Capitulo 2

-¿Cómo que mi tía no está?-A solo unos minutos de estar instaladas en sus habitaciones, la ama de llaves se presentó ante Ayame con un mensaje para darle

-Lo lamento señorita Wolker pero su tía tuvo que salir de emergencia dejando esta carta para usted-

Ayame cogió la carta de manos de la mujer, acercándose a la ventana le dio lectura en silencio

Querida Ayame no sabes cuánto lamento no estar para recibirte como se había planeado, pero asuntos inesperados demandan mi presencia lejos del castillo, no sabes lo apenada que estoy contigo y con tu amiguita, sin embargo, he dejado instrucciones precisas para que estén cómodas y seguras hasta mi regreso.

Estaré de vuelta para la última semana del festival si nuestro señor así lo quiere, cuenta con mi estimada ama de llaves para todo lo que requieran, ella con gusto les facilitara cualquier cosa que necesiten. Espero tu visita sea lo más agradable posible y no olvides hacer un tiempo para saludar a la reina

Me despido, esperando pase pronto estas semanas para poder verte

Ayame trono la boca en total desagrado, primero, aunque su tía había dispuesto de una servidumbre y una escolta, segura estaba de que Rin no aceptaría de buena manera la noticia, pues como ya se reiteró, el trato era ellas y la hermana de la reina cualquier cambio no sería bien visto por la familia de la chica. Segundo, a pesar de ser pariente de la propia reina Ayame no tenía una buena relación con esta por culpa de malos entendidos cuando ambas eran muy jóvenes y tercero y tal vez el más importante quería pasar tiempo con su prometido a solas, en fin, tenía que calmarse y pensar su plan a seguir.

Ayame se dirigió a la ama de llaves-Dejo alguna otra indicación mi tía-

-No señorita-

-Bien, cual es el itinerario para el día de hoy-

-Después de que usted y la señorita estén instaladas, hemos preparado agua caliente para que tomen un relajante baño, posteriormente les ayudaremos a alistarse para el banquete de esta noche en el salón principal, aunque oficialmente el inicio del festival es en dos días el rey a dispuesto de ricas cenas y entretenimiento cada noche-

-Bien, entonces iré con mi amiga en lo que ustedes preparan las tinas con agua-

-Si señorita-

Ayame y Rin tenían habitaciones continuas y ambas estaban conectadas por una puerta que servía de unión. Del otro lado otro grupo de sirvientas ayudaban a descargar el equipaje de la señorita Rin

-¿Te gusta tu habitación Rin?-

Rin se giró para darle la bienvenida a su amiga-Sí, son más que adecuadas-

-Me da gusto saberlo, amm Rin tengo que decirte algo importante-Tomo de las manos a su amiga para juntas sentarse en la cama

-¿Qué sucede Ayame?-

-Veras, mi tía tuvo que ausentarse por unos días-Inmediatamente el rostro de Rin se desfiguro en sorpresa-Pero no te angusties, antes de irse dejo instrucciones claras para que las dos estemos cómodas y protegidas-

-Ayame, nada de esto es lo acordado-

-Si Rin, pero entiende, ni siquiera mi propia tía contaba con que esto fuera a suceder, ahora, si realmente estas incomoda con la situación, no veo otra alternativa más que regresarnos a casa sin ver el festival-Ayame estaba usando un método indirecto de convención

Rin agrando los ojos sorprendida, ir a casa, no definitivamente no deseaba eso en absoluto, esta era su primera salida y aunque las cosas habían cambiado no debía desperdiciar esta única oportunidad-Supongo que nada malo sucederá ¿Cierto?-

-Por supuesto que nada sucederá, mientras las dos estemos juntas todo estará bien-

…..

