Fairy tail No me pertenece.
Esta historia es un regalo de cumpleaños para Majo que cumplió años ayer :3
Queen
Para Natsu enamorarse de Lucy nunca estuvo dentro de sus planes, pero en realidad, no era como si el hiciera alguna vez algún tipo de plan. Fue una gran coincidencia en realidad, que de alguna forma terminara enredado con la hija de un famoso empresario al salir una tarde solo, no era de la clase de chicos que se fijan en las noticias o piensan mucho en el pasado de los demás, así que cuando intento ayudarle no pensó que fuera alguien tan importante para los demás. Para Natsu, Lucy solo era Lucy, una chica rara pero divertida que alegraba sus días constantemente.
Tal vez debió sospechar algo, pero en su defensa, ella no siempre fue tan importante. Al inicio era como el resto de sus amigos, cuando la ayudo a integrarse al colegio, era solo otro compañero más con el que pasar el tiempo. Aun así, a diferencia del resto de sus amigos que conoció de toda la vida, ella pronto se convirtió en alguien diferente, estaba ahí y él en ocasiones no podía dejar de verla.
Era vergonzoso pensarlo y jamás nadie podría convencerlo de hablar en voz alta.
Dado que él era huérfano y ella escapo de su hogar, ambos terminaron viviendo en el departamento continuo al otro. Solían jugar juegos de mesa, ver películas, él robaría su comida y ella alimentaria a su gato. No entiende cuando la línea de amistad que tenía con los demás, fue sobrepasada por esa rubia con gran velocidad, no sabe cuándo su sonrisa le hizo sonreír o sus lágrimas le hicieron querer quemar a alguien.
Se indignó al igual que el resto de sus amigos cuando su padre apareció, intentando perjudicarlos y siento un snob total, pero en ese entonces no estaba tan enamorado para darse cuenta, o tal vez había comenzado ahí. En ese entonces ya había sentido un pecho apretarse doloroso al ver las lágrimas de la chica cuando todo se solucionó. El resto de sus amigos siguiendo viendo a Lucy con la misma luz, pero pocos meses después él ya sentía que se debilitaba cada que ella se reía a su alrededor.
Fue jodidamente frustrante.
Sobre todo, porque al final él termino revoloteando a su alrededor como Happy cuando ve un nuevo pescado, pero ella no se había dado cuenta. Cuando esta comenzó a salir con chicos, los celos fueron lo que le hicieron comprender que la quería (además de Erza golpeándolo por la espalda para que entrara en razón y no matara a alguien), pero fue muy molesto de pasar.
Además, Natsu era la clase de personas que sobreponía la amistad sobre cualquier relación, incluso las amorosas.
Fue un extraño tanto que vivieron desde los 16 años hasta los 20, donde en un fuerte descuido (planificado por sus amigos) y algo de licor que involucraba su cantina favorita, había terminado declarando su amor de forma ridícula en la tarima de karaoke. Incluso si Lucy claramente lucio fastidiada por la situación, lo cuido cuando vomito horas después junto una disculpa lastimera, además de cuidarlo por su casi intoxicación.
Días más tarde y algo avergonzado, la segunda declaración fue más aceptada que la primera.
Entonces fueron pareja.
Todo era como debía ser, tomar la mano de Lucy era diferente de cuando eran amigos, pero al mismo tiempo se siente correcto. Que sus sonrisas sean solo para él, que ambos sigan pasando tiempo con los demás, pero al mismo tiempo tengan algo entre ellos. Dormir en la cama de la chica sin que esta le saque a patadas, ya que no tiene la excusa ahora de que no son pareja, era perfecto.
Al menos lo fue los primeros 3 meses, hasta que se topó con…ese.
.
.
—Sabes que es un libro…. ¿Verdad? —cuestiono a su lado Gray, sin entender como habían terminado solo ellos dos en el bar de Fairy tail luego del trabajo.
El hombre de cabellera oscura giro a su amigo/rival/hermano/molestia con incredulidad en sus ojos, pero Natsu parecía completamente indignado de sus palabras. Para sorpresa de Gray, al lado de este Gajeel el primo de Natsu, pareció algo miserable, pero parecía concentrado en una revista de motores.
—No lo entiendes, no es solo ese libro, es el chico del libro y de la serie y de la puta película—gruño Natsu sujetando su cabellera molesta, para infinita diversión de Gray—Lucy solo habla de eso todo el día, lo peor es que son muchos libros y siempre sale el mismo idiota como emperador al cual Lucy parece estar enamorada—masculla con mirada asesina, que hace que Gray contemple su integridad mental.
