Autor Original: Ren-sama23

ID: 2480666

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Últimamente, el supuesto hermano mayor de Tsuna, Dino, y su escurridizo guardián Kyoya Hibari siempre se veían juntos. Ya sea un entrenamiento o simplemente yendo a otro lugar, los dos siempre estarían juntos. Él no es el único que también lo nota. Todos seguían diciendo que esos dos se estaban acercando mucho más y más el uno al otro. Los otros guardianes incluso pensaron que en realidad estaban saliendo.

No estaba seguro de si estaba celoso de que su hermano mayor hubiera preferido de alguna manera la compañía de Kyoya a la suya o si en realidad eran sus celos porque su guardián acompañaba a un jefe diferente. Pero su molestia aumentaba todos los días y ya no sabía qué hacer. Sabía que estaba siendo infantil al respecto, pero aún así no podía evitar sentirse muy mal cada vez que esos dos estaban juntos.

Gokudera y los demás ya estaba notando que parecía que ya no disfrutaba tanto de la compañía de Dino. También está ignorando la presencia de Kyoya en la escuela ahora, a pesar de que sabía que el pelinegro no le había hecho nada malo. Tsuna no sabía cómo o cuándo comenzó esta sensación de malestar dentro de él, pero sabía que no siempre estaba ahí. Solía admirar a Dino por ser capaz de hacer obedecer a Kyoya. También le gustaba escuchar sobre Kyoya cada vez que Dino comenzaba su charla sobre su problemático alumno. Pero últimamente, intentaba sintonizar la voz de Dino, ya sea que el hombre estuviera hablando de su guardián de la nube o no.

Se sentiría tan mal por eso después, pero aún así no podía evitar hacerlo… porque está celoso.

Tsuna resopló mientras comenzaba a caminar solo en silencio por las concurridas calles de la ciudad. No pudo evitar fruncir el ceño también. Recordó el incidente anterior y no pudo evitar erizarse de indignación aún más, aunque solo por dentro.

Se suponía que Dino lo acompañaría a la biblioteca de la ciudad para devolver algunos libros que tomó prestados la semana anterior. Ni siquiera fue Tsuna quien sugirió la idea. Fue Dino quien dijo que no tenía nada que hacer y le suplicó al castaño el ir también para ver la biblioteca de la ciudad. Pero justo cuando estaba a punto de salir a encontrarse con Dino antes, el rubio lo llamó y le dijo que no podía ya, porque estaba con Kyoya en ese momento. Después de eso, el castaño colgó. Dino intentó llamarlo de nuevo, pero simplemente miró a su teléfono y luego lo apagó.

Tsuna ya podía sentir sus lágrimas debajo de sus ojos mientras corría hacia la biblioteca. Al final, no pudo devolver los libros porque ya estaba llorando cuando llegó al lugar. En lugar de volver a casa, fue a un parque infantil cerca de la biblioteca y se sentó en un columpio. El lugar ya estaba desierto desde que casi anochecía. Realmente, ¿qué le estaba pasando…? "Odio esto… odio esto…" murmuró mientras continuamente intentaba limpiarse las mejillas.

Pensó con certeza que su feo sentimiento desaparecería una vez que se acostumbrara a ver a Dino y Kyoya juntos. Pero parecía estar empeorando. Sollozó cuando el dolor en su corazón se reavivó una vez más.

"Lo siento… lo siento, Dino-san… Hibari-san…" sollozó en voz baja. Le llevó casi una hora recuperarse finalmente. Para ese momento, todo el parque ya estaba abandonado y todo estaba oscuro. Incluso entonces, no se movió de su posición. Usó sus pies para balancearse hacia adelante y hacia atrás suavemente mientras intentaba pensar en una coartada para cortar la llamada de Dino tan abruptamente. También necesitaba disculparse. Él era el que estaba equivocado, como siempre.

"¡Tsuna!" Tsuna casi saltó de la sorpresa cuando alguien de repente lo llamó. Miró a su alrededor y vio a Dino corriendo hacia él. Inicialmente quería huir, sabiendo muy bien que volvería a hacer daño al rubio innecesariamente. Pero eligió quedarse en su lugar. Quería hablar con Dino.

"Buenas noches, Dino-san" intentó saludar al hombre con entusiasmo, pero supo que había fallado miserablemente cuando Dino lo miró con preocupación y confusión.

"Así que estás aquí. Te hemos estado buscando. Tsuna, lamento lo que pasó antes" Dino se sentó en el columpio junto al castaño "Sé que estás enfadado por eso. Prometí ir contigo pero me eché atrás en el último minuto. Tenía un recado importante con Kyoya así que… lo siento mucho"

Tsuna bajó la mirada y se balanceó suavemente hacia adelante y hacia atrás "No. Es mi culpa" murmuró después de un rato.

