Vaya parece que este fic si ha recibido un poco de amor, eso me gusta jajaja en fin aquí les traigo otra Eriaventura, espero que sea de su agrado.
Antes de comenzar responderé los pocos reviews que hay.
Skull Flame: Claro que, hasta las profesionales, aunque claro esto vendrá de poco a poco XD.
Cap 1.- Ideas…
El desayuno había pasado sin más incidentes e Izuku se miraba más tranquilo, ahora Midoriya tenía su mochila en la espalda demostrando estar listo para sus clases y había sentado a Eri sobre sus hombros. La niña sonrió abrazándose del cuello de Izuku, pero ella recordó algo que llamo la atención.
- Papi, mis lentes -Pidió Eri, mientras que Izuku sonreía y sacaba un estuche de su bolsillo donde al abrirlo mostraba un compartimento doble donde se podían ver dos juegos de lentes estilo aviador con las micas oscuras-.
- Esos lentes se ven muy grandes para Eri-chan -Dijo Uraraka mirando a la niña la cual los tomaba con emoción-.
- Midoriya, ¿Quieres que le fabrique unos lentes más acordes para una niña? -Preguntó Momo mirando a Eri-.
- Gracias Yaoyorozu-san, pero Eri no va a querer otros lentes -Dijo
- Espera papi -Dijo la niña buscando en su bolsita un teléfono celular rosado con la estampa de un chibi All Might, la niña buscaba algo y después sonrió, esta con su dedito pulso sobre la pantalla y el teléfono comenzó a emitir música que comenzó con las cuerdas de una guitarra-.
El peliverde sonrió y en ese momento ambos se pusieron los lentes al mismo tiempo dejando escuchar su actual canción favorita. Kyoka se sorprendió, ella estuvo practicando esa canción hace un par de días y ahora la pequeña la tenía en su teléfono. (Bad to the Bones)
- Tiene buen gusto -Dijo Kyoka sonriendo al escuchar la canción haciendo que sus compañeros le vieran con una ceja alzada mientras la amante de la musica segui el ritmo de la canción con su pie derecho-.
- ¡A LA CARGA! -Gritó Eri señalando hacia el frente mientras que los pies de Midoriya comenzaban a liberar un poco de energía por la cual corrían unos rayos verdes, mientras en aquellos oscuros lentes se miraba como los ojos de Deku brillaban en un intenso verde. Gracias a los lentes que llevaba Eri, Izuku podía viajar más rápido ya que podía ver sin temor a que se le metiera basura en los ojos o el viento no le dejara ver-.
La historia de esos lentes era curiosa y eso hacia sonreír a Izuku, jamás espero que Eri quisiera algo como eso, pero recordarlo solo era algo que le gustaba pues sería uno de sus momentos agradables a su lado.
Flashback...
Era una agradable tarde en la playa que Izuku había limpiado como parte de su entrenamiento para poder ingresar a la U.A. Fue curioso como después de que quedara limpia la gente comenzó a ir y después se volvió un lugar muy visitado tanto por locales como turistas.
Ahora mismo podemos ver a Izuku llevando un short playero de color verde, Mirio con uno de color rojo, Tamaki uno negro y claro, Nejire exponiendo su sensual figura llamando la atención de todos los hombres que la miraban. Ahora parecía como si estuviera actuando para la película de guardianes de la bahía pues lo que Izuku miraba era como Nejire llevaba de la mano a Eri mientras ambas corrían en SUPER cámara lenta por la playa.
El peliverde sonreía al ver a su pequeña en un trajecito de una pieza color rojo con una faldita y unas sandalias blancas, era la imagen de la inocencia pura a sus ojos. A su lado estaba Nejire Hado, la hermosa peliazulada estaba usando un traje de dos piezas color verde con tirantes azules, el traje se veía un poco ajustado por lo cual la chica dejaba ver todos sus encantos.
- Ne, ne Eri-chan, hagamos castillos de arena, ¿quieres? Es super divertido, seamos princesas de nuestros castillos de arena -Comentaba la chica de cabellos azules con una sonrisa llena de emoción-.
- ¿Castillos de arena? -Preguntó la pequeña ladeando su cabeza-.
- Seria genial, pero Eri-chan no trae instrumentos, debí comprarlos antes de llegar -Dijo Izuku suspirando, pero como si el destino no quisiera entristecer a la niña, una mujer atendía un puesto con varios artículos para playa-.
- Vaya eso si que es un golpe de suerte -Dijo Mirio sonriente para verse como todos se acercaban-.
