Este fanfic solamene contendra seis capitulos detallando un poco sobre la vida de nuestros protagonistas y un poco sobre el pasado de estos. Los primeros capitulos serán cortos, pero los proximos seran mas largos.

Muchas gracias.

Los personajes de Naruto no me pertencen.

"…." Flashback y/o pensamientos

Hablan- Presente


Contrato


"Itachi veía como se adentraban mas "socios" de su padre al despacho de este, pero hubo uno en especifico que llamo su atención mas que nada la mirada asustada del hombre en sus ojos que al parecer no tenían iris simplemente un color tenue lavanda y al lado de este una mujer de avanzada gestación de embarazo con su mirada triste siendo consolada por su madre.

- Como si fuera a firmar un contrato con el diablo. – argumento un adolescente Itachi de unos dieciséis años. – ¿Qué estará pasando para que mama intervenga?

El primogénito de los Uchiha no era tonto sabia perfectamente de algunos de los negocios de su padre y como había conseguido su fortuna casi desecha resurgir de las cenizas, pero para el castaño era un juego demasiado peligroso, como un juego de ajedrez que en cualquier momento cualquier detalle provocaría la desgracia y condena en su familia.

- Nissan. – la suave voz de su hermano Sasuke interrumpió sus pensamientos. - ¿Por qué llegaron demasiado hombres con nuestro padre? ¿Pasa algo malo?

- "Es cierto Sasuke no sabe todo aun". – pensó el castaño, sin perder tiempo volteo completamente para verlo y dedicarle una tierna sonrisa. – Tranquilo Sasuke no es nada solo negocios de Padre.

- ¿Y porque mama entro consolando a esa mujer embarazada? – enarco una ceja el azabache.

Cuando Itachi se disponía a inventar una nueva excusa la puerta del despacho de su padre fue abierta, mostrando a su progenitora que al verlos le dedico una tierna sonrisa.

- Hola mis niños, ¿están ocupados? – al ver la negativa de su hijo más pequeño sonrió más, pero al ver la seriedad de Itachi, Mikoto dejo de sonreír comprendiendo perfectamente que su hijo sabia de los negocios de Fugaku. – Vengan por favor su padre y yo deseamos presentarles a unos nuevos socios.

Sasuke inmediatamente tomo la mano de la peliazul sonriendo al sentir la calidez de su madre, Itachi simplemente los siguió callado esperando que ocurría en ese despacho, cuando se adentraron vieron como la mujer que antes era un mar de lagrimas se encontraba dormida en uno de los sillones del lugar y que el hombre antes acongojado cambio a uno completamente seguro con una mirada tan dura como la de su padre.

- Itachi, Sasuke les presento a Hiashi Hyuga y Hikari su esposa. – los jóvenes simplemente asintieron. – Ellos serán nuestros nuevos socios, se hospedarán aquí una temporada espero que sean atentos con ellos, especialmente tu Sasuke. – el menor enarco una ceja confundido. – Como se habrán dado cuenta la señora Hyuga se encuentra embarazada y es de alto riesgo. Esa niña es de suma importancia para todos nosotros.

Todo era demasiado confuso para los jóvenes Uchiha, el mayor no comprendía porque su padre traía a unos desconocidos y mas aun tomando en cuenta que Sasuke cuidara de esa señora junto con su bebe próximo a nacer. Busco respuestas en su madre la cual simplemente les sonrió.

- No deben de que preocuparse, Fugaku. - intervino el Hyuga. – Pase lo que pase mi hija nacerá sana y cuando llegue el momento nuestras familias se aliaran completamente. – eso no le gusto para nada a Itachi. – Piensa en el plan que te dije respecto a los colegios se ganaría el triple de las ganancias. – esto ultimo lo dijo solamente para que Fugaku lo escuchara.

- Déjame pensarlo, apenas estamos comenzando a distribuirnos en las acciones de Shanghái, New York y parte de Nueva Zelanda, después podremos ver esa nueva estrategia.

