Era una mañana tranquila en uno de los bosques circundantes a las afueras de la ciudad. Las aves pasaban revoloteando sobre los árboles en busca de alguna fruta o insecto para poder ingerir para sus estómagos. El sonido de un auto en la solitaria carretera rompió ese plácido silencio, conduciendo a uno de los lugares designados para un día de campo.
El auto era de color azul claro. No era tan llamativo para querer robarlo, ni lo suficientemente grande para una gran familia. Era un auto pequeño con una cabina de dos personas, piloto y copiloto. El conductor/ra había pedido permiso para su primera semana de vacaciones al tercer mes de ese año. Sus casi turnos dobles diarios habían hecho maravillas en sus ahorros. Aunque era agotador, para tratar de mejorar el ánimo de la persona más importante en su vida, valdría la pena.
"Te apetece si nos colocamos cerca del río para comer querido?" Su voz era dulce. Claramente femenina. Pero esa dulzura no podía ocultar la incomodidad y tristeza a quien le estaba hablando.
"Si… es un buen lugar" su hijo, quien habló poco más alto de un susurro, le respondió. Su ánimo, aunque no tan destrozado como hace casi un año, era bastante bajo.
Uno podría decir que para alguien que tenía 5 años era mala señal que estuviera tan decaído. Podría estar enfermo, algo le molesta, las opciones se enumeran por decenas. No. Éste pequeño estaba con ese estado de ánimo por una razón que él considera importante.
Habían desmoronado su sueño. El sueño de ser un héroe.
Resulta que en el planeta, las personas nacen con algo llamado Quirk. Este Don es variado en muchas formas. Desde lanzar fuego por los dedos hasta tener un par de alas en tu espalda. Han pasado poco más de dos siglos desde que se presenció el nacimiento de este fenómeno en la sociedad, iniciando en China. Desde ahí las cosas se habían complicado en cada país, los gobiernos casi entran en pánico cuando no supieron qué hacer.
Fue entonces cuando, después de unas décadas, se inició el programa del trabajo de Héroes. Antes de esto la gran mayoría eran vigilantes. Si bien las personas les agradecían sus acciones, habían otros de mente cerrada que debían seguir reglas, protocolos. Esa fue una de las causas por las que se creó este trabajo, y los vigilantes que se negaran a cumplir la ley dada por el gobierno, sería perseguido como un criminal más.
Claro, este efecto no fue favorable para nadie. Si no se completaba los requisitos y no se obtenía la licencia de héroe, no se podía ejercer los Quirk ni siquiera para detener un asalto. A causa de esta gran restricción dieron vida a los que son clasificados como villanos.
"Aún no lo supera" le dolía verlo de esa forma. Antes de esa visita al médico era una bola de canela llena de alegría y entusiasmo. El contraste del antes y el después no tiene ni un punto de comparación. Aunque esa noche no le dijera nada cuando le preguntó si podría ser un Héroe como All Might entre lágrimas, sabía que igual le había hecho daño, aún con el abrazo que le dio para tratar de reconfortarlo.
La conducción duró solo unos pocos minutos más. Luego de una vuelta habían llegado a su destino. Fue solo para pasar el día, tratar de animar a su bebé de alguna forma. Una vez allí se bajó del auto y abrió el maletero para sacar las cosas.
Fuera de la vista de su hijo, Inko Midoriya tenía ganas de llorar.
"Kā-san" ella nunca notó el sonido de sus pasos, por lo que se sobresaltó un poco por el repentino llamado "Puedo… mirar el lugar?".
"Eh? Oh… si, no creo que sea malo" vio como su hijo se dio media vuelta para observar los alrededores "No te alejes tanto Izuku!" No lo detuvo ya que pensó que necesitaba espacio para poder aclarar sus ideas.
Izuku Midoriya estaba destrozado.
"No puedo ser un héroe" desde hace un año sabía que no todos nacían igual. Eso lo aprendió amargamente desde que el doctor lo diagnosticó como Quirkless. Aún estaba a salvo de lo que se avecinaba. Pero era solo cuestión de tiempo para que empezaran los verdaderos problemas.
El ostracismo sería malo para él. Y sumando más sal a la herida también sería abusado y aislado de la mayor parte del contacto humano, solo por no tener un Quirk. No. Ya lo estaba sufriendo. Desde que Katsuki le había preguntado a Inko todos en el jardín lo estaban acosando.
Como nunca había hablado de eso Katsuki fue a preguntar. Y aunque Inko creía que no haría daño que el supiera, se arrepentía que el se enterase de los exámenes. Katsuki había resultado ser el matón principal de Izuku. Y para colmo también lo eran los otros niños que estaban con él. Sus seguidores como él les decía.
Se enteró de esto cuando fue a buscar a Izuku un día y observo como Katsuki lo había hecho a un lado con un empujón, sin que nadie más hiciera algo. Una acción que Inko había reclamado a los profesores sobre esa clase de actitud. Pero simplemente lo desestimaron como cosas de niños.
En el año que había pasado estubo bastante atenta con su hijo el jardín. Incluso le pregunto a su amiga cómo era que se comportaba Katsuki con su hijo la mayor parte del tiempo. El que ella le apartará la mirada le decía todo lo que queria.
Izuku simplemente caminaba sin ningún rumbo fijo. No tenía ningún tipo de ánimo para nada desde hacía mucho tiempo. De hecho, pareciera que su tiempo se hubiera detenido. La vista del mundo colorido que tenía se había opacado, perdiendo interés en todo y todos.
De hecho. A los ojos de Izuku, todo era gris.
Descontando ligeramente a su madre, aunque no fuera mucho, ella aún tenía algo de color. Pero… no era tanto para hacer mucha diferencia. Esperaba que ella iba a reconfortarlo después de salir del hospital. Pero en vez de eso, lo abrazo disculpándose una docena de veces.
De no ser por el amor de su madre, también la estaría viendo gris.
Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando su pie chocó con una protuberancia en el suelo. Casi había caído de cara, pero eso no quitó el hecho que se había caído. Apoyado con manos y rodillas en el suelo levantó la vista de lo que sea con lo que había tropezado.
Su vista se elevó más, y más, y más, hasta la entrada en forma de Tori de lo que podría ser un templo. Las escalera y la pequeña estructura estaban llenas de plantas y musgo, probablemente por los años sin limpiar el lugar "No sabía que había un templo aquí".
Cómo todo niño de su edad decidió subir los escalones a su propio ritmo. Aunque tomó su tiempo ya que los escalones eran algo altos y no podía subirlos sin cansarse. Solo fueron 7 minutos después en el que el joven de cabello verdoso llegó arriba, notando claramente que eran un templo.
Aunque dejando de lado todo el lugar deteriorado y lleno de plantas, noto que, justo en la parte central había algo parecido a un pedestal. El brillo carmesí llamó su atención al ser lo único que resaltaba. El pedestal estaba justo a la altura de su cuello, fue por una mirada más detalla que noto que el pilar estaba roto en la parte de abajo, posiblemente tuvo que haberse caído o alguien lo rompió de su lugar original y lo dejo aquí.
"Pero… porque es lo único que brilla" extendió su mano para pasarlo por encima. Dejando de lado el hecho que cubierto de enredaderas de plantas y algo de polvo, brillaba como una gema preciosa recién sacada y pulida.
Aunque lo que le llamó la atención fue el hecho que parecía tener una marca dentro de esta gema. Con la curiosidad ganada trepó por el pedestal roto. Aunque al hacerlo había desequilibrado el pequeño pilar haciendo que tanto el como la piedra se rompieran.
Sacando el polvo que tenía sobre él, y quejándose por el rasmillon que tenía en su codo por la caída, el reflejo rojo había llegado a su ojo derecho. Notó la gema completamente, siendo más grande que sus manos por lo que la levantó con ambas.
Lo que tenía el objeto era lo más parecido a una cruz de color negro. Pero a diferencia de las que conoce con puntas cuadradas, la que veía tenía los cuatro extremos en punta, con una pupila felina en vertical y horizontal. Era una cosa extraña en verdad. De hecho, podría jurar que tenía la apariencia de un ojo más que nada.
"¿Será alguna especie de reliquia?" Al menos esperaba que no. Aunque era algo que estaba abandonado no quería tomar algo que pudiera parecer valioso.
"¡Izuku!".
El joven levantó la vista, escuchando desde la distancia a su madre. Posiblemente ya tenía lista las cosas para poder comer. No había encontrado el río que ella dijo, pero de igual forma fue productivo. El pequeño decidió llevarse la gema con él. Tal vez podría encontrar a qué Civilización/Tribu/Religión pertenecía la gema.
