~Referencias~_ (t/c): Tu color._(t/c/f): Tu color favorito.


¡Ya me voy! - Dijo en voz alta mientras abría la puerta principal-.

¡Suerte mi niño! - Le respondió su madre de igual manera desde el comedor -.

Cerró la puerta y comenzó a caminar por la vereda yendo directo a su nueva escuela.

Mientras iba avanzando a un ritmo lento, los sonidos de la calle inundaban sus oídos, logrando irritarlo, debido a que tenía un ligero pero incesante dolor de cabeza, quizá debió tomar una pastilla antes de salir. Pero por suerte tenía una solución, de uno de los bolsillos exteriores de su mochila sacó sus auriculares de color (t/c/f), los enchufó en su celular y puso la lista de reproducción en aleatorio, donde 'Line without a hook' de Ricky Montgomery comenzó a sonar a través del aparato, haciendo que su alrededor tenga un ambiente completamente diferente y tranquilo.

Luego de caminar varias cuadras, divisó la escuela a pocos metros de donde estaba, detuvo su caminar una vez que llegó a su destino y sin más remedio, el peli-(t/c) tuvo que apagar la música y guardar los auriculares en su lugar, de forma involuntaria suelta un suspiro, se quedó parado a la vez que le daba una mirada rápida a la entrada de la institución, donde notó rápidamente que el lugar era completamente gris por fuera, desde el suelo de cemento hasta las letras metálicas que decían 'FHS', y decidió entrar al nuevo infierno sin retorno que lo esperaba.

Comenzó a caminar por los pasillos repletos de estudiantes de distintas edades, los cuales iban de acá para allá, hablando, riendo, jugando, guardando o sacando cosas de sus casilleros. Casi sin ser consciente de aquel caos exterior, el oji-(t/c) observa de manera tranquilamente el papel impreso que indicaba su casillero, clase y horarios, deja algunos libros en su nuevo casillero, colocándole también una contraseña que debía recordar y decide ir a su clase '3ro B' antes de que suene la campana de la primera clase. Ingresó al curso sin mirar a nadie con su típica cara neutral, que más bien expresaba las pocas ganas que tenía de vivir, y deja sus cosas en uno de los bancos vacíos del final, pudo notar que faltaban varios alumnos aún, se sentó y como no conocía a nadie, decidió sumergirse en un entretenido juego de su celular.

La diversión llegó a su fin una vez que los compañeros que faltaban iban entrando al curso junto con el profesor atrás, una vez que todos se sentaron en sus lugares, el docente no tardó en comenzar a hablar.

Buenos días chicos, antes de comenzar con la clase, no se si se habían enterado de que tenemos un nuevo alumno en esta clase, por favor presentate, puedes hacerlo desde tu lugar - dijo el adulto pelinegro-.

La puta madre - Fue lo primero que pensó el adolescente pesimista-.

Ugh. - Soltó primeramente por lo bajo- Me llamo T/N, me acabo de mudar a esta ciudad y eso - Terminó sin dar tanto detalle y sin mirar a nadie, aunque sentía una mirada fija en él pero no sabía si era otra de sus paranoias, realmente odiaba las presentaciones, no negaba también que había entrado en pánico internamente-.

Entonces después de finalizar esa pobre presentación, se sentó nuevamente en su lugar y el profesor comenzó la clase, la cual claramente a nadie le interesa. Por más que el tiempo pasaba lentamente o así lo sentía el chico, la clase llegó a su fin dándole paso al recreo, la tan añorada libertad luego de estar tanto tiempo encerrado y sentado en el mismo lugar, mientras te torturan con explicaciones que dan sueño y tareas que de tan solo verlas, no te da ganas de hacerlas.

Una vez que sonó la campana, el de pelo (corto/largo/rapado/atado/etc) guardó su carpeta y cartuchera abajo de la mesa para evitar que se le pierdan o le roben las cosas, se quedó inmóvil en su lugar un momento meditando que hacer, ya que en primer lugar, no conoce la escuela y segundo, aparentemente no conoce a nadie o por lo menos no reconoció a alguien tipo como un viejo amigo, que por casualidades de la vida podría estar justo en el mismo colegio.

