Hola! Solo para informarles que esté fanfic no solo se encuentra en esta plataforma, también lo pueden leer en Wattpad. Está con el mismo nombre "Demonic Cherry" e igualmente el mismo usuario "evillix".


EL INICIO

Incluso con sus sentidos bien entrenados y desarrollados, no pudo evitar el fuerte golpe junto con la aparatosa caída.

Tuvo la suerte de poder girarse en el aire para poder recibir el impacto en su brazo izquierdo, pero eso no significó que no tuviera daño alguno, ya que hasta un ligero cráter se hizo en el lugar donde aterrizó.

La pelirrosa maldijo por lo bajo ante el dolor del impacto, pero aún así se reincorporo lo más pronto posible.

¿Dónde se encontraba? Hace unos segundos estaba en el Valle del Fin curando las leves heridas de sus compañeros a causa de un absurdo, ilógico pero divertido entrenamiento matutino.

Ahora se encontraba ahí, en una especie de bosque, rodeada de una vegetación humeda y verdosa, en medio de grandes pinos y restos de escombros.

Aquellos escombros no eran más que pedazos de piedra, la piedra de las esculturas del 1ro y Uchiha Madara.

Los ojos jades de la pelirrosa adquirieron una expresión temerosa, y es que en el perímetro donde ella junto con los escombros aterrizaron, también se encontraba ese cuerno.

Sakura tragó en seco antes de caminar hasta el y tomarlo en sus manos. No cabía duda que era idéntico a los que Kaguya tenía, pero... ¿qué hacía ese cuerno en el Valle del Fin?

La batalla con la Diosa conejo fue en una dimensión completamente diferente a la suya, una batalla que se llevó a cabo hace poco más de dos años.

—Carajo. - Musitó temerosa cuando algo hizo "click" en su cabeza.

Dimensiones.

Aquel cuerno creo un tornado de viento del cual ninguno fue capaz de librarse, y también creo ese hoyo, ella deducía que más que un agujero, era una especie de portal, como el que Obito creo con su ayuda tiempo atrás.

Si sus conjeturas eran ciertas, ella, al ser absorbida por ese portal, terminó en una de las tantas dimensiones que Kaguya fue capaz de abrir.

—No puede ser... - Susurró para si misma mientras llevaba una mano a su pecho, fue inevitable sentir miedo en esa situación.

Si sus compañeros de equipo o su maestro hubieran sido absorbidos también, entonces estarían ahí. Los escombros, el cuerno, inclusive el agua y ella terminaron en ese bosque.

De manera involuntaria un suspiro aliviado se escapó de sus labios, al menos tenía la certeza de que ellos se quedaron en un lugar seguro.

¿Qué iba a hacer ahora

Aún recordaba aquella vez en la que junto con Uchiha Obito comenzaron a buscar entre dimensiones a Sasuke. La cantidad de Chakra que tuvo que utilizar para que pudieran mantener los portales abiertos aunque sea por diez segundos.

¿Qué iba a pasar ahora? ¿La buscarían?

Por más que ella haya mejorado como ninja durante todos estos años, viajar entre dimensiones era algo totalmente imposible para ella.

¿Tendría que esperarlos? ¿Y si no encontraban la dimensión dónde estaba en ese momento?

—¡AY, ¿POR QUÉ ME PASA ESTO A MÍ?! - La kunoichi gritó con desesperación al tiempo en que jalaba sus cabellos rosados.

Tenía que volver pronto, tenía un montón de cosas por hacer, ir a la arena un par de semanas, regresar para monitorear la construcción del hospital infantil, y comenzar su camino como maestra del equipo 1.

¿Pero que podía hacer ella para volver?

Revisó su atuendo, afortunadamente los compartimentos de su cintura y pierna tenían sus armas ninja, y un par de pergaminos.

Utilizo la técnica marca Tenten, y dentro de uno de sus pergaminos guardo aquel cuerno que la trajo a ese lugar, para bien o para mal, no podía despegarse de esa cosa, con algo de suerte, podía ser su boleto de vuelta a Konoha.

Entonces algo hizo "click" en su cabeza. ¿Y si no estaba en otra dimensión?

