Hostia que flipo en colores.

.

El Redentor 777. Pues sí, una especie de universo alterno sería y bueno, me llamó mucho la atención la pareja, por lo que decidí hacerles un espacio aparte, además, dijiste que te gustaría un fic de ellos dos, por lo que escribí esto a ver. El dibujo me llevó mis buenas horas, por lo que al final me gustó bastante como quedó.

.

RinMakoto. El reencuentro entre los dos apenas es normal, aunque Esperanza ya demuestra que tiene sentimientos por Joan, solo faltaría él que se dé cuenta de los suyos por ella, pero lento y calmado va todo.

.

Sin más, comencemos…

.

.

.

El día después del inicio de las clases, todos volvieron a la normalidad y solo siguieron el horario.

Durante el camino a la Academia, Esperanza y los hermanos Fábregas iban hablando un poco, aunque al final la española iba más pegada al chico el cual parecía estar bastante feliz por la presencia de la peli verde.

Llegó un momento en el que, al llegar a la academia, Esperanza fue llamada por algunas chicas las cuales la llevaron hacia donde estaba un chico el cual parecía estar bastante seguro de que cumpliría su objetivo.

- ¿No me digas que Natsuyamaha-kun se le va a declarar a la nueva? – decían algunas chicas las cuales solo miraban como la española estaba bastante confundida.

- Joven Cortés-san, sé que es repentino, pero es una oportunidad única, mi corazón ha estado contigo desde que llegaste y eso fue hace unas horas, por lo que, aunque nuestros países sean un impedimento, te doy mi amor, Esperanza Cortés-san…

- ¿En serio es esto? – se preguntó la chica la cual seguía confundida por eso.

- Cortés-Senpai, es una declaración de amor, ¿Por qué no aceptas? – decían varias chicas alentando a Esperanza la cual al final solo suspiró.

- ¿Qué dices Cortés-san?

- Lo siento, pero digo que no, la verdad es que es estúpido declararse a la primera, por lo que ni siquiera te conozco, en segundo, ni siquiera me dicen sobre esto, y en tercero, ya me gusta alguien, por lo que dijo que no, nel, lo siento papacito, pero no. O como dirían en México, lo siento carnal, pero no jalo.

Cabe decir que varios chicos quedaron callados ante eso, aunque la española estaba orgullosa por eso y solo fue a donde estaban sus mejores amigos.

- ¿Qué fue eso?

- Rechacé a un idiota con una declaración que no tenía el más mínimo sentido, por lo que ahora podemos decir que estoy libre de culpa.

- Increíble.

- La próxima vez que se compre una patineta que soporte el estilo neutrón – con eso, todos fueron hacia sus respectivas aulas, aunque Claudia y Esperanza iban al mismo sitio dejando que Joan se fuera a su aula de segundo año.

Mientras todo transcurrió de forma normal, todos seguían con lo suyo, aunque con el mexicano esté estaba hablando con su nuevo amigo de Honduras.

- ¿Entonces ella es tu hermana? – preguntó el peli negro.

- Sí, aunque sé lo que piensas, no nos parecemos bastante – dijo Joan – aunque sí, es que lo que pasa.

- Pues cualquiera diría que no son hermanos porque no se parecen, como sabes cómo es la gente que solo te juzga por la apariencia.

- Eso sí, bueno, es que Claud se parece bastante a mi padre en cuanto a color de piel y cabello, aunque se parece bastante a mi madre. Sin embargo, yo salí como mi papá, pero mi color de cabello y de piel son de mi madre.

- De igual forma estamos casi igual, yo salí igual a mi papá y mis hermanos salieron igual a su madre.

- Aunque ella se mire madura… créeme que no se puede estar con ella.

- ¿Por qué?

- Porque es algo irresponsable.

- Ya veo – con eso, las clases iniciaron y todo marchó bien según lo planeado en las clases, aunque el almuerzo, todo el grupo se volvió a reunir a hablar sobre las clases, las cuales apenas iniciando el año y estaban poniéndose tareas algo difíciles.

- Odio las matemáticas – dijo Tsubasa la cual estaba con la cabeza en la mesa.

- Vamos Tsubasa, si le pones empeño lograrás pasarla sin problema.

- Es que Arihara es bastante tonta en ese sentido – dijo Shinonome la cual solo estaba comiendo de lo más normal, después de todo era una de las más inteligentes de su clase.

- Por cierto, Esperanza, ¿te vas adaptando? – preguntó Yoshimi con su típica maña de llamar a todos por el nombre.

- La verdad es bastante diferente a como son las clases en México y España.

- Por cierto, yo pensé que eras una especie de impostora en cuanto a idioma era – dijo Aoi.

- ¿Por qué?

- Bueno, pensé que solo los mexicanos hablaban español, pero miro que no, aparte de que creí que estar mucho tiempo en México te había pegado el idioma.

- Hablamos el idioma en casi todo el continente, mira hasta Ramón habla siendo de Honduras – dijo Joan.