XXX
"Vamos cariño. El agua está tibia para que entres" la voz cariñosa de Inko trataba de convencer a Izuku para poder entrar al agua.
Izuku estaba aún dudoso de entrar. Aunque fuera poca la velocidad de la corriente, a su madre le llegaba hasta las rodillas, lo que equivaldría que a él le cubriera más arriba del estomago. Izuku tomó una ligera aversión al agua gracias a Katsuki. Siempre que lo molestaba terminaba curiosamente en el charco de agua o lodo más cercano.
Tomando algo de valor caminó hacia su madre. Al entrar se estremeció un poco ¡El agua estaba fría! El escalofrío que sintieron sus piernas había recorrido todo su cuerpo. Mirando a su madre, quién le daba una sonrisa tranquilizadora, siguió adelante para aferrarse a la pierna de esta mientras ella se reía de su expresión.
"Puedes encontrarla algo fría, pero la sentirás tibia en poco tiempo Izuku" fueron sus palabras en lo que ella se inclinaba y acariciaba los desordenados rizos del cabello de su hijo.
Fueron unas 3 horas libres de jugar en el agua. A decir verdad, estuvo divertido. Al menos en esas horas Inko pudo ver la sonrisa de Izuku otra vez. Ya era bastante malo verlo deprimido, y tenía muchas ideas sobre qué hacer para alegrarlo. Pero suponía que esto era espontáneo. Cuando regresaran, volvería a su estado de ánimo anterior, y eso le pesaba el corazón.
Una vez que decidió que había sido suficiente, había guardado sus cosas para regresar. Habían comido el plato favorito de ambos, Katsudon, al menos Izuku sonreía por el sabor del alimento. Siempre hacía lo mismo cuando comía dicha comida. No lo culpaba, ella también había tenido esas reacciones cuando era pequeña.
En el trayecto de regreso, Inko notó que su niño estaba viendo detenidamente una piedra carmesí. No es que fuera extraño ni nada. Pero el verlo tratar de entenderla dándola vuelta y mirándola desde todos los ángulos le hacía recordar cuando veía los vídeos de All Might cada vez que podía.
"Que tienes en las manos cariño" simplemente ladeó su cabeza a un lado para que pudiera mandar mejor la pregunta no quería que ocurriera un accidente.
"Es lo que quisiera saber" aunque Inko no lo viera, podía imaginar a su hijo fruncir el ceño por la complicada tarea de descifrar el objeto.
"Alguna clase de gema que encontraste?".
"No lo sé".
Simplemente se quedaron en silencio. Inko se sintió al menos cómoda con la seguridad que podía hacer salidas para que Izuku pudiera estar más feliz. Quien sabía, tal vez encontraba un pasatiempo para recolectar piedras preciosas. Una opción para olvidarse de los Héroes y su tristeza ante su incapacidad.
Poco sabían ellos, a solo un par de kilómetros, sería una de sus últimas salidas.
Conduciendo por el carril contrario de la salida de la ciudad, un camión de transporte iba con exceso de velocidad doblando por una curva en el paso de las montañas circundantes. Cuando solo faltaban unos metros para poder salir de allí, justo cuando estaba por pasar el vehículo de la familia Midoriya, el camión vuelca y golpeó brutalmente la parte delantera del coche, haciendo que se volcara por la desestabilidad causada.
Terminando con las ruedas hacia arriba y con el techo en el suelo, la confusión por el repentino choque duró más de lo que Inko sintió cómodamente posible "Q-Qué fue lo que pasó" el sonido de una explosión seguido por la sacudida de la misma sacó a la madre de su aturdimiento, tomando conciencia de lo que estaba pasando "¡Izuku!".
Su principal prioridad se mostró en la forma de un aturdido Izuku, quien tenía una ligera mancha de sangre en su cabeza "Kā… San… que ocurre" no comprendía la gravedad de la situación.
"Tranquilo bebé. Mami te sacará de aquí enseguida" su voz era poco alarmante para el niño, pero en su estado aún no entendía bien la razón de ello. Tampoco entendía el porque estaban de cabeza.
Ignoró el sonido de pisadas en pos de salvar a su retoño, cuando sintió que su cuerpo dejó de ser sostenida por el cinturón de seguridad y fue sacada del auto abruptamente "¡Izuku!" Su cuerpo fue alzado al aire con sus manos sujetadas por una mano más gra de que ella. Cuando enfoco la vista, sombreado por el fuego del camión que había explotado, un hombre de gran altura se cernía sobre ella, mirándola con ojos marrones carentes de vida y moralidad.
"La caza de hoy fue fructífera, no esperaba un manjar tan delicioso cuando choque ese camión" la voz retorcida de este hombre heló los huesos de Inko. Ya había tenido problemas con tipos así en su época de colegio. Pero este tipo le daba un nuevo nivel de pavor.
"Oiga jefe" la vista de ambos se redireccionó hacia el otro lado del coche, justo en el copiloto "Hay un mocoso aquí".
"N-No…" su cuerpo empezó a temblar.
"Así que es casada…. O posiblemente soltera".
"¿Lo dejará como el resto?" esas pocas palabras estaban carcomiendo por dentro a Inko.
"No, sabes que no me gusta ensuciarme las manos" Inko esperaba que este loco le ordenara algo a los suyos "Déjenlo…" por alguna razón, se sintió peor "Dejen que el fuego haga el trabajo".
Inmediatamente Inko miró al auto, notando terroríficamente que tenía pequeñas llamas emergiendo "¡E-Espere un poco!" Si había alguna oportunidad de que su hijo de pudiera salvar, por muy mínima que sea… "¡Haré lo que quieran, no me negaré a nada que pidan. Pero saquen a mi hijo de ahí! ¡Por favor!" Cerró los ojos, rezando a cualquier deidad que conociera que cumpliera con su deseo.
"Oohh~" ese tono burlón seguía asustandola. Abrió los ojos, solo para ver la misma cara enfermiza adornada con la sonrisa más asquerosa que podría haber visto "Y crees que estás para hacer demandas? Solo seras un objeto para que mis muchachos y yo nos desahoguemos. Han pasado meses sin probar una carne tan delicada y dulce" acercó el rostro de Inko a su cara, lamiendola mientras ella cerraba los ojos ante aquella asquerosa sensación "Alégrate de estar viva" desde lejos, se empezaron a oír los sonidos de sirenas de ambulancia, lo que significaba solo una salida "Te diría que te despidieran de tu hijito, pero se nos acabó el tiempo ¡Muchachos! ¡Esta noche se folla!".
"¡Si!".
Inko miro la totalidad de los que estaban alrededor de ella. Alrededor de 12 personas estaban presentes para ese desagradable anuncio. 12 personas iban a violarla hasta que se cansaran.
Y su hijo iba a morir.
"Bien, vámonos".
Con esas palabras del jefe, todos fueron lejos del accidente. Ahora que estaba sin la iluminación del fuego pudo verlo mejor, cabello negro, complexión física gruesa, y probablemente media 2 metros. Razón por la cual la haya podido alzar por sobre el suelo con tanta facilidad.
"¡P-Por favor! ¡Saquen a mi hijo ahí! ¡El no merece morir así! ¡No tiene que sufrir así! ¡Izuku!".
Las súplicas de la madre cayeron en oídos sordos. Todos simplemente se reían de su actuar. Deleitándose con la desesperación que reflejaba la mujer.
Xxx
"Kā-san…" Izuku murmuró cuando, soltándose del cinturón de seguridad, y cayendo en el techo, escucho a su madre gritar. Cuando levantó su cabeza, escuchando sirenas que iban acercándose al igual que el fuego, vio a su madre ser alejada por un grupo de hombres.
Ver su rostro aterrado fue más que suficiente para saber que estaba en problemas. Y la alejaban de él "No…" comenzó a arrastrarse, pero una punzada de dolor le llegó desde abajo. Cuando bajó la vista noto un trozo del cristal de la ventana se había enterrado. Las lágrimas empezaron a juntarse en sus ojos.
Otra vez, la depresión lo acobijo como una noche fría y oscura "Porque…. Por qué me pasa esto" ya se sentía cansado de los abusos que recibía de Katsuki, y en el jardín no hacían nada para que dejara sus amenazas y explosiones.
Ni siquiera sabía por qué su papá no iba a verlo. Su madre se mostraba siempre reacia a hablar de él. Lo único que le dijo fue que estaba en el extranjero con mucho trabajo.
