POV Apple.
Este verano había pasado casi todo el mes de julio y agosto entero fuera de la ciudad, primero con sus padres y el resto con su mejor amiga y su prima. Así que cuando Daring le propuso un fin de semana en su casa de vacaciones con su familia lo primero que pensó fue en denegarlo.
Hacía como menos de una semana que había vuelto y le apetecía poco volver a marcharse ya y encima con su exnovio y los padres de él, por mucho cariño que les tuviera. Pero mientras le comentaba que no iban a ser solo ellos dos porque iban también sus hermanos, su bombilla se encendió rápidamente al escuchar el nombre de Darling. Le pareció el momento perfecto para disculparse con ella por lo ocurrido en su conversación de la piscina municipal, aunque ya sabía que había pasado tiempo de eso y no había hablado con ella (en el pueblo de Briar la cobertura y los datos móviles casi ni iban), pero quería muchísimo disculparse porque hasta ella misma había notado que con el tema de que le gustaba Raven, los sentimientos de su amiga de la infancia los había ignorado con creces.
Tal vez por eso ahora le tocaba sentir lo mismo, ya que en los últimos días solo pensaba en sí Darling hubiera hecho algo diferente en vez de dejarla sola e ignorada si hubiera sido todo el fin de semana Raven. Y no era por hacerse la víctima, pero estaba muy segura de que algo hubiera sido distinto porque habiendo escuchado todo lo que sentía por su amiga no la habría dejado de esa manera tan fría como a ella, es que ni siquiera la miró en todo el viaje en coche.
"Apple ¿estás segura de qué lo pinté de azul? Pensaba que Briar era más de rosa" Le preguntó indecisa la chica gótica debido a que le pareció raro que lo quisiera de ese color y no de rosa.
"¿Qué? ¿He dicho azul? Lo siento, si de rosa por favor píntalo" Desde que había vuelto como decía su madre se perdía bastante, su cabeza había continuado pensando sobre lo que paso el fin de semana entre Darling y ella.
"Vale, es que ha sido raro que me digas azul" Dijo antes de comenzar a pintar la caja.
Sabía que debía de dejar de pensar en el tema ese y empezar a pensar en el decimoctavo cumpleaños de su mejor amiga, más concretamente en el regalo que debió de tener listo ya y no estar haciéndolo la tarde anterior a su fiesta. Se había ofrecido a hacer la caja ella porque sus amigas no tenían tiempo (Ashlynn por su trabajo en la zapatería y Blondie por…, no lo sabía exactamente, pero dijo que no podía) y entonces acordaron que comprarían los regalos y ella ya se encargaba sola de que quedara bonita la caja con los 18 regalos dentro. Y al contrario que ellas, aún no había cumplido su parte porque se acababa de poner a hacerlo a las siete del día de antes.
"Gracias por venir Raven, te lo agradezco muchísimo porque si no estoy segura de que no me da tiempo a terminarlo mañana" ¿Cómo podía estar haciéndolo tan tarde? Aunque bueno al menos estaba haciéndolo ahora porque si no llegaba a ser por Ashlynn que le preguntó cómo había quedado seguiría sin acordarse de que tenía que hacerlo, si es que casi ni tenía una caja de cartón para hacerlo.
"Me gustan las manualidades ya lo sabes" La suerte hizo que a Raven fuera la mar de creativa y por supuesto que tuviera una caja de cartón en su casa.
"También agradezco que te gusten porque yo soy malísima con ellas" Ella era de estudiar y hacer trabajos en Word o PowerPoint, pero lo que eran cosas artísticas no era lo suyo. Tenía claro que era la última vez que se ofrecía a hacerlo, la próxima vez que lo hiciera Blondie que fue la que quería regalar eso a Briar después de ver aquel Tik Tok.
