Este es un fic y por ese motivo ninguno de los personajes y eventos me pertenecen, por lo que no tengo ninguna responsabilidad.

Capitulo 1: ¿Reencarnación?

No sabía cuántos años habían pasado, desde que abandono cualquier pensamiento de ser un héroe, solo quería vivir en paz como una persona normal cuando su misión hubiera terminado, pero lamentablemente sus decisiones repercutieron en ese sueño.

Todo se debió a una sola noche en la cual tomo la precipitada decisión de tomar la ayuda de una entidad la cual le susurro palabras bonitas en su oído como si fuese una madre, pero termino lamentando dicha decisión.

Desde el final de su tiempo como una persona viva comenzó su periodo para pagar el contrato que firmo, eliminando todo aquello que amenazara la seguridad o el bienestar tanto del mundo como de la humanidad y si lo pensaba detenidamente era extraño.

Se suponía que al ser el cual servía tenía algún tipo de enemistad con aquel sobre el cual vivía. Pero esa enemistad nunca estuvo presente en cuanto él se presentaba para lidiar con alguna situación que tuviese que ver con ambas partes.

Meh.

Realmente no importaba, así fue su existencia. Una mezcla repetitiva de lo mismo.

Siguieron pasando los días, meses, años, misión, tras misión, tras misión, tras misión.

Terminando de desmantelar otro grial corrupto en una dimensión, una voz cálida entro a sus oídos.

Oh, como odiaba esa voz.

[Ya trabajaste suficiente pequeño, ya es hora de que pases a tu otra vida, pero tendrás que lidiar con las fugas que tenga ese mundo ya que no hay magus en esa realidad] dijo el orbe de color azul.

Al escuchar esas palabras frunció el ceño.

"¿... alguna otra cosa, nada?" se burló.

Después de escuchar esas palabras trato de moverse, pero realmente no podía hacer mucho en contra de un ser el cual lleva existiendo el mismo tiempo que el mundo mismo. Por lo que simplemente acepto su destino a regañadientes ¿Qué más esperaba que hiciera?

Lo primero que sintió al abrir los ojos fue un gran aturdimiento, ni siquiera sabia que era realmente lo que estaba sucediendo a su alrededor y sinceramente no tenia otra cosa que hacer mas que lidiar con el enorme dolor que recorría su cuerpo.

¡Sorpresa! tenia el mismo cuerpo que en el inicio de su memoria.

"¡Shirou!"

Maldiciendo enormemente a sus adentros decidió ignorar la voz que lo estaba llamando, supuso que estaban llamando a alguien más, por lo que simplemente se limitó a ver su cuerpo una vez más.

"¡Shirou, si no respondes no abra cena esta noche!" la misma voz llamo, pero había un ligero toque de ira en ella.

Meh.

¿No era a él a quien estaban llamando, o sí?

Debería de haber miles de personas y niños en el mundo con el mismo nombre y lógicamente hablando no había manera de que se refirieran a él cuando literalmente acaba de recobrar el sentido.

"ayayaya..." el repentino dolor en su oreja provoco que diera un grito de lamento.

"¡Te lo dije Shirou!"

Una mujer la cual no reconocía comenzó a arrastrarlo por el pasillo.

"¡Suéltame!" rugió con molestia.

"Hoh..." la sonrisa de la mujer provoco un escalofrió en la espalda del pelirrojo "¿... crees que eres lo suficientemente hombre como para levantarme la voz?"

El sudor corría por su espalda. "¿Quién demonios se supone que eres?"

"..." la mujer frunció el ceño.

Era extraño.

Para ella era sumamente extraño que Shirou se comportara de esa manera cuando hasta hace algunas horas era el niño amable y dócil que tanto quería, pero ahora su actitud fue reemplazada por todo lo opuesto a lo que representaba.

En su tono de voz ahora estaba un toque de arrogancia y eso no le gustaba.

"¿Qué te paso mocoso?"

"No entiendo a que se refiere" Shirou frunció el ceño.

¿Qué se supone que tenia que decir en estos momentos cuando realmente no sabía que era lo que estaba pasando? ¿Debería de mentir descaradamente? ¿Noquear a la mujer y escapar?

No, no era tan simple como eso, no cuando literalmente acababa de aparecer en esa habitación y absolutamente nada le parecía familiar. Sería estúpido fugarse en estos momentos cuando no conocía su situación y estaba atrapado en el cuerpo de un niño.

Por ahora, fingiría haber sufrido algún tipo de amnesia.

"¿... enserio no hablaras?" dijo la mujer.

Shirou se encogió de hombros. "¿Qué quiere que diga? Realmente no recuerdo mucho además de haber despertado con un enorme dolor de cabeza"

No era del todo una mentira, pero tenía la suficiente verdad como para que la mujer tomara sus palabras al pie de la letra y lo llevara al hospital.

A decir verdad, estaba intrigado por la actitud y la manera de ser de la mujer después de todo no todos los días se encontraba a una mujer tan salvaje como ella en Japón.

Bueno, creía que era Japón hasta que miro las diversas estructuras y los espectaculares en las calles, el idioma claramente no era japones y eso provoco que Shirou tuviese una sensación de aprehensión en su pecho.

No lo malentiendan, el sabia la totalidad de los idiomas habidos y por haber del mundo humano, no por nada estuvo al servicio de una entidad por varios milenios y los viajes que llevo a cabo antes de servir a ella lo ayudaron en dicho ámbito.

Por ahora, se limito a explicar una breve mentira de lo que le paso, después de años escondiendo emociones y ocultar cualquier signo de sorpresa o nerviosismo en su rostro no fue muy difícil que le creyeran sobre haberse golpeado la cabeza y sufrir un cambio de actitud con amnesia como resultado.

"Me sorprende que siendo tan cuidadoso te hayas lastimado la cabeza"

Shirou no dijo nada, pero la miro de reojo.

"¿Qué?" pregunto con molestia.

"¿Cuál es nuestra...?"

Ella se burló. "¿... relación? Realmente no tenemos ninguna, solo te estoy cuidando porque tus padres murieron hace algún tiempo cuando estaban en Escocia"

Shirou no dijo nada ¿realmente le importaba la muerte de sus padres? No, ni siquiera los conocía y en lo que a él respecta eran extraños por lo que decidió hacerle caso al pie de la letra, pero había algo que le intrigaba.

"¿Cuál es tu nombre?"

Ella lo miro de reojo. "Maiya, Maiya Emiya"

¡Oh mierda!

¡Ese maldito anciano si que lo jodio! Ahora entendía completamente el porque le daba una mirada helada en cada momento que lo veía. De alguna manera sospecho que la mujer a su lado estaba casada con Kiritsugu.

Claro, el realmente no sabia que en esta vida estaba relacionado con el anciano, pero si conocía tan bien como creía a Alaya, entonces de alguna manera pudo meterlo en este mundo sin la necesidad de hacer demasiado alboroto con respecto a su identidad. O por lo menos de una manera que le resultara cómodo, pero mirando el panorama completo no había manera de que estuviese a gusto de esta manera.

Había dos opciones, la primera él era que ahora es el hijo de una infidelidad de Kiritsugu y la segunda, pero más probable es que haya sido adoptado y por esa misma adopción su padre falleció.

Si lo pensaba detenidamente no había manera de que estuvieran relacionados por sangre, no cuando ni él mismo ni la mujer tenían algún signo de parentesco, por ahora se limitó a mirarla.

"¿Soy adoptado?" finalmente pregunto.

"Si"

"... uff" un suspiro de alivio escapo de sus labios.

Maiya se ofendió y miro al pelirrojo. "¿Qué? ¿no soy lo suficientemente buena como para estar relacionada contigo?"

Shirou puso los ojos en blanco y la miro. "No me malentiendas, por la manera en que te comportas imagine que seria hijo de una infidelidad o algo así"

El rostro de Maiya se arrugo con clara molestia, pero evidentemente no dijo nada por lo que Shirou tomo su silencio como una señal de permanecer igual. No quería ponerse del lado malo de la mujer, por ahora viviría con ella durante el tiempo suficiente para comenzar a averiguar lo que sucedía alrededor del mundo.

Era lo mismo, la manera en que vivía con Maiya y cómo vivió con Kiritsugu era igual.

