¡Hola!

Aquí estoy otra vez con la continuación del One-shot anterior, que es parte de la misma historia, pero sé que algunos quedaron con el corazón roto, o anhelando un final feliz, pero veremos que tal les parece esta que ya es el final de una vez por todas.

Ojalá no me odien de nuevo.

Les agradezco la aceptación que tuvo pidiéndome continuación, y por eso se las traigo.

Espero me acompañen en la lectura hasta el término de esta. Esta muy larga.

Aquí va.

Post Ranma ½

Precuela: La venganza de Mousse

Secuela: Desconocido.


Todos los personajes de Ranma ½ pertenecen a Rumiko Takahashi

.

.

Tú eres la razón

You are the reason

.

.

.

Songfic

By

Akane Kou

Summary ¿Es posible avanzar cuando sabes que el perdón sería la única forma de hacerlo? ¿podría llegar a obtenerlo? ¿Existen las segundas oportunidades? ¿podría tener la suerte de adjudicarme alguna? ¿si quiera la merezco? Preguntas y más preguntas, quisiera tener las respuestas, para que mi vida tenga sentido…porque mi razón de estas…no es otra que tú… eres la razón. Mi única razón siempre eres y serás.

Capitulo único

.

.

Camino por horas y horas sin importarle lo tarde que era.

Sentía en sus zapatos la humedad de la acera, pues pateaba piedras cada que podía para descargar el cúmulo de emociones que se habían desencadenado luego de lo sucedido. De haberla visto.

Siguió con paso lento hasta llegar a su departamento.

Cuando entro a este, no se tomó la molestia de encender la luz. Prefirió que la pequeña ventana de la sala iluminara todo el espacio en el cual se encontraba.

Las llaves las lanzó en la mesa.

Su cuerpo sintió una tensión que difícilmente desaparecería.

Se sentó en el pequeño sofá negro descansando sus pesados codos en sus rodillas, mientras fijaba su visión en la ventana. A primera vista, parecía estar tranquilo, ya que su rostro no demostraba nada, pero no. Claro que no. Por dentro, una avalancha de sentimientos lo invadía. La mayoría negativos. No podía sacarse de su cabeza el reciente encuentro. Uno inesperado. Para nada planeado.

Pero uno que lo dejo más destrozado que el primero.

─Desconocido. ─dijo audiblemente.

Soy un desconocido, un extraño

Sentía que se quemaba por dentro al saber que para ella prácticamente era nadie.

Nadie.

O tal vez, si era alguien.

Era la persona que más daño le había hecho.

Tenía que hacerse a la idea, quisiera o no, de que ahora para ella, era eso. Solo un desconocido. Un maldito desconocido.

Ella lo quería ver así, fingiendo no conocerlo ¿sería parte de una terapia, o simplemente, el rencor era más fuerte que enfrentarlo?

Estúpida marimacho…solo tú puedes dañarme tanto con tu indiferencia.

Autumn breeze

Las lágrimas que guardaba, bajaron libremente por sus pómulos.

¿Para qué guardarlas?

Nadie lo estaba viendo.

Los Saotome eran fuertes ─ recordó la voz de su padre.

Si claro.

Solo para pelear y defender nuestra escuela de combate libre, lo somos.

Para lo demás eran una vergüenza.

Su pasado se lo confirmaba. Bastaba con recordar los ojos de su ex – mujer cuando la volvió a ver. Era como si hubiese visto al mismo diablo. Como si fuese peligroso.

Concluyo erróneamente.

Al sentir las gruesas gotas correr por su rostro, se burló de sí mismo abriendo los labios.

─el gran Ranma Saotome, llorando ¿Gran? ─hablo en tercera persona de el mismo─ ¡Gran malnacido! ¡Que basura! Él es una basura ¡Ja ja ja!

La irónica carcajada se dejó escuchar en ese pequeño lugar que le pertenecía, hasta que se convirtió en un sonoro sollozo.

A estas alturas ¿podría importarle verse llorando por una mujer?

¿No lo había hecho ya todos los años hasta completar los cinco que lloró por ella? ¿por su hijo?

¿Por perderla?

¿por perderlos?

¿Y la primera vez que lo hizo llorando como un niño en los brazos de su padre?

¿tenía importancia?

No.

Ya no.

En la soledad de su guarida, era costumbre algunos días el recordar lo sucedido, pero ahora, la había visto ¡La había visto por dios! Dos veces sin esperarlo. Claro estaba que, desde que la vio por última vez en el hospital, cuando se deshizo en llanto rogándole que le perdonara, sabiendo que no había forma de pedir perdón, había deseado verla otra vez. Cada maldito mes. Cada maldito año. Como si eso fuese inalcanzable. Como si aquel deseo fuese agua para un sediento, incluso como si fuese una esperanza para un moribundo. Lo soñó. Vaya que lo soñó, pero en sus sueños era distinto. Como ya había pensado, pero ahora, solo a horas de ese hecho, era completamente diferente. Lo que había sentido en carne propia al mirar esos bellos ojos color avellana que se empeñaban en desconocerlo, lo era.

Rememorar aquello lo hería.

Sus recuerdos le inundaron la cabeza. No paraba de pensar en ella.

─Akane.

¿Tenía permitido seguirla amando cuando los recuerdos más presentes que tenía de ella, eran cuando la había lastimado? ¿Cuándo la había destrozado?

─¡Maldición!

Él también se sentía así. Ahora lo estaba. Tan destrozado como tal vez ella lo estuvo, aunque ese estado anímico ya lo había experimentado varias veces.

Con fuerza enterró su puño en el suelo haciendo una pequeña grieta.

Con dificultad, paso saliva apretando los dientes. Sintiendo una vez más, una rabia inmensa contra el mismo. Ira. La sentía cada vez que recordaba todo. Porque, aunque quisiera retroceder el tiempo y evitar sus equivocadas acciones, no se podía. Siempre estarían allí. Recordándole como un día, se transformó en un verdugo que no tuvo piedad. Uno que el mismo desconoció.

Tal vez, por eso era un desconocido.

Su estómago sintió acidez.

Se levanto llegando a la única parte de su casa en la que entraba luz. Sostuvo sus manos en el vidrio descansando su frente en este, girando su cabeza de un lado a otro, mientras cerraba los parpados trayendo la imagen de ella. De ella y ese tipo que jamás había visto. Su novio. Quizás, quizás…

…su…

…nuevo esposo.

Ese pensamiento le provocó más acidez en sus entrañas.

─Akane…─soltó con un lastimero susurro─ ¿podrás perdonarme alguna vez? ─inquirió, con tono quebrado su más grande anhelo.

Pero, estaba seguro que la respuesta era negativa.

Lo que había roto…

…no se podía enmendar.

Según él.

Porque, para seguir adelante…era su perdón lo que lo haría avanzar.

.

.

.

Cuando llego a casa de su novio no dejo de pensar en él. Verlo de nuevo, había removido recuerdos. Incluso recientes, como cuando una semana antes lo vio al cruzar en un semáforo, cuando este había querido hablar con ella, pero se rehusó a hacerlo.

Eso estaba fresco en su memoria, por eso, a pesar de que escuchaba a su pareja hablarle, no prestaba atención.

Remembrance

Ni siquiera le había querido contar a su amiga lo que le había pasado, cuando ella si lo había hecho al decirle que había vuelto a ver a Mousse.

No sabía porque había omitido ese hecho, pero lo único que pasaba por su cabeza ahora, era el rostro de Ranma fingiendo demencia. Siguiéndole el juego. Algo que agradeció internamente, pues, no tenía ganas de decirle a Usui quien era.

¿Su acción había sido inmadura?

Por su puesto, inmadura, cobarde, infantil, pero ya estaba hecho.

Lo había llamado desconocido.

Desconocido.

Le habían dolido sus propias palabras, porque, ella no era una persona rencorosa. Mal intencionada. No. No era así. Todo lo contrario, pero en ese momento, y previo a ese, cuando le llamó así por primera vez, estando con su amiga en la avenida cruzando la calle, también quedo alterada por tratarlo despectivamente, pero es que se lo merecía. Eso pensó su subconsciente. O por lo menos, lo creyó en ese momento en el cual no pudo parar sus acciones. Su cuerpo y boca habían reaccionado solos con un claro rechazo.

Un rechazo que le nació desde lo más hondo, pero que al mismo tiempo la daño.

Porque no era fácil, ni había sido fácil resucitar después de todo lo que había vivido con él. De todo lo que había sufrido. De su desilusión amorosa. De su perdida. Si bien, el tiempo que duro su idilio con Ranma, no fue largo, las consecuencias y su corazón roto sí que lo fueron. Le había llevado tiempo sanar su corazón. Juntar los pedazos de este, pues había tenido una doble perdida que la dejaron en un estado deplorable, depresivo y triste por un largo tiempo. Por eso, al pasar ya unos años, el sentirse que ya estaba curada, aunque todavía tuviese cicatrices, pensaba que no había nada que le moviera el piso o la dejara vulnerable como hace cinco años. Casi seis.

Su error fue pensar eso.

Y se equivocó.

Justamente se sintió vulnerable. Acorralada por sus emociones. Abatida. Frágil. Por eso ahora, solo quería tratar de sacar de su mente el rostro de él. De ese hombre que tanto daño le hizo.

Que tanto amo en su tiempo.

Porque admitía que había estado muy enamorada, de lo contrario no le hubiese dolido tanto todo lo sucedido, pero era cierto que, ningún amor por muy grande que fuese, duraría para siempre. Pues, justamente el amor podía desvanecerse si lo que se recibía solo eran actos repudiables, dañinos. Deshonestos. Algo que ella había vivido. Ese amor por él se había ido acabando después de los sufrimientos que este le había reportado. Pues, el amor se alimentaba día a día, con detalles, acciones, palabras, demostraciones claras de ese sentimiento. Pero ella, había tenido eso, de manera opuesta, por lo menos cuando ya eran esposos.

Solo que ahora, al haber experimentado esos sentimientos tan fuertes que estaban dormidos, después de volver a verlo, la había hecho tener miedo de lo que eso podía significar. Ahora sentía angustia, taquicardia, porque, no podía negar que él era y fue parte importante de su historia, pero no por eso, no iba a seguir adelante con su vida. Se obligó a continuarla. Ella era joven, no podía echarse a morir. Incluso no podía hacerlo después de saber que probablemente no volvería a ser madre. Por eso, aquellas palabras, de que lo que no te mata te hace más fuerte, cobraron sentido en su vida.

Aunque, su historia con Ranma, le dejo secuelas, había pasado página.

Claro que Ranma había sido su gran amor de adolescencia, pero eso no quito que lo intentara una vez más. Tampoco lo busco, pero quiso darse la oportunidad de volver a amar. Solo que, ya no se sentía tan enamorada. Usui era excepcional con ella. La hacía sentir especial, además de ser un buen amante. Tenía muchas cualidades, por eso, estarlo ignorando por pensar en una persona que según ella no la merecía, le provoco molestarse con ella misma.

Eres una tonta Akane…ya deja de perder el tiempo.

Se regañó.

Tengo que dejar de pensar en él.

De pronto sintió unos brazos que envolvían su estrecha cintura─¿Qué pasa amor?

─Nada─ respondió con una forzada sonrisa─ No pasa nada amor─ volvió a asegurar, para luego besar al hombre y callar cualquier otra interrogante siendo de inmediato correspondida. Aunque muy en el fondo, se sintió una mentirosa al llamarlo de esa forma afectiva, pues era como responder automáticamente sin sentirlo realmente.

Ambos comenzaron a tocarse, y entregarse a sus caricias. Sus labios comenzaron un juego que acabaría en la cama. Cuando el rubio ya estaba encima embistiéndola, solo quiso disfrutar del placer que le daba su hombre, y de los orgasmos que le regalo.

Eso era lo mejor.

Sacarlo de su cabeza, para así, concentrarse en su cuerpo.

Solo en lo que necesitaba su cuerpo.

Aunque horas más tarde, un gran vacío inundo su corazón.

.

.

.

─Akane llegar tarde hoy.

─Si Shampoo, lo siento─ se disculpó al tiempo arreglaba su bolso para ir a la universidad.

─Después hablar al respecto, ahora tener que llegar a trabajo.

─Y yo a la universidad. De acuerdo, vamos entonces.

Las dos mujeres salieron de casa camino a tomar el autobús, pues la pequeña Cologne ya estaba en el jardín. Este comenzaba con su jornada más temprano que las clases y el trabajo de las chicas.

Desde lejos, un joven que se escondía tras unos arbustos, se mostraba asombrado al saber por fin, donde vivía la mujer que tanto había buscado. Además, de llevarse una sorpresa al ver a las ex rivales juntas. Todo parecía indicar que vivían bajo el mismo techo.

─¿Shampoo…vive c…con Akane?

Recordó como había obtenido tan valiosa información.

Unos días antes.

.

Después de despertar de la borrachera que se había metido en la noche junto a Nabiki, tuvo una jaqueca terrible. Estuvo de pie antes que la joven. Noto que había despertado en el sillón extensible junto a ella. De seguro lo había arrastrado con un poco de esfuerzo, porque llevarlo hasta el dormitorio, claramente no lo hubiese podido hacer. No contaba con la fuerza necesaria.

La dejo descansar un rato más, mientras se preparaba el desayuno y se hacia uno de sus tantos brebajes para bajar el dolor de cabeza.

Shampoo

Reviviendo su reencuentro dos días atrás, su mente solo estaba concentrada en ese hecho. La había vuelto a ver y ya tenía cierta claridad en algo. Ella vivía allí. Pues, si hacia compras era porque residía en aquel lugar, pero si tan solo tuviese una pista.

¡Maldición!

Por donde puedo empezar buscar…

Estuvo varios días intentando dar con el paradero de la joven, pero al quinto se rindió. Nabiki volvió a visitarlo emborrachándose ambos nuevamente, hasta que en un nuevo despertar, Mousse se sintió ansioso por obtener algo.

En su desesperación, presto atención al bolso de su amiga recordando a la pariente de esta, pues le llego a la cabeza, en alguna conversación pasada en la cual su avara amiga mencionaba algo relacionado a Kioto, y su hermana.

Kioto…

Shampoo estaba viviendo allí, justamente donde estaba ahora.

No supo porque, pero sin tener ningún pudor, se fue encima del bolso de la chica revisando lo que allí guardaba. Al rebuscar, encontró una libreta de notas. En esta había cuentas, números, anotaciones. Fue insistente en revisarla hasta que leyó algo.

La dirección de Akane.

¿le serviría de algo? ¿sabría ella de Shampoo? La respuesta a esa interrogante no era alentadora, pero estaba tan desesperado en conseguir información de su amazona, que solo actuó por instinto. Arrancando una hoja en blanco de la misma libreta copio ese dato. Tal vez era una idiotez, pero dejo de pensar de forma coherente.

Solo quería alguna información.

Horas más tarde, estaba ya junto a la castaña merendando.

─Te ves como…

─¿Cómo qué?

─Irritada…¿te pasa algo?

Esta lo miro con un dejo resentimiento, pero prefirió disimular. Como siempre─¿Por qué la pregunta?

─Te conozco, por eso.

Frente a su respuesta, sonrió de forma burlesca─ Me sorprende que te fijes en mis reacciones.

─¿noto reproche Nabiki?

─No. Olvídalo.

─está bien, porque debo hacer algo ─ contó poniéndose de pie─ ya pagué por la estadía, así que cuando ya estés lista solo te pido que devuelvas la llave ¿De acuerdo?

─Bien y…¿se puede saber dónde iras?

Estando de espaldas a la joven respondió─ No. Nos vemos.

