Comentarios iniciales:

· Se supone que en un inicio era un One-shot pero termino convirtiéndose en una mini historia jajaja

· Ninguno de los personajes me pertenece , todos son propiedad de Tloz.

· Es un universo alterno, más acertado a los tiempos actuales, habrán varios personajes de distintas entregas, no se si me explique jajaja

- Aclaró que no odió a Ilia jajaja ni a Malón, pero no creo que a nadie más le quede el papel de antagonistasnmejor que a ellas. jajaja sorry a los fans de Malón e Ilia. :'c

Capitulo 1

Era su primer día escolar, no podía estar más feliz, se mudo a la gran ciudad de Hyrule, fue aceptada en la universidad que tanto anhelaba, con el hombre que amo desde niña.

El hombre más apuesto del mundo, fuerte, atlético, con facciones que harían temblar de excitación a más de una mujer y no sólo era físicamente atractivo sino que era la persona más amable y gentil de todas.

La nobleza de su corazón era incomparable, era el hombre perfecto, de eso no tenía duda y ella tenía el honor de ser su novia.

Ilia lo amo desde que eran unos pequeños niños, prácticamente crecieron juntos, no fue sorpresa para la gente de su pueblo que eventualmente se volvieran novios.

No podía estar más feliz, el destino estaba a su favor.

Hace unos meses estaba temerosa de no ser aceptada, su entonces mejor amigo la apoyo y la consoló, diciendo que todo iba a estar bien, que muy pronto recibirán la carta de aceptación de la tan aclamada Universidad de la capital de Hyrule.

Después de unas semanas el destino le sonrió y justo cuando recibió su carta, su amado Link le declaró su amor por ella, y desde entonces son novios. Poco sabía ella que su realidad iba a cambiar más rápido de lo que hubiera deseado.

Ambos llegaron tomados de la mano a la gran ciudad de Hyrule, estaban asombrados, nunca habían estado ahí, siempre vivieron en su pueblo natal, Ordon, una apartada zona rural.

Todo era nuevo para ellos, los grandes edificios, los rascacielos, el inmenso castillo que aún predominaba con él pasar de los siglos, el tráfico, la cantidad de razas diferentes que se encontraban caminando por las calles, todo era nuevo y fascinante a sus ojos.

La pareja se miró a los ojos maravillados con la nueva vida que les esperaba.

Sin perder más el tiempo se dirigieron hacia la universidad. Cada uno se fue a instalar en las habitaciones de estudiantes que les correspondía, separándose en secciones, una para los hombres y otra para las mujeres.

Aunque en un principio Ilia quiso rentar un departamento con Link, este se negó por dos razones, una no tenían el dinero suficiente como para estar pagando renta, más aparte la comida y cualquier otro gasto que el departamento conlleva.

Lo segundo y lo más importante, él sabía que no era prudente vivir solo con una chica… y más si esta era su novia, ciertas cosas podrían pasar, por su puesto que él, como todo un caballero la respetaría sin importar qué.

La chica le había confesado con anterioridad cuando aún eran solo amigos que no deseaba perder su virginidad fuera del matrimonio.

Link a pesar de estar en la etapa en donde las hormonas están "locas" hizo conciencia de dicha conversación y concluyó que si vivía con ella puede ser un factor para despertar esas pasiones, no quería ofenderla, su amor por ella era más fuerte de cualquier deseo sexual.

Fue por ello que se negó a vivir con ella, él no quería crear malos entendidos con la familia de Ilia, a pesar de que ya se conocían desde hace años, prefería mantener la distancia.

Ilia no tuvo otra opción que aceptar, e irse a instalar a los cuartos de estudiantes que debía compartir con 3 chicas más.

Para su desgracia ella y Link iban en salones diferentes, ninguna de sus clases coincidían y eso era una verdadera pena para ella, solo podían verse a la hora del almuerzo y saliendo de la escuela.

Link era toda una sensación en la universidad, él chico ganó popularidad al cabo de pocos días; era visto y admirado por su destreza física, se metió a clases de atletismo después de sus clases y gracias a ello sin quererlo se hizo notar, muchas chicas se volvieron sus admiradoras desde entonces.

No era un hombre de muchas palabras, simplemente agradecía los cumplidos con una sonrisa sin decir nada más y después de ello se retiraba.