En la sala del trono, ocupando el asiento principal se encontraba rey Naraku, su padre el rey Onigumo había sido el responsable de unir las cuatro naciones en una sola, fueron épocas de guerra, pobreza y hambruna, pero gracias a su ingenio y ferocidad logro lo imposible, reconstruyendo la nación llegando así los días de paz y gloria. Su hijo en cambio simplemente había subido al trono por derecho de sangre, sus logros eran escasos sin importancia, lo único que respaldaba su posición era la gran lealtad que le tenían los cuatro duques de las cuatro regiones a su difunto padre. Un hecho muy lamentable ya que Naraku no veía esta lealtad como un obsequio, ante sus ojos nadie era más importante que él mismo, ni si quiera su propia reina valía tanto "Seres desechables" así los llamaba en su mente

-Mi rey, según el informe de la guardia, la mayoría de las familias nobles han arribado en el castillo, las habitaciones fueron asignadas y los sirvientes distribuidos según lo acordado, también me complace en informarle que tanto los duques del norte, del oeste y del sur han llegado con sus caballeros para el torneo de justas, se espera la llegada del duque de las tierras del sur hasta el día de mañana por la tarde-El consejero y mano derecha del rey, Byakuya, daba su informe del día

Frente al consejero estaba un grupo de 4 eruditos, su función era ofrecer sus conocimientos en arte, religión, política y economía a su majestad, su conocimiento era importante en la toma de decisiones, no obstante, era la voluntad del rey lo que se llevaba a cabo al final del día.

-Entendido, ¿Algo más que informar? -Pregunto Naraku mientras se sobaba el puente de la nariz fastidiado, a través de la ventana veía claramente la puesta del sol, lo que significaba que pronto daría inicio el banquete de esa noche y lo que más deseaba era salir de esa sala y divertirse

-No mi señor-

-Bien-Levantándose de su trono los hombres le hicieron una reverencia-Byakuya sígueme-El rey y el consejero salieron de la sala del trono, caminando por los pasillos continuaron su plática.

-¿Qué hay sobre el otro asunto "personal" que te encargue?-

Sabiendo que su plática no sería escuchada respondió-De las mujeres que arribaron al castillo, la mayoría viene acompañando a sus esposos, aunque la esposa del conde Bunza se caracteriza por ser muy generosa con los hombres que se le acercan cuando su marido cae borracho-

-¿Conde Buza hee? No es de mi agrado, dudo que su gusto en mujeres sea mejor ¿Quién más? –

-Nada que podamos decir "sea de calidad"-

-¿Enserio?-Naraku le miro directamente

Byakuya sabía que no era así pero buscarle diferentes mujeres a su rey para pasar la noche no era tarea fácil, pues de no elegir correctamente la dama podría causar muchos inconvenientes, normalmente se buscaba entre hijas de nobles de bajo perfil, damiselas avariciosas que cambiaban sus servicios por dulces recompensas, o en algunos casos esposas insatisfechas con sus maridos. Todas debían poseer belleza, encanto, y disposición en la cama, ninguna podía exigir o alegar violación pues con solo tronar los dedos Naraku podía eliminarlas junto a toda su familia, por tal motivo la dama no debía ser popular entre los círculos sociales o de una familia poderosa.

-También está aquí la sobrina de la reina, su nombre es Ayame pero dentro de unos meses contraerá nupcias con el jefe Koga dirigente de varias aldeas, no sería razonable meterse con un allegado de su esposa, aunq…..-No sabía si continuar

-¿Aunque qué?-

Suspiro-La dama llego en compañía de otra señorita, desconozco todo sobre ella solo sé que su nombre es Rin, pero si me permite ser honesto en este asunto no considero sensato entrometernos con personas que estén relacionados a la reina-

Naraku lo pensó un momento-Sera lo mejor tampoco me interesa nada relacionado con mi esposa, esta noche invita a la señora Yura a mis aposentos su visita siempre es agradable-

-Así será mi señor-Byakuya se quedó en el pasillo mirando los nombres escritos en su pergamino-Rin…-El mismo fue testigo del momento exacto en que entro al castillo, la muchacha despedía jovialidad e inocencia, su porte era educado y elegante sin duda se trataba de una jovencita educada, pero sería un hipócrita si no aceptaba lo mucho que le gusto su rostro-Dios si me estas escuchando no dejes que los ojos de mi rey la vean-Sea quien fuera la dama no le deseaba un destino tan mísero como el de muchas damiselas que sufrieron por ser el deseo del rey.

…..