- Por cierto, ¿no te han dicho que eres guapo? – dijo Claudia a lo que el moreno levantó una ceja algo confundido.

- Claud – el Fábregas menor le pegó una leve patada en la espinilla a su hermana – no lo incomodes.

- Carlos, no era necesario que me pegaras – la morena solo se sobaba la zona afectada mirando con un puchero a su hermano menor.

- Claudia no cambia ¿verdad Carlos?

- ¿Entonces al final de todo si hablas español?

- Sí, puedo hablarlo ya que es mi idioma natal ¿lo ves?

- ¿Eh? – con eso, los demás se quedaron viendo algo confundidos por lo que dijo la chica de cabello verde.

- Bueno Senpai, lo que pasa es que es cierto, solo piénsalo un poco, ¿Qué idioma hablan los franceses?

- Francés.

- ¿Los alemanes?

- Alemán.

- ¿Los ingleses como Honjou?

- Hablamos inglés.

- ¿Y los españoles? – con eso, parecía que todos los demás estaban tratando de analizar eso y se dieron cuenta que era verdad.

- ¿Y de dónde eres en sí?

- Ella es de Valencia si mal no recuerdo ¿verdad? – preguntó Joan y su amiga española asintió con la cabeza – de ahí, como dijo ella, se fue a México a vivir por años hasta que volvió a España, pero, ¿volvieron a Valencia?

- No, luego de eso la sucursal nueva de mis papás quedaba en Barcelona, más específico en la zona de Cataluña.

- Me siento como en clase de Geografía – río Yasmina – pero no me importaría aprender ese idioma con tal de tener un poco con ella.

- Daisuke-kun, ya empezamos ¿no? – antes de que el peli rosa dijera algo, la peli morada le dio una patada en la entrepierna la cual los chicos solo fruncieron el ceño como adoloridos.

- L-Lo siento S-Senpai.

- Si estuviste en Valencia y Cataluña, eso quiere decir que se te pegó algo del idioma de allá ¿verdad? – preguntó Yoshimi a la española.

- Está diciendo que ella estuvo en España, obviamente hablan el español y… - antes de que Kurashiki siguiera, esta fue detenida por la peli verde.

- De hecho, sí puedo hablar valenciano y catalán.

- ¡¿Hay más idiomas?!

- Sí, aunque Valencia y Cataluña estén en España, tienen un poco de sus propios idiomas como lo son el valenciano y el catalán, por lo que al vivir por tanto tiempo ahí, se me pegaron los dos idiomas.

- ¿Cómo si alguien le importara esos idiomas? – dijo Honjou por lo bajo.

- Esperanza, yo nunca te escuché hablar valenciano – dijo Joan.

- Bueno, nunca lo hablé en público, no era necesario que lo hiciera – con eso, Esperanza solo carraspeó la voz – Supose que això és suficient perquè sàpies que parle valencià, veritat Carlos?

- Increíble – dijeron varios los cuales quedaron asombrados por eso.

- ¿Y el catalejo?

- Es catalán, y no es tan diferente del valenciano – río un poco la morena de cabello verde - encara que no ho parlo tan bé com el valencià, aquest el maneig en un 80% o 85%.

- No sabía que los españoles poseían varios idiomas.

- Aparte está el gallego y el euskera, pero esos no los manejo ya que son diferentes.

Con eso, el almuerzo acabó, aunque siempre con los intentos de Claudia por alguna razón de coquetear con Ramón, aunque este estaba tratando de ignorar eso, la morena se le pegaba bastante.

Las clases finalizaron por ese día, aunque de parte del mexicano y la española, ambos decidieron ir a una salida solo los dos, esto más para hablar las cosas que los mantuvieron alejados durante 4 años.

Joan conocía más la zona por lo que incluso guío a su amiga por la ciudad para que conociera mejor los alrededores.

Luego de caminar un poco, Joan la llevó a una cafetería la cual era conocida por tener bastantes clientes, aunque ese día, al caer la tarde parecía que el sitio estaba algo despejado, por lo que tendrían un buen momento para hablar mientras comían algo.

- Bienvenidos sean, soy Minami Kotori y seré su maid – exclamó una peli gris de ojos ámbar la cual parecía bastante amable.

- Gracias – con eso, los dos chicos solo miraron los menús, aunque no fueran comida a la que estaban acostumbrados, los postres eran bastante buenos en Japón según decía Joan.

- Carlos, ¿Qué me recomiendas?

- Bueno, si mal no recuerdo a ti te gusta bastante las fresas ¿verdad? – la peli verde asintió – pues podrías pedir un helado en copa de fresa, o incluso podrías pedir un pedazo de pastel de fresa, tú decides que te gusta más.

- Dorayaki – la española miró lo que parecían ser unos panes los cuales tenía forma de hamburguesa, por lo que llamó mucho su atención – creo que probaré esto.

- ¿Un dorayaki? Pues es buena opción para comenzar – río un poco el mexicano – yo tomaré un pedazo de pastel de chocolate.

- ¿Aun te mueres por el chocolate? – preguntó la española la cual río un poco sabiendo como era su amigo, el cual asintió.