Shirou no podía quejarse con el estilo de vida que había tenido en estos años, mucho menos ahora que pudo activar sus circuitos mágicos sin la necesidad de ayuda externa y literalmente estaba viviendo de la manera como siempre deseo.

Era sumamente reconfortante saber que, por fin, después de tanto tiempo, podría disfrutar de una periodo de paz prolongado, pero eso representaba un problema ¿Qué se supone que debe de hacer en este mundo?

Prácticamente hablando, no había guerras, no había ningún motivo por el cual debía de ser desplegado y supuestamente este sería su último trabajo.

¿Cómo sabe que no hay guerras? Maiya no es lo suficiente discreta al respecto del tema referente a su trabajo. Ella es una parlamentaria asociada a la ONU y literalmente hablando solo regresa a Corea alrededor de dos veces al año.

Era como estar con Kiritsugu en su vida pasada.

"Oye Shirou... ¿Qué estas pensando?"

Un chico el cual poseía la misma altura que Shirou y tenia la misma personalidad altruista que él antes de conocer como funcionaba el mundo lo llamo. Seol Jihu, ese es el nombre de su compañero de clase.

En estos momentos se encontraban en un viaje escolar de su preparatoria, pero de cualquier manera a Shirou realmente no le importaba mucho en realidad.

"Simplemente en cosas" respondió mientras se encogía de hombros.

Seol le dio una mirada en blanco. "¿Por qué no te relacionas con todos los demás?"

Suspiro.

Esa pregunta era molesta. "Son demasiado estúpidos como para siquiera prestarles atención" sacudió la cabeza "... de cualquier manera ¿Cómo va todo con Seonhwa?"

Jihu se sonrojo. "No tenemos ese tipo de relación"

"Cualquier idiota se daría cuenta que ambos se gustan"

"¿Tú?" le dio una mirada en blanco "aquel que literalmente trae a las chicas rogando por una cita ¿... de verdad quieres que crea eso viniendo de ti?"

"No veo porque son relevantes mis relaciones y te equivocas, ellas simplemente me invitan porque soy un buen amigo"

Jihu sacudió la cabeza mientras suspiraba con exasperación.

Pero antes de que ambos pudieran seguir intercambiando palabras, Shirou se tenso e inmediatamente se puso alerta. Los años que paso combatiendo y afilando sus sentidos reaccionaron.

"¿... Shirou?" pregunto con intriga al ver la clara ansiedad en el rostro de su amigo.

"T-No es nada..."

"¿No piensan que sea un hermoso paisaje?" una hermosa voz vino detrás de ellos.

Shirou estaba sudando, de alguna manera la mujer detrás de ellos logro acercarse a expensas de sus sentidos. Ella era poderosa. Razono al ver como simplemente sonreía y se movía naturalmente como si nada pasara.

"Bueno... ciertamente es lindo" respondió Seol sin prestar especial atención.

Era cierto, el paisaje frente a ellos era sumamente hermoso después de todo, era Damyang-gun o también conocido como bosque de bambú, era un lugar puramente relajante, pero tenía una sensación de belleza.

La mujer les dio una agradable sonrisa, pero Shirou estaba incomodo, de cierta manera podía lidiar con la mujer frente a él, pero el problema no era ese. El verdadero problema es sobre las vidas que se sacrificarían en el intercambio.

"No tienes por qué estar tan tenso"

(Esta mujer...) pensó al ver como vio a través de él.

"¿Qué piensan de los héroes?" pregunto de la nada.

"Mmm... pues, en lo personal, me parecen personas asombrosas... sinceramente quisiera haber podido convertirme en uno"

Esa pregunta dejo a Shirou confundido ¿Por qué la mujer preguntaría algo tan trivial como eso?

Shirou frunció el ceño. "Heh..." se burló.

"Si ríete" gruño Seol "¿Qué sabrás tú de los héroes de todos modos?"

Shirou suspiro. "Que todos son unos idiotas obstinados los cuales solo tienen un final lamentable"

Jihu y la mujer fruncieron el ceño ante su repuesta.

"¿Qué quieres decir con eso?" respondió la mujer intrigada.

El pelirrojo se encogió de hombros. "No puedo decir nada en realidad, ellos vivieron su vida y yo estoy viviendo la mía, eso es todo..." les dio una mirada de reojo "... aunque puedes interpretar mi respuesta de la manera que quieran"

"¿Qué dices de Hércules?" le sonrió Jihu.

"Heracles eh..." murmuro, pero al parecer, solo la mujer capto su murmullo "... no puedo decir mucho... pero debo decir que es sin duda de los héroes que mas a sufrido... el solo quería vivir para y por su esposa e hijos, pero una estúpida mujer decidió joder su vida... por lo menos fue respetable hasta el final"

"Suenas como si lo hubieras conocido"

El encogimiento de hombros de Shirou y su sonrisa simplemente provocaron un suspiro de exasperación por parte de su amigo mientras que la mujer claramente se encontraba intrigada tratando de analizar las palabras del pelirrojo.

"¿Y?" hablo la mujer "¿... serian héroes si tuvieran la oportunidad?"

"Claro" respondió Jihu sin siquiera dudarlo.

Shirou le dio una mirada extraña. "Los héroes no existen, solo hay personas desafortunadas"

La respuesta fue corta pero clara, sinceramente ya no tenía mucho que decir al respecto ya que después de tanto tiempo pudo comprender que los héroes no existían. Solo eran meros cuentos de hadas, después de todo ¿Qué héroe tuvo un final feliz?

"Hoh... ¿porque no quieres ser un héroe?" preguntó la mujer.

Shirou le dio una mirada cansada. "Problemático"

"Vamos Shirou, debes admitir que sería genial ser uno, eso si contamos que al final te quedas con la chica" trato de persuadir al pelirrojo.

"Di eso cuando Seonhwa este cerca" Shirou dio una mirada divertida al ver la expresión pálida de su amigo.

"Mmmm... es interesante tu manera de pensar" dijo la mujer.

"¿Qué puedo decir?" se encogió de hombros "... soy una caja llena de sorpresas"

Después de que Shirou cruzara su mirada una vez más con la mujer frente a él, no pudo evitar tener una sensación de hundimiento, quería tener una discusión seria con ella, pero sabía que si de casualidad era una entidad estaría en peligro ya que en realidad no poseía la totalidad de sus habilidades debido al casi nulo mana ambiental.

"Ciertamente no quiero ser un héroe, pero no estaría de más simplemente ayudar al necesitado, pero me niego a ser algo estúpido como eso"

Después de decir esas palabras, ambas personas frente a él le dieron una mirada extraña, casi como si estuvieran hablando con un idiota.

Las venas de molestia aparecieron en su frente.

"¿Por qué sería estúpido?" preguntó la mujer con curiosidad.

"Porque es sumamente estúpido dar la responsabilidad de las personas a un sujeto solo por ser lo suficientemente valiente como para marcar alguna diferencia"

La mujer se quedó pensando, pero antes de que pudiera hablar se escuchó una voz de atrás.

"Jihu, te dije que no te separaras, oh Shirou estás con el" Seonhwa apareció.

(Mierda) giro rápidamente en busca de la mujer, pero ella ya había desaparecido.

Fue estúpido perder su concentración por ese corto periodo de tiempo y sin duda se arrepentiría de haberlo hecho ya que de esa manera pudo haber encontrado respuestas sobre la sociedad oculta de esta tierra en particular.

Suspiro.

"Hasta luego..." Jihu trato de despedirse de la mujer "... oye..."

"Olvídalo, simplemente terminemos con esto para regresar a casa"

Fue lo único verdaderamente relevante que paso a lo largo de su corta infancia y adolescencia después de todo, justo cuando termino su graduación se separo de sus amigos y comenzó a viajar alrededor del mundo en busca de respuestas.

No encontró nada.

Solo una nota de un periódico viejo sobre desapariciones repentinas sobre el plantea, pero no había nombres. Cuando comenzó a preguntar qué es lo que sucedía solo le negaban con la cabeza diciéndole que jamás habían escuchado algo sobre las desapariciones.