Sus pensamientos fueron interrumpidos al escuchar pasos que se aproximaban claramente hacia él, ya que es prácticamente el único en el curso, elevó la mirada e inmediatamente visualizó a un alto pelirrojo de ojos ámbar, el cual le parecía extrañamente conocido pero no recordaba de donde, su memoria decidió marchar justo en un momento inoportuno. Cuando el alto quedó frente a frente con el más bajo en altura, lo observó en silencio con detenimiento, mientras que nuestro protagonista lo miraba algo extrañado esperando una explicación a las acciones del contrario.

Si eras tú como pensé, T/N - Habló el pecoso finalmente a la vez que esbozó una leve sonrisa de lado-.

Ehh, ¿Te conozco? - Cuestionó algo confundido y nervioso-.

Olvidaba que tenías mala memoria - Dijo en un tono burlón- Soy Aiden, mejor conocido como Fox - Se cruzó de brazos aún con la mirada puesta en el otro chico expectante a que lo recordara rápidamente-.

Una vez que procesó el nombre del otro, inmediatamente algo se aclaró en su cabeza, más específicamente en su memoria. Claro que conocía al pelirrojo, en la ciudad en la que vivía anteriormente había conocido obviamente a muchas personas, pero con quienes estableció una muy buena relación amistosa fue con un par de hermanos, el de ojos ámbar y la albina de mechón rosa, pero así como habían aparecido en su vida, también se fueron y pasó un largo tiempo desde que no los vio más, por ello le costó al peli-(t/c) recordarlo, pero ahora le parecía estúpido no haberlo hecho desde el principio.

¡Fox! - Exclamó con algo de alegría- Perdón por no reconocerte al toque, sabés que pasó mucho tiempo - Se excusa el oji-(t/c) mientras pone una mano en su nuca en señal de nerviosismo-.

Lo sé enano, no tienes que disculparte - Respondió feliz el de pecas- Vamos, ¿Qué haces aún en el aula?

Ah si, es que no conozco la escuela y seguro que me perdía si mínimo intentaba llegar a la cafetería - Dijo obvio dejando en claro que no había hecho el recorrido para conocer todas las instalaciones del lugar-.

Que raro, supuestamente debían darte un recorrido - Soltó el más alto extrañado por la situación-.

Seh, pero bueno, se mi guía que tengo hambre - Dijo con más confianza tirando del brazo del contrario, el cual no pudo evitar reír y concordar con lo que dijo el otro-.

Así que...¿Qué hay de nuevo? - Se atrevió a preguntar el más bajo mientras le daba una mordida al sanguche de miga que se compró, no suele comenzar las conversaciones, pero le intrigaba saber que había pasado con su amigo durante el tiempo que no se vieron-.

No mucho, ya sabes, no cambié demasiado - Dijo el pelirrojo mientras comía una cucharada de su pudin-.

Claro debí saberlo, estamos hablando de vos - Rió un poco- ¿Y Meg como anda?

Bien, igual de gruñona que siempre o quizás un poco más - Burlón como siempre, nunca desperdicia la oportunidad de burlarse de su hermana, eso pasó por la mente del peli-(t/c)-.

¡Uh, me olvidé! - Exclamó el de ojos ámbar levantándose de la silla azul-.

¿Qué pasó capo? - Le preguntó en lo que se terminaba el sanguche y le daba un sorbo a su jugo de (sabor favorito)-.

Me olvidé de que iba a mostrarle la escuela a un amigo, él también entró hace poco y todavía se pierde - Le explicó el pelirrojo a su amigo- ¿Quieres venir conmigo?

Dale, total no pierdo nada, además de que me vendría bien ese recorrido - Respondió restándole importancia, a su vez que le daba curiosidad saber quién era ese amigo el cual Fox había mencionado-.

Ambos se levantaron, tiraron a la basura los restos de lo que comieron, para claramente no dejar la mesa sucia y salieron de la cafetería yendo por los pasillos vacíos directo para el amplio patio del colegio.


Y fin del capítulo 2Perdón por tardar en actualizar. (Ahre a quien le decía, si nadie lee esto xd)No hay mucho para decir por acá, así que nos leemos en la próxima =D.