"En serio me encanta ayudar, el otro día también ayudé a Holly porque quedamos antes de nuestra cita doble, ya que quería regalar una caja sorpresa a Darling. Ya sabes de estas que levantas la tapa y se despliegan las cuatro paredes que están llenas de chocolates y demás dulces pegados, que luego hay otra caja dentro igual y otra, y otra…"
Se había prometido centrarse únicamente en el regalo de Briar, pero la mención de la única chica con la que se había llegado a besar en los labios tantas veces y sin que fuera por ningún juego, junto con el nombre de Holly hizo que volviera a su cabeza aquel momento en que la dijo que se sentía como una mierda por haber puesto los cuernos según ella. Ese fue el único instante en que hablaron y que la miró a los ojos más de unos segundos desde que entraron en el coche, desde aquello no sabía nada de ella.
"Oye ¿tú crees que son cuernos unos besos con alguien que no es tu pareja?" No lo consideraba como infidelidad, pero tal vez ella podía estar equivocada.
"Diría que sí, pero claro depende de cada situación porque un beso puede significar mucho o nada, depende de lo que uno sienta al darlo" Para ella misma si Dexter se besará con otra persona lo consideraría infidelidad dependiendo de la intención con la que se hubieran dado el beso ese.
"Me lo preguntas por lo de Cerise ¿verdad?" Terminó preguntándola porque le pareció muy inesperada aquella duda.
En verdad ni siquiera se había acordado de aquello de la graduación de 4º ESO de hace dos años, Cerise luego le comentó a Raven que solo fueron unos cuantos bailes y un beso, pero por su parte no de la del rubio. Ella no había añadido a la lista de otras de su exnovio a Cerise Hood porque no considero aquello como infidelidad, lo que pasó es que lo considero una gran falta de respeto hacia ella de Daring porque vale que él no la beso, pero las miraditas que la echaba y demás filtreo sin pudor delante de su cara no podía dejarlo pasar. Aunque si hubiera tenido que elegir a la amante perfecta del rubio hubiera sido Cerise porque nunca espero que otra chica quisiera hablar con ella y contarla que lo sentía el haber coqueteado con su novio y posteriormente besado.
"No, solo estaba pensando que es exactamente cuernos y que no" Más o menos era lo que estaba valorando con aquella pregunta sobre qué considerar un beso que no es de tu pareja.
"Dime que no es porque estás pensado en perdonar a Daring y volver con él, por favor Apple has aguantado desde principios de verano, no caigas en su trampa ahora" Si hubieran estado sus padres se hubieran enterado perfectamente de que no estaba con Daring desde hace bastante.
"¿Qué? No, no estoy pensando en eso actualmente" Que no se preocupara su amiga porque desde hace tiempo no se replanteaba reanudar su relación con él.
"¿Entonces por qué es? Te llevó notando rara como desde el domingo por la noche o el lunes, porque desde esos días cuando me has escrito o llamado parecías súper feliz y ahora que has vuelto estás mucho en tu mundo interior. Analizándolo todo calladita y haciendo preguntas de parejas de repente como siempre que dejas a Daring. Algo debe haberte pasado allí para que estuvieras tan feliz los últimos días antes de venir y ahora que has vuelto ni siquiera sales de tu casa"
"No me ha pasado nada Raven, deja de imaginarte cosas" Añadió dirigiendo su mirada hacia la carta que debería ya de haber escrito a Briar como habían hecho sus otras dos amigas ya.
Su pregunta la hizo pensar porque ni sus padres ni sus amigas le preguntaron algo así, simplemente la notaron extraña decían. Y la novia de Dexter había intuido perfectamente que algo le ocurrió porque citó justo los días en los que empezó a besarse con su amiga de la infancia y excuñada, y sinceramente sintió muchas mariposas en el estómago a cada hora que pasaba después de que la besara la primera vez. Desde que escuchó aquella confesión privada en la que le contaba a Rosabella sus profundos sentimientos por Raven, aunque se suponía que le gustaba su excuñada, en verdad las emociones que causaba la chica Queen en Darling la hicieron tener muchísima envidia. Y estudiando su comportamiento anterior diría que la aconsejo no confesárselos porque Raven ya tenía el maravilloso amor de Dexter y como la egoísta que era no quería que también tuviera el de Darling. Cuando a ella le había ido tan mal con Daring porque él no había sido tan romántico ni tan buena pareja como Dexter y estaba segura de que tampoco sentía tantísimo por ella como su hermana hacia la chica que ahora estaba en su cuarto.
