Hermione se sentía decidida, hasta ese momento, habían puesto las necesidades de los demás en primer lugar, era momento de pensar en lo que ellos deseaban. Podía sentir pequeñas oleadas de deseo recorrer su cuerpo, se sentía lista y podía notar que Ron lo quería al igual que ella, o tal vez aún más, al fin y al cabo, su respiración era la más acelerada, lo que la hacía sentir deseada.
Durante su estadía en Hogwarts, se había arrepentido de no haberlose animado a hacerlo antes de despedirse, se lo había reprochado. ¿Cuántas cosas se iban a perder por no animarse a demostrar sus sentimientos? Ya habían perdido demasiado durante sus constantes discusiones todos estos años.
Volvió a sentir las manos de Ron, él sentado en el borde de la cama y ella aún de pie entre sus piernas. Se sintió sexy, quería compartir con él su parte más femenina, algo que solo él pudiera tener, quería sentirlo regodearse, que supiera que ella le permitiría ser el único.
Se aceleró con sus propios pensamientos y enterró sus manos en el cabello de Ron al sentirlo bajar sus manos hasta la parte trasera de sus piernas.
¨Wow¨ pensó Ron al acariciar esa parte, su piel allí era algo áspera, distinta al resto de su cuerpo, se imaginó todas las texturas que podría sentir si seguía explorando, y no pudo resistir el impulso de apretar sus manos para sentir mejor su piel. Hermione respondió apretando sus caderas sobre Ron lo que despertó una explosión de adrenalina en él, sus manos ahora subieron por debajo de la falda, acariciando y apretando la piel que encontró allí. Sentía la carne de Hermione escurriéndose entre sus dedos, lo que provocó que ella lanzara un quejido entre besos que él no pudo entender, pero rápidamente dejó de apretar y comenzó a acariciar, concentrándose en las curvas y el tacto. Ella volvió a gemir en modo de aprobación.
Él siguió hasta sentir bajo sus manos los bordes de la ropa interior femenina, tuvo que reprimir el impulso de agarrar y estrujar la tela para sacarla de su camino. Suspiró profundamente cortando el beso, estaba teniendo una erección por primera vez frente a Hermione. Afortunadamente por la posición en la que estaban ella no se había dado cuenta y aún era posible esconderla en caso de que decidiera frenar la situación.
Hermione, que no pareció percatarse de nada, se separó lentamente para poder mirarlo a los ojos.
¨Te amo¨. Le dijo ella suspirando al mismo tiempo que estiraba las manos para acariciarle las orejas de color rojo brillante.
¨Te amo¨, le repitió Ron con las manos reposando en sus nalgas. No era la primera vez que se lo decían, pero esta vez la energía que había entre ellos había cambiado.
Volvieron a besarse y Hermione apoyo su rodilla en la cama, a un lado de Ron, él se sintió enloquecer al entender lo que quería hacer y la apretó aún más cargar con parte de su peso. ella gimió con el roce y levantó su otra pierna para también apoyarla en la cama, al otro lado de Ron.
Wow- gimoteó él haciéndola reír e interrumpiéndola con sus labios.
Hermione se había sentado sobre las piernas de Ron de una manera tan intima que podía sentir como sus propias piernas comenzaban a temblar levemente mientras las manos de Ron volvían a perderse debajo de su falda, acariciando todo lo que encontraba a su alcance. Ella apretó sus piernas contra él y sintió la dureza en el cuerpo de Ron, algo sorprendida apoyó las manos en sus hombros y volvió a cortar el beso separando su rostro lentamente. Lo miró y mordió sus labios al verlo con los ojos cerrados, apretando sus claras y largas pestanas, labios hinchados, rosados y húmedos, respirando intensamente... lucía tan bien.
Él lo sabía, ella había sentido su erección, no se sintió capaz de abrir sus ojos mientras intentaba recuperar el aliento, había apoyado sus manos en los muslos de Hermione, pensando en qué decir. Sin embargo, se sorprendió al sentir los dedos de ella acariciando su frente, sin poder abrir los ojos aún, movió sus manos, devolviendo caricias sobre sus muslos lentamente, la sintió acercarse. ¨Te amo¨ Le volvió a repetir antes de que sus labios vuelvan a encontrarse. Se sentía muy excitado y tanta adrenalina que quería quitarse la ropa y explorar cada centímetro de su cuerpo.
Dejó caer su espalda sobre la cama y Hermione se dejó caer sobre él. Se concentró en el placer que le producía sentir el peso de ella sobre él, especialmente sobre su abdomen, cerca de su erección.
