Hey chicos que tal, sep, después de años aparezco como si nada, lo siento por las personas que apoyan mis otros fics, se que siguen esperando continuación, por problemas personales y demás cosas que han sucedido en mi vida tales como bloqueos y trabajo no eh podido escribir, esta historia es colaboración junto a una amiga es algo extraña que se nos ocurrio tras unas bromas, pero espero poder continuar con mis otros fics pronto, un abrazo y espero disfruten y le den una oportunidad a esta historia
En colaboración con @jrp1496 Escritora de Wattpad
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Meses después de los acontecimientos en la aldea del herrero, Tanjiro, ya recuperado, recibe una misión por parte de su cuervo, con el objetivo de encontrar y matar a un demonio muy peligroso, del que nadie había oído antes, en compañía de Nezuko, Inosuke y Zenitsu.
–¡Muévanse! ¡Perderemos el tren! - Grito el rubio mientras corría frente a sus compañeros
–¡Esa cosa va a volverse contra nosotros como la otra vez predije! - Inosuke se movió exageradamente al decir eso - no pienso subirme de nuevo
–Inosuke, tenemos que ir, es nuestra misión - Respondió Tanjiro al tiempo que corrían para alcanzar el tren
Como pudieron escondieron sus katanas para pasar la seguridad de la estación, Zenitsu al ser el único con conocimiento sobre los trenes fue el encargado de comprar los boletos.
–¡Hey!, ¿No son los que estaban causando problemas la última vez? - Gritó un policía que se encontraba por ahí, al parecer los reconoció de la última vez que viajaron en tren
–N...no, se...señor, nos confunde - Respondió Tanjiro mientras movía las manos nervioso
–¡Claro que sí!, recuerdo esa cabeza de jabalí, vengan aquí - Les dijo el policía
–Tenemos algo de prisa, disculpe - hablo Zenitsu, haciendo una reverencia mientras agarraba a Tanjiro e Inosuke por el cuello de sus respectivos haori para comenzar a correr, saltando para entrar al tren, que comenzaba a avanzar.
–¡Regresen!, ¡Detengan el tren! - Gritó el policía mientras corría tras el tren, aunque claro, nadie fuera de los 3 caza demonios le ponía atención
Con una última reverencia, Tanjiro se despidió de aquel policía, ya en el vagón buscaron algún asiento vacío, Tanjiro se sentó junto a la ventana, a lado de Inosuke, Zenitsu iba en el asiento de enfrente a lado de la caja de Tanjiro, obviamente para estar a lado de Nezuko, bajo sus asientos iban sus respectivas Katanas
El viaje era tranquilo, el paisaje que se veía por las ventanas era hermoso, aunque solo Tanjiro y Zenitsu lo disfrutaban.
–¡Muévete bestia de metal!, ¡El gran Inosuke debe volver a su entrenamiento! - Grito Inosuke mientras pataleaba
–¡Cállate, idiota!, molestas a los demás- Regaño el rubio mientras le jalaba la cabeza de jabalí - además yo no quiero volver, el entrenamiento es muy difícil
–Eres un llorón, y yo soy el mejor. - contestó Inosuke parándose de pie y colocando sus manos en forma de puños en su cadera.
–Ya cállense, Nezuko está dormida.
El rubio puso cara de sorpresa y apenado, se terminó sentando de nuevo, acariciando la caja. Inosuke se terminó calmando porque ya no había con quién pelear.
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En otro tiempo, Violet, cuya vida fue trágica desde pequeña, pues fue encontrada en una isla desierta por Dietfried Bougainvillea, un soldado, que la regaló a su hermano para que la utilizara como arma en el ejército, ya que Dietfried había visto cómo mataba a todo su pelotón en esa isla. Al terminar la guerra, Gilbert Bougainvillea, herido y sin su ojo izquierdo, se hizo pasar por muerto, escondiéndose en una isla, dejando a Violet intrigada, pues antes de separarse le dijo que la amaba. Gilbert fue el único que la trataba como un ser humano.
Violet es una muchacha de 18 años, delgada, rubia, cuya característica más notable es la de tener ambos brazos robóticos, pues los perdió en la guerra.
