Adentro del pliegue paso lo impensable para Alina, Mal, y los cuervos, el Darkling creo un camino, un pasillo, algo angosto, apenas del tamaño del esquife, pero lo había hecho.

Todas las personas veían con aprensión a la invocadora del sol y al rastreador, junto con tres cuervos, habían armado un escandalo para nada, al final se hizo lo que se había acordado, un poco en menor escala de lo que esperaba el rey, pero era un comienzo, se había conectado las dos partes del país, ya solo habría una Ravka.

-Demos la vuelta para volver con el rey-dijo el Darkling y sus Grishas obedecieron dando la vuelta y avanzando a toda velocidad

-La invocadora del sol trato de detener al general de destruir el pliegue-dijo un emisario del palacio con asombro

Todos asintieron, su salvación había querido que estuvieran aun en la oscuridad, se suponía que ella iba a salvarlos, pero parecía que era lo último que quería. El Darkling estaba flanqueado por Iván y Fedyor, este ultimo le comento algo en susurros, y el general solo se mostró sorprendido.

-Así que estos tres cuervos son los responsables de que Marie este muerta-dijo viendo fijamente a las personas siendo sometidas por Iván.

- ¿Qué? -pregunto Alina viendo asombrada a las tres personas en las que confió, en especial a Inej

-Sankta Alina-dijo Inej con culpa

-General llegamos-dijo Zoya desde su puesto

Los diplomáticos tanto de Shu Han y de Fjerda parecían asustados, Ravka volvía a estar unida, pronto podría ser el fin de sus naciones o el inicio de una guerra civil Ravkana.

-Fantástico-dijo viendo como guardias del Gran Palacio se acercaban, con lentitud se acerco a Alina- Vaya giro de acontecimientos ¿no? –

-Baghra dijo que…-empezó a decir Alina

-Pero no me lo preguntaste a mí, y ahora tus cuatro amigos y tú, tendrán que responder ante el rey, por tratar de socavar la destrucción del pliegue-dijo el Darkling

-Tu no ibas a destruirlo- dijo Alina viendo a los guardias subir al esquife

-Pero eso hice o trate de hacerlo, ¿Por qué tiraría a la basura todo lo que he construido para los Grishas? – pregunto divertido viendo como los guardias colocaban a los tres cuervos con esposas, y los hacían bajar de la nave- ¿Hiciste todo esto para nada Alina? -

-Era lo correcto, no ibas a destruirlo-dijo conteniendo las lagrimas

-Pero hice lo correcto, y trataste de detenerlo, por tu rastreador-dijo fingiendo estar triste- Y ahora no se que pasa con esto-

-¿Qué es esto?-pregunto viéndolo fijamente

-Se que si desertas del primer ejercito eres fusilado, y si eres desertor del segundo eres desterrado, así que imaginas el destino del rastreador- dijo pensativo

-No vas a matarlo-dijo enojada

-Y exactamente ¿Por qué yo haría eso? Eso lo hará el primer ejército, yo no puedo hacer absolutamente nada-dijo el Darkling ahora viendo a Mal, que había palidecido considerablemente

-De la vuelta soldado-dijo un guardia acercándose a Mal, y colocando las esposas

-¿Qué me va a pasar?-pregunto temerosa Alina, desde que volvió con Mal, se sentía así siempre como cuando solo era una simple huérfana sin nada, no como cuando estaba en el Pequeño Palacio, ahí había seguridad aprendiendo a ser grisha y usar sus poderes, era como una manta caliente, que ya no estaba para confortarla

-No lo se Alina, de verdad espero que nada malo-dijo empezando a alejarse de ella, pero lo detuvo una pequeña mano tirando de su kefta

-No me dejes sola, por favor-dijo Alina al borde de las lágrimas, no soportaría volver a estar sola, a sentirse así de nuevo.

-Tu me dejaste solo primero-dijo el con resentimiento, Alina no soportaba lo mucho que le dolía la acusación.

Había corrido, lo había abandonado, no le permitió explicarse o decirle nada, a la primera oportunidad corrió con Mal, y al final parecía que todo había estado equivocado, las personas en las que confió la habían tratado de matar, la despreciaban por ser Grisha, ella les dio la espalda a la gente que la había protegido.