Con respecto a Maiya. Ella falleció poco después de que el se graduara, al parecer tenía cáncer. En definitiva, se sintió estúpido, había manera de curarlo y ciertamente tenia las capacidades para hacerlo, pero ya era demasiado tarde cuando el tumor le quito la vida a Maiya.

¿Qué tan jodida debe de estar su suerte para afectar a las personas importantes para él?

Al menos hubiera querido que la mujer tuviera un funeral apropiado con familia y amigos, pero ella solo lo tenia a él, el resto de su familia ni siquiera envió un pésame por lo que decidió cumplir el sueño de ella.

Esparciría sus cenizas en un gran paisaje donde pudiera encontrar libertad. El tema del dinero no era un problema debido a la herencia por parte de ella, por ese mismo motivo decidió vivir una vida normal sin muchas comodidades.

Por ahora tendría que lidiar con las personas que lo han estado buscando cuando decidió indagar en el tema de las desapariciones. Había algo que lo dejo helado, el sentimiento era mucho menos ominoso que estar cara a cara frente a un Type. Pero era lo suficientemente grande como para estar en constante guardia por si algo salía mal.

"Tch"

Finalmente chasqueo la lengua.

A su alrededor había por lo menos una docena de Noble Phantasm recién rastreados y eso sin duda lo dejo agotado.

No lo malentiendan.

Shirou podría lidiar con y la mayoría de las situaciones que se presentaran ante él.

El único problema es que Alaya no lo estaba apoyando, prácticamente ya no sentía ninguna conexión con ella y eso provoco que frunciera el ceño. Era imposible que ella se deshiciera de él sin ningún motivo real, pero por ahora.

Estaba realmente feliz de saber que la calidad de sus circuitos era superior, por ese mismo motivo dedujo que en un principio sus circuitos mágicos se habían atrofiado debido al no ser usados.

Ahora el siguiente problema.

Avalon.

En un principio pensó que solo era su imaginación, pero eso quedo descartado en el momento en que lo retiro de su pecho, no solo era Avalon. Había una espada en su Reality Marble que daba una sensación de hundimiento.

El principal problema es que él no tenia nada que ver con ella, realmente no recordaba haberla visto, por ahora, lidiaría con eso más tarde.

"¡Hola Shirou!" saludo una bella mujer.

Cough.

La mujer derrumbada lanzó una tos seca. Ella frunció el ceño por el olor a ceniza en el área. Pero su ceño solo duró un momento. Ella levantó la cabeza y examinó sus alrededores.

"¿Hay alguien ahí?" pregunto vagamente la mujer

Solo soplaba una ráfaga de viento sombría.

"¿Están todos... muertos?" la incredulidad estaba plasmada en su voz.

Ella esperó, pero no hubo respuesta.

"Heh..." Ella soltó una risita repentina y comenzó a tararear como si estuviera cantando una canción de cuna.

"Muerto, muerto, todos están muertos..."

Miró un cadáver quemado cerca de ella y pensó que se veía mejor que otros. En otro lugar, un trozo de carne que alguna vez fue un ser humano flotaba en un charco de sangre. Miró a su alrededor una vez más cuando la decepción surgió en su expresión.

Le dolía la garganta.

De alguna manera logró levantar la parte superior de su cuerpo antes de escupir su saliva. Su tez se iluminó un poco antes de mirar hacia el cielo distante con su vista borrosa.

(¿Cómo...?)

¿... cómo terminó ella así?

Un día, una raza alienígena apareció en su mundo. Aunque solo se descubrió más tarde, esta raza había sido expulsada de su mundo natal original. Después de sufrir una aplastante derrota, habían vagado sin rumbo por el espacio exterior durante mucho tiempo antes de invadir su planeta.

Para convertirse en su nuevo señor supremo.

"Esos retrasados"

Esta mujer era la princesa de cierto reino subordinado al Imperio. Tenía seis años cuando escuchó por primera vez la noticia de la aparición de la raza alienígena, y tenía diez años cuando escuchó la noticia del colapso del Imperio.

A pesar de ser elogiado como el Sol Indoblable por su tecnología abrumadora e ingeniería mágica, el todopoderoso Imperio había caído en menos de cuatro años.

Pronto, la raza alienígena devoró a la Deidad Principal adorada por el Imperio, convirtiendo la tierra en un desierto sin dueño.

Eso fue probablemente cuando todo comenzó.

Privado de su Deidad Principal, el planeta cayó presa de las muchas otras razas que lo habían estado buscando para tener la oportunidad de saltar.

La primera raza alienígena invasora posó a su líder como la nueva Deidad Jefe y comenzó una invasión sangrienta en todo el planeta. Fue entonces cuando comenzaron a aparecer nuevas razas alienígenas una por una. Uno había aparecido en nombre de la supervivencia, y los otros bajo la bandera de la conquista.

Recordando los acontecimientos del pasado, la princesa se burló débilmente. La tierra una vez gobernada por la humanidad ahora era un campo de guerra para varias razas extranjeras.

Empujados de esta manera, los habitantes originales se convirtieron en una vela que parpadeaba en el viento.

Pero acompañando la aparición de estas razas extranjeras estaban los siete dioses no adorados, que nacieron juntos durante el nacimiento del planeta. Estos siete dioses prometieron ayudar a los humanos sobrevivientes, y los habitantes prometieron adorarlos a cambio.

Y así, se llegó al acuerdo. Pero para sorpresa de los habitantes, la ayuda de estos dioses llegó de una manera extraña.

Su método de contraataque fue formar un ejército convocando a otra raza que se pareciera más a los habitantes del mundo.

No había otra opción. Incluso el poderoso Imperio fue derrocado en unos breves cuatro años, entonces, ¿cómo podrían los reinos que sirvieron bajo él resistir a las razas alienígenas?

Además, la población había caído drásticamente debido a la guerra.

"Esos malditos hijos de puta"

La princesa escupió una maldición mientras miraba fijamente al cielo.

"No deberíamos haber confiado en ellos en primer lugar"

En verdad, no fue tan malo al principio. Los primeros terrícolas convocados para ayudar a los habitantes crecieron a una velocidad sorprendente bajo la protección divina de los dioses.

Sin embargo, a medida que su influencia creció y gradualmente superó a la de los habitantes originales, la situación comenzó a cambiar.

Realmente había todo tipo de razones. Algunos formaron grupos por nacionalidad, algunos por el color de su piel, algunos por religión y otros por política.

Al final, el beneficio era el problema. La diferentes facciones entre los terrícolas comenzó a causar grietas en la relación de los reinos que una vez estuvieron unidos. La alianza formada bajo el deseo de sobrevivir se rompió en pedazos, y el conflicto interno resultante debilitó naturalmente sus fuerzas.

Hubo algunos que incluso se rebelaron contra los nuevos dioses.

Fue realmente insondable.

¿Pero eso fue todo?

Al final, la mayoría de los terrícolas se negaron a participar en la batalla final. Ignoraron fríamente las desesperadas súplicas de los habitantes y regresaron a su mundo natal.

Por eso la ira hervía dentro de la princesa.

"Hijos de..."

Estaba a punto de maldecir una vez más, pero rápidamente cerró la boca.

Salpicaduras ... salpicaduras ...

Un sonido suave resonó en medio de la montaña de cadáveres que se enfriaba gradualmente.

El sonido se le acercó, pero se detuvo un poco a la derecha de ella.

De pie había un cadáver quemado.

[Increíble]

Frente al cadáver había una gran oscuridad que no podía describirse con palabras.

[¡Verdaderamente asombroso! No tenía muchas esperanzas, pero pensar que realmente sobreviviste a esta sangrienta batalla...]

¿Un terrícola?

Como para responder a la pregunta de la princesa, el hombre derrumbado levantó la cabeza.

Una poderosa emoción surgió en el corazón de la princesa, pero no tuvo más remedio que tragársela de nuevo.

El estado de los terrícolas era horrible, tanto que quería desviar su mirada.

El número puede haber sido extremadamente pequeño, pero no era como si ningún terrícola participara en la batalla. El estado del hombre quemado demostró claramente que había cumplido con su deber en este campo de batalla.

Cuando la princesa pensó hasta aquí, comenzó a desarrollar una sensación de simpatía. Al mismo tiempo, sintió que era una pena.

(Si tan solo todos los otros terrícolas fueran como él...)

