PARTE UNO: ÁNGEL CAÍDO

C e r o

«¿Deberemos cifrar nuestro anhelo en dejar de existir?

¡Triste anhelo! Porque ¿quién querría perder,

por más que estén llenos de dolor, esta sustancia intelectual,

estos pensamientos errantes a través de la eternidad

para perecer sepultados y perdidos

en las anchurosas entrañas de una noche increada,

privados de sensación y movimiento?»

MILTON, PARAÍSO PERIDO

Apocalipsis. Vacío. Olvido. Libertad. Muerte. Todo es lo mismo.

Hay una muerte temporal, si es que puede llamársele así. Porque no es una muerte, sino una transformación. Una metamorfosis. Un segundo respiras y, al otro, también, sólo que en otra vida. Una vida nueva sólo para ti, con todos a los que una vez amaste. Pero, no los recuerdas. Nunca recuerdas, pasas vida tras vida, reencontrándote siempre con ellos. No hay destino, sólo predestinación.

Hay unos que recuerdan todas sus vidas. Pero, no es una dádiva. Es un castigo, son aquellos que lo pierden todo. Una y otra vez, por la eternidad. Un infierno digno para esos pecadores, cuyo pecado no fue sino amar. Amar hasta sacrificar mundos enteros, si fuera posible. Traición, egoísmo. Ellos son quienes conocen otra muerte, una muerte eterna.

La pérdida del alma en la nada. Sueñan con ella, ruegan por ella. No parece tan mala como su condena. Porque es una agonía eterna, que haría llorar incluso a los dioses. Contemplar todo lo que no pueden tener, amar todo lo que no pueden salvar.

Como esos ojos verdeazulados, que no pudieron volverse suyos. Tuvo que verlos apagarse sin haber dicho ese murmullo de siempre. Habría dado todo por salvarlo, por remediar aquel odio. Nunca fue para él más que su capitán. No importa, se dijo, ya después lo sabrá. Aunque, una voz susurrara ¿estás seguro? ¿y si esta fue a última? Entonces bramaría y rogaría por una más, sólo una más. No podía terminar así.

Lo amó desde el principio. Era un alma inquieta, más brillante que todas las otras, hermosa, repleta de vida. Estaba ansiosa por irse. Ya iba siendo tiempo de que fuera su primera vida. Levi era su ángel maestro, lo que significaba que diría cuando estuviera preparado. Y Eren todavía no lo estaba. Aunque se enfurruñara y resoplara, no se dejaba conmover.

−¿Qué me hace falta? –Preguntaba, casi llorando. –Ya estoy listo.

−Todavía no. –Respondía solamente.

A veces le traía un copo de nieve, una hoja seca, un poco de tierra mojada o de agua salada. No le gustaba que estuviera triste y con sus obsequios parecía alegrarle. Eren se fascinaba escuchándole hablar del océano, así como de las estaciones y de los paisajes. Era tan simple hacerlo feliz. Le parecía tan inmaculada esa sonrisa.

−No todo será así. –Le advirtió una vez, preocupado. Eren miraba asombrado unas caracolas que le había traído, eran de color rosado y dorado. –Habrá dolor, vas a sufrir. Es parte de la vida.

Él lo sabía. Habría mucho sufrimiento, tanta maldad que podría hacerle daño. Los humanos se habían vuelto corruptos, egoístas y sanguinarios. No deseaba que su protegido conociera ese dolor. Pero, también sabía que debía hacerlo.

−Lo sé. –Respondió con una mirada decidida y firme. –Lo afrontaré, valdrá la pena.

Tuvo que dejarlo ir. Eren se fue y vivió con toda intensidad, amó con todas sus fuerzas. Y él se quedó mirándolo crecer y volverse fuerte. Pero, no lo suficiente. No tan fuerte como una turba de gente que lo acusó de brujería y quiso humillarlo, torturarlo, matarlo. Fue más de lo que pudo soportar. De esa forma, Levi transgredió y arrasó pueblos enteros como un furioso ángel destructor. Lo amaba, quería salvarlo, no de la muerte, sino de que fuera roto y arruinado por la humanidad.

No deseaba que se manchara, que aquel espíritu se rompiera. Así que cayó y fue castigado. Porque un alma no vale más que un centenar de ellas, o eso dijeron. También que su amor era nefasto y repulsivo. Que un amor verdadero era puro y digno. Pero, ese amor fue todo lo que Levi conoció. Todo lo que seguía conociendo.

.

¡Hola! Me llamo Inad y esta cuenta la abrí recién hace poquito. Por razones equis, decidí comenzar en Fanfiction desde cero y bla, bla. Ahora, la historiaaaaa. Quisiera saber si les gustó esta idea, si es que alguien leyó, jaja.

Empezó con una intro bien cortita, pero, como es predecible, los primeros capítulos tratarán de como Eren y Levi reencarnan y siempre ocurre una tragedia que les impide estar juntos. La pregunta es ¿podrán romper ese círculo vicioso?

Si les interesó, no duden en hacérmelo saber y seguir la historia. Muchos besitos.