La joven lo vio salir cruzada de brazos─ A puesto que va a buscar a la china─ resoplo enojada─ No sé porque no me sorprende.

Parece que nunca me vera…más que como una simple amiga

Que tonta

.

Cuando salió del hotel, sin saber en qué se había quedado su amiga, solo tenía un destino al cual llegar. Tomo el primer taxi que paso dirigiéndose al lugar en cuestión.

Presente.

Verlas salir desde la misma casa, a esas horas de la mañana le dio la respuesta.

─Shampoo…vive con Akane─ eso ya era una afirmación. Estaba más que claro.

¿Cómo podía ser eso posible?

Sacudió su cabeza.

Bien. Era mejor no llenarla con más preguntas que ahora no lograría comprender. Tendría que hacer la guardia todo el día. Era la única manera de localizarla.

.

.

.

─Entonces te alimentas bien.

─Si mamá.

─espero que no me estés mintiendo hijo.

─No tengo motivos para hacerlo.

─Supongo que no, pero…

─¿Qué?

─Te noto, decaído ¿te pasó algo?

Rayos, a las madres nunca se les va nada.

─No, en serio. Estoy bien. Dentro de lo que se puede.

Desde el otro lado de la línea hubo un pequeño silencio hasta que la mujer lo cortó ─La señora Matsura dijo que estas por terminar la terapia.

─Si, es cierto.

─Siento ser entrometida hijo, pero ¿Qué es lo que falta?

─Mamá, prefiero no hablar de eso.

─Está bien, pero, ¿puedo darte un consejo?

─Am, adelante ─siendo escéptico, la dejo continuar.

─espero que entiendas, que en la vida todos cometemos errores, pero eso no significa que no podamos seguir adelante y tratar de empezar de nuevo. Tú ya has pagado bastante todo lo que hiciste. Te arrepentiste y eso, eso es algo muy valorable y varonil hijo mío ¿de acuerdo?

─Sí mamá.

La mujer podía notar como el chico todavía se culpaba. Lo conocía.

─Siempre has sido fuerte, pero sé que no lo eres cuando ella está relacionada ─el joven apretó más el auricular ─ por eso debes olvidarla. Seguir tu camino. Dejar de lado ese pasado tan doloroso ¿sí? Tu padre y yo queremos verte sonreír mi amor. Te amamos y queremos lo mejor para ti. De otra manera no podré estar tranquila.

Ranma sonrió por las sinceras palabras de su madre, las cuales fueron un bálsamo para él, después de las noches fatales que tuvo.

─lo intentaré, creo que…lo lograré.

─No lo dudes.

─te aviso cuando vaya a Nerima.

─espero que no tardes mucho en venir.

─No mamá, dile a papá que pronto los iré a ver.

─Si, y esfuérzate en tus estudios.

─Aja. Lo estoy haciendo.

─Te amo hijo.

─También yo.

Colgó.

Quiero lograrlo mamá, haré lo posible por cumplir tus deseos.

Luego de la llamada, salió.

.

Estaba en la universidad en la que cursaba economía.

Todavía no era muy devoto al estudio, pero esa carrera era de tres años, así que no perdía nada con sacarla adelante. Se lo debía a sus padres. Habían sido casi cuatro años de depresión, borracheras, atentados contra su vida. Huidas. Largas huidas. Preocupaciones. En definitiva, eventos desafortunados uno tras otro. Los cuales fueron en algún momento presenciados por su familia, ya que se había aislado de ellos, y de todos sus conocidos creyendo que se lo merecía. Tardo un buen tiempo en salir del agujero negro en el que estuvo, pero con ayuda, una que rechazo al principio, pudo hacerlo. O al menos eso intentaba.

Su psicoterapeuta lo animaba a que hiciera todo lo necesario para mantenerse ocupado, pues uno de los pasos de su tratamiento todavía no lo pasaba. Justo el que su madre menciono en la llamada y el cual no quiso decirle, pero estaba seguro que ella sabía cuál era, solo que quiso que él se animara a decírselo por voluntad propia.

Volviendo a su interés académico, abrió el libro que necesitaba. Iría a llenar la ficha.

─¡Saotome!

El ruido al pronunciar su apellido, fue mal visto por las personas de la biblioteca.

─¡Shuut! Guarde silencio joven─ regañó la dependienta del lugar.

─Lo siento.

Al joven pelinegro le causo gracia el regaño hacia su compañero. Se lo merecía por imprudente. Vio como se le acerco poniendo su mano al costado de su boca, a modo de que solo él le oyera─ Ey Saotome, sé que eres apático y arisco, pero te tengo una invitación.

─¿Otra?

─Si. Esta ya es la quinta en la semana. Espero no la rechaces.

─depende.

─¿De lo que sea?

─Aja.

Se encogió de hombros─ la otra semana iremos una party-study en casa de Akimiya-san.

Rodo los ojos.

─Oye, agradece que una chica tan linda como ella esté interesada en ti.

─¿Perdón? No se lo pedí.

─De acuerdo, pero no puedes rechazarla, esta buenísima.

─Lo sé. De acuerdo. Iré.

─pues ni al cabo que…

─Lávate los oídos Ishikawa.

─¿dijiste que sí? ¡Genial!

─Si. Si. Ahora vamos a al comedor. Prefiero leer allí, nunca me ha gustado este lugar.

─De acuerdo─ acepto el castaño, pero retomando el tema, lo aconsejó ─Como sabes y dejas tu abstinencia. Te hace falta amigo. Te hace falta.

Ranma frunció el ceño por el comentario.

─¡Cállate!

.

.

.

Jóvenes entraban al amplio lugar para saciar su hambre y de paso estudiar, sin reparar en quienes estaban allí, pero para una de las encargadas de la cocina su interés recaía en su compañera de casa. Shampoo observaba a su amiga, quien era un libro abierto para ella. Sabía que algo le sucedía. Tal vez, los otros no lo notarían, pero ella sí. Su amistad ya tenía tiempo y se conocían la una a la otra.

En un momento en el cual no había tantos alumnos, se acercó ─Ten. Este té ser bueno para bajar tensiones.

Akane la miro extrañada de su consejo─¿tensa? No lo estoy.

─Shampoo conocer. No engañar, si algo pasar a Akane, poder contar con Shampoo, así como Shampoo saber que contar con Akane.

Esta la vio con algo de vergüenza. Realmente había dado en el clavo, pero no estaba segura de abordar el tema ─ Em, bueno, gracias. Tienes razón, pero, preferiría contarte más tarde.

La chinita entendió de inmediato ─ de acuerdo.

Ambas siguieron con sus labores del día hasta que llegó la hora de salida. Fueron a buscar a la niña.

.

Cuando estaban por llegar a su casa, notaron que alguien estaba a fuera de esta. La sorpresa fue grande al reconocer a Mousse cargado en la reja de la entrada de los departamentos. Su vestimenta era distinta. Vestía unos jeans azul oscuro con una camisa gris de mangas tres cuartos. Tenía su cabello atado a una cola baja, pero estaba más corto.

─¡Mousse!

Akane hablo sosteniendo a la pequeña Cologne de la mano, mientras que Shampoo sentía como los nervios se apoderaban de ella.

─¿Q…Qué hacer Mousse aquí?

Antes de responder, vio a una de las víctimas de su venganza. Sus ojos le demostraron el pesar por todo lo sucedido. La culpa jamás lo dejaba de lado. Menos ahora que la tenía en frente─ A-Akane yo…hola.

─Hola Mousse─ saludo con voz seca. Era difícil olvidar todo, pero ese momento, no era el indicado para hablar con él.

─No quiero molestarlas. Siento llegar así de improvisto. Ah, por cierto ─dijo agachándose y tomando del suelo una bolsa gruesa. Dentro de esta saco dos que la chinita reconoció enseguida─ son, son las cosas que dejaste caer cuando…─la joven entendió afirmando con su cabeza lo dicho. Había olvidado que las había soltado por la impresión de volver a verlo─ es tuya. También repuse lo que se rompió.

─Ah…gracias.

─de nada Shampoo…─quiso tomar la palabra nuevamente─ esto…yo…ne…necesito que hablamos─ la vio con ojos anhelantes ─por favor Shampoo─ suplicó.

Las jóvenes se miraron entre ellas como hablándose con la mirada. Las dos estaban sorprendidas por la inesperada visita, Akane por traerle recuerdos de la venganza del chico y Shampoo por sus temas sin aclarar. La primera prefirió dejar sus emociones atrás y priorizar a su amiga. Pues, era ella la que más temas tenía pendiente con el padre de su hija.

─¿Cómo saber dónde estar Shampoo?

─un hombre desesperado como yo…─ dijo avergonzado─ …agotaría hasta la última posibilidad para poder encontrarte.

Shampoo se sonrojo por lo directo de su afirmación, pero controlo sus nervios. Se había formado un silencio, pero volvió a ser el joven quien emitió palabra al percatarse de la presencia de la niña.

─Disculpen lo entrometido, pero ¿Y esta pequeña tan bonita? ¿Quién es? ─inquirió curioso e intrigado, hasta ponerse a su altura. ─Hola, soy Mousse.

Tanto Akane como Shampoo se tensaron.

La niña se puso tras la pierna de su tía, pero respondió ─Hola señor, yo soy…

─¡De acuerdo! ─interrumpió la madre─ Shampoo hablar con Mousse.

─Shampoo ─dijo con alegría.

Queriendo ayudar, Akane habló─¿les parece que entremos?

Ambos asintieron, pero Mousse no dejo de ver con curiosidad a la niña, preguntándose quien era.

Al ya estar adentro, se sentaron en la sala mientras la pequeña iba a su cuarto, ya que su mamá se lo había pedido. La anfitriona no quiso quedarse a hacer mal tercio. Por eso prefirió dejarlos solos.

─Shampoo, saldré un rato. Los dejare para que puedan hablar tranquilos ¿de acuerdo?

─Esta, e-está bien.

─discúlpanos un momento ─pidió Akane a Mousse─ Shampoo─ se alejó con ella hasta la puerta. La tomó de las manos─ se fuerte y ya no le des más vuelta al tema. Debes hablarle con la verdad ¿de acuerdo?

─Si…de acuerdo.

─Los dejo.

.

.

Akane tomo su bolso saliendo al fin.

Recorrió las calles recordando la reciente visita. No imagino ver a Mousse. Fue inesperado, tal como también lo había sido al ver a Ranma. Esa otrora venganza se le vino a la cabeza. Todo lo que paso a raíz de esta y las personas que tuvieron participación.

Al caminar, también recordó a uno de los involucrados sin quererlo, en esa bendita venganza. Alguien que fue la discordia en su matrimonio. En su apresurado y breve matrimonio.

Hace un tiempo se había encontrado a su ex medico familiar de cabecera. Había ido a un hospital a ver su tema personal relacionado a las secuelas del accidente sufrido, por eso jamás pensó verlo allí. Ante esa coincidencia, él quiso que se juntaran a conversar por su pasada amistad, se lo debían.

Acepto sin titubeos.

Salieron fuera del recinto hasta llegar a una cafetería.

Kioto.

Dos años atrás.

.

Sentados en la mesa de un restaurante, con una taza de café en sus manos, daban inicio a su conversación.

─¿Cómo has estado Akane?

─bien Ono, ¿y tú?

─Bien también.

─¿estás trabajando aquí?

─No, en realidad, vine por una asamblea de medicina, pero como tengo conocidos vine a ayudar en un caso. Solo eso.

─Entiendo.

Surgió un silencio. Tranquilo, pero que demostraba por las miradas entre ellos, que algo más querían abordar.

─Entonces...te adaptaste acá.

─Si, bastante.

─que bien, pero, te ayudo de alguna manera a… ─la miro muy penetrante─…a olvidar el pasado ¿O no?

Ella sabía a donde quería llegar con su interrogante, por eso quiso responder de la manera más sincera, en honor a su antigua amistad, independiente de lo que había pasado entre ellos. A fin de cuentas, a pesar de los sentimientos que albergó por él en su niñez, mientras creció, había sido su amigo. Merecía su honestidad, pero era clara la expectación que el castaño tenía en su respuesta─ No del todo, pero me he curado de a poco de todo lo malo que pasó.

─Oh…eso, eso está muy bien Akane.

─Si. Lo sé.

Teniendo valor, tomo su mano─ Akane, yo…─ella observó la mano del quiropráctico en la suya─… quiero hablarte de lo que me sucede contigo.

─Doctor Tofu…

─Espera. Déjame hablar.

─de acuerdo─ acepto algo incomoda.

─Ha pasado tiempo desde que te vi por última vez, pero, después de lo que vivimos, me surgió la curiosidad de saber cómo habría sido una relación entre nosotros─ confesó.

Ella se sonrojo, pero quiso que el entendiera, pues notaba la fascinación con que la miraba─ Doctor Tof…

─Ono, prefiero que me tutees.

─bien, Ono…puede que en su momento te haya gustado.

─fue más que eso Akane.

─em, quizás.

─No lo pongas en duda por favor─ pidió apretando su mano.

Segura de sus declaraciones, respondió ─Créeme. No lo hago.

─Realmente sentí cosas fuertes por ti.

─No lo dudo, sé que no eres un hombre que juegue con las mujeres, pero debes entender algo Ono…

─¿Qué?

─Nunca fui importante para ti. No como mujer, claro está, al menos, no como yo lo hubiese querido antes…─bajo la vista avergonzada de revelar algo del pasado relacionado a sus sentimientos por él años atrás ─Solo fui tu paciente, la pequeña Akane, la pequeña hermana de la mujer que amabas.

─Akane yo…después de lo que sucedió entre nosotros, deje mi interés por Kasumi─ Afirmo con sinceridad en sus palabras─ es difícil entenderlo, pero yo…sentí cosas fuertes. No estoy mintiendo. No tuve ni tengo razones para hacerlo.

─Doctor Tofu…

─Akane, ¡¿Qué te acabo de decir sobre mi nombre?! ─regañó.

─Ups, lo siento.

─Está bien. Continua.

─De acuerdo, sé que es cierto lo que dices, pero ¿no has pensado en algo muy obvio?

─¿en qué?

─recuerdas como empezó todo ¿no?

─Si─ se sonrojo un poco al recordar como ella se le insinuó la primera vez que la reviso luego de haber perdido la memoria.

─Si vemos como fueron las cosas, tu solo te fijaste en mi porque, prácticamente te obligue a verme. Antes, jamás reparaste en mi como mujer Ono. Siempre me viste como una niña. Pero, claro, entiendo que, al ser tan directa; me vieras, me desearas y te provocara cosas, pero, si yo nunca me hubiese comportado así, créeme, tú jamás te habrías dado vuelta a mirarme─ quiso abrirle los ojos para que comprendiera esa verdad.

─Si lo dices así, puede que tengas razón, pero eso no quita mi sincero interés por ti.

─Gracias por tu franqueza, pero, si pienso en lo que quise tener contigo cuando te quería, o soñaba en que me vieras como veías a Kasumi, creo que, si fue muy puro el amor que sentí por ti ─Sonrió con nostalgia─ El de una niña que te idealizaba, pero, después comprendí que…amabas de verdad a una mujer. A mi querida hermana. La amabas. Así como yo…amé… ─apretó los labios, pero de dio ánimos para continuar─…amé a Ranma, y…por muy estúpido que suene ─ dijo viéndolo muy directo a los ojos ─ él…solo me vio a mí. Porque sentí su amor─ ahora sus ojos miraban un punto indefinido como queriendo traer recuerdos de esa persona que solo se enfocaba en ella. Lo vio tan claro que, ahora, después de años de aquel hecho, sintió que fue una tonta su yo del pasado por sus celos en ese tiempo ─ Uno torpe, uno cobarde, uno inmaduro, pero…─ desvió su vista nuevamente a él ─ …me vio solo a mí. Él me amaba solo a mí. No a otra. Lo sé. Sé que fue así─ una traicionera lágrima escapo de su ojo─ Sé que muchas veces me comporté como una niñata sin escuchar razones, pero siempre supe que de la única que estuvo enamorado fue de mí y…no sabes lo importante que es para una persona saber que el hombre que te interesa solo te ve a ti. Aunque cubra sus sentimientos con mentiras, con burdas palabras que…solo esconden un gran sentimiento ─se limpió con su mano derecha la mejilla que contuvo el líquido ─ Por eso yo…sé que lo que sentiste o sientes, fue solo el efecto de prácticamente tomar tu rostro y girarlo hacia mi obligando a que me vieras.