Mikoto carraspeo un poco ante lo burda que está tornándose la escena, ya que esos cavernícolas se estaban olvidando que se encontraban menores en el lugar, sin perder mas tiempo la mujer se acerco a Hikari para comenzar a despertarla y cuando abrió sus ojos tanto Sasuke como Itachi quedaron embelesados ante la belleza de esos ojos lavanda que mostraban una dulzura e inocencia que nunca lograron ver en una persona. Los pensamientos de la Hyuga fueron de desdicha y dolor al notar que el infierno que pasaría su niña estaba por comenzar, pero al visualizar a los pequeños de Mikoto sonrió comprendiendo que probablemente el futuro de su Hinata no estará siempre lleno de oscuridad".

- Te noto muy pensativo, querido. ¿Estas bien? – la suave voz de Mikoto saco de sus pensamientos a Itachi. - ¿Pasa algo malo con la pequeña Sarada o acaso es Izumi?

- No es nada madre, solamente recordaba cuando llegaron los Hyuga a nuestras vidas, específicamente a la de Sasuke. – tomando un poco de su café. – Por cierto, ya le notifiqué respecto a la cena.

La mirada ónix de Mikoto mostraron una melancolía acompañada de una sonrisa triste, ella también recuerda perfectamente el día que tanto Fugaku como Hiashi realizaron ese contrato estúpido.

- Me imagino que no lo tomo muy bien, ¿verdad? – alejando un poco el plato de fruta, había perdido el apetito. – Se que tanto a Sasuke como a ti no les gusta el tema de sucesión de los negocios de tu padre, así como el contrato que realizaron los padre de Hinata-chan con nosotros, pero…

- ¿Contrato? – ironizo Itachi. – Por favor mama lo que ustedes hicieron fue comprar a Hinata, para que fuera la esposa de Sasuke. – apretó sus puños. – Sabes al menos lo que las acciones de ustedes cuatro provocaran en nuestro futuro.

- Itachi…sé que la acción que hicimos estuvo mal, pero debes de creernos cuando te decimos que nos encariñamos con Hinata y sé que Sasuke…

- Sasuke la desea madre. – apretando sus puños. – Al menos tienes idea, ¿Por qué Sasuke va al psicólogo cada semana? – la mujer negó. – Porque desde el momento en que nuestro padre le dijo la verdad acerca de ese matrimonio Sasuke no volvió a ver a Hinata con los mismos ojos. ¡PORQUE SASUKE COMENZO A DESEAR A HINATA CUANDO SOLO TENIA DOCE MALDITOS AÑOS!

Lagrimas comenzaron a derramarse en los ojos de Mikoto la cual conocía el estado de salud de su hijo menor y la forma de amar tan aprensiva que tenia hacia la ojiluna llegando un punto hace años atrás a asustarla. Sabia que ese contrato a la larga traería muchas desgracias a ambas familias y los mas perjudicados serian Sasuke y Hinata, pero era tanta la ambición de Hiashi en no perder su fortuna que no le importo vender a Hinata al mejor postor si ellos no hubieran sido seguramente hubiera ido con "ellos".

- Yo se que estuvieron mal nuestras acciones. – levantándose para quedar frente a su hijo. – Pero ya no se puede regresar el tiempo Itachi, el contrato que realizamos ambas familias esta por cumplirse, se que Sasuke esta controlando sus sentimientos, pero se también que Hinata lo ama con todo su corazón. Se que ellos podrán controlar todo lo que conlleva su matrimonio.

- ¿Cuándo piensan casarlos? – intervino Itachi harto de discutir este tema nuevamente con su madre o su padre. – Sasuke desea que al menos ella cumpla la mayoría de edad, desea que ella comprenda el mundo de negocios que manejamos. – ante esto ultimo Mikoto lo vio horrorizada.

- ¿Acaso esta loco? No puede decirle nada a Hinata de los negocios de exportación de ambas empresas, para eso está Neji y…

- Vaya entonces así se le dice ahora al narcotráfico "negocios de exportación", sabes creo que al menos Sasuke hizo bien en manejar todo en la bolsa de valores y como dices Neji esta encargado de una parte, pero no es el heredero Hyuga y aunque Hinata al casarse con Sasuke se convierta en una Uchiha sigue teniendo la sangre de ellos.

