Los personajes son de Stephenie, pero la trama es mía. Recomiendo escuchar "White dress" de Lana del Rey porque esa canción fue la base principal para la creación de este capítulo.


White Dress

Mientras conducía no podía dejar de pensar en cómo era que había llegado hasta este punto, estaba cansada, hambrienta y adolorida. Quizás haber escapado de Tanya como lo había hecho no era la mejor opción después de todo, pensó en que probablemente en esos momentos estaba furiosa, gritándole a cuanta persona se le pusiera en frente.

Intento convencerse a sí misma de que unos momentos de paz lo valían; después de los titulares de esa semana lo único que quería hacer era encerrarse en su habitación de hotel y dormir hasta que el drama hubiera pasado, pero con Tanya a su alrededor programando entrevistas o conferencias de prensa para aclarar los rumores (o avivarlos) eso hubiera sido prácticamente imposible.

Los chismes de esta semana eran dignos de una telenovela, quizás era el drama más estúpido en el que se había visto involucrada, recordaba perfecto el titular de la primera nota que leyó en internet "Isabella Swan rompecorazones y rompehogares", en él "fuentes cercanas" hablaban de cómo había cambiado a su exnovio por el vocalista de la banda con la que recientemente había grabado un dueto, Benjamin Dalal, quien estaba casado con la famosa modelo Tia Dalal, y como este supuesto amorío estaba causando un divorcio entre ellos. Eso no le molestaba en absoluto, Benjamin y Tia eran grandes amigos suyos y ninguno de los dos creía en esa basura; estaban acostumbrados a que los relacionaran con cualquier persona que llegara a ser cercana a ellos, así que un chisme más o uno menos no importaba en absoluto, lo que en serio la había sacado de quicio eran las declaraciones y supuestas pruebas que su exnovio Paul le proporciono a la prensa para "confirmar" los rumores.

Lloró al enterarse, no porque amara a Paul y este la hubiese lastimado, sabía que no lo había amado en absoluto y por eso mismo había terminado su relación, pero le tenía cariño, para ella era inconcebible que alguien en quien había confiado y a quien había querido la hiriera de esa forma, más aún cuando pensaba que habían quedado en buenos términos, pero al parecer el actor novato quería colgarse de su fama para poder alcanzar la notoriedad que tanto deseaba, fue aún peor cuando Tanya le dijo que aprovechara la situación, que el dueto sería un éxito por el morbo que la noticia estaba generando.

Ni siquiera en sus momentos más desesperados a ella se le hubiera ocurrido recurrir a esos trucos tan baratos. Así que después de llorar y de dar un concierto, tomó sus identificaciones y tarjetas, apagó su teléfono y se las arregló para robar las llaves de la camioneta de una de sus asistentes, no sin antes dejarle una nota disculpándose y avisándole que su chofer estaría a su disposición para cualquier viaje que necesitara realizar.

No tuvo tiempo de llevar nada más consigo, ni ropa, ni provisiones, nada, pese a su cansancio sonrió, todo esto le traía memorias de cuando cumplió 17 años y lo dejó todo para intentar alcanzar su meta, que ironía, se dijo a sí misma, estaba escapando del mismo sueño que 7 años atrás perseguía con todas sus fuerzas.

Recordaba perfectamente el momento en el que partió de su casa en Phoenix, dejando atrás a su madre, su padrastro, sus amigos, a la pequeña cafetería en donde la dejaban cantar sin paga y a donde gracias a las propinas de la gente logró ahorrar los únicos 355 dólares que la ayudarían a más o menos sobrevivir en sus primeros días viviendo en California.

Llegó ahí con una maleta llena con tan solo ropa interior, 5 vestidos y dos pares de zapatos, sus 355 dólares y un sueño más grande que ella misma.

Durmió en hoteles de mala muerte, habían días en los que solo comía apenas un sándwich, fingía que todo era maravilloso cuando tenía la oportunidad de llamar a su madre y fue rechazada de múltiples trabajos por ser menor de edad hasta que desesperanzada consiguió un puesto como mesera en un restaurante de micrófono abierto.

Para no desgastar tanto la poca ropa que llevaba consigo, había optado por llevar siempre a su trabajo un vestido blanco, era algo ajustado, pero la hacía sentirse bonita y era más fácil (y más barato) lavar ese vestido en la ducha al llegar a casa y dejarlo secar toda la noche, que utilizar todas sus opciones y pagar una lavandería.

En ese lugar conoció a Alice Brandon y a Rosalie Hale, con quienes ahora tenía menos contacto del que le hubiera gustado, su recuerdo la hizo sentir nostálgica, sin el aliento de Alice y la seguridad que Rosalie le había ayudado a tener, quizás nunca hubiera llegado a donde se encontraba ahora.