Tofu bajo la mirada con pesadumbre.

─no es que no valore tus sentimientos, pero, todo fue generado por una venganza ¿entiendes? No es algo que podría contar orgullosa en un futuro sobre nuestra…─ con sus dedos hizo un gesto de, entre comillas─ …historia de amor.

─Akane, a mí nadie me puso una pistola en la sien para prendarme de ti. Eso quiero que te quede claro─ ella vio su convicción, por eso asintió─ Está bien Akane. Si quieres ver todo lo que paso entre nosotros como algo creado, está bien. O verlo como un recuerdo de un episodio amargo. También lo acepto, pero jamás estaré de acuerdo del todo. Viviste algo muy fuerte, que supongo todavía te duele─ tomo su mano.

Asintió. ─Si, todavía.

─entonces, solo me queda desearte suerte en todo lo que venga a futuro para ti.

─Gracias Ono, también te deseo lo mejor.

─Akane, espero que sepas que siempre… ─afirmó más su mano a la femenina ─ …siempre podrás contar conmigo para lo que sea. Eres alguien importante para mí. Toda tu familia lo es y…no por errores cometidos en el pasado, tenemos que alejarnos del todo.

─Si, es cierto.

─Me alegro mucho verte.

─También a mí.

─Debo volver. Nos vemos en algún momento Akane.

─Nos vemos.

Y así había sido. A las pocas semanas, se habían vuelto a ver y ella quiso saber si podía tener sentimientos más fuertes y saldar aquella duda que en algún momento Ono había sembrado, de si serian una buena pareja. Por eso, luego de su insistencia, salieron un par de meses en los cuales se entregaron a la pasión descubriendo que como amantes eran muy buenos. Ono Tofu fue uno de sus mejores hombres entre sus sabanas, pero nada más. Ambos así lo expresaron el último tiempo en que salieron. No llegaron a sentir algo más fuerte. Fueron tres meses en los cuales supieron que, el mutuo interés se había esfumado.

Akane pudo sentirse libre al haber confirmado que, Ono quedaría en su corazón como una idealización del amor que tuvo de niña por él, y que de adulta, solo había sido un buen amante al cual le guardaba mucho cariño.

Solo eso.

Cariño.

Se despidieron una última vez deseándose de corazón que cada uno encontrara su felicidad. Una que podría ser con el verdadero amor de su vida, o dándole ese título a lo que fuese que los hiciese feliz.

.

Presente.

Espero que estés bien, mi querido Ono…mi primer amor

Platónico, sí.

Porque ese lugar lo tiene otra persona

Pensó sintiendo unos nervios en su estómago al traer a ese personaje a su mente.

Luego de recordar esa charla con su amigo doctor, siguió su camino para dejar que su amiga hablara el tiempo que estimase conveniente.

.

.

Shampoo veía al hombre frente a ella, sin emitir palabra. No sabía cómo empezar. Estaba aterrada de la reacción del amazona.

─yo … quiero que de una vez por todas hablemos. Lo necesitamos. No me huyas más por favor.

─Shampoo no volver a huir…

─eso quiero─ respondió esperando que cumpliera, pero recordó las palabras que ella le había dicho el día que la volvió a ver.

"…gracias a esa noche, Mousse dar lo mejor que Shampoo poder tener en su vida"

─Shampoo ¿qué quisiste decir con eso de que te di lo mejor esa noche que estuvimos juntos? ¿a qué te referías?

La joven comenzó a sudar frio negándole la mirada. Esto para el amazona era clara muestra de que le ocultaba algo, o al menos era una posibilidad. Ya que, al ver lo inquieta que se había puesto, era un claro indicio de que no se equivocaba. A pesar de que no la veía hace años, aun conocía los gestos de la joven cuando algo no andaba bien.

─decirlo…p…porque…

─¿Sí?

─e…esa noche, hacerlo más de una vez y…

El pelinegro se sonrojo, pues era cierto. Vaya que si lo recordaba.

─…no usar protección…

El ojiverde abrió los ojos desmesuradamente al entender lo que quería decir, pues al no completar sus dichos en una siguiente frase, la joven solo lo había mirado fijamente demostrando demasiado en aquellos escarlata.

─Sha…Shampoo, tú quieres decir que…

Ella solo asintió, creyendo que había entendido─ ¿que…quedaste embarazada de…de mí?

Lentamente afirmo con su cabeza desviando nuevamente la mirada de su ex pretendiente, el cual había quedado en estado de shock por semejante revelación. Las imágenes de aquella noche agolparon su mente. Sus ojos solo veían una y otra vez aquello, entendiendo lo que eso significaba, pero también, rápidamente recordó al pequeño ser que vivía con las chicas. Notando recién, que los ojos de la niña eran iguales a los que ahora lo miraban con expectación.

Darling

─e…esa…ni… niña…es…es…

Aun sentada frente al pelinegro, volvió a asentir acompañando ese gesto con su voz temblorosa─ S-Serlo. E…Ella ser hija de Mousse.

Este se levantó del sillón de un salto cuando su cerebro comprendió la magnitud del asunto. Era padre y después de años lo sabía. No. No podía creer que ella jamás lo buscara para contarle, además, de que si no fuera porque él la vio de casualidad, tal vez nunca lo habría sabido.

Sintió un poco de rabia─¿Cómo…cómo pudiste ocultarme algo así?

La joven respiro varias veces para al fin responder─ Shampoo no querer hacerlo, solo, solo suceder así.

Mousse luego de calmar su cuerpo frente a tal verdad, se recargo en la pared para seguir escuchando a la madre de su hija. ─Shampoo estar mal. Después irse obligada por matriarcas al enterarse de falta de Shampoo. El tiempo de espera de compromiso con ex – airén vencer y…tener que partir a cumplir castigo y por eso después…no saber de Mousse…

─yo…Shampoo…─sentía emoción. A pesar de que al principio, un impulso de reproche había brotado de él por lo que había le ocultado, de todas formas saber que tenía una hija con la mujer que amaba, lo hacía sentir feliz. Además, también pensó que no saber de su existencia, tal vez era una consecuencia de sus malos actos en el pasado─…no quiero que creas que, estoy molesto, es solo que, no es cualquier cosa. Me he perdido cinco años de la vida de mi hija, y─ sintió un estremecimiento por esa palabra ─s…solo quisiera ─la vio penetrante─ quisiera dejar de hacerlo─ camino hacia la joven que continuaba sentada. Se agacho hasta quedar a su altura. Su temblorosa mano tomo la de Shampoo esperando que la acepara ─Shampoo…yo…¿podría… podría desde hoy ser parte de la vida de nuestra hija?

Shampoo sintió como su corazón volvía a latir fuerte, por ese nuestra, que sonó ineludiblemente íntimo entre ellos. Ella se lanzó a sus brazos siendo correspondida. Mousse sintió como volvía a vivir al tenerla así.

─Shampoo extrañar a Mousse todo este tiempo─ susurró sollozando.

─Yo también, yo también.

Cuando se desprendieron solo un poco del abrazo, el joven de ahora una coleta, tomo el rostro de la chica viendo esos ojos de cerca como pocas veces lo hizo tomando la palabra una vez más─ perdóname Shampoo, perdóname. Jamás quise lastimarte, es solo que…tú me heriste mucho en ese entonces, y como era inmaduro, quise pagarte con la misma moneda. Siento haberte dicho eso. Siento haber arruinado la única vez que te hice mía.

Ella asintió, pues sabía que gran parte de lo que le dijo esa noche, era su culpa por haberlo tratado tan mal en el pasado, sacando lo peor esa vez─ Shampoo perdonar, Shampoo entender.

─yo…─no soporto más la cercanía, hasta que acortó la distancia besándola ante la sorpresa de la china, pero respondió ansiosa esa anhelada caricia. Ambos sintieron que era un beso de amor, sin trampas ni rencores. Se besaron hasta que pudieron verse nuevamente.

─Shampoo…antes no darse cuenta ─ dijo sonriendo─…pero, Shampoo amar a Mousse…

Antes no lo había creído, pero ahora…ahora todo era diferente. Por eso su corazón bombeo más al oírla.─ también te amo Shampoo, nunca he dejado de hacerlo.

Ahora fue ella quien lo había besado, pero se dejaron llevar por sus sentimientos, pensando que tendrían que empezar de nuevo, o realmente por primera vez.

─¿Por qué te besas con este señor mami?

La infantil voz lo hizo separarse al ver como la niña de cabellos negro los miraba curiosa.

Shampoo no respondió de inmediato, ya que ahora venia lo más difícil─ Coli…ven con mamá ─la pequeña asintió dudosa, pero se acercó a la mujer sin dejar de ver al joven que había tocado con sus labios a su madre.

Mousse vio a la niña con un sentimiento nuevo. Algo que no había experimentado.

En esa tarde se dio finalmente una larga conversación. Una en la que Shampoo volvió a contar parte de su historia. De cómo vivió al retornar a Japón. Sus carencias. Su encuentro con Akane. Todo hasta llegar al punto en el que lo volvió a ver. Sus miedos. Todo, y decirle a Cologne…quien era su papá y…lo que fuese necesario para hacerlo parte de su nueva historia juntos con su hija.

.

Akane había decidido darle más tiempo a Shampoo, por eso le pidió a Sayaka quedarse en su apartamento para que esos dos aclararan todo.

Cuando volvió a su casa, se enteró de que Shampoo y Mousse querían intentarlo, al menos este último como padre de la pequeña, pero también como pareja, pero para eso Shampoo le había pedido tiempo, ya que la china había empezado, hace unos días una relación con un universitario y tenía que conversar con este. Mousse lo entendió y le dio todo el tiempo necesario.

A la joven de cabello azabache y destellos azulados, le dio gusto por ambos, aunque solo demostró ese agrado con su amiga. Todavía no podía ver a Mousse del todo. Le era difícil.

.

.

En la semana, Akane y Usui tuvieron discusiones. Varias. Eran casi todos los días. El rubio se molestó al verla tan distante. Su novia no le prestaba atención, y ni si quiera compartía con él lo que le pasaba, ya que al parecer no le tenía confianza. Algo que lo ofendió e irrito tanto que pensó que lo mejor era darse un tiempo.

Ella quedo impactada por tal proposición, pero termino aceptando, ya que sentía que necesitaba tiempo a solas. El ver a su ex, la tenía mal. Con remordimientos y sentimientos encontrados que le costaba trabajo disimular. Por eso estuvo de acuerdo.

─Bien. Me iré unos días a Shibuya, había rechazado ir, pero, veo que es lo mejor para los dos.

Sentada en la cama de la habitación del departamento de Usui que compartían, respondió ─ De acuerdo. Cuídate por favor.

─Si.

Después de eso, a pesar de dormir juntos, esa noche, cada uno lo hizo a una gran distancia en esa ancha cama.

.

.

Días después.

─¿Lo sabias?

El que lo viera de reojo le daba la respuesta, porque conocía el temple que la caracterizaba. Su personalidad, era lo bastante desafiante como para apabullarse por una pregunta tan directa.

─¡Lo sabias!

─Si te vas responder solo, no veo la razón de que me interrogues. O tal vez quieres volcar en mi la frustración que tienes por los años perdidos, ¿no me digas que no tuviste agallas para enfrentar a tu amada?

─Claro que lo hice, pero pensé que al ser mi amiga me dirías algo tan importante. Tuviste tiempo para hacerlo.

─Si. Lo admito. Lo tuve, pero no era algo de lo que pudiese hablar. A fin de cuentas, era un tema de ustedes. No tenía por qué inmiscuirme.

─Pero eres mi amiga Nabiki, o sea que si pasan diez años y Shampoo no me lo dice, ¿Aun así me lo hubieses seguido ocultando?

─No lo sé. Lo que sí sé es que a la que deberías alzarle la voz es a ella. No a mí.

─Te tengo la confianza para hablarte de cierta manera, no te hagas la delicada por favor.

Estando ahora en el departamento de la chica, continuaron con la discusión. Nabiki se acercó a la cocina americana que tenía para sacar de su nevera un trago. Sirvió dos vasos. El pelinegro de coleta llego hasta ella recibiendo uno de estos con el contenido.

─Está bien, creo que exageré. No suelo ser una jovencita tan delicada.

─Si. Te desconocí.

─mejor dime ¿Cómo te sientes ahora que sabes que eres padre?-pregunto mientras inclinaba su cuerpo en el mesón y sostenía su rostro con su mano.

─Es…es extraño. Jamás lo imagine, pero…se siente bien.

─¿solo eso?

─bueno, recién descubrí que soy papá, pero es un sentimiento que no conocía. Es un amor completamente diferente.

─Pues, si ya no sigues molesto por no habértelo dicho, pues felicidades─ dijo abriendo sus extremidades superiores mientras salia de la cocina y llegaba frente a él.

─Gracias. Ven acá.

Mousse tomo en sus fuertes brazos a la castaña de melena quien se pegó a él como si no quisiera que la soltara.

─Cuando fui a tu trabajo a dejarte los almuerzos…esa niña de la que hablaste…era mi hija ¿cierto?

Saliendo del aturdimiento por el varonil aroma que la tenía en una pequeña burbuja, pudo hablar─ eh…sí. Era la pequeña Cologne.

─Lo imaginaba.

La chica retomo su abrazo, sintiendo que ahora no tenía nada que ocultar. Pues nada perdía. Pero antes de eso, tenía que saber que tanto habían avanzado esos dos.

─¿volviste con ella?

La soltó para responderle, pues de alguna manera entendía el porqué de su pregunta. No era ciego. Podía distinguir cuando alguien estaba interesado en él.

─¿Volver? ─levanto una ceja.

─Cierto. Nunca fueron una pareja. ─concluyo la castaña.

─Lo queremos intentar. Ella estaba en una relación, pero me dijo que terminara con esa persona y…la esperaré.

─Que bien.

─Nabiki…yo…

─Por tu mirada sé que estas al tanto de lo que me pasa contigo.

─Yo…

─¿sabes? Hace un año y medio…después de lo que paso entre nosotros, no fue fácil verte como un simple amigo. Al principio fuiste solo uno con beneficios. Buen sexo, innegable ─Mousse se sonrojo─ pero, lamentablemente, eres un hombre con tantas cualidades que, me fue difícil no sentir un interés más grande.

─Nabiki yo…no…

─Sé que para ti no fue nada importante, o por lo menos, no deje una impresión muy grande, pues seguiste interesado en Shampoo, pero tranquilo no me estoy quejando. Simplemente no pude competir con ella. ─dijo con clara amargura─ No cuando hay una historia inconclusa, un amor incluso, que no te deja avanzar emocionalmente.

─¿realmente crees que es así?

─Por supuesto. Mousse de las pocas mujeres con las que saliste, incluyéndome, siempre estuvo esa amazona en tu cabeza. No te permitiste tener una relación en la cual te olvidaras de ella e hicieras tu vida. Fuese o no fuese yo.