No es algo nuevo, piensa Gray de forma aburrida.
Lucy era una gran come libros, al igual que Levy, así que desde que la conocen hace 5 años, ella siempre ha demostrado afición por algunos personajes. Ignorando cuando Erza se incluía en las charlas con libros subidos de tono, en realidad Lucy y Levy intercambiaban retroalimentaciones de las historias que leían, además de confesar enamorarse en ocasiones de los personajes.
Natsu siempre se había fastidiado de ese hecho, pero no había estado tan mal como este momento.
—El camarón también habla de ese libro, creo que ella quiere al villano—comenta Gajeel sin verlos realmente, haciendo a Natsu gimotear.
Si, esta era la diversión de Gray.
—Pero esta vez es diferente, ha leído el libro 3 veces seguidas, incluso se unió a un club de fans y suele suspirar en las noches por ese bastardo—habla Natsu ahora luciendo molesto.
Gray quiso comentar que el personaje al cual le estaba dirigiendo su odio, no existía, pero prefirió verlo sufrir.
—Es solo una etapa, paso lo mismo cuando leyó los juegos del hambre—comento Gray de forma distraída.
Natsu lo vio mal.
—No es lo mismo, se parece más a cuando vio el anime de Full Metal y se enamoró de Roy—
—¿Tu no le recomendaste esa serie? —
—No tenía que enamorarse de un personaje—
—¿A ti también te gustaba el tipo Roy por el fuego? —
—Ese no es el punto—
Natsu parece estar al borde del colapso mental, haciendo que cada segundo Gray se sintiera con más ganas de fastidiarlo. Para su decepción la presencia de Mirajane al otro lado de la barra, hizo que su diversión terminara inesperadamente rápido.
Esta parecía querer mucho a Natsu como hermano menor, así que claramente había venido a salvarle el día, dado que ella era la que desde un inicio quiso que ambos terminaran juntos.
—Creo que tengo una idea para tener a Lucy a tus pies—hablo la chica albina con mirada traviesa, que para Gray y Gajeel no significo nada bueno.
Pero Natsu era estúpido en algunas cosas.
Sobre todo, cuando sonrió con inocencia.
Si.
A veces era muy fácil de convencer.
.
.
Lucy suspiro nuevamente al leer la parte de la confesión de los personajes, había terminado de leer los últimos capítulos publicados por la autora y no podía esperar por ver más, rápidamente esta historia se estaba convirtiendo en su favorita. Tenía un manga, una serie y una película, pero la historia original que era publicada en este momento en internet, era la que tiene su atención. Se había leído la historia varias veces mientras esperaba nuevas actualizaciones, pero no pudo evitar sentir simpatía por el protagonista masculino que aparecía en la novela. No solo había rescatado a su actual esposa, si no que le había dado todo lo que se le fue negado por su anterior marido, a pesar que siempre fue tan perfecta.
Era tan…maravilloso.
Como un cuento de hadas.
Claro que no es algo que Lucy necesite ahora, aparte de alimentar sus pensamientos, ella sabe que la vida real es diferente a la de un cuento de hadas. Ella que nació en cuna de oro, se identifica con la protagonista hasta cierto punto, no importa que tan perfecta fuera, ella tampoco pudo conquistar a su padre. Incluso ahora tiene una relación tensa con este y por eso le gusta la idea de que los cuentos de hadas existan.
Pero como repite, no es algo que necesite.
Su vida ahora, si bien más simple, es todo lo que ella siempre quiso, fuera de un mundo de engaños donde creció.
La línea de pensamientos termino cuando al entrar a su departamento, se encontraba Natsu inusualmente silencioso sentado en el sofá. Parecía perturbado cuando le vio entrar, haciendo que sus sospechas de que había hecho algo malo incrementaran. Había estado bastante absorta por la novela, sus finales de semestre y su trabajo de medio tiempo, así que sentía que lo había estado descuidando un poco.
Eso usualmente provocaba que el chico hiciera algo estúpido, lo cual debe reparar después.
¿Qué fue ahora?
Pensó caminando frente a él con los brazos cruzados, lista para comenzar una batalla verbal con la esperanza de que no volviera a destruir las plantas de su pequeña ventana. Claro que a simple vista estaban bien, pero no era la primera vez que el chico ocultaba algo de forma descarada.
Alzo una ceja al ver al chico, que pareció encogerse en su lugar.
No era necesario decir palabras cuando sabe que quiere que diga, Natsu era bueno para leerla en esta clase de situaciones.
