El chamán más fuerte de la humanidad, no sabía el calvario que le esperaba al verla por primera en el umbral de esa puerta y cayó rendido a sus pies, por esos hermosos ojos avellanas. Pero él no estaba solo, el heredero del clan Zenin, desconocía el infierno que se avecinaba sobre él, después de prestarle ese bolígrafo que lo comenzó todo. Eran extranjeras de otras tierras, pero cautivas en las de ellos, solo necesitaban salvarlas o salvarse ellos mismos, eso aún, no lo saben.