Una vez en el puesto Eri miraba como Izuku comenzaba a buscar una pala y una cubeta, entonces el chico fue reconocido.
- Vaya vaya, pero si es el chico que limpio la playa, quien diría que el chico al que le debo las ganancias de mi día a día vendría a mi local -Comentó la mujer con una sonrisa mirando al peliverde-.
- Ne, ne Deku-kun, ¿Tu limpiaste la playa? ¿Porque nunca nos dijiste? ¿Cuándo lo hiciste? -Preguntaba Nejire acercando un poco a Izuku poniéndole un poco nervioso-.
- Debieron verlo, el y un hombre rubio muy delgado estaban limpiando la playa, al principio nadie le tomó atención debida, para nosotros solo se trata de dos locos ambientalistas, pero después de que la playa comenzó a verse con menos basura la gente comenzó a prestarle atención, al final la playa quedo limpia en un tiempo impresionante. Muchas gracias jovencito, así que, que es lo que buscas y podemos ponernos de acuerdo con un precio especial -Comentó feliz la mujer-.
- Bueno, mi, mi hija hará su primer castillo de arena, ¿Tendrá algo para ella? -Preguntó el peliverde-.
- Vaya, pero sí que es bonita, sí que los tengo ven aquí nena, escoge el que más te guste -Dijo la mujer colocando varios juegos de palas y cubetas, al final la niña escogió una cubeta roja con pala amarilla. Una vez que Izuku pago, este miro a sus amigos probándose lentes para el sol, bueno a Tamaki lo mirábamos en una esquina avergonzado-.
- Hey Izuku-kun pruébate unos -Dijo Mirio con una sonrisa llevando unos lentes de sol que parecían tener un estilo para los que solían correr maratones-.
- Estos se te verían bien -Comentó Nejire poniéndole unas gafas para el sol estilo aviador, la peliazul se sonrojo un poco, esos lentes si le quedaban bien a Izuku- Si… Si te quedan -Dijo Nejire mirando al peliverde-.
- Están en remate, son los últimos que nos quedan -Explicó la mujer-.
- Bueno, hace mucho que no compro algo como esto -Decía Izuku mirándose en un espejo, en este se reflejaba un poco Nejire y al ver que se reflejaba con Izuku delante más vergüenza le dio adquiriendo un ligero sonrojó en las mejillas-.
Eri al ver a Izuku así decidido ir con él y darle unos tirones en el short para llamarle la atención, eso lo logro con facilidad pues el chico se arrodillo.
- ¿Que ocurre Eri-chan? -Preguntó Izuku mirando a la pequeña-.
- ¿Puedo tener unas yo también? -Preguntó con curiosidad la pequeña mirando a Izuku-.
- Por aquí están las que son para niños - Dijo la mujer girando el estante de lentes para sol-.
- Yo quiero como las de Papi- Dijo la niña mi sorprendiendo a la mujer, Eri quería ser como Izuku en muchos aspectos-.
- ¿Unos de esos? Pero estas son más lindas- Dijo la mujer queriendo convencer a la pequeña que negó con la cabeza-.
- A mí me gustan como las de Papi -Dijo la niña mirando unas gafas grandes estilo aviador, la mujer rio y se dio por vencida-.
- Al cliente lo que pida- Dijo la mujer mientras que le daba a Eri las gafas iguales a las de su padre- Vaya luces muy bien -Sonreía la mujer mirando a la pequeña que miraba como se reflejaba en los lentes del pecoso-.
- Ya somos iguales -Mencionó con emoción la mujer-.
- Por supuesto - Dijo Izuku acariciándole la cabeza a la peliblanca haciendo feliz a Eri, al final pagaron por todo y se retiraron con la niña más feliz por sus gafas oscuras que por los juguetes para la playa-.
Fin del flashback...
Izuku corría con rapidez mientras que Eri disfrutaba del viaje, quien diría que la tierna niña terminaría siendo una amante de los viajes rápidos vía exprés Midoriya, la clase 1-A solo pudo escuchar a la lejanía.
- ¡Mas Rápido! -Gritaba emocionada Eri sacándole una gota de sudor a los chicos -.
- Bien chicos aquí ya no hay nada que ver, apresúrense no podemos llegar tarde a clases, no es algo digno de alumnos de la U.A -Iida quiso que sus amigos regresaran a la realidad mientras que tras varios minutos Deku llegaba ante los tres grandes en la sala de maestros los cuales sonreían al verlo a él y a Eri-.
