No era para nada fácil tratar de retomar la vida que había dejado atrás con una enfermedad mortal pisándole los talones, su mano temblorosa solo fue el inició de lo que venía, eso ya lo sabía pero al ver la dolorosa yaga que se había comenzado a formar en su cuello lo hizo aun más real y la imagen de Norman en sus últimos días lo perseguía.
Aterrorizándolo, por que sabía que ha no ser que encontrara la cura así terminaría. Pero toparse con la investigación de su padre le dio una frágil esperanza, pues aunque las arañas hubieran sido destruidas y según no se hubieran hecho pruebas en humanos Él Hombre Araña era la prueba viviente de que era posible poder salvar su vida.
Él único problema era encontrarlo, pensó mil ideas de como hacerlo, varias de ellas colocándose en un peligro mortal solo para salir de otro. Pero mientras pasaba toda la noche leyendo los antiguos reportes de todo lo que había hecho Norman para continuar con vida, se topo con el periódico del Daily Bugle, al leer el nombre de Peter Parker sobre la fotografía del arácnido fue la solución a su problema. Llamo inmediatamente a su amigo.
-Hola...-Murmuro Peter en tono adormilado.
-Peter, soy yo-Dijo Harry tranquilamente, pero hecho un desastre por dentro, no podía creer lo que estaba por confesarle a su amigo.
-Harry..¿Qué...? ¿Sabes que hora es?-Murmuro Peter exhalando un bostezo.
-Amm...¿Tarde? ¿Temprano...? No sé. No dormí en toda la noche. Necesito verte-Dijo él Osborn con evidente ansiedad en su voz.
-¿Estas bien?-Pregunto Peter en tono preocupado.
-En realidad no Peter...-Hizo una pausa para tomar aire -...Me estoy muriendo...pero creo que puedes ayudarme a salvar mi vida-Dijo Harry de forma directa y por el silencio que siguió supo que lo había impresionado y mucho -¿Peter..?-Pregunto al ver que él otro no hablaba.
-Voy inmediatamente para allá-Dijo Peter con una seriedad impropia de él.
-Esta bien, te espero en Oscorp-Dijo Harry y ambos colgaron.
Rápidamente les mando un aviso a los guardias de seguridad para que le permitieran el paso, por que de lo contrario nunca lo dejarían entrar. Él rubio se sintió sumamente ansioso al momento de esperar a que su amigo llegara, daba giros en su silla conteniendo las ganas de morderse las uñas, pero fue una gran sorpresa para él que Peter llegaran en menos de diez minutos.
-Woau...Eres todo un rayo-Comento Harry en broma tratando de apaciguar el pesado ambiente entre ellos. Peter no cambió su expresión seria y cortando la distancia entre ambos lo abrazo, enterrando el rostro en el cuello del rubio, Harry le devolvió el abrazo sintiéndolo temblar entre sus brazos.
-Dime que no es cierto...dime que no te estás muriendo...dime que es una cruel broma...-Pidió Peter casi en suplica. Esto le retorció el corazón al Osborn.
-Lo lamento Pete...como desearía que fuera así..-Respondió Harry y el agarre de Peter se afianzo, hasta casi el punto que le dolió.
-Dijiste que puedo ayudarte a salvar tu vida ¿Qué debo hacer?-Dijo él Parker separándose levemente para verlo a los ojos.
-Mira esto-Dijo Harry colocando una mano en el pecho del castaño para apartarse lentamente de él. Luego tomo asiento en la silla de su escritorio inclinándose hacia el frente para presionar un botón en la mesa de alta tecnología, lo cual hizo que se proyectará un viejo video frente a ellos.
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-Están viendo los primeros híbridos aracnohumanos del mundo-Explico Norman apoyado en su bastón, visiblemente deteriorado.
-La idea es extraer el veneno de sus glándulas y convertirlo en una cura, en un agente que cure células enfermas-Dijo Richard Parker seriamente.
-Y si logró curarme ¿Imaginen lo que haría con otras enfermedades como el Alzheimer, o incluso el cáncer-Dijo Norman.
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-Jamás llegaron a las pruebas en humanos-Explico Harry volviéndose para observar a su amigo -Catorce años de investigación y aun no hay nada concreto, excepto talvez esto-Dijo él rubio levantándose para tomar el periódico entre sus manos y tirarlo sobre la mesa -Él Hombre Araña-Dijo señalando la imagen.
-¿Qué tiene?-Cuestiono Peter confundido.
-Peter lo pico una de esas cosas y ¡Funcionó! No se como ni tampoco por que...pero puede hacer todo lo que hace una araña, incluyendo auto curarse. Necesito encontrarlo...necesito su sangre-Explico con una sonrisa tranquila.
-¿Necesitas su sangre...?-Murmuro Peter más impactado de lo que hubiera pensado, mientras tomaba asiento en uno de los muebles de la oficina.
-Me va a salvar la vida-Aclaro él Osborn.
-Talvez no Harry...talvez no sea así de simple. Viste lo que le paso a Curt Connors-Señalo Peter preocupado.
-Era débil. Yo si puedo Peter-Aseguro Harry con convicción.
