Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Rumiko Takahashi
La historia es de mi autoría, prohibida cualquier adaptación.
La imagen de portada le pertenece a Len AquaSpirits, sus dibujos dan años de vida. Vayan a darle amor en sus redes de Facebook, Twitter, Instagram.
Unión de dos seres.
Kagome no supo en qué momento llegó hasta ahí, sólo recordaba que su amado Hanyo pasó a ser dos seres; uno con su corazón humano y otro con su corazón de Youkai.
Recordaba que sus amigos ido por el antídoto a una aldea al otro lado del lugar y no regresarían dentro de tres días, dos días ya estado pasado y las cosas iban raramente normal.
Pero ahora, no entendía en qué momento su ropa fue rasgada por las garras del Youkai, en qué momento la parte humana de su Hanyo estaba sin su Kosode y solo portaba su hakama.
"Inuyasha humano" se encontró en frente de ella besando su cuello desnudo y respirando fuertemente en su oído. Por otra parte, "Inuyasha Youkai" estaba detrás de ella haciéndola sentar en su regazo restregándole la virilidad que se alzaba entre sus piernas.
Kagome estaba en un mar de sensaciones ante aquellos dos seres, no tenía idea del porque ellos estaban haciendo esto con ella.
No iba a negar que esos días sin los muchachos la joven tuvo húmedos y cálidos problemas con esos dos, su mente no dejaba de pensar en ellos y en ciertos escenarios.
Kagome era joven y muy hermosa, pero eso no evitaba que su cuerpo desde hace tiempo reaccionará de manera pervertida hacia su compañero de peleas.
Después de todo, era otra parte del amor que sintió a aquel hombre Hanyo, lo amaba y lo deseaba.
El gruñido detrás de ella la sacaron de su consciencia y la volvió al presente en donde está el disfrute de dos seres majestuosos.
Inuyasha Humano era hermoso con su cabellera negra larga y sus ojos negros que la miraban con deseo y cariño, como un humano.
Por otra parte, Inuyasha Youkai también lo era su cabellera blanca y sus ojos de deseo y lujuria propia de un Youkai con su hembra .
—E-espera p-por favor —dijo cuando las manos de su Inuyasha humano comienzan a sacarle los pedazos de tela que han sido rasgados para dejarla sólo en piel.
—Grr —gruñó el Youkai atrás—, eres tú quien nos ha llamado estos días con tu olor y voz hembra.
—Kagome —dijo el joven de cabellera negra suavemente—, ha sido una tortura dormir a tu lado escuchando como me llamas en tus sueños —explicó mientras lamia su cuello blanco—, no me hagas esperar más por favor.
Los gemidos de la joven se incrementaron cuando una mano con garras correctamente se introdujo en sus bragas llegando a su interior que estaba siendo lubricado por el rocío del placer que esta experimentaba.
—I-Inuyasha.
—Kagome, sabes que no puedes darle toda la atención —dijo este mientras sinergia sus dedos en la cavidad mojada de la joven de manera lenta y suave.
La joven no entendía a que se refería el Youkai, sin embargo, lo supo cuando las manos del humano pasaron por sus pechos descubiertos.
— ¿Estás celoso? —Preguntó el Inuyasha humano a su yo Youkai.
El Inuyasha humano se vio apretando los pechos de la joven, para él eran suaves y cálidos, tenían un aroma.
Tal vez era por lo que él; como humano, la prefería y la veía como un prospecto de esposa para él y deseaba estar cerca de ella cuando eso pasaba, por ello había comenzado a tenerle aprecio a las noches de luna nueva, claro que eso solo lo sabia él.
El Inuyasha humano sin perder el tiempo sacó sus pantalones rojos y los botó cerca. Mientras regresaba hacia donde estaba su Kagome; porque era suya, a seguir su trabajo.
Kagome iba a decir algo cuando una mano impidió su vista.
—Sabes que a ella gustan más los perros —dijo el Inuyasha Youkai con una voz brutal y grave que la hacían mojarse aún.
Tal vez ahora si agradecía los libros de regalo de Ayumi, pero ninguno de ellos competía con las sensaciones que esos dos provocaban en ella.
—Le gustan los perros —contestó Inuyasha Humano mientras tomaba a Kagome y la acercaba más a él mientras Inuyasha Youkai tenía su mano en sus pechos y la otra cubriendo sus ojos.
—Pero el calor de un humano le aviva ofrece mientras besaba con ímpetu a la joven.
—P-por favor ... —pedía entre besos.
Este se acercó aún más a la joven y pasó su miembro por el monte venus de la joven.
— ¡Aah!
Inuyasha Youkai e Inuyasha Humano se tomaron un momento para apreciar a la joven que tenía en sus brazos.