─Tienes razón. Por eso ahora, me siento libre al fin de poder estar con quien anhele por tanto tiempo. No sé si es por costumbre, pero como te lo dije, nunca fuimos pareja. Yo la amé y ella después se sintió atraída hacia mí y yo…me perdí en mi venganza. Por eso ahora será mi oportunidad de saber si funcionamos juntos.

La chica lo vio con una intensa mirada─ te deseo lo mejor.

─¿De verdad?

─Si Mousse. No estoy acostumbrada a perder, pero…realmente deseo que seas feliz.

─Nabiki yo…si no hubiese estado enamorado de…

─¡Por dios cállate! No me digas esa cursilería barata que…te gustaría si no fuese por ella ─dijo burlesca─¡No! No lo necesito.

─¡Oe! Es para hacerte sentir bien.

─de acuerdo, pero, no. Gracias. Solo quieres quedar bien tú y tu conciencia, pero tranquilo. No me moriré por un amor no correspondido. Lo superare luego.

─¿Segura?

─Si Mousse. Estoy bien. Soy una mujer fuerte, pero suelo ser directa y no perdía nada en decírtelo, por mucho que ya lo supieras.

El aludido la miro con tanto cariño, que se puso nerviosa disimulándolo. Tomo los hombros femeninos.

─te quiero mucho Nabiki. Eres mi mejor amiga. Si me dices que estarás bien, te creo.

─¡Vaya! Gracias.

─te veo después.

─de acuerdo.

Cuando lo vio salir de su apartamento, pudo al fin dejar salir unas cuantas lágrimas que soporto estoicamente, pero sabiendo que era necesario ese desahogo, fluyeron solas.

Adiós Mousse.

Este es mi castigo por meterme en tu venganza, pero no me arrepiento. Conocerte ha sido importante y…me has hecho aprender tanto que…de verdad quiero que seas feliz.

No importa el pasado, o las heridas que causaste, al menos para mí está olvidado. Es cansador vivir de rencores, pues fue tan estúpido enamorarme de la persona que trajo tantos dolores a mi hermana que, ella se burlaría de mí, pero está bien. La vida da tantas sorpresas que…no se sabe lo que pasara mañana…

Bueno yo si lo sé.

Hoy es el adiós a este sentimiento y mañana…

la bienvenida a seguir con mi vida.

─Bienvenida Nabiki─ dijo mirándose al espejo.

.

.

Akane estaba en el departamento de una de las amigas de Sayaka. No la conocía mucho, pero como las habían invitado, decidió ir con una de sus amigas. Había compañeros de su clase, y algunos pocos de otra. Estaba sentada en la mesa de té de ese moderno apartamento, pero con los típicos muebles japoneses. Todos charlaban mientras estudiaban una materia que coincidía en sus carreras.

─lindo lugar ¿cierto?

─Si, muy bonito.

─ten amiga.

─¿Cerveza?

─es un party-study Akane, no solo vinimos a estudiar.

─si, si ya sé Ryoko.

Akane noto como algunos chicos la miraban. A pesar de que sabían que tenía novio, no dejaba de tener pretendientes, por eso al llegar sola, algo que a más de uno le pareció extraño, aprovechaban de hablarle libremente.

Ella prefirió omitir la información de que estaba parcialmente soltera, porque estaba segura que a alguna de sus amigas se les saldría.

Luego de un rato, nuevos alumnos de la universidad se unieron a la reunión social. Entre ellos unos jóvenes de la carrera de economía. Un castaño, un pelirrojo, y pelinegro de coleta trenzada. Llegaron hasta saludar a todos.

Akane había ido al baño junto con su amiga, por eso no los vieron llegar. Al volver a su sitio noto que había tres personas más. Estos al estar de espaldas, no las veían, así que ambas chicas se acercaron.

─Hola que tal─ saludo Ryoko.

─Ho…

Lo que diría quedo en el aire. Al girar ambos jóvenes, Akane quedo de una pieza al ver a Ranma. No podía creer que lo tenía de frente una vez más. Este en tanto, quedo igual que ella al reparar en su presencia. Jamás pensó que estuviesen en la misma universidad y coincidieran en los compañeros hasta el punto de llegar a estar en una misma casa para una fiesta con estudio.

Akane…

La tres personas restantes que estaban con ellos, notaron el mutismo e impresión al verse, pero fue la joven de cabello color durazno quien se atrevió a salir de dudas.

─¿Lo conoces Akane? ─ella sintió como su pulso subió.

Ranma…

Nerviosa, respondió rápido.

─No.

Ranma ante su respuesta, volvió a sentir como su estómago se contraía, pero siguiendo el juego, la apoyo─ No. No nos conocemos. Parece que los dos creímos que éramos otras personas. Debimos de habernos confundido.

─Eh…si, si─ afirmó ella.

─A…bueno. Debió ser eso. ─opinó el castaño. ─me presento, Ishikawa Jun.

─Mucho gusto chicas. Uchida Kazuo.

─Mucho gusto. Ikeda Ryoko.

─Que tal, Saotome Ranma.

─Tendo Akane.

Todos se dieron la mano, hasta que los ex, también lo hicieron, pero el contacto, aunque fue muy breve, sus miradas se encontraron solo unos segundos tratando de evadirse. Después de las presentaciones, todos se dispersaron con sus respectivas amistades, pero Akane no podía dejar de sentirse nerviosa. Su corazón no cesaba de latir agitado.

Maldición…debo dejar de sentirme así…

Su amiga Sayaka se acercó para hablarle─¿Akane por qué estas tan sola? Ven a compartir.

─¿Eh? Ah, sí. Voy.

─que guapo los tres chicos que llegaron ¿los miraste bien?

─Si, claro.

─el pelirrojo está muy bueno, em…Kazuo creo que se llama, pero el otro chico también. El pelinegro de trenza, incluso Ryoko está hablando con ellos. Acerquémonos.

─¿Qué? No, ve tú.

─Akane, ya eres prácticamente soltera de nuevo. Debes conocer gente.

─Sayaka por favor.

─además he notado que uno de ellos nos está viendo, quiere disimular, pero le cuesta, seguro le guste yo.

Akane nerviosa quiso darle en el gusto, aunque era claro que a quien miraba Ranma era a ella─ si, seguro te ve a ti, sí.

─¿Ves? No sé por cual decidirme.

─que dilema ¿No? ─el sarcasmo no fue notado, así que bebiendo de su trago, sonrió para darle gustillo, aunque se sintió cínica. Pero agradeció internamente que su amiga no hubiese reconocido a Ranma, pues ambas lo habían visto en el semáforo, pero había sido tan breve ese momento, que su amiga a penas lo había registrado, de lo contrario habría quedado como una mentirosa.

Nuevamente se sintió observada. No soportaba su mirada, pero prefirió dejar de asustarse, ya que era él quien se había equivocado. Él había herido su corazón de la peor manera, y si bien, ya no dolía tanto, este no desparecería de la noche a la mañana, por mucho tiempo que hubiese pasado.

Prefirió pensar que realmente estaba mirando a su amiga, sería mucho mejor.

.

Cuando se juntaron en el espacio vacío de la mesa japonesa, una entusiasta voz habló─ ¡Vengan! Jugaremos a lo que no puede faltar.

─¿Qué será esta vez?

─No lo sé.

La anfitriona conocida como Akimiya-san, levanto la mano mostrando una botella de cerveza vacía. Al instante todos supieron qué típico juego era al que hacía referencia. La chica miro hacia donde estaba al artista marcial muy sugerente, sintiendo este que era observado por ella, algo que no pasó inadvertido por su amigo.

─Parece que esta chica viene con todo ¿eh Saotome?

─No molestes.

─seguro te quiere comer.

─Dije que no molestes.

No prestó mucha atención, pues la suya estaba centrada en la joven de ojos color marrón, quien a sus ojos lucia hermosa. Ese vestido verde que le llegaba a medio muslo según su opinión le quedaba espectacular, y ese escote al inicio de sus senos mostraba levemente como el tiempo también había hecho lo suyo en el cuerpo de su ex mujer. Se había desarrollado más, pero a pesar de eso, el recuerdo de su cuerpo desnudo seguía pareciéndole grandioso.

Akane…quiero acercarme a ti, pero…aun me rehuyes

Ya estando todos reunidos, se sentaron muy cómodos. Sobre todo los hombres, ya que más de alguno sentía que era su oportunidad de besar a Akane, y otros a alguna otra chica que les gustaba. Akane fue arrastrada por sus amigas al igual que Ranma por los suyos.

El juego comenzó provocando muchos besos inesperados, y entre ellos, la amiga de Akane con el pelirrojo que le había gustado. Ambos se atrajeron, pero siguieron el juego y entre varias vueltas a la botella, Akane había besado a uno de los amigos de Ranma provocándole a este una molestia que pudo ocultar muy bien, y él a una de las chicas de la fiesta y a Akimiya-san, la cual solo obtuvo un breve beso del joven, pero eso la hizo feliz, haciendo que Akane se sintiera incomoda al verlos. Algo que para sus adentros no entendió si ellos no eran nada, sintiéndose ridícula. Hasta que en una nueva ronda, la botella volvió a girar una vez más a manos del joven artista marcial deteniéndose en su ex, quien sintió como los nervios comenzaban a apoderarse de ella.

Ambos tragaron saliva, ya que eso podía pasar, pero no lo habían llegado a ver como algo posible. Por eso la tensión de ambos creció al ver que todos esperaban su accionar. Esto los puso más nerviosos.

─Ah…yo…

─vamos Ranma, ¡que esperas!

─yo…

Akane enmudeció al ver como Ranma asintió, para luego acercarse de apoco, hasta llegar frente a ella sin decir una palabra. Para ambos era incomodo sentir las demás miradas sobre ellos, pero tratando de cumplir con el juego, Ranma controlando sus latidos, mostró una actitud tranquila, estando ya a tan solo 5 centímetros del rostro de Akane, quien sintió sus mejillas arder.

Las repentinas emociones por la escasa cercanía terminaron por quebrar todo su temple cuando vio como Ranma se dirigía a sus labios.

─¡No!

Los presentes no entendieron el porqué de su rechazo.

─Akane…¿Qué te pasa? Solo es un beso, no seas niña. ─regañó su amiga.

La aludida miro nuevamente a Ranma, quien no dejo de mirarla.

Que idiota soy, me estoy poniendo en evidencia y…

Ranma va a creer que me importa. Que tonta.

─Ey…es cierto lo que dice tu amiga. ─apoyo uno de los amigos de Ranma, pues ya la habían besado sin poner pegas.

─Bueno…yo…

Las palabras de la chica pararon abruptamente al ser callada con un beso que Ranma le dio de repente. Akane abrió los ojos desmesuradamente, pero quiso controlar sus emociones y tratando de imitar a su ex pareja, devolvió el beso al joven quien sin poder evitarlo, tomo con su mano funcional su rostro profundizando el beso.

Lo que sintieron en el momento en que sus labios se unieron, fue tan fuerte que para uno de los dos no fue sorpresa, pero para el otro sí, ya que, fue como revivir un sentimiento que había olvidado, pero que no pensó la estremecería por completo.

Los demás comenzaron a reírse al ver que no se separaban, y otros se sorprendieron por el ímpetu del arisco joven, pues siendo un tanto popular, no había demostrado ningún interés claro por ninguna chica en el tiempo que lo conocían, y solo ahora vieron que desde que comenzó el juego, Akane era a la única joven que había besado con ganas.

Akane…tu sabor…es el que recordaba…

La chica paro el beso sintiéndose agitada al igual que el joven de trenza.

─y-ya basta…

─Akane…

─¡c-cállate! ─susurro quedo.

─¿Se conocen? ─pregunto la anfitriona un tanto disgustada al ver lo cercano que fueron al tratarse y obviamente por el beso.

─¿Eh? ─ Akane vio a la chica que la fulminaba con la mirada─ No, no es así.

─No mientan, si se estaban comiendo jajaja… ─esa afirmación, que varios apoyaron los avergonzó.

Aun estando arrodillado frente a la joven, Ranma se levantó al igual que Akane. Los demás al verlos, decidieron terminar con el juego, pero dando su atención al alcohol. Quisieron beber, generando un alboroto por eso.

Luego de un rato, sin dar muchas explicaciones Akane quiso irse.

─Pero amiga…

─por favor, solo necesito salir de aquí.

─¿Es por el chico ese?

Sintiéndose atrapada, negó─¿d-de qué rayos hablas Ryoko? No digas tonterías. Ni siquiera lo conozco. ─justificó sin verle a los ojos.

Esta la miro suspicazmente─¿Segura?

─Mejor me voy, si no vas creerme, no saco nada con seguir aclarándolo. Nos vemos. Adiós.

─Pero…

Salió sin escuchar nada más.

Luego de abandonar el departamento, pudo respirar tranquila al haber escapado de aquella tensa situación que tanto la agobiaba. Toco sus labios con sus dedos, pues había sido extraño sentir nuevamente los de Ranma. Además, de que su corazón latió tan rápido que se asustó de sus sentimientos. De lo que Ranma la hizo sentir con tan solo besarla.

Ranma…

Camino un buen rato hasta que se detuvo en el costado de una calle que era como un callejón, para descansar un momento.

Se recargó en la muralla. Absorbió aire una y otra vez calmando su pulso sin abrir los ojos. Estaba segura que ya era medianoche.

Luego de un buen rato, de un momento a otro, sintió una presencia. Rápidamente al abrir sus parpados, su pulso volvió a dispararse, ya que frente a ella estaba Ranma nuevamente.

Ahí va mi corazón latiendo

There goes my heart beating

─¿Q-Qué?

─Akane…¿tanto te incomoda mi presencia que…huyes? ─después de salir de la impresión de verlo una segunda vez en el mismo día, su tono le pereció dolido, pero entendió su argumento al preguntar.

─yo…

Pasaron minutos, en los cuales no hallaba las palabras. Era tan inesperado tenerlo a un paso, que, su boca no se animaba a replicar.

─No te haré nada. Créeme que el tiempo no pasa en vano. Lo sé más que nadie. Estoy consciente de mis errores y sé que…te desagrada verme─ el pelinegro evidencio en su voz, su aflicción ─que te provoco repulsión.

Akane se despegó queriendo sacarlo de aquella equivocada aseveración.

─Ranma, yo…

Porque tú eres la razón

'Cause you are the reason

Bajando la cabeza y negando con esta, habló─ No te preocupes. Todo ha sido casualidad. No busque encontrarte. Créeme. Tengo claro mi lugar…yo…lamento incordiarte─ la tristeza que reflejaba en sus ojos, le perturbó ─ Si nos volvemos a encontrar, pasaré de largo y…─ fijo sus zafiros en ella─ seguiré fingiendo que no te conozco. Te lo juro─ aseguro viéndola tan intensamente que esa expresión le demostró lo destrozado que él estaba, algo que le preocupo demasiado, porque a pesar del tiempo, lo conocía y tal vez sin entender el porqué, todavía lo quería.

─Adiós.

Girando sobre sus talones, y dejándola con la palabra en la boca emprendió marcha, pues no soportaba un instante más. Porque no.

No quería que viera esa lágrima que bajó rápido hacia su mejilla.

Ella no debía saber lo mucho que le afectaba.

Tengo que ser fuerte…tengo que…

Estando ya unos cuantos pasos adelante, escuchó.

─¡Ranma NO Baka!

Estoy perdiendo mi sueño

I'm losing my sleep

Se detuvo al instante. Los cabellos de su nuca sintieron un escalofrió al escuchar ese apodo que ella uso en su adolescencia para dirigirse a él cuando estaba molesta por alguna tontería. Pestañeo un par de veces antes de voltear.