"Si hubiera tenido un Quirk… aunque sea pequeño… podría ayudar a Kā-san" se sentía frustrado. Se odiaba así mismo. La impotencia de ver a su madre ser claramente secuestrada estaba siendo trizas al joven de cabello verde "Algo… cualquier cosa… quiero salvar a Kā-san…." Nunca noto un brillo rojizo cuando el cansancio mental le hizo perder la conciencia.
XXX
"¿Quieres el poder?"
Sus párpados se abrieron lentamente. Al hacerlo, estando de pie, contempló solo una gran y extensa llanura, con solo unos pocos cúmulos de piedra por donde podía ver. Era extraño. No recordaba estar en ese lugar, el….
"Kā-san…." Una vez más la tristeza y la impotencia llenaban su ser. Se inclinó en el suelo, abrazando sus rodillas, esperando que en donde sea que este terminara luego. Que todo terminara.
"Veo tu deseo…" Alzó la vista ante la voz desconocida encontrando frente a él la misma gema con cruz, mirándolo mientras brillaba de forma tenue "Estás desesperado por el poder. El poder de defenderte. Defender a tu madre. Todo lo que tu sientes que es importante".
"Que… Que eres".
"Antes sostenia la llave para manifestar su poder. Ahora, después de ser devorado por él, solo me he vuelto en el núcleo de ese poder. Aunque mi cuerpo fue destruido, mi propia materia ha seguido viva después 1290 años. Quede como recompensa de un culto, y ahora, luego de esos 500 años, veo a alguien con el deseo del poder".
Izuku no entendía mucho de lo que le estaba diciendo. Simplemente que era algún ser que ha vivido mucho tiempo y un grupo lo había capturado. Pero lo que sí comprendió con las preguntas anteriores es que podía darle la oportunidad de salvar a su madre.
"E-Eres un Quirk consciente?" Sería lo más lógico.
"Soy mucho más que un Quirk. He existido desde antes que se manifestará el primero de esos patéticos intentos de poder. Volveré a preguntar ¿Quieres poder?".
"¿R-Realmente puedes hacerlo?".
"Claro. Aunque hay un costo. Cómo te darás cuenta, no tengo un cuerpo propio. Así que, exijo un pago por usar este poder. Una donación voluntaria para que pueda…"
"¡T-Toma mi corazón!".
Si la gema tuviera rostro, hubiera abierto los ojos y alzado las cejas ante esa abrupta oferta. El riesgo de que diera su corazón no era 'tan' peligroso. Pero las repercusiones se mostrarian en el futuro. Prácticamente, estaba marcando su vida con esa oferta puesta sobre la mesa.
"¡Si… Si es por algo que sea de valor, mi corazón tiene que ser lo suficientemente viable para hacerlo! No… no soy muy inteligente… y me asusto con facilidad… Yo… ¡Yo… solo quiero! ¡Quiero mostrarles…! ¡Quiero que… se arrepientan de los abusos que me hicieron! ¡No seria digno de un Héroe… Pero les mostraré las causas de sus acciones!".
Estaba tiritando, llorando incluso. Pero estaba dispuesto a dar su corazón para dar una lección, para poder proteger, salvaguardar lo que aprecia. Vaya forma de volver al mundo.
"JAJAJAJAJAJAJAJA" Izuku se asustó cuando la risa estruendosa retumbó todo el lugar "Bien. No, más que eso ¡Es excelente! ¡Maravilloso!" Antes de que Izuku pudiera hablar algo, una punzada agonizante atravesó su pecho "Agradece. Usaré tu cuerpo para poder controlar la salida inicial. Tienes su aroma, así que deberías seguirlos sin ningún problema".
La gema avanzó hasta quedar frente al pecho del niño, justo a la altura de su corazón. Sin ningún aviso, se incrustó en la carne "Graaaaaaaaahhhh" era un dolor indescriptible. Se rasgos el pectoral derecho en un intento de mitigar dicho dolor. Su piel había estado sana, pero el dolor aún permanecía. Sentía que iba a morir si seguía sintiéndolo.
"Recuerda… para poder usar mis capacidades, tienes que gritar con orgullo mi nombre ¡Hazlo, para que puedas salvar a tu madre!" los párpados de Izuku se abrieron abruptamente, mostrando que su color verde esmeralda, fue reemplazado por un carmesí con las pilas en cruzes.
XXX
"Solo dos kilómetros. Ojalá no haya heridos" Backdraft estaba rezando que no los hubiera.
Las cámaras que habían en esa zona habían captado el incidente por lo que habían salido inmediatamente para ayudar. Pero la preocupación aumentó cuando perdieron la imagen del vídeo. No solo de esa, de las tres cámaras que habían en el lugar. No sabía cómo pudieron encontrar su ubicación, pero era algo preocupante.
"Realmente agradezco que hayas venido con nosotros. El camión es demasiado grande para que mi equipo lo saqué del camino" en el asiento del copiloto, tocando su dedo en el brazo con impaciencia, estaba una de las heroínas del Top 10 para ayudarles.
"Se veían apurados. Y el llamado que escuche por su radio sobre la eliminación de imagen me da mala espina" Ryukyu tenía un mal presentimiento de esto. Tan solo esperaba no llegar tarde.
"Solo un poco más y podremos asegurarnos de…"
*Booooooooom*
Una explosión al final de la última curva silencio al héroe de rescate. Cuando doblaron por la esquina que daba a dicha curva, una enorme silueta hizo que Backdraft frenará en seco, derrapando el vehículo haciendo que girara un poco a la izquierda. Los otros dos camiones también se detuvieron justo detrás de él.
Tanto Backdraft como Ryukyu estaban atónitos con lo que veían sus ojos.
Medía casi 9 metros. La criatura era cuadrúpeda. Una gran cola se balanceaba por la parte posterior de su espalda baja. Dos enormes pares de alas que podían asemejarse a un demonio. Y un par de ojos color rojo que se iluminaban ante la sombra que su cuerpo generaba. Con una cabeza puntiaguda en forma de 'V' que se veía bastante resistente.
"U-Un Quirk de tipo transformación" Backdraft no pudo evitar encontrar un poco de semejanza con la forma desconocía de Ryukyu. Pero mucho más grande. Ella podía medir casi 5 metros. Pero quién sea que fuera esta persona supera en tamaño a la mujer.
"Grrrr…… GRAAAAAAAAAAA" rugiendo al cielo, como si reclamara algo robado, estremeció el lugar con su sola voz reverberante. Era un rugido que claramente mostraba furia. Pero Ryukyu podía sentir algo…. Por un momento, creía que la bestia estaba… llorando. Puede que fuera algo relacionado con su propio Quirk, pero sonaba triste. Enojado y triste.
El batir de sus alas fue de forma tan brusca que el simple viento generado había volcado el camión de Backdraft. Ambos héroes dentro del vehículo lograron sujetarse de las manillas que habían cerca de las puertas para no impactar de forma brusca dentro de la cabina del conductor.
Los ayudantes de Backdraft bajaron de los otros dos camiones para ayudar a su líder. La puerta del copiloto se abrió abruptamente, con Ryukyu saliendo y ayudando al Héroe de rescate a salir del camión. Ambos miraron al cielo, observando cómo el usuario del Quirk transformación alejarse ya a por lo menos 2 kilómetros de distancia y aumentando dicha separación.
"No crees que deberías seguirlos Ryukyu?".
"Primero aseguremos que no haya nadie en el accidente. No sabemos si fue él quien generó este desastre. Pero primero me encargaré de esto. Después veré si puedo alcanzarlo" ese grito que dió aún estaba en su cabeza. Llevaba tanta rabia, y aún así podía apreciar la tristeza de alguien que sufre. Tenía que apurarse con esto y seguirlo.
XXX
4 horas después. Musutafu: Vecindario Jonaicho: Heladería abandonada
Realmente estaban a gusto con su actual adquisición. Fuera de las otras tres que habían traído fue un gusto que pudieran darse después de tanto tiempo. Ginkaku estaba feliz de haber sido el primero con la mujer de cabello verde. Lo había hecho de camino aquí, y después la tiró a su grupo una vez que se sintió satisfecho.
Los gemidos de todas las mujeres que habían capturado resonaban en el lugar. Dentro de poco las usaría para su club nocturno y tendría ingresos nuevos. Después de todo, ser el más fuerte de ese aburrido vecindario tenía sus ventajas. Los 30 hombres que estaban rodeando a las 4 mujeres no daban descanso alguno.
