Disclaimer: Ninguno de los personajes me pertenece, le pertenecen a Mo Xiang Tong Xiu de su novela MoDaoZuShi (Grandmaster of Demonic Cultivation)

Como nota antes de leer, se centra mayormente en los eventos descritos en el live action, The Untamed, pero toma algunas cosas de la novela.

«¿Cómo accedí a toda esta locura?»

Los pensamientos de Jiang Cheng son dramáticos y lo hacen sonar como si estuviera a punto de aventarse a la oscuridad de un fantasma de agua o de pelear contra un cadáver reanimado sin tener a Sandu o Zidian en su poder cuando en realidad, solo está caminando con Jin Ling a su lado.

Incluso aunque no se atreva a decirlo, Jiang Cheng reconoce que su vida ha mejorado considerablemente después de reconciliarse con su hermano. Tener un conversación propia con Wei Wuxian le dio la oportunidad de cerrar uno de los capítulos más largos de su vida. Ese día, después de que Jin Ling y él volvieran de Descanso en la Nube, se pasó horas en su salón ancestral hablando con su familia.

Le contó a Yanli cada detalle de la boda y la estúpida sonrisa feliz que Wei Wuxian tuvo en todo momento mientras miraba a su ahora esposo y hasta le habló de la conversación que tuvieron antes de que se fuera, terminando con una larga y orgullosa plática de lo fuerte que Jin Ling era y los amigos confiables que ahora tenía. A sus padres les habló de lo mucho que había estado trabajando para que la gente respetara a su secta tanto como lo habían hecho cuando ellos vivían.

Jiang Cheng durmió aquella noche como hacía mucho no lo había hecho. En lugar de tener pesadillas donde veía a su hogar quemarse y a los cadáveres de sus padres y hermana viéndolo con resentimiento, soñó con recuerdos buenos que tuvo a lo largo de su vida y por primera vez, los vio con una sonrisa en lugar de odio y ese es el mayor cambio.

Actualmente, ha pasado un año desde que Wei Wuxian y Lan Wangji se casaron y aunque no puede visitarlos tan constantemente porque está muy lejos y él tiene trabajo, recibe actualizaciones constantes en cómo está y cómo lo trata la vida ahora que es visto como un miembro de la secta Gusu Lan que debe obedecer todas las reglas, cosa que no hace. Jiang Cheng responde cada una de ellas y aunque se la pasa quejándose de que tiene más trabajo y que no debería de estar perdiendo el tiempo respondiendo sus cartas, secretamente ignora el resto de trabajo para contestarlas primero y deja órdenes claras que la carta es de calidad urgente y debe ser entregada rápidamente.

Quizá sí es su culpa que todo esto esté pasando.

Después de unos meses más, recibe una carta que no es ni una actualización ni un anuncio de que lo visitará la siguiente semana si no que es un aviso de lo que va a pasar la próxima semana.

Hay reportes de algo aterrorizando a los aldeanos cuando el sol cae en las afueras de Yiling, la carta empieza y el por qué Jiang Cheng siente que puede escuchar su emoción es desconocido para él, así que pensé que lo mejor sería que fuéramos todos juntos. Como una cacería nocturna familiar.

Resumido, Wei Wuxian quiere ir de cacería con él, su esposo Lan Wangji, su hijo adoptado Lan Sizhui y su sobrino, Jin Ling. Jiang Cheng está a mitad de contestar que no tiene tiempo de ir de cacería porque, en serio, ser un líder requiere de mucho tiempo y las personas parecen ignorar eso y quieren que algunos problemas que no le competen sean resueltos por él, cuando Jin Ling entra corriendo con Hada a su lado.

—¡Vamos de cacería! —Gritó con emoción desbordante.

Jiang Cheng solo suspiró, rompió la carta y escribió otra con un corto: Está bien.

Jin Ling aun es joven y quiere una vida más típica para alguien de su edad como sus otros tres amigos lo hacen, pero también tiene una responsabilidad aplastante debido a lo que pasó con Jin Guangyao y su secta como tal. Pocas cosas son las que le hacen feliz y Jiang Cheng es solamente un humano que quiere que su sobrino sea feliz.

—¿Qué crees que sea el monstruo? —Wei Wuxian les dijo que lo encontraran en Yiling así que mientras se dirigían ahí, Jin Ling decidió compartir su entusiasmo—. ¿Un cadáver reanimado? ¿Un monstruo come almas como el de la Montaña Dafan?

—¿Cómo podría saberlo? —Sí, es el líder de una de las cuatro grandes sectas, pero hay veces que se está ahogando en el trabajo y solo tiene tiempo para enviar a algún grupo para que lidien con los problemas de los aldeanos en lugar de ir personalmente—. Pregúntale a él, él nos llamó.

