applied.
Perfecto
.
Ahora que la casa estaba finalmente limpia, Frankenstein lanzó una mirada de satisfacción a sus invitados, que permanecían ignorantes ante sus maquinaciones. La primera pieza del tablero ya había sido colocada inadvertidamente, y pronto todos se convertirían en obedientes peones para el cumplimiento de su objetivo final. Ah, ya podía imaginárselo en su mente.
Regis, vestido como un lacayo, sosteniendo un par de cómodas pantuflas.
—Bienvenido de vuelta amo.
Seira, silenciosa e impecable como siempre, ocupada preparando un rico almuerzo de quince platos, cada uno más delicioso que el otro.
M-21 y Takeo, navegando elegantemente por el comedor con el uniforme de los mayordomos de antaño, volviendo a llenar la copa del amo tan pronto como se vació.
Tao, que había logrado combinar las funciones de una computadora, un teléfono móvil y una cafetera en un solo dispositivo que podía activarse mediante simples comandos de voz.
—Aquí, amo, acepte este humilde regalo mío.
Y luego él mismo, que trajo a la mesa la comida más exquisita que jamás se había producido en esta tierra, fruto de miles y miles de experimentos, la perfección hecha ramen.
—Disfrute de su comida, amo.
Una sonrisa calculadora tomó forma en sus labios. Ah, ese sería el resultado del plan perfecto. De llevarlo a cabo, por supuesto.
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Amo a mi Frankie.
Gracias por leer.
