Simplemente genial. Había aceptado la invitación de Sasori, un compañero de la Universidad, de venir a la fiesta que había organizado en su casa. No me desagradaba el tipo solo que yo prefería pasar tiempo con su hermana, la pequeña Sakura de 18 años, que andar rodeado de los mismos rostros que veía diario en clases.
Desde que llegue busque a la pelirosa pero no la encontré, a lo mejor no estaba en casa.
Fui a la cocina para tomar una cerveza, los amigos de Sasori la había invadido, una pareja se besuqueaba en la barra. Destapé la cerveza y salí de ahí. Al fondo del pasillo vi una mata rosa sacar una maleta de un closet. Le costó trabajo hacerse de ella, pero al final la empujó a su habitación. La seguí con la mirada, traía una playera de tirantes y short corto, sin siquiera pensarlo la seguí, sabía que no debería hacerlo, no debería invadir su privacidad.
Abrí un poco la puerta donde le había visto entrar. Su habitación, muy a su estilo princesa, algo muy tierno.
La vi echada en cuatro tratando de cerrar la maleta, la vista de su trasero levantado fue algo que no me esperaba. Era pequeña, pero con buenas curvas, desde hace tiempo su inocencia me estaba costando concentrarme, coqueteaba conmigo sin saberlo y yo estaba cayendo ante ella. Había escuchado rumores que un tal Kiba estaba conquistándola, pero nada era seguro.
Mire con atencion como el short de algodón marcaba y apretaba un poco su hermoso trasero. Se trasparentaba el encaje de sus bragas bajo el short. Sentí mi vientre arder.
Una vez más sin pensarlo cerré la puerta tras de mi sin hacer ruido. Cegado por el deseo, por la ansiedad puse una mano en su nalga, la sentí tensarse, se giró a ver quién era, al parecer no era la persona que esperaba porque al verme soltó un chillido.
Su rostro no reflejo horror,
tal vez un poco de miedo, pero su vergüenza era la que dominaba sus emociones.
-Sasuke- susurro nerviosa. No me alejó, ni se levantó solo se quedó mirándome. Me mordí la lengua debatiéndome en que hacer, podía bajarle el short y acariciarla o simplemente dar la vuelta e irme. Por tercera vez no obedecí la razón y en un rápido movimiento puse mi otra mano en su otra nalga y las apreté.
- ¿Qué ... que crees que ... estas haciendo? - su rostro enrojeció. Apreté más y más su trasero, quería escuchar un gemido de sus labios-Sasuke ...- después de varios apretones oí el ansiado gemido.
Aproveché su aturdimiento para bajar de un tirón su short, sus bragas formaban media luna en cada nalga. Esta vez las separé y apreté. La miré hipnotizado encantado del temblor de su cuerpo.
- ¿Qué haces ...- la callé al acariciar con un dedo su pequeña entrada cubierta, con un solo toque sentí mojada la tela? Me calenté aún más de saber que mis caricias le gustaban.
"Por favor" deseé en silencio "Mírame. Mira el deseo que tengo por ti".
-Sakura ... Sakura- me quité la chaqueta que llevaba-Estas mojada ... aquí- le acaricie mientras le hablaba en susurros.
-Y ... y eso que ...- trató de sonar desinteresada.
-Te mojaste muy rápido- suspiré -¿Te has aguantado mucho tiempo? - sus ojos se abrieron de vergüenza.- yo te puedo ayudar con esta sensación-Negó una y otra vez
-Estas ... loco- dijo sentándose en la cama
-Por ti- me acerqué poniendo ambas manos en el borde de la cama.- sabes lo loco que me traes- me acerqué a su rostro
- Yo ...
-Acepta mi ayuda - supliqué- acabo de despertar tu cuerpo y no creo que tu solita lo soluciones.- sus mejillas se pusieron todavía más rojas "mi niña, seguro le daba vergüenza acariciarse y no conocía su cuerpo"
-Yo ... yo no ... - ella estaba perdida en mis palabras que no me vio acercarme más.
