—¡Por favor, no te los lleves!—
Dos Sparklings lloraban desesperadamente mientras un robot adulto los cargaba entre sus brazos.
Las lágrimas de aceite salían de sus ópticos y cada gota caía sobre sus placas faciales, de manera desconsolada y angustiada querían soltarse, moviendo sus pedes lo más rápido que podían, o intentaban, para correr hacia lo que fuera que hubieran querido estar a su lado en aquel momento de miedo y confusión.
—¡No!— El gemelo de fuego, Jetfire, despertó del sueño que parecía ser más una pesadilla.
Sus ventiladores estaban funcionando de manera más rápida en su sistema interno, lo que indicaba que se encontraba exhausto y jadeara hasta volver a su "respiración" normal.
Debido a los fuertes sonidos que produjo Jetfire al despertarse de manera repentina, su hermano, Jetstorm, despertó de su recarga notando que al parecer Jetfire habría sufrido otra pesadilla más, sí, el joven youngling.
—¿Fue otra vez, hermano?— Preguntó Jetstorm bajando de su placa de recarga, se dirigió a la de Jetfire y se sentó a su lado posando su mano sobre el hombro del contrario, observándolo preocupado mientras le intentaba calmar.
Jetfire, ya más tranquilo, suspiró y miró a la nada pensando en aquellas imágenes borrosas, se acomodó y agachó la cabeza.
— Sí hermano, aparece siempre, es como... si me llamara— Miró a su hermano observando a detalle la mirada sorprendida de su gemelo.
— Acaso, ¿Es aquél en el que éramos pequeños?— preguntó curioso.
Antes de que Jetfire le respondiera, la puerta de la habitación se abrió. En un instante de tan solo unos segundos ambos robots se levantaron y se formaron rectamente con un saludo militar ante el robot que se encontraba delante de ellos.
—¡Ya descansaron los suficiente, bellas durmientes, más les vale ir a los controles de la nave! ¡¿Me oyeron?!—
Ante las palabras del robusto robot azul, ambos gemelos respondieron fuerte y claro.
—¡Si señor Sentinel Prime!—
Dijeron en unísono como siempre era de esperarse entre estos dos.
Sentinel Prime era su jefe y quién era encargado de vigilar y verificar el trabajo que hacían sus dos soldados, entre varios robots de los cuales a entrenado, solo pocos eran admitidos a la "Guardia Elite", una organización de los cuales solo los mejores robots de la academia eran admitidos. Aunque, el caso de ellos era diferente.
Dentro de la sala de control, todos estaban en sus respectivas labores, Jazz, encargado de verificar alguna posible llamada de comunicación desde Cybertron, Sentinel estaba sentado en el asiento del líder, comprobando que las labores de sus soldados se encontraran en orden.
—¿Ya faltara mucho? Me voy a oxidar del aburrimiento— Jetstorm con una mueca apegado al manubrio de control, se quejaba mientras observaba de manera tediosa el gigante cristal que mostraba las millones de estrellas que resplandecían en lo más lejano de la galaxia.
Una pequeña risa salió de Jazz —Solo hay que relajarse y apreciar el paisaje que tenemos enfrente—.
—¡Podrían dejar de perder el tiempo y concentrarse! Nuestra atención está en el traidor Waspinator— Regañó Sentinel, las preguntas continuas de los younglings le volvían loco.
En un satélite cercano a la tierra, más conocido como la luna...
A lo lejos el sonido de una voz un tanto distorsionada, se escuchaba por las metálicas paredes de una nave colisionada.
—Cualquiera que lo encuentre, obtendrá una buena paga, Megatron fuera.— Se escuchaba la voz del mech en la pantalla que había en la nave, luego de que la comunicación del mensaje sea cortada, una risa frenética había salido del seeker que yacía sentado jugando con unas esposas de estasis.
— Ofrece todo lo que quieras, Megatonto, estoy tan cerca y tan lejos de este planeta inmundo— dijo sonriendo con malicia, pero luego su sonrisa se desvanece — Si no fuera por esa escoria de Autobot, el AllSpark sería totalmente mío... de todos modos, tengo otros planes—.
La destrucción del AllSpark provocó una gran onda expansiva de energía por toda la zona en la que se encontraba Detroit, uno de los fragmentos se había incrustado en el seeker durante la batalla, en el momento que había sido destrozado, ahora el seeker, Starscream, tendría una nueva misión, buscar más fragmentos.