Jin Ling frunce el ceño, enfurruñado como es típico en él, pero sigue caminando sin quejarse, conociendo también como es su tío y que realmente no está enojado con la idea.

Aun es joven, está en esa fase de querer saber y aprender todo sobre el mundo que lo rodea de alguien que tiene más experiencia para que les diga si tienen madera para ser cultivadores o no. Lan Sizhui y Jin Ling ya pasaron por eso, son muy talentosos y tienen como mentores a tres de los más fuertes cultivadores del mundo por lo que, obviamente, los emociona más.

—¡Jiang Cheng, A-Ling! —Tras caminar un poco más, la voz fuerte y clara de Wei Wuxian los alcanzó, haciéndoles mirar para encontrarlo agitando los brazos a lado del inmutable Lan Wangji—. Llegan tarde, ya apurense.

—¡No llegamos tarde! —Jin Ling se queja, corriendo hasta ellos y dedicándole una respetuosa reverencia a Lan Wangji para después fulminar con la mirada al otro—. Mi tío y yo somos siempre puntuales.

Para Jiang Cheng es obvio y evidente que su hermano solo los está molestando por lo fácil que es hacer que Jin Ling se ponga a la defensiva y aunque no lo admita, es entretenido ver como se enoja. No pasa mucho tiempo para que empiecen a discutir, por lo que solo suspira y va a pararse a una distancia prudente de ellos y de Lan Wangji.

Lan Wangji aun es ese joven apuesto y calmado que siempre ha sido, sus túnicas blancas impecables y postura perfectamente recta, Bichen colgada a su cintura y su Wangji agarrada a su espalda, ojos claros y fríos permaneciendo en su esposo y Jin Ling. El odio que Jiang Cheng estaba seguro el Segundo Jade le tenía había bajado considerablemente, lo miraba con menos cautela cuando se acercaba a su esposo y sus ojos dorados parecían guardar menos resentimiento. Mientras era claro que no eran amigos ni tenían una relación cercana, ser alguien civilizado estaba mejor.

Son aliados, y él está bien con eso.

—Hanguang—Jun, —le dice a modo de saludo, tratando de no sonar tan incómodo.

—Lider Jiang, —Lan Wangji le contesta, saludándolo de vuelta antes de desviar la atención a los pasos apresurados que vienen desde detrás de él—. Agradecemos que hayan venido.

Quien venía corriendo resulta ser Lan Sizhui y Jiang Cheng se pregunta si el saludo iba para él o para el chico.

—Lider Jiang, —el joven se detiene para saludarlo como se debe, incluso le sonríe, buscando a Jin Ling—. Que bueno que vinieron.

Tras saludar de vuelta, el joven se movió a hablar con Jin Ling, quien ya dejó de pelearse con Wei Wuxian, para escucharlo decir cómo le ganó al otro que quería pasarse de listo e insinuar que era impuntual. Jiang Cheng no lo admite, pero es enternecedor.

—Como sea, escúchenme ahora, —tras un par de segundos más de incomodidad para Jiang Cheng, Wei Wuxian finalmente habla—. Investigué todo esto y los aldeanos dicen que es una sombra que ataca con enojo, ya mató a dos personas y ha lastimado a varias más.

—Un demonio, entonces, —Jin Ling sugiere.

—Es una opción, —Wei Wuxian asiente—, ¿qué más podría ser?

Hubo un momento donde Wei Wuxian era tan joven como Jin Ling y Lan Sizhui, un tiempo donde estaba en la misma posición que ellos y que fue forzado a escuchar a otro cultivador experimentado que se ponía a hablar de todas las reglas y cosas que tenían que considerar antes de tomar una decisión. En aquel entonces, Jiang Cheng era incapaz de ver a su hermano haciendo lo mismo cuando fuera más grande, Wei Wuxian era y es un hombre revolucionario que gustaba de dar sus propias reglas, haciéndolo el peor tipo para guiar a otros más jóvenes.

El presente prueba que estaba equivocado.

Wei Wuxian es uno de los seniors que la gran mayoría de jóvenes quiere tener como compañía en una cacería nocturna. A diferencia de las generaciones viejas que veían todo lo relacionado a la Cultivación Demoníaca como un invento cruel y despiadado, los jóvenes estaban interesados en todos los usos adicionales que Wei Wuxian había creado como los talismanes modificados, las banderas o la brújula que detectaba espectros maligno, haciendo al quien fuera el infame Patriarca de Yiling el mejor candidato para ir con ellos. Además de eso, Wei Wuxian es particularmente bueno para hacer que los jóvenes lleguen a sus propias conclusiones y los corrige cuando es necesario, es muy bueno para hacerles distinguir entre lo que es bueno y lo que es malo y ni hablar de lo mucho que disfruta hacerlos sufrir con sus tonterías que a Jiang Cheng lo hacían ver rojo cuando era más joven. La verdad es que se siente tranquilo cuando Jin Ling sale con su tío Wei.