Recordaba bien que las dimensiones de Kaguya eran raras, con cielos de colores extraños, arenas rojas, mares de ácido o ríos de lava.

Aquí el cielo era tan azul como en Konoha, no había ácido, lava, arena, metal o algún material corrosivo que pudiera dañarla.

Tal vez estaba en alguna parte del mundo shinobi, cerca de alguna nación, eso sería más fácil, con un viaje de unos cuantos días estaría de vuelta en su aldea.

Un poco más animada con esa idea comenzó a caminar por ese bosque, para buscar una salida que pudiera llevarla a un lado más turístico.

Por más que quisiera ocupar su chakra para ir saltando de árbol en árbol, no podía hacerlo, eran pinos, carecían de ramas donde ella pudiera sostenerse.

Por un momento pensó que podría estar cerca de Suna, ya que parecía que ahí no estaba nevando, sin embargo lo descarto, los bosques cercanos a esa aldea contaban con otro tipo de árboles, y estaban mucho más secos.

Aún así quiso ser optimista, fue entonces cuando camino y camino, manteniéndose alerta, bien podía haber ninjas renegados u oficiales de otras aldeas que la vieran como invasor, o bien, monstruos similares a Zetsu, o demonios cómo lo fue Kaguya.

Por si las dudas, en sus manos llevaba bien sostenidos un par de kunais, estaba un tanto agradecida de que Sasuke le diera su capa de esa forma tendría ocultas sus armas.

No supo cuánto tiempo estuvo caminando, pero sintió que fue un muy largo recorrido, ese bosque era enorme y avanzar con sigilo era más difícil aún.

Cuando su estómago gruño por novena vez, se sintió como un alma sola y derrotada. Si tan solo hubiera desayunado...

Debió prestarle más atención a su madre, desayunar en casa siempre sería mejor que desayunar en la cafetería del hospital. Maldita la hora en la que se fue en a un entrenamiento con las tres bestias de Konoha con el estómago vacío.

Estaba segura de que no camino mucho tiempo, tal vez camino como cuarenta minutos hasta que comenzó a ver el final de aquel lugar verde.

Fuertes ruidos comenzaron a llegar a sus oídos, cada vez se puso más a la defensiva y comenzó a moverse con más cautela, trataba de esconderse entre los pinos al mismo tiempo en que avanzaba más y más hacia la luz que su mirada podía divisar.

Entonces, llegó al último pino que la separaba de la realidad, escondiéndose levemente tras de él, fue capaz de ver lo que había en el lugar donde se encontraba.

Le fue imposible no abrir la boca ante la sorpresa.

Todo a su alrededor era algo complemente nuevo para ella. Luces de colores por todos lados, grandes edificios, muchísimos más grandes de los que había visto en su vida.

Desde las personas hasta la infraestructura, todo era tan irreal.

Solo estaba segura de algo, y eso era que ella ya no se encontraba en su dimensión.

—¡¿DÓNDE CARAJOS ESTOY?!


—¡¿Y entonces que vamos a hacer ahora, dattebayo?! - El grito de Naruto resonó por absolutamente toda la torre Hokage. —¡No tenemos la menor idea de dónde está Sakura-chan! ¡Ella desapareció hace cuatro días y nada ni nadie ha hecho nada al respecto!

Las bolsas moradas debajo de los ojos de Kakashi solo daban a entender lo cansado que se encontraba.

—No es como si tú y yo pudiésemos hacer algo. - Explicó con voz aparentemente calmada.

Era lógico que no tenía ganas de estar sentado detrás de ese escritorio sin hacer nada con respecto a su única alumna. Estaba preocupado por ella como nunca antes lo había estado, no sabía en donde se encontraba, si estaba bien, sana y salva, si alguien le estaba haciendo daño o se había metido en problemas.

Pero ¿qué podía hacer él?

—He mandado ninjas de rastreo por todas las naciones para que la busquen, inclusive Pakkun junto con su equipo están rastreando a Sakura. - El peli plata suspiro. —Sin embargo tanto Pakkun cómo los Inuzuka solo han llegado a la misma conclusión, el rastro de Sakura desapareció en el Valle del Fin, lo que nos lleva a la conclusión de que ella fue transportada a otra dimensión.