-Sesshomaru espero que estés listo para esta noche-Miroku entro en la tienda de su señor vistiendo de gala

Sesshomaru a diferencia de su general estaba con las mismas ropas de la mañana afilando sus espadas-No tengo la menor idea de lo que estás hablando, y antes de que continúes la respuesta es no- De aquí hasta el día que diera inicio el torneo de justas, su único plan consistía en prepararse para dicho evento

-Oh por la santa inquisición! Sesshomaru en este momento hay un banquete en el salón principal lleno de mujeres, vino, mujeres, y más vino, que otro placer necesita un hombre para sentirse vivo-

No era la primera vez que su general le recitaba los goces de la carne, pero al igual que en todas aquellas ocasiones la respuesta seguía siendo-Paso en esta ocasión-Sin inmutarse continúo afilando su espada

Normalmente Miroku hubiera bufado y salido de la tienda sin agregar otra cosa, pero en esta ocasión tenía información muy valiosa-Entiendo, en fin, supongo que sin ti son más mis posibilidades de tener la compañía de una dama hermosa-Tomo uno de los extremos del lienzo que cubría la entrada a la tienda, antes de salir menciono- Hablando de eso cuando regrese al castillo escucho a unos guardias hablar sobre un par de señoritas procedentes de las tierras del norte que llegaron al atardecer, ellos dijeron que eran muy hermosas sobre todo una de ellas poseedora de unos ojos cafés almendrado los cuales despedían ternura y paz, espero poder encontrar a la dama dueña de esos ojos-La mano de Sesshomaru se detuvo a mitad de la hoja de su espada

-Descasa mi señor, este humilde siervo tuyo se despide-Salió de la tienda coronando en su rostro una sonrisa de ganador

-¡Maldito seas Miroku!- No tenía que ser un genio para saber quién le dijo de su encuentro con la dama Rin-Inuyasha espero que duermas bien esta noche, por que mañana durante el entrenamiento suplicaras descansar-Dejando sus armas a un lado, se fue al fondo de la tienda donde una jarra de agua fresca descansaba junto a una tinaja, sacando las ropas de su cuerpo se tiro el agua encima de él, no había tiempo que perder si se daba prisa estaría listo para antes de que el banquete fuera servido.

Mientras se lavaba el cabello se repetía a sí mismo la siguiente frase-No es por ella, es…es…. Simplemente no confió en Miroku-Pero por más veces que lo gritara a su mente, esta solo evocaba el recuerdo de unos ojos cafés que le miraron directamente solo a él.

….

-Rin ese vestido te sienta muy bien-

Las sirvientas habían escogido para Rin un vestido de gamuza azul claro con lazos de gamuza en azul celeste con orilla dorada en la falda y mangas que colgaban hasta arrastrar en el piso, este vestido había sido un regalo de uno de sus hermanos cuando visito las aldeas del valle a orillas del rio de las perlas, lugar conocido por la fabricación de hermosos telares e hilos para la fabricación de la ropa usada en la corte.

Rin acepto el cumplido gustoso de lucir especial en este que sería su primer banquete fuera de casa-Gracias Ayame-

Ayame había escogido para ella un vestido más simple en diseño pero de un singular color coral, el cual había resaltar el rojo fuego de su melena, las sirvientas solo necesitaron decorar su peinado con un par de rosas una roja y la otra blanca

-Vamos esta noche será maravillosa-

Las dos abandonaron las habitaciones siendo escoltadas por cuatro damas de compañía y dos soldados

….

El salón despedía color y diversión, por donde quiera que se caminara había juegos y risas, por ejemplo al centro de la pista las bailarinas de las tierras del sur representaban su famosa danza de la abundancia, rito principal durante las siembras de cada temporada de cosecha, por otro lado se habían montado puestos de juegos de destreza y habilidad muchos de ellos influenciados de las culturas orientes algo que los nobles consideraban estaba de moda en estos momentos, en otra parte del salón se escuchaban las canciones y los relatos más interesantes narrados por los juglares de cada región. Todo era diversión y jubilo.

