Fic

La Boda de mi mejor Amiga

Por Mayra Exitosa

Capitulo DOS

Familia disfuncional

La tarde que finalizaba ya sus labores, no había visto a Paty desde que se fue por la tarde, sin embargo, meditaba en cómo se habían dado las circunstancias, Stear y ella eran novios y cuando se lo presentó a Paty la felicitaba, era un chico guapo para ella, sus reacciones a Candy le dieron gracia al comienzo, más después ella los evitaba a ambos, no se lo decía, pero Candy sentía que algo no iba bien, los regalos de Stear eran muy llamativos, unas flores que al recibirlas y mover la tarjeta, fue Paty quien lo hacía al ser ella quien lo recibía y lo llevaba hasta entregárselo, pero al tomar la tarjeta sin haberla siquiera leído, su valiosa amiga Paty recibía una explosión de confeti. Exactamente frente a ella.

- Lo siento Candy, recibí esto y te iba a llevar la tarjeta. Candy se reía y abrazaba a Paty, estaba llena de confeti, se veía tan feliz en su rostro tan serio y con los lentes colmada de confeti por todos lados.

- Gracias Paty, es que el ramo fue para las dos, y a ti te toco la sorpresa. Por algo bueno será-

-¿Tú crees, Candy?

- ¡Si!

Ellas vivían juntas, Paty no tenía suerte en el amor, un novio la había dejado plantada el día que ambos pensaban en casarse, luego rehízo su vida y tenía un gran amigo que apreciaba mucho, pero que no se desidia a decirle nada, ella se le declaraba y él avergonzado decía que no podía porque luego sus hijos sabrían que su madre era la que se le había declarado por ser él tan cobarde.

Cuando Candy había llegado, no tuvo relación alguna, se fue a un bar con unas compañeras del hospital y ahí conoció a Stear, cuando se presentó una pelea y lo lastimaron, fue que ella se metió y lo ayudó a levantarse, estaba ebrio y se estaban aprovechando de él, luego de eso sus amigos cambiaron, ella fue frecuentada por él y no bebía licor, había tenido problemas con su padre por un problema familiar, se separaron en malos términos, luego él trabajo en la escuela de aviación y mostraba los motores y daba clases a los jóvenes futuros pilotos, pero cada noche buscaba a su enfermera que ya lo apreciaba aun ebrio y lo cuidaba.

Fue fácil querer a Stear y ser su novia con todos sus detalles, al ser un excelente mecánico e ingenioso para hacer trucos únicos para ella, era algo que los unía y los mantenía como un noviazgo amigable. Candy no quería reiniciar su vida con novio, pero Stear había insistido tanto que las cosas se fueron dando. Paty siempre que lo veía se iba, más Candy notaba algo que su amiga tenía y era la mala suerte que todos pasamos en ocasiones, ella comenzó a ser atraída por Stear y él solo la veía como una buena amiga, puesto que conocía a Candy la quería a ella, más no avanzaban a otra fase del noviazgo, Candy se había vuelto más precavida después de su única vez con una relación inesperada, por lo que, ya no fue lo mismo. Stear pensaba que solo casándose se podían entregar luego de saber que ella tenía temores por su relación de noviazgo anterior.

Muchas ocasiones cenaron en el departamento con Paty y Anthony, quien era un niño muy serio y aplicado, a sus dos años, no mostraba interés por las cosas mecánicas que le mostraba Stear, pero si por las cosas creativas que le daba Paty.

- Anthony toma tu cena para irte a bañar. Paty siempre buscaba el pretexto para alejarse de Candy y Stear, y llevarse al pequeño para no hacer mal tercio, pero el pequeño solo quería a su madre, desde que nació fue muy apegado a ella,

- No, ¡mami baña!

- No te preocupes Paty, yo lo haré. Acompaña a Stear a ver un programa. ¿Quieres?

Anthony era un niño muy bueno, comía bien y era demasiado tranquilo, no poseía lo que otros niños que eran mucho más efusivos y reactivos, según notaba en la guardería. Stear desde que lo conocía le aseguraba que él le daría su apellido, pero Candy se negaba rotundamente, porque ella deseaba que continuara solo con el suyo. Era su hijo y tenía que crecer con ella, que llegara a ser un gran hombre y salir adelante.

Paty se ponía muy nerviosa con Stear, él siempre bromeaba mucho con ella por ser la amiga de su novia, a quien tenía alta estima. Así él le decía que serían grandes amigos y para Paty eso debía estar bien, y no sentir lo que sentía por él.

Ya al año de novios, Stear consideraba que debía proponerle matrimonio y avanzar, así esa noche llegaba después de declarársele pasando con la avioneta y dibujando en el cielo su propuesta tan original.

Anthony se quedaba con Paty mientras ella salía a cenar con Stear, ahí hablaban de la familia de ambos resultando vivir en Chicago, que de casarse se casarían allá. Para luego vivir de nuevo en Pennsylvania, donde ambos habían hecho su vida.

-Si Candy, me independice de mi familia y creo que si he de casarme debo hacer las cosas bien, ¿Y tu familia?

- Se divorciaron y somos una familia disfuncional. Mi padre se casó de nuevo y tienen un hijo con su mujer, mi mamá se caso con John y tiene a las gemelas y yo me vine a esta ciudad a comenzar de nuevo, sabes que soy madre soltera, pero no quiero que mi hijo lleve el apellido de nadie, es mi responsabilidad y él me recuerda que debo pensar en él antes que en mí.

- Candy si llegáramos a tener hijos, quiero que se lleven como hermanos, puedo registrarlo y así se apellidarían igual.

- Lo sé Stear, pero si las cosas no marchan bien, luego mi hijo sería un problema de con quien debe quedarse, comprende mi familia es divorciada y prefiero que mi hijo no cargue con mis errores.

- A nosotros eso no nos pasara, en mi familia son muy tradicionales, cuando contraemos matrimonio, el divorcio no es una opción. Además, Paty siempre te ayuda ¿se iría a vivir con nosotros?

- No, ella es independiente, es la dueña del lugar donde pago renta, y a mi hijo lo cuidan en la guardería, solo hoy lo deje dormido y Paty no tenía salida, así que se quedó a cuidarlo. Pero procuro no molestarla, es una mujer muy linda, amable y no creo que desee que vivamos cerca.

- Bien viajare este fin de semana a ver a mis padres ¿quieres ir?

- Todavía no hemos acordado en casarnos, Stear ¿no se te hace demasiado pronto? Mira…

- ¡Perdóname Candy!

En esos instantes se arrodillaba y frente a todos los comensales sacaba la cajita del anillo y todos aplaudían antes de que ella pudiera seguir hablando con él, así le colocaba el anillo con sonrisas tímidas entre ambos.

Continuará…


Gracias por continuar leyendo, comentando y solicitando está y otras historias, si fueran solo escribirse,

se harían más rápido, pero se hace lo que se puede. Gracias por seguir aquí

Continuamos con más Historias de Albert y Candy

Un abrazo a la Distancia

Mayra Exitosa