"Por cierto yo creo que me voy a ir ya, si no te importa, solo queda barnizarla si tú quieres para que así se queden bien pegadas las fotos" Su excuñada comentó después de pegar la última fotografía y mostrársela para que diera su visto bueno.
"Claro, vete que ya es tarde, muchas gracias por tu ayuda en serio" Respondió mirando la hora en su iphone, ya eran las diez de la noche y su amiga tenía una vida también.
Se dieron un abrazo de despedida mientras que la volvía a agradecer su ayuda porque si aún le quedaba cosas por hacer, sin ella se estaba imaginando que le tocaría estar despierta hasta la madrugada. Se despidieron dándose un beso en la mejilla cada una a la vez, como solía hacer siempre con sus amigas más cercanas, y luego ella se fue de su habitación diciéndola que la quería. Si hubieran seguido a principios de verano su corazón hubiera empezado a latir mucho más rápido, pero ahora solo siguió latiendo igual porque sentía que a aquellas palabras venían por parte de una muy buena amiga suya a la que tenía aprecio.
La noche restante se quedó hasta tarde porque aunque tenía la mañana siguiente para poder dar los últimos retoques al regalo, antes del mediodía se tenía que ir con sus padres que se iban a comer a casa de su abuela y entonces no le daba tiempo. El lado positivo fue que gracias a que Raven pintó y decoró el exterior de la caja al igual que trajo cosas para rellenarla como confeti y pétalos rosas, ella pudo encargarse de personalizar la mayoría de los regalos y hacer el álbum de fotos sobre todo. Aunque si hubiera una próxima vez no dejaría para lo último tener que ir pegando pequeños diamantes rosas y blancos en la botella de Ginebra rosa porque fue muy coñazo y lento. Y menos mal que sus padres volvieron a casa cuando ya había envuelto la botella y los demás regalos porque hace unos minutos estaban a la vista en cuanto alguien abriera la puerta y como su madre viera la botella de Larios la castigaría.
Al día siguiente, los minutos anteriores a que sus amigas pasaran a su casa a buscarla estaba por no ir al final. Normalmente le gustaban mucho esos acontecimientos que hacía su amiga y luego la caja regalo le había quedado muy bien (y eso que había más purpurina rosa en el suelo de su habitación que en el regalo), pero se sentía bastante ploff para ir incluso aunque se había puesto bastante mona para la ocasión. Pero por mucho que se le gustaba su outflit, esta noche de viernes no sentía una gran emoción por estar en un lugar con discoteca rodeada de bebidas y adolescentes hormonaditos.
"¡Chicas! ¡Qué bien que hayáis venido ya! Así me dais la primera opinión del sitio" En cuanto su amiga les dejó pasar, comprobó que los padres de Briar se debieron haber gastado bastante dinero para sus dieciocho años: entre el coche que le regalaron y el local de esta noche.
"Esta guay" El sitio parecía perfecto para una noche fantástica de fiesta adolescente de las que tanto iba, pero hoy en concreto no sentía nada de ganas de estar en una.
"¿Solo eso? ¡Ay, qué sosa estás! No sé qué te pasa, pero desde que volviste estás muy alicaída: no quieres salir de tu casa, Ashlynn te ha tenido que convencer para que vinieras… ¿Qué te pasa amiga?"
Iba a decirla que no le había pasado nada como cuando Raven le hizo la misma pregunta la tarde de ayer, pero justo apareció el nuevo novio de ella e hizo que se olvidara por completo de lo que la acababa de preguntar para centrarse en lo que le estaba diciendo él. Por un lado se alegró porque es que ya la frase de "no me ha pasado nada" hasta casi ni se la podía tragar ella misma, aunque que la dejara Briar sola hizo que se percatara de que de todas sus amigas era la única sin pareja. Muy curioso porque en el pasado fue la primera en tener un novio y ahora era la soltera del grupo y de esta fiesta, ya que todas sus mejores amigas habían traído a sus respectivas parejas.