Con nada más que hacer mientras su hermano hace preguntas que los juniors deben responder, Jiang Cheng se permite mirar de reojo a Lan Wangji de vez en cuando para ver cómo reacciona a lo que está pasando. Para su sorpresa, el hombre parece estar en trance, sus ojos dorados fijos en su esposo mientras se mueve para explicar algo, solo mirando a los dos jóvenes en ocasiones.

Para el mundo, Lan Wangji es un hombre monocromático y no solamente por su ropa. Es un cultivador respetado con un corazón noble que ayudaba a quien lo necesitaba sin importar que esto no le traiga gloria o reconocimiento, pero al mismo tiempo, es alguien que aleja a la mayoría por su cara inexpresiva. Incluso después de un año de haberse casado con el Patriarca de Yiling, algunos aun piensan qué motivos ocultos hay bajo esa unión.

Jiang Cheng solo puede suspirar.

Después de reconciliarse con su hermano y de haber tenido la oportunidad de analizar cada evento del pasado, puede ver que Lan Wangji es, en realidad, un hombre con sentimientos tan amplios como una paleta de colores.

Con su matrimonio, sus nombres habían resurgido en las conversaciones, pausando de momento la constante difamación a Jin Guangyao y todo lo que había hecho. Incluso alguien tan ocupado como Jiang Cheng escuchaba a las personas hablar de teorías disparatadas que decían que Wei Wuxian casándose con la persona más fría del mundo solo podía significar que era una forma de mantenerlo controlado y vigilado, que el matrimonio había sido uno arreglado a pesar de que todos habían visto la felicidad que ambos mostraban el día de la boda. Otros se sentían asqueados porque dos hombres fueran pareja de cultivo.

El mundo estaba lleno de idiotas.

—Así que estamos de acuerdo que es un cadáver reanimado, —desviando la mirada del hombre, Jiang Cheng se fija en su hermano y en los otros dos que asienten con seguridad—. ¿Qué debemos hacer?

—Deshacernos de él, obviamente, —dice con una mueca—. Nada de ideas raras.

—Jiang Cheng de aburrido, —Wei Wuxian se queja, cruzándose de brazos con esa sonrisa juguetona que casi lo hace golpearlo—. Obviamente nos desharemos de él, también nos aseguramos que no aparezcan más.

Cuando los más chicos vuelven a asentir, Wei Wuxian gira Chenqing en su mano y después se gira para empezar a caminar, guiándolos a todos. Jin Ling y Lan Sizhui lo siguieron, metidos en su propia conversación y dejando a Jiang Cheng a solas con Lan Wangji en la parte de atrás. Es incómodo, sí, pero al menos no era tan malo como solía ser cuando solo eran los dos en un mundo sin Wei Wuxian y donde Jiang Cheng aun lo culpaba de todas las desgracias.

Yiling no es el lugar favorito de muchas personas, los Túmulos Funerarios en el horizonte y las historias del pasado lo han convertido en historias para asustar a los niños o para hacerlo una atracción turística, pero en general era un lugar poco grato para la mayoría. Yiling, para Jiang Cheng, era un camino empedrado lleno de emociones. Aquí le había dicho adiós al hermano con el que había crecido, había declarado que no era parte de la secta que lo había acogido, pero también era el lugar donde él, Jiang Yanli y Wei Wuhan habían compartido un momento que les recordó al pasado en Muelle del Loto. Había sido aquí donde había venido a buscar el cadáver de su hermano después de que cayera de aquel precipicio.

Cosas buenas y malas habían pasado y aun cuando está trabajando en dejar ir al pasado, aún se siente ansioso cada vez que está aquí. Para su fortuna, sin embargo, el lugar no está tan lejos del pueblo principal y lo salva de tener más segundos incómodos con Lan Wangji y la creciente necesidad de decir algo.

El pequeño bosque está cargado de energía negativa, la negrura adhiriéndose a los árboles y haciendo que todo se sienta mucho más pesado. Está demasiado silencioso y eso hace que la sensación de alerta interrumpa las conversaciones que tenían para estar listos para lo que venga.

No pasa mucho tiempo para que un cadáver se lance contra ellos con un grito sediento de sangre. Jin Ling y Lan Sizhui se apresuran a bloquear el ataque y quitarse del camino. Wei Wuxian se apresuró a pedirles que explicaran todo lo que veían, llevándolos a notar que la energía resentida era mucho más fuerte que lo normal.