¨Te amo¨- le contesto ella sobre sus labios, sin aliento.
Ron la envolvió con sus brazos y giró, dejándola de espaldas sobre la cama, ella se incorporó sobre sus codos, acomodándose mientras él se recostaba sobre ella recargándose completamente.
¨Ron¨ lanzó con voz muy aguda. Tuvo que abrir sus piernas para que el peso de él no la aplastara y se sintió simplemente fantástico. El peso de él ejercía una presión exquisita sobre su pelvis. Los labios de Ron se habían perdido en su cuello, no podía pensar, estiró su cuello al mismo tiempo que se sintió entregarse a lo que estaba por suceder. Ron gimió al recibir completo acceso a su cuello y siguió besando intensamente, bajando hasta donde el cuello de la camisa de Hermione le permitía, mientras ella inconscientemente realizaba movimientos de vaivén con la cadera, disfrutando de la fricción.
Ron, quien podía sentir a Hermione moverse debajo de él, comenzó a desabrocharle lentamente los botones de la blanca camisa para bajar aún más sus besos.
Ella estaba tan ensimismada que, mientras la desnudaba, solo atinaba a acariciarle el cabello y por momentos enterrar sus dedos bruscamente para tirar de la cabeza de Ron, cosa que lo encendía aún más, le parecía fascinante verla y sentirla actuando puramente por instinto.
Desabrochó el último botón y enterró su rostro en el pecho de Hermione besándola por encima del brasier, había encontrado su nuevo lugar favorito. Instintivamente apretó una mano contra el pecho de Hermione haciendo que ella suelte un quejido, lo que volvió a indicarle que tenía que ser más gentil. Liberó la presión de su mano y lentamente la escabulló por debajo de la copa del sostén. ¨Ohh¨ gimieron los dos al unísono al sentir el contacto de los dedos contra el duro pezón. Ron bajó la copa del sostén hasta dejarlo al descubierto, ¨por fin¨ pensó mirando el pecho descubierto, había deseado esos pechos desde sus primeros años de pubertad, sin dudarlo acercó su boca desesperadamente para succionarlo.
¨Ron¨ Hermione volvió a gemir encerrándolo entre sus piernas con aún más fuerza. Movió su cabeza para poder ver: la boca de Ron estaba pegada a su pecho desnudo, mientras que, su otra mano forcejeaba con la tela del sostén que cubría el otro pecho. La imagen era muy sexy y sintió mucho poder. Cerró sus ojos, luego de unos momentos sintió la boca de Ron moverse hasta su otro pecho y oyó el ruido de sus labios succionando.
Se incorporó un poco y Ron siguió su movimiento al mismo tiempo que se prendía a sus pechos con más firmeza. ¨ ¿Como es posible que él siga completamente vestido? ¨ pensó Hermione al notar que el cuerpo de Ron seguía muy cubierto, ella quería verlo y tomó la camiseta de Ron estirando hacia arriba. Él que pareció entender sus intenciones, se incorporó en sus rodillas y se la quitó. Hermione lo tomó del cuello y lo invitó a recostarse a su lado, para comenzar su propia exploración, relamió sus labios para humedecerlos y Ron pudo sentir como iba depositando tímidos besos en su cuello, brazos, clavícula, pecho. Era la primera vez que alguien besaba el cuerpo de Ron, nunca había experimentado tanta intensidad.
¨Me gustas¨ le dijo ella volviendo a su oído al mismo tiempo que depositaba un beso allí. Ron volvió a tomarla entre sus brazos para girarla en la cama y capturar sus labios.
Hermione volvió a abrir sus piernas desesperada por la fricción. Ron no se sentía menos desesperado, la erección había empezado a molestar en sus pantalones.
La complicidad de ellos era tan asombrosa que, sin necesidad de palabra alguna, ambos se quitaron el resto de la ropa en lo que parecieron unos segundos y ahí estaban, completamente desnudos besándose y apretando sus cuerpos lo máximo posible. No había nada más que deseen en ese momento que calmar la urgencia de sus cuerpos y la inexperiencia dejó de importares, se sentía tan bien que ya no importaba nada más.
Hermione no estaba segura de poder soportar otra caricia de Ron, sentía el abdomen de él tocar de lleno su clítoris, al mismo tiempo que Ron comenzaba un movimiento de caderas involuntario, en búsqueda de alivio, rozando a Hermione con su erección.
¨Quieres hacerlo tu? ¨ preguntó Ron de repente luego de lanzar un intenso gemido al rozar a Hermione de forma muy íntima.