Mikoto iba a intervenir, pero el celular de Itachi comenzó a sonar conociendo perfectamente el timbre de esa persona.

- Bueno ¿Cómo esta todo Neji? – la respuesta del otro joven provoco varias reacciones de él. – De acuerdo iré para allá, diles a Tsunade y Jiraya que esperen. Hasta luego. – colgó ante el desconcierto de su madre. – Me tengo que retirar madre, vendremos a cenar…

- La boda de Sasuke y Hinata se llevará a cabo de dos semanas. No espero que nos comprendas, pero tampoco que nos crucifiques Itachi. Todo lo que estamos haciendo es para el bien de ambas familias.

Sakura Haruno suspiro derrotada por mas suministros de medicamento que le administraba a Sasuke no lograba controlar su "enfermedad" sino cada día lo hacia mas fuerte, ¿acaso no compre ese tarado que la única solución es mantenerse alejado de Hinata?

- No comprendo, ¿Cuál es el problema en amar a alguien? Total, Hinata pronto tendrá la mayoría de edad y podrán estar juntos.

- ¡Mami! – la interrupción de un infante de cinco años la interrumpió, haciéndola sonreír al ver a su hijo Boruto al lado de su padre. – Vinimos por ti para comer.

- Muchas gracias, cariño. – tocando suavemente los cabellos dorados del infante y viendo sus hermosos ojos esmeraldas.

- Perdón por interrumpirte en tu trabajo. – Naruto le dio un beso en su frente. - ¿Estas demasiado ocupada? – viendo en el expediente el nombre de su mejor amigo. – Al parecer ese teme nunca aprenderá verdad.

- Cariño, porque no mas Shizune trajo dulces deliciosos. – los ojos comenzaron a brillar con mas intensidad y sin decirlo nuevamente se fue corriendo, dejando a los mayores en el consultorio. – Sabes como es Sasuke, nunca le gusta admitir sus sentimientos. Aunque debo de reconocer que sus arranques de ira son peligrosos a veces.

- Pobre de Hinata, lo que tendrá que soportarlo pronto al casarse. – la risa estridente de Naruto más esa oración hizo enarcar la ceja de Sakura. – Por cierto, tenemos una cena este fin de semana, ya tienen la fecha para la boda probablemente sea en este mismo mes.

Aquello realmente sorprendió a Sakura nunca indago como es que Sasuke termino comprometido con la heredera de los Hyuga y cuando una vez se lo pregunto a Naruto le dijo que eran temas que solamente conciernen a ambas familias, pero lo que preocupo a la peli rosada fue el tono serio y distante de su esposo.

- Aunque nunca me lo hayas dicho se que hay algo oscuro en ese compromiso Naruto. – tomando sus cosas y apagando su computadora. - ¿Desde cuándo están comprometidos Sasuke y Hinata? ¿Qué provoco que despertara su deseo con una niña?

Los ojos azules del Uzumaki vieron con tristeza a su esposa y es que si ella se enterara que Hinata fue un arreglo monetario antes de nacer lo odiaría por no decírselo antes.

- Digamos que son viejas costumbres de clanes, cariño.

Durante el trayecto de la mañana Hinata sentía que su día no podía empeorar mas desde la clase con Sasuke hasta gimnasia donde no era demasiado buena, un claro ejemplo era el golpe que sangraba de su frente, no comprendía muchas cosas del acuerdo matrimonial que su padre y los Uchiha habían estipulado. Cuando vivían en la casa de los Uchiha muchas veces se lo cuestiono a Mikoto, Itachi e incluso el propio Fugaku, pero todo cambio un día que Sasuke cumpliendo otro de sus "caprichos" indago sobre el tema y ahí todo cambio. La actitud del azabache cambio rotundamente ya no hablaba con ella simplemente se mantenía cerca observándola como un tigre a su presa, no dejaba que conviviera con nadie que no fuera él incluso a veces se escapaba de su habitación para adentrarse a la suya y abrazarla para dormir. En ocasiones era reconfortante tenerlo cerca, pero en otras sentía que la mirada ónix de el cambiaba por una color rojiza como los vampiros que en cualquier momento te clavarían los dientes, inocentemente le dijo a Mikoto su sentir lo que provoco seguramente el distanciamiento de Sasuke hacia ella.