—Seguro odia a los cultivadores, —Jin Ling se queja después de desviar el siguiente ataque.

—Tenemos a un ganador, —Wei Wuxian dice, deteniendo momentáneamente la melodía que había empezado a tocar cuando dos cadáveres más habían aparecido—. Las personas fallecidas eran cultivadores solitarios, a los aldeanos solo los lastimaron gravemente.

No es tan raro, Jiang Cheng piensa, por razones variadas, los cultivadores pueden convertirse en figuras que otros cultivadores o incluso personas normales llegan a odiar, pero no quita el hecho de que es desafortunado y molesto que ese odio lo deban pagar personas inocentes.

Sea lo que sea, Zidian hace un buen equipo con Chenqing y Wangji para neutralizar a los dos cadáveres que habían desviado la atención a ellos tres, dejando a los dos más jóvenes lidiar con el primero que había atacado sabiendo que son más que capaces de hacerlo.

Todo parece estar por terminar pero de un momento a otro, todo cambia.

Cuando el trabajo en conjunto de Jin Ling y Lan Sizhui parecen ser fatales para el cadáver, los dos proceden a sellarlo para poder deshacerse de él completamente, pero cuando uno de los talismanes hace contacto con el ente, una energía negra sale disparada hacia ellos con una velocidad vertiginosa.

Bichen y Sandu vuelan, Chenqing cambia a notas más urgentes y todo en general parece moverse más rápido para protegerlos aunque dentro de si saben que no llegarán a tiempo. Jiang Cheng siente que el corazón se le va a salir cuando se da cuenta que esa cosa va directamente por su sobrino a hacerle sabrá los cielos qué. Sabe que no puede perder a Jin Ling, sabe que no podrá recuperarse de eso así que, sin saber qué otra cosa hacer, golpea con Zidian como último recurso, pero algo más se interpone.

Lan Sizhui empuja en el último momento a Jin Ling fuera del camino y ese pequeño cambio hace que aquella bruma negra le golpee en el pecho mientras que Zidian le golpea la espalda.

—¡A-Yuan! —Wei Wuxian grita, pero no hay nada que pueda hacer además de jalar a Jin Ling detrás de él para protegerlo pues quedó en un estado de shock como para protegerse solo.

Jiang Cheng mientras tanto siente que no puede respirar pero puede ver por el rabillo del ojo a Lan Wangji moverse con agilidad y rapidez para atrapar el cuerpo de su hijo adoptado que había salido volando, evitando que se golpee con uno de los árboles. Al final, su cerebro reacciona lo suficiente como para hacerle golpear a aquella cosa con Zidian cuando parece lista para atacar de nuevo.

El relámpago morado, sin embargo, hace que aquella cosa se retuerza de lo que parece ser dolor antes de regresar al cadáver. El líder tiene el pensamiento de que finalmente se acabó, pero cuando el cadáver vuelve a moverse, una densa niebla toma el bosque por completo, haciendo imposible ver más allá de lo que tiene justo en frente.

—¡Jin Ling! —Grita, el miedo que tuvo en el templo al pensar que Jin Guangyao estaba por matar a su sobrino llenándolo de golpe—. Jin Ling, ¿dónde estás?

—Tío, ¡estamos por acá! —Para su alivio, el chico responde desde algún lugar.

—Jiang Cheng, —antes de que continúe, sin embargo, Wei Wuxian habla—. A-Ling está conmigo y está a salvo, encuentra a Lan Zhan y A-Yuan, por favor, nos desharemos de esta cosa y los buscaremos.

La idea hace que le tiemble el cuerpo y no porque no confíe en que Wei Wuxian dejará que algo malo le pase a su sobrino, si no porque le pone ansioso el no estar cerca de Jin Ling cuando la situación parece tan mala. Lan Wangji es uno de los más fuertes de su generación, podía protegerse solo, puede dejarlo para ir a ayudar a los otros dos pero…

—Padre… —El quejido lastimero viene de alguna parte a su izquierda y no le toma mucho para reconocer la voz como la de Lan Sizhui.

—Guarda tu energía, —Lan Wangji le contesta y quizá Jiang Cheng está imaginando cosas, pero la voz no es tan firme como normalmente lo es—. Estarás bien, A-Yuan.

—¡Mantenlo a salvo! —Grita a pesar de saber que los otros seguramente ya se han ido, empezando a buscar a los otros dos.