Ilia por otra parte no tenía tanta relevancia en la escuela, era una típica chica universitaria, se volvió amiga de dos gemelas pelirrojas, Malón y Cremia, con quienes compartía el cuarto, junto con otra chica de otra carrera.

Pocos sabían que Link e Ilia eran novios, ya que cuando se les veía juntos, se comportaban más como amigos que como novios, no compartían besos ni caricias típicas de una pareja enamorada, el chico era demasiado tímido para expresar afecto en público, pero eso nadie lo sabía.

Únicamente Malon, Cremia y amigos cercanos a Link sabían sobre la relación de ambos rubios.

Esto no le molestaba mucho a Ilia en realidad, confiaba en Link y sabía que él mantenía distancia con las chicas que se le llegaban a declarar, siempre la procuraba a ella y le demostraba su amor con pequeños detalles.

Link no era rico, eso lo sabía muy bien, venían del mismo pueblo, pero todo el dinero que ganaba lo obtenía de largas jornadas de trabajo, trabajo que consiguió después de unas semanas después de entrar a la universidad.

Y gracias a esto se daba el lujo de llevarla a comer de vez en cuando y regalarle uno que otro presente, ella no podía estar más agradecida con las diosas por el hombre que tenía como novio.

Todo en la vida de Ilia era perfecto, estudiaba la carrera que quería, en la universidad que quería con él novio más perfecto de todos, nunca se cansaría de recordar la buena suerte que tiene.

El tiempo transcurría más rápido de lo que quisiera y para su sorpresa en pocos días cumpliría 1 año de relación con Link.

No lo podía creer, 1 año con él amor de su vida, debía darle el mejor de los regalos, claro que esto debía ser sorpresa.

Su aniversario caería el viernes próximo, quizás debería de hacer un picnic sorpresa o debería pensar en otra cosa… necesitaba ayuda para conseguir el mejor regalo para su novio.

-Chicas! Necesito su ayuda- dijo la ojiverde cuando encontró a las gemelas.

-¿Qué sucede?- preguntó Malón.

-Verán, en pocos días será mi aniversario con Link… y bueno no se que debería regalarle- dijo angustiada.

Las chicas se miraron entre sí con picardía, y sintieron a la par, casi parecía que se comunicaban telepáticamente.

-Es fácil Ilia…- hablo Cremia- que es lo que todo hombre quiere?

-¿Cómo?- preguntó confusa

-Sexo- respondió Malón- regálale una noche de pasión- sonrió.

La cara de Ilia pasó del asombro a una vergüenza total.

-Pe-pero que dicen- grito exaltada.

Las gemelas rieron con fuerza.

-No me digas que tú y ese guapo galán no se han acostado aún?- Cremia incrédula lleva su mano hasta su boca cubriéndose con sorpresa.

-No! Claro que no… aún no estamos casados ni prometidos… - dubitativa de lo que pueda decir, va bajando gradualmente el tono de su voz.

-Ahhh – suspiró Malón- chica de pueblo, no se necesita casarse ni comprometerse ni mucho menos tener una relación amorosa para acostarse con alguien.

Ilia estaba completamente roja, ella sabía muy bien que las personas de la ciudad eran más liberales, pero ella al ser una joven del campo la criaron con él pensamiento de que debía llegar pura al altar y solamente podía perder la virginidad con su esposo.

Por su puesto ella es fiel a sus tradiciones, por lo que se escandalizó al pensar que estas jóvenes le hablaban sobre el tema sin ningún tipo de pudor.

-Es una pena- continúo hablando Malón- si yo tuviera a ese hombre como novio, lo tendría todas las noches entre mis piernas haciéndome gritar de placer.

Cremia afirmó con la cabeza dándole la razón a las palabras de su hermana, sin duda ella también lo haría.

-Estás perdiendo el tiempo Ilia, si no le das tu "tesorito" puede llegar alguien más a quitartelo- mencionó Cremia.

-Es hombre después de todo… tiene sus necesidades…- concluyó Malón.

-Pero el dijo que me respetaría y me esperaría hasta que yo esté lista… o hasta que nos casemos…

-y ¿le creíste?- Cremia río burlonamente

-Ilia- la llamó Malón a la vez que la tomaba de los hombros- debes de saber que todos los hombres a esta edad son iguales- la miro a los ojos- solo piensan en una cosa y esa es sexo.

-y si no se lo das, buscarán saciar su necesidad en otra parte- continúo hablando Cremia- siempre es así- sentenció.