Inko estaba desnuda, siendo violada tanto en su vagina como su ano y su boca, con las otras mujeres estando en igualdad de condiciones. La mirada perdida y vacía en su rostro era un claro indicio sobre su falta de voluntad. Simplemente haciendo lo que le pedían como una marioneta. Sus gemidos, aunque de placer por las drogas que le habían inyectado, contrastaba con la mirada de dolor que su rostro daba.
Siempre se había avergonzado por ser una mala madre. No pudo ayudar a su bebé a consolarlo cuando le destrozaron su sueño. No hizo nada para animarlo. Lo único que quería era darle al menos una mejor vida y mejores opciones para ser un héroe, aunque fuera uno común, como un policía o un bombero.
La sensación de ser manoseada, profanada, abusada, ya nada de eso le importaba. Tenía el consuelo de saber que estaría pronto con su hijo cuando muriera. Este era su castigo por no ayudar a su hijo como debería hacerlo una madre.
"Oiga… jefe…" uno de los secuaces que estaba violando la boca de Inko llamó a su líder "¿Podemos llevarnos a una de estas para nuestro disfrute personal?".
Ginkaku solo se quedó pensando. Quería tener a esas cuatro perras para su ingreso en su burdel. Siempre lograba encontrar una o dos por mes para renovar el interés del lugar. No vio nada de malo en regalar una de sus adquisiciones, tenía tres aún para sus ingresos "De acuerdo. Puedes llevártela una vez que terminen con ella".
El tipo simplemente sonrió de forma enferma. Tenía tantas ganas de escucharla gritar cada vez que lo hacía. Si no, tendría que golpearla para obtener las reacciones que quería.
*Brrrooom*
El lugar se remeció de repente, haciendo que todos se callaran o dejaran de hacer lo que hacían. Las luces que colgaban del techo seguían moviéndose por el aparente temblor que estaban sufriendo. Ahora, Ginkaku puede ser o parecer un idiota la mayor parte del tiempo, pero cuando sentía que había peligro, sabía que tenía que correr.
[Ost: Crisis [クライシス] de Ryo Kawasaki y Keita Haga]
Saliendo del lugar donde estaba sentado, la parte superior del techo donde estaba sentado se derrumbó en un montón de polvo y metal. Ginkaku estaba por ir justo a la salida, pero una extensión creó una sombra sobre él mientras corría. Mirando para atrás, solo alcanzó a dar un grito de miedo cuando una enorme cola lo aplastó cual insecto.
Todos se estremecieron ante la imagen. El miembro se levantó, revelando el cuerpo casi inconsciente de Ginkaku. Cuando dió un gemido de dolor, la cola volvió a bajar bruscamente.
*Escombros azotados*
Luego otro.
*Escombros azotados*
Y otro.
*Escombros azotados*
Y otro azote hasta que no se sabía dónde estaba cada parte del cuerpo de Ginkaku. Una corriente de viento sopló de la nada, revelando a la criatura más terrorífica que habían visto en su vida.
Midiendo casi diez metros. Era una criatura dónde su torso, brazos, piernas y cabeza estaban revestidas con lo que será una madura de huesos, no era de un color blanco, sino uno más opaco, como gris. Las partes donde no estaban cubiertas se mostraba la piel de la criatura, siendo de un color rosado opaco, casi enfermizo. Tanto en los codos como en las rodillas tenía los trozos de dicha armadura en punta.
Su cuello, largo y grueso, daba paso a la cabeza, cubierta por un casco con forma de 'V', con las dos puntas sobresaliendo como un par de cuernos. Mostraba de forma amenazante sus colmillos llenos de saliva, y la mandíbula inferior también tenía dos protuberancia como cuernos más pequeños.
En la placa de su torso, justo donde se separaba pectoral con y abdominales, en el centro de ambos abdominales había una cruz negra, y justo debajo de esos pectorales habían, lo que podría suponer, dos pares de ojos de color rojo carmesí con la pupila en forma de cruz, los cuales contrastaban con los que estaba mirando a sus futuras presas.
"¡Q-Q-Qué mierda es esa cosa!".
"¿¡Es alguna clase de vigilante nuevo!?".
"¡Mató al jefe!".
"¡Rápido saquen a esas perras de aquí antes de que…!"
*Carne y huesos rotos*
Uno de los idiotas que estaba dando esa orden fue destrozado por la mano de la bestia. Sus vísceras y más esparcidas en el suelo y manchando los cuerpos de los violadores.
"GRAAAAAAAA".
Con ese rugido se abalanzó sobre los violadores. Algunos de ellos con Quirk que le permitieron mejoras físicas y capacidades elementales. Otros les daba extremidades adicionales, como alas, para escapar de su muerte. Los pocos que podían volar fueron golpeados, masticados y azotados contra una parte de la bóveda.
Aquellos que tenían Quirk de tipo elemental atacaban a la bestia. La cual se tambaleaba por los ataques repetidos que recibía. Los hombres miraban sonrientes y confiados ya que sus ataques surtían efecto, pero esa sonrisa pronto se convirtió en un cuadro de horror cuando sus ataques dejaron de lastimarlo. Es más, no lo estaban lastimando nada.
Levantando su mano derecha, cerrándola en un puño, la azotó contra los cuatro que estaban atacandolo, destrozando la mitad del cuerpo a dos de ellos, mientras que los otros dos terminaron inconscientes por los escombros lanzados, solo para morir sin dolor al ser aplastados como insectos.
Los ojos rojos se movieron en dirección de la puerta, observando cómo se llevaban a las mujeres inconsciente de lo que ocurría a su alrededor. Un cabello verde oscuro fue lo que le hizo reaccionar, por lo que se lanzó con furia a la salida.
"¡Rápido! ¡Váyanse de aquí con las perras. No dejen que..." el hombre que abrió la puerta para que sus compañeros salieran más rápido volteó su mirada hacia dentro, horrorizandose por la abrupta velocidad del monstruo que rompió la puerta al lanzarse a la salida, matando lo cuando su mano chocó dónde estaba él.
La destrucción que se generaba causó estragos en los alrededores, lo que hizo que se llamarán a los héroes para controlar el asunto. Eso, y habían pedido que fueran los del top 10 por la aparente bestia que causaba el alboroto.
Varios de los violadores fueron masacrados como ganado, dejando solo a unos pocos que sostenían a dos de las mujeres violadas. Las otras estaban tiradas con escombros a sus alrededores, curiosamente sin ninguno sobre ellas.
Inko estaba dentro de las dos que aún tenían prisionera. La rabia en los ojos del dragón fue notable. Arrugando la piel expuesta alrededor de sus ojos, dió otro rugido, avalanzandose sobre sus presas.
Trozos de escombro volaron en su contra, pero no le importó, simplemente tenía un objetivo, y no pararía hasta que estuviera en sus garras. Los violadores, sin ningún tipo de salida obvia con la carga que tenían, las abandonaron en pos de salvar sus vidas.
Una nube de humo se levantó cuando la bestia se detuvo en su última arremetida, lo que hizo que los violadores perdieran el equilibrio al salir volando por la ráfaga de aire.
[Fin Ost]
La repentina calma, con solo gruñidos leves en los alrededores, fueron un contraste bastante terrorífico del infierno y la masacre que se había desatado antes. Varias personas de los alrededores salieron a ver qué era lo que había ocurrido con la conmoción.
Desde el cielo, un punto rojo se estaba aproximando. Muchos de los que estaban en la zona sabían quién era la persona que venía de esa forma. Muchos, de los ignorantes, admiraban a este héroe por la cantidad de villanos que había colocado tras las rejas. Pero aquellos que usaban la razón más que otros, cuestionaban las acciones de dicho héroe.
"Así que ese es el problema" aprecio la forma inmóvil de lo que claramente era un Dragón, mucho más grande de lo que era la forma Dragón de Ryukyu. Sonrió ante lo que sería un reto interesante "¡Será mejor que sea un desafío!" Deteniéndose justo arriba de la criatura, la cual volteó la cabeza para localizar la hostilidad sentida.
Antes de que alguien le dijera algo al héroe N 2, lanzó una potente llamarada sobre su objetivo, el cual se inclinó en el suelo, protegiendo tanto el cuerpo de Inko como el de la otra mujer que estaba cerca de ella.
A la escena, de forma inmediata, llegaron otros Héroes del top 10. Los que llegaron para ver a Endeavor, atacando imprudentemente como siempre, fueron Best Jeanist y Edgeshoot. Llegando desde el cielo Hawks dió su presencia al preguntar a qué amenaza se enfrentaban.