Verlo tensarse solo fomento la idea de que hizo algo mal.
Cuando iba hablar se detuvo al ver el brillo decidido en los ojos de Natsu, como si hubiera estado dudando sobre algo, pero al final decidido una respuesta. Entonces cuando este se abalanzo fuera del sofá, para arrodillarse frente a ella y tomar su mano, quedo bastante confundida, claro que todo escalo rápidamente cuando este tomo una de sus manos para darle un beso mientras la veía con fuego en sus ojos.
—Mi reina—dijo este con voz gruesa y una sonrisa descarada.
Algo dentro de Lucy pareció explotar en su cerebro, porque su rostro exploto de rojo ante la imagen. No pudo evitar comparar a Natsu en este momento con el protagonista de su historia, que suele hacer esta clase de momentos con la chica elegida.
Siempre había pensado que pasaría si alguien le hiciera esto (Natsu específicamente) pero jamás lo comento a su novio.
La sonrisa de victoria de este hizo que apartara su mano rápidamente y lo viera con molestia, para ocultar su vergüenza y creciente nerviosismo.
—¿Qué hiciste ahora? —cuestiona recordando que esto podría ser una fachada para ocultar algo, pero Natsu parece no rendirse fácilmente.
Este se pone sobre sus pies rápidamente y la acerca a él con maestría, que es bastante normal entre ambos, siempre siendo alguien que suele tomar la iniciativa. Hay algo en su mirada, muy similar a un reto, que parece hacerla estremecerse ante las posibles insinuaciones que deja fuera de su cabeza, su rostro ya debe estar bastante rojo para agregar algo a su mente.
—Mirajane dijo que, si no puedo obtener tu atención fácilmente, debería actuar como lo que te está quitando nuestro tiempo juntos—dice el chico sin ser en realidad alguien que engaña, siempre diciendo la verdad.
Parpadea confundida, antes de sentirse algo enternecida.
Este idiota.
Sin duda era su idiota.
La idea de que actuara como el emperador de su libro, sin duda era tentadora, pero ella quería explicarle que no era necesario. Lucy siempre había amado la actitud bastante infantil y adorable del chico desde que lo conoció, ahora su amistad era tan fuerte, que no cambiaría nada de él, todo lo contrario, su chispa infantil era lo que a veces le hace pensar que, la verdadera felicidad no está en el dinero, sino en pequeños momentos al lado de tus seres queridos.
Sonrió colocando una mano sobre su mejilla, que solo creció cuando este se apoyó en su mano para aumentar el contacto.
Lo amaba.
Ante la mirada del chico, se sintió amada.
Eso era lo único que importa ahora.
—No tienes que hacerlo Natsu, estoy enamorada de ti y jamás cambiaría nada de tu persona—admite con tranquilidad y se siente recompensada cuando sus ojos brillan emocionados por su palabra.
Sí, no cambiaría nada.
Pero la sonrisa y ojos brillantes del chico desaparecen unos momentos, antes que su sonrisa se vuelva un poco más oscura y sus ojos denoten intenciones ocultas, que hacen que se escalofrié de alguna forma al entender su significado.
—Pero me gusta llamarte mi reina—musita con voz ronca al tiempo que acerca su rostro al suyo con claras intenciones.
Bueno.
No es que a ella no le disgustara ese apodo, de alguna forma se sentía, algo interesante, pero aun así…
—Acaso no te gustaría que siguiera todas tus ordenes como tu fiel subordinado—comento este casualmente con mirada brillante, siempre amando la idea de juegos de roles.
Viéndolo de ese modo, Lucy sonrió algo avergonzada antes de atraerlo para que el esperado beso iniciara. Sin duda jamás podría volver a ver ese apodo de alguna otra forma, así que al día siguiente cuando Natsu descaradamente agradeció a Mirajane por el consejo, ella se sintió sumamente mortificada.
Porque Natsu ahora la llama así en todos lados.
Vergonzoso.
Aunque no se queja.
Fin
Espero les gustara.
La idea de Natsu llamando reina a Lucy me pareció enternecedora como picante, así que espero Majo disfrute esta pequeña historia por su cumpleaños.
Nota:
Por si no lo saben en mi perfil tengo un link de mi página en Facebook donde publico mis actualizaciones y donde chateo con los chicos sobre temas de anime, manga, juegos, libros, series…etc por si alguno quiere comunicarse conmigo o visitar un rato para conocerme mejor.
Sayonara sexys lectores.