-No haré nada para asustarte- deseosa le di un pequeño beso a su hombro descubierto.
-Sasuke ...
-Solo te quiero complacer ... solo te acariciare con mis manos ... y te besare.
-Esto no ... yo ...
-Esto no será nada- acaricie su mejilla- terminando todo será como antes, yo te insistiré por un acoston, tú me sonreirás y me rechazaras.- bese suavemente su mandíbula - deja que te haga sentir mejor .
soltó un suspiro y yo lo tomé como una afirmación.
Recargue mi peso sobre ella para acostarla. Me deshice de su braga y playera dejándola completamente desnuda. La admiré de pies a cabeza, su pelo rosa, sus bellos ojos verdes, sus pechos no tan pequeños, su vientre plano, sus caderas curveadas, sus piernas delgadas per fuertes. La palma de mi mano por su ombligo hasta la mejor parte, su intimidad, casi depilado que aún cubría la parte baja de su entrada cosa que me sorprendió.
-Nunca he estado con nadie que no estaba depilada por completo- susurre
-Yo ... yo no soy como las demás- dijo frunciendo el ceño
Me reí por su comentario, ella era todo lo contrario a una de mis mujeres, sin embargo, todo el mundo creía que era una salta camas. Solo pocos sabíamos cómo en realidad era ella.
-Me gustas más así- jale un poco su vello sacándole un quejido.
- ¿A Kiba como le gusta? - pregunte sin pensar. Sus ojos se tornaron enojados, entonces supe que con nadie había estado desnuda.
Me deshice de mis zapatos y desbroche mi camisa dejándole ver mi tatuaje de fénix que abarcaba todo mi pecho.
Ella me miraba temerosa, pero la calme con una sonrisa. Sosteniéndome de mis rodillas toque con mis labios su cuello, chupaba un poco su piel para seguir avanzando. Me aseguré de dejar motas rojas, era vulgar, pero sabía que se excitaría después al verlas.
- Sasuke ...- susurro avergonzada
-Sh sh calla niña- bese el inicio de un pecho y lamí su pezón haciéndola crisparse. Seguí con su otro pecho dejando su piel húmeda.
-Abre tus piernas Sakura- dije ansioso.
-No ...- apretó más sus muslos, pero eso solo aumentó su placer, soltó un gemido que me enloqueció.
-Abre- repetí. Esta vez ella obedeció.
Me endurecí de solo verla, su pequeña entrada estaba empapada. Solo de verla sabía que estaba muy cerrada -Mírame. - ordené
Cuando lo hizo metí dos dedos a mi boca, ante su vista los lamí dejándolos llenos de saliva y manteniendo su mirada llevé mis dedos a su entrada. Metí la punta de un dedo comprobado que estaba muy apretada a pesar de lo empapada que estaba por dentro.
- ¡Oh! - trató de alejarse, pero se lo impedí
-Tranquila mi niña, no te voy a lastimar- bese su cuello para relajarla.
-Duele ...- chillo cuando metí mi dedo por completo
-Siento tu barrera- mordí el lóbulo su de oreja- Nadie te ha cogido- ella negó conteniendo una lágrima- Eres tan hermosa, tan pequeña, tan pura- susurre sin dejar de mover mi dedo. Lo alce un poco y ella gimió
-¿Te dolió? - negó con los ojos apretados- Este es tu punto g pequeña, cuanto te sientas sola o ansiosa tócate aquí, así- repetí el movimiento una y otra vez para que ella reconociera el lugar exacto.- con un dedo basta pequeña- metí la punta de un segundo dedo y poco a poco también entró.-Estas empapada ... me encanta- lamí su mandíbula.
-mmmm- se mordió el labio aguantando sus gemidos- Jamás lo haré ... es vergonzoso- susurró
-no es para que te de pena - le sonreí con ternura- es ... placentero y satisfactorio
- tu ... tú lo haces ...?