-No creo que...puedas mandar una ambulancia y pedirle que done, la verdad no creo que le guste que le metan una jeringa-Murmuro Peter sin mostrarse muy seguro.
-Oh...es sensible...Qué bien, entonces quizás tu puedas decirle de una forma delicada y yo pueda ir a pedírsela en persona-Dijo Harry comenzando a angustiarse. Se supone que Peter estaba desesperado por ayudarlo y ahora dudaba.
-¿Qué?-Pregunto Peter confundido.
-Tú tomaste esta foto-Dijo Harry apuntando el periódico.
-¿Y que?-Cuestiono Peter restándole importancia.
-Lo conoces ¿Verdad?-Acuso Harry muy seguro de eso. No era estúpido.
-Harry...tome una foto desde muy lejos. Usé un lente largo así que no, no lo conozco-Explico Peter.
-Estuve pensando en lo que dijiste en el río-Contó Harry sacando el tema repentinamente.
-¿Sobre que?-Pregunto él castaño.
-Sobre que él le da esperanza a las personas. Anda, solo di que si...-Insistió Harry apoyándose en la superficie de la mesa.
Peter parecía profundamente abatido, sacudió varias veces la cabeza antes de suspirar mientras se levantaba de su asiento alborotándose el cabello de forma nerviosa mientras daba vueltas por la oficina indeciso, esto molesto al rubio. Se encontraba en ese horrible predicamento y su mejor amigo ¿Pretendía hacerse el desentendido? Lo esperaría de cualquiera pero no de él, nunca de Peter.
-¡No me des la espalda!-Le grito sujetándolo del brazo para darlo vuelta y encararlo, la profunda sorpresa en su rostro le encogió el corazón, era la primera vez que le gritaba de esa forma, pero es que estaba desesperado por vivir, como cualquier persona estaría en su lugar.
-Es que no...no quiero acabar como mi padre, Peter...-Murmuro apenas con un hilo de voz, su coraje se había ido dejándolo vulnerable. Envolvió un brazo por detrás del cuello de Peter abrazándose desesperadamente a él -Por favor...Peter por favor...por favor...por favor...-Suplico con la mejilla apoyada en su hombro.
Pronto sintió los brazos de Peter envolverlo con tanta delicadeza que lo derritió, como anhelaba poder sentirse siempre tan bien y protegido como se sentía ahora, entre los brazos de su amor platónico. Apoyo la cabeza contra su pecho, cerrando los ojos para escuchar el acompasado latido de su corazón, aferrando sus manos a la ropa del castaño entonces Peter se aparto suavemente de él.
Sujeto su barbilla con sus dedos levantándola lentamente, lo suficiente como para que sus miradas se encontraran, el profundo chocolate de sus ojos choco contra el claro azul de los suyos, casi sintió como si ese fuera un momento importante. Harry ni se había dado cuenta en que momento sus ojos se habían cristalizado, aquella imagen movió algo en Peter, las lágrimas lo hacían ver tan indefenso...ganas de protegerlo nacían en él.
Antes de que ambos lo planearan sus rostros se acercaban más y más, con cada milímetro de la barrera que rompían provocaba que Harry cerrara más lo ojos, hasta cerrarlos completamente esperando el suave toque de sus labios, pudo sentir su respiración chocar contra la suya pero para su sorpresa se aparto y planto un delicado beso en su frente.
-Voy a tratar...de encontrar al Hombre Araña-Prometió Peter acariciando su mejilla con el pulgar.
Harry tenía una mirada sorprendida, él castaño le dio una leve sonrisa tranquilizadora antes de terminar su toque y salir de la oficina. Él Osborn observo el suelo con si fuera lo más interesante del mundo, sentía su corazón martillar contra su pecho y sus mejillas calientes. Paso suavemente la lengua sobre sus labios saboreando el beso que no sucedió, pero que hubiera deseado que pasara.
Soltó un profundo suspiro y encogiéndose de hombros se volvió hacia su silla tomando la bufanda que había dejado olvidada, colocándosela alrededor del cuello para cubrir la herida de su garganta, lo ultimo que deseaba era llamar la atención o dar alguna pista de su actual estado, nadie a parte de los más cercanos a Norman Osborn sabían acerca de la enfermedad que ahora lo embargaba, solo ellos y ahora Peter.
Peter...el único otro gran problema en su vida. Siempre había preferido alejarse de todo aquello que le atrajera conflictos o intrincados pero su mejor amigo había sido la gran excepción a eso. Peter causaba tantas emociones confusas y a la vez tan intensas en él que no era capaz de ignorarlas.
Desde niño se había mostrado como el típico chico rico, popular, un gran estudiante y deportista, rodeado constantemente por mujeres hermosas y modelos famosas, nada más que una máscara para ocultar sus verdaderos sentimientos. Fueron más de una sola noche en la que él recuerdo de su amigo asalto su mente impidiéndole dormir, su amor secreto desde que tenía memoria.
