Heey, estamos de vuelta con otro de los fragmentos que tengo que escribir bien tarde en la noche porque si no, no duermo a gusto, si estos pequeñines les gustan pueden encontrar mas en mi perfil, basta con picarle a mi nombre ahí arriba, recuerden darle todo su apoyo a estos fragmentos, sin mas empezamos

La puerta de la entrada principal golpeteo un par de veces, Melissa se asomo desde la sala, estaba segura de que Gem y Michiru habían salido a la calle por diferentes motivos hace menos de una hora, fue en dirección a la puerta a ver quien era.

Al abrir se topo con…

"Oh ¿pero si no es Nazuna?" Dijo en un tono cariñoso y gentil al ver a la chica de colores vibrantes frente a la entrada.

"Hola señora Melissa" Nazuna saludo educadamente mientras agitaba su mano, Melissa se movió a un lado dándole paso a la sala, la chica capto y se adentro en el edificio.

Ambas caminaron hasta la sala, el lugar estaba bien decorado como siempre con esa aura acogedora y hogareña.

"Si buscas a Michiru, tuvo que salir por un recado, entre tanto ¿puedo ofrecerte algo?" Melissa ofreció cortésmente, aun después de todo lo ocurrido, para ella Nazuna era bien recibida en la cooperativa.

Nazuna apreciaba esa confianza, pues sabia que de todas las personas que habían sufrido daño por su juego de ser dios, probablemente Melissa habría sido una de las mas desilusionadas, el que la mujer la haya perdonado tan fácilmente seria una deuda que no podría pagar nunca.

"Muchas gracias, pero… vine a ver a Shirou ¿se encuentra?" Un pequeño atisbo de timidez en su voz, no quería evidenciarse, pero tampoco podía decirle que había venido por nada.

Melissa no oculto su sorpresa.

"¿Oh? ¿Ocurre algo querida?" Melissa no pudo evitar consternarse, pues si Shirou debía intervenir tenia que ser algo grave.

"N-no, no es nada serio, pero… tengo algo que tratar con el" Nazuna explicó nerviosa detectando la preocupación en ella.

Melissa formo interrogantes, pero no se permitió ser entrometida.

"Esta en su oficina querida, si necesitas algo no dudes en pedirlo" Melissa paso junto a ella y fue hacia el sofá.

"Muchas gracias" una vez dicho, Nazuna asintió en agradecimiento y se dirigió a la oficina del lobo, una vez cerro la puerta detrás de ella sonó un ligero *click* que no fue escuchado por Melissa.

La mujer Wombat aún tenía algo de curiosidad al respecto, ella sabia la clase de cosas en las que trabajaba Ogami, así que no pudo evitar estar preocupada.

¿Que estarán tratando ahí dentro?

"Hmmmmmm~" Nazuna ronroneo contra el mullido cojín del sofá mientras se derretía sobre el mismo.

Shirou estaba concentrado en el acto, sentado sobre la chica sin poner realmente su peso sobre ella, ambas rodillas sobre el sofá con ella debajo, presionaba sus manos en su espalda con una fuerza moderada, toco un punto bastante sensible en su región lumbar que hizo que Nazuna suspirara de puro alivio.

"Si~ ahí~ mmmmh~" Un escalofrío recorrió su espina al sentir la tensión acumulada de hoy siendo exprimida de su cuerpo con el tacto que le proporcionaba el hombre albino con sus firmes manos.

Shirou movió sus pulgares en círculos por la espalda de la chica.

Sin detenerse, le hablo desde atrás de ella.

"Creí haberte dicho que no hicieras de esto un hábito… " La voz gruñona y nada dulce de Shirou sonó a sus espaldas.

Nazuna hizo un gesto un tanto molesto ¿que le costaba ser lindo con ella de vez en cuando?

Todo había comenzado hace una semana atrás, cuando ella llego a su oficina con un dolor atrofiante de espalda, producto de su nada bien planeada rutina casera de ejercicios, la intención de venir corriendo a la cooperativa era que la llevaran con un doctor o lo que fuera… no sabia a quien mas recurrir.

Termino encontrándose solo con Shirou, este le dijo que no seria necesario, solo le dio un tirón y coloco su espalda de vuelta en su sitio…

Que tuviese conocimientos de ello llevo a Nazuna a hacer preguntas, sobre que mas sabia sobre eso.

El resto es historia.

"Hmmm~ No es mi culpa, nggg~ Marie me exprime hasta el cansancio… dice que no podemos contratar personal porque no ganaríamos un centavo, Nhggg~, mi espalda empieza a matarme incluso si uso mis poderes… y no me veo nada linda con brazos de oso, mhhhh~" La voz de Nazuna estaba acolchada al tener el cojín cubriendo su cara, Shirou también suspiro al saber que eso no podía ser mentira, conocía suficiente a la visón para saberlo, coloco ambos pulgares en su espalda y presionó mientras se movía hacia arriba.

Mientras ambos pulgares se deslizaban por su espalda aun cubierta por su blusa, emitió otro gemido de pura bliss, podía sentirse mal por obligar al lobo a atenderla, pero la recompensa era demasiada alta y valdría cualquier aullido de dolor.

"ahn~ u-un poco más arriba" Dijo en casi un balbuceo, Shirou acató y subió hasta su espalda alta, coloco sus dos palmas en su espalda, sus manos prácticamente abarcaban sus omoplatos completamente.