- Buenos días Mirio-sempai, Nejire-sempai, Tamaki-sempai -Saludó Izuku con una sonrisa mirando a los tres grandes, donde Nejire al ver a Izuku con aquellas gafas no pudo evitar sonrojarse, al ver como Izuku parecía una especie de chico malo-.
- Buenos días Midoriya-kun -Saludo siempre optimista Mirio mientras que Nejire desviaba la mirada avergonzada y Tamaki asentia en silencio mirando al peliverde- ¿Lista para entrenar Eri-chan? el día de hoy nos haremos mucho más fuertes- Decía Mirio con una sonrisa donde Eri chocó su puño con el rubio para después asentir-.
- Si, esta vez les voy a ganar y me convertiré en la heroína número 1- Decía Eri con emoción haciendo sonreír al peliverde y al rubio -.
- La confianza de Eri-chan me pone nervioso -Dijo Tamaki bajando la mirada-.
- Son las gafas de la confianza, le dan poderes especiales a Eri-chan -Decía Mirio con una sonrisa mirando a la pequeña sonreír-.
- ¿Como va su entrenamiento? -Preguntó el peliverde-.
- Bueno considerando que Aizawa-sensei es quien la ayuda con su don, su resistencia esta aumentando, ya puede correr al menos la mitad de la cancha de atletismo sin cansarse -Decía Mirio que él se encargaba de hacer fuerte su cuerpo-.
- Gracias sempai -Sonrió Izuku para ver a la pequeña- Bueno Eri-chan recuerda dar lo mejor de ti, vendré por ti al terminar mis clases, has todos los ejercicios que Mirio-sempai te ponga para que te conviertas en la heroína número 1- Dijo el peliverde bajando a Eri hasta el suelo-.
Eri asintió y después abrazó y le dio un beso en la mejilla al peliverde, en ese momento la niña le entregaba sus gafas para no romperlas y su padre las guardó en el estuche, sin más Izuku se retiró a sus propias clases.
El día fue bastante productivo, el peliverde tuvo clases normales y monótonas, sobre todo sus entrenamientos de héroe con All Might, por otro lado el entrenamiento de la pequeña peliblanca termino a medio día, ahora Eri descansaba bebiendo de un jugo de manzana junto a los tres grandes que comían su almuerzo hablando entre ellos un poco sobre el trabajo en sus agencias. La mente de Eri regreso a lo ocurrido en la mañana junto al tema de su padre y su futura y desconocida madre, pero una voz la sacó de sus pensamientos.
- Estas volviéndote muy buena en esto Eri, cada vez te cansas menos y cuando Aizawa-sensei, usando tu Don jamás te cansaras de correr -Decía Mirio con una sonrisa acariciándole la cabeza a la oji roja-.
- Me esforzare tío Mirio -Dijo Eri con una sonrisa-.
- Eso suena bien Eri-chan y cuando eso pase podrás entrar a la U.A como tu padre -Comentó el director Nezu apareciendo junto a Midnight y Aizawa-.
- Hai -Respondió la niña feliz-.
- Director Nezu ¿ocurre algo? -Preguntó Mirio mientras sus compañeros igual se ponían de pie recibiendo al director, Nezu con un movimiento de mano los apaciguo para que le restaran importancia a su presencia calmándolos-.
- En absoluto, de hecho quien tiene algo que decir es Aizawa-san -Dijo el hombre con sus manos detrás de su espalda, mientras la mujer se aclaraba la garganta-.
- Eri, este día Midnight te va a ayudar yo tengo un asunto importante que atender, no usaras tu don hoy -Explicó la pelinegra de ojos cansados mirando a la niña asentir- La dejo en tus manos Midnight -La mujer se retiró y después Eri quedo en manos de la heroína Midnight-.
Sin embargo, las cosas no fuero… exactamente como Aizawa las había planeado, ahora Eri estaba junto al escritorio de Midnight mientras hablaban como las más grandes amigas compartiendo una agradable merienda.
- Y entonces le pregunte que ¿Cuándo podría tener a mi Mami? Entonces se puso muy nervioso y no pudo responderme -Decía Eri mientras que comía la mitad de un emparedado-.
- Bueno, los hombres suelen ponerse muy nerviosos con ese tipo de preguntas, sobre todo un hombre como tu padre, a lo largo de su estancia en la U.A lo eh visto ponerse mas rojo que el arroz curry que preparan en la cafetería -Explicó la mujer a la niña-.
- Las amigas de mi papi actuaron raro ante el -Dijo la niña recordando las traviesas insinuaciones que le habían hecho a base de un pequeño juego-.
