Suspiró...
Los días son agotadores, no podría simplemente centrarme en mí magia... O al menos en cargar mí mana...
Las clases normales, son aburridas.
Al menos ya se acerca la hora del almuerzo, podré dormir en paz.
Los días son demasiado pesados...
Acaso no puede haber algo interesante o relajante que pase.
Mientras miraba hacia el frente sin prestar atención a lo que decían, solamente pensaba.
- "¿Esto es Kibougamine...?" - es cansados pensar que esta escuela, es solamente como una normal, aunque en parte lo agradezco.
Al menos en mí salón se suele estar tranquilo, por qué en los otros.
Todo el mundo parece detenerse, el ruido de una explosión resuena en el pasillo.
De repente, la puerta sale disparada, veo a una persona volar, parece que se dirige hacía el asiento de Akamatsu, por la velocidad no puedo distinguir quien es...
Pasa la colisión, gemidos de dolor resuenan, yo solamente suelto un suspiro, realmente estoy considerando intentar dormir, pero, seguramente me despierten por los gritos...
- ¡Agh! - se quejo el intruso, mientras se sentaba en el suelo, se agarraba la cabeza, probablemente le dolía.
Era un chico, parece que de tercer año, pelo rosado, ojos del mismo color, un traje de mecánico amarillo y un gorro azul, bastante extraño.
Aunque en esta escuela puede pasar por algo típico, no lo sé.
- ¡Te dije que eso iba a explotar! - escuché un grito desde afuera, para que segundos después se escuchará una estridente risa.
- ¡Y yo que voy a saber! - grito devuelta el chico que entro a mí salón, este se estaba levantando y sacudiéndose el polvo que le quedaba encima, parece que era normal para el está situación - ¡Literalmente solo aciertas el treinta por ciento de las veces! ¡Es muy difícil que lo que digas pase!
Que ruidoso, es demasiado, acaso no pueden hacer ese desastre en otro lado, yo solo quería dormir un rato, como lo hago en todas las clases...
Un hombre entro por la puerta, tenía una gran cantidad de rastas, una cara tranquila, tenía un aspecto calmado, una camisa, una campera colgada por los hombros, un pantalón ancho y unas sandalias de madera.
- te dije, mis adivinación no llegan a ser reales siempre, pero, ¡Contigo acierto todas! - dijo animado para luego comenzar a reír.
El chico pelirrosa, solamente miraba molesto al mayor.
Estos dos... Acaso no se dan cuenta del ambiente...
Miro desde mí asiento a todos mis compañeros.
Tenko está que se sale de sus cabales, agarrándose el pelo y pareciendo que va gritarles en cualquier momento.
Angie solamente los ve con una sonrisa y los ojos abiertos.
Ouma solamente se está riendo de la situación junto con Kaito, y a su lado Tsumugi está espantada.
Hoshi solo los ve como si fuera algo normal, mientras que Gonta se está empezando a acercar a los chicos preocupado.
- Oigan, ¿Gonta pregunta si están bien? - dijo nervioso el chico grande de la clase, ellos dos solamente le dieron un pulgar arriba, lo que le dio una sonrisa a Gonta - ¡Gonta está aliviado!
Kaede y Saihara lo ven en estado de shock.
Los demás solamente observan incómodos la situación. Si que viven en su mundo
- ¡Ey Sempai! ¿¡Que mierda paso, acaso no pudiste hacer algo sin mí!? - grito Miu desde la parte de atrás del salón, parecía excitada y había comenzado a reírse. Toda la clase la vimos incómodos.
Suelto un leve suspiro.
No voy a poder seguir durmiendo, y eso que quería recuperar algo de mana...
Los intrusos la observaron durante unos segundos, luego se viraron uno al otro sin emociones.
Miu parecía que se estaba poniendo más nerviosa con el tiempo que pasaba.
- Y yo pensando que tu vieja obsesión con Soniachii era mala - dijo el mayor mientras se rascaba la cabeza, decía todo con un tono relajado.
