Disclamer: El mundo de Harry Potter y sus personajes no me pertenecen, J.K Rowling es la mente maestra detrás de ello.
…
La magia del teatro musical
— ¡Mira Percy! Hay tantos edificios brillantes, que ingeniosos son estos muggles.
Percy Weasley caminaba junto con su padre por una de las calles del famoso West End. La noche había caído y los edificios decorados con grandes imágenes inmóviles anunciaban diferentes nombres que nunca había visto como "Les Miserables" y "El Rey León" No se le antojaba mucho estar un viernes en la noche por Londres muggle cuando tenía mucho papeleo que completar para el lunes ya que al ser Jefe del Departamento de Transporte Mágico su posición ameritaba dedicarse horas supervisando diversos asuntos; pero no podía dejar a su padre solo por el mundo muggle pues se emocionaba mucho por la gran cantidad de objetos no mágicos que encontraba.
Hermione le había obsequiado a Arthur en su cumpleaños dos entradas para presenciar lo que la chica había denominado teatro musical pensando que Molly querría ir con su marido, pero a ésta no le apetecía rondar por aquellos lugares ya que no le atraía tanto como a su esposo; así que Percy decidió acompañarlo. Aún sentía algo de remordimiento por haber pasado mucho tiempo lejos de su familia y esta ocasión era excelente para tratar de recuperar el tiempo perdido con su padre.
Ya había pasado poco más de un año desde el fin de la guerra y su familia lo había recibido con los brazos abiertos. Las tardes en la madriguera poco a poco volvieron a ser más interesantes y, sobre todo felices. Todos habían llorado la muerte de Fred, George siendo el más afectado. Pero gracias a los esfuerzos de cada integrante pudieron salir adelante; aunque Percy aún tenía aquel pensamiento que a veces no lo dejaba en paz, aquella voz que le repetía que debió haber sido el en lugar de su hermano pequeño, pero tan pronto como ese pensamiento venía, hacía todo lo posible por mantener su cabeza ocupada en otra cosa.
Cuando finalmente llegaron al teatro, Arthur no podía contener su emoción y miraba hacia el techo, admirando las luces y los asientos, los cuales competían con el color del cabello de los dos magos.
—Por aquí señores. — Un hombre con una vestimenta extraña los llevó hacia sus asientos.
—Vaya, Hermione escogió excelentes lugares— Dijo Percy. Se encontraban en la sexta fila mirando justo en el medio del gran escenario.
Ambos magos no tenían ni idea de las circunstancias en las que se desarrollaba aquel musical pero alguna vez su exnovia Penny le había platicado de cuando fue a ver uno de estos espectáculos donde gente cantaba de la nada y bailaban sincronizadamente.
—Hijo, muchas gracias por acompañarme—posó su mano en el hombro del muchacho- sé que preferirías estar avanzando con el trabajo…—Percy lo interrumpió.
-No me agradezcas padre, estoy aquí porque me ofrecí y la verdad no está de más olvidarme por dos horas del papeleo- le sonrió al pelirrojo mayor y este apretó su mano en el hombro de su hijo.
Una voz amortiguada salió de algún lado:
—Tercera llamada, todos a sus asientos.
El espectáculo era algo inusual para Percy, se le hacía de lo más extraño que aquellos muggles salieran con tan extravagantes atuendos ¡Por Merlín, si estaban en ropa interior negra! De vez en cuando volteaba a observar a su padre quien se veía de lo más feliz y pensó que tal vez no fue mala idea acompañarlo después de todo. La música no era terrible y en verdad los bailes eran hipnotizantes.
Pasaron varios minutos cuando aquella tela roja bajó y cubrió el escenario.
—Oh ¿eso es todo? —preguntó Arthur confundido—Pero ¿qué pasó con Roxie y Velma? ¿cómo se resolvió todo?
Percy se encontraba igual de confundido hasta que una voz habló:
—Estamos en el intermedio, aún no termina el musical—El joven brujo volteó y no pudo apartar sus ojos de aquella mujer, tendría unos pocos años menos que el, con cabello negro cayendo debajo de sus hombros y ojos café que brillaban por las luces del lugar. De pronto perdió la habilidad de articular palabra alguna, sintió una calidez en su pecho al ver la sonrisa de aquella mujer.
—¡Fascinante! ¿Entonces si sabremos como termina la historia? —Arthur se emocionó aún más, inclinándose hacia adelante en su asiento. La mujer se encontraba a un asiento de distancia de Percy pues la persona al lado del mago se había levantado al momento en que la cortina bajó.
La desconocida río bajamente haciendo que la calidez que Percy sentía en su pecho aumentara—¡Claro! Solo tenemos que esperar unos pocos minutos. —observó a Artur y luego a Percy
—¿Es la primera vez que vienen al teatro?
Al fin el joven mago pudo hablar. — Si, las entradas fueron un regalo para mi padre de parte de mi cuñada.
La cara de la chica se iluminó. —¡Que maravilloso! Recuerdo mi primera vez en el teatro. Fue cuando tenía 10 años y vi "En el bosque". Fui la niña más feliz del mundo y desde ese día amo el teatro musical: ver a la gente cantar y bailar, gente tan talentosa que se esfuerzan día con día; las luces, el ambiente—suspira—en realidad es una experiencia única claro que hay muchas experiencias únicas dependiendo de cada persona, puede ser que ustedes tengan unas diferentes pero este ambiente es en verdad especial y el saber que es su primera vez aquí lo vuelve más emocionante. —termina relatando con esa sonrisa que, a Percy, inesperadamente, le gusta.
Artur aún está con la boca abierta pues la mujer habló demasiado rápido, le sonrió cálidamente y extendió su mano—Encantado, Arthur Weasley.