Al hacerlo vio como Akane corría hasta quedar frente a él otra vez. Bajo un poco la cabeza por la diferencia de estaturas.

─Akane…

─Oye, es muy grosero de tu parte que no me dejes responder ¿sabes?

─es que…pensé que…

─Pues…─su semblante cambio, de reproche a uno más suave─ Ranma yo, luego de pensarlo y procesarlo a lo largo en estos días, me di cuenta de que no estuve bien yo…siento haberme comportado como una niña. Es que…no supe qué hacer, ni cómo reaccionar. Tu pre…─ mientras hablaba, Ranma noto que no fijaba del todo su vista en él. Claro indicio de sus nervios, pues también la conocía─ …presencia me dejo sin habla. No fue fácil. No ha sido fácil el encontrarte en mi camino, ahora cuando… cuando han pasado años.

Se sentía tan nervioso frente a ella, sobre todo por sus sinceras disculpas, las que jamás se imaginó que tendría de su parte. Había sido como una caricia a sus sentidos ─Lo siento. Siento provocarte algún tipo de incomodidad.

Por favor regresa ahora

Please come back now

Ambos se vieron por un instante que alargaron genuinamente. La pequeña barrera que se había roto al dejar de lado el rencor y los reproches que pudo haber recibido de ella, los acercaron a tener una conversación, tanto sincera como cordial. Se vieron tímidos, pero reconociéndose como tal cual se recordaban, solo que ese pensamiento compartido, no lo dejaron salir a la luz.

─Ranma…quiero que sepas que…si te llame…─ vio lo abochornada que lucía, al admitir su error─…des…desconocido, fue solo porque…fui irracional. Actúe llevada por el rencor. Lamento mucho si te hice daño─ su angustiada mirada le dejo claro que sentía sus palabras.

Tragando saliva, sintiendo como de a poco ese nudo en la garganta desaparecía, contestó ─Te entiendo. No puedo pretender que al vernos después de tanto tiempo, con todo el daño que te hice, respondieras de otra manera. Eres humana Akane. No tienes que disculparte.

Que sorpresa se llevo con su respuesta.

Ya no era más ese chico arrogante e inmaduro que había conocido.

Al verlo tan humilde al enfrentar sus otroras acciones, sintió empatía. Por eso no pudo seguir con ese rencor. Comprendió que tanto él, como ella, habían salido heridos por culpa de otras personas sin quitar la que les tocaba.

Ahí va mi mente dando vueltas

And there goes my mind racing

─Ranma, desde ahora, dejare de fingir. Dejare que todo siga su curso. No seguiré haciéndome la loca. De esa forma, será más fácil si nos volvemos a encontrar.

─Gracias Akane. Gracias por…─la miro con tanto anhelo, que se estremeció─…por pensar así. Por hablarme una vez más, por permitirte hablarme una vez más. Realmente te lo agradezco.

─Ranma…

Te importa de verdad…Ranma…

Este se quedó detallándola, pues le era inevitable hacerlo. El hecho de que le hablara por voluntad propia era como una especie de paga. No pedía más.

Gracias Akane…

─Nos…nos vemos en alguna otra ocasión.

─¿Eh? Ah…sí y Ranma…

─dime.

─Lo que te dije es cierto. No fingiré más.

─Entones, yo tampoco. ─ante su respuesta, ella le sonrió dejándolo prendado, como siempre ─Am…yo…que estés bien.

Y tú eres la razón

And you are the reason

─también tú.

Luego de aquella conversación, cada uno tomo su camino, con los nervios a flor de piel, pero con una certeza de que el tiempo había hecho lo suyo y solo quedaba en ellos avanzar.

Por la que aún estoy respirando

That I'm still breathing

Akane…debí haberte pedido perdón…solo espero verte de nuevo, para poder hacerlo y así, cerrar ese capítulo amargo y poder empezar uno nuevo, aunque me moriría de ganas que fueras parte de este…pero sería pedir mucho. Me conformo con tu perdón.

Solo con tu perdón.

Estoy sin esperanza ahora

I'm hopeless now

Algunos días después los chicos continuaron con su vida, pero las coincidencias en la universidad eran inevitables, y cada uno se saludaba de lejos, pero no se permitieron entablar una relación más estrecha, por más que inconscientemente lo quisieran, por lo menos uno más que otro. El tiempo siguió su curso, pasando unos meses desde la última vez que hablaron.

Con el pasar de las semanas, Shampoo se enteró que Ranma estaba en la universidad. Hecho que corroboro con su amiga y al fin entendió lo que había gatillado en ella sus cambios de ánimo, reprochándole el no haberle contado.

─Shampoo estar dolida.

─lo siento, pero…es que fue muy impactante para mí.

La culpa en su rostro le basto para dejar de criticarla─ Está bien. Shampoo aceptar disculpas, Akane saber que Shampoo estará siempre. Confiar.

─lo sé amiga─ se abrazaron dando por terminada cualquier discusión, pues su amistad, estaba ya bastante sólida.

Escalaria por cada montaña

I'd climb every mountain

Nerima.

Meses después.

Para las familias Tendo y Saotome la ruptura de los herederos de la escuela de combate libre, siempre fue un golpe duro, porque puso a prueba su amistad, por eso los patriarcas dejaron de verse por un largo tiempo. Eran pocas las ocasiones que volvieron a juntarse, solo que ahora, luego de que tanto tiempo pasara, y motivado por la mayor de las hijas Tendo, se hizo una pequeña reunión. Una en la cual limaran asperezas y de alguna manera se perdonaran. Y así había sucedido.

Pero tanto Soun como Genma, guardaban la esperanza de que sus hijos algún día volvieran. Un deseo que por imposible que fuera, no perdían nada con ansiar.

La reunión se repitió en varias ocasiones, hasta que un día Ranma acepto ir, pues la insistencia de su madre lo termino por convencer. Pero se sintió un bicho raro al compartir en aquella mesa con todos alrededor, trayéndoles recuerdos gratos y otros no tanto, cuando era el prometido de Akane, quien no estaba presente.

─Hijo, bebe algo.

─Ah, sí.

─Tanto tiempo Ranma.

─Si. Bastante Kasumi.

─Te ves más maduro Saotome.

─También tú Nabiki.

La sonrisa de la castaña no le llego a los ojos, pero no esperaba que su ex cuñada lo tratara con dulzura. Jamás. Ella era todo lo contrario.

─quiero que se sientan bienvenidos en casa.

─Gracias Soun, para mi hijo y esposo es un agrado estar aquí, como en los viejos tiempos.

─Por su puesto amor ─apoyo su marido.

─Claro─ dijo solo por compromiso el pelinegro sin despegar su vista de su taza.

Minutos más tarde, alguien más se unió a la reunión.

─¡Ya llegué!

La taza de Ranma salto en sus manos, provocando que se derramara en la mesa.

─Lo, lo siento.

─Tranquilo hijo. ─Nodoka ayudo a limpiar el pequeño reguero que había dejado, pues entendió su estupor por la recién llegada.

Al entrar en la sala, Akane vio al instante al joven que también hizo contacto con ella. Fueron unos pocos segundos, en los cuales todos los presentes los vieron expectantes, pero a diferencia de otros tiempos, no quisieron incomodarlos con ningún comentario inapropiado. Sus reacciones hablaron por ellos, además del cambio de color en sus mejillas.

─Siéntate aquí hermana. ─ordeno suavemente la chica de coleta castaña.

─¿Eh? Ah…Si. ─respondió luego de salir del nuevo impacto de verlo. ─buenas tardes a todos.

─Buenas tardes Akane.

Los chicos estaban a cada extremo de la mesa, mientras escuchaban como los demás compartían hablando de temas sin importancia hasta que llegaron al de la universidad, enterándose de que ya se habían visto.

─a veces…nos hemos encontrado por casualidad.

─¿En serio? ─inquirió Soun sin disimular su sorpresa.

─Si, pero es esporádico.

─A, lo entiendo.

─¿Te has comportado bien con Akane Ranma? ─el aludido, tardo en hablar, pero algo lo interrumpió.

Una patada por parte de su mujer lo calló de seguir interrogando a su retoño.

─Em…cuéntenos otra cosa. No hagan caso a Genma. ─Pidió con una gota de sudor la matriarca Saotome, siendo apoyada por los presentes.

─Si tío. Ranma se ha comportado bien conmigo.

Todos quedaron mudos frente a la respuesta de Akane, pero sintieron como el hielo se rompía.

─Oh, ¿es cierto lo que dice Akane-san hijo?

─ Si. Ella es mi…compañera y claro que… pues nos llevamos bien.

La mirada de cada uno se tranquilizó. Parecía que poco a poco se podía volver a tener una relación entre familias, porque ambos jóvenes ya estaban superando sus problemas. O al menos eso se veía. Se sintió un ambiente más pacífico y con complicidad, parecido a los de años atrás.

─¿Akane y mi cuñado Usui cuando vendrá?

La voz de Nabiki hecho por tierra toda el terreno ganado, demostrando el malestar y hasta cierto punto dolor mal disimulado en Ranma. Por eso su madre fulmino a la hermana de su ex nuera.

─¿Eh? Esto…no lo sé. Luego hablamos de eso.

Que imprudente es Nabiki. Ella sabe que Usui y yo terminamos. Solo saco el tema para molestar.

─Bien.

Luego de ese traspié, continuaron en lo suyo, pero retrocediendo en lo que se había avanzado. La jornada termino con los chicos saliendo al estanque, pero aunque estaban sentados cerca, ninguno quiso iniciar alguna platica. El clima otoñal de ese frio día los empujo a observar las hojas que caían.

Nada más.

Y de despidieron.

Una vez más.

─Adiós Ranma.

─Adiós Akane.

Esa vez, en las calles de Kioto, después de verse en la fiesta estudio, quedaron de no fingir más, pero no de saber qué tipo de conversación entablar en un encuentro imprevisible cuando volvieran a toparse, y menos estando frente a su familia. Simplemente, dejaron que todo fluyera y que cada uno se enfocara en sus metas y prioridades.

Y nadaría por cada océano

And swim every ocean

Luego de hablar con su terapeuta, y ver que su alcoholismo se estaba curando, se sintió un hombre más nuevo. Mas resuelto, pero aún estaba ese deseo de verla y escuchar de sus labios, que lo perdonaba. Por ella haría tanto, que no hallaba la forma de propiciar un encuentro en el cual ella lo hiciera y le diera esa paz que buscaba.

Motivado por sus más profundos anhelos, fue a un lugar al cual no se había permitido ir, ya que antes no se había sentido digno, por su adicción, pero ahora, que ya casi estaba curado, sintió la necesidad de pedir perdón. Pues había alguien a quien se lo debía.

Ranma estaba arrodillado.

Lo estaba frente a la simbólica lapida de la criatura que perdió cinco años atrás.

─Estoy aquí, porque no sabía, n-no supe, cuando venir…tarde mucho. Lo sé. Lo siento.

Fijo sus ojos en el cemento. En ese que figuraban las iniciales de su nombre y el de una mujer.

R y A hijo.

"No te conocí, pero te amé desde que supe que existías"

Finas lágrimas cedieron al leer una y otra vez esas palabras talladas. Estaba emocionado por la dedicatoria que claramente su ex mujer escogió, pero sintió un dolor grande al recordar lo que sintió por ese ser la única vez que supo que venía al mundo.

─P-Perdóname hijo, sé que nunca te veré, pero, q…quiero que sepas, que todos los días de mi vida me arrepiento y me arrepentiré de haber sido el causante de tu muerte. De haber sido el idiota que perdió a tu mamá. A los dos, porque ella fue lo más importante de mi vida. Por eso, aunque no me quiera en la suya…yo siempre la amaré, porque ha sido lo mejor que me paso en la mía. Lo único real y verdadero.

Solo para estar contigo

Just to be with you

Akane jamás pensó que aquel día, cuando se cumplían 5 años y medio de la muerte de su hijo, se encontraría con Ranma. Al verlo se había acercado, pero no imagino lo que saldría de la boca de su ex primer amor verdadero. No sabía que él se sentía así. Lo ignoraba por completo. Le dolió tanto verlo y escuchar sus suplicas, que tuvo que ahogar con su mano un sollozo. Sintió un calor en su corazón al oírlo. Le costaba trabajo creer que él estuviese allí desnudando su corazón frente a esa criatura que no quiso conocer.

Y arreglar lo que he roto

And fix what I've broken

─Mi vida es un i-infierno, porque…siempre tendrá ese episodio negro, en donde los perdí a los dos. A ti y a Akane.

Ranma…no Ranma…

La joven no pudo evitar sentirse afectada por las culpas de su ex prometido, ex esposo y…ex amor.

Quizás…el único gran amor de su vida.

─perdóname…perdóname hijo, sé que ni siquiera tengo el derecho de…de llamarte así, pero…solo te pido perdón. Mil veces perdón hijo…o hija…─su cabeza toco el suelo llorando a mares sin dejar de pedir lo que por tanto tiempo quiso rogar.

Akane…perdóname…

Perdóname

─perdóname Akane…perdóname…

Un sollozo más grande resonó.

─perdóname…

─te perdono Ranma…

Oh, porque te necesito para que veas

Que tú eres la razón

Oh, 'cause I need you to see

That you are the reason

La voz de Akane lo sorprendió tanto, que levanto su cabeza viéndola borrosa por sus anegadas lágrimas, pero solo reparo en sus zapatos, hasta que ella hincándose quedo a su altura. Sintió sus pequeñas manos en sus fuertes brazos, alzándolo un poco, chocando con su mirada, que al igual que él, escurrían gotas saladas.

Ahí van mis manos temblorosas

There goes my hands shaking

─yo…te perdono Ranma. No te tortures más, p-por favor…─suplicó ella ahora, sin dejar de verlo. Le dolía presenciar como ese gran artista marcial estaba hecho añicos.

─Akane yo…p-perdóname, jamás quise hacerles daño. No fue premeditado, te lo juro, ¡Te lo juro! Yo…Argh─ otro sollozo se le escapo, pero no podía controlarlo. Quiso dejar salir de su atormentado pecho, todo lo que llevaba guardado.

Y tú eres la razón

And you are the reason

─lo sé Ranma. Perdóname también. Perdóname. ─lo abrazo. Porque no sabía otra manera calmarlo.

─Akane…─respondió de inmediato aferrándose como si fuese su salvavidas. Sentirla rodeándolo, fue un regalo para su adolorido corazón. Uno que todavía estaba sanando. Ella lo mecía dentro de este, para atenuar sus plañidos, hasta que pasaron varios minutos en los que Ranma ya dejo de lamentarse tan a viva voz. Aunque su respiración seguía agitada.

─yo…─luego de separarse, ella lo tomo de la camisa con sus dos manos─…estaba, tan ilusionada con nuestro, nuestro bebé, quería que olvidaras todo lo malo y era, fue una esperanza…porque te amaba tanto…─reveló sincerándose recordando la vez que descubrió que estaba embarazada.

Mi corazón sigue sangrando

Te necesito ahora

My heart keeps bleeding

I need you now

"te amaba tanto"

Eso le daño más la sangre. El hablarlo como pasado. Se sintió fatal, aunque entendió que ella solo quiso ser honesta, sin intención de lastimarlo ─Akane…y yo…fui un imbécil. Un desgraciado. Jamás me involucre con ninguna de esas mujeres con las que me viste e-esa noche─ hablo con vergüenza desviando la vista─ Era tan inmaduro ¡Tan idiota! que…que te hice creer eso. Yo…ese día, te escuche hablar con Tofu, despedirte de él creyendo erróneamente que todavía lo querías, que se veían, por eso te dañe. Por eso yo…─alzo nuevamente su arrepentida mirada─…yo cometí esa estupidez y…cada noche luego de perderte me he arrepentido Akane…porque yo te amaba tanto que…no sabía que hacer sin ti.