Dino no respondió durante varios minutos. El silencio fue incómodo y el rubio supo que tenía que preguntar lo que le molestaba desde hace algún tiempo "Tsuna, quiero preguntarte algo" cuando Tsuna lo miró de reojo, inhaló para reunir el valor suficiente para preguntarle al más joven "Creo que te he hecho algo malo, aparte del incidente anterior. Soy un poco lento con respecto a esas cosas, así que puede que no lo haya notado. Pero siento que te has estado distanciando de mí estas últimas semanas. quiero saber qué hice mal para–" los ojos de Dino se abrieron ampliamente cuando Tsuna de repente comenzó a llorar de nuevo "¡Tsuna! ¿Estás bien? ¿Es mi culpa?"

Tsuna simplemente negó con la cabeza mientras sollozaba incontrolablemente. No quería derrumbarse frente a Dino de esta manera. Pero por la forma en que el rubio habló antes, se sintió aún más culpable por todo.

"Tsuna, por favor, habla conmigo" Dino ya se levantó del columpio e inmediatamente se arrodilló frente a Tsuna "Por favor, no llores"

Dino hizo todo lo posible por animar a su hermano mejor, llegando incluso al punto de usar a Reborn con él. Incluso intentó probar con alguna broma bastante tonta que escuchó en la televisión solo para evitar que Tsuna llorara. Sonrió y soltó un suspiro de alivio cuando el castaño se rio un poco ante su última broma.

"Dino-san… Yo… estoy avergonzado de mí mismo" Tsuna se secó las lágrimas usando el pañuelo que le dio Dino "Soy lo peor… incluso tú, Dino-san, me odiarás si supieras qué tipo de persona soy…" el rubio estaba a punto de decir lo contrario, pero el adolescente simplemente negó con la cabeza antes de continuar "Es cierto que me estaba distanciando de ti. Pero no es tu culpa… no merezco ser tu hermano menor, Dino-san… lo siento…" resopló por última vez al final de su declaración.

"No lo entiendo, Tsuna" respondió Dino después de un rato. Siguió intentando pensar en lo que Tsuna podía querer decir, pero no podía hacer ni cara ni cruz al respecto.

Tsuna apretó los puños para ganar algo de valor "… Estoy celoso, Dino-san…" miró a Dino con ojos de pura culpa y dolor antes de sentir la avalancha de lágrimas de nuevo. Intentó de mantener la calma esta vez "Estoy celoso de ti y de Hibari-san… y ni siquiera sé por qué…"

Los ojos de Dino se ampliaron ante eso "Pero Tsuna…" parecía que quería decir algo, pero Tsuna lo interrumpió de nuevo. Si dejaba que Dino hablara ahora, podría perder la confianza y no decir nada más.

"Seguí pensando que podría ser porque te estás acercando a él a pesar de que soy tu hermano menor… o tal vez porque él prefiere tu compañía a la mía, su propio jefe…" Tsuna apretó los puños con más fuerza "Yo… solía pensar que esas eran las razones… Pero últimamente, ya no lo sé… No me gusta cuando pienso que estáis saliendo… Estoy tan confundido… y yo-"

"¡Así que Reborn tenía razón, después de todo!" Dino se rio entre dientes, sorprendiendo efectivamente al castaño. Tsuna lo miró confundido "Verás, Tsuna. Reborn dijo que estás enamorado de Kyoya pero eres tan lento que ni siquiera te das cuenta"

"¿Eh?" los ojos de Tsuna se agrandaron ante eso "¡N-No lo estoy!" se ruborizó visiblemente ante la acusación. Pero de alguna manera, sintió que lo que estaba diciendo Dino tenía sentido. Dino también era cercano a los otros guardianes del castaño, pero Tsuna solo podía sentir celos cuando se trataba de Kyoya. También está el hecho de que Kyoya le parecía más frío de lo habitual, por lo que le molestaba mucho.

"Lo siento mucho, Tsuna" expresó Tsuna "Todo es mi culpa, después de todo. Cuando escuché de Reborn sobre tus sentimientos, sentí que tenía que hacer algo al respecto de alguna manera. Quiero ayudarte ya que soy tu hermano mayor"

"Pero estás saliendo con él…" Tsuna se veía aún más confiado ahora.

"¡Eso no es cierto!" Dino no pudo evitar suspirar "Kyoya definitivamente me matará si te digo esto ahora, pero…" tragó saliva, seguramente preparándose para ser mordido hasta la muerte "El Noveno me dio una tarea para determinar si Kyoya es apto para ser el compañero del Décimo Jefe. Pero cuando Reborn dijo esas palabras sobre tus sentimientos, sentí que quería ayudar a Kyoya para pasar ante los ojos del Noveno. Realmente solo lo estaba ayudando, Tsuna. Pero Reborn dijo que si nos veías a Kyoya y a mí juntos más a menudo, te ayudaría a darte cuenta de tus sentimientos. Tenía dudas al respecto, pero supongo… que funcionó…" le dio unas palmaditas a Tsuna en la cabeza "Aunque… no me di cuenta de que te haría daño en el proceso. No debería haber escuchado a Reborn-"

