LyP
Esto empezó siendo un fic para burlarme de la típica glorificación de Krum y la vilificación de Lavander, y acabó siendo un fic acerca de las inseguridades de Hermione. Todavía no entiendo como ha ocurrido.
La paz reinaba en el hogar de los Weasley-Granger. Algo no muy común desde que sus hijos habían llegado a la adolescencia.
Hermione y Rose estaban en la biblioteca de la planta superior revisando una redacción que Rose tenía que entregar en Hogwarts la semana siguiente. Mientras que las chicas estaban ocupadas, Ron y Hugo estaban en el salón escuchando un partido de Quiddtch.
Justo en el momento en que los buscadores se lanzaban tras la snitch, una enorme lechuza entró por la ventana, arrojó un sobre a sus pies y con un graznido de desprecio, desapareció por la misma ventana por la que había entrado.
"Vaya bicho más desagradable." Comentó Hugo mientras recogía la carta del suelo. La observó por un momento para gritar después a pleno pulmón. "¡Mamá, ha llegado una carta para ti de..." Le dio la vuelta al sobre. "¡de Víctor Crun!"
En un segundo Ron apareció a su lado. "Déjame ver." Cogió el sobre inspeccionandolo como si fuera a explotar. "Pues sí que es de Vicky. ¿Este hombre no se va a cansar nunca?"
"Hugo, mamá te ha dicho cien veces que no grites." Le ceprochó Rose mientras bajaba las escaleras con su madre.
Hermione intentó disimular su satisfacción. Sabía que era patético, pero atesoraba cualquier muestra de aprecio por parte de sus hijos.
Desde que empezaron la adolescencia le costaba mucho relacionarse con ellos, sobretodo con Rose. Su hija era muy inteligente, pero también era femenina, deportista, sociable, y muy rebelde. Todo lo que ella jamás había sido. Le dolía, pero Hermione tenía asumido que Ron, divertido, Auror y socio de George, era el preferido de sus hijos. Ella sólo era la madre estricta que nunca estaba en casa.
"Tienes un carta de tu eterno pretendiente Vicky." Dijo Ron con una sonrisa de oreja a oreja.
"No le llames así." Respondió Hermione molesta mientras le quitaba el sobre de las manos.
"Mamá, quien es Vicky?" Preguntó Rose interesada.
"Es Viktor. Es solo un amigo de la infancia."
Ron puso los ojos en blanco y murmuró algo que sonó como "Sí, demasiado amigo."
"Pues papá no parece muy contento con él." Respondió Rose con una sonrisa pícara.
"Eso es porque no aguanta que Viktor fuera mi primer novio." Las palabras se le escaparon antes de que pudiera rectificar. Sus líos adolescentes con un famoso jugador de Quiddtch no era algo que quería que su hija imitase.
Rose encaró a su madre sorprendida. "¿¡Tu primer novio no fue papá!? Tu siempre nos habías dicho que te enamoraste de él desde el primer momento que lo viste!"
Ron intervino en la conversación. "Sí, estaría muy enamorada, pero en el momento que..." Puso una voz de exagerada admiración. "el famosisimo Vicky, le pidió salir, todas esas neuronas que tiene en la cabeza se le hicieron agua."
"¿Tu primer novio era famoso?" Preguntó Rose, intentando sonsacar más información. Quería muchísimo a su madre, pero siempre había sido un poco aburrida. Esta clase de enredos amorosos era algo totalmente inesperado en ella.
"Mucho. Viktor es un jugador de Quiddtch mundialmente famoso." Dijo Hermione, sin poder evitar un deje de orgullo, ante el interés de su hija.
Hugo abandonó el partido por un momento, extrañado. "¿Estas segura? No me suena ningún Víctor Crun que juegue al Quidditch." Hugo era un fanático de ese deporte. ¿Cómo podía haber un jugador que él no conociera?
"Claro que es famoso. Y fue uno de los campeones del torneo de los tres magos." Respondió Hermione un poco molesta por que Hugo dudase de sus palabras.
"¡Pero mamá! Eso es cuando erais jóvenes. Ese Víctor debió retirarse hace siglos. ¡Es de la prehistoria!" Respondió Hugo gesticulando exageradamente.
"Pues sí, hijos. Vuestra querida madre no paraba de babear por un jugador prehistórico." Dijo Ron divertido.
Hermione puso los brazos en jarras. "¿Tu hablas de babas cuando te pasaste meses besuqueandote con Lavender Brown!?"
Rose y Hugo giraban las cabezas entre uno y otro. Esa tarde estaban descubriendo muchas cosas interesantes sobre sus padres.
"¿Que culpa tengo yo de que estuviera loca por mí? Es mi magnetismo animal." Respondió Ron sin darle importancia.
Rose interrumpió emocionada. Esto era mucho mejor de lo que esperaba. "¡Espera! ¿Lavender Brown? Como la Lavender de Lyp?"
"¿La Lavender... de donde?" Ron no tenía ni idea de que hablaba su hija.
"¡Lyp!... ¡La marca de ropa! Lavender y Parvati. L y P." Rose explicó como si fuera la cosa más simple del mundo. ¿Como podían ser adultos y no saber algo tan obvio!?
Ron lo pensó un segundo. "¿Lavender y Parvati? Sí, tienen que ser ellas. Ya eran muy amigas en Hogwarts. ¿Se dedican a hacer ropa?"
"¿¡A hacer ropa!?" Exclamó Rose totalmente escandalizada. "Son las mejores diseñadoras de alta costura del mundo. ¡Son divinas! ¿Y eras el novio de Lavender? ¡No me lo puedo creer!"
"Sí que lo era." Respondió Ron muy ufano. "Aunque a tu madre no le gustaba mucho." Continuó con sorna.
Hermione refunfuñó. "Si la muy... no se hubiera metido donde no debía."
"Entonces, dejaste a Lavender por mamá?" Rose miró de arriba a abajo a su madre, como intentando descubrir alguna virtud hasta entonces escondida.
Hermione exclamó ofendida. "¡Ni que fuera una fracasada! Mi trabajo..."
Hugo y Rose la interrumpieron, recitando de memoria con voz monótona. "Mi trabajo en el Ministerio es muy importante. Ayudo a hacer un mundo mejor para todos. Ya lo sabemos, mamá."
"¡Es verdad!" Protestó Hermione, cada vez más dolida.
"Ya. Pero dejar a Lavender..." Rose observó a su padre con admiración. "Debías de querer mucho a mamá."
Ron le lanzó una sonrisa a una todavía malhumorada Hermione. "La quería muchísimo, y la sigo queriendo."
Hermione se cruzó de brazos sonrojandose. "Eres de lo peor. ¿Ahora como voy a seguir enfadada contigo?"
Rose le tiró de la manga a Ron. Ahora había cosas más importantes que los amorios adolescentes, o presentes, de sus padres. "Papa ¿Crees que podrías presentarme a Lavender?"
"¡Por supuesto! Estoy seguro que no habrá ningún problema: Yo fui su primer amor."
Ron le giñó el ojo a su esposa. "¡Y tu madre la salvó de una muerte horrenda!"
Rose se giró hacia su madre con los ojos como platos. "¿Es verdad eso, mamá? ¿Le salvaste la vida a Lavender Brown?... ¡Porqué nunca me has contado algo tan importante!? Tienes que explicármelo todo!"
Hermione no pudo evitar sonreír a su maravilloso esposo.
Mientras realizaba la revisión y traducción me he dado cuenta de lo tradicional que soy. Incluso en un pequeño ficlet 'sin trama' de 1k como este, no puedo evitar utilizar la típica Presentación, Nudo y desenlace. lol.