─Ranma…─esa revelación le hizo entender muchas cosas. Quedo sorprendida por ello. Ahora encajaban las piezas a sus interrogantes, las cueles en estos cinco años no pararon de estar en su mente.

─n-no me va a alcanzar la vida… p-para pedirte perdón.

Si pudiera retroceder el reloj

Me aseguraría de que la luz venciera a la oscuridad

If I could turn back the clock

I'd make sure the light defeated the dark

─Ranma, tranquilo. Yo te perdono. Te perdono de todo corazón─ aseveró limpiando las lágrimas de esos azul oscuro, las cuales no paraban de salir. ─créeme. Te perdono Ranma─ volvió a afirmar, pero ahora regalándole una sonrisa. Una hermosa sonrisa, que como siempre, dejo sus defensas bajas.

─Akane…─la vio de nuevo, sin sentirse basura. Ahora, solo vio a esa chica de la que se enamoró casi siete años atrás. La misma que le sonrió honestamente ofreciéndole amistad, una que muto hasta convertirse en amor. Un amor tan grande, que aún sentía en su pecho al ver esos marrones que lo perdonaban.

Pasaría cada hora, de cada día

Manteniéndote a salvo

I'd spend every hour of every day

Keeping you safe

Su temblorosa mano acaricio su mejilla, logrando que Akane sintiera a su corazón latir desbocado.

─Ranma…yo…

─puede que no me creas, y tal vez, sea imprudente de mi parte decirlo, pero…─con su otra mano imito lo que hizo con la otra─ te sigo amando Akane…─la aludida abrió los ojos anonadada y sonrojada. Sus latidos no podían ir más rápido─ jamás he podido olvidarte y sé que, ya no formo parte de tu vida y que…aunque me perdones tienes a alguien más, pero yo…necesitaba que lo supieras.

Escalaria cada montaña

I'd climb every mountain

─Ranma…¿hablas en serio?

─Si.

Y nadaría por cada océano

Solo para estar contigo

And swim every ocean

Just to be with you

Un crujido los hizo salir de la burbuja en la que estaban, hasta que unos truenos más le dieron la llegada inesperada a una intensa lluvia.

Al caer sobre ellos, se pusieron de pie al mismo tiempo y Akane vio como las rosas que Ranma había traído para su hijo se mojaban. Al hablarle nuevamente, vio como el chico se había transformado en una pelirroja que lo veía con vergüenza.

─¿Ranma tú? ─pregunto en un tono más alto, por la ruidosa lluvia.

Esta negó con la cabeza.

─pero el regalo de tu mamá, el de bodas. Quedó acá. Pensé que…

─Digamos que…no sentía que me lo merecía─ confesó en un agudo tono.

Oh por dios Ranma…

Las gotas se intensificaron más.

Y arreglar lo que he roto

And fix what I've broken

Le costaba trabajo creer lo que veía. No pensó que Ranma no aprovechara el regalo de su madre. Se suponía que una de las cosas mas importantes para el eran su cura.

─Vamos Akane.

─¿Eh? ─al escucharlo salió de sus pensamientos─ ¿Dónde?

─de vez en cuando rento una casa que está cerca de aquí.

─disculpa lo entrometida, pero ¿Por qué acá en Nagano?─la pregunta solo pudo responderla en su mente.

Porque…no sabía cuando tendría el valor de venir aquí para pedir perdon a nustro hijo Akane

─luego te lo contaré. Vamos.

─e-está bien.

Cuando llegaron a aquella casa, Akane la vio con curiosidad. No era ni muy grande, ni muy pequeña. Le pareció acogedora.

─iré por toallas.

─si.

Antes de ir por ellas, Ranma saco un termo que él siempre tenía cerca y se lo vacío encima volviendo a su forma original. Akane sonrió al recodar su pasado. Había olvidado lo que era verlo con su maldición.

"Digamos que…no sentía que me lo merecía"

¿Con cuantas cosas más te has estado castigando todo este tiempo Ranma?

Oh, porque necesito que veas

Que tú eres la razón

Oh, 'cause I need you to see

That you are the reason

─Ten.

─gracias.

Se vieron a los ojos desatando emociones que no podían dominar. La tenue luz del lugar mostraba las figuras de ambos sin los abrigos, por eso para Ranma fue inevitable que sus ojos se desviaran en el cuerpo de su ex mujer, notando que esa blusa se le pegaba como guante a su esbelta figura. Sus sienes palpitaron al ver como sus pezones se traslucían. Akane también estaba alterada. Reparo en lo atractivo que se había vuelto su ex amor. Mas ancho. Más grande.

Se sintieron azorados, por eso, uno de los dos quiso calmarse cambiando de tema. O cortar esa atmosfera cegadora que subía sus latidos.

─linda casa. ─elogio caminando por ella y Ranma siguiéndola de lejos.

─gracias.

─em…e-el baño ¿queda por allí cierto? ─a unos metros de Ranma, apunto a una puerta casi al final del pasillo a espaldas de pelinegro.

─Aja…─la observaba casi sin pestañar.

─bien ¿me lo prestas?

─claro.

Cuando Akane paso por el lado de Ranma, este la tomo del brazo y la giro hasta apoyarla suavemente en la pared, dejándola a su merced, pero sintiendo ambos un cosquilleo en la boca del estómago.

─Akane…

─¿Qué…qué haces? Ranma…

─Algo que desde que te vi, me muero por hacer.

No quero pelear más

No quiero llorar más

I don't want to fight no more

I don't want to cry no more

Ella desvió su vista a los labios del hombre notando como este también lo hacía, solo que de un segundo a otro, el pelinegro acabó con la distancia capturando sus labios. Los cuales pedían a gritos ese contacto. Uno que al darse, hizo cortocircuito en ambos, pues ellos siempre habían sido fuego a un solo tacto.

No quiero llorar más

I don't want to cry no more

Ranma se sintió en la gloria cuando ella en seguida respondió. Su pecho estaba tan hinchado, pero de un sentimiento agradable que tuvo la certeza de que esa mujer sería la única que amaría toda su vida.

Regresa, te necesito

Come back, I need you

Akane en tanto, no paraba de reconocer a su corazón. Ese que a pesar del tiempo, reaccionaba de una manera diferente frente a ese hombre que la llevaba a la locura con tan solo un beso, uno que no acababa.

Sentía las manos de Ranma vagar por su cuerpo, como también su boca en su cuello.

Se vieron una vez más a los ojos.

─Akane…te amo…no puedo…soportarlo más, te necesito…

─Ranma yo…quiero, necesito que me hagas tuya…

─Akane…

─Ranma…

Tú eres la razón

You are the reason

El artista marcial se abrió la camisa quedando su playera pegada a su duro torso, dejando a Akane aluciando con tocarlo. Al hacerlo, Ranma la giró quedando ella de espaldas a él, mientras le quitaba su falda y blusa. Respiro en su nuca sintiendo ese aroma a rosas que lo embriagaba. Durante unos minutos las prendas quedaron tiradas en el suelo, hasta que la tomo en brazos llevándola a su cuarto, donde la recostó en su cama para volver a comerle la boca y a besar cada parte de su cuerpo desnudo una vez más. Se perdió en sus senos, los cuales habían crecido y saboreo cada uno sin dejar de tocarla. Ella por su parte hacia lo suyo. Palpar la ancha espalda del hombre le excitaba. Estaban enceguecidos y emborrachados el uno del otro.

Solo un poco más cerca

Just a little closer

Ranma la preparo, pero ella también lo hizo con él, pues noto que el nerviosismo de Ranma superaba al suyo, pues su cuerpo le hablaba y entendía que no había tenido casi alguna pareja fija. Por eso, al besarse y saborearse, él pudo dejar sus temores y rendirse a su entrega, de una manera que le nublo los sentidos.

Acércate un poco mas

Come a little closer

Cuando Ranma entro poco a poco en Akane, hasta llenarla por completo, una especie de droga los envolvió.

Las embestidas eran fuertes, desesperadas e intensas, pero eso no los paro. Akane no se despegaba del pecho de Ranma, ni de besarle el cuello y bíceps. El, la cabalgaba tan fuerte que podía sentirlo tan adentro que estaba, y a pesar de que había tenido otras parejas muy buenas, y que la más seria había sido Usui, solo con Ranma sentía algo inigualable.

─Ahhh…ugh…Aka…ne…

─ummm…

Te necesito para que me abraces esta noche

I need you to hold me tonight

La cúspide del placer llego para ambos, casi al mismo tiempo, pues, aunque para Ranma fue antes en su primera ronda, para Akane no, pero en la segunda y tercera sí que lo fue. Ranma pudo responderle hasta dejarla nuevamente loca de placer y amor. Porque lo habían hecho. Habían hecho el amor. Ella había sentido el amor de Ranma.

Akane quedo extasiada en una nueva entrega mientras estando de espaldas a Ranma este, sosteniéndola con su mano alrededor de su cintura y la otra en sus pechos, lo sintió sacar su virilidad y volverla a hundir en ella, pegando tanto su cadera a la suya, que supo que la esencia de Ranma, la cual la llenaba, quedaría casi toda en su interior, ya que luego de ello este volvió a embestirla, dándole un gran orgasmo que la hizo gemir casi aullando, mientras que Ranma estando ahora encima, moviéndose en sincronía, no paraba de gruñir al haber llegado al climax dejando lo que más podía de su ser, en lo más profundo de Akane, quien lo abrazaba hasta exprimirlo por completo con sus músculos interiores. Había olvidado las dimensiones de Ranma, y para nada le desagradaban.

─Ohh…R…Ranma…

─Argh…

Esa noche se dedicaron reconocerse como ex amantes, quienes tal vez podrían serlo, pero más no pensaron. Solo sintieron intensamente. Sintieron sus cuerpos unidos el uno al otro haciéndolo tantas veces que quedaron exhaustos sin recordar cuando los había atrapado el sueño.

Escalaria cada montaña

I'd climb every mountain

Cuando ya pudieron despertar en la madrugada, se vieron como si fuese la primera vez. Se tocaron el rostro, admirándolo, como si una nueva etapa comenzara para ambos. Como si, todo lo vivido antes, quedara solo como su pasado. Un pasado que encerraba amargos recuerdos, pero que sería parte de su historia siempre. Una que los había hecho madurar y formarlos en lo que se habían convertido ahora.

Cuando sin palabras se vieron una vez más…les gusto lo que sintieron.

Lo que pensaron al unisonó.

Estaban tan seguros de que compartían lo que rondaba por su cabeza, que…una sonrisa complica les dio a entender que no se equivocaban.

Y nadaría por cada océano

And swim every ocean

Pero, fue imposible no exteriorizarlo. Al menos no para ella.

─Ranma yo…

─vuelve conmigo Akane…déjame demostrarte que…que ahora sí puedo ser digno de amarte como mereces─ tocándole labio con la mano se lo pidió.

─te quiero…

Solo para estar contigo

Just to be with you

Ranma quedo mudo escuchando a su propio corazón por aquella revelación.

─te quiero─ repitió feliz de al fin confesar lo que tanto le había costado asumir. Dejo salir una fina gota salada, pero de felicidad─ era tan frustrante que…lo que sentíamos lo arruinaran otros que…lo nuestro siempre estuvo pendiente y, aunque hice mi vida lejos de ti, y con otro hombre…creo que lo que sentí por ti si se desvaneció, pero basto con verte otra vez para revivir lo que mi corazón siente cuando te ve…

─Akane…─parecía un sueño, pero noto que le decía la verdad.

No estoy soñando…estoy con Akane…le hice el amor…volvió a ser mía ¡Mía! y ahora…acaba de decirme que me quiere…

No es un sueño…al fin…

Es mi realidad

─Akane…yo…solo sé que jamás deje de amarte ¡Dame una oportunidad!

Ella en seguida quiso responder─ Si Ranma. Quiero estar contigo, porque…aunque tenga miedo de lo que pueda pasar, tengo más miedo de no luchar por lo nuestro. Un amor que siempre se vio interrumpido.

─eso ya no pasara. Te lo juro.

─Ranma…

─También estoy muerto de miedo, porque sé que no te merezco, pero solo sé que soy feliz cuando estás conmigo Akane. Eres todo para mí.

─Ranma─ lo beso sintiendo como su corazón explotaba de amor.

Y arreglar lo que he roto

Oh, porque te necesito que veas

Que tú eres la razón

And fix what I've broken

'Cause I need you to see

That you are the reason

Lo que quedaba de madrugada, la aprovecharon relatando sus vidas en estos cinco años. Ranma con un poco de pena confeso su adicción, y lejos de sentirse juzgado, Akane solo pudo darle su apoyo y como su pareja lo ayudaría a salir adelante. Pues entendió que el también quedo mal luego de su ruptura. Ella por su parte le conto lo que había vivido. Su dificultad para ser madre por la secuela del accidente, algo que volvió a ensombrecer el rostro de Ranma, pero que con caricias y besos logró hacer que dejara de culparse. También respondió a las preguntas de Ranma, respecto a sus otras parejas, pero prefirió no contar de inmediato que había tenido otro embarazo que no llego a su fin. Lo había perdido casi a los dos meses y ese fue un duro golpe para ella y Usui, quien termino por pensar que era mejor esperar para dar ese paso, pues había sido un descuido algo duro de enfrentar.

Ambos estuvieron horas conversando hasta llegar el mediodía, hora en que decidieron merendar. Akane se sintió muy cómoda en esa casa, siendo este ahora el refugio de ambos.

Desde el momento en que quisieron estar juntos de nuevo, tendrían que enfrentar a las personas que fueron parte de su vida anteriormente en Nerima y, aunque querían vivir unos pocos meses su nuevo romance, sin nadie que se interpusiera, sabían que tarde o temprano lo sabrían.

─tú y Shampoo amigas. Si me hubiesen contado, no lo creería.

─pues para que veas, la vida sigue y no sabes lo que esta te depara.

─¿Le contaras?

─Si. Se lo debo. Vivimos juntas así que…tiene que saber.

─está bien.

.

Días después.

Cuando Shampoo vio como Akane entraba con Ranma y se sentaban en el mesón del comedor de la universidad frente a ella, tuvo dudas. Al conocer ya a su amiga, verla con su ex airén en una inusual complicidad, le dio pistas. Pues, aunque ya sabía que él estudiaba allí, era diferente verlos juntos.

─Shampoo yo…tengo que hablar contigo.

─Tenemos.

Corrigió el pelinegro, el cual recibió un asentamiento de Akane y una ceja levantada de la chinita.

─Shampoo no entender que hacer ex -airén y ex marido de Akane ¿Ranma querer explicar? ¿O Akane hacerlo?

─Ranma déjame a mí.

─Está bien.

─Shampoo, te lo debo. Si vine con Ranma es para que sepas que sucede.

─Entender.

─gracias─ desvió ahora su atención a Ranma─ hablaré con ella, por favor espérame ¿sí?

─Bien. ─el pelinegro se fue a sentar a una de las mesas, notando como varios alumnos lo miraban con curiosidad al haber llegado con Akane en una actitud muy cómplice, como si fuesen pareja, pero los ignoro como siempre.

Shampoo recordó que meses atrás, Akane y Usui habían terminado, cuando repentinamente en esos días, Akane había estado rara, como melancólica.

La china tenía una pose de pensativa.

─Akane…

─¿sí?

─¿engañar a Usui con Ranma?

Sintiéndose ofendida, respondió─ ¡No! ¡¿Como crees?! Con Usui nos dimos un tiempo y luego terminamos, recuérdalo .