Se le estaban haciendo tedioso estar y eso que solo estaba en los primeros minutos de la fiesta porque acababa de llegar hace poco, pero se sentía completamente sola porque sus amigas estaban pendientes exclusivamente de sus novios. Y no las culpaba: Blondie estaba con el suyo sacándose fotos para su Instagram, Briar suponía que contándole las ideas que tenía pensadas para esta noche al suyo, la que más notó su soledad fue Ashlynn. Seguramente porque estaba sentada en el sofá continuo al suyo mirando su bebida sin decir nada y aunque fue muy amable intentando sacarla conversación se sentía bastante sujetavelas entre ella y Hunter que estaba sentado a su lado. Por eso solo estuvo un rato corto hablando con ellos sobre qué les parecía el local, ya que luego prefirió ir a dar una vuelta por el jardín y dejarles a solas para no molestarles más. Hacía una noche muy buena de principios de septiembre, una temperatura estupenda sin frío ni calor y además el jardín estaba lleno de flores y árboles preciosos perfectos para admirar y oler, en especial el rosal con rosas que había en medio.
Se detuvo por unos segundos a olerlas y casualmente al girar su cabeza hacia el otro lado se encontró a una castaña con unas lentes de montura negra. Al segundo su corazón dio un vuelco enorme ante la posibilidad de pensar que si se encontraba allí la prima de Briar a su lado podría estar Darling, que la había vuelto a convencer de asistir con ella como en aquella fiesta de pijamas. Aunque sus ilusiones se rompieron al mirar un poco por encima de Rosabella y observar perfectamente que a su lado no estaba aquella chica de sonrisa risueña.
"Hola, Apple ¿buscas a alguien?" Le pareció que se lo preguntó con la respuesta ya contestada por ella misma.
"Hola, no solo estaba comparando las rosas, pero ¿tú qué tal estas?" Intentó que no sonara tan mal que hubiera encadenado una pregunta para ella después de la tonta respuesta que le dio a su cuestión anterior.
"Bien, terminando de leerme El retrato de Dorian Gray está bastante bien la verdad, cuando lo termine si quieres te lo dejo como a ti también te interesaba" Recordaba que le preguntó de qué iba aquel libro cuando se lo vio por primera vez y le dijo que le pareció interesante la sinopsis, aunque actualmente si se lo prestaba no tenía la cabeza mucho para leer con las vueltas que le daba al tema de Darling y ella.
Rosabella siempre le pareció una buena e inteligente chica y no porque fuera la prima de su mejor amiga. Los momentos que habían pasado juntas le contaba cosas muy interesantes y además solían tener los mismos gustos en películas, libros, música pop…, su personalidad no se parecía a Briar casi nada porque era muy tranquila y tímida. Pegaba bastante con Darling porque ella era igual en esos aspectos y estaba segura de que jamás encontraría a su excuñada en una fiesta o discoteca sin que la hubiera convencido alguien como su mejor amiga había hecho a la castaña.
"Por cierto ¿Darling no ha venido contigo esta vez?" Después de un buen rato hablando con ella y mirando hacia la entrada para pasar al local, su idea de que su amiga de la infancia estuviera en el baño era poco probable.
"No, no me ha acompañado hoy, está celebrando con Holly sus dos meses de novias" Pudo ver por un momento como la expresión de ella decaía al saber que la hermana del chico que le gustaba un poco, no había venido.