Su compañero solamente se sonrojo, para luego soltar un suspiro - Ella es Iruma Miu, estudiante inventora definitiva, y créeme, se lo que has escuchado de ella, no es cierto...
Miu solamente miraba avergonzada al dúo, su cara era muy parecida a un tomate, que raro ella solo se pone así cuando la insultan...
- Miu, ¡solamente hubo un fallo de cálculo? - dijo sonriendo, esos dientes de sierra, son un poco espeluznantes...
- ¿Lo dices por Saionjichii o por Teruteruchii? - dijo con una sonrisa el mayor.
- ¡Por los dos! - gritaba frustrado - literalmente todo el maldito año han roto esa maldita máquina, y siempre termina reventando por culpa de alguno de ellos.
- Emm, chicos, estamos en clase...- dijo el profesor del aula, parecía medio aburrido con la situación - ah qué demonios presentence, al menos aremos algo más interesante.
Los chicos por fin se dignan a ver al profesor, este solamente se estaba acomodando el sombrero, a los chicos se les apareció en la cara una sonrisa que podría partir su rostro.
- ¡Kizakura-sensei! - Dijeron al mismo tiempo antes de saltar a abrazarlo, el profesor cayó al suelo, okey, esto es extraño...
- Si chicos yo también los extrañe a ambos. Pero no sean exagerados - comento mientras se reía, normalmente esa expresión es algo que no vemos, está bastante serio todo el tiempo.
Mientras se separaban del abrazo el profesor solamente hizo un gesto para que se presenten. Mientras nos miraba a nosotros con una sonrisa, aunque siento que está dirigida a mí...
- ¡Soy Souda Kazuichi, el estudiante mecánico definitivo! soy de la clase 77, segundo año, me encanta las bebidas dulces y desarmar cosas. ¡Un gusto en conocerlos! - dijo con una sonrisa de oreja a oreja, mientras mantenía los ojos cerrados.
- ¡Yo soy Hagakure Yasuhiro, estudiante vidente definitivo! - decía emocionado, mientras mantenía sus brazos cruzados, y miraba con una sonrisa a todos - soy de la clase 78 segundo año, ¡es un placer conocerlos!
Todos los miramos ya un poco más calmados al dúo, eran nuestros sempais como dijo Miu, pero solo había uno de los dos que me interesaba realmente.
Tratando de pararme de mí asiento, muy lentamente me empecé a acercar a ellos, Gonta se había quedado a la mitad del camino, ahora solo los estaba mirando con una sonrisa.
Podía sentir que Tenko me intentaba llamar para que regresará.
Pero yo solo tenía una intención en mente, una simple pregunta.
Me pare en frente del chico con rastas, este me miró curioso.
Yo solo le pregunté con mí habitual tono perezoso.
- ¿Es cierto... que puedes ver el futuro? -
- Claro que si - respondió alegremente - antes era con un treinta por ciento de que acertara, pero lo logré aumentar a un cuarenta - me dijo mientras levantaba un pulgar.
- Un cuarenta por ciento de efectividad no es muy impresionante... - dijo Ouma atrás mío, parecía un poco aburrido.
- Es cierto, al ser menos del cincuenta por ciento, la posibilidad de acierto es bastante baja - comento Kiibo, aunque aún así parecía curioso.
- ¡¿Ey, eres el estudiante robot definitivo?! - espero Souda-sempai emocionado, mientras se acercaba al robot, yo decidí desconectar, y solo centrarme en la persona que tenía en frente...
Es normal ver esa tasa de éxito tan baja como algo que llega a ser inútil como talento, pero...
Pero quizás, solo quizás, está podría ser la magia que siempre busque.
Normalmente mí magia son simples trucos, más difícil o más fáciles... Pero solo eso, trucos...
El, realmente puede ver el futuro, a pesar de que sea con una posibilidad tan baja, tengo que intentarlo, tengo que ver si es real...
- ¿Podrías... mostrarme? - dije con un tono cansado, aunque creo que mis ojos delataban mí emoción. El solamente me miró por unos segundos. Para luego sonreír.