Afortunadamente no están muy lejos de él y pronto encuentra a Lan Wangji hincado con la cabeza del más joven descansando en su regazo. La imagen hace que el estómago le duela, aquella bruma lo lastimó y el pecho se le llena de coraje y culpa mientras se deja caer de rodillas a lado de ambas.

—¿Cómo está?

—Dos heridas, —Lan Wangji contesta de inmediato pero sin mirarlo—. Una en su espalda, otra en su pecho.

La mención de la herida de la espalda hace que el estómago le duela más, sabe lo doloroso que es un golpe de Zidian y más cuando él lo envía a destruir su objetivo.

—No quería lastimarlo, quería golpear a esa cosa.

—Lo sé, —le contesta pero aquello hace poco para calmarlo, incluso cuando Lan Wangj es un hombre de pocas palabras que no se pondrá a consolarlo por su error, no es suficiente para calmarlo—. A-Yuan, te volteré sobre tu costado.

Con movimientos delicados y suaves, el hombre logra ayudar al más joven a ponerse en esa posición y cuando lo hace, Jiang Cheng quiere golpear un árbol. Las blancas y azules ropas del chico ahora están manchadas de sangre y tierra, en su espalda hay un tajo de tamaño medio donde Zidian lo había golpeado, las orillas de la ropa quemadas por el relámpago purpura, en su pecho hay un corte extraño, algo como polvo negro pegando a las orillas del corte.

—¿Podrá ser veneno? —Pregunta cuando el pensamiento le llega a la mente, viendo a Lan Wangji arrugar levemente el ceño mientras saca todo su equipamiento médico.

—No puedo estar seguro, —Lan Sizhui no inhaló nada del polvo que ese cadáver había soltado, pero había la posibilidad de que aquella bruma negra fuera como sangre infectando la herida.

La única cosa que Jiang Cheng tiene segura es que Lan Wangji está muy preocupado por el joven discípulo e incluso cuando no está mostrando nada que alguien normal haría, hay pequeñas cosas que le dicen que este no es el Hanguang—Jun que todos conocen.

Hay un pequeño temblor en sus manos mientras trabaja en limpiar las heridas y sus ojos normalmente fríos muestran capas y capas de miedo apenas contenido. Aun así, sus movimientos son precisos y cuidadosos, mostrando también la fortaleza que tiene.

—Un discípulo preparó este elixir hace poco, —Jiang Cheng dice cuando su cerebro finalmente se aclara lo suficiente como para dejarlo pensar correctamente—. Podría ayudarle.

Los elixires no son tan comunes para los cultivadores, pero el que uno de sus nuevos discípulos lo preparara y se lo diera como prueba de sus capacidades puede ser una coincidencia o el mismísimo destino, no lo sabe, pero espera que pueda ser. Lan Wangji levanta la mirada de inmediato, algo que quizá sea esperanza llenándole los ojos.

—Podría.

Jiang Cheng se apresura a tomar y abrir la botella para pasársela al otro que también se apresura a ayudar a su hijo a beber aquel amargo brebaje. Para ese entonces Lan Sizhui ya se ve en un estado más preocupante, la mueca de dolor está más marcada, el cuerpo le tiembla y hay un sudor frío llenándole el cuerpo entero. Jiang Cheng quiere gritar, si el chico muere o sufre de algo irreversible, no sólo cortará la prometedora vida de un igualmente prometedor cultivador, no, si no que también su hermano querrá matarlo y Lan Wangji le ayudará en la tortura.

—No es tu culpa, —le toma un momento entender que esas palabras no vienen de Lan Sizhui si no de Lan Wangji.

Y lo sabe, claro que lo sabe, no quería atacar al otro y Zidian no fue quien lo envenenó, pero se siente culpable y el mundo sabe que no es alguien que sepa lidiar con la culpa. Solo sabe que siempre llega tarde a todo.

No pudo ayudar a Wei Wuxian a dejar ese camino después de darle su núcleo, no alcanzó a Jiang Yanli antes de que ese cadáver la golpeara y no la protegió cuando la asesinaron justo enfrente de él. Lo único que pudo hacer fue que su hermano soltara la mano de Lan Wangji y que cayera a su muerte y que en el futuro todo volviera a morderle el trasero por ser idiota. Siempre tarde, siempre enojado, siempre vengativo Jiang Wanyin.

¿Qué se supone que diga ahora? Ni siquiera sabe por qué Lan Wangji dijo eso, no son cercanos y hasta duda que se conozcan más allá de sus títulos y lo que hacen, por otro lado, también sabe que Lan Wangji es un hombre con muchos colores gracias a las cartas de Wei Wuxian y lo que él ha visto, pero varias cosas no son algo que haya visto por su propia cuenta y lo mismo pasa con él. Lan Wangji no sabe todos esos detalles que él y su hermano construyeron mientras crecían.