En aquel momento definitivamente aceptó que intentaba engañar a los demás cuando le hacían la odiosa pregunta de qué le había pasado en el fin de semana, porque sí, desde que Darling la dejó sola e ignorada se encontraba mal. Y en verdad no entendía cómo podía haberla afectado tanto eso porque ni cuando dejó a Daring se encontraba tan distante respecto a lo que la rodeaba, aunque también era verdad que nunca sintió tanto en tan poco tiempo con él. Admitía que ya había pensado alguna vez como sería romper la línea de excuñadas con la chica gótica, pero con Darling había sido una cosa inesperada que nunca se imaginó que pasaría entre ellas. Fueron tan divertidos sus besos a escondidas y la forma tan romántica de regalarla aquel joyero tan hermoso antes de que se dieran ese último beso tan íntimo que cada vez que lo rememoraba se sentía realmente mal y lamentablemente no era por Holly. Se sentía mal por no ser Raven o la O´Hair actualmente y ser ella, Apple White, solamente la amiga de la infancia y exnovia de Daring porque así sabía que Darling era como la miraba.
"¡Qué chicas tan guapas me acabo de encontrar aquí! Hola, Rosabella..., hola Apple" Pudo notar como su expareja usó un tono de voz más coqueto al pronunciar su nombre mientras se dirigía hacia ellas dos.
"Hola" Saludó intentando cambiar su expresión de desánimo al saber que ella no había venido, aunque seguramente él no notaría que se sentía triste en ese momento.
"Hola, Daring. Supongo que querréis estar a solas" Les dijo Rosabella al segundo de saludarle.
No hacía falta que se fuera ella, no eran pareja ni tenía especial interes de quedarse sola con él, además que podía decir que había notado como la castaña le lanzó una sonrisa triste a Daring antes de alejarse de ellos dos. Tampoco fue su intención echarle una rápida mirada de arriba abajo, pero él sí que estaba bastante atrayente para el sexo opuesto con esa camisa azul claro con el primer botón desabrochado y el pantalón blanco. Mientras le empezaba halagar como solía hacer a su atuendo, aunque sus ojos mucho a su cara no se estaban dirigiendo, sino un poquito bastante más debajo de ellos, se percató de una cabeza pelirroja a lo lejos acercándose donde estaba actualmente Briar sacándose una foto con algunos invitados.
"Daring ¿cómo has traído a Hopper?" Le preguntó porque sabía que él siempre solía venir con el chico tímido en su coche y porque además diría que todos en el grupo sabían que Briar iba a traer a su nuevo novio a la fiesta.
"Lo ha pedido él, decía que quería venir y darle en persona a Briar una cosa para su nuevo coche" Su amigo parecía algo masoquista porque la cumpleañera escribió perfectamente en WhatsApp que vendría su novio a la fiesta.
"Me está entrando mucha penita" Si ya le daba lástima que la castaña ignorara su amor que hubiera venido especialmente a darla un regalo atrasado de cumpleaños porque ella no estuvo en la ciudad para celebrarlo el 9 de agosto, le parecía súper adorable y a la vez se le rompía bastante el corazón.
Su amiga podría ser un poco más considerada con el pobre Hopper porque todos conocían del amor que sentía él desde siempre hacia Briar. Lo tímido que se ponía cuando le tocaba cantar el aguinaldo a las clases del siguiente año y recordaba perfectamente como él se tapaba la cara con la letra cuando les tocaba justamente cantarlo en la clase de la castaña y de Daring. Y por lo que le contaba su exnovio de lo que le había regalado era aún más adorable que antes, a quién se le habría ocurrido regalarle a Briar un pack de accesorios de color rosa (una funda para el volante, para el cargador del coche, un adorno para colgar…) para su nuevo coche MINI. Le molestaba algo que su mejor amiga tuviera a alguien que le profesara tanto amor como él, al contrario que a ella porque aseguraría que el amor de Daring no era igual a lo que sentía Hopper. Seguramente que algo bonito sentía por ella, pero no como Hopper o Darling a la novia de Dexter, además que él no estaba preparado para el compromiso y la monogamia sinceramente.
Al poco de su conversación empezó la fiesta de verdad, Briar dijo que la mayoría de los invitados ya estaban, así que no faltó el tiempo para que los adolescentes o más bien casi jóvenes comenzaran a tomar alcohol. Y como a las doce y media por lo menos la inmensa mayoría había bebido considerablemente, aunque ella llevaba como únicamente un vaso de sangría y porque hacía una noche algo calurosa. Había pensado en quedarse solamente hasta que se decidiera abrir los regalos porque con lo que había tardado en hacerlo por lo menos se quedaría hasta que la castaña los abriera.