- Probablemente sea la causante de todo esto. – decía suavemente antes de entrar ala enfermería.

- Y sobre que precisamente era la causante, Hyuga. – la voz de Sasuke hizo que volteara quedando cara a cara con el azabache, el cual enarco una ceja por el nerviosismo de Hinata.

Su mirada ónix escaneo de pies a cabeza la anatomía, haciendo que las pinzadas de su cabeza regresaran, así como el maldito deseo hacia ella y ese uniforme demasiado corto de gimnasia no ayudaba nada.

- Olvídalo, sigues siendo igual de lenta. – debía de buscar esas pastillas que ayudaban a relajarlo, pero sorpresivamente no los encontró en su maletín, cuando se adentró a la enfermería comenzó a buscar con desesperación.

Tan desesperada era su búsqueda que no noto como Hinata lo seguía silenciosamente, detallando como las manos de Sasuke estaban temblorosas, así como su cuerpo y su cuerpo comenzara a sudar frio. Armándose de valor se acercó al mayor tomándolo un poco por su camisa.

- Sa-sasuke-kun, ¿estás bien? – la voz temblorosa de ella erizó su piel cerro los ojos fuertemente. - Por favor…si hice algo para que estuvieras enojado conmigo…lo siento.

- "Tu no tienes la culpa que te desee"

- Se que odias mi ne-nerviosismo, tar-tartamudeo incluso mi presencia.

- "No los odio son demasiado tentadores…malditamente tentadores"

- Pero desearía al menos que…to-todo fuera como antes. – abrazándolo por la espalda y cuando percibió el aroma a lavanda, no lo soporto más.

Hinata sabia que estaba mal todo lo dicho con anterioridad, si la escuchara Ino diría que se amara un poco mas y ignorara el iceberg de hielo que era Sasuke, pero no podía…no podía seguir soportando su frialdad, ella deseaba recuperar al menos a ese viejo amigo del pasado. Se separo repentinamente cuando el azabache golpeo fuertemente la mesa metálica de los medicamentos y cuando se volteo a verla estaba nuevamente esa mirada rojiza, trato de retroceder, pero sus manos fueron capturadas por una de él mientras que con la otra acercaba su cuerpo al suyo tomándola por la cintura.

- Sa-sasuke, ¿e-estas bien? – la sonrisa burlona plasmada en su rostro que le dedico, así como se acerco peligrosamente a su cuello había despertado algo en ella completamente diferente al miedo.

- No, Hinata nunca he estado bien. – de forma suave y susurrante como el sonido de las víboras Sasuke delineaba con su nariz el cuello de Hinata, retrocediendo ambos cuerpos hasta que se toparon con la camilla de la enfermería. – Desde que naciste no he estado bien.

Eso fue demasiado doloroso para la peliazul, ¿acaso Sasuke nunca demostró sus verdaderos sentimientos hacia ella? Todo este tiempo había fingido su afecto y… los besos alrededor de su cuello, así como un trayecto húmedo la saco de sus pensamientos al sentir como el Uchiha comenzaba a mordisquear su clavícula.

- Ah…Sasuke por favor no…- pero sus labios fueron sellados por un beso apasionado del hombre el cual sin importarle nada adentro su lengua saboreando cada rincón de la cavidad de Hinata sentándola en la camilla y posicionándose entre sus piernas.

- Eso mismo digo yo Hinata. – separándose milímetro de ella viendo sus labios hinchados y sus mejillas sonrojadas. – Creo que es momento en que conozcas del verdadero Sasuke Uchiha. - tumbándola en la camilla posicionándose arriba de ella. – y de paso adelantaremos la luna de miel, cariño. – sin esperar respuesta volvió a besarla mientras sus manos comenzaron a recorrer sus piernas.