Hola mundo, por leer tantas historias al final me anime escribir una, espero que os guste.
Pokémon no me pertenece, historia creada para entretener y alejarse del mundo real.
Antes que nada, les advierto que no soy nativo de algún país de habla hispana... si algo les parce raro es por culpa de leer tanto contenido de muchos países que hablan en Español, ahora si... con la historia.
Diálogos:
- (Pensamiento de personajes)-
-Habla y piensa un Pokemon-
-[Comunicación mental gracias al aura o telepatía]-
-[Pokémon legendarios o seres de categoría superior]-
Prologo
Lugar y tiempo desconocido.
- Concéntrate, siente la naturaleza... - dijo una voz férrea.
El chico en posición de meditación respiro hondo, limpio su mente de cualquier pensamiento e intento sentir su entorno. Podía sentir su respiración, latidos del corazón, la piedra fría en la que estaba sentado y el viento moviendo su azabache cabello.
Pasaron 3 minutos y empezó a visualizar en un tono azul su entorno, podía ver los árboles a su alrededor, a su maestro que tenía un aura azul profundo y al chacal sentado a 3 metro de él.
- Ahora mira más halla…- Volvió a decir la misma voz.
Pasaron otros dos minutos y empezó a "ver" por el bosque. Después de 5 metros encontró un aura color blanco-amarillo, era un Zigzagoon durmiendo tranquilamente. Avanzo otros 5 metros y encontró una cascada con un lago, en el había más auras, estas eran azul-amarillo.
Se concentró más para identificar las auras, podía ver un Magikarp, Goldeen y Finneon. Había una cuarta aura... pero no pudo identificarla. Se concentró más y al final pudo verlo... un Gyarados. En ese instante su aura cambio a azul-rojizo y rugió con mucha fuerza. El rugido se distorsionó en un "¡Fuera!"
En menos de un segundo una presión golpeo su mente con mucha fuerza haciéndolo caer de la roca en la que estaba entrenando. Estaba mareado y sorprendido.
-Eres impresionante Aaron... ya es el quinto intento y solo pudiste avanzar unos pocos metros...- decía con desaprobación su maestro.
-¡Podía avanzar más si no fuera culpa por ese Gyarados molesto!- grito el muchacho con frustración.
-¡Silencio, si esto fuera una batalla el enemigo ya te hubiera encontrado y matado!- su voz férrea exalto al pobre muchacho que se puso de rodillas y murmuro un "Lo siento".
-Aahh, Aaron, acepte entrenarte por separado porque no podías seguir el ritmo con el resto del grupo... y ya entiendo por qué, tienes que entender que no puedes poner escusas siempre que fallas o encuentras un obstáculo. Intenta sobrepasarlo o por lo menos analizarlo y hacer una estrategia para enfrentarlo.-
-Si maestro...-
-Bien, ahora inténtalo otra vez-
Y de esta manera Aaron volvía a repetir todo el proceso.
Esto era lo que estaba viendo Ash, no podía hablar o moverse, solo ver todo desde la sombra de un árbol.
La escena cambió y pudo ver desde un gran precipicio dos ejércitos diferentes, había una distancia de 2 kilómetros entre ellos. Se sorprendió al poder mover su cabeza con libertad.
Miro a la izquierda, había cuatro hombres y dos mujeres, todos tenían armaduras ligeras y guantes que le resultaba muy familiares. Entre ello destacaba uno que tenía su mismo tono de cabello, lo reconoció. Era Sir Aaron, pero más joven que la última vez que lo vio en la visión del Árbol del Comienzo.
Podía ver como a los 6 les brillaba un poco los ojos y al final asintieron con seriedad. Para después saltar por el precipicio. Ash estaba sorprendido ... ¿Cómo alguien podía saltar tan fácil desde una altura tan grande?
-Alguien con una fuerte voluntad- sorprendido por la respuesta, pudo ver a Sir Aaron delante de él, era el que vio hace 4 años.
-Antes de que preguntes algo, estás viendo algunos de mis recuerdos- la sonrisa nostálgica del guardián le decía a Ash que eran momentos importantes para él.