"¿Qué haces aquí solita? Es raro que no estés con Briar disfrutando de la fiesta" Cierto, siempre que salían estaba con ella en la pista de baile, en la barra… Briar siempre la arrastraba a donde quería ir, pero esta noche la sustituyó por su amiga Faybelle y porque apenas tenía ganas de party.
"Estoy mal Daring, emocionalmente hablando" Había sido una mala idea venir porque no se encontraba dispuesta a pasarlo bien, debió de haberle dado el regalo a Ashlynn cuando vino a buscarla en vez de venir.
"¿Es por la persona que te gusta?" No había visto tan deprimida a su Apple en su vida diría y le molestaría bastante que fuera por lo que acababa de preguntarle.
"Sí, creo que me rechazó" Creía, más bien sabía que la rechazó porque ni contestó a su pregunta de si se había arrepentido ni a qué hubiera pasado si fuera Raven en su lugar, la dejó ahí plantada para luego ni escribirla ni llamarla.
"Entonces es un gran capullo el chico que te rechazó y mucho, lamento que te sientas así de mal en serio" ¿Quién en su sano juicio rechazaría a su preciosa exnovia? Aunque por una parte muy grande le pareció genial porque si ella estaba triste él podría ser perfectamente su hombro para llorar o mejor dicho su amigo para pasar un buen rato después de ese duro palo.
"Gracias por tu apoyo, creo que es el momento de que me vaya la verdad, no quiero arruinarte a ti también la fiesta" Sabía que a él no le iban mucho las cosas sensibles y sentimentales y ella ahora mismo era esos dos adjetivos que tan poco le solían gustar.
"Espera Apple, sé que estás mal, pero qué mejor lugar para animarte que una fiesta adolescente. Ya verás que te sentirás mejor con alcohol y buenos amigos a tu alrededor, ven vamos a retar a Briar a una partida de beer pong" La agarró de su mano antes de que diera un paso más para irse, qué mejor para que se sentiera bien que unas cuantas bebidas alcohólicas y si se emborrachaba pues ya estaba él para ayudarla si eso la ocurría.
Mientras la llevaba hasta donde estaban la mayoría de sus amigos y la mesa de ping pong, pensó en soltarse de su agarre porque en verdad no estaba para beber y jugar a esas cosas después del claro rechazo que le dio la hermanita de él. Pero también pensó en los días anteriores y estando en su casa no se encontraba diferente a como estaba ahora, tal vez como dijo Daring necesitaba olvidarlo ya y sentirse mejor en vez de lamentarse en silencio. Nunca había jugado al beer pong, lo había visto en cualquier película americana cuando había fiestas y ya, ni sabía las reglas. Aunque no le parecieron difíciles cuando se las explicaron, solo tenían que ir lanzando la pelota de ping-pong hasta el final de la mesa intentando que cayera dentro de alguno de los diez vasos que estaban colocados en forma de triángulo. Si encestaban el equipo rival debía beber de ese mismo vaso y para ganar debían colar la pelota en todos los vasos antes que los otros.
La primera vez que participaron ganaron sin dificultad a Briar y Faybelle, seguramente por el hecho de que ellas ya habían estado jugando varias partidas y su mejor amiga ni apuntar sabía ya porque casi dejaba tuerto a su pareja de juego. Pero aun así eso la hizo ser muy competitiva y una vez que terminaron la primera partida, le rogó a Daring que siguieran jugando contra otras parejas distintas porque le había gustado mucho. No se consideraba una persona competitiva, pero este juego la puso con muchas ganas de ser la mejor y por eso cuando la cumpleañera preguntó si hacían un rey de la pista le pareció una idea divina. Y eso que le costaba encestar en los vasos, pero Daring lo hacía muy bien y casi siempre colaba la pelota, así que no les fue difícil llegar a la final. Pero el dúo que formaban Hunter y Hopper le estaba tocando bastante la moral, quién iba a decir que el pelirrojo era tan bueno tirando que les habían hecho beberse el contenido de los nueve vasos como ellos les habían hecho al principio de la ronda. Y ahora le tocaba a ella encestar en el último vaso porque el rubio había fallado su turno y como no lo consiguiera le tocaría a Hopper y la miraba con cara de que no iba a fallar por nada del mundo.
