Curiosidad.
Ben intento llegar al teléfono pero cayó antes de lograrlo, apenas siendo conciente de su alrededor, todo daba vueltas y el mismo se sentía débil y aturdido.Sus padres habían sucumbido completamente a la inconciencia, tal vez porque comieron más que él. Sabía que la comida vegana no era tan buena como su madre decía.
Aunque pensándolo bien... el comió algo diferente que sus padres y aún así terminó casi igual.
Escucho algo moviéndose detrás de él, unas pequeñas piernas aparecieron frente a sus ojos los cuales contemplaron como una luz roja aparecía cambiando la apariencia del pequeño alien por una mucho más humana y conocida para el, aquel ser se convirtió en un reflejo casi idéntico de el pero con las características del ADN corrompido que los diferenciaba.
–Al-Albedo –. Ben se desmayo después de eso.
El peliblanco, sonrió.
Cuando los verdes ojos de Ben se volvieron a abrir solo enfocaron la completa oscuridad que la venda en sus ojos le daba.
Aún se sentía mareado y despersonalizado del momento, como si su mente y cuerpo no estuvieran en el mismo lugar.
Algo tocaba su pie haciendo un ligero cosquilleo que lo hacía mover su pie en reflejo lejos de la sensación.
Escucho una risa distorcionada por sus adormilados sentidos que por más que intentaba no lograba estabilizar.
Piel tibia tocó una parte de su pierna y su mente lo asoció a un recuerdo que se convirtió en la fijación para el estado en que estaba.
La mano del peliblanco subió a la rodilla dónde dibujo círculos unos momentos antes de que siguiera subiendo a un muslo de Ben quien para su sorpresa no luchaba si no que parecía disfrutarlo, tal vez la droga fue demasiado para un simple adolescente humano, aunque esperaba que por ser Ben Diez hubiera resistido más.
Según le dijeron, la droga tenía dos reacciones según la especie, cantidad e individuo.
O se convertía en somnifero o afrodisíaco pero en Ben parecía más un ¿Tranquilizante? Algo así.
Sabía que el Tennyson estaba despierto, sus reacciones y respiración lo delataban pero en vez de atacar o al menos resistirse un poco solo se dejaba hacer mansamente; bueno, le dijeron que nunca la habían probado en humanos, tal vez así reaccionaba en ellos.
Siguió acariciando la pierna del castaño sintiendo la misma sensación que cuando acariciaba su propia pierna humana, suave y firme con vellos tan delgados que apenas y se sienten al tacto.
Ben se remueve cuando uñas rozan el interior de sus muslos y su boca se abre dejando exhalar su cálido aliento al exterior.
Albedo sonríe al ver cómo los finos vellos se erizaron justo como esperaba, tenía meses estudiando las diferentes, raras y extrañas reacciones que el falso cuerpo humano solía tener ante diferentes estímulos y cuando creyó llegar a la cúspide del conocimiento en la biología humana -al menos a comparación de otras especies- supo que algo faltaba.
Había algo más que su cuerpo le pedía después de tocar y acariciar zonas de su cuerpo que le daban unas sensaciones demasiado intensas y desconocidas para su especie, su cuerpo quedaba húmedo por el líquido que su piel brotaba cuando su temperatura aumentaba, sus piernas temblaban una contra otra mientras los que sabía eran músculos se endurecían y tensionaban y el aparato que los humanos masculinos tenían alteraba su forma irguiendose y humedeciendose de algo viscoso y transparente.
Siempre que acariciaba su piel está se erizaba y si continuaba, espasmos involuntarios le seguían hasta detenerse cuando el miembro masculino soltaba aquello transparente temiendo a lo que sea que siguiera después de eso.
Pero es una mente curiosa con sed de conocimiento -según el- y como científico es su responsabilidad terminar cualquier investigación que inicie o aclarar cualquier duda que tenga y una duda muy recurrente que solía tener era la de si el cuerpo original tendría esas reacciones.
No fue difícil planear algo paro descubrirlo ni menos aún el hacerse pasar por "proveedor de vitaminas" para regarle a la señora Tennyson unas muestras gratis de vitaminas para adultos y una muestra especial de la nueva proteína sintética para adolescentes en crecimiento, ella chilló y corrio a contarle a su marido sobre sus nuevas adquisiciones y que las usaría en la cena de esa noche, fácil.
Rozo la ingle del castaño y como lo previó las piernas se movieron cerrándose por un momento antes de relajarse de nuevo, no importa cuan drogado o dormido estuviera Ben él conocía cada reacción y dónde tocar para que el cuerpo ajeno llegará al punto que quería.
El pecho desnudo subía y bajaba al son de las respiraciones de la boca, las cuales poco a poco se aceleraban en busca de más oxigeno.
