(Enamórate de alguien más - Morat.)
Quiero explicaciones, no palabras bonitas.
Hola de nuevo, como se los prometí la demanda pasada, les traigo un Two-Shot Lukanette, por que nunca nos vamos a cansar de él xd. Está inspirado en la canción "Enamórate de Alguien Más" del grupo colombiano Morat, también hay unas referencias a su canción xd. Espero que sea de su agrado.Pd: Dato innecesario: Morat es una de mis bandas favoritas uwu
— Ay chica, no sabes cuánto lo siento — decía la morena palmeando la espalda de su amiga, quien se encontraba hecha bolita en su cama.
— Pero es que realmente no lo entiendo ¿Por qué lo hizo? Yo sí lo amaba y el me juraba amarme más que a todo — decía la oji-azul sollozando.
— Chica... No tengo palabras para decirte algo ahora, pero lo que si haré es estar para ti no importa la hora ¿Bien? Ahora solo toca superarlo.
— Pero Alya... Lo amo y eso no se puede olvidar de la noche a la mañana.
— Se que no, pero poco a poco... ¿Cómo te dijo? Enamórate de alguien más, pues aunque sé que no lo vas a cumplir, tienes que superarlo.
— Ya lo extraño.
— Y así será de ahora en adelante ¿Pero que hacerle? Se que llorarás por su partida y sufrirás, pero ahora solo queda estar para ti y amarte solamente a ti.
Finalizó la morena quien estaba junto a la peli-azul desde la mañana por qué su novio había finalizado su relación.
Pero... ¿Qué es lo que pasó?
Vamos desde el inicio
Luka y Marinette se hicieron novios cuando el le pidió que fuera su novia cuatro años después de haberse conocido.
Luka con 21 años ya tenía una banda famosa en el país y alrededores, de la mano de Jageed Stone iban creciendo y cruzando fronteras con su música.
Pero una semana antes de terminar su relación de dos años, su representante lo llamó para que se citaran en algún lugar para charlar.
El debía admitir que aunque su carrera le gustaba, tenía que trabajar en algo más, pues tenía planeado formalizar aún más su relación con su querida mariquita. Y no quería enredarla más en las garras de la prensa y medios de comunicación.
— Lo que trato de explicarte es que no quiero que involucres a tu chica más de lo que está — golpeó la mesa con su puño mostrando la molestia que le causaba aquello.
— ¿A qué te refieres? — preguntó un Luka confundido.
— Me refiero a que debes terminar tu relación, y se que vas a decir que ella vale más que la música pero ¿Enserio quieres que, después de firmar el contrato con aquel director de cine, tu novia sufra de los falsos rumores que correrán después de que actúes en la serie? — el hombre enarcó la ceja burlandose.
— Tenemos la suficiente confianza como para explicarle las cosas.
Jacob, su representante azotó su mano en la mesa asustando a Luka.
— Haber niñato, quiero que firmes el contrato y cortes con tu noviecita o si no toda tu fama se irá al maldito caño.
— Y yo ya te dije que no lo haré, no puedes obligarme — el oji-azul se defendió al igual que a su novia.
— Oh, claro que lo haré, si no haces lo que te pido ¿Adivina quién va a pagar las consecuencias? Si, tu hermosa novia.
— A ella no la metas imbecil — gruñó amenazante
— La meto por que quiero ¿Qué crees que pasará si no obedeces? ¿A tu novia le gusta la moda, cierto? Tengo contactos y socios en ese ramo, mejor, ¡Tengo de amigo al gran Gabriel Agreste! ¿Y qué crees? Con solo una llamada puedo pedirle el favor que me debe y créeme... Lo cobraré muy bien.
— Si le haces daño a Marinette, no respondo.
— Si le hago daño a Marinette será por tu culpa ¿Cómo crees que reaccione? ¿Crees que te seguirá amando después de enterarse que tú fuiste el culpable de que no pudo cumplir sus sueños? Quedas advertido.
Y sin más, Jacob salió de aquel lugar privado dejando más que buena propina al mesero que los atendió.
Luka quedó en completo silencio, pues las palabras de aquel señor aún rondaban por su mente causándole un mareo... Dios, no llegó a confiar 100% en el por qué sentía notas furiosas y malas al tratar de interpretarlo, pero por ser buen representante lo escogió a el.
¡Vaya mierda!
Luka meditó toda esa plática y llegó a una solución...
Jamás dejaría que Marinette sufra por no poder cumplir sus sueños.
Sueños por los que ella se había desvelado y tomando su tiempo libre dedicando mucha atención... Para nada.