Tsuna ya podía sentir sus lágrimas de nuevo, esta vez por una razón completamente diferente. No dejó que Dino terminar más mientras abrazó al rubio con fuerza "Lo siento, Dino-san. Y también… gracias"

Dino parpadeó sorprendido al principio, pero sonrió cuando sintió que el nudo apretado en su pecho se aflojaba. Estaba a punto de abrazar a Tsuna también, pero entonces sintió la conocida sensación del aura asesina de un guardián no muy lejos de él. Entonces estaba mirando, después de todo. Dino sonrió. Sabía que Kyoya ya estaba furioso de tantos celos a estas alturas. El azabache odiaba especialmente cada vez que Dino rodeaba a Tsuna con sus brazos como si fuera el dueño del jefe Vongola.

Y ahora, para espectáculo final, abrazó a Tsuna y besó al frente de este último, haciendo que el moreno se sonrojara con eficacia "Eres tan lindo, Tsuna, abrazándole as-" cayó al suelo inconsciente cuando un objeto volador de repente lo golpeó en la cabeza.

"¡Hiiii! ¡D-Dino-san!" Tsuna entró en pánico cuando vio la condición de Dino. Pero luego vio lo que era el objeto reluciente y se sorprendió profundamente al ver el arma del crimen – una tonfa ensangrentada "¿H-Hibari-san…?" preguntó, como si la tonfa le respondiera sobre la ubicación de su dueño.

"Por atreveros a besaros en un lugar público, os morderé hasta la muerte" Tsuna tragó saliva cuando escuchó la conocida amenaza mortal.

Kyoya miró la figura inconsciente de Dino y los ojos abiertos de Tsuna mirándole con incredulidad, un rubor prominente adornando las mejillas del castaño. De alguna manera se sintió satisfecho. Sonrió mientras le tendía la mano a Tsuna para que la cogiera "Levántate, animalito"

El castaño cogió tímidamente la mano que le ofrecía mientras se levantaba. Pero Kyoya usó esa misma mano para acercarlo más. El azabache lo sujetó por la cintura para mantenerlo atrapado y se inclinó "¿H-Hibari-san?" los ojos de Tsuna se agrandaron cuando sintió unos labios fríos pero suaves sobre los suyos. El beso fue suave y casto, solo duró unos segundos, pero aun así hizo que el castaño se sonrojara hasta la punta de las orejas. Se tapó la boca, avergonzado "¡H-Hibari-san!"

"Tsunayoshi" llamó el azabache con una voz muy suave. Tsuna tragó saliva cuando sintió que su corazón se saltaba un latido por la forma en que su nombre fue llamado. Pero entonces el brillo en los ojos de Kyoya de repente se volvió salvaje "Te haré pagar por ignorarme estas últimas semanas. te morderé hasta la muerte"

"¡¿E-Eh?!" los ojos de Tsuna se agrandaron cuando vio a Kyoya coger su otra tonfa del suelo y adoptar una postura ofensiva "¡¿Hibari-san?!" y entonces Kyoya atacó "¡Hiiiii!" grito mientras comenzaba a huir del lugar, perseguido por su guardián más fuerte. ¡Quizás enamorarse de Kyoya fue una muy mala idea! Pero aun así, todavía podía sentir su corazón latiendo salvajemente en su pecho mientras el pelinegro lo perseguía por toda la ciudad.

"¿Cuánto tiempo vas a fingir que estás inconsciente?" la voz de un bebé hizo que Dino alzase la mirada. Se rio tímidamente mientras se sentaba.

"¿Estará bien, Reborn?" preguntó Dino cuando vieron a Kyoya y Tsuna en la distancia.

Reborn sonrió "Una de las condiciones que estableció el Noveno es que Kyoya debería ser capaz de proteger a Tsuna de cualquier amenaza. Kyoya le protegió de ti justo ahora"

"¡No soy amenaza para Tsuna!" soltó Dino mientras hacía un puchero. Reborn de repente quiso patearlo "¡Y no protegió a Tsuna! ¡Solo estaba celoso! ¡Incluso se aprovechó de mi hermano menor! ¡No se merece a Tsuna!"

"Otra condición del Noveno es que Kyoya debería ser lo suficientemente fuerte como para vencer a Tsuna en una pelea" continuó Reborn, considerando irrelevante el arrebato de su ex alumno "Estoy seguro de que vencerá a ese Dame estudiante en poco tiempo"

"¡No!" gritó Dino "¡Si Kyoya logra cumplir con todas las condiciones, puede casarse con Tsuna! ¡No lo permitiré! ¡Definitivamente no permitiré que mi hermano menor–!" y ya estaba inconsciente de nuevo, cortesía de un Reborn cabreado.

"Tampoco permitiré que te cases con Tsuna" dijo el Arcobaleno antes de sonreír "No es divertido si Tsuna no termina en manos de un amante sádico"