cautela irás. Porque dios observa, los pasos que das... ―caminaba hacía ellos. ―aunque muy lejos esté... sabré que segura, estaré.

― ¡Señorita, salga de aquí, estamos conteniendo a una Ghoul! ―dijo uno de los investigadores.

―Entiendo ―dijo la chica de cabello azul, sonriente y levantando las manos. ―No quiero problemas, ni tampoco quiero, interponerme en su trabajo, señor investigador. ―los hombres ignoraron a la chica, solo para que una larga aguja, (resultando esa aguja ser el dedo Kōkaku de la chica) acabara con la vida de un investigador, cuando atravesó su cerebro.

― ¡Fujiwara! ―gritó otro investigador.

―Tenemos a una peleadora ―dijo otro de los investigadores, mientras que activaba su maletín y un martillo gigante, aparecía, corrió hacía la chica, la cual se mantuvo quieta y tranquila.

La chica alzó una varita de madera. ― ¡Expelliarmus! ―el martillo salió volando de la mano del hombre, el cual miró su martillo volar lejos. Se distrajo y acabó apuñalado por el Bikaku de la chica, justo en el pecho.

― ¿Quién es esta chica? ―gruñó Mado, ahora enfadado, sin entender mucho, de lo que la chica hizo.

Mientras que Ryōko atacó a otro, matándolo.

Los investigadores, vieron a la chica destruir los maletines de los demás investigadores, y tomar sus gabardinas.

Mado y Amon se miraron, antes de salir corriendo, dejando en paz a Ryōko a la chica misteriosa.

―Hola, Misa-San ―dijo Ryōko feliz de seguir viva.

―Hola, Ryōko-San ―dijo Misa, agarrando dos gabardinas de dos de los Investigadores. ―Venga, esto le servirá para protegerse de la lluvia. ―Ella misma se colocó otra y la tercera sería para Hinami.

Fueron hacía Anteiku, viendo a varios de los trabajadores, entre ellos a Kaneki y a Tōka corriendo hacía ellos, pero la camarera y la ama de casa, volvían a paso calmado.

― ¡Mamá! ―dijo Hinami abrazándola, mientras que, sobre sus hombros era colocada una gabardina. ― ¡Gracias Oneesan!

―De nada, Imōto ―dijo Artemisa, acariciándole el cabello.

54: Las ideas del viejo fénix

Albus Dumbledore, reunió al resto de La Orden del Fénix. Con el Ministro Fudge, ahora habiendo admitido públicamente que Voldemort estaba vivo y tantas otras cosas, así como tener a dos miembros de La Orden (Sirius y Nymphadora), trabajando horas extras, junto a Amelia Bones, en busca de dar con los otros Mortífagos o simpatizantes de Voldemort, le permitió al anciano director, hacer dos cosas: Uno: Continuar con la búsqueda de los Horrocruxes, y hablar seriamente, sobre lo ocurrido en el Departamento de Misterios, en el mes pasado.

Por desgracia para él, Alastor Moody, Sirius Black y Remus Lupin, llegaron a la conclusión de que preferían ver a los Mortífagos muertos, antes que encerrados en Azkaban, de donde podría eventualmente sacarlos y devolverlos, a sus filas.

Esto, pronto les dio muchos simpatizantes a los Potter, pero no sólo dentro de La Orden del Fénix, sino también magos de a pie, quienes exigían la Pena de Muerte, para estos Magos Oscuros y para sus simpatizantes (como Dolores Umbridge, por ejemplo), al tiempo que los magos del lado lumínico y muchos del lado neutral del Wizengamot, colocaban todo tipo de protecciones para sus casas.

Albus, había estado atacando a los chicos, en repetidas ocasiones, y esto disminuyó su carisma ante el público, haciendo que recibiera ataques, de parte de los magos civiles de Inglaterra, siendo llamado "Simpatizante de los Mortífagos". Y, aunque muchos trataron de desestimar y de lanzaron ataques verbales corta los nuevos enemigos públicos y políticos de Dumbledore, la verdad era que los magos civiles, estaban cansados de los extremos, representados por Dumbledore y Voldemort.

Pero pronto, Dumbledore calmó los ánimos de todos, se limitó a decir que debían de continuar en pie de lucha, contra los Mortífagos. Había estado intentando comunicarse con los Potter, con muchos medios de todo tipo, pero nada funcionó. Aparentemente, creía que aquello de que ellos habían salido del país, era solo una farsa y que estaban bajo algún Fidelio, aún dentro de los límites de Inglaterra, pero al no haberlos encontrado, con ninguna lechuza marcada o hechizo, lanzó un hechizo de localización, llamado Consecutus, a lo largo de Europa.

Solo para palidecer, al no encontrarlos.

— ¿Realmente han ido a Japón?, ¿En qué están pensando?, ¿Cómo se atreve Artemisa a desobedecerme?, ¿Acaso no ha entendido nada?, ¿No entiende que esto no es un juego?, ¿No ve que es importante escucharme? —todos esos, fueron los pensamientos del anciano, ahora bastante enfadado, con esa chica que tantos de sus planes, había deshecho, con el pasar de los años, al no ser para nada como él planeó o con quería que fuera en cuanto a su personalidad. —Con estos asesinatos, cometidos contra los Mortífagos... Definitivamente, no debo de seguir gastando mi tiempo con una asesina. —sentenció para sí mismo. Necesitaba reorganizar sus planes, eliminar y dejar de preocuparse definitivamente de Artemisa, y continuar su búsqueda sobre los Horrocruxes de Tom. Los despidió a todos, y solo entonces, la suerte le sonrío, al ver algo familiar, pero... No podía ser, ¿O sí?, se acercó para inspeccionarlo y su corazón latió de alegría, al poder verificarlo, con dos hechizos, lo hizo levitar y luego invocó un pañuelo, para después guardarlo en sus ropas y llevárselo. Pensar que un trozo del alma de Tom, estaría en la mismísima casa Black. — ¿Qué puedo ofrecerles a los duendes de Gringotts, con tal de que, si bien no sé unan a Tom, no tomen partido de ninguna forma? —prefería que los duendes se quedaran en su banco, e hicieran la vista hacia otro lado, a que se aliaran con Tom, y comenzaran a obedecerle, cerrando las cuentas de los miembros de La Orden del Fénix, poniéndolos a ellos en un aprieto económico y volviendo a su bando en la guerra, insustentable.

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(1) Sabemos que Kaneki, es el apellido del personaje, pero sinceramente, nos gusta mucho como suena, y no creo que puedan aceptar, que le cambiemos el nombre "Ken" o "Kaneki" y coloquemos algo de nuestro agrado o algo así. De tal modo, que trataremos "Kaneki", como el nombre de pila del personaje.