—¡¿Y cómo puede estar tan tranquilo diciendo algo así, dattebayo?! ¡Sakura-chan puede estar en peligro! ¡La puede estar pasando muy mal!

—¡¿Crees que no lo sé?! - Sin poder evitarlo su timbre de voz se alteró ligeramente. —Día y noche e estado pensando en como se encuentra, si está bien, si no se ha encontrado con enemigos, si ya comió, si está durmiendo bien, si no le pasó algo grave. - Suspiro. —Trato de mantener calmados a sus padres pero no hay mucho que pueda hacer para calmar sus nervios por el simple hecho de que no sé dónde está su hija. ¿crees qué tengo cara para verlos día a día y decirles que sigo sin encontrar a Sakura?

—Sensei... - Musitó con un deje de tristeza y desespero el rubio. —Tengo miedo de que le pase algo.

—Sakura es una mujer fuerte. - La voz de Sasuke sonó por la habitación. —Ella estará bien, sea cual sea la dimensión dónde se encuentre, sabrá arreglárselas por sí sola.

El Uchiha hizo acto de presencia, igual que Naruto y Kakashi, tenía unas ojeras bajo sus ojos, y ni siquiera le importaba no tener algo que lo cubriera contra el frío, no tenía humor no ganas de pensar en algo o alguien que no fuera su compañera de equipo.

—He revisado todas las dimensiones a las que Kaguya abrió. - Explicó. —En ninguna de ellas está Sakura. No son muy grandes, hice clones que la buscarán aunque sabía que era en vano, su firma de chakra no estaba por ningún lado.

Kakashi suspiro antes de entrelazar sus manos sobre su mentón, esas no eran las noticias que esperaba.

—Busque por todos lados, dattebayo. - Añadió Naruto. —Me la he pasado en el Valle del Fin día y noche, pero no encuentro nada. No hay más cuernos, ni pistas, ni nada sólido que nos lleve a donde ella. Ni siquiera hay rastro de que el clan Otsutsuki este involucrado en esto.

—¿Tal vez en la Luna...? - Sopeso el peliplateado.

—Toneri hubiera encontrado la forma de mandarla de regreso. - Rebatio el Uzumaki.

—En ese caso, Sasuke es nuestra única opción para poder llegar hasta ella. - Apunto el Hokage. —Sé que para viajar entre dimensiones es necesario ocupar una gran cantidad de chakra, así que no te sobre esfuerces.

—¡Yo le daré todo el chakra que necesite, dattebayo! ¡Pero vamos a encontrar a Sakura-chan!

—Bien, Uchiha Sasuke y Uzumaki Naruto, a partir de este momento su misión será encontrar al miembro faltante del equipo 7.

—¡Sí!

Los ojos del Uchiha se posaron sobre la espesa nieve que caía detrás de la ventana, su entrecejo se frunció poco a poco a la vez en que apretaba fuertemente el puño de su mano. —Te encontraré, Sakura.


Bitácora día I

Tras un entrenamiento en el Valle del Fin encontramos un cuerno similar al que tenía Kaguya Otsutsuki.

Cuando Naruto y Sasuke (reencarnaciones de Indra y Ashura) lo tomaron a la vez, se formó un tornado que poco después abrió un portal el cuál me absorbió y mando a otra dimensión.

Este lugar es muy diferente a mi "mundo" tecnológicamente hablando, está mucho más avanzado.

Un ejemplo de ello es que en nuestra aldea recién comienza a surgir la idea de crear un "tren" como medio de transporte para facilitar la movilidad.

Aquí no solo hay un tren, parece que cada persona cuenta con un tren propio de tamaño reducido al que suelen llamar "automóvil" "vehículo" o "coche". La mayoría son pequeños y compactos donde bien podrían caber cuatro personas. Son de colores y modelos diferentes.

También existen "autobuses" que son como trenes que no siguen vías pero tienen paradas continuas, y a los trenes les llaman "metro" donde normalmente son subterraneos. ¡Transporte subterráneo! ¿por qué no se nos ocurrió antes?