Respiró profundo antes de dirigirse al frente, respirar hondo y calcular antes de tirar la pelota con toda su visión fijada en donde debía meter. Fueron segundos que casi ni respiraba esperando ver si había encestado y sí, lo hizo, lo consiguió y fue limpió, sin bote ni nada porque cayó directo en el vaso lleno de cerveza.
"¡Sisisisisi! ¡Hemos ganado! ¡Somos los reyes de la pista! ¡Jódete Hopper!" Estaba eufórica de haber ganado esta noche al beer pong y encima mucho más si había sido gracias a ella que consiguieron la victoria.
"¡Esa es mi Apple! ¡Choca los cinco!" Le pidió Daring nada más gritar su reciente victoria.
Ganar fue la guinda del pastel que hizo que olvidara por completo su triste vida amorosa y se centrara solo en beber los mojitos que le ofrecía el rubio o Briar algún chupito mientras se reía por las bromas tan tontas que le contaban. No podía creer como hace unas horas estaba triste por no sentirse querida como quería por su amiga de la infancia. Esta noche se tenía que divertir a lo grande se dijo así misma antes de dirigirse a la pista de baile que estaban poniendo reggaetón del duro. Era la primera vez que iba sola a bailar porque la cumpleañera siempre la llevaba a la pista y bailaban juntas, pero no le hizo mucha falta la compañía de su amiga porque después de unos segundos ya tenía un chico bastante mono al lado suyo. Diría que ya le había visto porque una vez acompañó a Briar hasta la autoescuela y él estaba saliendo por la puerta del edificio, pero diría porque cuando se volvió a girar para mirarle ya no estaba, lo había sustituido Daring.
"¿Qué hacía una chica guapa bailando solita? Podía venir un pervertido y secuestrarte" Menos mal que él siempre estaría ahí para evitarlo.
"¡Dios! Cierto, me alivia saber que ya está conmigo un chico hermoso para salvarme y también estás tú, claro" Rieron ambos por su broma mientras él le dedicaba una sonrisa mostrándola sus blanquecinos dientes, era bastante sexy tenía que decir.
Debía de ser el alcohol en sus venas o no sabía qué, pero mirarle su camisa ahora desabrochada también por el segundo botón la provocaba querer desabrocharle los restantes y ver su torso desnudo. Su temperatura estaba subiendo a gran escala mientras que él estaba perfectamente a su lado, eso no era justo ¿acaso ya no la encontraba atractiva él? ¿De verdad preferiría a Lizzie Hearts antes que a ella? Ese pensamiento no le gustó, podía aceptar que Raven se la quedara Dexter, que Darling para Holly, pero su eterno novio también la abandonaría por otra persona se empezó a preguntar.
No, él no lo haría, la quería ¿no? Porque hace unos días antes le preguntó si le daba otra oportunidad, pero tal vez había vuelto a ver a Lizzie y estaba decidido a empezar algo serio con ella. En ese momento sintió miedo, no, no podía, no quería quedarse sola, no iba a convertirse dentro de unos años en una solterona con muchos gatos mientras todos a su alrededor tenían amor y pareja.
"Daring tú me quieres ¿verdad? Querrías que volviéramos a estar juntos ¿no?" Le preguntó mientras le tenía detrás, necesitaba escuchar a alguien decirla que la quería y deseaba una relación romántica con ella.
"Claro que te quiero y deseo que estuviéramos juntos Apple, te haría tantas cosas esta noche si siguiéramos siendo pareja" Respondió mientras notaba el tono de inseguridad en su voz, como sintiendo que necesitaba algo de él.
"¿Qué me harías si siguiéramos siéndolo? Dime qué cambiaría" Siguió preguntándole mientras notaba como se pegaba más a ella para hablarla.