-a mí mismo, no- bese su cuello- pero me gusta complacer a mi compañera de cama y ella a mi
-Es vergonzoso- afirmó desviando la vista.
-De acuerdo lo es pero eso te excita- le seguí la corriente para no perder el ritmo.
-No es ... oh- la callé moviendo en círculos mis dedos. Sus pequeñas manos rodearon mi cuello y acalló un grito en mi pecho desnudo. Sus paredes me apretaron, seguí moviéndonos hasta que dejó de apretarme.
Soltó mi cuello regresando su cuerpo a la cama. Sus ojos me miraron con reproche y satisfacción. Aproveche su atención para llevarme los dos dedos empapados de su crema a mi boca, los lamí y los separe para que ella pudiera ver los viscoso que era y como yo lo tomaba con mi boca.
- ¿Terminaste? - trató de enderezarse, pero la detuve.
-No he terminado. Tu cuerpo sigue pidiendo más.
-Tonterías- chillo al verme desabrochar mi pantalón.
Me senté en la cama y le tendí la mano. A pesar de su mirada de enojo se acomodó sobre mí a horcajadas.
-Estas cumpliendo una de mis fantasías, ¿sabes? - ella solo se sonrojo, pero no dijo nada.
Bese su mejilla mientras acariciaba sus nalgas, eran tiernas redondas.
Acaricie su clítoris hinchado haciendo que se agarrara de nuevo a mi cuello. Gimió en mi oído empapando mis boxers. La sentí temblar y me detuve.
- ¿Quieres saborearte? - le pregunté oído. Abrió los ojos sorprendida. Saque mi dedo de su interior y se lo acerque a la boca. Ella se alejó, pero yo fui más rápido, y embarré una buena porción en sus labios. Reí al ver su rostro asqueado.
-A mí me gusta mucho tu sabor- me acerqué. -Déjame limpiarlo.
Gimió al sentir mi lengua chupar los restos de nata, limpie cada tramo para luego invadir su boca. Esparcí su nata en su lengua asegurándome que la probará.
-Sasuke ... no- me alejó de su pequeña boca.
-Tranquila ... volvamos a lo que estábamos. - Baje mi mano a mi cierre y busque mi erección, la punta estaba húmeda, ansiaba hundirme en ella.
-Mira cómo me pones- le sonreí
- ¿Qué vas a ... oh mmm oh- moje su pequeño arito trasero? Me moví en círculos sobre él hasta que logré meter la punta de un dedo
-No no Sasuke ... estas ... yo ... oh- escondió su rostro en mi cuello
-Sucio ... sucio- me recriminó
-sh sh disfrútalo. No sabes cuánto deseo tocar este arito con mi lengua- le hablaba sucio para molestarla pero para excitarme a mí. Metí todo el dedo y lo moví en círculos luego en zigzag. Metí un segundo dedo y repetí los movimientos, metiendo los hasta chocar con mis nudillos
-Me arde- chillo al sentir el dedo intruso acelerar los movimientos.
-Ya se pasará pequeña. Aquí también te puedes tocar, solo la puntita o puedes meter todo el dedo, uno o dos- ella negó escandalizada. - ¿Más rápido? - sin esperar respuesta, penetre su entrada dejándolo ardiente y rosado.
-Ah! - se aferró más a mí, subiendo su pelvis restregándose a mí con fuerza, sentí sobre mi abdomen bajo la humedad por su nata.
Saque mis dedos con cuidado de no lastimarla.
-Sasuke- llamé sollozando.
-Ya casi acabo pequeña- dije deseando sentir un orgasmo producido por su cuerpo. -Mírame- lamí los dos dedos que había tenido en su trasero, ella me miró horrorizada.
-Por ... por qué haces eso? - tomo mi mano para detener mis lamidas-Es sucio ... donde los metiste-
-Me gusta- seguí lamiendo mis dedos- Saber que lo que estoy lamiendo es producto de tu orgasmo por mis dedos.
-Es ... horrible ...