Su cintura era delgada y los músculos que protegían su espalda eran blandos y delgados, tenia que tener cuidado con no ser muy brusco.

Su mano derecha se deslizo un poco al costado por error sintiendo algo suave, Nazuna se percato de esto, ambos se congelaron por dos segundos antes de que Shirou devolviera sus manos a su espalda algo enervado, eso había sido el inicio de su pecho derecho, probablemente el estaría avergonzado…

¿Como decirle que no le había molestado? Realmente no había un solo lugar de ella que el no conociera.

En efecto… esto seria mejor sin su blusa ni su bra, se sonrojo por el pensamiento, pero… ¿que se los impedía? No harían nada malo, solo era un… masaje, solo eso.

Antes de poder comunicar su idea, una sensación caliente en su espalda le hizo alarmarse.

"Vaya, quien diría que tuvieras un nudo así" Shirou no oculto su sorpresa aun con su tono usual.

Eso vino de su espalda alta ¿realmente tenía tanta tensión?

Cualquier idea fue ahuyentada con eso, el masaje siguió por algunos minutos, por momentos Nazuna empezaba pestañear, quedarse dormida en esta situación seria ideal.

Paso un tiempo y Shirou se detuvo súbitamente, salió de encima de ella, Nazuna lo miro por el rabillo del ojo.

"¿E-es todo?" Mas que molesta parecía desilusionada.

"Hacer esto en exceso puede ser dañino, será para luego, tengo algo que terminar acá" Explico, se puso de pie y volvió a su escritorio.

"Ya lo había escuchado, pero puedes ayudarme con otra cosa además de mi espalda…" Se dio una bofetada mental por hablar de mas, se suponía que eso fuese un pensamiento.

Para su mala suerte Shirou era bueno escuchando, especialmente cosas que no debería.

"¿Cómo?" Se dio la vuelta en su silla para mirarla.

No supo exactamente que responder, su imaginación empezó a hacer su trabajo.

Varias imágenes asaltaron su mente, imágenes de ella sentada desnuda en sus piernas mientras le daba un tratamiento bastante indecente a su cuerpo, ella gimiendo incontrolablemente, victima del asalto de sus manos.

Su imaginación era demasiado peligrosa.

"N-nada…" Nazuna miro a otro lado aun recostada en el sofá, intento disipar cualquier pensamiento fuera de lugar.

"Ya veo…" Shirou levanto una ceja y volvió a lo que estaba haciendo.

"… ¿Puedo quedarme un rato?" Pregunto algo insegura, no le hacia gracia solo haber venido por un masaje "Yo, creo que olvide como caminar teehee~" Lo dijo como una broma, pero todo su cuerpo seguía adormecido por el generoso tratamiento.

"Haz lo que quieras, solo no hagas demasiado ruido" Dijo plano como siempre, sin darse cuenta de lo brusco que había sonado.

"Hmmmp~" Nazuna le lanzo una mirada molesta por la espalda, enserio que sabia como arruinar un momento.

Busco su acomodo en el amplio sofá, decidió que no había nada mejor ahora que tomar una siesta, probablemente al despertar Michiru ya habría vuelto… cerro los ojos y se dispuso a reposar.

Solo el sonido de la pluma de Shirou llenando espacios en blanco en el papel y su respiración acompasada.

Eso fue lo único que se escucho por unos momentos.

"Pensabas en algo sucio ¿no es así?" Dijo sin darse la vuelta, no sonando con mucho interés, pero un atisbo de acusación estaba mezclado en esa pregunta, Nazuna abrió los ojos de golpe.

Su cara ardió.

"Deberías pensar en el tiempo y el lugar, Melissa esta al lado y suele entrar para hacer limpieza" Siguió hablando en el mismo tono, Nazuna gesticulo, pero no salió una sola palabra.

"Sera otro día ¿tal vez en tu lugar? …" Su departamento… se imagino toda clase de escenarios que podrían ocurrir ahí con toda la intimidad que podría proporcionarles.

El rojo de su cara se extendió.

Ella quería corregirlo y decirle que era un malentendido, pero todo lo que salió fue un "O-okay", seguido, enterró la cara en el cojín dispuesta a tomar esa siesta, con el calor de su cara subido al infinito eso seria difícil.

Detrás de ella, Shirou dio un suspiro de alivio… no estaba seguro de donde había salido eso, pero temía haberla hecho enfadar, aparentemente no era el caso, podía leerla como un libro abierto.

Aunque tenia que dejar de decir lo primero que le viniera a la cabeza.

Chismografo.

Realmente no soy un experto en quiroprácticos por lo cual no deberían tomar enserio mucho de lo que escribí.

Tomo mucha inspiración en fanfics gringos, así que uno de los estatus que se repiten es que Shirou probablemente sepa un "Poco de todo" por su edad, incluyendo masajes.

Nazuna visita la cooperativa muy a menudo últimamente.

Melissa no lo ha notado, pero le pareció raro que Nazuna viniera a ver a Shirou en especifico.

Si ya leyeron Mingling entonces no hay razón para explicar porque este par es tan cercano.

Bueno, que mas decir además de que lean mis otras historias, cualquier critica o comentario es bienvenido, también voten por la historia o añádanla a favoritos, de esa manera se que no escribo solo para mi, los veré en otro fragmento.