Cerca del área de juegos estaba un grupo de caballeros bebiendo

-¿Entonces me aseguras que Sesshomaru pisara este salón antes de que el rey venga aquí?-Koga se decidía sobre si participar o no en la apuesta que proponía Miroku

Ginta escudero de Koga intervino-Eso es imposible, mira a tu alrededor el salón está lleno de personas, Sesshomaru aborrece las multitudes, es tonto apostar algo así-

-Entonces no tienes nasa que perder, ¿Qué dicen caballeros 3 monedas de plata?-

-Yo apuesto 3- -Yo otras 3- Yo también a puesto- Pronto el grupo entero de hombres acepto la apuesta de Miroku

-Yo apuesto 5 monedas de oro a que eso no sucederá-

Los hombres se hicieron a un costado, atrás de ellos venia engalanando la noche un pequeño grupo de nobles damas rodeando al caballero Hakudoshin.

Hakudoshin de la casa rosa blanca era reconocido por sus grandes habilidades con la lanza y espada pero sobre todo por tener como protector a la mismísima reina, era su hombre de más confianza.

-Hakudoshin es un desagradable placer verte de nuevo-Dio la bienvenida Miroku. Es bien sabido que Hakudoshin le es muy fiel a la reina de modo que no le importa pelear contra su propia familia, para el solo es válida la voluntad de su reina, era por este motivo que en más de una ocasión peleaba para más de un bando

-Lo mismo digo Miroku, escuche que el agorafobico (Persona que tienen miedo a lugares donde hay multitudes o donde le es difícil escapar) de tu amo pisara este salón antes de que sus majestades coronen la noche-

-No creo que los asuntos de mi amo sean de tu inconveniencia, pero si quieres saber es cierto, por eso es q he organizado esta pequeña apuesta, con gusto acepto tus cinco monedas de oro y dos más-

-Bien- los dos estrecharon las manos sellando el pacto. En sus miradas se llevaba acabo un duelo de orgullo digno de cualquier campo de batalla, de estar afuera y no en un salón la historia sería distinta

-OH POR LAS BARBAS DE SAN PEDRO!-Ginta quien miraba estupefacto la puerta, grito incrédulo lo que veían sus ojos

-Duque Sesshomaru Taisho, regente de las tierras del Oeste-Se anunció su nombre en la entrada del salón provocando la mirada curiosa de muchas personas, pues pocos o casi nadie había visto al duque en su vida, su reputación como demonio del oeste había sido motivo suficiente para evitarlo en los círculos sociales, además de que el propio duque evadía la compañía de la nobleza.

Sesshomaru camino hasta llegar donde estaba su general y otros hombres.

-Sesshomaru no pensé que vería tu rostro antes del torneo ¿Puedo preguntar el porqué del honor de tu presencia? -Hakudoshin lo intercepto

-Mis asuntos son privados, Miroku sígueme-

Los hombres se alejaron del resto caminando al fondo del salón, antes de partir Miroku le recordó a Hakudoshin de las cinco monedas que le debía

-Imbécil-Al no tener nada más que hacer Hakudoshin tomo a las damas y las llevo fuera del salón

…..

-Demás y Caballeros demos la bienvenida a sus majestades-En el momento en que el rey y la reina llegaron al salón, la concurencia guarda silencio total-Honor y gloria para el rey Naraku y para la reina Kagura-

-¡Honor y gloria! ¡Honor y gloria! -

Ambos monarcas caminaron hasta sus lugares aclamados por su pueblo, una vez sentados el rey tomo la palabra-Esta noche les damos la bienvenida a las cuatro regiones de nuestra nación, espero que este banquete sea de su agrado, procedan-

La noche avanzo en pláticas, juegos y magníficos manjares el ambiente era alegre, lastimosamente el rostro de la reina no manifestaba ninguna de esas emociones

-¿Por qué mi reina luce tan abatida?-Pregunto Naraku a su esposa

-Dudo que los asuntos de esta esposa sean de interés a su majestad-

-No lo son, pero recuerda que una imagen dice más que mil palabras y tu rostro da una mala impresión de mí-

-Mi rostro podría ser distinto, si mi esposo no se revolcara cada noche con una mujer distinta-

-Los celos no te quedan querida-

-¿Cuándo mencione la palabra celos? Es mi honor y dignidad lo que me importa-

Hubo un tiempo en que Kagura respetaba a su esposo a pesar de que su unión había sido un asunto político, pero después de haber dado a luz a la princesa Kanna la reina cayo en cama debido a fuertes hemorragias vaginales, después de un estudio minucioso se determinó que la causa de dicho sangrado había sido por una enfermedad que se transmite vía sexual, esto fue el motivo del distanciamiento de la reina, pero a Naraku le importo muy poco si su esposa le era afectuosa o no, más de una dama estaba dispuesta a ocupar su lugar en la cama del rey.