Otro ejemplo bastante interesante, es que las casas de las personas están arriba de otras, edificios gigantes con múltiples hogares se expanden por el país, donde ahorran espacio pero alojan a miles de familias. Aunque claro está, aún hay casas propias.

Bitácora día II

El lugar en el que me encuentro se llama "Japón" el idioma que hablan aquí, el idioma es el mismo que yo hablo, leer y escribir es completamente igual que en mi mundo lo cual me ha ayudado en la movilidad y entendimiento de está dimensión.

La cultura y modales son muy iguales a las de Konoha. Por lo que he podido observar la comida es igual a la de la aldea, platos típicos desde un ramen con base de cerdo, hasta un oden.

Mientras que de dónde vengo nos dividimos en cinco naciones con aldea aledañas, aquí se dividen en cinco "continentes".

Cada continente cuenta con diversos "países". Por lo que veo, en cada país cuentan con un idioma y escritura diferente, aunque hay países que se agrupan para hablar la misma lengua hay países que cuentan con lengua propia.

Según el televisor que estaba en una tienda, hay un total de 193 países, lo cual me lleva a pensar que este mundo es totalmente grande.

Bitácora día III

He estado durmiendo en los techos de los edificios, me levanto antes del amanecer. Eso me ayuda a evaluar a las personas a mi alrededor.

Hay algo que me dejó impactada.

Nosotros contamos con chakra, esta es nuestra fuente de energía de todos los ninjas, lo podemos ocupar y moldear de diferentes formas. Las cosas básicas son canalizarlo en los pies para poder adherirnos a diferentes superficies, caminar sobre el agua o tener fuerza y velocidad en una batalla.

Dependiendo de la naturaleza de nuestro chakra podemos hacer diversos jutsus, como agua, fuego, viento o aire, si los conbinamos de diversas formas para crear kekkei genkai como hielo, metal o madera.

Pero aún así hay jutsus simples que la mayoría puede hacer, como sustitución o multiplicación.

En este lugar no existe nada de eso.

Pero si tienen un poder al que llaman "don" "quirk" o "singularidad".

Los Quirks o dones dentro de esta dimensión, son los superpoderes o habilidades que posee el 80% de la humanidad , estos se derivan desde algún elemento natural o de algún otro elemento artificial, así mismo también con rasgos de animales u otras especies.

Las singularidades pueden evolucionar o mejorar pero jamás mutar ni cambiar. Eso quiere decir que si por ejemplo, alguien es bueno manejando el fuego, toda su vida solo podrá utilizar "poderes de fuego".

Las personas aquí usan sus habilidades para tres cosas:

1. Los que no tienen habilidades fuertes o diestras, son personas que deciden tomar una vida normal como el 20% de la publicación restante.

Mientras los que tienen quirks lo suficientemente fuertes se dividen en dos.

1. Villanos: Quienes ocupan sus habilidades especiales para su propio fin y de esa forma poder cometer delitos como asesinatos, robos y asaltos. ( Lo que sería un ninja renegado en mi mundo.)

2. Héroes: Son aquellos que tienen el deber físico, ético y moral, para proteger a al resto de la población de los villanos, así mismo, ayudar en desastres masivos como incendios, terremotos o inundaciones. Los héroes ocupan sus singularidades para ayudar a los demás. ( podría asemejarse a lo que es un ninja en mi dimensión.)

Si comparamos los dos mundos, puedo decir que el "mundo ninja" cuenta con personas mucho más fuertes y habilidosas que en este mundo, sin embargo, en ambas dimensiones, existe la luz y la oscuridad, coexistiendo en la brecha gris que separa la una de la otra.

Bitácora día IV

Ya me cansé de comer píldoras de súper soldado.

Estás no satisfacen mi apetito, sin embargo me están ayudando a mantenerme fuerte y activa por el resto del día aunque tenga mi estómago vacío.

El tipo de cambio que se utiliza aquí se llama "yen".

Hace unas horas hubo unos lesionados por accidente vial cerca de la carretera donde está el bosque en el cuál aparecí la primera vez.