"¡Endeavor, deja de incinerar el lugar y dinos qué es lo que pasa!" Edgeshoot gritó, esperando que al menos cumpliera con ese pedido para ver a qué se enfrentaban.
Chasqueando la lengua, el Flame Hero detuvo su ataque, lo que hizo que perdiera el impulso que lo mantenía en el aire. Cuando cayó al suelo, antes de estar solo a 5 metros, lanzó una concentración de fuego de sus manos para realentizar su caída.
Al hacerlo, observo su trabajo. Un cúmulo carbonizado de lo que sea a lo que atacó "Y aquí esperaba un reto de verdad" se encogió de hombros, dándose la vuelta para irse.
"Qué fue lo que estabas atacando realmente, Endeavor" Best Jeanist se paró frente al Héroe N 2, el cual frunció el ceño al ver que interrumpían su paso.
Endeavor simplemente soltó un suspiro de exasperación por los completos que estaban en el Top 10 "Simplemente un especie de Quirk Dragón, tipo Transformación. Creí que sería un reto por su tamaño. Que decepción".
"Y simplemente lo atacaste?" Detrás de Endeavor llegó una voz femenina, una recién llegada al campo. Y, aunque le molestara, era postulante para compartir el puesto N 5 con Edgeshoot "Incluso yo creo que es muy precipitado. Ni siquiera te aseguraste si había algún civil cerca. Simplemente atacaste" Mirko era una mujer bastante orgullosa, con la creencia de que aquellos que pedían ayuda eran débiles.
"Ya me encargue del problema" mientras hablaban, no notaron el estremecimiento de la figura carbonizada "No estés molesta solo por que no pudiste enfrentarlo tú. Claro, los débiles buscan peleas con sus pares" la risa condescendiente del hombre había hecho gruñir a Mirko.
"Palabras grandes para alguien que no puede pasar del N 2" ver esa risa desaparecer para cambiar a una expresión de rabia se sintió muy bien.
Endeavor se volteo y encaró a Mirko por ese comentario tan descarado "Escúchame bien mujer….".
*Crack*
La ruptura de algo sólido interrumpió la casi pelea que se iba a generar. El sonido de piedras cayendo al suelo les hizo mirar al montículo negruzco, el cual empezaba a estremecerse…
"Grrrrrrrrr".
Y a escuchar los gruñidos. Explotando cómo si fuera un huevo, estirando sus alas en toda su atención, y rugiendo ante la salida de su prisión, la criatura con aspecto de dragón era libre de la llamarada que había caído sobre él.
"Así que seguía vivo" el rostro estoico de Endeavor recuperó algo de emoción "Tal vez no será un desperdicio después de todo" lo que Endeavor no había tomado en cuenta, pero el resto de héroes sí, fue que, aparentemente, estaba mirando algo debajo de él.
Mirko saltó al poste más cercano para tener una mejor vista, cuando se fijó que era lo que veía, se congeló. Habían dos mujeres desnudas, y, por lo que ella podía mirar, habían sido violadas, si el esperma que salía de su vagina era una indicación. Con miedo miró la bodega para cerciorarse de que no hubiera nadie más. Otras dos mujeres, en medio de los escombros, estaban en igualdad de condición.
Mirko apretó los puños en rabia. Uno, por el hecho que el estúpido de fuego ataco con civiles desprotegidos, siendo defendidos por el alborotador. Y dos, el propio alborotador, o era un familiar que perdió el control de su Quirk, o se transformó voluntariamente para salvar a su familia.
[Ost: Returning to the ground [地へと還る時] de Ryo Kawasaki y Keita Haga]
Mientras ella inspeccionaba el lugar, la criatura estaba observando el cuerpo de Inko. Lanzaba gruñidos suaves con la esperanza de despertarla. Cuando la vio moverse un poco, los ojos, una vez rojos, se volvieron verde esmeralda, pero manteniendo la forma en la pupila.
Inko abrió levemente sus ojos, ya no sentía nada de su cuerpo, y sentía que su párpados pesaban un montón. Cuando noto lo que tenía frente a ella, se sintió extraña. No es el pavor que uno sentiría al estar frente a una criatura de estas dimensiones. Al notar esos ojos verdosos ignorando las pupilas en cruz, su propio corazón sabía quién era, llenandola con una enorme alegría, pero con pesar aún mayor.
"Mi…. Bebé" trató de levantar su mano derecha, logrando solo elevarla unos pocos centímetros sobre el suelo, tocando el mentón del dragón frente a ella, quien parecía gruñir con afirmación a la declaración de Inko "Estás…. A salvo" las lágrimas se derramaron en sus ojos, no cabía en su ser el alivio de que su pequeño estuviera bien después de ese accidente. Pero la idea de tener que verse obligada a dejarlo atrás fue un problema el cual ella no podía solucionar. No creía poder hacerlo de todas formas.
"Ggrrrr…… kkgrrr…. Kā….. San…." Fue difícil, pero logró pronunciar esa palabra con su propia voz distorsionada, aunque aún tenía su propio tono infantil, ignorando las miradas atónitas de los presentes ante los hechos que giraban en sus cabezas.
"Es…. Un niño?" Best Jeanist preguntó aturdido. Dando un escaneo rápido del lugar podía notar cuerpos mutilados y manchas de sangre en los escombros. Que clase de Quirk le permite a un niño un cambio de mentalidad para ignorar este tipo de masacre.
"Oigan" la voz seria de Mirko llamó la atención de todos. Caminando con lo que parecía un hombre desnudo agarrado firmemente por el pescuezo. Al estar cerca de ellos lo arrojó como un trozo de basura "Este miserable junto con otros pocos fueron los que causaron esto" la voz fría que tenía la mujer les estaba dando un claro mensaje de que era un tema serio.
"Es el líder?".
"Su líder fue el primero en morir" fue lo que le dijo antes de agarrarlo del cuello, su visión se dirigió al dragón, que debía suponer estaba tratando de expresarse con su madre "Esto podría complicarse".
Con eso, el sonido de aleteo resonó en el lugar. Mirando al cielo, el grupo de Héroes noto a otro de sus compañeros llegar, Ryukyu había aterrizado sobre la zona más despejada, llamando la atención de todos ya que All Might bajo de ella.
"Agradezco que me trajeras aquí Ryukyu" el Héroe número 1, el símbolo de la Paz, hacía acto de presencia.
"Puede que sea lenta, pero aprecio que me dejaras traerte" fueron las palabras de la mujer mientras volvía a su forma humana. Tomando nota de los alrededores, quedó impactada por la cantidad de cuerpos que decoraban el lugar.
All Might también notó esto cuando vio su expresión. Al notar a sus camaradas fue inmediatamente con ellos "Que es lo que ocurrió" Ver la seriedad de alguien que se conoce por ser amable era algo de lo que no querían ser objetivo.
"Según por lo que Mirko encontró" Edgeshoot, con voz seria, dijo su vista en el hombre que Mirko había traído. Su estado de desnudes era solo un indicio de que clase de acto horrendo fue el que lo hizo "Este sujeto con otros más fueron los que causaron que…." Fijo su vista en el dragón que estaba a solo unos cuantos metros de distancia "Ese joven causada todo este desastre" la admisión de que esa criatura fuese un joven fue suficiente para que el ceño de All Might se profundizara más.
"Un joven dices?".
"Probablemente…" Mirko no quería ver cuántos años tenía, pero si trataba de pensar en la voz sin esa gutural distorsión "Sea un infante no mayor de 8 o 7 años… tal vez menos…"
Izuku miraba a su madre con toda la atención que podía tener en un momento como este. Su propia madre estaba allí, tirada, acariciando su mentón con la mayor dificultad que había en ella.
"Lamento… todo lo ocurrido" la sonrisa triste que le daba era desgarradora. No le gustaba. Se suponía que iba a rescatarla, a salvarla ¡La había salvado! ¡Qué fue lo que hizo mal! "Espero… que puedas… perdonarme… por no decir…. Que si podías".
"¡No! ¡Yo soy el que debería disculparme!" No podía hablar de forma fluida por lo que se recriminaba así mismo mentalmente "Si al menos hubiera tenido un Quirk… Si al menos hubiera sido más complaciente…. Si no hubieras decidido ir a ese paso para animarme ¡Nada de esto hubiera pasado!".
"Mi pequeño…." La mano de Inko cayó de forma pesada al suelo, haciendo que los ojos del dragón se ensancharan cuando notó que los ojos de su madre se empezaron a cerrar "Prométeme…".
"No…".
"Que… serás un… buen niño…"
"Por favor…".