-Si solo es el honor y la dignidad lo que te importa, ten por seguro que nadie podrá quitártelos, el divorcio no es permitido por la iglesia-Dijo sin sentimiento. Si no fuera porque la opinión del clero es parte importante de la política, ya hubiera intentado separarse de su esposa

-Lastimosamente es así-La reina zanjo el tema disfrutando su comida

…..

Por otro lado lejos de la vista de las personas Sesshomaru tenía sujeto por el cuello a su general-Se puede saber quién te dijo que apostaras con mi nombre-

Nervioso respondió-Mi señor, tú conoces la pobreza de este humilde ciervo tuyo, es deber de sus señores ver que sus fieles vasallos vivan bien ¿Cierto?-

Sesshomaru aflojo el agarre de su mano-Es cierto, pero también es cierto que los sirvientes le deben todo a sus amos, incluida su vida y su muerte-

-Si…pero este siervo tuyo aún no está listo para entregarte su muerte, mi vida es más útil puesta a tu servicio-

No tenía caso reprenderlo Miroku podía ser un sínico, estafador, y mujeriego pero su lealtad no se cuestionaba, era sin duda un hombre en quien confiar

-Mi señor ya aclarado el tema de que mi vida te es muy útil, hay algo que pueda hacer por usted-

-No-Sesshomaru miraba por todo el salón buscando algo, o a alguien

-¿Entonces puedo preguntar que espera encontrar mi señor al haber venido aquí esta noche? Acaso tu también buscas a la dama de los ojos cafés-

Sesshomaru poso su mano en el hombro izquierdo de su general, aplicando un fuerte y letal apretón-Vuelve a provocarme con la dama de los ojos cafés y créeme cuando te digo que no podrás volver a servir a ninguna mujer nunca más ¿Entendiste? -

-Si... no volverá a suceder-Contesto con dificultad

-Bien-

Los hombres regresaron al centro del evento encontrando a Koga acompañado de su prometida, entre las personas que los resguardaban estaba la persona por quien había salido de su tienda, la pequeña dama estaba de pie en silencio con la mirada perdida en al piso y los dedos de las manos hechos un mar de nervios, era obvio que la pequeña no estaba acostumbrada a este tipo de eventos, lo cual hiso feliz a Sesshomaru, eso daba la posibilidad de que ella desconociera los rumores de la corte. Incluidos los de su persona.

-Buenas noches-Se acercó a saludar.

Rin estaba más hermosa en ese momento que la tarde en que la conoció, el color azul resaltaba su jovialidad e inexperiencia. Encantadora seria el cumplido adecuado.

El grupo se giró para dar la bienvenida al duque-Buenas noches Duque Sesshomaru, es un placer volverlo a ver-Rin le sonrió alegremente por ver de nuevo al caballero que la salvo

Desde su arribo al salón los nervios de la pequeña dama saltaban por todas las partes de su cuerpo, había intentado sonreír y saludar, pero había tanta gente que el ambiente era sofocante, daba gracias por estar con personas con la que había intercambiado saludos, o en el caso del duque incluso le había caído encima. El recuerdo la hizo que se avergonzara en seguida.

-¿Mi lady se encuentra usted bien? Su rostro está un poco rojo-Sesshomaru se preocupo de que la dama se sintiera indispuesta

-No mi señor, no es nada se lo aseguro-Los dos eran muy ingenuos de sus propias emociones, quien los culparía nunca en su vida habían experimentado situaciones como esas hasta ahora.

