Los personajes pertenecen a la maravillosa J.K. Rowling. Esta Fanfic es sobre mi pareja favorita.

Después del baile de Navidad, quedaron varias cosas claras. Tanto para Ron como para Hermione, era evidente que esa noche había sacado a la luz algo que quizás ellos ya sospechaban, y empezaban a confirmar: que sentían cosas el uno por el otro.

En el caso de Ron, había dejado de lado toda su admiración por el gran Viktor Krum, su máximo ídolo deportivo, por el que unos meses atrás casi se le caía la baba. En cambio ahora, después de verlo junto a Hermione en el Baile de Navidad, tenía sentimientos un tanto oscuros hacia él. "Le pegaría si lo tuviera en frente ahora mismo. ¿ Por qué tenía que escoger a Hermione, justo a ella?", pensaba. Pero, ¿por qué le había molestado que la invitara a ella al baile? ¿Acaso era Hermione su novia? No, era solo su amiga... estaba en todo su derecho. Aún así le molestaba. ¿Por qué le molestaba? Tal vez Ron aún no estaba preparado para admitir que sentía cosas por Hermione, que él quería ser algo más que un amigo para ella, y que no solo en el baile, sino siempre, la encontraba hermosa. Ron aún no estaba del todo listo para admitir sus sentimientos hacia ella, pero su mente empezaba a inquietarlo.

En el caso de Hermione, las cosas eran difíciles desde luego. Había asistido al baile de la mano de quizás el chico más codiciado de todo el Torneo de los tres magos. Atrás de Krum había siempre un grupo de chicas que querían su autógrafo y reían como tontas. Ella no era así, por supuesto. Estaba contenta de que él la encontrara especial, pero aún así no era del todo feliz. Después de todo, ella deseaba que Ron, con el que se peleaba siempre a pesar de ser su mejor amigo (junto con Harry), la hubiera invitado. Ron había reaccionado muy mal esa noche, la había hecho sentir una traidora. Pero en el fondo, a ella eso la hacía sentir un tanto feliz: Ron estaba enojado de que hubiera ido con otro que no fuera él. Aún así había detestado que no la hubiese tenido en cuenta a la hora de elegir pareja, que fuera su último recurso.

La noche había terminado no de la mejor forma, pero confiaban en que al día siguiente todo volviera de a poco a la normalidad. Pero algo sentía Ron que debía cambiar. Sabía que con esa actitud, no lograría que Hermione lo viera como algo más que un amigo. Había hecho un papelón gritándole y haciéndola sentir mal. Estaba enojado, pero eso solo empeoraría las cosas.

-Hola- saludó Ron cuando se unía a Harry y a Hermione en el Gran Salón para desayunar- Pásame las tostadas- le dijo cortantemente a Hermione.

- Perdona, que hayas amanecido mal no te da derecho a pedirme las cosas de ese modo- respondió ella enojada, y le pasó la cesta del pan de mala gana.

- Estoy muy cansado de anoche y no tengo ganas de aguantarlos, así que o se callan o me voy a desayunar solo- intervino Harry. Estaba harto ya de las peleas de ambos, a pesar de que ya era habitual en los últimos años.

- Ya, lo siento- se disculpó Ron- Perdóname, Hermione. Dormí mal y no tienes la culpa.

Hermione se sorprendió ante aquella reacción, puesto que Ron no era precisamente el tipo de persona que pedía disculpas por cada vez que hacía algo mal. Le hizo un gesto sonriendo:

- Está bien, Ron- veo que anoche no fue el mejor día para ninguno de nosotros. Hoy tenemos el día libre, intentemos pasarla bien, ya que pasaremos las vacaciones de Navidad aquí en Hogwarts y si vamos a pelear todo el tiempo terminaré lamentando no haberme vuelto con mi familia hasta después de año nuevo.

- Cierto. Podríamos salir hoy, aunque hace un frío de locos... o quedarnos en la Sala Común, jugando al ajedrez o charlando- dijo el pelirrojo, decidido a ser amable con Hermione. No quería volver a verla al lado de Krum, y sabía que si la trataba mal ella se iría a los brazos del búlgaro.

- Me encantaría, pero tengo reunión con los integrantes del Torneo de los tres magos. Quieren hablarnos de no sé qué y hacernos entrevistas con la tonta de Skeeter. Lo siento, pero me llevará casi todo el día- dijo Harry, de mala gana.

De manera que ese día sería solo de Ron y Hermione.

Luego de que Harry se despidiera, Ron y Hermione quedaron solos en la Sala Común. Estaba llena de estudiantes, puesto que en esas navidades casi todos los de cuarto para arriba se habían quedado por el baile de navidad.

- ¿Quieres salir a caminar un rato afuera, Ron? Sé que hace frío pero para salir de tanta gente un rato. Luego si quieres podemos volver y jugar ajedrez, aunque sabes que soy malísima- dijo Hermione.

- Vamos, podemos ir a pasear por el lago o ir a la cabaña de Hagrid, si es que se ha recuperado de todo el alcohol de ayer- dijo Ron riéndose.

Salieron, bien abrigados, a los nevados terrenos de Hogwarts. Llegaron al lado, se sentaron en unos bancos cerca de la orilla. Hermione empezó a lanzar llamas de su varita, para crear un ambiente más cálido alrededor de ellos. Era muy diestra en ese encantamiento.

Ron había meditado y quería enmendar su error del día anterior. Aunque no quería admitir sus sentimientos por Hermione, estaba ahí, junto a ella. Después de verla tan hermosa con ese vestido, ese peinado. La veía como a una chica. Le gustaba, le costaba admitirlo, pero con ella, a pesar de pelearse regularmente, se sentía completo.

-Hermione, sé que ayer me comporté como un idiota.

- Bueno, veo que lo has admitido. Debo admitir que me sorprende, tanto en el desayuno como ahora estás siento amable conmigo- dijo ella con su tono severo de siempre.

- Si quieres soy el mismo tonto de siempre, eh. Hablando en serio, lo siento. Siento haberme enojado, realmente si querías ir con Krum estabas en tu derecho. Pero es que no lo soporto al muy idiota.

-¿ de qué hablas? Hasta hace unos días era tu máximo ídolo. No te comprendo, Ronald.

- Da igual...

- No, no me da igual. ¿Acaso hizo algo que yo no sepa?

-No, pero no quiero que estés con él solo porque es famoso.

- ¿ quién te ha dicho que estoy con él? Mira. Entre Viktor y yo no hay nada. Aunque no tengo pot qué darte explicaciones. Quizás él sí quiere algo conmigo, me lo dio entender anoche. Pero yo... no quiero algo con él.

Ron se alivió y se sonrió aunque no pudo evitar preguntar:

- De verdad? Hermione, sí me interesa, porque eres mi amiga. Y como es el centro de todas las chicas, supuse que querrías algo con él, sería lo lógico.

- A mí no me gustaría estar con alguien solo porque es guapo. Creí que lo sabrías. Yo quiero estar con alguien cuando esa persona me enamore.

- No, si en eso estamos de acuerdo...- Ron la miraba y sentía cosas que lo asustaban. Tenía ganas de abrazarla.

Pasaron una tarde agradable y volvieron al castillo. Sin peleas. No estaban listos, pero ambos empezaban a sentir cosas el uno por el otro.