Aniversario

Los personajes no me pertenecen son de la gran Rumiko Takahashi esto es sin fines de lucro solo diversión por y para los fans.

"Fue un 15 de Abril del año 1989 cuando se estrenaba en Japón la primera emisión de Ranma ½"

¡Feliz Aniversario mi querido trenzudo favorito!

Nota del autor: con motivo de los 32 años que cumple esta maravillosa obra llamada Ranma ½ quise celebrar con un one shot bonito y emotivo. Este shot fue inspirado por "La Oreja de Van Gogh" y su tema Nadie como tú, escúchenlo es hermoso.

O—

Miraba fijamente el reloj en el mural, sí, solo faltaban tres minutos y adiós escuela. No eran vacaciones, era mucho mejor que eso, era el final de tantos años estudiando. El profesor casi finalizaba su charla de despedida y la verdad era que la emoción me embargaba, no solo porque era cerrar un ciclo sino que era momento de tomar una decisión importante en mi vida.

La chica dueña de mi corazón y de mis ansias no era la típica niña japonesa, no, Akane Tendo era los dos extremos en un solo cuerpo. O me llevaba al cielo entre nubes acolchadas o caía directo al infierno entre llamas, pero ambas versiones me gustaban.

Ella tiene ese don de dar tranquilidad de saber escuchar de envolverme en paz, tiene la virtud de hacerme olvidar el miedo que me da mirar la oscuridad.

Apenas y habíamos cumplido los 18 años, pero estos años viviendo bajo el mismo techo, rodeados de locos y aventuras sin igual me sirvieron para darme cuenta de que no imagino mis días sin ti, aunque muchas veces me mandes al demonio. He sido un cretino, insensible infinidad de veces, pero ahí estás tú regalándome esa sonrisa que me enamoró desde el primer día en que te vi.

Mi pie se movía frenético sobre el suelo, mis ojos iban y venían sobre el reloj que no avanzaba y mi pupitre, los nervios me carcomían, toda la valentía se escabullía y sabía que ese par de ojos de avellana no dejaban de mirar cada uno de mis movimientos.

De súbito el timbre señalaba que todo había acabado, de pie y cual robot caminé hasta la salida. Akane me encontraría en el jardín trasero de la escuela, era el sitio perfecto, nadie iría a ese lugar en el último día de clases.

Tomé aire para motivarme y me llené de valor para decirle de frente y sin rodeos lo que sentía por ella. Unos pasos suaves y escurridizos me ponían sobre aviso, de pronto una menuda niña de cabello brillante se acercaba.

-¿Por qué tanto misterio? — preguntaste curiosa.

-Ya sabes, en casa no hay privacidad — dije tragando duro.

-Ah… es verdad, entonces te escucho — respondiste toda oídos.

-Bien… yo, eh… — me viste divertida ante mi tartamudeo nervioso.

-Vamos Ranma… somos amigos ¿no? — hablaste dándome el pase sin darte cuenta siquiera…

-Sí, lo somos pero no es suficiente para mí — comencé a decir, tu expresión cambió rotundamente — yo quisiera ser algo más que un buen amigo.

-¿Te refieres al compromiso? — preguntaste seria.

-Tiene que ver con eso, pero no del todo— contesté.

-No te entiendo — dijiste confundida.

-¡Me gustas! — Exclamé efusivamente, pegaste un salto de pura impresión — ya no quiero que nos señalen como los niños que fueron comprometidos a temprana edad, quiero que se llenen la boca diciendo que fuimos afortunados al corresponder un solo sentimiento — agregué con el corazón en la boca.

-¿Por qué? — preguntaste prestando toda tu atención, miré el suelo unos segundos y luego volví a mirarte para responderte, necesitaba las palabras adecuadas.

-Porque… nadie como tú sabe tanto de mí, nadie como tú para hacerme reír, no imagino a nadie más que a ti con las ganas de compartir mis penas, mis tristezas, mis ganas de vivir. Solo tú podrías entender todo esto que guardo en mi interior, solo tú creerías siempre en mi querer — hablé con toda convicción.

Tus ojos se nublaron y un par de lágrimas caían por tus rosadas mejillas, me acerqué aun temeroso de tu respuesta pero mi corazón me decía que era lo correcto y por primera vez te envolví en un abrazo tan cálido que jamás olvidaría esa confesión.

Era el inicio, el comienzo de una historia de amor que escribiríamos juntos. Nuestras miradas se cruzaron y me sonreíste ampliamente, ese día regresamos a casa tomados de las manos, éramos como un par de niños en absoluto silencio pero llenos de emoción.

Han pasado más de veinte años, sentados en la terraza de nuestro hogar la familia Saotome Tendo se reúne alrededor de una hermosa mesa cubierta por un mantel blanco, el motivo, nuestro Aniversario de Matrimonio.

Tus hermanas ríen divertidas de las locuras de nuestros padres que aunque ancianos ya, siguen siendo tan amigos y confidentes como en sus mejores años. Y mis tres orgullos, sangre de mi sangre, mis amados hijos quienes organizaron la bonita fiesta no paran de traer nuestros platillos favoritos, comemos, bebemos y brindamos felices.

Me miras tan enamorada como la primera vez, tomo tu delicada mano y te sonrío, en silencio y sin cruzar una palabra, solamente una mirada es suficiente para hablar. Son tantos años de momentos congelados, de recuerdos que jamás se olvidarán.

Deseo con fervor que pasen los años y me acompañes hasta el final y recordar cómo es que cada sueño que dijimos antes de dormir lo pudimos lograr.

Feliz Aniversario mi amada Akane.

Fin

Estimado lector, espero les haya gustado este breve pero emotivo shot. Quise escribir su primera confesión de amor al terminar la escuela porque así es como imagino que pudo ser, pero también describí el futuro, un antes y un después de mi pareja favorita. Felices y consumados, Ranma solo deseaba pasar lo que le restaba de vida al lado de la mujer que ama, su esposa Akane.

Si te gustó déjame tu preciado review, amo leerlos.

Desde Chile una fanática más de Ranma ½

Sweetsimphony._