I'll suport You
Lo había jurado. Hacía mucho tiempo ya. Era una promesa inquebrantable. No era algo que le jurase a ella bajo la luna, el sol del atardecer o frente a un altar. No. Era el tipo de promesa que te hacías a ti mismo con tanta intensidad que sabías que nunca ibas a romperla. Que atañera a otra persona, era un plus extra que encontraba necesario.
Porque era justamente, ella.
Sarada no sólo había cumplido su sueño y promesa al convertirse en Hokage, había activado su propio destino. Quisieran o no, estaban enlazados desde que nacieron, crecieron y maduraron tomando sus propias decisiones.
Él la observaba con orgullo y entendía que estaba más que dispuesta a morir por proteger al pueblo que la había aceptado finalmente. Era un camino difícil el que tuvo que recorrer. Aún quedaban resquemores por el pasado de los Uchiha y ella estaba dispuesta a demostrar que era capaz de conllevar todo el peso a su espalda y modificar el sendero de la oscuridad.
Porque confiaba en su sombra más preciada.
No dijo esas palabras, pero Boruto las captó enseguida. Puede que hubiera más de mil personas ahí, mirando su posición y admirándola o dudando de ella, pero Boruto sabía que ella conocía su posición y que, cuando hablaba de su soporte, era de él.
Lo mismo que, al terminar la noche, siempre recurría a él. Se acurrucaba en sus brazos, suspiraba agotada y no sólo por el retoce sexual.
—¿Realmente quieres trabajar en las sombras, Boruto? —solía preguntarle.
Él le apartaba los húmedos cabellos del cuello y besaba su piel.
—Sí. Lo decidí hace tiempo. Ya lo sabes.
Ella suspira y levanta la cabeza para mirarle. Sabe que está aguantándose las ganas de darle una charla. De recordarle que su padre lo pasaba mal de esa forma, que tenía que mantenerse alejado de su familia.
En su lugar, le besa para acallarse a sí misma. Lo abraza como si fuera la última vez y acomoda su cuerpo al suyo. Ambos saben que en cualquier momento tendrían que vestirse rápidamente, actuar como si nada pasara entre ellos. Él se escondería en las sombras y ella mostraría la cara ante el mundo.
Él mataría por ella cuando intentaran atacarla de sorpresa y admiraría su fuerza cuando estuviera seguro de que era capaz de encargarse sola. Calentaría sus noches hasta que se cansara de él, mientras llevaría en cada momento, su esencia en su cuerpo.
Quizás muriera por ella, quizás en sus últimos momentos no pudiera verla, pero sabía que su alma sería de ella.
Fin #2
#BoruSaraweek