Los ojos de Inko estaban casi cerrados cuando noto las lágrimas en los bordes de los ojos de su pequeño. No podía hacer nada más. Simplemente tratar de desearle lo mejor, y también… "Realmente…. Para mí…".
"Kā-san" gruño lamentablemente de forma coherente, llamando la atención de los demás.
"Eres…." Sus ojos se habían cerrado, pero sus labios dijeron las últimas palabras que él quería escuchar desde ese día "Un Héroe increíble".
[Fin Ost]
Fueron sus últimas palabras cuando Izuku notó que Iznko no respiraba. Su pecho dejó de subir y bajar, lo que solo significaba cosa. Un hecho inequívoco que el joven trataba de rechazar totalmente.
"Kā-san" usó su cabeza delicadamente para empujar su cuerpo, tratando de hacerla reaccionar "Despierta" siguió intentando por un poco más de un minuto, hasta que cesó de sus intentos. Los héroes profesionales estaban a la espera, sin saber cómo abordar la situación que claramente había ocurrido.
"Kkgrrrr" un gruñido, diferente a todos los que había hecho, resonó a través del silencioso lugar. El sonido del cemento destrozado hizo que Ryukyu y All Might vieran que las manos delanteras habían aplastado el concreto al cerrar sus manos en puños.
"Prepárense" fue la advertencia de All Might a sus compañeros, quienes simplemente se dignaron a poner poses de pelea en caso que arremetiera contra ellos.
"GRAAAAAAAAAAAAAAAAA".
Un rugido ensordecedor resonó en un amplio radio. Un rugido que, para los ignorantes, sería la amenaza más grande que pudiera conocerse. Edgeshoot, Best Jeanist y Endeavor estaban a punto de cargar contra él. Pero la mano de All Might los hizo detener.
"Qué crees que haces. ¿Quieres quedarte con el crédito de reducirlo tu mismo?" Las palabras molestas de Endeavor fueron ignoradas enormemente por la serenidad que mostraba su rival.
"¿Acaso no lo ves?" Esa pregunta fue extraña para él, incluso los otros dos estaban confundidos.
Pero estaba claro para Ryukyu, Mirko, y por sobre todo, el propio All Might. Fue como una repetición de su fallo hace tanto tiempo. El mismo lugar destruido, la misma sensación de impotencia, la misma fría noche. Todo parecía un recordatorio morboso y macabro de su propio fracaso. Pero él no era el que sufría, si no alguíen que realmente tenía un enorme apego por esa persona fallecida.
La criatura siguió rugiendo poco más de un par de minutos, cuando dejó de hacerlo, simplemente se quedó allí, sin hacer nada, mirando el suelo con la cabeza agachada. Fue en ese momento cuando notaron que una figura femenina iba caminando al dragón.
"Ryukyu" si All Might era sincero, esperaba que ella pudiera hacer con para que su transformación retroceda y pueda ser fácil tratar con él.
La mujer del Top 10 pasó al lado del cuerpo dragonico, que miraba con una mirada muerta y vacía al cadáver de la mujer. Ver una escena tan desgarradora le rompía el corazón. Ese rugido simplemente expresaba toda la tristeza que podía sentir en sí.
Cuando vio el cuerpo de la mujer, se sintió perturbada, fuera de las marcas de haber sido agredida mientras era violada, las marcas en sus brazos indican claramente la ingesta de drogas de placer en ella. Probablemente su cuerpo no pudo soportar más y terminó por derrumbarse. Pero ver el rostro de la mujer, con una ligera sonrisa, suponía que sabía que esta criatura era su hijo y le había dicho algo.
Mirando la cabeza del Dragón, noto que dónde estaban sus ojos eran de color negro, como si no hubiera nada. Con cuidado levantó la mano para tocar su cabeza. Al hacerlo, el color rojo carmesí con las pupilas en cruz se iluminaron abruptamente.
Un gruñido salió desde su garganta cuando se alzó en toda su altura intimidante. Los demás Héroes se acercaron para ayudar a su compañera, pero la mano alzada de Ryukyu detuvo su avance.
"Ya veo. Si ayudamos solo agravaremos la situación" All Might comprendió la razón de la acción de la mujer, al igual que Mirko y los otros. Aunque claramente Endeavor no pensaba igual.
"Esa mujer. Que cree que hace".
"Tratando solucionar esto sin tanto desastre tonto" Endeavor miro con rabia a Mirko por el insulto.
Tatsuma Ryūko miró a los ojos del dragón. Había dolor y odio allí. Pero no eran hacia ella. Era en parte a las personas que habían provocado esto, y así mismo. No sabía con exactitud cuál era la edad de este joven, pero que tuviera una mirada así no era nada bueno.
"No sé… como debes sentirte realmente" lentamente bajo la mano que había alzado, y posteriormente se sentó en Seiza frente a él "Pero si de algo puedo estar segura, es que tu madre hizo lo que pudo para cuidarte. Ella… dijo algo antes de que… se fuera?" Pudo apreciar cómo la mirada del dragón se puso conflictiva, reflejando el dolor de la pérdida.
El dragón movió su vista a su madre, quién estaba con una ligera sonrisa en su rostro. Esas últimas palabras. Se había resignado a escucharlas después de meses de abuso, de humillación. Y que obtuvo por escucharlas? Que su madre muriera por ello.
"Estoy segura que ella… hubiera deseado que tuvieras una vida plena. Será tu decisión si quieres ser un Héroe o no, al menos yo no te obligarte a hacerlo" el dragón volvió a mirarla, pero esa mirada dolida y furiosa se apaciguó un poco, solo quedando en algo más frágil.
Sin ninguna advertencia, desde donde estaba el dragón se iluminó con un brillo rojo, dos cadenas grandes se enroscaron desde atrás hacia adelante de forma cruzada sobre su pecho.
"¡Qué es esto!" Ryukyu se levantó sobresaltada, mirando a su alrededor, tratando de encontrar al causante de esta acción tan cobarde "¡Quien es el que está haciendo esto!".
"¡Ryukyu mira!" Mirko grito cuando vio que la figura del dragón estaba desapareciendo en una nube de humo frente a ellos. No, más que eso, pareciera que estaba siendo tragada hacia abajo.
En una explosión ligera de aire el humo y el polvo desaparecieron, dejando solo a un niño de no más de 5 años arrodillado frente a su madre. Tatsuma se acercó a él rodeando el cuerpo de Inko. Posó una mano en la cabeza del pequeño al hincarse para estar a su altura, quien levantó la vista para mirar a la mujer. El corazón de Ryūko se estrujó al ver esos ojos verdes tan llenos de dolor y lágrimas, como si aún tratara de asimilar lo ocurrido.
"Kā-san…. No despertará jamás?" Su temblorosa voz y los gimoteos derritieron a la Heroína, quien lo tomó en brazos y lo dejó llorar en su hombro.
"Perdóname pequeño. Llegué demasiado tarde" incluso ella empezó a derramar sus lágrimas por este triste momento. Se levantó para caminar con sus compañeros, deteniéndose frente al cuerpo de Inko. Sin más, se inclinó ante ella para seguir con su camino.
XXX
Cuando abrió los ojos se sintió confundido, cansado, y triste. Deseaba que lo que había visto fuera nada más que un mal sueño y que no habían salido a ninguna parte. Pero cuando se levantó de su cama y darse cuenta que estaba en una casa diferente, comprendía que no lo había sido. Todo fue real. Y eso era más devastador que cualquier cosa.
El sonido de una puerta abriéndose llamo su atención. Cuando alzó la vista, una mujer rubia, ojos amarillos, una camisa blanca y unos pantalones cortos de color negro "Veo que despertaste pequeño" camino de forma relajada a Izuku, sentandose en el borde de la cama mientras le daba una sonrisa de confianza. Izuku estaría desconfiado, pero se sentía cómodo con la mujer. Sus ojos se abrieron al recordarla cuando fue quien lo tomo amablemente en sus brazos mientras trataba de consolarlo "¿Tienes hambre? Estuviste dormido toda la noche y parte de la mañana".
Su respuesta fue un gruñido de su pequeño estómago, haciendo que el joven se sonrojara avergonzado por la acción involuntaria "Tal vez un poco" dijo en voz baja.
"Jejeje. Ven, te llevaré al comedor" le extendió la mano para levantarlo de su cama. La cual acepto al tomarla y tener un pequeño empujón para levantarse de la cama y comenzar a seguirla "El baño esta a tu izquierda, detrás de esta puerta. En este lado está mi habitación" mientras caminaban, Ryūko le explicaba las habitaciones las cuales tendría que acomodarse de ahora en adelante "Aquí está la cocina" cuando salieron del pasillo, noto una amplia habitación, la cual una parte estaba dedicada a una gran cocina con implementos completos para los alimentos.
