DGM no me pertenece.

Cumpleaños compartido

—¡No! Chico, ¿qué clase de trampas haces?

—Ninguna, yo sé jugar limpio.

Era la décima partida de póker que Tyki jugaba con Allen Walker, pero todas y cada una de ellas, las había perdido. Sabía perfectamente que aquel chico hacía trampa, pero no lograba descifrar, cómo, cuándo y qué tipo de trampas exactamente.

—¡Me rindo! —se quejó, lanzando un par de cartas al aire, entre ellas el jocker.

—¿Tan rápido? —se burló black Allen.

—Es imposible ganarte.

—Soy demasiado hábil, lo sé.

Tyki frustrado por esa falta de modestia tan descarada, se puso de pie para estirarse un poco. Haber jugado por más de dos horas sin moverse de un mismo lugar era cansado.

—Además, yo solo estoy aquí para que Road no me encuentre—mencionó el Noah del placer.

—¿A qué te refieres? —preguntó Allen curioso.

—Hagas lo que hagas chico, nunca dejes que Road se entere cuando es tu cumpleaños o te arrepentirás.

—¿Quieres decir que estás huyendo de Road porque hoy es tu cumpleaños?

—Así es.

—El mío igual.

—Vaya, que coincidencia.

Ninguno de los dos conocía mucho del otro, solo lo esencial. Por lo que no tenían ni la menor idea de cuándo cumplían años.

De repente, un fuerte golpe en la puerta los distrajo.

—Oh no—dijo Tyki en pánico—¡Es ella! ¡Me encontró! ¡Debo esconderme!

Tyki dio un par de vueltas sobre su propio eje sin saber a dónde ir y luego salió disparado hacia el piso de arriba.

Allen rio al verlo de esa manera. ¿En serio todo ese escándalo era necesario? Pero, recordó las palabras de Tyki, "Hagas lo que hagas no dejes que Road sepa cuándo es tu cumpleaños o te arrepentirás"

—¡Tyki! Sé que estás allí. ¡Allen abre la puerta!

Al escuchar la voz de la Noah, Allen no lo pensó más y le siguió los pasos a Tyki. También era su cumpleaños y Road estaba allí, no podía arriesgarse y averiguar a lo que Tyki se refería. Sería como entrar a la boca del lobo considerando que hablaban de Road Kamelot.

Una vez arriba, no supo dónde se había metido Tyki, pero entró rápidamente a su clóset y cerró.

—¡Auch! Chico, ¿qué haces?

Casualmente Tyki estaba allí también.

—Escondiéndome, ¿no es obvio?

—¿Y tú, por qué?

—No quiero saber el motivo por el que te escondes, así que no me voy a arriesgar.

—Cobarde.

—Tú también lo eres.

Tyki cubrió impulsivamente la boca de Allen cuando escuchó unos pasos subiendo por las escaleras.

—Silencio, chico.

Allen obedeció.

—¿Tyki? ¿Allen? —llamaba Road, entrando a la habitación.

—Así que, ¿siempre puedes entrar tan tranquilamente a casa de Allen como si fuera la tuya, Road? —le preguntó Lavi.

¿Qué hacía Lavi allí?, se preguntaban Tyki y Allen con la mirada.

—Allen me deja entrar a su casa cuando yo quiera.

—Oh, así que al fin están juntos.

—No—negó Road.

—¿No?

—Es cierto que puedo entrar y venir cuando yo quiera, pero Allen no me hace mucho caso cuando lo hago.

—Entonces, has sido rechazada.

—Cállate Bookman.

Ese cállate debió ser amenazador, considerando que salía de los labios de Road, pero en realidad lo dijo en un tono triste.

Road salió de allí al no encontrarlos y Lavi la siguió. Y al fin, Tyki pudo soltar a Allen o más bien lo empujó.

—¡Auch! ¡Oye! —Allen se había golpeado con la pared del clóset debido a lo estrecho que era.

—¡¿Rechazaste a Road?!—le reclamó.

—¿Qué? Yo no la rechacé.

—Pero no la aceptaste, ¿acaso no te gusta? Sé que está algo loca, pero es linda y sabes que te ama.

—Lo sé, eso lo sé bien.

—¿Y entonces?

Allen miraba a Tyki pensativo.

—No lo sé—aceptó—simplemente no sé qué siento por ella.

—Y mientras tanto la estás haciendo pasar mal. ¿No te das cuenta?

Tyki quería mucho a su sobrina, aunque no lo demostrara y no le gustaba para nada el hecho de verla sufrir y mucho menos por un chico, más específicamente, este chico.

—Dime, ¿qué es lo que necesitas para entender lo que sientes por Road?

Intentaría ayudar un poco, sobre todo para aprovechar que estaban allí encerrados.

Allen se sentía regañado. ¿Estaba haciendo sufrir a Road? No lo parecía, ella siempre se mostraba alegre cuando estaba con él.

Tyki viendo que Allen no respondía a su pregunta, la cambió.

—¿Qué piensas de Road?

Allen se lo pensó un poco.

—Es alegre, es linda, está algo loca, es muy efusiva y caprichosa. Con ella puedo ser yo, no me juzga y me siento tranquilo a su lado—terminó con una sonrisa al recordar los buenos momentos que había pasado con ella, durante esos años.

Tyki lo golpeó en la frente, trayéndolo de regreso a la realidad.

—Pones esa cara de tonto al hablar de ella, ¿pero no sabes si te gusta? Para mí, es totalmente obvio que sí.

Allen enrojeció.

—¡Claro que no! —gritó, pero se quedaron inmóviles al ver que la puerta del closet se abría.