Ash intento abrir la boca para hablar, pero no podía, le era posible solo mover la cabeza. ¿Por qué?
-Porque tu control del aura es demasiado débil, si hubieras entrenado solo un poco más de lo normal ahora podías por lo menos hablar y moverte- en su tono se podía ver diversión y un poco de ¿tristeza?
Frunciendo el ceño se preguntaba como podía comunicarse con el guardián. Sir Aaron negana con diversión por lo poca atencion que tenia. Ash abrió los ojos como platos por lo evidente que era... antes le había respondido su pregunta sin decir una palabra, solo lo había... pensado.
-Muy bien, te diste cuenta bastante rápido- sonrió esta vez con bastante satisfacción.
Bien, entonces tenía que preguntar por qué estaba viendo sus recuerdos y porque podía comunicarse solo con el pensamiento.
-Bien, para que entiendas todo y responder las futuras preguntas, voy a explicar todo desde un principio, pero en resumen... ya en el futuro podre ser más explícito. En estos momentos estás soñando de una manera diferente gracias a nuestra conexión del aura basada en tus recuerdos por haberme visto, el aura de Lucario y un factor que por el momento no te lo voy a contar- Ash arqueo una ceja - Je je je sería demasiada información para ti de golpe, como decía, estás viendo mis recuerdos porque ahora es el momento de dar el paso al "siguiente", esa sería por la ley del orden, dado por Arceus. Si siques mis futuras instrucciones tendrás toda la explicación. -
Ash asintió no muy convencido por todo lo que le estaba explicando.
-Y puedes comunicarte con el pensamiento gracias a algún entrenamiento que hacías en el pasado... ¿Recuerdas algo? - Ash lo pensó un momento y recuerdo que solía meditar con Greninja para lograr la sincronización, sonrió al recordar a su querido Pokémon.
-Wow por lo que veo en tus recuerdos esa es una habilidad impresionante, en mi tiempo e historia solo algunos humanos lo han conseguido, podría contarlos con los dedos - dijo con asombro al mirar sus dedos-
-Me pregunto cuantos lo consiguieron hasta el siglo de Ash... - susurro Aaron, pero Ash lo escucho muy claro.
-Perdón, no le des importancia a lo que estaba susurrando. Al parecer gracias a ese entrenamiento ahora puedes por lo menos comunicarte conmigo con el pensamiento. Si no lo hubieras hecho... tenía que intentar darte instrucciones basadas en mis recuerdos para que hagas un poco de entrenamiento mental y poder comunicarnos como lo estamos haciendo ahora.
-...señor- decía una voz distorsionada y lejana.
-Al parecer no tenemos mucho tiempo, en otra ocasión seguiré explicándote. Por el momento intenta volver a hacer el mismo entrenamiento que hacías con tu amigo lo más repetitivo posible. Te recomiendo que lo hagas en diferentes terrenos y ambientes, por ejemplo el bosque, cama, cueva o lugares con mucha gente, puede que descubras cosas bastante interesantes- le decía con una sonrisa misteriosa. Ash solo consiguió asentir antes de que algo pasara.
-Señor despierte por favor, el avión ya llego a Kanto- la pobre azafata lo movía gentilmente para poder despertar a Ash de su "sueño". En al avión solo quedaban ellos dos.
Al final Ash abrió sus ojos y todavía desorientado balbuceo un "si, lo siento" y se levantó de su asiento para coger su equipaje. La chica se apartó un poco para dar espacio al entrenador, ella lo miraba un poco divertida y decidió hacerle una pequeña broma.
-Señor si no se apresura el avión volverá a despegar en poco tiempo de vuelta a Alola- al escucharla, Ash se llenó de pánico y cogió con bastante prisa y torpeza su mochila y maleta. No se dio cuenta que esta estaba abierta por haber buscado algo en ella antes de despegar y consiguió que se le abriera por el movimiento brusco. El pobre se paralizó del pánico, había por todos lados ropa y diversos objetos.