Así que no contesta nada y decide mirar al chico que parece estar un poco mejor después del elixir. Su cara está menos pálida y el cuerpo le tiembla menos mientras que el Segundo Jade continúa limpiando y atendiendo las heridas. Después de aplicar un ungüento, se dedica a vendarlas con la presión justa que necesita. Al final el chico parece haberse quedado dormido debido al cansancio y dolor.

—Estará bien, —Lan Wangji dice, su voz más controlada mientras cierra los ojos y dirige su energía al cuerpo del más joven.

Jiang Cheng no puede evitar el suspiro de alivio que deja salir, sus piernas cansándose de mantenerlo hincado y dejándolo caer de sentón al piso para recargarse contra un árbol.

—Salvó a Jin Ling.

—Mn, —contesta y Jiang Cheng vagamente piensa que al fin escuchó esos sonidos de confirmación que Wei Wuxian mencionó en sus cartas—. Sizhui y el Lider Jin son cercanos.

Es extraño escuchar a alguien dirigiéndose a Jin Ling con el título que ni su mismo sobrino aprecia demasiado, pero es entendible, el hombre es respetuoso en todo momento.

—Eso puedo ver.

El silencio nuevamente cae como una manta demasiado pesada hecha para sofocarlos, o quizá solo a Jiang Cheng. El Lan Wangji que conoció en Descanso en la Nube también era callado, con una mirada fría que congelaba a todos; recuerda a Nie Huaisang temblando cuando se lo encontraban y diciéndole a Wei Wuxian que era o muy valiente o muy tonto por meterse con Lan Wangji. El hombre frente a él le recuerda a ese, pero solo en apariencia.

Wei Wuxian le habla de un hombre que es cariñoso, que tiene un compartimiento secreto en su cuarto lleno de Sonrisa del Emperador solo para que su esposo lo disfrute, que es capaz de mostrar cualquier tipo de emoción a través de sus ojos dorados y alguien que defiende a quien ama y creencias propias antes de defender las reglas que parecía querer más que a nada. Jiang Cheng a menudo pensaba que todo eso eran ñoñerías románticas dignas de un hombre recién casado, pero ahora, Jiang Cheng se da cuenta que, en realidad, acaba de ver uno de los tantos colores que el hombre tenía.

El miedo y preocupación que había dominado su expresión mientras atendía a su hijo estaba ahí y era real, el pequeño temblor en la voz, en las manos y todo era parte de lo que Lan Wangji era con su familia, el lado que nadie además de Wei Wuxian, Lan Sizhui y seguramente Lan Xichen pueden ver. Por un momento se siente mal de haberlo visto, por un momento pensando que cruzó una línea, algo privado que a él no le correspondía ver.

—Wei Ying quería cenar después de esto, —tras minutos de silencio, el otro vuelve a hablar y a Jiang Cheng le falta poco para brincar—. Por favor, considera tomar un día para cuando quiera reprogramarlo.

Jiang Cheng siente como si el estómago se le hubiera volteado. Odia recordar aquel Jiang Wanyin que Lan Wangji le dijo entre dientes mientras intentaba jalar a Wei Wuxian de vuelta a piso firme a pesar de la herida sangrante en el brazo y le veía acercarse con Sandu en las manos. El enojado es suficiente que le había seguido con una mirada de odio puro que prometía que lo mataría, tristemente, Jiang Cheng ya se sentía muerto en ese entonces. Lan Wangji solo dice esto porque es lo que Wei Wuxian quiere, no por otra cosa.

—Veré qué puedo hacer, —dice, aclarándose la garganta—. A Jin Ling le gustará.

El recordar a su sobrino hace que le duela la cabeza, se están tardando tanto que le hace pensar que algo pudo haber pasado mientras que él solo está ahí sentado. Lan Sizhui está bien y Lan Wangji puede cuidarlo, podría dejarlos ahora sí y hacer algo.

—La niebla se alimenta de tu energía espiritual, si tu mente está alterada, te perderás.

Jiang Cheng no sabe si está haciendo algo que inconscientemente le está gritando al otro que está a punto de hacer algo o si el gran Hanguang—Jun de repente puede leer la mente, pero esta es la segunda vez que dice algo referente a lo que está pensado y eso le revuelve la cabeza más.

—Lo sé.

—Jin Ling no saldrá herido mientras esté con Wei Ying, —vuelve a decir, sin embargo, abriendo los ojos para revisar a Lan Sizhui otra vez y cortar el flujo de energía—. Wei Ying no dejará que sea herido.

—También lo sé, —contesta, quizá sonando más agresivo de lo necesario—. Pero no puedo quedarme aquí.