"Puff ¿qué no haría? Primero te preguntaría como la reina que eres, si quieres venir a mi casa porque mis padres y hermanos no están esta noche, cuando me dijeras que sí te daría un gran beso apasionado y nos iríamos a mi coche y por último al llegar a mi casa subiríamos directos a mi habitación para…"
"¿Para qué….?" Se había quedado parado en lo más interesante de lo que la haría.
"Subiríamos directamente a mi habitación para... ya sabes..., para jugar en mi cama al 24: yo a dos patas y tú a cuatro" Oír sus palabras subidas de tono y con esa voz grave en su oído derecho lo sintió muy caliente la verdad, su corazón estaba acelerado con su revelación tan explícita e ingeniosa a la vez.
Estaba muy acalorada en ese momento, sus mejillas se encontraban rojas de la idea de pensar en ambos en su cama. Se había pasado todo el verano sin acostarse con alguien, desde que lo dejaron al finalizar el curso y la propuesta indirecta que le estaba proponiendo era muy tentadora. Briar y Blondie siempre decían que lo mejor es tener un folla amigo y se quitara de problemas de pareja mientras que Ashlynn y ella denegaban esa opción. Pero en esos momentos su cabeza no podía pensar con claridad con el calor que estaba sintiendo y sus besos por su cuello, así que se giró completamente para enfrentarle y sin pensar le dio un beso en la boca.
Solo lo hizo para ver si era distinto a los besos que tuvo con Darling y sí eran distintos. Los labios de ella eran más pequeños y más suaves, aparte la respetaban al contrario que él que al segundo notó su lengua en su boca, junto con un olor a mojito que sabía que a su excuñada jamás le sabría la boca porque ella no bebía. Aunque no le disgustó porque ya se había acostumbrado a los besos de él y como sentía que alguien la quería en aquel momento terminó dejando que la diera unos buenos morreos en mitad de la pista de baile.
"Ummm… vámonos a mi casa… ¡Ya!…" Le pidió después de que ya le hubiera sobado el trasero sin disimulo delante de bastante gente desconocida.
Le hizo caso al segundo e inmediatamente estaban saliendo del local, entrando a su coche y marchándose de la fiesta sin despedirse de alguien ni de ver a la cumpleañera abrir sus regalos. Entrando a la casa solitaria de él y subiendo mientras se reían por las escaleras hacia el piso de arriba concretamente a la habitación que varias veces había estado ya ahí en una situación similar. Se sintió un poco mal porque ni siquiera se despidió de Briar, pero ya mañana la pediría perdón y preguntaría sobre como terminó la fiesta y demás porque ahora lo único que podía pensar era en desabrochar rápidamente los botones de la camisa de él.
El rubio había conseguido casi desvestirla por completo mientras que ella sufría con los botones enanos esos. Y cuando por fin consiguió quitarle la camisa y tocar esa tableta, Daring la movió haciendo que cambiaran los roles y ahora ella se encontrara tumbada sobre la cama aunque aún podía ver perfectamente su amplio pecho por la luz de ambiente que les daba la luna llena.
"Esto no significa que volvemos a ser pareja ¿de acuerdo Daring?" Le informó respirando pesadamente, no quería que pensara que habían vuelto o algo solo porque actualmente se encontraba tumbada debajo de él.
"Claro Apple" Contestó dándola un húmedo beso en la boca callándola y haciéndola suspirar.
Pues eso, esto no significaba nada se dijo a sí misma mientras le devolvía el beso antes de echar su cabeza hacia atrás para apoyarla y sonreía mientras veía como la cabeza rubia bajaba por todo su cuerpo besándolo hasta llegar a su entrepierna para robarla un gemido involuntario de su boca.
Fin POV Apple.
Ya están terminando mis vacaciones de Semana Santa y mi tiempo libre se acabó TTwTT, así seguramente supongo que pasará como un mes hasta que vuelva a actualizar. Esperaría que os hubiera gustado, pero con este final de cap no sé qué opinareis xd.