Utilizando mi chakra me encargue de curar a ambas familias, aunque la mayoría de las heridas eran pequeñas, las dos familias decidieron agradecerme dándome una cantidad de dinero considerable para subsistir.

Aparentemente gracias a la capa de Sasuke ( que cubre casi todo mi cuerpo ) ellos creyeron que yo era una vagabunda con habilidades especiales.

Más que sentirme indignada, me siento agradecida, ya que con esa cantidad de dinero pude comprar comida decente, muy rica y bastante sastifactoria.

Igualmente me pude dar una buena ducha, ya que rente la habitación de un "hotel" lo cual sería una posada en mi mundo. Aunque no cuenta con aguas termales, tenía un baño con agua caliente, y una cama muy cómoda.

Por si las dudas, guardo unos kunais bajo la almohada.

Bitácora día V

Según vi en el televisor que hay mi habitación, ser héroe es algo que toma su debido tiempo.

Al parecer los héroes se preparan forman en diversas escuelas, dependiendo de las singularidades de cada persona y que tan fuertes y preparados están, entran a una academia donde se preparan para trabajar como héroes.

Algo así como una academia ninja, sin embargo, mientras nosotros comenzamos como ninjas activos a los 12 años, aquí comienzan con su rol de héroe de manera formal de los 17 a los 18.

No pude evitar sentir cierto disgusto al enterarme que si ocupas quirk para algo bueno (como salvar a alguien herido) cuando no eres un héroe "profesional" ayudante de héroe" o un héroe "provisional" estás cometiendo un delito.

¡Salvar la vida de alguien si no estás registrado te vuelve un villano! ¡Vaya estupidez!

En fin. ¿quién soy yo para decirles que sus leyes son ridículas?

Bitácora día VI

He desempeñado mi labor como médico en pequeños accidentes donde no hay villanos de por medio, accidentes pequeños pero significativos.

En primera, porque es mi deber como ninja médico, y en segunda, porque necesito dinero.

Jamás pensé decir esto, pero amo parecer un vagabundo, la mayoría de las personas que he curado hasta el momento, me dan cantidades generosas de dinero por mi finta.

Pobre Sasuke, si en algún momento llegó a volver, le voy a regalar una capa que no parezca que está hecha de un costal de papas.

Cómo dije hace un momento, me he limitado a atender accidentes menores para no llamar la atención, no quiero que me consideren un villano solo por mis habilidades curativas.

Aunque pensándolo bien, no tengo registro ni ficha de vida en este lugar, sería muy peligroso darme a notar.

Bitácora día VII

Siete días han pasado desde la última vez que estuve en casa, siente días desde que llegué a este lugar.

He hecho lo posible por mantener la cordura, sin embargo, todo esto es muy difícil.

Tenía muchas cosas que hacer. ¿quién se estará haciendo cargo del hospital? ¿qué habrá pasado con el equipo de apoyo en Suna? ¿quién habrá dado la conferencia de salud mental que tenía programada para hace dos días? ¿quién firmaría los permisos para mí hospital de niños? ¿qué será de mis estudiantes a los cuales conocería en el próximo mes? ¿les habrán puesto a un nuevo profesor?

¿Me estarán buscando?

¿Qué será de mis padres? ¿cómo estarán ellos? ¿su salud estará bien? ¿se encontrarán preocupados? ¿qué iba a pasar con mi mudanza al nuevo departamento?

Todo era tan complicado y difícil de procesar.

Tengo el cuerno en uno de mis pergaminos, pero no sé que hacer, como utilizarlo para volver a mi mundo, ni siquiera tengo claro si voy a volver y eso me duele, me duele demasiado.

Sus padres, Ino, Akagawa-san, Yamato-sensei, Sai, Kakashi-sensei, Naruto, Sasuke.

¿A caso ya no los voy a volver a ver?

Sakura termino de escribir su séptima bitácora desde que llegó. Sus ojos verdes miraron a través de la ventana que tenía su habitación.

Ella estaba en invierno, en un crudo y frío invierno que congelaba casi todas las naciones cuando llegaban los últimos días del año.