— "Nos aproximamos al planeta tierra, protocolo de preparación para el aterrizaje: activado"— el sistema de la nave dio el aviso a la guardia elite.
—¡Tomen posiciones soldados, rápido!— ordenó Sentinel, levantándose de su asiento para dirigirse a la puerta principal de la nave junto con sus tres soldados.
El aterrizaje fue un éxito, exactamente en la base de los Autobots de Optimus Prime quiénes habían detectado su acercamiento desde lejos.
Las compuertas se abrieron dando paso a la guardia elite para bajar y pisar el suelo del planeta, fueron recibidos por el equipo de Optimus.
— Así que nos vemos de nuevo Optimus— Sentinel fue el primero en presentarse con aquella esencia arrogante de siempre, el nombrado lo recibió con una mueca de disgusto que todos habían notado, se sentía esa ligera tensión entre esos dos.
Jazz había saludado con gusto a Prowl, dando un leve apretón de manos.
—Es un gusto verte nuevamente— dijo el robot ninja oscuro con una sonrisa de lado a Jazz.
Ratchet solo observaba con aquel semblante serio que destacaba el robot y para el pequeño buscador Bumblebee, tuvo la poca suerte de recibir a los curiosos y revoltosos gemelos que se habían acercado a él.
—¡Mira hermano, es demasiado pequeño!— dijo Jetfire a su gemelo apuntando al abejorro.
Jetstorm agarró a Bee sin problemas como si se tratase de un muñeco de trapo.
—Incluso es más pequeño que el señor Prowl— respondió Jetstorm.
—¡Este no es el tipo de saludo que esperaba!— Se quejaba Bee, sacudiendo sus pedes e intentando soltarse del agarre del gemelo azul.
De pronto una jovencita humana apareció corriendo de la base —¡Oigan bajen a mi amigo!— ordenó la pequeña apuntándolos de una manera amenazadora.
Para sorpresa de ambos gemelos, ver por primera vez la presencia orgánica los alarmó, pegando un grito mientras soltaron a Bumblebee, éste sonrió agradeciendo de que llegara su amiga justo a tiempo.
—¡Fiu! Gracias Sally— dijo el pequeño mech a su amiga.
—¡Cuidado! ¡Puede contagiarlos!— gritaron en unísono ambos hermanos, cosa que llamó la atención de los demás y Jazz tuvo que socorrer a calmarlos.
—Relájense un poco chicos, ella es Sally y es una humana, los orgánicos aquí no son amenaza— tranquilizó a ambos gemelos, los cuales, estos se acercaron a él, era como un gran cuidador y maestro para ellos, confiaban en sus palabras —Bueno son nuevos en esto, pero se les pasará, lamento lo ocurrido son algo... revoltosos— dijo Jazz a Bumblebee y a Sally mientras los gemelos seguían observando a la humana.
Sentinel y Optimus dejaron esa tensión de siempre y se dispusieron a entrar al cuartel de Optimus, claro que todos los demás los siguieron.
El tema que debían informar es sobre el escape de Waspinator y que su localización se encontraba en este planeta, más específicos en la zona de Detroit, la búsqueda duraría varios días y necesitaban la ayuda del equipo de Optimus ya que ellos estaban más familiarizados con el lugar y les serviría de mucha utilidad.
—Tendremos que separarnos en dos grupos, buscaremos por las afueras de la ciudad y por la isla dónde están los Dinobots y- — dijo Optimus.
—Voy a suponer que será tu equipo de mantenimiento en un lado y el mío en otro lado— Sentinel interrumpió al camión de bomberos.
Optimus nuevamente miró con fastidio —También tenemos la misión de buscar los fragmentos del AllSpark, ¿puedes entender es también, Sentinel?— con una mirada fulminante observó al mencionado y claro que este enseñó los dientes como muestra de ira.
Estos dos estaban por dar comienzo una pelea, pero Bulkhead junto con Jazz los intentan separar.
Otra discusión volvería a pasar que mantendrían ocupados a casi todos, si, casi todos.
Los gemelos se encontraban en otro tipo de situaciones, unas más internas.
Desde que llegaron a aquel planeta, una extraña sensación incomprensible había sido presenciada en sus sparks, como si algo los estuviera llamando desde muy lejos.
—¿Tú también lo sientes, hermano?— Jetfire fue el primero en hablar, mirando a Jetstorm y viceversa.
—Es... extraño...— murmuró Jetstorm.
— Es... como...—.
—Si... una—.
—... sensación...—.
—...Bastante...—.
— Familiar — dijeron ambos en unísono.