Ahora algo tocaba sus tetillas, en círculos, con caricias, solo rozándolas, con los pulgares como si las estuviera rascando y para el final con algo húmedo que repetía los movimientos anteriores. Una mano sujeto una de ellas tirando hacia fuera haciendo que su espalda se curvara con ella mientras la otra seguía siendo atacada en círculos por aquella cosa húmeda.
Las sintió endurecerse como nunca lo habían hecho y como si esa fuera la meta de su atacante, aumento la presión que ejercía en ambas ahora intercambiando la lengua entre ambas, succionando y tocando con una experiencia obvia.
Ben solo podía retorcerse en la blanda superficie de su cama, sus manos atadas con algo no le eran una molestia y su mente aún pérdida en el pasado no lograba procesar lo que en el presente ocurría confundiendo el ahora con un recuerdo pasado en un remolino de conciencia-inconciencia a la que era obligado tanto su mente y su cuerpo ante la sensación de disociación de la que era víctima a causa de las sustancias externas a su organismo que ahora le recorrían por cada diminuta arteria que tenía.
Un 'plop' se escuchó cuando la boca del albino se alejó repentinamente del pedazo de piel que hace nada succionaba con hambre al darse cuenta que aquella acción la hizo sin pensar, solo por instinto.
Al voltear a ver el cuerpo bajo suyo vio una mancha oscura en la piel de Ben, justo donde su boca había estado, volvió a repetir aquel acto a lo largo del cuello y torso repitiendose una y otra vez que solo era por fines de investigación aquello, creía saberlo todo del cuerpo humano pero ahora que tenía otro sujeto de experimentos se daba cuenta que aún le faltaba más información por "recopilar".
De nuevo Albedo sintió el calor azotar su cuerpo, sorprendido de que está vez no necesito acariciar su cuerpo si no que reaccionó al tocar uno ajeno, eso era un nuevo descubrimiento.
Llegó al raro circulo que Ben -y por lo tanto el también- tenía cerca al medio cuerpo, aún no le encontraba una función o propósito pero ahora que tenía otro para estudiar decidió no perder el tiempo, después de todo no sabía cuánto duraba el efecto de la droga en los humanos.
Introdujo un dedo en el pequeño círculo del abdomen, tocó el fondo con la punta mientras comenzaba a hacer movimientos en el, nada ocurrió. Pensó que tal vez al igual que con las tetillas debía lamer para que reaccionará más rápido así que sin dudar se acomodó entre las delgadas y atléticas piernas del castaño.
Pero cuando de nuevo los extraños instintos humanos lo controlaron dejo de lamer el ombligo para pasar a los costados dónde por momentos lamía y en otros mordía.
Algo impacto en el pecho del albino haciendo que dejará sus lascivas acciones para ver qué era, lo mismo que le pasaba a él si se acariciaba mucho le había a ocurrido al castaño.
Albedo sonrió con malicia, por fin podría saber que más hacía el cuerpo humano cuando era puesto en ese estado.
Comenzó a ascender buscando acercar su rostro al ajeno cuando un fuerte estremecimiento le sacudió todo el cuerpo haciéndolo acunarse en el cuerpo del castaño y ocultar el rostro en el cálido cuello.
El latido de Ben era rápido y fuerte contra la palma de Albedo quien ahora que podía responder a las interrogantes que se había estado haciendo desde meses atrás volvía a dudar ante el temor que no sabía indentificar correctamente.
Para la sorpresa del peliblanco la cadera de Ben se movió está vez hacía arriba y como si de una repetición se tratará ambas cabezas se movieron hacia atrás exhalando el mismo suspiro excitandosé más mutuamente.
Y cuando ambos cuerpos volvieron a temblar casi en una sincronización perfecta las pupilas del que en realidad era un Galván se dilataron hasta casi desaparecer al igual que sus prejuicios y restricciones aceptando que aquello no era una investigación meramente científica, le gustaba... le encantaba y hoy sí llegaría al final, no sabía cuál era pero su cuerpo le gritaba que esos cuántos temblores no lo eran.
Volvió a repetir la estocada haciendo que ambas durezas se rozaran con más ahínco que las anteriores ocasiones sacándoles unos ahogados gemidos a ambos que comenzaron a repetirse con cada movimiento que volvían a hacer.
Más lubricante fue expulsado de las dos erecciones dándoles el plus necesario de placer y estimulación a ambos chicos.
Tanto Ben como Albedo siguieron dándose estocadas mutuas hasta que lograron sincronizar sus movimientos encontrando el punto exacto para que ambos se perdieran en el placer brindado hasta que la voz de Ben se escuchó intentando murmurar algo.
–In yo... estoy... Agh... –. Albedo bajo la velocidad obligando a Ben a durar unos segundos más en el límite de su cuerpo mientras posicionaba su boca justo sobre la oreja de Ben. –Dime Ben ¿Qué quieres? –. Poco a poco las estocadas volvían a aumentar de velocidad llevando a Ben al límite del éxtasis.