- Vaya, deben de tenerle un cariño especial por tu padre si bromearon de esa manera -Dijo la ¨Experta en el amor¨sintiendo algo de celos ya que actualmente no tenia ninguna relación y no encontraba a su príncipe azul-.
- ¿Entonces una de ellas podría ser mi mami? -Preguntó Eri con emoción sacando de sus pensamientos a Nemuri-.
- Bueno es difícil saberlo, pero quizás alguna de ellas si este realmente interesada en tu padre -Decía Midnight con un dedo en su barbilla mirando hacia el techo como si buscara la respuesta- Por cierto, Eri-chan, el profesor Cementos te hará una habitación cercana a la de tu padre en los dormitorios de la clase 1-A -Comento la mujer-.
- ¿De verdad? -Preguntó Eri mirando a la mujer-.
- Claro que sí, jamás podría mentirle a mi mejor amiga -Dijo Midnight dándole un toque en la nariz haciéndole reír-.
- ¿Somos mejores amigas? -Preguntó Eri con brillos en sus ojos-.
- Por su puesto -Mencionó la mujer- ¿Quieres más galletas mejor amiga? -Preguntó la mujer con una sonrisa mostrando una caja de galletas con chispas de chocolate-.
Eri sonrió tomando una galleta mas mientras Midnight sacaba un cartón de leche que tenia en un mini refrigerador para que Eeri disfrutara mas la merienda. La mujer estaba encantada con esa niña, Izuku tenia mucha suerte de ser su padre, asi ambas mejores amigas siguieron hablando hasta que llego la hora de regresar, sin embargo esa misma noche se miró como Aizawa regresaba de su ¨misión¨ y personalmente llevaba a Eri con ella para que la recibieran.
- Bien, escuchen a partir de hoy Eri comenzara a vivir en la residencia, es por eso que Cementos amplió un poco la residencia, ella estará cerca de la habitación de Middoriya en caso de que ocurra algún improvisto. Si Midoriya esta ocupado en algún caso de la agencia por favor, pueden buscarme a mi o a Midnight a menos de que ustedes deseen cuidar de Eri -Comentó Aizawa mirando a los chicos-.
- Hai, Aizawa-sensei -Respondieron todos mirando a la mujer que tras esa respuesta se sintió mas tranquila-.
- Al expandir la residencia agregamos una habitación de limpieza para cada piso y sea mas sencilla la limpieza para ustedes -Comentó la mujer de cabellos negros mirando a sus estudiantes-.
Una vez que la mujer se retiro todos comenzaron a festejar a su nueva residente, mientras que Izuku y Eri iban a ver la habitación, tenia su cama perfecta para alguien de su edad, un papel tapiz rosado, una alfombra color blanco, un escritorio y algunas de sus pertenencias.
- Bienvenida a casa Eri-chan -Dijo Deku con una sonrisa, contagiando a la pequeña-.
Fue una bienvenida divertida y con clasificación PG 7, eso hizo que muchos se limitaran en la forma de divertirse, le dieron algunos regalos a la niña y bueno Eri se acerco a Momo para pedirle una cosita, la joven encantada accedió y Eri le dijo que usaría ¨Eso¨ para un secreto cosa que intrigo a Momo pero igual sonrió. Una vez que la fiesta termino e Izuku acostó a Eri, cuando su papi salió de la habitación tras todo el ritual de Buenas Noches, Eri corrió a un armario donde saco un pizarrón que miro con una sonrisa.
- Ahora vamos a hacer lo que mi mejor amiga me recomendó -Dijo Eri colocando unas estampillas con las caras en versión chibi de chicas de la clase A que le pidió a Momo- Ahora veamos quien quiere mas a Papi -Dijo la niña mirando el pizarrón de forma analítica y mirando el orden en el que había acomodado a las prospecto a mamis-.
Kyoka 0
Mina 0
Momo 0
Ochako 0
Toru 0
Tsuyu 0
Eri sonrió al ver su pizarrón para después guardarlo donde Papi no pudiera encontrarlo ya que era una sorpresa y después se fue a recostar, a partir de la mañana siguiente Eri buscaría a su Mami.
CONTINUARA…
Bueno hasta aquí el cap, espero que haya sido de su agrado, es hora de ver como se moverá Eri para conseguirse a la Mami perfecta de su pequeña familia. Si veo que este Fic recibe mucho apoyo lo verán actualizándose mas seguido. No lo hagan por mí, háganlo por Eri-chan.