—¿Qué hacen ustedes dos encerrados en este lugar? —les preguntó Road, quien los había encontrado al escucharlos hablar.

—¿No es obvio? —rio Lavi—seguro querían estar a solas.

—¡¿Qué?!—gritó la chica—¡¿Tyki, qué le haces a mi Allen?!

—Hey, hey, ¿por qué le haces caso a Bookman? Hay una buena razón por la que estamos aquí.

Tyki tenía un plan, no dejaría que la vergüenza que acababa de pasar fuera en vano.

—Road, ¿sabías que hoy también es el cumpleaños del chico?

Allen quién aún se quejaba del extraño comentario de Lavi, miró a Tyki horrorizado.

—¡¿En serio?! ¡No lo sabía! —exclamó Road feliz.

—¿Es el chico que te gusta y no lo sabías?

—Oye, será el chico que me gusta, pero yo a él no, por eso no me había dicho nada.

Tyki miró a Allen burlonamente y Allen lo miró irritado, pasando su dedo índice a lo largo de su cuello, dando a entender que Tyki estaba muerto. El Noah solo rio.

—Allen—chilló Road entusiasmada—¡vamos a celebrar tu cumpleaños junto al de Tyki!

—No es necesario, Road—Allen intentaba negarse por todos los medios, pero sabía que no funcionaría.

—Claro que sí, tu cumpleaños solo es una vez al año, no hay que dejarlo pasar.

—Pero, yo…

Road jaló al chico con ella, por lo que no le quedó más remedio que seguirle el juego.

—Lavi—llamó Road—trae a Tyki contigo.

—Con gusto—aceptó Lavi divertido—¿esa era la razón por la que estaban escondidos?

Por la cara de resignación de ambos, dedujo que sí.

Una gran cena con un gran pastel los recibió en el arca.

Allen no entendía del todo porque a Tyki no le gustaba aquello. Era una fiesta extraña, pero se hablaba de la familia Noah así que era de esperarse algo así. Lo único que Allen notaba diferente era que Road era muy efusiva con él más que con Tyki, pero estaba bastante acostumbrado a ello y la otra diferencia era que Sheryl solo felicitaba a Tyki y a él le daba miradas asesinas, lo cual era obvio si se consideraba que Road se había sentado en su regazo y le daba de comer pastel en la boca.

—¿Te gusta Allen?

—Sí Road, pero tu padre quiere matarme, así que baja.

—¡No quiero! —se quejó—hoy es tu cumpleaños, así que debo consentirte.

—Aunque no sea mi cumpleaños siempre me tratas así.

Allen suspiró resignado, sabía que no conseguiría hacerle cambiar de opinión.

Al final de la fiesta, Mana invitó a Allen a quedarse esa noche en el arca. Le habían preparado una cama en una habitación vacía. Pero, antes de que Allen se acostara a dormir, Tyki llegó al cuarto.

—¿Exhausto, chico?

—No del todo, no entiendo qué tiene de malo lo que ocurrió.

—¿No te molesta tanta atención ni tanto cariño de Road?

—No, es algo normal.

Tyki alzó una ceja.

—Normal para ti, que siempre tienes a Road encima, pero, a mí no me gusta.

Tyki se retiró agotado, pero poco después, la puerta volvió a abrirse. Era Road.

—Allen.

—Road, ¿qué pasa?

—¿Puedo dormir contigo?

Allen se quedó en silencio unos momentos por la petición de la chica, recordando lo que Tyki le había dicho en el armario. ¿Ella le gustaba? Sabía bien que no la odiaba, pero después de todos los problemas que enfrentaron juntos, ¿podría llegar a gustar de ella? Tyki le dijo que era obvio que ya lo hacía, pero ¿en verdad era así? ¿Cómo podía darse realmente cuenta de ello? Road lo miraba con expectación, esperando que su respuesta fuera positiva.

—¿Sheryl no se enojará? —le preguntó simplemente.

—Mi padre no tiene porqué saberlo.

—¿Segura? No quiero que me asesine por ello.

—No lo hará, Allen.

—Bien—aceptó con un pequeño rubor en las mejillas—puedes quedarte.

Pudo ver claramente la cara de felicidad e incredulidad que Road puso al escucharlo, mientras se subía a la cama y se acurrucaba en su pecho.

—Buenas noches, Road—le dijo suavemente mientras cerraba los ojos. Era increíble que se sintiera tan tranquilo en su presencia.

—Buenas noches, Allen—y sin previo aviso, Road le dio un beso de buenas noches. Parpadeó un par de veces confundido, ya que eso no se lo esperaba para nada—te quiero—confesó la chica antes de volver a recostarse a su lado, pero Allen se lo impidió, tomándola del brazo y volviéndola a besar torpemente.

—Me besaste—le dijo ahora la Noah sorprendida.

—¿Te molesta?

—Por supuesto que no, pero ¿por qué?

—Porque tal vez Tyki tenga razón.

—¿Tyki? ¿Qué tiene que ver Tyki con nosotros?

—Tyki cree que me gustas—confesó avergonzado.

El rostro de la chica se iluminó y Allen estaba agradecido de haber logrado aquello.

—¡Allen! — Road se lanzó a sus brazos sin dudarlo. El chico solo pudo sonreír, después de todo, Tyki estaba en lo correcto. Bueno, suponía que al compartir cumpleaños pudiera entenderlo mejor.

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NA: Nada que ver con la fecha en la que estoy publicando esto, pero me estoy poniendo al día con mis borradores y si mal no estoy, esta historia quería subirla para el cumpleaños de Allen del 2019. ¿La hubiera subido hasta esta Navidad? Tal vez, pero ya que.