Rosalie estaba casada con Emmett, el hermano de Alice, quien a su vez era novia de Jasper hermano de Rose, los Hale habían dejado sus hogares después de que sus padres le dieran la espalda a Rosalie cuando ella anunció que no quería casarse con él viejo adinerado que sus padres habían elegido para ella, Jasper no abandonó a su hermana y partió con ella a L.A. en donde conocieron a sus almas gemelas, Emmett y Alice, los dueños del restaurante y cuando Rose llegó a pedirles trabajo Emm cayó inmediatamente enamorado, se ganó su corazón y al año de conocerla le propuso matrimonio, con Jasper y Alice la historia fue un caso totalmente aparte, ella fue la que lo conquisto a él.

Sonrió triste, los dos años que pasó a su lado se encontraban entre sus recuerdos más preciados, pasaban el verano tirados en el pasto de alguna plaza escuchando a los músicos tocando jazz o iban a la playa y cantaban a todo pulmón a The White Stripes, bailaban rock and roll en la arena y la hacían darles pequeños conciertos con la guitarra que Alice le había regalado. Todo parecía tan simple, tan fácil.

Gracias a Alice y Rosalie su colección de vestidos aumentó, sobre todo los de color blanco porque a Alice le gustaba que hubiese adoptado ese color como un uniforme; vivía en un pequeño departamento y después de largas charlas con sus dos amigas, finalmente habían logrado convencerla de que cantara frente al público que tenían en el restaurante. A los clientes les gustó tanto que siempre preguntaban por "la mesera del vestido blanco y voz de ángel" y de pronto los jueves y viernes ella ya tenía un horario fijo para dar sus pequeños conciertos.

Fue después de su cumpleaños número 19 que todo cambió, un día al bajar del escenario, Tanya se acercó a hablar con ella, como buena caza talentos logró convencerla de unirse a sus filas de super estrellas y tres semanas después se encontraba grabando un demo para posteriormente presentárselo a un montón de ejecutivos que al instante decidieron firmarla.

Nunca fue más feliz que en ese momento, aquello que siempre soñó y que le parecía cada vez más lejano, en un instante se convirtió en una realidad.

Cambiaron su imagen por algo más clásico y elegante, ondularon su cabello, delinearon sus ojos, le pusieron labial rojo y para cuando salió su primer álbum de estudio, ella parecía más una estrella del cine de oro que la chiquilla de vestidos blancos que cantaba a cara lavada y el cabello recogido en una coleta dentro de un restaurante pequeño.

Cuando las ventas de su álbum se dispararon en todo el mundo y todos comenzaron a amarla y apreciarla, olvidó por un tiempo que alguna vez se sintió pequeña e insignificante, que fue una sencilla chica cantando a sus amigos con su guitarra, el lugar de esa chica lo tomó lo que ella consideraba una diosa.

Ahora que ya no se sentía como la chiquilla insegura, la sencilla muchacha o la diosa, creía que tal vez ya no necesitaba ni el lujo, ni la notoriedad, el glamour, los flashes de las cámaras que al principio le parecían hermosos. Nada de eso.

Suspiró pesadamente y cuando vio que habían pasado poco más 8 horas desde que había escapado de Chicago, decidió detenerse, había llegado a Lincoln, Nebraska y estaba exhausta, comería algo, dormiría toda la noche y al siguiente día continuaría su viaje.

Cuando finalmente encontró un lugar discreto en el cual hospedarse se puso una sudadera que encontró en el asiento trasero, acomodó la capucha para que no se viera nada de su cabello y bajó de la camioneta completamente agotada.

Solo bajo su cartera y rezándole a quien fuera que la escuchara para que al menos esa noche nadie la reconociera.

Aún se encontraba muy lejos del pueblo de su difunto padre y por nada del mundo quería que alguien interrumpiera su viaje, Forks era el único sitio en donde creía que iba a estar segura y en paz, al menos unos cuantos días.


Hola de nuevo, les dije que tenía un shortfic escrito y que pronto lo publicaría so… ¡aquí está el primer capítulo! El mood de esta historia es muy diferente al de "La Floreria", es más nostálgico que humorístico, pero definitivamente va a ser MUY corto así que es el tipo de nostalgia que puedo soportar sin hundirme en el hoyo de la depresión. Todo esto está inspirado en unas cuantas canciones de Lana del Rey y cada capítulo lleva el nombre de la canción en la que se basó.

Espero que les guste tanto como a mí me gustó escribirla y pues nada, las veo en los comentarios.