-De ser así, me permitiría acompañarla-Sesshomaru

-Oh eso… -Estaba muy nerviosa para responder

Antes de que manifestara su respuesta un emisario de la corte se presentó ante ellos-Mi ladys la reina Kagura a sido puesta al tanto de que su sobrina la señorita la señorita Ayame está de visita, quiere invitarlas a su mesa

Al ser una invitación de la reina era imposible negarse-Desde luego, estaremos encantadas de compartir la velada en compañía de la reina, caballeros nos disculpan-Ayame tomo la delantera, siguiendo al emisario

Rin se dirigió a Sesshomaru-Lo lamento Duque, pero la reina nos está esperando-

-Entiendo, en otra ocasión será-

-Disfrute el resto del banquete, ah y no creo que lo he olvidado en cuanto tenga su chaqueta le visitare-Prometió Rin, pues si algo le había enseñado su familia era el valor de una promesa

-Estaré esperando su visita-Haciendo los saludos correspondientes la dama se fue.

-Bueno caballeros, la noche es joven y la comida es abundante, celebremos por estar reunidos una vez más-Koga levanto su copa brindando con júbilo-Oh vamos Sesshomaru si saliste de tu tienda por lo menos quédate un rato-

Bufo exhausto-Sírveme un tarro-

…..

En la mesa de la reina el emisario llego con el pedido de la reina

-Su majestad, vienen conmigo la hija de su hermano y la amiga de esta-El hombre se inclinó caminando lentamente hacia atrás, dejando a las damas frente a los monarcas

-Sus majestades-Las dos se inclinaron en una reverencia completa

Como era tradición el rey tomo la palabra-Levántense damas, cualquier amigo de la reina es más que bienven….-El rey se quedó a mitad de su discurso al ver de lleno el rostro de ambas mujeres. Sin duda alguna la pelirroja se trataba de la sobrina de su esposa, el día de su boda tuvo el placer de conocer al hermano de esta y sin dudas ese color de cabello no era fácil de olvidar, pero no era esta sino su acompañante la que eclipsaba la atención de su majestad.

La niña por que no podría darle otra palabra más acertada a su pequeña figura era simplemente exquisita, sus ojos denotaban inocencia, sus ropas pureza y el aura a su alrededor era de candidez, un ángel caído del cielo. Se preguntó si romper sus alas sería tan gratificante como sumergirla en su lujuria.

La reina no se percató de las miradas que daba su esposo a las invitadas, simplemente continuo-Mi hermana me puso al tanto de su visita, espero sus habitaciones sean de su agrado-

-Así es su majestad, estamos muy agradecidas con su generosidad-

Kagura miro a la otra chica que acompañaba a su sobrina-¿No tengo el gusto de conocer a tu amiga? ¿Quién es?-

-Su majestad tengo el gusto de presentarle a Rin, una amiga muy querida para mí-

-¿Rin? Acaso la dama no tiene familia, o es que su casa está en desgracia-Kagura toleraba Ayame como un favor a sus hermanos, pero los amigos de esta no estaban incluidos.

No era un error o falta de cortesía el no mencionar el apellido de Rin, había sido una forma de protección en muchos sentidos, pero en esta situación Ayame no podía omitir nada ante el rey y la reina

-Lo siento, no fue muy cortes de mi parte, si me permiten emendare mi error, la persona que me acompaña esta noche es Rin Hierro, Hija del Maestro de la fundición Totosai-

Kagura agrando los ojos realmente sorprendida, en los círculos sociales el nombre de la familia Hierro era sinónimo de mineros y alquimistas algo sin importancia, pero solo muy pocos sabían del poder que enceraba esta peculiar familia, hasta ahora ignoraba el hecho de que el maestro fundidor Totosai había tenido una hija, estaba segura que esto era un dato poco conocido. Debía andar con cuidado con la mocosa.

Lamentablemente el rey era uno de estos ignorantes del secreto que ocultaba esta misteriosa familia-Un placer tenerlas con nosotros, sean bienvenidas-

-Gracias sus majestades-Contestaron ambas, procedían a tomar asiento junto a la reina cuando una idea asalto la mente del rey.