─Am, ser cierto. De acuerdo. Pero Akane aceptar rompimiento tan rápido porque Akane todavía amar a Ranma ¿No?

Se quedo muda al oír la certeza con la que lo aseguro.

─…

Shampoo sonrió tomando su mano ─Tranquila. Shampoo ver que Akane al fin esta en paz, porque ahora estar con persona que amar de verdad. Con alguien que a pesar del tiempo, no poder olvidar ¿O equivocarme?

Abrió los ojos en grande al ver que su amiga realmente la conocía, pero luego pestañeó varias veces con la boca abierta hasta casi cerrarla para al fin responderle─ …yo…si. No sé cómo sucedió esto, pero después de todo lo que vivimos yo…quiero estar con él. Realmente quiero estar con él.

─¿segura?

─Si, lo estoy.

─Shampoo alegrarse mucho.

─¿en serio?

─Si.

Mientras las chicas hablaban, una persona apareció tras Ranma.

─Saotome.

La voz que hace tiempo no escuchaba resonó generándole con una amarga sensación, pero que supo controlar.

─Mousse─ dijo sin voltear, pero no fue necesario, ya que el hombre se sentó frente a él. ─¿Qué haces aquí? ─pregunto con un dejo de molestia.

─estoy esperando a alguien.

─¿Sí? Que bien─ al ver la dirección de la mirada de Mousse, noto que admiraba a la chinita─ Ah, entiendo. Veo que tú y Shampoo…

─estamos juntos.

─bien por ti ─hablo sin interés real fijando su vista en la ventana, pues ignoró completamente a ese sujeto que todavía detestaba.

─Saotome yo…necesito pedirte perdón.

Despego la vista de donde la tenía para desviarla hacia su interlocutor─¿Qué dices? ─pregunto displicente.

─yo estoy consciente de…─inicio la conversación con las manos empuñadas viéndolo a ratos─… todo el daño que hice con mi venganza, que empezó por mis celos, por mi rabia contra ti y sé que…las cosas se salieron de control, por eso…muchos salieron dañados y entre ellos tú. Siento todo lo malo que te toco vivir Saotome…

Escucho atento. Cerro los ojos recordando todo. Volvió a abrirlos. Luego respondió. ─ acepto tu perdón. Porque sé de primera mano lo que es vivir carcomiéndote por dentro a causa de la culpa que se siente cuando herimos a quienes amamos.

Frente a esa tan acertada descripción, dejándolo patidifuso, solo pudo darle la razón con su cabeza.

─te odie mucho. Te aborrecí y te creí culpable de todos mis males, pero entendí que yo forjé los míos con mis acciones. Nadie más que yo. Aprendí a hacerme responsable de mis actos y a las consecuencias de estos. ─dijo convencido─ está bien. Te perdono Mousse. Lo hago porque no tiene caso seguir con odios y rencores.

─Saotome…muchas gracias…significa mucho para mí.

─Eso me tiene sin cuidado, pero, espero que tengas claro que, jamás seremos amigos.

─lo sé, y lo entiendo. No te preocupes. Tal vez sea Akane quien jamás me perdone, pero no importa. Todo a su tiempo y si no llega, la seguiré entendiendo.

─que bien que te quede claro.

─me alegra ver que…─miro hacia el puesto de su novia y ex – amiga─…arreglaron sus problemas ¿O no?

─no te incumbe pato entrometido.

─ex pato.

Eso lo dejo sin habla.

.

─¿ya no?

─No. Mousse conseguir cura después volver a buscar a Shampoo y traerla. No poder contar porque Akane desaparecer mucho y estar ocupada.

─Claro─ dijo sonrojada ─Ah. Que bien.

Solo falta Ranma

Las chicas vieron como sus dos hombres se acercaron hasta llegar con ellas.

─Akane, ¿nos vamos?

─Eh, sí.

─Ni hao Ranma.

─Hola Shampoo, siento no haberte saludado antes.

─no importar.

─¿Mousse venir por Shampoo?

─Si.

─em, bueno chicos, nos vemos. Adiós Mousse y Shampoo.

─¿Akane no volver a casa? ─pregunto con una sonrisa pícara la peli morada.

─Me…me quedare con Ranma.

─¡Aiya! Que rebeldes─ exclamo sonrojando a los chicos.

─No seas metiche Shampoo.

─¡No le hables así Saotome! ─se quejó el ex hombre pato acercándose amenazadoramente.

─¡Pues cállame! ─respondió

─basta chicos, no pelen como si fuesen niños. ─los regaño Akane.

─Grr. ─gruñeron al mismo tiempo.

Luego de ese intercambio de palabras, se fueron cada uno por su lado. Ambas parejas ya estaban formadas deseándose lo mejor, pues cada uno tendría la tarea de mantenerse en el tiempo, ya que habían comprendido que las relaciones no eran fáciles, pero eran un poco más llevaderas cuando no había terceros que se entrometieran. Ahora el trabajo de mantenerse juntos era de ellos.

.

.

Dos meses después.

En la residencia Tendo, se había hecho una nueva reunión, donde los Saotome fueron invitados, solo que el primogénito tardaría un poco por asuntos estudiantiles. En el lugar en si todavía vivía Soun, pero solo con su hija mayor próxima a casarse, pues hace un tiempo había conocido a un buen hombre que la cortejo hasta ganarse su amor, pero este no pudo asistir por temas de trabajo. Nabiki también se había marchado de la casa, pues en Tokio tenía un buen departamento, ya que gracias a su trabajo pudo rentar uno con el compromiso de compra. Algo que recientemente había podido obtener. Akane vivía en Kioto, pero quiso estar presente, pues su padre siempre le rogaba que viniera a verlo, pues le decía que extrañaba a su niña.

─Me alegra que estén todos.

─También a mí Kasumi, pero falta Ranma.

─Claro señora Saotome, es solo que me agrada que estemos todos juntos como la vez pasada.

─Tiene razón.

─felicidades Kasumi por tu compromiso y próxima boda.

─Gracias tío Genma. ─sonrió apenada.

El patriarca Tendo sintió melancolía reflejándolo en su rostro.

─¿estás bien papá?

─Si, es solo que…─respondiendo a su inquietud, hablo mirándola─…recordé cuando antes creía que serias la primera en casarte.

Akane sorprendida, con su mano en el hombro de su padre, quiso responder, pero calló.

─descuida hija, solo me llegó ese recuerdo.

─está bien.

Ranma que había escuchado lo último detrás de la puerta de entrada al salón, sintió un salto en el corazón, pensado en su futuro con Akane.

Quizás…algún día…

─¡Ranma!

─Buenas tardes. ─saludo inclinado su cabeza con respeto a todos los presentes, pero su mirada se detuvo en su pareja, quien lo saludo de igual manera, pero sonrojándose.

Algo que le pareció curioso a la única matriarca de la estancia, ya que después de ese gesto, una pequeña sonrisa surco por los labios de Ranma con un brillo diferente en sus ojos. Muy diferente al sombrío hijo que vio meses atrás.

¿Por qué será?

─Siéntate al lado de Akane─ aconsejo su padre.

─Ah…sí.

Obedeciendo, llego al lado de su ex prometida, quien sintió como su estómago experimentaba las mariposas que antaño le provocaba Ranma, el mismo hombre que las hacia resurgir.

─Salúdala Hijo.

─Si mamá. Am…hola Akane.

─H-Hola Ranma.

─¿se habían visto?

─No mucho tía. ─sus nervios se notaban, pero los controló.

─eh…si, poco. Nos hemos visto poco. ─apoyo el artista marcial.

Tomando con su bombilla el té caliente, Nabiki los miraba dudosa─¿Sí?

─Claro.

─no importa que nuestros hijos ya no sean prometidos ni se casen, ni tengan nada, pero al menos se llevan bien. ─opino Genma─ es lo importante.

Los aludidos, al saber que ocultaban valiosa información que distaba mucho de lo que recién se había mencionado, se sintieron como unos adolescentes nuevamente, además de cómplices.

─Muy cierto Saotome.

─Es verdad, Ranma y Akane se ve que se han perdonado. Me alegro mucho chicos.

─gracias Kasumi.

─¿y cómo va su vida amorosa?

Ambos enrojecieron por la pregunta.

─respóndanle a la tía, no sean groseros. ─algo divertida, les hablo Nabiki.

─¿Akane-chan?

─pues…después de mi ruptura con Usui, estoy bien…em…soltera. Eso─ dijo titubeante, pero noto la tensión en el hombro de Ranma al mencionar a su ex.

─¿Hijo?

─Em yo…─vio de reojo a la chica─ Estoy saliendo con alguien.

La honestidad de Ranma los dejo con la boca abierta. En los casi seis años que habían pasado, no le habían conocido alguna pareja al joven, ni menos la mención de alguna conquista. Ya que era reservado con su vidad privada. Por eso para todos, incluso para Akane, fue sorprendente.

Ranma…¡¿qué estás haciendo?!

¿Lo dirá ahora? ¿enfrente de todos?

─¡Oh hijo! Eso está…muy bien.

Nabiki estudio la reacción de su hermana, pues últimamente poco sabia de su vida sentimental, pero si notó lo nerviosa que estaba.

─Su nombre es…

Ay no…

─Akimiya-san.

Aki

¿Qué?

¿Qué dijo?

─Es una linda chica de mi clase. No paraba de buscarme hasta que…caí.

─A, que bien por ti hijo. ─apoyo su padre.

─Opino lo mismo.─secundo su madre.

─También yo Ranma-kun.

─Es bueno que al fin olvidaras a Akane.

Esto último dicho por Nabiki agoto toda la paciencia de la mencionada.

─bueno…yo…─dejo de hablar al sentir una conocida energía negativa.

Vaya…hace tiempo no sentía esa aura celosa de Akane…

Ja…

─¡¿DE QUE ESTAS HABLADO BAKA?! ─Exclamó una muy molesta azabache de destellos azulados quien acerco bastante su rostro al de Ranma, centrándose solo en él ─¿Estas jugando conmigo?

─tranquila, Kane…es una broma. ─dijo azorado por su proximidad.

─¡Idiota!

─¿Qué está pasando? ─inquirió extrañado el patriarca Tendo.

─N-No entiendo.

─Ni yo.

─mi hermanita pequeña parece celosa. ─opino castaña de melena.

─No lo parece, lo está. ─dijo sonriendo muy segura la joven de coleta descansando su mano en la mejilla.

Mientras, Akane se puso de pie indignada, olvidando a los demás espectadores.

─¡Me voy!

─Ay no seas celosa fierecilla, ven aquí. ─dijo levantándose y abrazándola por la espalda recargando su cabeza en el cuello de ella, para sorpresa de todos, quienes vieron como Akane no le quitaba las manos de su cintura, ni hacia el mínimo intento de que dejara esa postura tan intima, sino más bien, la afianzaba.

─Eres un pesado. Sabes que esa tipa gusta de ti.

─¿y a mí qué? La única que me gusta a mi eres tú.

─¿Sí? ─preguntó sonriéndole y teniéndolo a milímetros.

─C-claro─ respondió embobado.

─Wow…parece que entiendo todo lo que pasa con estos dos.

─¿Chicos? ¿Qué está sucediendo aquí?

Después de esa clara interrogante de parte de Soun, salieron de su burbuja.

─¡Papá! …eh…

─bueno…

─Pues, a juzgar por cómo están de abrazados, diría que mi hijo y Akane-chan han vuelto.

Cruzando todo su cuerpo en la mesa y sosteniéndose de esta, para tener seguridad de lo dicho por Nodoka-san, prosiguió ─¿ES CIERO ESO RANMA? ─preguntó exageradamente Soun con lágrimas a borbotones en sus ojos.

─eh…bueno…nosotros…─ hablo dejando el abrazo tan cercano que tenían, tomando la mano de Akane, quien vio la suya junto a la de Ranma asintiendo. El la imito. Ella entendió.

─Papá, tío Genma, tía, hermanas─ nerviosa decidió sincerarse, pues su querida familia se lo merecía. ─…Ranma y yo…hemos…hemos decidido darnos una nueva oportunidad.

Luego de unos segundos de mutismo, y un nuevo asombro compartido, los más extrovertidos dieron rienda suelta a los efectos de la buena noticia.

─¡SIIIIII!

─¡SAOTOMEE!

─¡TENDOOO!

─Al fin, después de tanto tiempo…

─¡UNIREMOS LAS ESCUELAS! ─dijeron al unísono tomándose de las manos y girando como Jack y Rose en el titanic. Una escena vergonzosa, pero que a todos les provoca risas y felicidad.

─¡Cielos! Tiraran la casa por la ventana.

─Déjalos, están felices─ le hablo a su hermana, pero después se enfocó en la menor ─ Akane, veo que estas segura de tu decisión ─ la aludida asintió sonriendo─ espero que esta vez no se hagan daño y sean felices.

─Kasumi, el tiempo no pasa por nada y…quiero estar con Akane, me dio otra oportunidad y me la estoy ganando a pulso.

─Ranma-kun, que alegría.

─Ranma, Ranma…─la avara joven se acercó al nombrado ─ a pesar de todo el daño que le hiciste a mi hermana… ─este trago saliva por lo directa que fue ─…sé que te quiere y que la puedes hacer feliz. Solo que esta vez haz las cosas bien. Piensa antes de actuar. Que tu miserable vida después de ella, te sirva.

─¡Nabiki! No lo trates así. Ranma ha sufrido tanto como lo hice yo y…lo perdoné. ─hablo apretando la mano de su hombre. Este le sonrió con amor─ Nos perdonamos y sí. Lo quiero. Lo negué por mucho tiempo y aunque superé su amor, me volvió a gustar.

─Yo en realidad…─ hablo con las mejillas acaloradas─… jamás deje de amarla.

─Si, se te noto todos estos años.

Ranma frunció el ceño ─Que pesada.

─hijo mío…

─¡Mamá!

─Al fin vuelvo a verte sonreír de verdad ─ dijo tomándole le rostro y besándoselo ─estoy tan feliz por ti─ miro a Akane─ por ustedes mis niños…

─Gracias tía.

El alboroto y festejo no se hizo esperar.

.

.

R&A

.

.

Un año después.

─¿este es el lugar?

─te dije que sería una sorpresa. ─respondió una masculina voz.

Bajo el refugio de un paraguas por la lluvia de verano, dos personas hablaban.

Akane quedo extasiada al ver como su estadía volvía a ser en aquel complejo de cabañas en el cual estuvieron antes. Si querían cerrar un capítulo, que para ambos fue difícil, abrirían otro. Otro en el mismo donde su relación había terminado. Por eso, para Ranma esta era una manera de crear nuevos recuerdos.

─Ranma es…es excelente.

─¿te gusto la sorpresa?

─¿bromeas? ¡Me encanto! ─exclamó saltando a sus brazos siendo ágilmente recibida, estando ahora ambos a merced de las gotas que caían del cielo, pues Ranma había soltado el paraguas por la efusividad de su novia.

Unieron sus bocas en un apasionado y amoroso beso. Hoy cumplían 365 días juntos como pareja desde que decidieron darse otra oportunidad como novios oficiales y quisieron celebrarlo con una especie de simbólica luna de miel.

─Ranma…gracias por traerme aquí yo…entiendo lo que tratas de hacer.

Sin ya ser afectado por la lluvia y continuando con su cuerpo de hombre, contestó ─vamos a dejar atrás todo Akane.

─Te amo.

Spring Melody

─¿A-Akane? ─inquirió emocionado.

Había deseado tanto escuchar esas palabras de sus labios, pero esperó el tiempo que ella estimase conveniente para oírselo. Pues él se lo decía más seguido, luego de haberle confesado que la siguió amando durante cinco años.