[Quiero alabar un poco más tus logros, pero no te queda mucho tiempo] una voz grave golpeó sus oídos.

[Ya que cumpliste tu promesa, es hora de que yo cumpla la mía. Dime, ¿qué es lo que deseas?]

Cuando la oscuridad se fijó en los ojos del hombre, sus ojos debilitados miraron hacia adelante. Cuando abrió la boca, pedazos de sus órganos junto con un bocado de sangre escaparon de sus labios.

Su voz parecía estar perdida, ya que solo salió el sonido del viento que pasaba por su cuerda vocal.

[No tienes que hablar. Simplemente puedo leer tu mente... Entonces, ¿deseas ser revivido?]

La princesa casi se rio. ¿Deseando ser revivido? ¿De qué serviría? Todo ya había terminado.

[¿No? Qué tonto, tu vida está colgando de una soga. Entonces, ¿qué es lo que quieres? ¿No me digas, riquezas? ¿Honor? ¿En esta situación?]

[¿¡Qué!?]

De repente, el tono de la oscuridad subió.

[¿Quieres empezar de nuevo?] una sensación ominosa surgió de repente en el corazón de la princesa.

[¡Imposible!] su voz enfurecida sacudió la tierra.

[Incluso con tus logros, ¿cómo podría ser posible revertir el tiempo? ¿Querías devolver todo a la forma en que estaba solo con lo que has logrado?]

[¡Imprudente! Quizás si logras las hazañas de hoy docenas de veces más, pero en el estado actual, no puedo cumplir tu deseo. ¡No importa tu alma, ni siquiera una sola pieza de tu cuerpo puede ser devuelta!]

"..."

[¡Qué persistente! Dado que tu vida está por terminar y las hazañas que ha logrado hasta ahora han sido grandes, me contendré. Dime otro deseo]

Entonces, un pesado silencio descendió.

[¿... por qué pediste ese deseo?]

¿La oscuridad se movió por la lamentable visión del hombre bajando la cabeza? La voz que reverberó en los oídos de la princesa se suavizó ligeramente.

[Niño, date prisa y desea tu avivamiento. Si ese es realmente tu deseo, puedes volver a preguntar en el futuro después de haber logrado más hazañas. Sin embargo, no puedo decir que será posible]

Los hombros del hombre saltaron muy ligeramente. Parecía reírse. Ya era un milagro haber sobrevivido a esta batalla. ¿Pero tenía que lograr hazañas que igualaran a docenas de lo que ya había logrado?

El hombre, la princesa y el dueño de la voz sabían que era imposible.

El hombre levantó la cabeza apenas.

Su boca se movió ligeramente.

[¿Tus recuerdos?]

[Quieres que tus sentimientos actuales...]

[Como no puedes devolver tu cuerpo o alma, ¿quieres devolver los sentimientos que sentiste aquí?]

La oscuridad pareció desconcertarse, ya que el silencio descendió una vez más.

[Enviando sentimientos basados en recuerdos... ciertamente, los sentimientos son solo pensamientos de tus emociones.]

Después de un largo silencio, la voz respondió.

[Pero incluso eso es difícil]

Aunque fue solo por un breve momento, la boca del moribundo se torció.

[Lo siento de verdad]

Eso fue todo.

Los hombros del hombre dejaron de moverse.

Pack.

Su cabeza se desplomó, para no volver a levantarse nunca más. Solo así, dejó de moverse.

[Que tonto...] dijo la voz con lamento.

De repente, algo parecido a una mano se extendió desde la oscuridad. Como si hubiera sufrido una gran pérdida, acarició lentamente la cabeza del hombre.

"Entiendo" la princesa, que había estado observando esta escena, habló.

La oscuridad detuvo su mano.

[Eres... un descendiente de las familias reales]

"Eso es correcto, Oh Venerable Gula"

La princesa sonrió como si preguntara por qué eso importaba.

"El reino ha caído. Las puertas deben haber sido tomadas por ahora también. Con todo lo que ha experimentado, ¿no sería mejor morir? A pesar de que el Juramento hará que pierda sus recuerdos, eso solo hará un final más limpio. Tendrá un lugar al que volver"

[No, este niño no deseaba regresar]

El tono pesado de la voz hizo que los ojos de la princesa se ensancharan.

[Dijo que no tendría un lugar al que llamar hogar incluso si volviera]

"Un lugar para llamar hogar..."

Esas palabras conmovieron el corazón de la princesa. Tal vez, ella sintió una sensación de camaradería. Con el colapso del reino, ella tampoco tenía un lugar al que llamar hogar.

Aunque algunos humanos seguramente habrían sobrevivido, su destino no sería diferente al del ganado.

Después de todo, los humanos no podían convertirse en los vencedores de esta guerra.

"Entonces, ¿por qué no acabas de conceder su deseo?"

Sus silenciosos gruñidos hicieron sonreír a la oscuridad.

[Disparates. Todos los efectos deben seguir las causas. No importa qué, el deseo de este niño habría resultado en interferir con el pasado]

La princesa se rio amargamente. Ella no podía entender, ni quería hacerlo. Solo sonaba como una excusa.

Pero era la verdad. Indudablemente cada causa conlleva a un efecto y eso solo esta limitado a ciertas excepciones como personas o seres los cuales no tienen un destino, pero la princesa no necesitaba saber acerca de eso.

[Sus logros simplemente no fueron suficientes para convertirse en la causa]

"Dices eso, pero parece que te arrepientes un poco".

[¿Cómo no iba a hacerlo? Este niño nació originalmente con el destino de un ejecutor]

"¿¡Ejecutor!?" estaba sorprendida.

Los ejecutores fueron los apóstoles que llevaron a cabo la voluntad de los siete dioses. Eran los siete líderes elegidos para luchar contra los monstruos que amenazan al mundo.

El problema era que solo uno de ellos participó en esta batalla.

[Correcto, él brillaba más que cualquiera de las otras estrellas. Si tan solo no arruinara todo con sus propias manos ¿Por qué los humanos solo aprenden a arrepentirse después de que todo ha terminado?]

La oscuridad quedó en silencio. La princesa también cerró la boca. Había hablado porque no quería morir sola. Aunque había recuperado su conciencia por un breve momento, supo desde el momento en que abrió los ojos que no viviría por mucho tiempo.

Los ojos de la princesa se volvieron hacia el hombre muerto. Su humilde final fue aún más lamentable.

No tenía forma de saberlo con certeza, pero si él deseaba la inversión del tiempo, debía haber vivido situaciones de vida o muerte de grado increíble. Pero incluso eso, no había sido suficiente para cumplir su deseo.

Había peleado como un perro y murió como un perro, sin recibir ninguna compensación.

"...Oh Venerable Gula".

Después de un momento de vacilación, la princesa rebuscó en su bolsillo.

"Por favor, concede el deseo de este terrícola".

[¿Qué...?]

"El juramento real... no lo has olvidado ¿... verdad?"

La breve confusión de la oscuridad desapareció y dejó de hablar.

Dentro de la palma abierta de la princesa había un collar bellamente elaborado. Aunque estaba manchado de sangre, su belleza original no podía ocultarse, ya que brillaba intensamente.

[Es decir]

Con el juramento que le hiciste a mi padre y los logros de este hombre, ¿no sería suficiente para cumplir su último deseo? Incluso si invertir el tiempo es difícil"

[¿Tienes alguna razón para llegar tan lejos?]

"Por supuesto"

Cuando los terrícolas cruzaron este mundo, las familias reales también prometieron recompensarlos por sus esfuerzos. La princesa no deseaba siquiera pensar en los bastardos que huyeron de la batalla final, pero el terrícola frente a ella se había quedado hasta el final.

Como había cumplido con su deber, era hora de que ella, como princesa, cumpliera la promesa de las familias reales. Además, esta era la última gota de orgullo que podía conservar antes de morir.

[Pero puedo conceder tu propio deseo en su lugar]

"¿Qué puedes hacer por mí?" ella se burló.

Una cosa que aprendió de esta larga guerra fue que ni siquiera los dioses eran omnipotentes.

¿Qué podría desear en este mundo condenado?