-Él me ama, nunca me engañaría…- Ilia no quería creer en sus palabras, confiaba en Link, sabía que él no era ese tipo de persona.

Ambas chicas rieron por la credulidad de la rubia

-Ya verás que si! Ningún hombre se resiste a una buena noche de pasión- dijo esta vez Malón- es fácil saber cuándo un hombre te engaña o es propenso a engañarte.

La rubia quería preguntar sobre el tema, pero había algo que le impedía formular la pregunta. No, no debía dudar de Link… él jamás haría algo así …o si?

Cremia sabía el debate mental que tenía la chica frente a ella, ya comenzaba a dudar, su plan iba por buen camino.

-Nena, si no vas a complacerlo en la cama hazte la idea de que se consiga a alguien que lo haga por ti- mencionó descuidadamente Cremia mientras miraba sus uñas con falso interés.

-Si no estás segura puedes probarlo- la reto la hermana.

-Probarlo? ¿Cómo? – las preguntas salieron de su boca tan rápido que fue incapaz de retenerlas, casi como si se tratara de vómito.

Malón sonrió con malicia y la condujo a sentarse a una banca cercana.

-Hay varias opciones… Puedes hablarle con otro teléfono por WhatsApp y fingir que eres otra persona y coquetearle- carraspea un poco- aunque es poco creíble.

-Otra opción- esta vez hablo Cremia- podemos contratar a una chica para que lo seduzca.

-Oh crear un ambiente perfecto para que caiga, presentarle a una chica guapa y pillarlos en el acto- dijo feliz Malón.

Ilia no estaba muy segura de ninguno de sus planes, hacer cualquiera de ellos significaba que no confiaba en su novio. Era dudar de él, tampoco quería traicionar su confianza, además de que no le había dado motivos para dudar de él.

No, no caería en esos juegos.

-No…- Ilia miro a las chicas con determinación- estoy convencida que Link no es así, sé que no soy la mujer más hermosa de aquí y tampoco tengo un cuerpo de modelo, pero confío en él, se que no me engañaría nunca, no me ha dado motivos y se que nunca me los dará.

Malón rodó los ojos y pensó "esta chica es demasiado terca para convencerla, debemos actuar por nuestra cuenta"

-De acuerdo amiga- hablo Malón- pero si un día tienes dudas de él, nosotras podemos ayudarte a investigar, ya sabes.

-gracias, pero no lo necesitare- dijo una muy confiada Ilia, dicho esto, se levantó de la banca y se disculpó con las gemelas, excusándose de ir a su clase.

Las hermanas la miraron alejarse y cuando esta se perdió de su vista se miraron entre sí.

-Esto va a ser difícil Malón, es muy terca- se lamentó la gemela menor, Cremia.

-Ya se… debemos actuar por nuestra cuenta- dijo cruzándose de brazos.

-Pero ya intentamos acercarnos a Link y él nos rechazó…- volvió a lamentarse.

-Cremia, ya sabemos que Link nunca nos volteara a mirar- suspiro- después de todo somos las "amigas" de su novia. Nunca la engañaría con nosotras.

-Entonces… ¿Qué propones?

-Hay que presentarle a alguien a quien no pueda resistirse… pero quién??

-Contrataremos a alguien?

-No… debe ser genuino, o nunca caerá, debemos encontrar al loto blanco…

-Loto blanco?- preguntó confusa la menor.

-¡Si,! Una chica que sea tímida, indefensa y delicada y no sólo eso, debe ser hermosa y de buena figura, una tentación andante.

Cremia asintió ante la descripción de su hermana, sin duda la descripción de una chica así sería alguien a quien ningún hombre pueda resistirse.

Malón y Cremia comenzaron a elaborar su malvado plan, ciertamente ambas jóvenes querían el corazón de Link, quitar a Ilia del medio era lo primero en su plan.

Dadas las circunstancias y el hecho de que ambas eran "amigas" de su novia, él jamás las miraría como algo más.

Todo era parte de un muy elaborado plan, fingir ser amigas de la chica y mostrar una buena imagen de ellas apoyándola y demás, luego llegaría la "usurpadora" que separaría a Link de Ilia y cuando esto pasara, no serían más las amigas de la novia, después se encargaría de la usurpadora y al fin tenían al chico disponible.

Aunque él plan era tonto a la vista de alguien más, las hermanas estaban convencidas de que era él plan magistral.