- Normalmente cobro por estás, ¡pero por ser tu primera vez, lo haré gratis! - dijo con alegría, mientras sacaba de uno de su bolsillos una pequeña bola de cristal.
Pidió prestado el asiento del profesor, el cual gustosamente se lo presto, no sin antes susurrarle algo a Hagakure, este solamente se puso algo pálido,, para luego asentir levemente...
Luego de un par de segundos, estaba todo preparado, solamente me senté frente a el mientras, observaba la bola de cristal.
Hacia algunos gestos con las manos mientras todos lo observaban, incluso Souda y Kiibo que habían cortado su conversación.
Souda solo lo miraba, para luego sonreír, pude escuchar un leve susurro de su parte, ya que estaba cerca de mí, y como es obvio algunos de mis compañeros también.
- Va a acertar - fue muy suave, pero lo noté, ¿como el lo sabía?
Me centre más en el, el tono más pálido de su piel no se había ido, por lo demás se podía ver qué estaba muy concentrado.
Luego de unos segundos de espera empezó a hablar...
- Un grupo unido... Amigos extravagantes, realmente raros - explicaba de manera relajada lo que veía, por ahora no siento nada impresionante - prácticas bastante en tu laboratorio, aunque en clases sueles estar dormida, aunque tu expresión no cambia pareces emocionada por algo, no sabría exactamente porqué, puede ser dado a que has encontrado algo que buscabas, ah, ya lo noté... Un pequeño espectáculo de magia, después de todo una estudiante definitiva tienen tiempo para hacerlo.
Yo solo lo miraba fijo, esto parece algo plausible, todo lo que dice, son cosas que o hago, o puedo llegar a hacer...
Ah, parece que también tienes una pareja - dijo tranquilo...
Que...
El calor empezaba a subir por mis mejillas, el salón se había paralizado, el solamente bajo las manos, para luego guardar su bola de cristal, en uno de sus bolsillos, lentamente se levantó.
- Espera que eso ocurra - dijo con una sonrisa mientras me miraba - ¡espero que lo hayas disfrutado! - dijo mientras se reía, poco a poco comenzaba a salir del salón. Mientras que Souda solamente lo seguía - ¡Nos vemos Yumenochii! - termino para luego desaparecer por el umbral de la puerta.
El caos se viernes sobre el salón, todos comentando sobre lo que acaba de pasar, algunos desconcertados otros riéndose de la situación. Otros solamente curiosos.
Tenko, estaba que echaba quieta como una estatua, yo solo podía quedarme quieta roja como mí cabello.
Puede que lo que dijo no ocurra, pero el pudo adivinar muchas cosas...
Quiero encontrarlo de vuelta, esa parece la magia que anduve buscando tanto tiempo, magia real...
Unos segundos después, mientras todo se descontrolaba, me doy cuenta
- Nunca le dije mí nombre...
Mientras tanto fuera del salón, un par de chicos caminaba por el pasillo.
- Así que, ¿te viste a vos en visión no? - dijo Souda con una sonrisa, Hagakure solo se sonrojo un poco. - ¡Ja! Lo sabía, tu nunca dejas algo sin decir a menos que te veas involucrado.
- Si, pero no creo que pase, ya sabes - dijo mientras se reía, el aún estaba un poco sonrojado.
- ¿Quieres apostar? - dijo Kazuichi con una sonrisa burlona, Yasuhiro solamente lo miro algo incrédulo, pero luego lo miro con la misma sonrisa - Si aciertas, ¡tendrás que ayudarme a conseguir algo que quiero!,
- Si conseguirte una cita con Saionjichii, ¿no? - dijo el mayor, el pelirrosa al no esperarse el comentario, su cara se volvió del color de una remolacha, Hagakure lo miraba con divertido para luego decir - y si fallo tendrás que hablar como Gundamchii por una semana.
Souda, solo lo miro con horror, pero aún así, pensando que según como están en la visión el iba a acertar, decidió este ser la mano.
Hagakure la miro, para segundos después la agarrara, así aceptando la apuesta.
Poco sabía Souda, que sin importar el resultado, Hagakure ganaría algo.
Una pareja, o unas risas por una semana completa...