Tal vez las cosas no siempre pueden comenzar desde un inicio, tal vez todo comienza al final. Tal vez nada comienza a veces, o tal vez, todo comienza como se le da la puta gana; Es difícil plantear una respuesta concreta, es demasiado subjetivo, demasiado variable para un simple mundano, pero al menos, es aquí cuando comienza todo… Al menos todo en esta curiosa historia.
Ante ellos, estaba un hombre quileute adulto que decía venir del futuro.
Lo sé, ¿qué mierda?
Tal vez deberían considerar llevarlo a un psiquiátrico, pero, de nuevo, ¿cómo ellos, siendo unos lobos, van a llevar una máscara escéptica, haciéndole ver cómo loco a aquel hombre? Probablemente a eso le llamen hipocresía.
Muchas cosas han pasado en ese pequeño lapso temporal; Primero está la fase, todos absolutamente están de acuerdo en lo volátil que se volvió todo en su ya de por sí adolescente vida, con todo lo que conlleva eso. Y en segundo lugar, está este hombre.
Ese hombre de cabello largo, negro, hermoso y pesado, parecido a esa melena que solían llevar los antiguos guerreros; Su complexión voluminosa y tonificada, y sus rasgos magnéticos.
¿Qué es lo que desea ese hombre tan joven? Muy sencillo, sólo quiere que rompan el tratado en ese mismo instante para que en conjunto con los Cullen, sus vecinos chupasangre, se unan y así encontrar a una mocosa aparentemente perdida que es muy importante para él. Tal vez su hermana menor.
La cosa es que es demasiado pedir, y es muy sencillo de entender, pero por alguna extraña razón, la idea no entra del todo en la cabeza de ese hombre. Es demasiado lo que les pide, demasiado lo que les dice y demasiado poco a la vez.
Su nombre es 'Yago' y su apellido es misterio.
El intermitentemente silencio en la habitación terminó cuando una barrena de aire nocturno se coló por la ventana abierta, acariciando la tela de la cortina beige, para suavizar los nervios de la piel en la habitación modesta de color celeste; Finalmente, la palabra fue tomada por el alfa de la pequeña, pero creciente, hermandad "Es completamente entendible porque quieres encontrar a esa niña, también te dijimos que estamos dispuestos a ayudarte, pero la pregunta es, ¿por qué deberíamos tomarnos la molestia de llamar a esas sanguijuelas? O tan siquiera dinos, ¿por qué es necesario que ellos estén aquí?" Sam entrecerró los ojos en sospecha ante su nuevo 'invitado'.
El joven les dio una mirada de súplica "¡Por qué es necesario!" agitó los brazos desesperado, luego los bajó lentamente hasta calmarse "Ella es… Es muy importante para mí" bajó la cabeza un momento, mordiéndose la lengua.
El lobo mayor le miró con empatía "Eso lo entiendo" hizo un ademán con la mano "Pero, ¿por qué quieres también la ayuda de ellos? Si mi hermana menor se perdiera, yo al menos estaría un poco más que aliviado de saber que seres como ellos no tienen idea de la existencia de la persona que es importante para mí"
Yago resopló con frustración "Es complicado" comenzó "Es simple, sólo necesito una tregua temporal entre ambos para ayudarme a encontrarla" finalizó "Por favor…"
"¿Pero es necesario que ellos vengan aquí?"
El mayor de todos ignoró deliberadamente la misma pregunta "Necesito que me ayudes a encontrarla, Sam" terminó, con un tono de voz lastimero.
Tres pares de ojos perplejos le miraron con sorpresa "¿Cómo sabes mi nombre?" el lobo mayor se cruzó de brazos, dándole una mirada a sus dos betas recién convertidos.
El hombre suspiró de nuevo, cansado "No te lo puedo decir, no puedo decirte nada más que lo que sale de mis labios porque eso alteraría el curso de las cosas, y con eso me refiero al futuro, comprenderás que eso es malo para todos"
Los tres lobos ante él lo miraron con incredulidad "Es curioso que nos digas eso después de hacer un pequeño tour al pasado, ¿eh?" Paul soltó una risa llena de ironía, Sam le golpeó el brazo.
"Yo sé que no debería estar aquí, pero ella menos" comenzó Yago "Ella ahora ni siquiera ha nacido, no pertenece a esta época para nada" continuó "Debe venir conmigo ahora, a casa; Mira, estoy tratando de comportarme y no causar disturbios pero me lo ponen difícil"
El alfa se mantuvo escéptico "¿Te lo estamos poniendo difícil nosotros? Oye, ponte en mis zapatos; Lo siento, pero eso es todo" le miró seriamente "No nos dices nada, no tenemos porqué ayudarte" se encogió de hombros.
Yago suspiró, con la tensión acalambrando su mirada, pero, entonces tuvo una idea y la cabeza del foráneo se iluminó "¿Todos por la manada, no es así?" comenzó, su voz con un borde de desdén "Se supone que un alfa guía a la manada y a sus miembros, se supone que tú eres el alfa, Sam"
Sam, con su ego herido, y su liderazgo siendo cuestionado, frunció el ceño y gruñó "Tú no perteneces a esta manada para empezar, no que yo sepa de todas maneras. No estás a cargo de mí, por lo tanto no estoy obligado a responder por tus problemas. No soy una especie de santo"
Yago sonrió "Tal vez sí lo eres, Sam" su voz se volvió misteriosa "¿Probablemente se me escapó un pequeño detalle?" entonces Yago se descubrió su hombro derecho: Un tatuaje con dos lobos en un círculo de tinta negra se reveló entonces "Yo formo parte de. Lo hago o, bueno, lo solía hacer"
Era la marca de la manada Uley.
Los lobos a su lado le miraron atónitos "Pero, ¿eso significa que habrá más? ¿Acaso eres uno de nosotros?" los tres se dieron miradas de desconfianza entre sí, sospechando de sus compañeros de manada, buscando en sus ojos el alma de un viajero espacio-temporal.
Los murmullos comenzaron a inundar la habitación rápidamente. Había muchas dudas, opiniones y acusaciones por igual, pero ninguna dejaba espacio para una aclaración, es entonces cuando Sam detuvo todo con una orden "¡Silencio!" se volvió después hacia Yago "Y tú, más te vale que no estés mintiendo" gruñó y después bufó con exasperación, luego miró a los dos lobos que se mantenían firmes esperando sus órdenes "Al parecer tenemos una nueva misión; Paul, Jared, quiero que traigan a esas sanguijuelas ahora mismo a la frontera" la admisión en su timbre sonó cansada.
Los dos lobos a su lados comenzaron a quejarse hasta que su alfa les dio una mirada mordaz que los mandó a callar de inmediato "En cuanto a ti, hermano" se volvió hacia Yago, este levantó sus palmas en señal de inocencia "Tal vez ya hayas tenido lo que querías de nosotros, pero aún así tendrás que convencer también, con la misma poca información, a esos carapálidas. Aunque lo dudo" se burló.
Yago asintió "No hay problema"
Sam suspiró profundamente antes de pararse "Vamos entonces, cuanto antes termine esto, mejor"