Era entregada y amorosa, la pasión que desbordada calentaba al Youkai que pedía a gritos enterrarse en ella y hacerla su hembra, por otro lado, Inuyasha humano disfrutaba y le excitaba como ella mostraba en su entrega amor y pasión.
Una pasión tan grande que cumplía con las expectativas de los dos seres.
—Por ello la elegimos —comentó Inuyasha Youkai mientras se terminaba de desnudar, adelantándose a los pensamientos de su otro yo.
Y también quitaba los ropajes rotos que quedaban del uniforme de la joven.
Este comenzó a besar el cuello y amasar con rudeza los pechos de la joven sacándole así nuevos gemidos que morían en la boca del otro Inuyasha en su forma humana.
—Kagome —dijo Inuyasha humano mientras ponía sus piernas para acercar más el cuerpo de está tomándose con unos ojos llorosos de excitación y detrás de ella unos gruñidos.
—Seremos cuidadosos.
—Eres una gran hembra, pero abran más ocasiones donde te tenga sólo para mí —comentó Inuyasha Youkai mientras mordía el cuello de esta y se acomodaba mejor y juntaba su pelvis con los muslos húmedos de la mujer.
— ¿Qué es lo que ...? —Cuestionó mientras era movida para tener un mejor acercamiento a ellos dos.
—Permítenos hacerte nuestra mujer —dijeron los dos roncos trayendo nuevas pulsaciones de placer a Kagome.
¿Cómo podía negarse cuando se moría de ganas de tenerlos? desde que Inuyasha se había divido en sus dos seres su mente se volvió pervertida como la del monje y tenía sueños nuevos con ellos, además de que podía saber las dos facetas que eran parte de un solo ser que amaba
—Sólo ... —dijo cercana a los labios del joven pelinegro mientras este se posicionaba entre sus piernas—, sólo sean cuidadosos.
—Lo seremos.
Sin darle tiempo de procesar la joven sacerdotisa sintió como algo duro, grueso y húmedo entraba en su interior, primero de manera lenta mientras que desde atrás le acariciaban sus pechos y besaban su cuello con alevosía
La molestia comenzó a notarse en su rostro siendo besada tiernamente por su Inuyasha de cabellera negra.
—Ya pasará, te lo prometo —dijo este mientras se sumergía en ella tratando de no ser brusco a pesar de sentir las palpitaciones del interior de la joven.
Las cuales comenzaron a volarle la cabeza.
Por otro lado, los labios de un Youkai comenzaron a bajarle por la espalda mientras sus manos ahora iban a sus muslos y los masajeaban.
Todo ello causaba un mar de sensaciones en la azabache que moría de placer y molestia al principio, sin embargo, las embestidas dadas por Inuyasha humano eran más placenteras y más cuando otras manos la tocaban y besaba sacándole más suspiros y gemidos.
Toda esa cabaña se llenó de gemidos y jadeos de placer por una pelinegra Kagome y estos fueron acompañados por los gruñidos de los seres iguales en espíritu, pero diferentes en ser.
Y eso era lo que hacia tan especial a Inuyasha, lo amaba en las dos formas que tenía, tal ves él no se enteraría de lo que paso cuando estaba dividido, pero deseaba que eso pasara y no pensaría en nada más.
Sin más, una Kagome gritó ante el proveniente orgasmo que le llegó al igual que a un Inuyasha humano que la hacía arremeter más rápido en su regazo y un Youkai más excitado por el olor de mujer que llegaba de la muchacha con su otro yo.
Inuyasha humano sostuvo a Kagome hasta que era se recuperó poco a poco que aquel desvanecedor orgasmo.
—Creo que aún no acabamos contigo pequeña —mencionó este mientras besaba su rostro—, ahora es mi turno de ser sólo acompañante suministrado besando el hombro de la joven.
Sin más la joven fue dada la vuelta tomándose con dos ojos azules fuego que la miraban con deseo y lujuria.
—Créeme que conmigo será aún mejor —dijo un Inuyasha Youkai con una sonrisa coqueta y soberbia haciendo erizar a la azabache.
Tomo los labios de esta con lujuria y pasión los cuales eran acompañados por manos suaves que masajeaban sus nalgas y devorando sus hombros mientras era unida al miembro del Youkai, sacándole un grito ahogado al sentirse nuevamente llena.
Inuyasha Youkai pasó sus manos sus manos por la cadera de la joven y la pego más a su cuerpo sintiendo como sus pechos se unían y rosaban causándole más placer.
Poco a poco las embestidas empezaron para la joven con la parte Youkai, por otra parte, Inuyasha Humano masajeaba sus pechos pellizcando sus botones.
— ¡Aah!
—Se siente bien ¿verdad? —Preguntó el Youkai mientras mordía el cuello de esta embistiéndola más constante mientras que el humano ayudaba a que esta le siguiera el paso pasando sus manos a los muslos de está abriéndolos y ayudándola en el vaivén.