—Hay cosas que no podemos controlar.

La manera en que lo dice parece llevar consigo cosas más complicadas que el simple hecho de querer dar un consejo, como si tuvieran un significado más profundo que Jiang Cheng intenta entender pero sus intentos fallan, o así lo es hasta que lo entiende y cuando lo hace, siente como si le hubieran golpeado en el estómago.

Lan Wangji habla por experiencia, habla de lo que vivió después de perder a la persona que amaba con todo su corazón. En ciudad sin noche, Lan Wangji había intentado salvar a Wei Wuxian aun con el brazo sangrante y lastimado, había usado la poca energía espiritual que tenía con la esperanza de ponerlo a salvo y todo para que Jiang Cheng apareciera para hacerlo que se soltara.

¿Qué había sentido Lan Wangji después de perderlo?

El mundo había suspirado de alivio cuando las noticias de la muerte del Patriarca de Yiling se habían esparcido. Las sectas se lamentaban por las muertes de su gente pero celebraban haberse desecho del mal encarnado en la tierra,el mundo se había solucionado, al menos para ellos. Los de Yunmeng y Lanling seguían rotos, destruidos por la muerte de otro miembro de la familia que ahora dejaba a un huérfano. Jiang Cheng estaba demasiado roto como para prestar atención a lo que pasaba con los demás, pero aún así, escuchó rumores.

Lan Wangji desapareció del mundo de la cultivación por tres años, cada vez que algo grave pasaba en Gusu, solo Lan Xichen aparecía con sus discípulos para lidiar con ello aun cuando Lan Wangji era uno de los más fuertes. El hombre no estaba por ninguna parte y esa ausencia hacía que los rumores fueran creciendo; algunos decían que Wei Wuxian lo había maldecido y que ahora estaba muriendo o muerto ya, otros aseguraban que su gente estaba tan avergonzada de que hubiera ayudado al enemigo que habían decidido esconderlo por el resto de su vida.

Y entonces, el Segundo Jade había aparecido, pero no recibieron respuestas.

Reapareció más adulto, con ojos más fríos y cara aún más inmutable. Se movía alrededor con nuevos discípulos y aparecía donde fuera que hubiera problemas, haciendo que la gente terminara por darle el título extraoficial de "quien aparece donde el caos está". Jiang Cheng lo respetaba, pero el desdén que sentía por él ardía más fuerte. No podía olvidar que había intentado salvar al responsable de la muerte de su hermana y al responsable de la muerte de tantos cultivadores.

Ahora lo entendía.

Mientras se mantiene ahí sentado, ve los ojos de Lan Wangji llenándose por un par de segundos con arrepentimiento y dolor, recordando ese pasado tortuoso y mostrándole a Jiang Cheng otro color más. Quien parecía odiar a su hermano mientras estudiaban en Descanso en la Nube, había estado de duelo arrepintiéndose de apartarse de su lado.

—Irónico que lidiamos con fantas estúpidos y todo eso pero seamos incapaces de manejar esto. —Dice, sin importarle que admitirlo quizá suene a debilidad.

No espera una respuesta, pero Lan Wangji asiente.

—No te odio, líder Jiang.

¿De dónde había venido eso?

—Hanguang—Jun, no sé que te dijo ese tonto, pero yo nunca dije que lo hicieras.

—Wei Ying no mencionó nada, yo tengo esa impresión, —contesta, por fortuna ignorando que Jiang Cheng acaba de llamar a su esposo un idiota—. No te odio.

Y bueno, no estaba esperando ese tipo de confesión y aunque intenta atribuirlo al hombre tratando de no hacer las cosas más incómodas, pronto se da cuenta de que no es posible porque los Lan no mienten y Lan Wangji no conseguiría nada con mentir.

—Tampoco te odio, —dice, sintiendo que se está quemando—. Desprecio muchas de las cosas que pasaron entre ambos y te guarde rencor por mucho tiempo, pero siempre te respeté como cultivador.

Lan Wangji lo mira, pero a diferencia de las otras veces, puede ver que está levemente sorprendido de escucharlo decir eso. No le sorprende, en serio, Jiang Cheng no es conocido por ser alguien quien hable de sus sentimientos o siquiera hable sin gritar o amenazar a todos con Zidian, pero la situación es fuera de lo común, por decirlo menos.

—Agradezco que asistieras a la ceremonia, —dice, desviando la mirada a su hijo para acomodarlo otra vez sobre su costado para que no se lastime la espalda.

—A Jin Ling le gustó.

—A-Yuan también la disfrutó.