Trabaja como Auto Memory Doll, el cual consiste en escribir cartas para quien lo necesite, viajar a dónde su servicio sea requerido y entregar las cartas en el tiempo que se le indique, todo con el fin de poder encontrarle sentido a lo último que su mayor le dijo, Violet no podía entender los sentimientos, ajenos ni propios, no lo había aprendido. Trabaja para Claudia Hodgins, un antiguo comandante, amigo de Gilbert.
Pasó varios años como Auto Memory Doll, logrando ser de las mejores y más solicitadas, durante sus encargos y gracias a sus clientes, pudo entender el amor, el amor de padres, de hijos, de pareja, a ser empática, la importancia de decir lo que uno siente.
Al enterarse que Gilbert seguía con vida, lo buscó, y luchó hasta que él decidió verla, Gilbert sentía culpa por todo lo que provocó la guerra en Violet, quería que hiciera su vida pero él no quería estar a su lado, no creía merecerlo. Después de su reencuentro estuvieron dos días más en la isla, para preparar sus cosas y partir a casa, el mayor estaba algo nervioso por volver a Leiden. Se había acostumbrado a ser profesor en esa pequeña isla.
El paisaje que pasaba ante sus ojos, era colorido, las flores nacían de la tierra, y brindaban su brillo al lugar. Gilbert enfocó su vista en unas flores que tenían un efecto especial en él, las violetas. Estiró su mano para tomar la de su compañera. Violet sintió el contacto, y su corazón comenzó a latir mucho más rápido de lo que de por sí estaba latiendo. Sin embargo, ninguno apartó la mirada del paisaje.
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Ambos veían hacia enfrente, hasta que Violet escuchó la voz del mayor, haciendo que lo volteara a ver, instantes después él le regresó la mirada.
–¿Cómo te va en la compañía de Hodgins?
–Trabajar como Auto Memory Doll ha sido muy satisfactorio, porque me ha ayudado a poder comprender las últimas palabras que me dijo.
Gilbert un poco sorprendido desvió levemente su mirada al recordar las últimas palabras que le dijo a Violet antes de separarse.
Gilbert estaba a punto de responderle, pero escuchó como Violet le decía al conductor que se detuvieran pues había unos chicos heridos tirados en el camino, justo a lado de donde comenzaba un bosque.
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¿En que momento se había ido todo al carajo? Era la pregunta que se estaban haciendo en este momento el trio dorado, todo el plan había ido relativamente bien, se infiltraron a Gringotts exitosamente, entraron a la bóveda de Bellatrix y habían encontrado el horrocrux, sí, tenían unas quemaduras pero para lo que habían estado viviendo últimamente, eso no era raro, ahora estaban a duras penas defendiéndose de Duendes y Magos que cuidaban el lugar, todo porque Griphook había decidido dejarlos ahí.
–¡Ese maldito duende me las pagara! - Grito Ron furioso mientras lanzaba un hechizo para repeler a uno de los guardias del lugar
–¡Hermione¡ ¿Alguna idea de cómo salir? - Pregunto Harry esperanzado en que su amiga tuviera un plan como siempre
–¡Estoy pensando! - Respondió Hermione ocultándose de un guardia
–¡Stupefy! - Harry lanzó el hechizo a un guardia causando que retrocediera unos metros, antes de que siquiera pudiera levantarse, una gran flama se hizo presente junto a un gran rugido, ese suceso fue lo suficiente impactante para que Harry tuviera una idea – ¡Síganme! - Grito al tiempo que salía de su trinchera y corria al pasillo.
–¡Relashio! - Lanzó el hechizo a las cadenas que tenía el dragón –¡Vamos!, ¡Suban ya! - Gritó Harry al tiempo que se subía al dragón sujetándose de sus escamas
–¿¡Estás loco!? - Respondió Ron, escéptico como siempre
–¡Es nuestra única salida!- Harry ya se encontraba en el lomo del dragón
Esa respuesta fue lo único que necesito Ron para motivar a subir al dragón como pudo, volteo buscando a Hermione, para su sorpresa ella ya se encontraba aferrada al dragón, no es que le pareciera la mejor idea del mundo pero como dijo Harry, no había muchas opciones, el dragón recién se dio cuenta que estaba sin ataduras, dio un fuerte rugido asustando a los magos y duendes que intentaban hacer algo, como pudo empezó a escalar el dragón
–¿¡¿Cómo pasaremos por ahí?! - Preguntó Ron asustado, era cierto, había escombros que obstaculizan su salida, como si el dragón lo hubiera escuchado lanzó un gran torrente de fuego acabando con todo lo que estuviera enfrente, sus 3 pasajeros se encargaban de quitar pequeñas cosas mientras él con su gran rugido se libraba de lo demás.