"Esto… Ryukyu obā-San" la mujer se dió vuelta para ver al joven. Aunque fuera una mujer amable con los niños, ninguno se acercaba a ella después de mostrar su forma dragón, lo que generó que nadie la llamara de la forma en que Izuku lo había hecho "Dónde… estoy?".
"Ha, perdón por no decirlo antes. Estás en mi agencia" Izuku ladeó la cabeza, confundido al no entender a qué se refería "Este niño es una monada" no pudo negar ese pensamiento al ver lo adorable que se veía, incluso con esas pecas en su cara "Es mi lugar de trabajo. Una zona aparte que mandé a construir hace un par de años cuando subí al Top 10".
"Para no llegar tarde?".
"Eres bastante listo" acarició la cabeza del chico ante el comentario, el cual no estaba del todo errado "Quieres algo en específico para comer?".
"...Katsudon".
"Ya veo. Espera un poco en lo que lo hago" con esas últimas palabras, Tatsuma puso manos a la obra.
La mayoría de las personas creían que los Héroes tenían vidas de lujo, que tenían su propio personal para hacer sus alimentos y quehaceres, además del hecho de sus empleados en sus zonas de trabajo. Si bien la gran mayoría de estos podría ser así, la minoría que la gente ignoraba seguía manteniendo su modestia.
Ryukyu estaba dentro de esa minoría. Simplemente contaba con sus empleados en su hora de trabajo. Pero ella misma se ocupaba de sus quehaceres del hogar. Incluso disfrutaba de una vida cotidiana y el ser una mujer común cuando compartía algunos días con Mirko.
La actualidad de los héroes se ha ido trastornado cuando ella ascendió de rango. La gran mayoría simplemente era Héroe por la fama y la fortuna, eran pocos los que ayudaban por ayudar. Podía contar los héroes simplemente con ambas manos, sin repetir el conteo.
Dejando de lado aquellos que están en el ámbito de rescatistas, los héroes actuales son simplemente un nombre. Y la discriminación que se ha generado es la causante de una gran cantidad de actividad villana los últimos seis años. Aunque en Japón se ha mantenido reducido, no sabía si era lo mismo en el resto del mundo.
Luego de 1 hora y media de estar haciendo los condimentos y preparación, tarareando cuando dejo de pensar en cosas innecesarias, camino a la mesa frente a Izuku con ambos platos. No es que fuera la primera vez que hacía Katsudon. Era un plato que comía de vez en cuando, pero el sabor que le daban los ingredientes adecuados, el caldo hecho con los ingredientes correspondientes, como lo son la Salsa de Soja, sake, azúcar y el Mirmin, era una delicia para ella.
"Espero que sea de tu agrado" comentó cuando dejó el plato frente a él.
"G-Gracias" solo faltaba una cosa que ambos hicieran.
"Itadakimasu".
Con los agradecimientos dados, tomaron sus palillos y comenzaron a comer. Aunque en el caso de Izuku tenía que soplar antes para poder hacerlo, una vista tierna para Ryūko. Cuando Izuku dió el primer bocado, fue todo lo que hizo al quedarse quieto con los palillos en la boca. Ryukyu se dió cuenta de ello cuando solo eran sus bocados los que sonaban en la cocina.
Cuando iba a preguntarle si había algo malo con la comida, los gimoteos resonaron otra vez. Las lágrimas caían desde su rostro hasta el borde del cuenco de su almuerzo "Porque… mamá no merecía eso… por qué tuvo que pasar" dejo sus palillos en la mesa para mirar directamente a sus piernas. También creía que estaba siendo molesto llorar mientras se comía, pero no podía evitarlo si la comida sabía igual que la de su madre.
Con una cara de tristeza Ryūko se levantó de su asiento, rodeando la mesa, se inclinó y abrazó al pequeño "Aún no quería hablarlo, pero decidí que tomaría la responsabilidad de cuidarte" los gimoteos habían parado un poco, eh Izuku se alejó para mirarla con rostro sorprendido "Soy la única que puede enseñarte a cómo controlar tu Quirk, es normal que quiera ayudarte ¿No lo crees?" La sonrisa en su rostro calmaba la angustia del pequeño, quien aún estaba en conflicto.
Pero eso llamaba a otra molestia que crecería en él. Una que no quería causar y que sería mejor tratar inmediatamente "E-Eto… vera… y-yo… s-soy Quirkless" aunque con tartamudeo, sus palabras fueron claras. Ryukyu lo quedo mirando, como si tratara de descifrar sus palabras como una especie de broma.
"Escucha. Se que algunos podrían pensar que los Quirk de transformación son inútiles o molestos. Pero llegar al extremo de que te digan…"
"¡N-No es eso!" Ryukyu se sobresaltó por ese grito "P-Perdón. Lo que… quiero decir es que no tengo ningún Quirk. Esa… forma que use… es otra cosa" tenía miedo de que fuera tachado por un Héroe, pero nunca le había gustado mentir. Su madre nunca lo había hecho, y por muy doloroso que fuera, fue completamente honesta con él, dejando de lado el tema de su padre.
Fue solo por un momento, pero Ryukyu se logró conectar con ella misma. Quería saber qué era lo que quería decir "¿Podrías explicarme mejor?".
"Bueno… verá…" "Yo me encargaré desde este punto" "Eh?" Miró alrededor, como si buscara algo. Tatsuma iba a decirle que le dijera rápido, pero verlo agarrar su cabeza con sufrimiento le preocupó. Pero tan rápido como se mostró desapareció esa molestia.
"¿Estás bien?" ella iba a levantarse, pero Izuku hizo un gesto con su mano para que no lo hiciera, lo que había extrañado a la mujer. Sus ojos se abrieron cuando Izuku levantó la vista, mostrando ojos rojos con las pilas en Cruz.
"Lamento la preocupación. El arrebato de ayer pudo despejar mi mente despues de casi dos milenios de estar en 'hibernación'" la voz de Izuku sonó más madura, poco distorsionada, pero también sonó como alguien que había visto todos los males que la tierra tenía por ofrecer, algo que a Ryukyu no le agrado en lo absoluto.
"...Quién eres" era claro que ya no era ese niño que trajo con ella.
"... Ha pasado tanto tiempo que ya no recuerdo cuál era mi verdadero nombre. Simplemente recuerdo el nombre del arma que estado empuñando y que había tomado posesión de mi cuerpo antes de que la conciencia fuera asesinada" que la palabra asesinar saliera de la boca de un niño era perturbador para Ryūko, pero dejó su incomodidad en segundo plano para escuchar lo que sea que tendría que decir "Por el momento… Mi nombre es Incursio. Soy la manifestación del núcleo de lo que existió una vez como bestias peligrosas hace mucho tiempo".
"¿Bestia Peligrosa?".
"Criaturas que varían en formas y tamaños. Monstruos que una vez caminaron en la Tierra. Caigo en la categoría de dragón demoníaco. El dragón de la evolución: Tyrant" la seriedad con la que lo decía podía ser difícil para saber si era una broma o no. Pero no tenía ninguna razón para desconfiar, aún "Cuando aún estaba vivo, me capturaron para usar mi propia carne y sangre para crear un arma para que los Humanos pudieran usar".
"A qué te refieres con eso" realmente no sabía cómo. Si fuera por usar alguna especie de control mental sería lógico, pero….
"Por medio de la alquimia. Usando mi propio cuerpo para poder crear una arma que fuera un enlace directo con alguna de mis capacidades. A lo largo de los años he adquirido algunos rasgos muy útiles, mi fuerza mejorada, mi invisibilidad, y mi muy infinita capacidad de adaptarme a mi entorno" ver a un humano, después de tanto tiempo, sorprenderse con sus palabras era agradable.
"... Puedes hacer una demostración?".
"Lamentablemente no. Este cuerpo no está acostumbrado a usar la armadura para poder emplear dichas cualidades".
"Armadura? Pero dijiste…".
"Mi forma de dragón es solo un estado de posesión forzada. Mi forma 'real' es que el usuario está equipado con una armadura que otorga las capacidades que dije anteriormente. Aunque solo es cuestión de tiempo para que pueda usarlo sin agotarse".
"Qué quieres decir con eso" su respuesta fue que, el ahora Incursio, levantó su polera, revelando una marca carnosa en el pecho, a la altura de su corazón "Pero que…".