[Lo diré de nuevo. Este niño no puede regresar]

[Solo sus sentimientos de anhelo y arrepentimiento... Incluso esos no quedarían grabados en su mente y solo pasarían como un sueño fugaz] tomo un respiro [Podría terminar tratándolo como un sueño insignificante y olvidarlo por completo]

La princesa no dijo nada ¿Qué podía decir?

[Una cosa de la que estoy seguro es que tanto usted como él morirán en este lugar. ¿Estás diciendo que esto está bien?]

La voz de la oscuridad golpeó los oídos de la princesa varias veces como para reafirmar su deseo. Sería una mentira si ella dijera que no tiene dudas.

Pero ella estaba exhausta.

La guerra había durado mucho, demasiado tiempo. Aunque ella aguantó todo este tiempo como una de las gobernantes de esta tierra, ahora quería descansar. Regresar a la nada y caer en un sueño eterno no sonaba tan mal.

(Si tan solo todos los terrícolas fueran como tú...) miro el cuerpo del hombre.

Entonces, ella no se habría arrepentido.

[¿Quieres concederle tanto a su deseo? ¿Incluso a costa de renunciar a lo que te pertenece correctamente?]

Una sonrisa se formó en sus labios por primera vez. "Si"

Finalmente, el deseo había sido decidido.

[En ese caso, bien...]

Podía sentir algo como un par de alas abiertas desde la oscuridad.

[Acércate, hija mía]

De repente, su cuerpo se volvió ligero como una pluma. Cuando se dio cuenta de esto, su visión se había vuelto medio borrosa.

El mundo giró y algo desconocido apareció en sus ojos.

Lo último que vio fue ...

[No puedo esperar...]

... un fragmento azul que se eleva sobre el hombre.

[Hasta que los vuelva a ver a los dos]

Y la oscuridad riendo de alegría.

Cuando era joven, pensaba que todo el mundo era verde. Que la gente era verde, que los caminos tenían el color refrescante de la hierba, que los animales eran de color verde oscuro y que el cielo era de color verde claro. Los colores verdes bailaban sin importar dónde mirara.

Un recuerdo que tuvo de su infancia fue cuando fue al zoológico con su familia. En lugar de caminar y observar los recintos, entraron en un safari, donde los visitantes viajaban en un autobús para recorrer un desierto artificial. Bolsas de papel llenas de carne cruda colgaban al costado del autobús.

Su hermano mayor se sentó en el asiento al lado de la ventana, y su hermana de dos años tomó el regazo de su madre. Recordó estar un poco deprimido, incapaz de sentarse juntos, no era ni el mayor ni el más joven.

El autobús se detuvo. Los animales salvajes que descansaban en el campo se acercaron al autobús. Los animales verdes saltaron a una feroz competencia por la comida. La forma en que se lanzaron el uno al otro le recordó al chico del juego, Whack-A-Mole, por lo que se rio débilmente.

Fue cuando.

Un solo animal. Solo uno. Estaba sentado sobre una roca como un emperador, reflejando la brillante luz del sol.

La sonrisa del chico desapareció. "¿Por qué?"

(¿Su color...?)

A diferencia de cualquiera de los otros animales que había visto, ese animal no era verde.

¿Sentía su mirada? La bestia miró a los ojos del niño. Como encantado, el niño se asustó.

Desvió su mirada instintivamente y dejó de respirar. Le temblaban tanto las manos como el cuerpo, y su corazón latía con locura.

Incluso cuando fue tragado por un terror que ningún niño de su edad pudo soportar, el niño formuló una pregunta.

¿Por qué ese animal no era verde?

(No, debo haber cometido un error) pensó el niño.

El chico respiró hondo y volvió a mirar por la ventana.

La sensación de un profundo terror lleno la totalidad de la mente y cuerpo del niño.

La ventana se sacudió violentamente. La bestia había estado muy lejos, pero se había acercado al autobús antes de que el niño se diera cuenta. Pero ¿por qué ignoraba la comida que colgaba al costado del autobús y se pegaba a la ventana?

La bestia abrió la boca y reveló sus temibles dientes, mientras repetidamente intentaba masticar la ventana.

El niño no entendió lo que había sucedido. Aun así, se encogió y retrocedió.

Tenía que correr.

¿Por qué no se movía el autobús?

Estaba asustado. Quería alejarse de ahí.

(¡Mamá, mamá, mamá, mamá...!) grito para sus adentros.

Justo cuando el niño estaba a punto de estallar en lágrimas, una mano cálida cubrió cuidadosamente sus ojos.

"Debe haberte asustado mucho"

La voz era tan plateada y gentil como la brisa de primavera. Solo esa frase hizo que el niño se sintiera relajado y aliviado. El niño saltó al abrazo de la mujer sin comprobar quién era.

"Ahí, ahí, todo está bien. El temible león ya no está aquí... ah, el autobús se está moviendo de nuevo"

La mujer acarició suavemente la espalda del niño y su respiración sofocada se relajó. Solo entonces el niño levantó la cabeza para mirar.

"¿Eh?"

De repente, las manos de la mujer se detuvieron. Ella se acercó al niño, estudiándolo cuidadosamente. Entonces, ella jadeó sorprendida.

"Oh, Dios mío... Realmente..."

Cuando el niño inclinó la cabeza confundido, la mujer sonrió.

"Tus ojos son hermosos."

(¿Mis ojos?)

"Sí, son hermosos. Son como los siete colores del arco-iris"

Tal vez estaba demasiado sorprendido por la belleza de la mujer o el terror que estaba arraigado dentro de él, pero no se dio cuenta que la pregunta que hizo jamás fue dicha en voz alta.

El chico miró a la mujer con curiosidad, pero ella solo sonrió a cambio. Luego, dejó escapar un suspiro, como si descubriera que algo es una gran pérdida.

"Si solo fueras un poco mayor... No, quizás sea mejor que crezcas sin darte cuenta"

En poco tiempo, la excursión de safari terminó. Los turistas se levantaron uno por uno, pero el niño no mostró signos de irse. La mujer también dudó, como si no estuviera lista para rendirse.

La mujer susurró al oído del niño. "¿Cuál es tu nombre?"

"Se-Seol..."

"¿Seol? Es un nombre bonito"

Luego se encontró con la mirada sonrojada del chico.

"Oye, una vez que seas un poco mayor... y de alguna manera nos encontremos por coincidencia, ¿vendrás a mí?"

¿Ir a ti, Noona?

{N/A Noona es una forma de dirigirse hacia una mujer mayor siendo un menor}

"Sí, estaré allí si alguna vez necesitas mi ayuda"

Aunque el niño no podía entender a qué se refería, todavía asintió con la cabeza en su abrazo.

Pronto, el sonido de su madre y su hermana menor buscándolo sonó.

"Aquí, lo prometo".

Una sensación suave tocó la frente del niño antes de desaparecer.

"Volvamos a vernos, principito".

Cuando el niño tomó la mano de su madre y salió del autobús, miró hacia atrás con nostalgia. La mujer sonreía alegremente y agitaba la mano, hasta que el niño desapareció.

Solo había conocido dos veces a esa mujer durante su vida y la segunda vez fue con su amigo de la infancia Emiya Shirou, poco sabia sobre la importancia de dichos eventos.

El tiempo pasó y el niño se hizo adulto.

Había crecido hasta que los recuerdos especiales de ese día se desvanecieron. Con la edad, perdió el miedo a los animales salvajes y comenzó a investigar el fenómeno que experimentó ese día.

¿Cuál era esta habilidad suya?

¿Por qué tenía un poder que nadie más tenía?

Al final, no pudo llegar a una respuesta, pero comenzó a descubrir las condiciones en que el color verde aparecía y desaparecía.

Su vida comenzó a cambiar cuando comenzó a aplicar este poder a su vida cotidiana. Pero cuando esta habilidad desapareció repentinamente un día, su vida rápidamente perdió el control.

En estos momentos Shirou estaba dentro de la casa o más específicamente departamento de una de sus amigas de la preparatoria.

Yoo Seonhwa, fueron juntos a la preparatoria hasta que Shirou finalmente decidió viajar por el mundo en busca de anomalidades, también es la exnovia de su antiguo amigo Seol Jihu.