El banco estaba sumido en un gran caos, fuego por todos lados, no habían dejado de sonar rugidos del dragón a cada momento, ninguno de los magos ni duendes sabían que hacer, ¿lo más raro? 3 magos aferrados a sus escamas lanzando hechizos los cuales se veían insignificantes en comparación del fuego del dragón, con un gran ataque de fuego se abrieron paso al vestíbulo principal del banco, todos buscando cobijo para mantenerse seguros de el dragón, el cual con un gran cabezazo rompió la cúpula que cubría el techo, sacando su cabeza por la cúpula el dragón por fin pudo sentir algo de aire fresco, saliendo extendiendo sus alas como tanto había ansiado por tanto tiempo, batió sus alas a su vez que causaba una gran corriente de aire despegó, se tomó un momento para estar en el aire para después impulsarse y volar a gran velocidad
Los tres estaban aferrados a la piel escamosa, no estaban acostumbrados a volar tan alto, mucho menos sobre un dragón, no se compraba ni siquiera a volar encima de un Thestral.
–¿Cómo vamos a bajar de aquí? - grito el pelinegro azabache.
Hermione comenzó a ver a todos lados, pensando en una opción, hasta que vio hacia abajo y vio un lago.
–Ahí- señaló la bruja
–¡Estás loca!, ¿¡Cómo vamos a saltar!?
–No hay otra forma, Ron- dijo seria.- prepárense para caer en medio.
Un ruido llamó la atención de todos, que voltearon atrás para ver qué pasaba, de repente un corte diagonal apareció en el aire y se comenzó a formar una patrón de cuadrados pequeños, el cual se abrió dando paso a un portal. Se veía oscuro, ellos quería ver qué había, pero el dragón comenzó a moverse por el ruido, lo cual causó que los 3 se soltaran, cayendo al frío lago.
El agua salpicó, todos salieron a tomar aire, no tuvieron tiempo de recuperarse porque tan pronto como tuvieron visibilidad, vieron que del portal comenzaron a caer cosas, o más bien personas, intentaron nadar a un lado, lo cual no salió muy bien porque aun así cayeron justo sobre ellos, por suerte ninguno de aquellos chicos con ropas tan extrañas los había golpeado, unos momentos después comenzaron a asomarse las cabezas de estos
–¡Aaaaaah!- Grito Hermione asustada al tiempo que nadaba a un lado, una extraña cabeza de jabalí acababa de salir a lado de ella, con unos ojos azules saltones
–¡¿Que demonios fue eso?! - Grito el Jabalí con una voz bastante ronca, una que definitivamente quedaba con su cabeza
–Una técnica de sangre demoníaca seguramente - Respondió Tanjiro
–¿De que diablos hablas, Gopanchiro?- Pregunto Inosuke sin entender nada, lo cual no era raro tratándose de él, Tanjiro se ofendió porque nunca recordaba su nombre.
Esos extraños chicos comenzaron a hablar entre ellos en otro idioma, sonaba asiático pensó Hermione, el chico rubio estuvo a punto de responderles pero tan pronto como cayeron los chicos del portal, comenzaron a caer otros tantos, de nuevo intentaron quitarse del camino aunque como era de esperarse no funcionó del todo pues cayeron sobre ellos. Cuando salieron a la superficie, observaron que algunos eran mayores que ellos, todos se miraron extrañamente por un momento.
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Esperamos que hayan visto las tres obras en las que nos basamos para que entiendan, de todas formas, tratamos de explicarlo lo más que pudimos para la gente nueva, que igual nosotros no somos TAN masters en estos mundos.
Esta historia surgió tras una pequeña broma entre ambos sobre que deberíamos hacer un fanfic donde se conocieran los personajes de Demon Slayer, Violet Evergarden y Harry Potter, son obras que ambos conocemos, en especial Harry Potter y recientemente Violet Evergarden y Demon Slayer, al final la idea pese a sonar rara y chistosa, terminamos por escribirlo, esperamos sea de su gusto y lo compartan si conocen a alguien que podría gustarle o conocer algo nuevo.