En el amor no hay lógica.

Ciertamente, en el amor no existe la lógica. Porque todo es espontáneo, repentino, sin aviso y no siempre hay una razón concreta de por qué se produjo.

Por ende, el amor, es lo más ilógico que puedes encontrar.

Y a cualquiera, le puede pasar.

Sí, Senku fue (la afortunada víctima) una de esas personas. Pues simplemente, ¿Cómo fue que su amistad se convirtió en enamoramiento y se refinó en amor?

Él no lo sabe, en serio. Y como dicen que el amor no tiene razones, él no se molestó en darle un por qué a esa pregunta; mucho menos si le preguntaban.

¿Qué por qué pasó? Él no sabía y poco le importaba, si era honesto.

Porque no, no iba a decir: Fue porque Kohaku creyó en mi desde el principio y me apoyó y, blah, blah, blah.

Pura perorata.

Y aun cuando Kohaku se lo preguntó una vez, él le dijo:

- No sé, ¿Te molesta?

Y claro, como Kohaku no es de esas chicas sentimentalista a morir. Ella sólo se encoge de hombros con una sonrisa risueña.

- No, así está bien.

Ciertamente, el amor carece de lógica. Pero no significa que puedas disfrutar un rato de este sentimiento.


Nota: Tenía ganas de burlarme, y quedé satisfecha.