El no lo sabía, pero supuestamente, Seol había entrado en una etapa de adicción que sin duda sacudió a todas las personas cercanas a él. Seol los trato a todos como si fuesen basura de la noche a la mañana.

"¡Shirou!" una hermosa chica saludo a Shirou antes de salir corriendo por la puerta.

"¿Ya te vas? ¿Por qué no te quedas a tomar una taza de café?" dijo Seonhwa.

"Ugh, yo también quiero hacer eso, pero realmente me tengo que ir. Necesito terminar esa pieza y entregarla mañana"

"¿No olvidaste nada? ¿Estás lista?"

"¡Por supuesto! ¡No soy una niña pequeña, está bien, me voy ahora! ¡Nos vemos más tarde!"

La puerta principal se cerró y unos pequeños pasos se alejaron. Dejado solo, Yoo Seonhwa junto a Shirou que terminaban su desayuno con una delgada sonrisa en su rostro.

El rostro brillante de su hermana pequeña también la había vuelto enérgica. No había sido más que feliz en los pocos días, tanto que comenzó a preguntarse si estaba bien.

Cierto, ella definitivamente era feliz. Eso era, si ella ignoraba una pequeña cosa.

"Sin duda un alma libre, no puedo decir lo mismo de ti..." dijo Shirou.

"Hoh..." fue interrumpida.

Toc, toc.

Su puerta sonó.

"¿No te dije que revises cada...?

Yoo Seonhwa estaba a punto de dar una conferencia a su hermana pequeña, pero en su lugar se congeló.

"¿Pensaste que era Seunghae?" una voz burlona saludo a Seonhwa.

La persona parada frente a ella no era su hermana pequeña. El hombre que llevaba ropa de al menos un par de días apestaba como si nadara en aguas residuales. Había bolsas oscuras debajo de sus ojos como si no hubiera dormido.

"Tú... ¿Por qué estás aquí?" dijo friamente.

"Oye, ha pasado un tiempo. ¿Te ha ido bien? Wow, este lugar se ve impecable, no importa cuando venga"

Seol entró en el piso y miró a su alrededor. Una vez que vio las sobras en la mesa de la cocina, extendió las manos sucias, se las metió por la boca y asintió con aprobación. Realizo todo eso sin siquiera molestarse en saludar a Shirou.

"Delicioso. Estaba empezando a tener hambre, así que esto es perfecto. Hazme un desayuno".

"Veo que te has vuelto un total bastardo..." dijo Shirou con una sonrisa.

"..." Seonhwa no dijo nada, ni siquiera se movió.

Seol se encogió de hombros ante el comentario del pelirrojo y miro a Seonhwa. "Vamos, apresúrate."

"¿Quién te dijo que entraras?"

Los ojos del joven se abrieron por la voz llena de hostilidad.

"¿Qué pasa?" dijo con clara sorpresa.

"Esta es mi casa, no la tuya. ¿No sabes que entrar por la fuerza en la casa de otra persona es un delito?"

"¿De qué estás hablando? ¿Cómo es el tuyo este lugar? Sé muy bien que mi padre pagó el depósito de seguridad de este lugar"

Shirou no dijo nada. Mirando la manera en que Seol se jactaba sobre las hazañas de otra persona simplemente decidió suspirar y continuar bebiendo su taza de café.

"Ya le pagué hace mucho tiempo. ¿Por qué estás hablando de eso ahora? Además, incluso si eso fuera cierto, no tienes derecho de venir aquí"

"... oh vamos, no seas así ¿Entre nosotros...?"

"¿... entre nosotros? ¿De Verdad?" ella interrumpió.

La voz de Yoo Seonhwa se volvió más aguda y fría.

"Deja de soñar, se acabó entre nosotros. Tú y yo no somos nada. Ya no"

Sus palabras fueron más allá del frío y comenzaron a sentirse venenosas. Seol puso los ojos en blanco y dejó escapar un profundo suspiro. Luego, con un gemido, se tumbó en el suelo.

"Me muero de hambre, así que hazme comida. Estoy agotado de caminar hasta aquí"

"¡Oye! ¡Ya no voy a seguir tus payasadas! Levántate. ¡Levántate y vete antes de que llame a la policía!

Seol resopló. Pero cuando Yoo Seonhwa realmente sacó su teléfono celular, se levantó rápidamente.

"Vamos, ¿no podemos hablar de esto? Vine porque tenía algo que decir. De verdad".

"No tengo nada que decirte. Si quieres hablar conmigo, ve al casino y pídeles que te prohíban entrar. Entonces lo pensaré"

"¿Por qué estas tan sensible?" gruño y luego miro a Shirou "¿... ahora estas con él?"

El pelirrojo simplemente le dio una mirada de reojo a ambos y continúo jugando con su celular. No quería meterse en problemas, pero mirando la situación en realidad no podía decir mucho.

Yoo Seonhwa sintió que podría explotar de frustración. Ella cerró los ojos, bajó la cabeza y respiró hondo.

"... sal"

"Vamos, ¿realmente vas a ser así?"

Antes de que pudiera terminar, sonó un grito penetrante. Al final, Yoo Seonhwa explotó de su ira acumulada.

"¿Crees que no sé por qué estás aquí? ¡Estás aquí para pedirme dinero otra vez!"

Seol se estremeció cuando había dado en el blanco con precisión.

"Oye, oye, ¿qué quieres decir...?"

Él sonrió tímidamente, tratando de evadir el tema, pero Yoo Seonhwa ya tenía experiencia. Esta no era la primera ni la segunda vez que esto sucedía.

Hace solo cuatro meses que se había dicho que debía confiar en él por última vez desde que se arrodilló y le suplicó que lo perdonara durante varias horas.

Al ver la sonrisa en el rostro de Seol que comenzaba a verse fea, una repulsión nunca sentida comenzó a hervir dentro de ella.

"No puedo darte ni un centavo. No lo haré ¿Qué? ¿Quieres empezar de nuevo? ¿Estoy loca? ¡¿Qué, no fue suficiente que volara nuestro depósito de seguridad la última vez?!"

Después de soplar la ira dentro de ella, Yoo Seonhwa respiró hondo. Incluso tosió por los gritos acalorados. Y miro tímidamente a un Shirou claramente sorprendido.

Seol estaba allí aturdido. Parecía estar sin palabras por su postura firme, pero una sonrisa cruel colgaba de sus labios torcidos.

"He sido paciente ¿... y así es como actúas? ¡perra...!"

Los pensamientos de Yoo Seonhwa sobre "¿Me fui por la borda?" se desvanecieron en un breve segundo.

No pudo evitar dudar de sus propios oídos.

Ella siseo. "¿Que acabas de decir?"

En este punto Shirou guardo su teléfono.

"¿Qué, están tus agujeros para los oídos bloqueados ahora? ¿Crees que soy un tonto también? Mierda"

Era la primera vez que Yoo Seonhwa escuchaba a Seol maldecir tan abiertamente. Ella quedó en blanco por el repentino shock mental.

"Tú de todas las personas no puedes hacerme esto. Te aferraste a mí cuando las cosas eran difíciles para ti, ¿pero ahora eres así? No quería mencionar viejos cuentos porque son mezquinos, pero ¿te olvidaste de quien te cuidaba cuando estabas en secundaria? Corrías todos los días llorando por querer ver a tu mamá y tu papá. Cuando tu hermanita vino a llorar conmigo por tu desaparición, siempre fui yo quien salió a buscarte"

Una sensación asquerosa y nauseabunda obstruyó la garganta de Yoo Seonhwa. Intentó contenerlo, pero sus ojos se humedecieron y ardieron por la sensación de traición.

"Jihu" hablo Shirou.

Pero el pelinegro decidió ignorarlo. "¿Y cuándo querías ir al extranjero y estudiar, pero no tenías dinero? ¿No pospuse mis propios estudios y te apoyé? ¡Incluso trabajé a tiempo parcial para enviarte dinero para que no te murieras de hambre!"

Todo fue verdad.

Yoo Seonhwa quería ir al extranjero para perseguir su sueño, pero la realidad lo hizo difícil. Ella agonizó en secreto ya que no podía contarle a nadie acerca de sus problemas, y fue entonces cuando el joven frente a ella dio un paso adelante. Cuando él demoró en regresar a la universidad solo para apoyarla con su matrícula, ella ni siquiera pudo describir lo agradecida y lo lamentada que estaba.