"Izuku ofreció su corazón como pago para poder bombear mi poder a través de sus venas. Una forma rápida de obtener poder a costa de su humanidad" eso último colmó la ya poca paciencia que tenía.
"¿¡Te aprovechaste de un joven que solo estaba preocupado por su madre!?".
"Estar confinado a parte de la llave de lo que fue mi forma durante casi dos milenios deja a cualquiera mal de forma mental" trato de dar a entender su punto con la mujer. Aunque aún seguía enojada, no despotrico con la entidad "Puede que me haya presentado de forma incorrecta con él, pero eso no quiere decir que no lo ayudaré con sus nuevas características".
"¿Tendrá algunas partes como dragón?".
"Eventualmente generará rasgos similares. Entre ellos tendrá cuernos, escamas y garras. No sé si tendrá cola, y puedo asegurar que será o uno o ambos ojos que serán como los tengo actualmente" Ryukyu daba gracias a estar en una Era donde las mutaciones eran casi comunes.
"Qué más tendrá" si iba a ser la nueva tutora del niño quería estar informada de todo.
"No serán muchos los cambios que tendrá. Fuera de su temperamento. Será más propenso a enojarse una vez que cumpla los 10 años. Además de ser más maduro mentalmente. Y parte de mi ser estará ligada a él".
"¿Cómo?" Eso último la sorprendió.
"Ya me he cansado de estar conciente de todo lo que ocurre alrededor de mi cuando deje mi cuerpo físico. Quiero estar con mi esposa y mis hijos en la otra vida. Izuku tendrá todo mi conocimiento y sabrá cómo ejecutar todas las habilidades".
"Ya… Ya veo…" no sabía cómo responder a eso. Nunca había pensado en lo que ocurriría después de la muerte, pero si en determinado momento llegara a estar casada, y con hijos, no le agradaría ser la única en estar viva mientras que los demás morían a su alrededor "Para cuando dejarías de ser tu mismo".
"Cuando cumpla los 15, luego de eso él será el nuevo Tyrant y portador de Incursio" el suspiro de cansancio indicaba lo agotado que estaba mentalmente sobre ese hecho "Te diré una cosa más. Respecto a este niño" la atención de Ryūko estaba al máximo "Amalo".
"D-Disculpa?" No esperaba eso para nada.
"Los primeros cuatro años de su vida fueron relativamente normales. Una vez que fueron a examinarlo sobre el tema de los Quirk, su mundo se volvió un caos. Ostracismo, discriminación, abuso, siempre era señalado como el eslabón defectuoso del jardín. En lo posible, cámbialo de lugar, donde nadie sepa de él, donde nadie sea pretencioso. Y dale el apoyo que su madre le hubiera dado".
Ryukyu no sabía cómo responder a una petición hecha con tanta pasión para cuidar a Izuku. Iba a hacerlo de todas formas, pero no esperaba que estuviera tan mal. Sabía que la sociedad era mala con aquellos que no poseían un Quirk, pero que esta bola de canela estuviera sufriendo la parte mala de la sociedad ya era el colmo.
Respiró hondo, tratando de calmar su temple. La simple idea de que ni siquiera los profesores hicieran algo ya era mala "Puedes contar conmigo" simplemente recibió un asentimiento para que los ojos cambiaran a verde y las pupilas en cruz desaparecieran.
Izuku se mostró confundido cuando parte de su mente estaba en blanco. Recordaba que alguien le había hablado, pero nada más aparte de eso "Creo que nuestra comida se enfrió" el comentario de Ryūko llamó la atención de Izuku, pero cuando la notó ella ya lo estaba tomando en sus brazos, abrazándolo de forma maternal "Saldremos a comer algo para llenar nuestros estómagos. Después hablaremos sobre lo que haremos. Te parece bien Izuku?" Cuando ella dejó que se alejara, vio la expresión confundida en su rostro.
"Que quiere decir con…".
"Se… que es duro lo que pasó con tu madre" la mirada triste en al rostro de la mujer junto con el recordatorio empezaron a sacar lágrimas en Izuku "Por eso, con una explicación que te daré después, he decidido adoptarte".
"Eh?".
""Es demasiado lindo por su propio bien" Te lo contaré una vez comamos como corresponde" dijo mientras salía del departamento interno a la calle.
XXX
Esta parte de la ciudad no la conocía muy bien. Aunque no era que conociera mucho para empezar. Cuando salieron, con Ryūko dejándolo en el suelo y tomando su mano para guiarlo a su destino, había notado las miradas de sorpresa que le mandaban al par era un poco inquietante.
La Pro-Hero había comenzado una conversación para aminorar su incomodidad, lo que fue un error ya que Izuku no tenía nada bueno que decir. Por más que quisiera que Incursio se equivocara en la declaración que había dado sobre la vida de Izuku cuando fue diagnosticado Quirkless, era enfermante si él mismo lo decía.
El mismo Izuku estaba curioso. Siempre que contaba sobre su vida se sentía triste por ello, pero ahora se sentía… menos triste… más molesto que otra cosa.
Ryukyu trató de explicar de la forma más sencilla posible sobre la razón del por qué iba a adoptarlo. Aunque dijo que habían cosas que tendría que explicar cuando llegaran a casa, daría todas las razones y explicaciones.
Al llegar a su destino, Izuku noto que era un edificio de por lo menos unos 4 pisos, fuera de tener el suficiente espacio para albergar a casi 40 clientes dentro en cada piso. Además de tener su Stand en la entrada del lugar.
"Bienvenidos. ¿En qué puedo…? Señorita Tatsuma. Un gusto tenerla aquí" un hombre de unos 49 años saludó amigablemente a la mujer.
"Un gusto verte saludable Giriko" levantó su mano saludando a su conocido.
Una pequeña charla, y un rápido pedido, y comenzaron a comer. La especialidad de la casa eran los fideos de soba. Aunque Izuku no recordaba haberlos probado nunca fue un plato bienvenido para ingerir. En su charla, Ryūko le dijo que pensaba cambiarlo de un jardín infantil a otro más cerca de donde estaban.
Con la información que pudo obtener de él en tan poco tiempo supo que el jardín en el que estaba se ubicaba a como 9 kilómetros de su lugar actual. Habían como otras dos escuelas de jardín infantil cerca, por lo que ella quería preguntar si estaría cómodo si lo cambiara.
Aunque estaba tentado a cambiar de ambiente para que dejara de ser molestado, estaba inseguro de cambiar. Al menos no todavía. Si pudo aguantar un año completo de abuso, tal vez podría aguantar otro una vez que ingresara a la primaria.
Simplemente dijo que aguantaría ese año allí para después ver en qué colegio de primaria se quedaría. Aunque no le gusto a Ryukyu, acepto esas palabras. Solo sería un año, no podría ser tan malo.
Una vez que terminaron, y que Ryukyu pagó por sus comidas, caminaron a su 'casa'. El trayecto se sintió normal. Izuku se sentía más alegre que antes. Puede que sea por la seguridad que le daba esta mujer, o por el hecho de que lo trataba como su propio hijo. No estaba cómodo con la idea de reemplazar a su madre, pero Ryūko le daba esa sensación maternal que Inko siempre transmitía.
Una vez llegaron, y Ryukyu cerró la puerta, comenzó la charla. Explico todo lo que ella había obtenido, incluso levantó su polera y le mostró esa cicatriz que tenía en su corazón, tomándose su tiempo para explicar que Incursio no era una mala entidad que iba a tomar posesión de él.
Aunque el joven se mostró asustado con esta información, entendió las cosas que serían más importantes. Tenía lo que sería un equivalente a un Quirk de Transformación, dejando rastros de un Quirk de Mutación. Y tenía una capacidad de adaptarse, de evolucionar, de acorde a las situaciones.
Aunque era complicado, esperaba poder aprender más de esto. Ya cometió un error una vez, no quería volver a repetirlo de nuevo.
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Y listo, se imprime, se guarda, edita. Lo que sea.
Tenía una forma para escribir esto, pero lo borré para cambiarlo completamente. No sé si me quedo aceptable para ustedes, para mí si quedo bien.
Un cambio radical en la vida de este protagonista. Aunque fue difícil, veré cómo agregar más capítulos sin tanta demora. Además del hecho de actualizar mis otros Fic.
¿Por qué elegí a Ryukyu como parte del crecimiento para el protagonista? Era la única con características de dragón, no me jodan con eso por nada.
No tengo mucho que decir sobre este principio. Solo espero que les agrade. Soy Oumashirosaki97.
Matane.