¨Sí¨ contestó ella con desesperación al mismo tiempo que se despegaban para que ella pueda agarrar su varita.
¨Merlín¨ dijo Ron asombrado al verla completamente desnuda.
¨Ron, es la primera que haré el hechizo, no me desconcentres¨ se quejó entre risas, mirando el cuerpo de Ron.
¨Merlín¨ pensó ella también. Él estaba de rodillas en la cama, mirándola y la perfecta ve de la pelvis de Ron estaba cubierta por bellos rojizos, muy claros. Ver un miembro por primera vez le pareció algo muy curioso, aunque también le pareció algo demasiado grande para ser introducido a su pequeño cuerpo, pero prefirió no pensar demasiado.
Realizó el conjuro anticonceptivo y volvió a tomar a Ron por el cuello. Pudo sentir su desesperación, Ron tomó su miembro entre sus manos y lo acercó a la entrada de Hermione mientras ella se aseguraba de realizar la fricción necesaria sobre su clítoris, estaba nerviosa. Ron, sin embargo, se sentía a punto de explotar.
Empujó lentamente y retrocedió asustado ante el quejido de Hermione. Volvió a intentarlo esta vez logrando introducir parte de su miembro, pero los gemidos de dolor de Hermione hicieron que no pueda continuar.
¨Ron, va a doler de todas maneras¨ le advirtió ella. ¨hazlo, realmente quiero que pase¨.
Ron tragó saliva, por más deseo que sintiera en ese momento, hacer que Hermione sintiera dolor era algo que no podía soportar, no después de todo lo que habían vivido durante la busqueda de horrocuxes. Suspiró y miró su rostro, decidiendo que necesitaba una pequena pausa antes de volver a intentarlo, sin embargo, ella le devolvía una mirada decidida.
Lentamente bajó su mano y acarició el clitoris de Hermione, en el poco tiempo que habian pasado desnudos, habia notado que esa zona parecia generarle gran satisfacción. Ella cerro los ojos y gimió, dándole la aprobacion que necesitaba. Siguio acariciando por un largo rato, observando su humeda entrada.
¨Por cuanto tiempo va a dolerte?¨ Preguntó Ron de repente, ella abrio los ojos confundida.
¨ Por Merlín, Ron! no es momento¨, Se quejó, pero suspiró ondo. ¨No lo sé exactamente. Supongo que un par de veces, y luego disfrutaré tanto como tú¨
Ron suspiró confundido, si tan solo pudiera dolerle a él y no a ella. Siguió acariciando.
¨Se siente muy bien Ron¨ susurró hermione alentándolo. Luego de un rato, bajó sus propias manos para masajear su propio clitorís permitiendo a Ron seguir explorando. Él Introdució lentamente un dedo, no parecio dolerle, pero sintio urgencia extrema al sentir su interior, caliente, humedo y completamente apretado. Salio de sus pensamientos al sentirla agitarse, ambos sudando, siguieron moviendo sus manos ayudándola en lo que parecía una agonía, su frente absolutamente fruncida, quejidos, muecas, Ron tuvo que mirar hacia otro lado, ver a Hermione en ese estado tan vulnerable e intimo incrementaban sus ganas de tomarla.
¨Vamos Ron¨ lo alentó ella quien parecía estar cerca del éxtasis. El tomó su miembro una vez más y lo introdujo con decisión. Sintió como si hubiese roto algo y luego las paredes de Hermione apretándolo intensamente, dándole calor y humedad. Sintió también la urgencia de mover sus caderas, pero decidió esperar.
Hermione sin embargo sintió su éxtasis alejarse y lo reemplazo un profundo dolor, podía sentir el miembro de Ron latir en su interior y el corazón de él latir sobre su propio pecho. Sabía que él estaba esperando su señal para comenzar sus movimientos. Luego de unos segundos el dolor dejó de ser profundo y sintió un agradable cosquilleo. Apretó y abrazó fuerte a Ron, indicandole que podia comenzar. Uno, dos, tres, Ron había comenzando con sus embestidas y ella se concentró en escuchar los gemidos de él, salvajes, descontrolados lo que la ayudaron a dejar de pensar en su dolor y se perderse en la intensidad de la voz que con cada movimiento incrementaba su volumen y pronto indicaba que estaba a punto llegar a la liberacion.
No pasó mucho tiempo hasta que lo escuchó roer su nombre y enterrar su cabeza en su cuello. Hermione nunca se había sentido más completa en su vida.