–Yo... estoy a punto, por favor Kevin...
Albedo rio fuerte mostrando todo el cinismo que no se creía capaz de sentir.
–Creo que me has confundido Benjamín –. La venda fue arrebatada sin delicadeza del rostro del castaño.
–¡Albe... aghh! –. Ben dió una fuerte estocada final, su cuerpo se dejó perder al placer que le recorrió haciendo que su cuerpo entero temblará y se curveara una y otra vez, su cabeza se hecho hacia atrás completamente extasiado y el semen salió disparado llenando tanto su abdomen como el ajeno del blanquecino líquido, la tensión se disipó de su cuerpo dejando una agradable relajación en su lugar y a un Albedo en absoluto shock ante lo inesperado que fue aquello.
Ben sintió su respiración cada vez más lenta, intento enfocar al peliblanco sobre el pero sus ojos de pronto pesaban de sueño y cansancio, su cuerpo dejo de reaccionar y su mente fue jalada a una oscuridad total dejando el nombre de su enemigo en un susurro silencioso que floto hasta él.
Albedo tocó la viscosa sustancia que le había caído, ¿qué se suponía que era eso? ¿El también podría?
Intento hacer reaccionar de nuevo a Ben pero fue inútil, estaba totalmente fuera de juego.
Albedo aún excitado inicio a frotarse contra el muslo de Ben, sus piernas temblaban, apenas y podía sostenerse en su posición sobre el castaño pero ahora que sabía lo que venía no le quedaba de otra más que esforzarse por obtener aquello.
Su cuerpo le exigió cada vez más, su piel sudaba y sus músculos dolían del esfuerzo pero el placer que le daba cada que tocaba la piel de Ben, rozandole con cada embestida lo hacían olvidar cualquier sensación secundaria.
De pronto algo demasiado duro le golpeó sin previo aviso, en un momento estaba bien y en el siguiente su cuerpo se contrajo hasta casi doler, se abrazo fuertemente al cuerpo ajeno y sus dientes mordieron el hombro de Ben ante la necesidad de canalizar lo que sentía, la sensación lo arrasó desde el dedo meñique de su pie que se doblo junto al resto, las uñas se encajaron entre las almohadas y sábanas, demasiado líquido comenzó a salir sin límite de él, sus ojos se cerraron dejando caer gruesas lágrimas que ni siquiera sintió y para cuando la magia por fin termino algunas gotas de sangre se derramaron de su nariz manchando el cuerpo de Ben.
Fue como renacer, su especie no tenía ni remotamente algo similar a eso.
Eso debía repetirlo, ya, ahora mismo.
El resto de la noche siguió frotándose contra Ben terminando una y otra vez en el mismo y adictivo éxtasis del orgasmo.
Cerca al amanecer, agotado como nunca salió caminando por la puerta principal de la casa sintiendose satisfecho con su "investigación" pero ahora que sabe lo diferente que es tener a otro involucrado sabe que aún hay mucho que le falta aprender, está seguro que algo más le faltó hacer está noche no sabe que pero... lo sabrá, pronto lo sabrá
Al día siguiente Ben tembló apenas despertó, había tenido el sueño más raro y torrido de toda su vida.
Él estaba haciéndolo con Kevin pero de pronto el se difumina en un manchón borroso y Albedo toma su lugar haciéndolo tener uno de los mejores orgasmos de su vida, el le tocaba con una maestría que le perturbaba ahora que lo analizaba a fondo.
Pero lo bueno que fue solo un sueño, ¿verdad?
The end.
Muchas gracias por leer.
Nunca había escrito algo de Ben 10, ya me estaba tardando.
Historia basada en un capítulo de una serie de one-shot que leí en amor Yaoi específicamente "universos alterados" 'Cap 7: un poco de lujuria'
Me agrado el concepto de Albedo molestó y confundido por lo sensible que es la piel humana y con ganas de saber más de las reacciones y estímulos y tarán.
La droga es como consumir marihuana y LSD, los sentidos se alteran haciendo todo más intenso pero los músculos por el contrario entran en un estado de relajación, también puedes tener "viajes" aquí Ben tiene el viaje de creer que lo está haciendo con Kevin y por eso se deja hacer.
Aclaro que nunca e consumido drogas y utilizo las experiencias de otras personas y cosas que e leído para lo aquí mencionado y que tampoco apoyo su consumo de ninguna forma.
Ben y Kevin no están juntos solo han hechos travesuras para reforzar la amistad.
El líquido que menciona Albedo que expulsa al sentir calor es sudor, solo por si no quedo claro.
Aunque mi plan es solo que sea un one-shot puede que lo termine haciendo un three-shot o algo parecido pero no prometo nada y lo más probable es que si se quede en un one.
Y no, no hubo penetración en ningún momento por si alguien tenía la duda.
Cualquier otra duda respecto a la historia pueden hacerla.
Nos leemos de nuevo pronto, espero.