-No no mi niña no lo es- ignoré su desagrado y me quité la camisa. Vi su cara de asombro.
-No había visto tu tatuaje completo- se ruborizo
-Tócalo- tome sus manos y las coloque sobre el fénix. Su dulce tacto me hizo desfallecer- Te haré correr una última vez- besé su comisura.
Puse mi erección contra su pelvis y lo empecé a subir y bajar. Su humedad bañaba mi miembro al resbalar.
Metí dos dedos en su centro y al poco empezó a gemir, su cadera se restregó sobre mi piel causando que sus jugos resbalaran. Acelere mis movimientos, mi cuerpo igual estaba al máximo, iba correrme de solo darle placer a Sakura.
-Déjame besarte- suplique en su oído- por favor.
Ella estaba tan sumida en el placer que no me respondió solo acercó sus labios a mí. Era tan inexperta como suponía. Cuando sentí su vagina cerrarse ella gritó en mi boca, su humedad explotó en mi piel haciéndome correrme también. No pude evitar mover mis caderas causando un segundo orgasmo la alcanzada. Nuestras bocas entrelazadas prohibían el paso de algún gemido o grito. Sus brazos rodearon mi cuello mientras sus manos se hundían en mi cabello.
Sabía que en cuanto ella saliera del trance me correría de su habitación. Doloroso pero cierto. Ella no sintió nada por mí, a pesar de haber cedido a mis caricias no hubo sucedería nada. Poco a poco frenamos el beso, nos quedamos viendo por unos segundos hasta que ella habló.
-Te ... te corriste? - preguntó sorprendida.
- Si, con solo sentir tu cuerpo temblar me hizo explotar.
-Sasuke ... yo ...
-Sh sh no digas nada, ya lo habíamos hablado ¿no? Esto no fue nada- ella asintió cabizbaja. La coloque en su cama, le di un último vistazo antes de ir al baño y lavarme y acomodar mi ropa.
Cuando regrese ella ya estaba vestida y acomodaba sus maletas.
-Debo irme- dije tomando mi
chaqueta -Espera- Sakura corrió a mí, se puso de puntillas y me besó, fue tan dulce que creí desfallecer, su pequeña lengua tocó torpemente la mía. Tan inexperta que yo tome el mando de la situación. El beso subió de tono hasta que lo rompimos para tomar aire.
-Gracias- susurro y sonrió. La vi correr al baño. Discretamente salí de su habitación, me fijé que no nadie de su familia estaba cerca. Rápido me despedí de Sasori y emprendí el viaje regreso a mi apartamento.
Todo el camino pensé en lo sucedió. ¿Qué había pasado? ¿Qué había sido ese beso al final? ¿Realmente Sakura no sintió nada por mí?
Subí el volumen de la radio, se escuchaba "Ride" SoMo.
Cuando menos me di cuenta ya estaba llegando a casa. Mi compañero de piso, Naruto no estaba, seguro él se la estaba pasando mejor con su novia retozando por ahí.
Fui al baño y en lo que me preparaba para tomar un baño vi que tenía cuatro mensajes. Al ver el emisor se acabaron mis dudas.
... La dulce e inocente Sakura me había mandado mensajes ya no tan inocentes diciéndome cuando volvería y todas las cosas sucias que esperaba que sucedieran.
Quien sabe quizá no había sido tan mala idea ir a la fiesta de Sasori.
¡Hola!
Hace años que no publico en esta pagina. Espero que les guste y que se haya subido bien la historia, la escribí en el celular mientras escuchaba "Ride" de SoMo.
_¡Ayer me llego un comentario sobre ... el modo en que actuaba Sakura ... de 18 años :) Sonará como ustedes quieran pero en este extraño y diverso mundo se encuentra de todo y yo Sí que me he encontrado personas así de ingenuas e inocentes! De echo me inspiré en el personaje de Faith de "La Salvación de Gavin".
Chicos y chicas la gente inocente 18 años existe. ;)