-He sabido por mi reina que la casa Wolker es famosa, por el talento de su hija con el arpa ¿Es cierto eso?-

Ayame se sorprendió de que su majestad conociera algo de ella-Solo es un pasatiempo que disfruto su majestad-

-Me encantaría escucharla señorita, es más propongo que la señorita Rin la acompañe-

Rin hablo en tono pausado-Lo lamento su majestad, pero no se tocar ningún instrumento-

-¿Enserio? Una dama de cuna debe poseer algún talento, díganos señorita ¿Cual es el suyo?-

Rin se vio acorralada, sino complacía a sus majestades seria vista como una insolente-El canto, su majestad-

-Excelente! Byakuya-El consejero del rey salió de inmediato

-Si mi señor-

-Diles a los músicos que preparen un arpa, porque la señorita Ayame dará un concierto muy especial para nosotros-Sentencio de inmediato

Y así se hizo, sin las muchachas saberlo fueron acorraladas a exhibirse frente a todo el salón para deleite de sus majestades, pronto el salón se llenó de cuchicheos, solo había dos motivos por los cuales el rey hacía algo como esto, primero para humillación y deshonra de la persona elegida, y segundo porque está persona realmente poseía un talento unico y espectacular.

Normalmente siempre se trataba de la primera opción

El rey se levantó de su asiento para dar ub anuncio -Damas y caballeros, esta noche tengo el honor de presentarles a la sobrina de mi reina la señorita Ayame Wolker, una jovencita talentosa que nos honra con una de sus interpretaciones al arpa, acompañada por la su estimada amiga la señorita Rin, espero nos den un digno concierto-

La mirada de todos estaba únicamente puesta en el centro del escenario, donde Ayame y Rin aguardaban con el pulso a mil por hora

-Vamos Rin-Ayame sabia lo aterrada que estaba su amiga para poder cantar, pero de no hacerlo la vergüenza seria aún mayor.

Antes de sentarse en el banquillo junto al arpa, abrazo a Rin para susurrarleun secreto al oído-No tengas miedo, cierra los ojos y no pienses en nada, no lo abras hasta que las cuerdas dejen de tocar-

Ayame cogió aire una última vez, estirando los dedos comenzó a rozar las cuerdas en un sonido suave y fluido, sus años perfeccionando su arte no habían sido en balde, nadie después de esta noche pondría el nombre de la casa Wolker en un pedestal que no fuera otro de gracia y virtud.

Lo hacía por ella, por su casa, por su honor. Rin sabia estas cosas así que tampoco fallaría.

Rin cerro los ojos en cuanto la primera cuerda hizo eco en el salón, conocía la pieza pues muchas veces antes la había tocado en compañía de su amiga para su familia y amigos.

Su familia, si aquellos rudos y pesados barbaros como ella les decía de cariño eran su inspiración a la hora de cantar, nada la hacía más feliz que ver el rostro de su abuelo y padre sonriendo cada vez que ella les cantaba, fue este recuerdo la fuerza que necesito para poder abrir la boca y cantar en el momento exacto.

El salón nunca antes escucho melodioso sonido igual a la de esa noche, el arpa transmitía el sonido propio de las tierras nortes y su historia salvaje en las llanuras de los tres picos, tierra de valientes guerreros que viven por el honor y la gloria de dios, pero el canto, ese canto no tenía comparación con nada escuchado antes, su vibrato perfecto le ayudaba a extender las notas en el punto exacto donde lo necesitaba, el volumen y tono se adecuaba al compás de las cuerdas, llevándote a la historia contada en la letra de la canción.

Sesshomaru la miraba, hechizado por su magia-Pequeña torpe, eres una caja de sorpresas-Se dijo asi mismo disfrutando cada nota como si fuera la ultima, su voz melodiosa lo acompañaria esa noche en sus sueños

Mañana a su pesar no sería tan malo en los entrenamientos con el idiota de su general, realmente agradecía el hecho de que no se hubiera perdido este bello espectáculo

La reina sabia del talento de la hija de su hermano, y aunque le costara aceptarlo era virtuosa en su arte, desgraciadamente la muchacha Rin también lo era, y en esa improvisaba demostración de talento, era la chica de tierras lejanas la que eclipsaba el corazón de los presentes. Estúpida niña, pensó.

Sin embargo, ningún pensamiento fue más letal que los del propio rey, sin proponérselo Rin había penetrado en la mirada del monarca de las cuatro regiones.

Y eso, no era algo bueno...

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gracias nos vemos pronto