Alejarse de él le había acarreado un inmenso dolor, especialmente por que creyó que jamás volvería a verlo, pero ahora que estaba de regreso en su vida cada vez que lo miraba su corazón no podía evitar acelerarse y las palmas de sus manos sudaban con nerviosismo, que bueno que siempre fue muy bueno fingiendo, disimulando perfectamente sus sonrojos y bochornos.
Y Peter no sabía nada, además de que dudaba mucho de que su amigo fuera lo suficientemente observador como para percatarse de sus sentimientos hacia él, pero prefería mil veces de que fuera así, no abría nada más doloroso que ver a su mejor amigo alejarse sin querer saber nada más de él solo por los sentimientos que no había podido controlar.
Ya había traspasado los límites una vez, pero ahora ya no eran unos niños y un pequeño ''lo siento'' no arreglaría las cosas que cambiaría su acto impulsivo. Resoplo pasando una mano sobre su rostro antes de salir de la oficina.
Eran muchas las cosas de las cuales debía preocuparse en ese momento, su vida pendiendo de un hilo donde solo él Hombre Araña podría salvarlo, sus insistentes sentimientos molestándolo a cada momento y los asuntos corporativos de los que tenía que encargarse en Oscorp. Necesitaba un descanso, lo que significaba una buena noche de sueño, o en su caso mañana.
Se subió al elevador indicándole ir a la planta baja y mientras descendía se llevo tentativamente una mano a sus labios, acariciándolos levemente con la yema de los dedos, aun los podía sentir cosquillear ante el recuerdo del fresco aliento de Peter. Pero la cabina se detuvo y la puerta del ascensor se abrió interrumpiendo su línea de pensamiento.
Sus ojos azules se abrieron con algo de sorpresa al ver a la hermosa rubia que ingresaba con la respiración agitada, al parecer demasiado distraída como para notar su presencia. Frunció ligeramente las cejas al percibirla familiar, entonces cayo en cuenta de que se trataba de la ex novia de Peter, de la cual le había hablado hacer algunos días.
Su amigo se había tomado la molestia de mostrarle una fotografía y sin duda era ella. Se sentía algo incomodo al tener tan cerca a alguien que había sido tan importante en la vida de Peter y si era sincero se sentía algo celoso. No solo era una chica hermosa, sino inteligente y encantadora según las palabras del propio castaño, además de que se trataba de una mujer, algo más al gusto de su amigo.
Frunció el ceño, un poco intimidado, pues era consciente de que Peter tenía intenciones de retomar su relación y aunque fuera egoísta prefería que no fuera así, quería a su amigo solo para él y si para eso debía alejar a la chica lo haría. Sacudió levemente la cabeza colocando la mejor sonrisa que pudo, dispuesto a utilizar su encanto Osborn.
-Gwen Stacy-Pronunció Harry con falsa impresión en su voz, apoyándose en el barandal de la cabina.
-¡Hay por Dios!-Exclamo Gwen exaltada llevando una mano a su corazón.
-Perdón-Se disculpo Harry sin haber tenido el propósito real de asustarla.
-No, descuida-Dijo Gwen restándole importancia, parecía algo distraída.
-Ehmm...Soy Harry-Se presento él Osborn, señalándose a si mismo.
-Si, lo sé-Asintió la Stacy con una sonrisa nerviosa.
-Soy viejo amigo de Peter-Informo Harry con una pequeña sonrisa.
-Si, se quien eres. Disculpa, es que ando corriendo-Se excuso la Stacy. Al parecer tenía la mente en otro lado, pero Harry solo necesitaba un momento.
-Yo lamento que no nos haya presentado, creí que habían terminado-Dijo él Osborn con una sonrisa algo maliciosa.
-Ahmm...si..si así...es...-Balbuceo Gwen algo incómoda por el comentario.
-Es complicado-Termino Harry asintiendo.
-Complicado, si-Dijo Gwen de acuerdo.
-Es Peter, con él las cosas siempre son complicadas-Aseguro Harry con una sonrisa tranquila ante el recuerdo de su amigo.
-Si, si, tienes razón-Estuvo de acuerdo la Stacy.
-Por eso me necesita, para ayudarlo a tomar decisiones correctas...no ha alguien más ¿Me comprendes?-Dijo Harry seriamente, esperando estar dando su mensaje correctamente.
Él era Harry Osborn y no se dejaría intimidar por la vieja ex novia de su amigo, él había estado durante mucho más tiempo en la vida de Peter y aunque se distanciaron, ahora estaba de regreso y no necesitaba de un tercero que arruinara su relación. Gwen se mostró sorprendía y algo confundida, pero antes de que pudiera decir algo más la puerta del ascensor se abrió.
-Eh...Mucho gustó Harry-Dijo la Stacy saliendo rápidamente.
-Si...si fue un placer, Gwen-Murmuro Harry viéndola irse.
A lo que no pudo evitar entrecerrar los ojos mientras observaba su figura hacerse más pequeña hasta desaparecer de vista. Puede que en cualquier otras circunstancias Gwen podría llegar a ser de su agrado pero contrario a todo eso la Stacy no le simpatizaba en lo más mínimo, no le gustaba tenerla cerca y mucho más importante no la quería cerca de su Peter.