-Lo siento mucho, enseguida recojo todo- decía con pánico en su voz mientras metía todo con gran velocidad, como acabo hecho un desastre, todo el contenido de la maleta no se cerraba. El pánico aumento.
La azafata rio por lo bajo por la mala suerte del chico y decidió ayudarlo, después de todo tenía parte de la culpa.
-Si me permites te puedo ayudar a ordenar todo- decía con una sonrisa la chica, Ash por la prisa no la rechazo y ambos volvieron a sacar y meter todo de una forma más ordenada. Ella se encargó de la ropa y Ash de los objetos. Él se quedó bastante sorprendido por la maestría con la que metía su ropa, al no estar muy atento lo que recogía no se percató que cogía un objeto "misterioso" de pequeño tamaño que estaba bajo un asiento. Al final consiguieron meter todo en menos de 2 minutos.
-Gracias por la ayuda- el chico le sonrió con sinceridad y la chica la devolvió el gesto bastante alegre por todo lo que estaba pasando. Los dos caminaron hasta la salida del avión. La azafata por un momento le pareció conocida la cara del chico y decidió preguntar antes de que saliera del avión.
-Perdón... pero tú no eres el ganador de la liga de Alola, ¿Ash Ketchum?-su tono era bastante tímido por poder conocer a una celebridad. El entrenador se paro y se volteo para responderle.
-Sí, soy yo- respondía con una sonrisa bastante alegre.
-¡No me lo puedo creer! ¡Tu batalla final fue asombrosa, estuve todo el rato gritando de la emoción, hasta empece a saltar después de terminar el combate! - Ash podía ver estrellas de emoción en sus ojos mientras se daba un abrazo de lo feliz que estaba, el chico le pareció muy graciosa la escena.
Al final se volteó para bajar del avión, pero una mano lo jaleo muy leve de su chaqueta, giro su cabeza para ver otra vez a la chica... para encontrarla toda sonrojada y muy nerviosa, curioso alzo una ceja.
-Si n-no fuera molestia... ¿me podrías dar tú a-autógrafo?- el chico se sorprendió un poco, pero acepto, era la primera vez que le pedían un autógrafo. La azafata buscó dentro de su bolsillo para encontrar un bolígrafo y un papel simple... y se quedó mirando el papel, no se veía muy contenta. Al final se quedó pensando unos 5 segundos y guardo el papel para coger su gorro.
-Como no tengo una f-foto tuya para un autógrafo...y el papel simple no me a-agrada para nada... podrías firmarme la g-gorra?- lo decía todo con un sonrojo todavía más profundo que el anterior.
Ash estaba bastante sorprendido, pero al final cogió el gorro y lo firmo muy satisfecho.
-¿P-podrías escribir también "para mi fan Cindy"? -preguntaba juntando sus manos con esperanza.
-C-claro- decía Ash bastante nervioso, intento escribir lo pedido lo más bonito posible-¿Como quedo?- pregunto mientras le devolvía el gorro bastante nervioso... no sabía si le iba a gustar su escritura.
-¡Es... perfecto!- grito con gran alegría y miraba su gorro como si fuera un trofeo, Ash suspiro aliviado. Cindy lo miro discretamente para después poner una cara muy determinada.
-¿Podrías... podrías también tomar una foto conmigo?- Ash se volvió a sorprender, pero sonrió felizmente por la propuesta. Al tener su aprobación la chica le pidió unos segundos para prepararse.
Como tenía un moño en la cabeza se dejó el pelo largo, era de un azul claro que bajaba asta los hombros. Rápidamente saco un cepillo de quien sabe donde y se lo arreglo en menos de un minuto, Ash volvió a quedar sorprendido, las azafatas sí que se movían con rapidez.
-Bien, estoy preparada- le dijo con bastante emoción y con todavía un pequeño sonrojo mientras le enseñaba su teléfono. Se colocó cerca del entrenador y empujo un poco su espalda en su pecho mientras hacia una pose de victoria bastante linda y tímida. Ash en un principio se tensó por la cercanía, pero se relajó al pensar que solo era una foto y sonrió también a la cámara con una sonrisa. También se dio cuenta de que era como 10 centímetros más alto que la chica.