—¿Puedo preguntar por qué Zewu—Jun no está aquí? —Pregunta, ansioso por cambiar la conversación y evitar así que el corazón se le salga del pecho, además, el hombre es familia directa.

—Él… tiene mucho trabajo, deseaba venir, pero le fue imposible, —la tristeza le regresa a los ojos, lo vuelve a ahogar—. Quizá le sea posible la próxima vez.

—Ya veo. —Continua, aclarándose la garganta otra vez—. ¿Está todo bien en Gusu?

—Sí, —asiente, viéndolo otra vez—. ¿El líder Jin ha tenido algún problema?

Hay preocupación genuina en sus ojos dorados y Jiang Cheng se siente conmovido, pero se asegura de no mostrar nada de ello.

—Por ahora sí, solo algunos idiotas queriendo quitarle el lugar.

Lan Wangji se mantiene callado por varios segundos antes de regresar la mirada a él.

—Jin Ling es el heredero legítimo, la Secta Gusu Lan no dudará en apoyar si es necesario.

Jiang Cheng, honestamente, quiere llorar. Por años era Jin Ling contra el mundo, gente de su propio clan se burlaban de él por ser huérfano, se reían a sus espaldas y usaban lo que fuera para atacar. Jin Ling solo tenía a sus dos tíos y ahora, ahora tiene a la secta Lan para apoyarlo.

No le agradece, tiene cerrada la garganta y no tiene la voz para agradecerle, pero asiente y espera que su expresión por primera vez le ayude a transmitir lo que siente.

—Yunmeng también cuenta con ello.

Y es, oficialmente, mucho para Jiang Cheng. El observar de primera mano que sí, Lan Wangj es alguien complejo con una gama de emociones y sentimientos mucho más amplia que lo que cualquiera pueda imaginarse. Es el opuesto de Wei Wuxian, pero muy similar al mismo tiempo, dispuesto a luchar incluso contra las reglas que solía cumplir al pie de la letra y que había memorizado desde que era niño y la verdad es que todos son más complejos de lo que aparentan.

Lan Sizhui no había dudado en recibir un golpe que bien pudo haber sido mortal para salvar a Jin Ling, a Wei Wuxian le había importado poco que lo llamaran loco o malvado por salvar a personas inocentes aun cuando había perdido su nuclea, Jin Ling luchó contra las miradas burlescas y comentarios hirientes para probar que estaba equivocados.

Se siente tonto de no haberlo notado antes.

—¡Lan Zhan, A-Yuan, Jiang Cheng! —Apenas y tiene la fuerza para desviar la mirada de lan Wangji cuando escucha la voz, viendo a dos figuras aparecer de entres la niebla.

Wei Wuxian se tira de rodillas al lado del otro, sus ojos fijos en los vendajes del chico y Lan Wangji le explica lo que pasó y lo intenta calmar diciendo que está fuera de peligro.

Jin Ling se deja caer a lado de Jiang Cheng y este está por acercarse a tomarle de los hombros cuando nota las lágrimas llenándole los ojos, pero Jin Ling grita antes de que pueda hacerlo.

—¡Eres un idiota! —Grita cuando Lan Sizhui apenas y logró abrir sus cansados ojos—. ¡No tenías que empujarme!

Lan Sizhui solo sonríe, apoyándose de sus dos padres para levantarse y sujetándose de Lan Wangji cuando este lo carga. Se ve desorientado y débil, pero Jiang Cheng está seguro que estará bien.

—Habrías hecho lo mismo, Jin Ling.

A su lado, su sobrino se muerde el labio con tanta fuerza que Jiang Cheng está seguro de que se lo va acabar arrancando. Las lágrimas aún le llenan los ojos mientras se obliga a levantarse sin ayuda de nadie pero golpea el piso con el pie.

—¡No lo vuelvas a hacer!

—Si mi primo está en peligro, lo haré.

Sí, los dos habían perdido a personas amadas hace mucho tiempo, pero Jiang Cheng se siente estúpido por no notar antes que él y Jin Ling ya no están solos.

Notas:

Ajá, esto entra dentro del mismo "universo" por llamarlo así, que mi otra historia de Important Dates, no hace falta leerlo, se entiende bastante bien, pero las referencias a la conversación que JC tuvo con WWX y la boda y eso aparecen en esa historia así que si gustan leer, me haría feliz.

Sé que las cosas no son tan simples, sé que a muchos les gusta Shizui y Jin Ling como pareja y that's fine! Aquí lo manejo como primos, pero hasta ahí. Si no les gusta, no se preocupen, bien pueden buscar otro tipo de historia.

Gracias por leer, espero les haya gustado y me dejen un comentario allá abajo.

Domingo 2 de Mayo de 2021