Ese era el tipo de hombre que era, un hombre que la apoyaba y cuidaba más que nadie.

Cuando entraron en la misma universidad y él le confesó, ella sintió que había obtenido el mundo. Cuando él le prometió un futuro, ella lo amo tanto que pensó que podría morir por eso.

Pero ¿cómo resultaron las cosas de esta manera? ¿Cómo se arruinó a tal grado? Yoo Seonhwa estaba parada allí y temblaba como una hoja solitaria en un árbol. Ella sollozó y luego levantó la cabeza. Parecía haberse calmado un poco, pero sus ojos y nariz estaban teñidos de rojo.

Shirou comenzó a caminar a Seol para sacarlo y enfriarle sus pensamientos de manera sutil como solo él sabía. La manera en que lidio con su yo pasado paso por su mente antes de negar con la cabeza, pero antes de que pudiera tocar el hombro de Seol.

"¡Tú hijo de perra!"

"¿Q-qué...?" dijeron ambos hombres al unisonó.

La ira de Seol disminuyó mientras tartamudeaba. En lugar de enojarse, parecía estupefacto.

Sabía cuánto odiaba Yoo Seonhwa maldecir. Nunca había maldecido una sola vez en su vida.

"¿Cuánto era...?" siseo con rabia.

Su voz llorosa era resuelta como si finalmente hubiera tomado una decisión.

"¿uh?"

"¿Cuánto era? El dinero que me disté cuando fui al extranjero"

"Uh... La matrícula era de 5 millones, y te envié otros 2 millones de trabajo a tiempo parcial"

"Le pagaré la matrícula a tu papá. Me diste el dinero, pero para empezar era de él. En cuanto a los 2 millones, te lo daré ahora"

Yoo Seonhwa habló como si estuviera tragando algo repetidamente. Ella recogió su teléfono celular.

"Listo, ya lo envié. Son 2 millones exactamente, así que compruébalo"

Seol dejó escapar una tos seca y sacó su teléfono. Después de revisar su cuenta bancaria, sonrió.

"Vaya, ahora tienes mucho dinero ¿Cuánto tienes en tu cuenta bancaria?"

"¿Hemos terminado ahora?"

Su voz llorosa salió como si estuviera exprimiendo cada palabra de su garganta. Al escuchar la voz ominosa, el deleite de Seol desapareció con un estremecimiento de sorpresa.

Miró a Seonhwa y se encogió de hombros.

"Oye, nunca te pedí que me dieras dinero. Si alguien escuchara, pensarían que te lo robé o algo así"

"Pagué todas mis deudas ahora, ¿... verdad?"

"Uh... sí, supongo"

"Si lo has confirmado, sal. Tú y yo no tenemos nada que ver el uno con el otro a partir de ahora. Ni siquiera una deuda"

"¿Esto de nuevo?"

Al final, Yoo Seonhwa no pudo contenerlo y cayó de rodillas. Al verla tratando desesperadamente de contener las lágrimas, el joven se rascó el pelo grasiento.

"Bien, bien, me voy".

Seol, con los zapatos todavía puestos, salió apresuradamente del piso como un ladrón que fue atrapado robando. Su refrescante sentido de logro solo duró un momento.

"Huuuunng ..."

Cuando escuchó el gemido contenido detrás de la puerta cerrada, de repente se sintió sucio. Salió corriendo y miró al cielo. El cielo de la mañana era azul, un color muy claro.

Shirou solo se limito a mirar a Seonhwa que estaba sollozando en el suelo, era la primera vez que miraba a la mujer lamentarse de esa manera.

"¿Cómo te sientes?"

"No lo sé..." se lamentó "... yo... a pesar de todo lo que me hizo, NOS hizo, no puedo odiarlo yo aun lo amo, realmente soy una estúpida..."

Shirou sonrió irónicamente, interiormente le recordaba a Rin cuando ella lo encontró después de tanto tiempo solo para verlo siendo colgado. Aunque las situaciones eran diferentes, los sentimientos eran los mismos.

¿Qué se supone que le iba a decir a la mujer frente a él?

No podía decirle que la entendía, porque realmente no podía explicarle nada de su pasado ni cómo vivió su vida hasta ahora.

"Todo estará bien..."

"... me preguntó" ella hablo "... si no me hubiera ido... ¿todo esto jamás hubiera pasado?"

El pelirrojo dio una sonrisa irónica. "Esto tenia que pasar tarde o temprano, a pesar de ser dueños de nuestras propias decisiones ¿... estás segura de que Seol no hubiera terminado de esta manera?"

No.

Ella no podía estar segura, por lo que su lamento aumento más ¿Qué le paso al hombre del que se enamoró?

"Por ahora, te dejare para que enfríes tu mente, también puedes ir a tu cafetería y distraerte un rato"

"nn" asintió vagamente.

Shirou salió del departamento dejando a una lamentable mujer, realmente no podía ayudar en esa situación ya que realmente no tenia nada que decir sobre ello. Por ahora. Buscaría a Seol para hacerlo entrar en razón.

"Realmente no tengo porque lidiar con esta mierda" suspiro al aire.

Lo primero que vio Seol fue la luz presionando sus ojos. Una vez que centró su mirada borrosa tres, cuatro veces, finalmente vio la bombilla que dejó encendida antes de acostarse.

Seol jadeó por aire y acurrucó su cuerpo por el frío que inundó. Descubrió que estaba empapado de sudor frío.

"¿Qué...?"

Se limpió el sudor de la frente, pero no pudo evitar que su cuerpo temblara. Su mente no era atontada, sino clara. Sin embargo, no podía respirar por las intensas emociones que se arremolinaban dentro de él.

Forzó su cuerpo hacia arriba y apenas logró apoyarse contra la pared. Inmediatamente, el suspiro que había estado reprimiendo escapó de su boca.

Seol cerró los ojos.

Un sueño.

Él tuvo un sueño. Un sueño que era un poco, no, muy diferente a los sueños que solía tener. Sintió como si hubiera experimentado personalmente todo. Incluso sintió todo tipo de emociones del sueño.

Lógicamente hablando, nada de eso tenía sentido. El sueño se separó de la vida cotidiana que vio y experimentó. Los paisajes que presenció de forma intermitente estaban muy lejos del fondo del mundo moderno, e incluso había luchado contra criaturas que claramente no eran humanas.

Quizás, todo era solo un sueño tonto.

Pero.

(¿... por qué...?)

La escena final estaba atrapada en su cabeza. El moribundo... estaba lleno de remordimientos.

Arrepentimiento, remordimiento, lamentación y un profundo suspiro... Incluso hasta que su vida se desvaneció, estas fervientes emociones estallaron en su interior. Se quedaron dentro de Seol, tocando su corazón.

Seol abrió los ojos después de mucha lucha y lentamente miró alrededor de su habitación. La manta arrojada a un lado, la ropa sobre una caja de ramen, botellas de soju rodando por el suelo sucio y una cajetilla de cigarrillos en el mismo lugar.

Por alguna razón, esta vista se sintió surrealista.

A su parecer todo era demasiado jodido como para siquiera prestarle atención. Una migraña desgarradora repentinamente lo barrió. Se levantó casi reflexivamente y se tambaleó hacia el baño. Una vez que sacó un cubo de agua fría y empapó su cabeza, su mente se aclaró.

Cuando no pudo aguantar más la respiración, levantó la cabeza del agua. Su propia cara reflejándose en el espejo del baño parecía demasiado desconocida. Tenía los ojos hundidos y su tez pálida como un hombre enfermo.

(¿Este soy yo?)

Lentamente se tocó la cara cuando la luz volvió a sus ojos. Su viejo rostro no se encontraba en ninguna parte, reemplazado por el rostro de un adicto al alcohol y al juego empobrecido.

Sintió que estaba mirando a un hombre muerto. Salió del baño sin siquiera limpiarse el agua que goteaba de su barbilla. Se puso la chaqueta casi con rabia y abrió la puerta principal.

Le dolía el estómago y sentía que no duraría mucho más si no empujaba algo allí.