─he tardado más de un año en decírtelo, porque tenía miedo y…quería que fuese en el momento indicado. Quería acabar con todos mis demonios mentales y…tener certeza de que seguiríamos juntos, que lo que tenemos es real y no acabaría por cualquier tontería, pero hemos madurado y puede que falte mucho todavía, pero ahora estoy segura de lo que siento. ─dijo convencida con una mirada que solo irradiaba el gran sentimiento que albergaba por Ranma.

─Kane…─dijo emocionado subiendo y bajando su mano en la mejilla de la chica, quien con la suya tomo la de él─ Si volví a la vida, cuando me aceptaste nuevamente en la tuya, ahora no pido nada más. Te amo.

Akane sonrió ─sé que me hiciste daño en el pasado y que a la fecha todavía no te lo perdonas del todo amor─ habló recargando su rostro en la masculina mano─ pero, sé que no me lo harás en el futuro. Uno que no será color de rosa, porque ninguno de los dos es la pareja perfecta, pero juntos somos lo mejor de nosotros mismos. Eso he visto. Eso hemos vivido hasta hoy. Por eso te amo Ranma, porque te has esforzado en cada detalle en demostrarme lo mucho que me amas y también has aprendido a amarte, a regañadientes, pero lo has hecho. Porque dejaste de hacerlo luego de lo que sucedió, pero cambiaste y te quieres. Amor, eso es loable y quería que fuese así. Porque me importas y tu bienestar nos permite a todos los que te amamos a vivir más tranquilos ¿Lo entiendes? ─el solo asintió con lágrimas detenidas─ La vida no es y nunca será fácil, pero si superamos nuestra primera separación, ahora podremos enfrentar cualquier cosa. Porque te amo Ranma y…no quiero perderte jamás.

─No lo harás, porque ya no puedo vivir sin ti.

─Ranma…

─Solo mírame…me has convertido en un idiota cursi.

─Jaja…bobo, pues sí. Lo eres. Eres un patético cursi.

─pues…lo admito y…ya qué, lo soy.

─lo sé, y no me importa. Te amo. No sabes cuánto te amo.

─también te amo mi amor. Cada día más.

Enredaron sus dedos rozando sus alianzas de compromiso, pus estaban prometidos desde hace seis meses. Algo que desato la felicidad en sus familias y limando cualquier atisbo de asperezas .

Caminaron tomados de la mano hasta llegar a su cabaña. Cuando la ocuparon Akane decidió que era momento de dar ahora su sorpresa.

─¿Ranma?

─¿Sí?

─supongo que celebraremos el año de noviazgo adentro.

─claro, compre unos tragos muy buenos ¿Cuál quieres tomar?

─Ninguno.

─pero Akane, traje de tus favoritos.

─es que... ─la joven estaba emocionada, pero aunque sentía el corazón en la boca, quiso hablar de una buena vez─ en…en mi estado no puedo.

Ranma abrió sus orbes al entender en segundos lo que insinuó.

─A-Akane…tu…es…estas…

Ella mordiendo su labio inferior, a modo de aplacar su agitación, afirmó. ─Si. E-estoy de tres meses.

─¡Akane! ─su voz se había ahogado de la emoción, por eso al verla fijamente, sus lágrimas de felicidad decían lo que sus labios no.

Ante su reacción, ella lo tomo del rostro─ seremos padres Ranma…lo seremos ─ este la tomo del suelo hasta levantarla de este y recargarla sobre su pecho mirándola fascinado. Su sonrisa amplia no salía de su rostro.

─Akane…gracias, gracias por esta hermosa noticia, no sabes cuan…cuan feliz me haces…

─Lo sé─ respondió con una bella sonrisa…─ Lo sé mi amor─ …para luego besarlo con júbilo y ansiedad, recibiendo la respuesta inmediata de su hombre.

.

En la noche, frente a una fogata desnudos, luego de haber hecho el amor por dos horas, teniendo una manta que los cobijaba y sintiendo el calor de sus cuerpos, Ranma y Akane estaban a los pies del sillón viendo las llamas arder.

─¿Ranma?

─¿Sí?

─Dime ¿por qué…por qué fue tan importante para ti pedirme perdón?

─Akane, sabes lo que significas para mi ¿o no? ─la vio de costado.

─pues…

─la respuesta es sencilla.

─¿y esa es…?

─porque tú eres mi razón.

─¿y-yo?

─Aha─ dijo recargando su cabeza en el desnudo hombro femenino─ muchas veces me pregunté si podía vivir sin tu perdón, y lo hice, pero me torturaba con las consecuencias de mis malas acciones, por lo que tú y yo sabemos paso, por eso también llenaba mi cabeza de tantas interrogantes que…no podía dormir.

─y esas eran…¿Cuáles?

─Muchas…sufrí de insomnio. En las noches me quedaba dando vueltas por horas, rondaban preguntas que no podía sacar de mi cabeza.

─¿Sí? ¿y cuáles eran?

─que preguntona eres.

─Solo quiero saber─ se quejó haciendo un coqueto gesto caprichoso.

─Está bien. Te lo diré. ─ acepto besándola de piquito─ Eran varias, me torturaba trayéndolas, pero no podía evitarlo, algunas veces me preguntaba si…Era posible avanzar cuando sabía que el perdón sería la única forma de hacerlo. Me refería al tuyo─ ella asintió ─me preguntaba si…¿podría llegar a obtenerlo? Te recordaba y a veces aspiraba a algo contigo, por eso continuaba preguntándome si… ¿Existían las segundas oportunidades? ─ella se recargo en su espalda un poco más provocando que la besara de nuevo, pues esa respuesta ahora era afirmativa. Al separarse de sus labios continuo ─y después de eso, pensaba si ¿podría tener la suerte de obtener alguna? Si la merecía…pero nada era alentador.

─Ranma…─ella lo vio cerrar los ojos reviviendo aquel momento.

─una noche…─ relataba mientras abrazó a Akane más fuerte besando y mordiendo levemente su hombro…─ dije en voz alta que…solo surgían preguntas y más preguntas, quisiera tener las respuestas, para que mi vida tenga sentido…porque mi razón de estas…no es otra que tú…tú eres la razón. Mi única razón siempre eres y serás tú.

Azorada por decir estas últimas remembranzas viéndola fijamente, quiso seguir indagando.

─¿y…y…pudiste responderlas?

─Ahora que te tengo conmigo, sí.

─respóndelas…

─pues en ese tiempo, fueron todas negativas. La primera fue que no, la segunda también y la que sigue.

─No tenías esperanzas.

─En absoluto, pero ya no me siento así. Eres mi mujer. Y me has enseñado que si se puede avanzar. Que si existen las segundas oportunidades, y que puedo tenerla y merecerla por muy mal que haya actuado. Pero lo único claro de todas ellas, es que mi razón eres tú Akane…

─Ranma mi amor…─hablo viéndolo con amor─…tú también eres mi razón.

Con un tierno y pausado beso dejaron de hablar, para concentrarse en ellos mismos. En su calor. En su burbuja que tan dichosos los hacía y la cual crecía al sentir Akane, la mano de Ranma sobando su incipiente barriga.

La pareja no podía más de felicidad. Si bien, su relación había pasado por muchos momentos desafortunados, dolorosos, y traumáticos, pudieron salir de todos ellos y tal vez no fue fácil, todo lo contrario, pero lo hicieron teniendo un final, que en el camino irían construyendo, ya que podría ser el inicio o la continuación de su historia de amor.

.

.

.

Fin

.

.

.


Notas finales: ¿Pensaron este final cuando leyeron arriba la pequeña intro? No lo creo.

Disculpen lo exteeenso de la lectura.

Como vieron nuestros protagonistas no podían estar separados. Espero les haya gustado. Me llego mucho que en los comentarios de "Desconocido" me dijeran el dolor que les cause tanto en "La Venganza de Mousse", como en el recién mencionado, pues para varios fue una luz de esperanza y quedaron peor. Por eso hice todo lo posible porque las acciones de los personajes los llevara a este final. Creo que está bien justificado. Me sentí emocionada cada vez que lo escribía.

Se supone que esto lo publicaría en San Valentín, pero no alcance.

Las relaciones no son fáciles, pero cuando somos conscientes del daño y queremos cambiar, esto podría ser un ejemplo de lo bueno que podría resultar, claro que el tiempo es sabio y dirá si funcionará o no, pero vale la pena intentarlo, cuando eso sí, ojo, esa persona se lo merece y demuestra con hechos su arrepentimiento. Y viceversa.

Espero sus críticas constructivas, comentarios para saber si les gusto o no el final.

Temas usados:

Para el título: "You are the reason" Calum Scott.

De Jacob Ladegaard, Jacob's piano:

"Autumn Breeze"

"Remembrance"

"Darling"

"Spring Melody"

Creada : el 6 de octubre del 2020.

Terminada: el 06 de abril de 2021.

Es lo más largo que escrito en un solo capítulo.

Aca les dejo un pequeño bonus track, un regalo que es la continuacion y ya se termina.

.

.


Epílogo

.

.

.

Tiempo después.

Ranma terminaba de guardar los elementos que había ocupado para hacer las clases en el dojo. A pesar de terminar su carrera y graduarse, tal como Akane lo había hecho antes, quiso dedicarse a lo que realmente le gustaba y aprendió amar desde niño.

Las artes marciales.

Estas habían sido su sueño y ahora, que era instructor de estas, significaba mucho. Si bien, era economista, seguía trabajando un poco de su tiempo en ello, pero no era su prioridad. Por eso no dejo de hacer lo que amaba. Su mujer le había dicho que jamás dejara sus sueños de lado, pues por mucho tiempo las abandono por su alcoholismo y depresión, algo que ya era parte del pasado.

Al terminar de acomodar todo vio en la entrada del dojo a la chica que al sonreír, todavía le quitaba el aliento a pesar de que ya era suya.

─¿Acabaste ya?

─Si…ya.

Ambos caminaron hasta estar frente a frente. Se miraron sonrojados enredando sus dedos, los cuales tenían en el anular de la mano izquierda de cada uno, su alianza de matrimonio. Sus ojos se encontraron viéndose fascinados. Era increíble que a pesar de llevar seis años juntos, seguían amándose y deseándose con la misma intensidad. Eso reflejaba su mirada cuando estas se encontraban.

─Amor…¿Y nuestra pequeña Sora-chan?

─ya se quedó dormida.

─A…que bien ¿y mi campeón Taiki?

─también─ respondió juguetona y con una sonrisa pícara─ deberíamos aprovechar que nuestros pequeños están en el mundo de los sueños. ─sugirió rodeando con sus brazos en cuello de su hombre.

─Que osada señora Saotome ¿es una propuesta indecorosa? ─pregunto envolviéndola en un abrazo intimo que hizo chocar sus intimidades ya ansiosas.

─Pues claro…de lo contrario sería muy aburrido señor Saotome.

─De acuerdo esposa mía. Me tientas.

─Siempre─ termino de hablar besando esos labios que respondieron al instante. Uno que empezó tranquilo, para luego convertirse en uno salvaje que provocó varios hasta que no pudieron parar. Quedando saciados el uno por el otro algunas horas después.

.

Luego de haber dado rienda suelta a la pasión en aquel lugar en el cual tuvieron su primer entrenamiento cuando eran adolescentes, Ranma había tomado en brazos a Akane a pesar de que ella solo vestía su camisa china color lila, la cual le quedaba grande tapándole solo parte de la retaguardia. Llegaron al frente del estanque koi. Eran ya las tres de la mañana. Las estrellas y luna eran una excelente compañía en esa noche de verano, que para ambos se tornó nostálgica.

You and I

El silencio los acompaño un momento mientras recuperaban el aliento. Cada vez que se amaban en cuerpo y alma lo daban todo por hacerse sentir bien el uno con el otro. Por eso ahora, sentados en una pose intima como la pareja que eran, sentían una gran comodidad y tranquilidad al tenerse abrazados.

─Que hermosa noche─ elogio con ojos cerrados, sintiendo el corazón de Ranma tras su espalda. A pesar del tiempo, él siempre se ponía nervioso con ella. Eso le agrado tanto que sonrió sin más.

─¿Y eso?…¿Qué piensas que te hace reír?

─nada amor…solo, soy feliz.

─¿Segura?

Abrió los ojos para mirarlo y responder─ Absolutamente ─asevero acariciando su cabello y trenza con sus dedos─ jamás lo dudes mi amor.

Le sonrió de vuelta viéndola enamorado─ No lo haré. ─dijo seguro besando lentamente sus carnosos y adictivos labios.

─más te vale.

─Me encantan tus amenazas.

─lo sé.

Otro momento de silencio se provocó, pero ahora fue Ranma quien lo rompió.

─¿Kane, amor?

─¿Um…?

─Es lindo seguir en esta casa, contigo. Que nuestra familia este aquí. Donde nos conocimos.

Ella asintió dándole la razón─ Si. Que papá se fuera a vivir con los tuyos y nos cediera la casa fue un gran regalo de bodas.

─Si, Oji-san siempre ha sido muy bueno con nosotros.

─Aja…además Kasumi vive cerca y siempre nos ayuda con los niños. Bueno, yo también con los de ella.

─Si. Mis cuñadas son las mejores. Aunque la numero uno es Kasumi.

─No seas malo. Nabiki es una buena tía. Ama a nuestros pequeños.

─sería bueno que tenga los suyos.

─ella no quiere hijos. Ya lo sabes. Así como esta vive feliz.

─Cierto. Si tuviera hijos, pobres…con una madre así, seguro los rentaría.

─¡Ranma!

─es una broma, no te enojes Kane.

─um…malo.

Beso su cabello para terminar con el berrinche de su esposa.

─en fin, estoy agradecido Akane…

─¿Sí?

─En algún momento de mi vida, tuve el sueño de tener una familia contigo y luego se fue por la borda. Me parecía imposible, pero cuando dejo de ser inalcanzable…me volví un agradecido de la vida. De la que hemos fabricado juntos.

─Ranma…

Este tomo su mano con la derecha suya, mientras que con la izquierda acariciaba su vientre─ cada año agradezco el tenerte conmigo y el que a pesar de tu incapacidad al principio, lográramos darle vuelta la mano al destino y míranos…tenemos dos hermosos hijos.

─Somos una hermosa familia.

─Claro, tu esposo es un hombre muy guapo. Por eso nuestros hijos lo son. ─opino arrogante e inflando el pecho.

─Ah…eres un engreído.

─acéptalo Akane…los dos hacemos niños lindos. Nos salen perfectos.

─Ay ya…no es lo más importante.

─cierto, lo más importante es…

─¿es?

La recostó en sus piernas─…que te amo Akane…

─Ranma…─su corazón latió más rápido. ─ También te amo. Amo nuestra familia. Nuestros hijos, tú y ellos lo son todo para mí.

Sin dejar de acariciar con su mano la barriga de su esposa respondió ─ nuestros dos pequeños y tú, son lo más valioso de mi vida amor.

─tres…

─¿Cómo?

─Ah…nada.

Tres porque…porque habrá una personita más.

Por eso seremos cuatro. Los cuatro…pronto seremos cuatro…mi vida.

Buscare el momento adecuado para contarte. Te pondrás tan contento…tal como las otras dos veces…

─Kane…

─¿Sí?

─Sigues siendo mi razón…tú y los niños, son mi razón. Siempre serás mi razón Akane…

─Ranma…

─¿Si...?

─…y tú la mía.

.

.

Final

.

.


Ahora si se acabó.

¿Les gusto?

Espero sus respuestas.

Tema sacado del soundtrack de Ranma ½ : "You and I"

Gracias por leer hasta aquí.

Disculpen las faltas.

Feliz día.

Akane Kou.