Si, si que lo jodía y mucho pero el nunca sería el enemigo de su musa.
Por eso varios días después de estar evitando a su novia para pensar con claridad, la citó junto al parque que quedaba frente a su casa, pues no quería que ella sufriera un accidente al estar con su mente en blanco o llorando.
Por qué la conocía bien, y sabía que podía actuar así.
— Hola mi amor — saludó alegremente la peli-azul a su querido novio, pues según ella y lo que le había dicho, estaba muy ocupado componiendo bajo presión y también al estar arreglando papeles con el director de la serie con el que trabajaría.
Luka trató, trató con todas sus fuerzas evitar a aquella mujer que amaba, pero el corazón mandó en ese momento y la abrazó.
El último abrazo...
Pero Marinette en el primer instante notó algo raro en él, pero decidió callarlo por que sabía que le iba a platicar.
Pero para quitarle lo angustiado, lo besó tiernamente, por qué sabía que eso lo relajaría más.
Quedó pasmada ante tal acto, normalmente la acercaría más a su cuerpo para recibir más besos y seguir besando su cuello hasta que ambos ardieran en deseo...
Pero no ocurrió...
— ¿Pasó algo malo? Por qué nunca habías evitado seguir con el beso y eso me preocupa.
¿Cómo decirte la verdad? ¿Seguirías con esto apesar de todo?
— Tengo que hablar contigo, siéntate — y caminaron hasta la banca más cercana donde Marinette quiso sentarse como lo hacían normalmente, pero el lo evitó...
— ¿De qué querías hablar? — habló ella sintiendo su atmósfera más densa e incómoda. Algo extrañamente raro.
— Se acabó — tenia que evitarla lo más que podía, pues si pasaba más tiempo, se arrepentiría de esto y...
Ella pagará mis consecuencias...
— ¿Qué se acabó? —inquirió nerviosa.
— Lo nuestro Marinette, nuestra relación se acabó — y luchaba consigo mismo para arrepentirse, pero era demasiado difícil.
— ¿Qué? ¿Por qué? ¿Hice algo malo? Sabes que debes confiar y arreglar nuestros problemas hablando — habló rápida y nerviosamente la azabache pero sentía como el nudo en su garganta iba creciendo poco a poco.
Confiar...
— Por favor Marinette, ya no lo hagas más difícil, eres libre ve y enamórate de alguien más, reemplazame.
— ¿Por qué estás terminando esto? ¿Donde quedaron aquellos planes y sueños por cumplir... Yo... No soy capaz de olvidarte.
— Solo hazlo ¿Si? Solo me quedé contigo por costumbre — dijo en tono frío para no dar a conocer la debilidad que sentía — pero conocí a alguien mejor, se que me odiaras por esto, pero no quiero ilusionarte más
— Dame una maldita razón, dame una excusa para odiarte.
— Esa es mi razón, ya no te amo, desde hace tiempo no lo hago.
— ¡Pero yo sí! Se que este no eres tú, se quede en verdad me amas por qué te conozco.
— Marinette... Las personas cambian, — suspiró — yo cambié y con ello mis sentimientos, no pidas que me quede por qué no lo haré.
— ¿Solo vas a decir eso?
— Si. Esto se acabó.
Marinette con el corazón roto se fue del lugar hacia su casa, entro a escondidas de sus padres para que no la vieran pues lo único que quería era hablar con ellos y que se enteraran de lo ocurrido.
Dolía. Dolía como el mismísimo infierno el escuchar que ya no la amaba. Le ardía el pecho el saber que su historia había dado fin.
Pero desde antes, ella sabía que quería que fuera feliz, aún si su felicidad ni era con ella; tan siquiera agradecía un poco el que él fuera sincero.
En toda la tarde, no salió de su cuarto, sus padres preguntaron que qué le ocurría a lo que ella sencillamente contestaba que tenía mucha presión en sus bocetos y que no quería interrupciones; a lo que ellos se lo tomaron normal, puesto que eso ocurría algunas veces.
Al otro día, Alya fue a su casa por qué su amiga la citó, contándole todo lo que había pasado para tener un hombro en el cual llorar.
Alya siempre estuvo para ella, y esa vez no era la excepción; aunque tenía unas enormes ganas de cortarle las pelotas a aquel chico por ser tan descarado con su amiga... Pero sabía que si se llegase a enterar su mejor amiga, sería muy difícil perdonar aquello. Y no la quería lastimar más de lo que ya estaba.
Pasaron dos meses, dos meses desde el día en que la relación Lukanette cómo se hacían llamar, dió su fin, sorprendiendo a todos