Se detuvo en la tienda de conveniencia, pero nada llamó su atención. En lugar de salir de su casa para tomar comida, había salido furioso porque sentía que no podía quedarse adentro.

Al final, se fue después de elegir una lata de cerveza. Comenzó a caminar sin rumbo hasta que, finalmente, llegó al lugar debajo del puente del río Tancheon. Era el lugar que frecuentaba para lamentarse de su suerte cada vez que perdía dinero en el casino.

Seol abrió la lata y la tragó. Su estómago pareció gritar, pero no le importó. Mientras estaba sentado en completo silencio, las emociones que había estado tratando de ignorar volvieron a él como un maremoto.

(¿Cómo terminé así?) se lamentó.

Seol miró las aguas oscuras del río Tancheon. Estaba en la escuela primaria cuando se dio cuenta de que era diferente a los demás. Llamó a su habilidad Ojos verdes y se consideró un niño elegido. Se estremeció de emoción, anticipando que algo especial le sucedería algún día.

Mirando hacia atrás, las historias de su infancia solo lo hicieron sonrojar de vergüenza. No fue hasta que se hizo mayor que aprendió que ser diferente de los demás no era tan bueno y que era mejor ocultar esta diferencia.

Durante los 26 años de su vida, solo había determinado cuatro hechos sobre su habilidad. Si enfocara sus sentidos en sus ojos, los seres vivos y los objetos brillarían de color verde. Entre ellos, había algunos que perderían el color incluso si mantenía su enfoque. Si se involucrara con cosas que eran verdes, no pasaría nada. Pero, si se involucraba con cosas que perdían su color verde, algo malo sucedería con más del 50 por ciento de posibilidades.

Seol se centró en la "probabilidad de más del 50 por ciento". Desde una perspectiva diferente, significaba que algo bueno podría tener 'menos del 50 por ciento de posibilidades'.

El casino fue donde eligió confirmar esta hipótesis. Al principio, simplemente consideraba que el casino era un lugar de experimentación. Aunque perdió del 60 al 70 por ciento de su compra, solo trajo cien mil wones cada vez.

Si lo perdía todo, se iba sin volverse. Aunque no estaba contento, la cantidad no era diferente de la asignación de un niño universitario.

El problema fue con los días en que realmente ganó dinero. Una vez, incluso había convertido su compra en 5 millones de wones en dos días. Comió todo lo que quería, compró ropa que solo se imaginaba usando y reemplazó su computadora por el último modelo.

Incluso entonces, todavía le quedaba mucho.

El sabor de gastar dinero. Una vez que lo experimentó, su vida comenzó a cambiar. La cantidad de veces que visitó el casino se disparó y la cantidad de dinero que trajo consigo también aumentó. Se olvidó por completo de sus experimentos y se centró en ganar dinero.

Mientras pasaba sus días obsesionado con ganar dinero, su habilidad desapareció repentinamente. No era que fuera de la nada. Le dolía la cabeza cuanto más usaba su habilidad, e incluso desarrolló insomnio a medida que aumentaban los días en que no podía conciliar el sueño.

A medida que los síntomas empeoraron, el color verde que solía ver al enfocarse un poco se volvió más tenue. Después de desmayarse una vez por agotamiento, perdió su capacidad de ver el color verde incluso después de concentrarse durante horas.

Aunque su codicia le había costado su habilidad, no podía dejar de apostar.

Había experimentado el lado positivo de la variación del juego. Creía que podría recuperar sus pérdidas si ganaba en grande solo una vez.

No escuchaba sin importar quién intentara hablarle con sentido. Ya había caído en la alegría del juego. El éxtasis que sintió cuando ganó fue más electrizante que cualquier otro placer. A partir de ese momento, la vida de Seol se dirigió directamente hacia el fondo del abismo.

Y luego, y luego...

Seol apretó los dientes. ¿Por qué se sintió así de repente?

El orgullo sin base y el desafío imprudente surgieron en su corazón. Pero cada vez que esto sucedía, las emociones que sentía en sus sueños se inundaban y las ahogaban.

De repente, recordó haber hecho llorar a Yoo Seonhwa por la mañana. Inmediatamente, otra poderosa ola de emociones entró, haciéndolo marear.

"¡Soy un hijo de puta!" grito enojado consigo mismo.

Clak.

La lata de cerveza cayó de su mano y se derramó en el suelo.

"¿Por qué hice eso?" cubrió su rostro con sus manos. Puso fuerza en todos sus dedos y presionó locamente "¿Por qué hice eso? No quise hacerlo. No debería haber dicho algo así. Maldición"

Sintió que una parte de su corazón estaba arrancada. Las emociones que sintió de su sueño no desaparecieron cuando se dio cuenta de ellas. En cambio, se hicieron más claros. El sentimiento de arrepentimiento apuñaló su corazón, y los bordes de sus ojos se calentaron.

Ahora, sentía que entendía la verdad. Que, sin su habilidad, solo era un bastardo sin valor.

"¡Ojalá nunca hubiera tenido esta habilidad!"

En el momento en que finalmente aceptó esta verdad... Seol sintió que las últimas partes de su ego se borraban de su mente.

"JAJAJAJA ..." se echó a reír. Él estalló como si su corazón explotara. Pero gradualmente, su risa se convirtió en llanto "... lo siento..."

Se arrepintió de todo. Se sentía cargado como si algo lo estuviera estrangulando.

"Lo siento, Seonhwa..." Un joven adulto lloraba como un niño "Prefiero morir antes que seguir viviendo así..."

Había vivido como basura, preocupando a todos a su alrededor. Ni siquiera podía imaginar cuánta decepción y dolor causó. Tal como dijo su hermana pequeña, tal vez sería mejor para todos a largo plazo si él se suicidara.

Seol se levantó lentamente. El agua del río que fluía lentamente parecía más atractiva que nunca.

Se acercó como si estuviera en trance y miró hacia el río. Las lágrimas que caían de sus mejillas causaron pequeñas ondas en el agua.

Mirando fijamente al río, dio un paso adelante con sus piernas temblorosas.

Fue cuando.

De repente, el color del agua cambió. Desde el punto donde estaban los pies de Seol o, más específicamente, desde el punto donde causó las ondas, el color verde floreció hacia afuera.

Al igual que dejar caer la pintura en agua clara, el color olvidado, la luz perdida se extendió rápidamente en todas las direcciones.

No solo teñía el agua del río que fluía, sino que también viajaba por los pilares de soporte del puente, teñiendo toda la estructura. Cubrió el lugar en el que estaba sentado y, finalmente, el cielo distante.

El mundo entero se tiñó de verde, como cuando era más joven.

Seol contempló la fiesta del baile verde a su alrededor con los ojos húmedos de lágrimas. Su rostro era claramente de absoluta incredulidad.

"Esto es..."

Después de permanecer allí como si hubiera sido alcanzado por un rayo, Seol conscientemente dispersó su concentración. Inmediatamente, el mundo volvió a sus colores normales.

Cuando se concentró de nuevo, el mundo verde volvió una vez más.

"... ¿Volvió?"

Justo como de repente desapareció un día.

"¿Realmente volvió?"

De repente regresó.

"¿Pero por qué?"

Había fallado en restaurar su habilidad sin importar cuánto lo intentara. La sensación de pérdida que sintió ese día difícilmente podría describirse con palabras.

Pero ¿... qué causó que se activara nuevamente?

De repente, volvió a recordar el sueño de la mañana. Ahora que lo pensaba, el hombre de este sueño parecía usar la misma habilidad.

Seol recordó frenéticamente el sueño desde el principio.

Pero pronto, determinó que no estaba relacionado. No tenía sentido, por mucho que lo pensara. Quizás, su deseo subconsciente de recuperar su habilidad se había manifestado como el extraño sueño. Eso fue más realista y fácil de tragar que creer realmente que el sueño tenía algo que ver con recuperar su habilidad.

Justo cuando Seol cayó en una confusión recién descubierta, el chasquido de tacones altos golpeando el pavimento de piedra resonó. Los extraños pasos rítmicos llamaron la atención de Seol, y rápidamente giró la cabeza hacia un lado.

Y allí, Seol definitivamente podía verlo.

En el mundo teñido de verde, la luz viridescente se desvanecía gradualmente en un lugar. Fue en la dirección de ese sonido.