La pelinegra abrió sus ojos al máximo. — Vaya, hablé demasiado y ni si quiera me presenté — tomó la mano que le ofrecía. —Audrey Wilde.
—Permita que me presente, soy Percy Weasley, un placer señorita- se reprendió mentalmente por haber hablado con tono pomposo. Pero Audrey solamente amplió su sonrisa y estrechó su mano—Encantada de conocerlo —Ambos se demoraron un poco al apartar los ojos del otro hasta que Arthur carraspeó un poco y estos se separaron algo sonrojados, Percy aún más rojo de sus orejas.
Pocos minutos después el lugar volvió a oscurecerse y aquella tela roja volvió a subir para seguir con la historia. Era entretenido poder presenciar algo completamente desconocido para él, en realidad algunas palabras u acciones no lograba comprenderlas, pero no se esforzó en tratar de encontrarles sentido. Aproximadamente una hora después el escenario quedó a oscuras y la gente comenzó a aplaudir.
—¡Brillante, absolutamente brillante! — su padre aplaudía felizmente y con los ojos algo vidriosos. Mientras Percy aplaudía junto con los demás volteó la cabeza hacia la derecha inclinándose solamente un poco para poder observar a Audrey: también aplaudía con ganas, con una sonrisa de oreja a oreja. La joven debió sentir que la miraba ya que enlazó sus ojos con los del mago, el color subió a las mejillas de Audrey y, sorpresivamente le guiñó un ojo. Percy estaba perplejo ¿acaso lo imaginó? sintiéndose nervioso solamente paseó su mirada de nuevo al escenario donde los actores se inclinaban y la gente seguía aplaudiendo.
Aquella tela roja volvió a caer y los muggles comenzaron a retirarse así que Percy y Artur comenzaron a salir de la fila donde se encontraban. Percy no vio cerca a Audrey.
Vaya, se ha ido. Ante tal pensamiento sintió tristeza, no pudo despedirse adecuadamente de la chica pues le había parecido una mujer agradable Y con una hermosa sonrisa.
Oh, si además de eso claro.
—Hijo iré al baño solo un momento.
—¿Estarás bien padre? Si quieres voy…
-—¡No, Percy! Puedo ir perfectamente por mi cuenta, además creo que te gustaría hablar con alguien. —dijo apuntando hacia la salida. El patriarca Weasley se dirigió hacia otra puerta mientras Percy caminaba en la dirección contraria donde se encontraba Audrey; al acercarse pudo darse cuenta de que era más baja que él, lucía un vestido con estampado floral rosado y unas pequeñas zapatillas.
—Hola—la chica habló
—Hola.
Ambos se quedaron callados por unos segundos hasta que Audrey habló de nuevo.
— ¿Te gustó el musical?
—Si, fue interesante, ¿Y a ti?
—¡Oh, me encantó! Todos los actores y actrices son tan talentosos, ojalá tuviera la mitad del talento que ellos tienen-mencionó con voz decepcionada.
—Bueno, pienso que seguramente eres muy talentosa- alzó la barbilla levemente, un hábito que había adquirido cuando quería enfatizar lo que decía.
—Es lindo que lo digas, pero créeme, soy un desastre. No soy para nada talentosa ni creativa. Por Dios, me apellido como uno de los mejores escritores en el universo-rie—es una ironía.
Percy pregunta confundido —Lo siento, ¿Quién?
—¿Cómo? ¿No conoces a Oscar Wilde? Ya sabes, "El ruiseñor y la rosa", "El retrato de Dorian Grey"- mencionó incrédula.
Ante esto Percy sigue igual de confundido y Audrey se lleva una de sus manos hacía su boca en gesto de sorpresa —Oh no, te prestaré uno de mis libros, es una compilación de sus obras más famosas, te gustarán. Ay no, que estoy diciendo puede que seas del tipo que le gusta la ciencia ficción o aquellas leyendas de hombres lobo o brujas. — sonríe animada.
Vaya, entonces sí es muggle, pensó. ¿Pero qué tiene de malo? Ella parece ser alguien sumamente interesante, y por alguna extraña razón quería verla y hablar con ella de nuevo.
Entonces el mago reúne a su Gryffindor interior —Audrey ¿Qué te parece si…?
- ¿Quedarnos de vernos luego? - ambos hablaron al mismo tiempo y rieron. Percy con sus orejas más rojas y Audrey con un leve carmín en sus mejillas.
—Me encantaría, Percy —asiente la joven mostrando una sonrisa enorme.
En eso Arthur llega animado —El baño es impresionante Percy, traté de buscar algún patito de huele, pero… ¡Oh, Audrey!
—Señor Weasely- inclina la cabeza —bueno me tengo que ir. Fue un gusto conocerlo señor — le da de nuevo la mano a Arthur. — Te veo el viernes Percy, aquí mismo, afuera.
Y dando una última sonrisa se dirige a un autimovel con las letras "Taxi" que se fue perdiendo entre los demás. El mago mayor se dirige hacia se hijo. —Me parece que es una buena chica.
Percy asiente con una pequeña sonrisa asomándose. No puede esperar a que sea viernes de nuevo.
…
¿Qué les pareció? Es la primera vez que escribo algo de Harry Potter y quería comenzar con esta pareja que amo, Percy se ha convertido en uno de mis personajes favoritos y me gusta pensar que Audrey es una muggle con muchas cosas que contar. Coméntenme que opinan, ¡sus críticas constructivas son bienvenidas!
¿Se dieron cuenta qué musical vieron los dos Weasley y Audrey? Espero pronto traer algo nuevo acerca de esta pareja. ¡Los leo luego!
