CAPITULO 1: La Nueva

James

Golpeaba mi pie contra el suelo mientras pasaba la página del libro que estaba leyendo, estaba en mi cabaña en compañía de los inservibles de mis hermanos, hubiera sido lindo que los monstruos los hayan liquidado en la batalla contra Gea o en la Torre de Nero, qué pena, a veces la vida en difícil. Por el rabillo del ojo observé como el más joven de la cabaña, Tyler, creo, era ayudado por Linzie para hacer una poción, niño estúpido, si algún día puede hacer una poción decente será toda una sorpresa; justo en eso golpean la puerta para asomarse por esta Quirón.

—Buenas tardes semidioses—Saluda y los demás se lo devuelven, yo lo ignoro completamente inverso en mi lectura—Este día les traigo una nueva hermana a su cabaña, ella es Seline—Nos dice apartándose para darle espacio a la que supuestamente sería nuestra nueva hermana.

La pequeña engendro debía tener unos quince años, su cabello castaño caía por sus hombros, baja estatura, debía medir un metro cincuenta y ocho, supongo, traía un asqueroso suéter color canela que tapaba sus manos, usaba una falda negra hasta las rodillas con unas botas marrones que parecían el cuero de un caballo con cáncer. La chica nos miró con timidez saludando con la mano, rodé los ojos analizándola, al verla ya me di cuenta que era la típica chica rara de secundaria que es tímida y dice que es fea sabe que es bonita; seguro tiene un diario secreto dónde escribe de su vida, emociones y cosas inútiles de una adolecente mojigata con el himen intacto, predecible.

—Bienvenida Seline—La saluda Linzie con una sonrisa de oreja a oreja, la monja puberta le devuelve la sonrisa tímidamente mientras Quirón le señala la cama para que deje sus cosas. Luego de eso el centauro de retira cerrando la puerta.

—Hola, soy James Smith, el miembro más poderoso de esta cabaña—Le digo a la nueva tendiéndole mi mano con una falsa sonrisa adornando mi rostro, ella sonríe con la boca cerrada aceptando el saludo.

—Soy Seline—Dijo casi en un susurro que me estuvo a punto de obligar a poner los ojos en blanco.

—Bien Seline, ¿de dónde vienes?

—Chicago—Responde sacando su ropa.

—¿Cómo llegaste aquí linda?—Le pregunta Linzie. Ella baja la mirada algo apenada y entrecierro los ojos mirándola.

—Casi mata a su mejor amiga—Respondo ganando una mirada de sorpresa por parte de Seline y una de curiosidad de parte de Linzie.

—¿C-cómo lo supiste?—Sonrío malévolo pero Linzie le contesta por mí.

—James puede hurgar en la mente de las personas, puede saber sus recuerdos y lo que están pensando—Seline traga duro.

—¿Te debiste sentir muy culpable? ¿No?—La interrogo sintiendo como se pone nerviosa—Verla ahí, inmóvil, con sangre cayendo de su cabeza…

—¿Podrías hacer el favor de cerrar la boca?—Me dice mi hermana y me encojo de hombros.

—Solo pregunto—Le digo viendo de nuevo a Seline. Ella niega con la cabeza tratando de formar una sonrisa pero no lo logra.

—Sí, lo fue, por suerte ahora está mejor—Muestro una cara de falso entendimiento.

—Tranquila, todos aquí hemos hecho cosas terribles con nuestros poderes, Linzie mató un policía inocente poniendo un auto en movimiento—La pelirroja de mi hermana Linzie me mira mal.

—Ya dije mil veces que fue un error, j-jamás haría algo así a alguien a propósito—Dice a punto de llorar y se mete en el baño. Tyler frunce el seño tomando su libro de hechizos y saliendo de la cabaña.

—Dramáticos—Digo poniendo los ojos en blanco y fijando la vista de nuevo en la chica.—No te preocupes, luego se les pasa. Ahora, seguro quieres un recorrido por el campamento ¿Verdad? Yo te llevo—Digo tomándola de la muñeca y levantándome para conducirla hasta la salida.—Hasta si quieres podemos ir a la cabaña de Afrodita para conseguirte algo de ropa que no parezca la de un convento.

Ella se muerde el labio avergonzada saliendo conmigo hacia afuera.

Louis

Mis manos estaban llenas de tierra como mis rodillas y ropa, venía de el campo de fresas luego de sembrar algunas por allí, limpie mi frente con mi brazo ya que tenía algo de calor al estar tanto bajo el sol. Mi vista se fija momentáneamente en una cabellera rubia que pasa rápido, de inmediato mis sentidos se alertan y dirijo mis verdosos ojos a la persona dueña de esos rubios cabellos, también es dueño de mi corazón, alma, sueños húmedos, creo que se entendió. En fin, vi a James pasar por las cabañas tomando de la muñeca a una chica, okey, traté de disimular mi cara de desilusión y enojo total, no lo logré. ¿Qué hacía esa chica de la mano con mi… con James?. Caminé despacio tratando de seguirlos por entre algunos campistas, James la llevó cerca del lago y me escondí en uno de los árboles ahí cerca.

—Como podrás ver este es el lago, el único lugar donde los de Poseidón nadan como peces idiotas, lo demás no es importante—Dice mientras la chica se queda mirando el agua—Y… ¿Sabes nadar?

La chica de cabello castaño negó mientras jugaba con las mangas de su suéter.

—Bueno, es un buen lugar para aprender ¿no?—Pregunta James con una sonrisa algo perturbadora. Me di vuelta un momento porque creí escuchar algo cerca de mío, luego salté de mi lugar al escuchar gritos.

Giré mi cuerpo devuelta al lago observando el panorama. Las tranquilas aguas del lago ahora estaban en disturbio por los patalelos de la chica que acompañaba a James, él estaba diciéndole que aguante mientras trataba de calmarla. Salí de mi escondite yendo para el lago y lanzándome a él. El agua fría del lago impactó con mi cuerpo haciendo que me estremezca y dándome escalofríos, sentía como la chica pataleaba y nadé hacia ella tomándola de los hombros.

—¡Sujétate de mí—Le dije y ella asintió como pudo. La empecé a guiar para salir del agua donde un ceñudo James aparecía.

—Oh dios mio, Seline, ¿Estás bien?—Preguntó aunque en su rostro no se reflejaba nada de preocupación. La chica empezó a toser expulsando agua para asentir a la pregunta.

—E-estoy bien… gracias… n-no sé tu nombre—Seline me preguntó y yo sonreí mirándola.

—Soy Louis O'kelly, un gusto—James rodó los ojos ayudando a la chica.

—Si si, gracias chico que no conozco, vamos Seline, te mostraré el bosque—Dijo con una sonrisa macabra en el rostro que me heló la sangre al instante.

Lo vi desaparecer entre la maleza del bosque acompañado de la empapada chica nueva. Esperen un minuto, ¡James me habló!, Me pondría a dar saltos pero tengo miedo que alguien me vea, mejor voy a mi cabaña para hacerlo.