- Es mi comida favorita en todo el mundo – con eso, le dijeron a Kotori las ordenes la cual las anotó.

- Enseguida vuelvo – dijo la peli gris yéndose del sitio, dejando un momento a solas a los dos chicos, aunque había muchos clientes en varios de los puestos.

- No sabía que habías venido aquí antes Carlos.

- La verdad es que he venido algunas veces con Claud o con alguno de los chicos – dijo el joven castaño – me gusta bastante.

- ¿El qué? ¿Las maids?

- No, los postres en general, realmente son buenos – suspiró – por cierto, ¿no habías probado la comida japonesa?

- No, habíamos comprado los ingredientes normales y solo seguíamos haciendo lo que normalmente comemos, así que no tuve tiempo de probar la gastronomía de aquí.

- Es algo insípida ya que le faltan muchos condimentos, pero de igual forma, no hay nada como la comida mexicana.

- Eso sí – ambos rieron hasta que finalmente Kotori volvió con sus órdenes, el trozo de pastel de chocolate para Joan y los dorayaki para Esperanza.

- Disfruten.

- Gracias – con eso, Joan comenzó a comer su pastel de chocolate, mientras que la peli verde miraba bastante los dorayakis.

- Carlos… al final, ¿Qué son estos?

- Los dorayakis son dulces compuestos de dos bizcochos y lo que miras que tiene dentro es pasta de judías, bueno, al menos eso creo, no sé si es chocolate o mermelada, depende como lo hagan.

- Bien – con eso, la española solo tomó uno y sin más, lo probó y sus ojos se iluminaron bastante - ¡Hostia tío, que monada!

- ¿Te gustó?

- ¡Son realmente sabrosos! ¡Realmente me gustó bastante! – exclamó bastante emocionada la chica mientras seguía comiendo los Dorayakis con bastante emoción.

- Parece que encontramos algo en lo que realmente te harás adicta – con eso, Joan miró como un poco de la pasta de judías rojas quedaba en la mejilla de la morena – Esperanza, tienes algo del relleno del dorayaki.

- ¿En dónde? – la peli verde solo miró cuando su amigo se acercó hacia ella y con una servilleta limpió un poco e rastro de judías rojas. Esperanza se sonrojó cuando miró el rostro del mexicano bastante cerca de ella y no pudo evitar desviar su mirada hacia sus labios.

- Listo, ya quedó.

- G-Gracias Carlos – Joan de suerte no se fijó en el enorme sonrojo que tenía su amiga y solo siguieron con lo suyo hasta que terminaron.

Cuando todo finalizó, cada quien se fue a su respectivo hogar, siendo que la peli verde iba realmente pensando en ese día vivido con su amigo.

Joan llegó a su hogar cuando miró a su hermana la cual se la encontró tirada en el suelo bastante "mal."

- ¡¿Qué te pasó Claud?!

- Carlos – la morena lo miró fijamente – me estoy muriendo de hambre.

- ¿Eh?

- Intenté hacer algo… pero quemé algunas tortillas y la salsa también. Papá vendrá hasta tarde y realmente no sé qué hacer – decía la joven – por favor Carlos… hazme de cenar.

- Bien, lo haré, aunque no tengo hambre.

- ¡Gracias! – con eso, la mayor se levantó bastante alegre por eso y solo se fue cantando un poco a su habitación dejando a su hermano con una gota de sudor en la frente.

- La próxima vez la dejaré morirse de hambre.

- Por cierto, Carlos – dijo Claudia asomándose – tu amigo… el hondureño…

- ¿Te refieres a Ramón?

- Sí, bueno – la peli negra se puso algo tímida - ¿sabes si… está soltero?

- ¿Qué? ¿No me digas que ahora lo tienes a él en la mira?

- Es guapo… nada más y…

- No te diré nada de él, no quiero que él sufra tenerte de pareja, es más, creo que me iré a dormir de una vez, después de todo ya comí.

- ¿No me harás de cenar? – en eso, la morena miró como el castaño se encerró en su cuarto poniéndole seguro - ¡Carlos, por favor! ¡Tengo mucha hambre! ¡Por favor, Carlos! ¡Carlos!

.

Con la española, esta estaba en su habitación luego de irse temprano ya que les avisó a sus padres y su hermano menor que no cenaría.

Esperanza estaba pensando en la salida que tuvo con Joan y su forma de ser no había cambiado nada según ella. En eso, la peli verde miró una foto que tenía en su mesita de noche en la que salía ella, Joan y Claudia cuando iban a la escuela en sus primeros años. Ellas eran las mayores y normalmente acompañaban bastante al castaño, aun así, le hacía bastante tierna la escena la cual le hizo recordar desde que se conocieron hasta el presente.

- ¿Cuánto hace que los 3 nos conocimos y nos volvimos amigos y también…? – la peli verde se sonrojó al pensar en eso – c-cuando supe que me había enamorado de ti Carlos.

Y todo pasó hace varios años…

.

.

Continuará…