Se escuchó el sonido de la foto y los dos la miraron dando su aprobación.
-Gracias por todo A-Ash - la sonrisa que le mando de agradecimiento y felicidad lo asombro un poco por tan poca cosa (en su opinión) y también el pequeño sonrojo todavía visible.
-No hay de que, creo que tengo que irme rápido para que no se marche el avión de vuelta a Alola- El chico la saludo con la mano y se fue por la puerta del avión con bastante prisa.
Mientras bajaba por las escaleras otra azafata paso cerca de él mirándolo distraídamente y se fue al interior del avión. Al entrar para cambiar su turno para el siguiente vuelo se encontró con Cindy que miraba su teléfono y gorro con gran ilusión. La nueva azafata se sorprendió un poco y le pregunto qué paso.
-Pues un pequeño problemilla que tenía con un pasajero se transformó en un recuerdo con Ash Ketchum- le respondió con una sonrisa y también le mostró la foto y el autógrafo. La azafata reconoció al chico que paso junto a ella en la escalera, tal fue su asombro por perder una oportunidad tan grande que se golpeó la cara con decepción.
Volviendo con Ash, que estaba afuera del aeropuerto.
El chico estaba de muy buen humor mientras buscaba con la mirada algo.
-Ash, aquí!- grito una voz femenina.
Se volteó en esa dirección con una sonrisa mientras podía ver a su madre que lo saludaba junto al profesor Oak y su Pikachu que estaba en su hombro.
Por muy raro que fuera, Ash cogió el boleto de avión sin darse cuenta de que aquella compañía prohibía la presencia de los Pokémon fuera de sus pokeballs. Por esa razón deja a su amigo con su madre cuando esta se fue después del campeonato, ella SI había cogido un buen boleto con permiso de Pokémon fuera. En este momento solo llevaba a Lycanroc, Rowlet e Incineroar, Melmetal se quedó con el profesor Kukui por petición de este, como era conciderado una nueva especie quería estudiarlo un poco más.
Ya casi estando cerca del coche el roedor salta a su hombro con alegría y entusiasmo al poder ver otra vez a su entrenador en algunos días, este lo saludo con su característico "Piikaaa".
-Hola, colega, ¿cuidaste bien de mama y los otros? - en respuesta el ratón se golpeó el pecho con orgullo- así me gusta- le contesto divertido mientras se acercaba al coche.
-Ash, al fin llegas. Me empezaba a preocupar porque no salias del aeropuerto, porque tardaste tanto?- pregunto con bastante intriga su madre, mientras el profesor solo le sonrió y escuchaba atentamente su conversación.
-Bueno, pues pasaron varias cosas bastante interesantes - contesto bastante divertido mientras rascaba las mejillas de Pikachu, también recordando lo de su interesante "sueño" .
Delia y el profesor se miraron entre sí preguntándose que había pasado.
-Entonces de camino a casa nos puedes contar que paso- la oferta de su madre era bastante tentadora, pero quería estirarse un poco... Después de 12 oras de vuelo tenía un hormigueo en la espalda, además que quería probar el viejo entrenamiento y también el método propuesto por Sir Aaron. Eso y también contarle a Pikachu un poco de su sueño.
-Lo siento mama, pero quiero caminar un poco, además estamos en Ciudad Verde, llegaré a casa esta noche si el profesor me manda a Charizard o Staraptor- los dos adultos estuvieron de acuerdo con la propuesta de Ash. Esperaron a que este guarde su equipaje y se fueron por la carretera, desapareciendo en cuestión de segundos.
Los dos admiraron unos segundos el cielo con pocas nubes, eran cerca de las 12, el viento movió un poco su cabello y miro a su primer pokemon con una sonrisa.
-No vas a creer lo que me paso mientras estaba en el avión- caminando en busca de una tienda para comer algo le estaba contando el sueño con el guardián del aura.