Le costaba trabajo creer que en ese lugar estuviese a nada de comenzar la primavera, ya que incluso, las noches eran calidad.

¿Incluso en eso se diferencian ambos mundos? ¿qué tan lejos estaba de casa?

La pelirrosa suspiro, ella seguía viendo la noche que era muy bien iluminada por tantas luces radiantes allá fuera, era una maravilla visual, pero le daba cierta tristeza y nostalgia.

Ella estaba acostumbrada a que cuando miraba por la ventana se encontraba con el rostro de los Hokages, incluso cuando Kakashi se convirtió el sexto, ella paso noches enteras viendo su cara en la piedra. Estaba bien orgullosa de su maestro.

Y ahora, ya no estaban aquellos rostros grabados en piedra, ya no podía ver la característica más grande de su hogar.

La kunoichi suspiró, pronto volvió a su cama y tomo su monedero, vio todo el dinero con el que contaba, era suficiente para pagar tres noches más de hotel, pero también necesitaba mudas de ropa.

Su traje de ninja no llama mucho la atención, es normal ver trajes de héroes que caían en lo ridículo, pero ella no se sentía cómoda con su ropa de otra dimensión, a parte, ella no es un héroe en ese mundo.

Hasta ahora había pasado de ser la directora de su propio hospital a ser un médico clandestino.

Se dejó caer en su cama, y perdió la cuenta de cuanto tiempo estuvo viendo el techo, pudo verlo durante mil horas, sin embargo, un fuerte estruendo la hizo saltar de su cama en un parpadeo.

Sus instintos ninja se dispararon en segundos, ya tenía sus armas en sus manos mientras revisaba de dónde provenía el ataque.

A través de su ventana pudo verlo todo con claridad, a solo unos cuantos metros de ella una gran estructura comenzó a a arden en llamas, los gritos de las personas eran tan fuertes que ella podía escucharlos con claridad.

Estaba segura de que ese no era un accidente convencional, se trataba de un villano, eso era evidente. Pero ella había llegado a un acuerdo consigo misma de no intervenir ni darse a notar.

Pero ella era médico, una ninja médico de la aldea de la Hoja, no podía quedarse oculta sentada en una cama sin hacer nada por la gente..

—Soy Sakura Haruno. - Musitó para si misma al tiempo en que sus ojos jades se iluminaban por las llamas a través de la ventana. —¡Shannaro!

—Por donde lo quieran ver, All Might solo será un problema para la UA. - El tono plano y aburrido de Shōta se hizo presente.

El pelinegro caminaba con las manos en sus bolsillos, reflejando en su rostro el más puro desinterés.

—¡Vamos! Eso será grandioso para la escuela, más alumnos querrán un lugar en la UA. - El director caminaba junto a su mejor profesor, tratando de animarlo. —La escuela será mucho más reconocida y...

—Tendremos la atención de todo el mundo sobre nosotros, lo cual no creo que sea conveniente.

—Aizawa-kun, debería de ser más optimista, yo estoy seguro de que todo estará bien, y que esté año será de los mejores años escolares que tendrá la UA.

El hombre de ojos resecos, se abstuvo de decir algo más ya que realmente no tenía nada bueno que decir, en cuestión de tiempo conocería a All Might, tendría que evaluarlo por él mismo.

Ambos caminaban con tranquilidad por la calle, aún tenían que ir a la UA para ver la organización de los grupos y comí sería el examen de admisión para los chicos de recomendación.

Todo iba relativamente bien entre el serio Aizawa y el feliz Nezu quien silbaba de manera tranquila, o así era, hasta qué una fuerte explosión movió el suelo donde estaban parados.

Segundos más tarde, los ojos resecos de del azabache se iluminaron por el fuego que se estaba expandiendo con rapidez por un gran edificio varias calles atrás.

Suspiró con parsimonia, antes de comenzar a caminar en dirección al lugar donde se había desatado el desastre.

—Esto será divertido ¿no lo crees, Aizawa-san?

—...

El lugar no estaba tan lejos de su ubicación, por lo qué no demoraron demasiado en llegar.