—Se sentirá mejor —dijo susurrando, mordiéndole el lóbulo
El Youkai aumento el ritmo haciendo su hembra comenzara a jadear y gemir nuevamente con los dos seres en besando y disfrutando su cuello y dándole más placer que pudiera soportar.
—P-pare… ¡aah!
—Tu nos dices que paremos… —comentó el Humano mientras la separaba un poco para tomar nuevamente sus pechos y jugar con ellos.
—Pero tu cuerpo y ser dicen que sigamos hasta que llenemos de los dos —dijo el Youkai mientras tomaba sus caderas y seguía embistiéndola y viendo como sus entrepiernas unidas comenzaban a botar sus elixires internos.
Los dos seres siguieron disfrutando y haciendo disfrutar a la joven que era lo que los dos necesitaban, ella encajaba perfectamente para cada uno, Inu Youkai deliraba por el olor y la sangre de la joven, además de la delicadeza que lo llamaba a hacerla suya de de diferentes maneras.
Por otra parte, el Inu Humano amaba el tenerla cerca íntimamente en cualquier prospecto de la palabra, ella le daba paz y lo hacia sentir completo ante el sentimiento y emoción que le provocaba.
Ellos estaban conectados y sabían que aquella joven era su único amor, ese amor con el que las emociones y el deseo eran perfectamente recibidos y recíprocos; por lago se estaban entregando como lo hacían.
A pesar de lo que había pasado él había comenzado a sentir desde tiempo atrás amor por ella, pero decírselo antes era peligroso por el miserable de Naraku y por la promesa que había hecho hacia Kikyo sobre protegerla y hacer que descansara sin sufrimiento.
Sin embargo, sus sentimientos hace tiempo han cambiado hacia la joven de futuro, y no iban a negar que lo que pasaba en ese momento seria parte fundamental para ellos.
Tanto Inu Youkai como Humano se encuentra enamorado y entregado hacia la mujer que estaba en medio de ellos entregándose con fuerza; solo como Kagome Higurashi podía hacerlo, por ello aprovecharía que este era su ultimo día para que sintiera los sentimientos de sus dos seres.
Y mañana, cuando se diera su unión le hablaría de que podía recordar y desear nuevamente la unión de dos seres que tuvieron. Poco a poco los gritos y jadeos se hicieron más fuertes por parte de Kagome que se aferraba a los hombros del Youkai besando el cuello de este al igual que sus labios.
Y como en una explosión, los dos jóvenes llegaron a la cima de la pasión llenando por completo su interior, poco a poco los minutos pasaron y la relajación de la paso a darle un sueño placentero haciendo caer dormida mientras era observada sublimemente por los dos seres .
A la mañana siguiente los saltos de Shippo la despertaron haciendo ver que esta se encontró con ropa del Hanyo la cual cubría las marcas de aquella unión placentera.
Además de ver como los dos seres se volvían uno mismo dando así al joven de hermosa cabellera blanca y ojos dorados, los cuales la veían con picardía y sentimiento.
Mientras las recién llegado se alistaban para la nueva misión y descansaban Kagome salió a tomar aire y lavar unas cosas, sin embargo, las garras de una mano le evitaron seguir caminado acorralándola contra un árbol.
—Pero que…
Unos labios cálidos se apoderaron de ella, haciéndola sorprenderse al reconocer que eran de aquel ser que amaba.
—Al parecer la pasaste muy bien con mis dos yo —dijo este mientras mantenía su rostro cerca de la joven sonriendo.
—Yo ... Yo.
—Espero que hayas disfrutado con ellos —comentó mientras besaba el cuello expuesto de la joven—, porque conmigo sentirás más que anoche.
Las mejillas de la joven se tornaron rojas ante tales palabras, no iba a negar que anoche fue especial y estaba feliz por lo que había pasado, aún más cuando de despido de sus dos partes estas le dijeron dos palabras que adoro.
—El te amo de ellos es el mismo que te digo ahora Kagome —comentó dándole un beso profundo a la joven—, te amo.
Kagome miro a los ojos dorados de Inuyasha y sonrió al ver la felicidad y sinceridad de ellos, eran los mismo que anoche le hicieron ver estrellas, esos ojos dorados eran la unión de los dos seres que amaba, ella amaba a Inuyasha tal cual era, tanto a Inu Humano o Youkai, los amaba a los dos, amaba a su Hanyo.
Su Inuyasha era la unión de dos seres y ella lo amaba completamente como era y ellos comenzaban una nueva unión de dos seres.
Espero que les agrade pequeños, este trabajo es un regalo para la pagina de Facebook de Mundo Fanfics Inuyasha Y Ranma.
Espero les guste pequeños y lo disfruten así como yo lo hice.
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