Sin embargo, para la sorpresa de los dos regentes de la UA, ya todo se encontraba contenido.

Los cuatro villanos que actuaron en conjunto estaban muy bien golpeados, atados espalda contra espalda.

Nezu juraría que ninguno tenía dientes lo cual le hizo lamentar no haber estado ahí para colaborar un poco con la situación.

La patrullas estaban llegando y los bomberos se encargaban de terminar de desalojar a la gente del edificio en llamas.

Aquellos ojos cansados del pelinegro evaluaban el lugar con cuidado, tratando de buscar al héroe que había colaborado para detener a esos sujetos.

—¡Woa! ¡Mira mamá, se está cerrando! - Una clara voz infantil llegó a sus oídos por lo que giró su cabeza hacia el lugar indicado.

Entonces fue cuando vio un cuadro algo extraño. Había niños, adultos y ancianos, todos estaban muy sanos y bastante a salvo, ninguno presentaba siquiera una herida o rasguño, y eso que sus ropas si contaban con varias manchas de sangre.

Y pronto vio gracias a quién.

Una mujer de cabellos rosados le estaba dando la espalda, pero al mismo tiempo tenía sus manos sobre la pierna de un menor.

Sus manos iluminadas de verde, se encargaban de cerrar aquella herida con rapidez, dejando su piel libre de cicatriz alguna, como si nunca antes hubiera sido lastimado.

—Ni siquiera Recovery Girl puede hacer algo así. - La voz del director Nezu sonó tras de él. —Nadie se ve cansado, no ocupa la misma energía de las personas para curarlos. - Razonó.

—¿Ves? Te dije que no iba a doler, Kota-kun. - La pelirrosa despeinó los cabellos del niño antes de ponerse de nuevo de pie. —Es necesario que desaloje a las personas de aquí. - La mujer se fue a dónde estaba el capitán de bomberos. —Este edificio se encuentra en muy mal estado, es mejor mantenernos lejos, poner una zona segura a unos cincuenta metros de distancia, ahí es a dónde hay que ubicar a los heridos que van saliendo del edificio.

—Es lo mismo que estaba pensando, la estructura está muy dañada debido al fuego.

—En ese caso, lo mejor será movernos. - Apuntó de manera cordial la pelirrosa.

Sin embargo, en cuestión de segundos, todo se vino a bajo, literalmente hablando. Una de las vigas que eran el soporto principal del edificio comenzó a flaquear al punto de no sostener su propio peso.

Aunque los bomberos y lo héroes notaron aquello gracias al fuerte chirrido antes de la caída, no fueron capaces de hacer absolutamente nada a causa del poco tiempo.

Y no es que pudieran hacer mucho ante la caída de un edificio.

Sin embargo, cierta mujer de cabellos rosados reaccionó a tiempo debido a sus entrenados sentidos.

Poniendo todo el chakra en las plantas de sus pies, salto, para poder llegar hasta esa viga que se derrumbó.

Levantó sus brazos y sobre sus manos tomo la estructura que estaba por caer, siendo de esa manera, el soporte de que necesitaba aquel edificio ya que literalmente estaba cargando alrededor de veinte pisos sobre sus manos.

—No sé ustedes. - Sakura estaba sonriendo levemente mientras trataba de mantener el peso nivelado, lo cual no era muy posible ya que la estructura media al rededor de dos metros veinte pero ella media un metro sesenta, con sus manos extendidas llegaba a un metro ochenta. —Pero creo que tienen que apurarse a desalojar, antes de que esto se termine de caer... ¡Shannarooo!

Los ojos negros como el carbón de Aizawa se abrieron con la más pura de las sorpresas al ver cómo ese pequeño cuerpo cargaba toneladas de peso sobre sus hombros.

Su mirada choco brevemente con aquellos ojos verdes llenos de determinación en no dejar caer esa estructura.

—Un minuto. - La profunda voz del azabache hizo que la pelirrosa levantara su cabeza lo suficiente para prestarle toda su atención.

—¿Eh?

—Dame en un minuto, te quitaré todo ese peso de encima.

Jade y Ónix colisionaron para dar comienzo a lo que sería el inicio de esta historia.